De hecho ya estamos comenzando ahora la grabación y el primer tema que vamos a ver, que ya por título de crecimiento económico y cambio estructural del capítulo 2, el autor que aparece en el libro es Rafael Miró, viene estructurado en cinco apartados. Hay una introducción, después veremos el principal rasgo del crecimiento económico español desde el decenio de 1960. A continuación hablaremos de transformaciones estructurales. En cuarto lugar hablaremos de los determinantes de crecimiento a largo plazo, haciendo hincapié tanto en el papel de la productividad del trabajo como la relación que hay entre productividad capital y progreso tecnológico. Y ya por último desde el capítulo 2 se cerraría con fluctuaciones típicas y desequilibrios básicos. Por lo que se refiere a la introducción, introducción y especie de pequeño resumen de esta parte, es decir que España consiguió un crecimiento muy rápido de su renta per cápita en la segunda mitad del siglo XX según se pudo ver ya en el capítulo 1 del programa que lo comentábamos la semana pasada. Especialmente en la primera etapa, hasta mediados del decenio de 1970, el desarrollo fue muy intenso aprovechando la ola expansiva de la economía mundial y posibilitó un apreciable acercamiento a los niveles de EBITDA logrados en los países más avanzados. Algo que antes, como vimos la semana pasada, parecía muy difícil debido a nuestro retraso en el proceso de industrialización. Comentar también que a finales del siglo, buena parte de la primera década del actual, se han caracterizado por un desarrollo muy vigoroso aunque con importantes desequilibrios que se han dejado ver en la profundidad y longitud de la recesión que también comentábamos el otro día al final, iniciada en 2008, y que puede darse por cerrada a partir del 2014-2015. Este medio siglo largo al que estamos haciendo referencia, el crecimiento económico ha ido acompañado de un cambio profundo en los modos de vida y el trabajo de los españoles, así como las formas en las que se organizan y se gobiernan y también poco a poco hay una cierta convergencia hacia lo que ocurre en los demás países desarrollados, sobre todo en la Unión Europea, por supuesto. El progreso económico y la modernización industrial son dos fenómenos que se relacionan, tienen gran alcance, tienen un carácter duradero y la continuidad de los mismos ha encontrado una garantía en la global apertura económica y política de España hacia el resto del mundo dejando atrás la etapa autárquica. En definitiva, el análisis específico del crecimiento económico en ese periodo está justificado, que lo vamos a ver en este capítulo a grandes rasgos, aunque hay bastante información estadística, aquí vamos a ver unas cuantas gráficas y tablas, pero tampoco vamos a hacer abusos de datos, sino que lo más importante y obviamente pues sí que podríamos hacer análisis comparativo con datos de economías del entorno. Lo que se va a tratar de hacer es identificar los principales rasgos y características generales del crecimiento económico español, comparándolo con el de los países del entorno y también poniendo enfoco en los principales determinantes, desequilibrios, sublíneas de transformación, etcétera. Decir que los conceptos básicos de este capítulo, los estáis viendo ahí en pantalla, son el crecimiento económico, los hechos estilizados de crecimiento, la productividad aparente del trabajo, la productividad total de los factores, el concepto de progreso tecnológico, el concepto de transformaciones estructurales y el concepto de producto interior bruto potencial. Todos estos conceptos en la parte final del libro también están convenientemente explicados. Por lo que se refiere a los principales rasgos del crecimiento económico español desde el decenio de 1960, para empezar vamos a ver esta gráfica, esta gráfica que se refiere al crecimiento relativo en España y la Unión Europea en el periodo 1961 a 2014. Los datos que aparecen son tasas anuales de variación del producto interior bruto per cápita y en color gris se ve la evolución de la Unión Europea a 15 y en color marrón se ve la evolución de España en esas tasas anuales de variación del PIB real per cápita. Varios comentarios merece este asunto de los principales rasgos del crecimiento económico español en esta etapa. El primer rasgo... de crecimiento de la economía española en el periodo que estamos comentando, tomando siempre como veis ahí en la gráfica ese indicador del PIB per cápita, es la alta tasa media anual alcanzada. Estamos hablando de un 2,6% que supera ampliamente, en algo más de medio punto porcentual, la media de los países comunitarios. Podemos afirmar por tanto que España ha superado el ritmo de avance de las naciones europeas más maduras en esa época. Un segundo rasgo, que también es importante, es que no obstante haber incrementado con más rapidez, como hemos comentado, la economía española en comparación con el entorno, el perfil temporal seguido por la renta per cápita española se asemeja mucho al de los países comunitarios, cosa que refleja perfectamente este gráfico cuando comparamos esa línea de color marrón con la línea de color gris, que ya veis que tienen unas tendencias muy parecidas. Esto revela, entre otras cosas, que España, aun antes de pertenecer a la Unión Europea, ha participado con intensidad de los acontecimientos económicos fundamentales vividos por los países occidentales. Aquí podríamos hablar de cinco etapas, cinco etapas bien diferenciadas atendiendo a la tasa media de crecimiento alcanzada en cada una y al avance en el progreso de integración España en la Europa comunitaria. Bueno, creo que también se han conectado tres redondos y por favor me puedes confirmar que el audio es bueno y el vídeo es bueno y seguimos. De esas cinco etapas a las que hacía referencia, la primera se refiere a un rápido aumento del PIB per cápita y de convergencia con la media de Europa comprende el decenio de 1960 y la primera parte del de 1970 que aparece ahí en la diaposición. Son los años de crecimiento industrial acelerado con una importante apertura al comercio exterior y la primera parte del año que aparece ahí en la diaposición. Y a la inversión extranjera, una orientación de la política económica que contrasta vivamente con la dominante en épocas anteriores. La segunda etapa nos llevaría de 1975 a 1984 y es una etapa de crisis económica y de divergencia con Europa en cuanto a la evolución de la renta per cápita y es un proceso complejo de la economía española cercana que nos plantea alteraciones profundas en el escenario económico internacional y cambios institucionales internos, hay que pensar que es la época de la transición política española de alcance que también se refleja en la etapa. La tercera etapa es el decenio que arranca en 1985, o sea de 1985 a 1995 coincidiendo con la incorporación de España a la Unión Europea que se produce en 1986 como sabéis estaríamos hablando aproximadamente de esa etapa que vemos aquí y muestra un perfil europeo. La tercera etapa es el devolutivo del PIB per cápita aún más semejante a los países comunitarios. Los efectos del crítico proceso de unificación de Alemania acentúan la fase recesiva de este ciclo que de otra forma si no hubiese ese proceso de unificación no habría reflejado una caída tan importante en el tiempo. La cuarta etapa es la que va desde esos mediados del decenio de 1990 hasta 2007 aproximadamente, aproximadamente estaba hablando de este periodo que veis ahí y se caracteriza por la combinación de un apreciable ritmo de rendimiento de la renta precápita con una notable estabilización macroeconómica que en gran medida ha resultado del ajuste realizado para asegurar el buen funcionamiento de la Unión Económica y Monetaria Europea. Y ya en esa etapa que nos queda hasta el momento actual, la etapa que arranca en 2008 es de una gran recesión consecuencia de los desequilibrios que se crean en la etapa anterior y también por supuesto tiene mucho que ver con... toda la crisis internacional que se vive desde ese momento. Siguiendo con los rasgos, los rasgos que caracterizan este crecimiento económico español, el tercero consiste en que en España hay una mayor profundidad de las tres crisis que se han producido durante el periodo estudial. Ese es un tema bastante relevante. Estamos viendo en este gráfico la evolución del Producto Interior Bruto per cápita español respecto a la media de la Unión Europea en el periodo 1961-2014. Los datos son porcentajes en paridades del poder de compra constante. Aquí podemos afirmar que el entorpecimiento económico de este periodo, sobre todo a partir de la segunda mitad del decenio de 1970, supone, como ya se ha señalado, un retroceso en el proceso de convergencia en España con la renta per cápita media comunitaria, que hasta entonces había sido muy rápido y que sólo se logra reactivar a partir de 1985. Hay que tener en cuenta que en 2014, si comparamos el PIB per cápita español respecto al PIB de la Unión Europea, a la V27, en porcentajes en paridades del poder de compra, alcanzaríamos un 96,6%, mientras que con la Unión Europea también en este periodo de 2014 estaríamos en el 89,2%. El último rasgo que vamos a comentar es que las fluctuaciones que se producen en cada una de las cinco grandes etapas que antes hemos considerado poseen un carácter más marcado en España. Vamos a avanzar un poquito más porque vamos a ver si nos da tiempo a ver estos dos capítulos en esta sesión, vamos a entrar ya en lo que sería el epígrafe de transformaciones estructurales y precisamente vamos a centrarnos sobre todo en este cuadro que es un cuadro que nos da la comparación internacional en el periodo 1960-2014 de lo que es el crecimiento y el cambio en la ocupación de la población, los datos vienen dados en distribución porcentual del empleo entre actividades productivas. Y ahí vemos esas tres grandes áreas, agricultura y pesca, industria, energía y construcción y la parte de servicios. Vamos a ver, agricultura y pesca tendríamos este primer recuadro, se señalan tres fechas, tres hitos que son 1960, 1985 y 2014. En industria, energía y construcción exactamente lo mismo, tendríamos este tercero. Y en el apartado de servicios, pues exactamente. Comentar que en cuanto a las transformaciones estructurales, la primera aspecto es el cambio de la estructura productiva en favor de la industria y los servicios y en detrimento de la agricultura. La segunda transformación estructural básica que tenemos que tener en cuenta es la apertura comercial al exterior o lo que es lo mismo, la exposición a la competencia externa que puede ser medida a través del peso de las exportaciones, de las importaciones o de la suma de ambas en el PIB. El tercer aspecto estructural que hay que destacar es la ampliación de los recursos públicos o lo que es lo mismo, la mayor importancia de las administraciones públicas que puede ser medida por el aumento de peso del gasto público en el producto interior bruto. Como cuarta y última cuestión, como cuarta y última transformación estructural es la mayor equidad en la distribución de la renta en sus tres vertientes tanto funcional, personal y espacial, aunque lamentablemente este es un aspecto en el que no se registran importantes avances desde hace ya más de 2D. En cualquier caso, en este cuadro estamos viendo datos, por ejemplo, en esa distribución porcentual del empleo entre actividades productivas, productos españoles, estamos hablando en la agricultura y pesca de un 38,7% de peso relativo en 1960 y baja a nada menos que el 4,3% en 2014. En la actividad de industria, energía y construcción arranca en un 30,3%, sube en el año 85 a un 34,1% y cae también en el 2014 al 19,9%. Y sin embargo, los servicios, ahí está la compensación, arrancan también en un 31%, sube casi a un 50% en 1995 y en el 2014 se dispara al 75,8%. No hay, por ejemplo, grandes diferencias en cuanto a la evolución, por ejemplo, si lo comparamos con la Unión Europea de 12, estamos hablando que el tema de los servicios está en un 37,9% en el año 60, un 56% en el año 85 y un casi 70% en el año 2014. O sea, son pequeñas diferencias. Pequeñas diferencias. Más apreciables son las diferencias si las comparamos con la Unión Europea de 2012 en el sector de Industria, Energía y Construcción. En este caso, en 1960, la Unión Europea de 2012 tendría casi un 40%, o sea, 10 puntos porcentuales por encima del caso español y baja también al 27% en 2014, pero todavía son más de 7 puntos por encima del caso español. Y en el tema de la evolución de la agricultura, aquí también hay una diferencia muy significativa, mientras que en 1960 hay una diferencia muy significativa a favor del mayor peso de la agricultura en el caso español con casi un 40%, mientras que la Unión Europea de 2012 está un poquito por encima del 20%, es decir, casi, casi duplicábamos en ese momento ese peso relativo en el sector. Y en lo que sí se ha producido en el caso español hasta 2014, pues es una evolución similar, aunque en el caso de la Unión Europea de 2012 está también ligeramente por debajo, aunque en nuestro caso 3,4% sería. Bien, en cuanto a los determinantes del crecimiento a largo plazo, aquí habría que hablar del papel de la producción del trabajo. En primer lugar, si nosotros planteamos, por ejemplo, vamos a dar algunos datos, esta tabla de crecimiento y productividad del trabajo comparación internacional en el periodo 1961 a 2014 son datos en tasas anuales acumulativas y por una parte, vamos a ver si clarificamos esto un poquito, tenemos un cuadro que sería este que nos habla del periodo 1961 a 2014 y después esto se desagrega en dos subperiodos, de 1961 a 1985, primer subperiodo y segundo subperiodo de 1986 a 2014. Aquí tenemos los datos de España y estos datos podemos hacer comparación, por ejemplo, con la Unión Europea 15 que tenemos aquí arriba en los datos y podría ser esa una de las referencias o cualquiera de las otras que tenemos ahí en ese apartado. En la primera columna, de las tres que hay en cada uno de los recuadros, tenemos el producido bruto real per cápita. En la segunda columna tenemos el producido bruto real por empleado, también lo que podemos denominar la productividad del trabajo. Y el tercero es la proporción de la población total con empleo, también podemos llamarle el empleo per cápita. Y esto se repite en cada uno de los tres cuadros que vemos. En todo caso, las dos primeras columnas nos muestran la relación esperada entre el aumento del PIB per cápita y la productividad del trabajo para un conjunto de países desarrollados y para todo el largo periodo que estamos comentando aquí, por nada menos que desde el año 60 hasta el año 2014. En la tercera de las columnas que acabamos de ver, la proporción de la población total con empleo o del empleo per cápita, se puede apreciar una reducción del empleo per cápita en varios países comunitarios en contraste con el caso de Estados Unidos. Dado el lento aumento de la población en Europa, este hecho estaría indicando una reducida capacidad de generación de empleo en la economía europea. en la economía europea vamos a bajar un poquito más aquí tenemos el producto interior bruto real per cápita y la productividad del trabajo en españa en el periodo de 1961 a 2014 en tasas anuales de variación color gris son datos de productividad y en color marrón son datos del propio interior bruto per cápita seguimos con los determinantes de crecimiento a largo plazo de la economía española podemos afirmar en todo caso que desde el inicio del decenio de 1970 consolidado ya el proceso de industrialización el crecimiento del producto un tributo per cápita y de la productividad del trabajo han seguido en España caminos bastante dispares, más que en Irlanda y al contrario que en otras economías avanzadas de gran dimensión que serían más comparables. ¿Por qué está ocurriendo esto? ¿Por qué muestra este gráfico esta disparidad? Hay tres factores que son fundamentales. El primero es la mayor profundidad de los periodos de crisis que apunta a la debilidad competitiva de una parte del tejido productivo español. El segundo radica en la peculiar organización del mercado de trabajo que concentra su flexibilidad en la abundancia de la contratación temporal, de fácil ajuste en momentos recesivos y el tercero es la envergadura que alcanza la inmigración durante los últimos 20 años. Estos serían los tres factores que explicarían un poco esta disparidad de evolución entre la productividad y el producto interior bruto per cápita que estamos viendo en este cuadro. El siguiente, pasaríamos ya al tema de productividad capital y progreso tecnológico. En este sentido, tenéis un... un análisis muy interesante en el que no vamos a entrar, falta de tiempo, de los determinantes de la productividad del trabajo a partir de una función de coptuglas y a partir de ahí, bueno, pues se explica un poquito cómo funciona toda esta cuestión de la relación entre la productividad y el capital y el progreso tecnológico. Partiendo de una idea que vamos a comentar para que nos situemos un poquito, de que la teoría convencional del crecimiento explica el aumento en la productividad del trabajo partiendo de una función agregada de producción a través de dos factores básicos. La mayor capitalización de las explotaciones, es decir, un aumento en el capital físico y humano por trabajador, lo que también se llama la intensificación del capital. Y en segundo lugar, la mejora en la eficiencia que consigue cada combinación de trabajo y capital aplicada al proceso productivo o también lo que llamamos el aumento en la productividad total de los factores. Cuido principal de determinado largo plazo es el avance tecnológico. Este sería un poquito el aspecto clave. En cuanto a este gráfico, pues estamos hablando de la contribución, del aumento del capital físico y humano al incremento de la productividad del trabajo en España en el periodo 1961 a 2014. También son tasas anuales de variación. En color gris tenemos datos de la productividad y en color marrón tenemos datos de contribución del capital. Aquí lo más destacado sería el ascenso en el capital humano sostenido y más pronunciado desde 1935 hasta el año 2000, estamos hablando de una tasa media del 2% anual aproximadamente que compensa en alguna medida el menor avance del capital físico pero que no puede evitar que la aportación de ambos tipos de capital al incremento de la productividad se hiciera gradualmente menor, que es lo que nos está mostrando este gráfico. Tal vez lo que resulta más extraño o atípico y que hace diferente a la economía española si lo comparamos con las grandes economías europeas es el prácticamente nulo aumento en la productividad total de los factores desde el inicio del decenio de 1990 que apunta a un destacamiento de los niveles de eficiencia del trabajo y del capital aplicados a la producción en los últimos 20 años, algo que debe atribuirse a la creación de empresas de baja eficiencia. en los años de expansión, así como a la formidable extensión del sector de la construcción. El siguiente gráfico yo creo que nos puede ayudar un poco a entender esto. Aquí mostramos la productividad en España con relación a la Unión Europea de 15 en el periodo de 1961 a 2014. En el 14 estamos hablando de niveles relativos y números índices relativos. En color gris la productividad total de los factores en índices base 100 en 2010 y en color marrón la productividad del trabajo a nivel relativo en porcentaje. La anomalía a la que nos referíamos antes la muestra claramente este gráfico al comparar con la Unión Europea de 15 y estamos abriendo... ...esos niveles relativos y números índices relativos. Estamos viendo que estamos en un 70% de arrancada en la productividad del trabajo que acaba alcanzando niveles relativos en torno al 90% aproximadamente, mientras que en la productividad total de los factores arrancamos casi en un 100% en 1961 y ahí sí que prácticamente nos vamos en torno al 110%. buena parte del periodo, aunque al final ambas series efectivamente bajan claramente a partir de los últimos años. La productividad del trabajo en España, me piden porcentaje de la media de este conjunto de países, que son los 15 países de la Unión Europea, ha descendido desde el final del empeño de 1980 y este descenso ha descansado en buena medida en el estancamiento, en el avance de la productividad total de los factores que ya hemos comentado, un aspecto que nos distingue y al que se debe prestar atención. Es un aspecto que debéis considerar. También creo que este gráfico que nos muestra el capital humano y tecnológico en España en el periodo 1961-2014, en color naranja, los años de estudio medio y de la población activa. Por lo que veis, los investigadores y científicos por cada mil trabajadores también sirven para explicar la determinada crecimiento a largo plazo de la productividad vital y progreso tecnológico en España. Decir que... Cuando se alcanza un elevado grado de desarrollo, la capacidad de adquirir y asimilar tecnologías de otros países se hace más difícil y costosa, siendo fundamental un esfuerzo propio de creación de nuevas ideas de innovación y el logro de una mejora en la cualificación de los trabajadores, una mejora del capital humano. En definitiva, con el fin de facilitar su absorción, difusión y transformación en nuevos bienes y procesos productivos. España ha hecho un esfuerzo muy apreciable a lo largo del tiempo por ampliar el número de investigadores, la línea de color gris, bueno pues así lo refleja, cuando se miden estos en tanto por mil de la población trabajadora se obtiene esa línea de color gris que también la podríamos denominar la línea de color gris. La ratio de intensidad investigadora, que ha avanzado en paralelo con el ascenso del número medio de años de formación reglada de la población ocupada, aunque con algún retraso con respecto a esto. Ya vemos que la evolución es paralela de las dos líneas tal como acabamos de comentar. Este capítulo lo vamos a cerrar con el apartado de fluctuaciones cíclicas. Y desequilibrios. macroeconómicos. Comentar que las flotaciones que registra la evolución del Producto Interior Bruto per Cápita en España se deben a que los factores de oferta que determinan el sucesimiento a largo plazo, que es la población, el capital que es el medio humano, la productividad total de los factores no evolucionan a corto plazo de manera gradual y sostenida ni se mueven en un marco de completa flexibilidad de precios que facilite el ajuste de los mercados. Además, los factores de demanda y el consumo, la inversión, la diferencia entre exportaciones e importaciones tampoco ajustan su evolución a la oferta, sino que experimentan bruscos cambios o perturbaciones, shocks en definitiva, que se deben a diversas razones, principalmente las alteraciones en las expectativas y en la riqueza de los individuos, en los planes de inversión de las empresas y en el comportamiento de los mercados exteriores. Todo esto da lugar a desequilibrios más económicos, inflación, desempleo, déficit exterior o déficit público. Frente a estos desequilibrios, las políticas monetarias y fiscales que los gobiernos aplican para tratar de corregirlos, van a contribuir también a las fluctuaciones, van a tener un aspecto coyuntural y esto se va a manifestar en el freno o en la aceleración, en el aumento del volumen de los productos, en el corto y en el medio plazo. ¿Comentar? Vamos a poner el foco en este gráfico que nos está indicando la evolución comparada del PIB real con el PIB potencial en tasas anuales de variación, es un tema interesante. Y aquí tendríamos que hablar tanto de shocks de demanda como shocks de oferta. Los shocks de demanda al impulsar el gasto agregado dan lugar a movimientos en la misma dirección de la producción y de los precios, también del tipo de cambio real y a movimientos en sentido contrario del saldo de la cuenta corriente ya que estimula las informaciones. Por el contrario, los shocks de oferta... Da lugar a movimientos en sentido contrapuesto de la producción y los precios. La producción tiende a caer, los precios tienden a subir, mientras que en el caso de la demanda, tanto la producción como los precios tienden a subir como sales. Por ejemplo, en el caso de un sueldo de oferta, que decimos que la producción tiende a caer y los precios tienden a subir, un aumento de la productividad original, esto sería justo al revés, sería un aumento en la oferta, un aumento en la oferta, un desplazamiento de la oferta hacia aquí abajo y hacia la derecha, que sería consecuencia de ese aumento en la productividad y que originaría aumentos en el nivel de renta, en el nivel de producción, en el nivel de empleo y reducciones en paralelo en los precios, en la inflación y también reducciones en los precios. Y también reducciones en el tipo de cambio real, lo que mejora el saldo de la cuenta. No todos los shocks tienen los mismos efectos sobre la producción, como acabamos de ver. Los de demanda suelen considerarse relativamente transitorios, en cambio los elementos de la productividad total de los factores tienen efectos más permanentes, pues suponen aumentos estables en la oferta agregada. Tenemos aquí, vamos a ver, la evolución. De la tasa de desempleo y de las tasas de variación de los precios y los salarios en España en el periodo 1961 a 2000. a 2014. La tasa de desempleo aparece en color marrón, los salarios nominales en color gris y los precios en un color como más moradito, por así decirlo. Vamos a ver. El rápido aumento de la demanda en las fases expansivas, esto se ve aquí claramente en los gráficos, provoca tensiones alcistas sobre los salarios y sobre los precios. La curva tanto de color morado como la curva de color gris, cómo efectivamente tienen esas tendencias alcistas en las fases expansivas. Y también se provoca, tiene una consecuencia que no apreciamos en este gráfico, en déficit en el comercio exterior. Para atajar al bolsillo y los gobiernos, previos a la adopción de la Unidad Monetaria Europea, tomaron con frecuencia medidas de contención monetaria y fiscal de estabilización que frenaron el crecimiento económico y la creación de empleo. Asimismo, procedieron a revaluar la moneda buscando restablecer la competitividad perdida, mejorar el equilibrio en las cuentas exteriores. Y preparar una nueva etapa de expansión en la que a menudo los desequilibrios dictados volvieron a presentarse. En esta gráfica aparece el déficit exterior y el déficit público de España en el periodo de 1981-2014, valores corrientes en porcentaje del PIB. Interior bruto, el déficit exterior aparece en color marrón, el déficit público aparece en color gris. Y viene un poquito también para, digamos, ilustrar lo que estábamos comentando hace un momentito. Podemos concluir a la lista de estas gráficas que la explicación de la especial intensidad de las actuaciones españolas cuando se compara con la media europea puede deberse en el tardío proceso de apertura a la competencia internacional y en la masiva y rápida entrada de inmigrantes, dos fenómenos que por otra parte han acentuado las semejanzas de la economía y de la política económica española con los principales países europeos. Pero no debemos olvidar, y esto lo hemos comentado ya varias veces en los seminarios anteriores, que nosotros tenemos aquí en España un mercado de trabajo peculiar que dificulta la evolución de los salarios, que se ajuste al ciclo económico y fomenta el empleo temporal. Simplemente, ya para acabar, comentar antes de pasar al siguiente capítulo, que sería recursos naturales y humanos, y vamos a ser un poquito más concisos. Como decía antes, los conceptos básicos que tenéis que trabajar en este capítulo son crecimiento económico, hechos estilizados de crecimiento, productividad aparente del trabajo. Lo hemos repetido muchas veces, la productividad total del trabajo que mide la productividad. La productividad es conjunta del trabajo y del capital y se calcula como cociente entre el valor añadido bruto y una medida agregada del trabajo y capital empleados para producirlo, normalmente la suma de ambos, ponderada por la participación que cada uno tiene del valor añadido bruto. La tasa de variación anual de esta magnitud se aproxima por la diferencia entre la tasa de variación del numerador y el denominador. Bueno, otro concepto que también sería interesante sería el de progreso anual. tecnológico, de transformaciones estructurales y el PIB potencial que es el que se obtendría con la población que puede y quiere trabajar y la productividad observada en condiciones de completa flexibilidad de precios. Hay un aprendiz interesante en este capítulo que se refiere a la crisis de la España del euro de José Antonio Martínez Serrano y nosotros ya vamos directamente al siguiente capítulo, el capítulo 3, autores Juan Vázquez y Javier Mato, recursos naturales y humanos y aquí vamos a ser un poquito más concisos y simplemente una breve resumen. Los temas que vamos a tocar son estos, una breve introducción, después hablaremos del territorio, los recursos naturales y ambientales, después la estructura demográfica y por último... el capital humano. En cuanto a la introducción y casi, casi, pues más o menos el resumen que vamos a hacer del capítulo, donde veremos las gráficas y tablas también, decir que los recursos naturales, como sabéis, se encuentran sometidos a continuos debates sobre su posible agotamiento en un plazo próximo y sobre la compatibilidad de la creciente demanda de calidad ambiental con unos métodos de producción que generan residuos, generan contaminación y también son agresivos, respetablemente aquí. Por estas razones, la disponibilidad o la carencia de recursos naturales, la forma en que se utilizan o se resuelven sus escaseces y los impactos de la actividad productiva en la degradación del medio ambiente, suscitan un gran debate, un mutado interés y se revelan como cuestiones económicas fundamentales que ya no hay que discutir su importancia. Por su parte, los recursos humanos tienen una singular importancia para la economía, obviamente. Su cantidad y calidad, y cada vez mayor, me atrevo a decir, en la economía del siglo XXI, pues esto se hace especialmente relevante. Su cantidad y calidad influyen decisivamente sobre los niveles de crecimiento, eficiencia y bienestar, y ello desde diversas perspectivas. A una parte, las culturas. La estructura y los niveles de cualificación de la población determinan la oferta de trabajo, al final, y también actúan sobre la productividad, como acabamos de comentar en el capítulo anterior. Por otro lado, la estructura demográfica se encuentra íntimamente relacionada con las características económicas, sociales, institucionales y biológicas de una realidad social en un proceso de interacciones mutuas. Todas estas cuestiones que estamos comentando relacionan con los recursos. Se aborda en el capítulo 3 desde una doble perspectiva, tanto conocer la cantidad de recursos naturales y humanos y dotaciones como la calidad y la incidencia que estas características tienen en lo que estudiamos en este bloque segundo del programa que es el crecimiento de la economía. Bien, vamos a empezar con los recursos naturales y después pasaremos a los recursos humanos en este último caso, pues incidiendo sobre todo en la estructura demográfica, la evolución, el tema de las migraciones y tal vez un aspecto más importante es el último, el capital humano como elemento cada vez más valorado del potencial de crecimiento de una economía presentando su evolución y su grado más significativo. Yo creo que esto seguramente... Este es el aspecto que en una economía de conocimiento merece que le prestemos una mayor atención. Los conceptos claves que hay que manejar en este capítulo, lo tenéis ahí, la renta de situación, recursos naturales, tasa de fecundidad, crecimiento vegetativo, tasa de migración neta, rendimiento de la generación y stock de capital humano que también lo tenéis como es habitual al final. El final del capítulo pues perfectamente definido. y no va a tener ningún problema con esta parte. Por lo que se refiere al apartado del territorio y recursos naturales y ambientales vamos a empezar, vamos a ver tres aspectos que son la posición, la base física y biodiversidad y los recursos hídricos pero evidentemente nosotros no somos especialistas en estas materias y por tanto para nosotros va a ser meramente descriptivo y un mero acercamiento a estas realidades que estamos aquí comentando. Sí, tiene interés este mapa que estáis viendo aquí que se refiere a la gran dorsal europea ¿Qué podríamos decir? El viejo corazón financiero e industrial situado en un triángulo muy diverso eran, digamos históricamente Londres, París y el Roo se ha ampliado hasta configurar el marco más complejo y policéntrico de la gran dorsal europea que estamos viendo ahí en la pantalla y que concentra en un sexto del territorio prácticamente un cuarto del total de la población y casi la mitad de la producción de la niebla europea. Desde ese nuevo corazón, ampliado a la economía europea, han partido efectos difusores en diversas direcciones, orientadas tanto hacia el antiguo Europa del Este y a los países nórdicos, de elevado nivel de bienestar, como hacia la fachada mediterránea europea, propiciando incluso esa extensión. Ahí veis una flechita, ¿verdad? Una flechita como se desplaza todo esto también hacia la zona del levante español en uno de los ejes de retenimiento y dinamismo de la economía europea. Pues claro, tenemos ahí esa gran dorsal, en esas ciudades, en Londres, Ásterdam, Vogue, España... Esto es un lugar mucho inútil, similar, y cómo efectivamente van saliendo ahí esas flechas en varias direcciones, tanto al Este como al Oeste, y también esa que apuntaba al levante español es parte de eso. Bueno, en cuanto... Hay un aspecto de base física y biodiversidad, que es la segunda consideración del territorio que vamos a hacer. y que presenta notables singularidades, resulta poco favorable en su conjunto y ha planteado algunos obstáculos al crecimiento económico español. Ahí vais a ver en el texto, pues, algunos condicionantes que se derivan del relieve, del clima, del suelo y de la diversidad de la vida o biodiversidad. Ya digo que nosotros no vamos a entrar ahora en el detalle ni mucho menos de estas cuestiones, que las que les he escrito son sencillas, muy teóricas. Y si tal vez comentar este gráfico, esta tabla, en el que podemos ver los efectos de las emisiones de gases de efecto invernadero, lo que han sido sus variaciones en el periodo de 1990 a 2012. En la parte de la izquierda tenemos las variaciones de toneladas de CO2 en millones y en la parte de la derecha. En la parte de la derecha tenemos la variación de emisiones en porcentaje sobre 1990. ¿Cuál ha sido la evolución en porcentaje sobre 1990? Tenemos a España, en la parte inferior, ahí la tenemos. Con una variación de toneladas de CO2 en millones positiva de 51 y también una variación de emisiones en porcentajes sobre mil o entre 90 la positiva de 24 que contrasta, podemos aquí destacar, hay algunos puntos que están en negrita. Tenemos Italia, por ejemplo, ambos datos son negativos, en menos 57 y menos 4. O Dinamarca, en menos 18 y menos 15, etc. Y ahí vemos un contraste importante. Por eso la Agencia Europea del Medio Ambiente sitúa a España entre los países con mayores dificultades para cumplir los objetivos de Kioto, aunque la recesión de estos últimos años ha sido muy importante. En los últimos años, a partir del 2008, ha contribuido a moderar las emisiones y España ha tenido que adquirir derechos de emisión de CO2 en el mercado europeo de forma reiterada. Sin embargo, en los sectores difusos, las proyecciones de la Agencia para España prevén que se cumplan los compromisos en el horizonte de 2020. O sea que hay una cierta expectativa positiva en este sentido. También hay un tercer aspecto que son los recursos... hídricos y bueno, ya no vamos tampoco a entrar en ello, simplemente comentar que como sabéis que el agua es uno de los recursos más apreciados y uno de los factores más imprescindibles y determinantes para el crecimiento económico de buena parte del territorio nacional español, ellos debido al poder más ocasionado por la escasez de precipitaciones y su desequilibrada distribución espacial, a lo que se une la complejidad de su gestión y las alarmas generadas por los efectos negativos que el tratamiento global puede tener sobre la disponibilidad de agua en el sur de Europa. Pasando ya a la estructura demográfica, empezaríamos con la evolución y composición de la población, también de manera muy digna, muy esquemática, no existe un aspecto que yo crea más sencillo y está perfectamente aplicado en el libro y que merezca mucho la pena que nos extendamos aquí. Ahí tenéis, vamos a ver, son indicadores demográficos en España y la Unión Europea en el periodo 1985 a 2014, desde la población que es la que aparece en la primera línea, en la primera fila, hasta la tasa de dependencia que es la que aparece abajo, en la última. Y aparecen por ahí la distribución de las edades, la tasa de natalidad, el índice sintético de pregundidad, que son hijos por mujer fértil, la tasa de nupcialidad en dando por mil, la tasa de mortalidad en dando por mil, la esperanza de vida diferenciando para hombres y para mujeres, por supuesto esperanza de vida en año, y la tasa de dependencia, que son mayores de 60 años en porcentaje de la población de 20 a 59 años. Bueno, comentar, por ejemplo, pues cómo la evolución de la población en España pasa de los 38,3 millones en 1985 a los 46,5 millones en 2014, mientras que en la Unión Europea de 28... En 28 estamos hablando de una población en 1985 de 463,6 millones de personas y en 2014 estamos hablando, son cifras profesionales, de 507,4 millones. Ahí podríamos ver también la diferencia en distribución por edades, hasta 19 años, de 20 a 59 años, de 60 años o más, y podríamos hacer la comparativa entre España y la Unión Europea. Excepcional, excepcional, ¿no? Tal vez uno de los rasgos más acusados de lo que estamos viendo aquí en estos datos, en la segunda mitad del siglo XX, sea la reducción de la natalidad debido a un desplome de la fecundidad, esto es, del número de hijos por mujer. Desde la década de 1970 y en poco más de 20 años se pasó del baby boom a la escasez de nacimientos y España dejó de tener la tasa de fecundidad más elevada junto con Irlanda para registrar la más reducida al lado de Italia de toda la Unión Europea. Esta caída de la fecundidad fue la consecuencia de un conjunto de puntos cambios en las estructuras económicas, sociales, culturales y de sistema de valores y muy en particular de los que afectaron más directamente a la configuración de la familia, al papel de la mujer y a las condiciones del mercado de trabajo. También cabe destacar el alargamiento de la esperanza de vida y todo esto supone un cambio sustancial de la estructura de edades de la población española y provoca un envejecimiento progresivo. Los estratos de población de más de 60 años fueron aumentando a lo largo de todo el siglo XX, alcanzando prácticamente los porcentajes de la Unión Europea, bajando un 23,6% en 2014. Hay un recuadro en el manual que habla de la transición demográfica y el desplome de la secundidad. Y en esta figura que aparece aquí tenemos el movimiento natural de la población española del periodo 1901 a 2014, en tantos por mil aparecen en color marrón la tasa de natalidad, se ve la caída muy acusada, en color gris está la tasa de mortalidad y en color morado está el crecimiento vegetal, que apuntan a lo que estábamos comentando. Se puede hablar, en definitiva, de una convergencia demográfica con Europa, que queda reflejado también en el enganchamiento, en el crecimiento de los estratos superiores y en el grado de envejecimiento característico de los países más avanzados. Claro, resulta preocupante en el español el efecto que esto puede tener en un largo plazo sobre los sistemas de pensiones o el sistema sanitario, evidentemente. Al margen de los cambios introducidos en las edades de jubilación en 2012 y en 2011 y de posibles mejoras en las tasas de fecundidad, la estructura demográfica actual ya permite prever un incremento progresivo de la tasa de dependencia que superará el promedio europeo a partir de la generación del EDIBUN cuando alcance estos 65-70 años. También a esto contribuirá la mejora progresiva de la tasa de vida, que supera en dos puntos y medio ya a la tasa de la Unión Europea y que ya ha llegado a los 80 años para los hombres, mientras continúa creciendo por encima de los 85 años para las mujeres. En este gráfico tenemos la estructura por edades de la aprobación en España y la Unión Europea en 2014. Se puede apreciar el déficit de nacimientos debido a la guerra civil en el periodo 37-39, en esa primera línea que tenemos ahí. También se puede apreciar, en segundo lugar, el mantenimiento de la fecundidad a un nivel más alto. El nivel es relativamente elevado. y un equilibrio rápido de la fertilidad y un repunte de la calidad. No voy a extender más en estos datos, aquí tendríamos, ya para ir un poquito finalizando, la tasa de migración neta en la Unión Europea 28 y una selección de países miembros, sería España en color verde Alemania en color gris, el Reino Unido en color moradito, la Unión Europea 28 en color marrón y Francia es un marrón más oscuro Los movimientos migratorios, su incidencia es el segundo efecto que actúa sobre la estructura demográfica de un país obviamente. En España este factor resulta sobresaliente en relación con el movimiento natural documentado para explicar los rasgos demográficos más recientes. La influencia de las migraciones sobre la magnitud y la composición poblacional requiere atender primero a los cambios cognitivos producidos y más adelante a las cifras inmediatas y su gran impacto cuantitativo sobre los efectos humanos del país. Podemos comentar, para ver un poquito la magnitud, ya se ve ahí, la evolución temporal en el caso español, como es muy sobresaliente, la magnitud del fenómeno inmigratorio reciente llevó a cuadriplicar la población de origen extranjero en España en la década de 2000. Fijaros que esto es muy llamativo, ese periodo, esa curva de color verde, pues estamos hablando de multiplicar por cuatro la población de origen extranjero, contribuyendo en más de tres cuartas partes al incremento poblacional experimentado durante ese periodo. Además, esa corriente inmigratoria acentuó dos tipos de desequilibrios existentes en la distribución de la población, por edades, incrementando los efectivos en edades intermedias, y por regiones, ganando más peso el área mediterránea. El impulso de la inmigración llevó a España a auparse como uno de los países de la Unión Europea a 27 miembros, en que la población de origen extranjero resulta más elevada, alcanzando en 2014 el 12,8%. y superando desde hace años a países de larga tradición y migratoria como son Alemania, Francia o el Reino Unido. Pero también, evidentemente, hay un cambio muy significativo a partir del 2008. Aquí lo podéis ver. Vamos a conocer la crisis, ¿verdad? Como esa curva en este periodo final. Al final, a partir del 2008, en los últimos años, la contribución positiva de la migratoria sobre la población total ha cambiado como consecuencia de la crisis económica y de la distorsión de empleo. Ahí veis en esa gráfica la disminución de los flujos de entrada y el aumento de las salidas que han llevado a que desde el 2012 España registre tasas de migración neta negativas. Ahí veis que la línea verde, efectivamente, está por debajo. Por debajo del 0. Hay, por tanto, una reversión de las tasas migratorias, así como una gran oscilación a lo largo del tiempo, lo que contrasta con el comportamiento registrado en la Unión Europea a 28, que es mucho más estable, y en los grandes países miembros que han sido receptores netos a lo largo de la práctica totalidad del periodo, pero con registros más moderados, mucha menos fluctuación en los países de recario ayer. En España la mayoría de los flujos de salida se debe a la migración de retorno de personas llegadas en la etapa anterior, en el gran boom previo a esta gran recesión que hemos sufrido. Y ya para cerrar este capítulo, el capítulo 3, vamos a ver un poquito del capital humano. En este caso vamos a trabajar con este cuadro en el que estamos viendo la población entre 15 y 64 años con estudios secundarios posobligatorios o superiores en la Unión Europea en el periodo 2005-2014. Se trata de porcentajes. Aquí abajo tenemos los datos de España y estamos hablando en 2005 de un 48,3% de población entre 15 y 64 años en España con estudios secundarios posobligatorios o superiores. En el año 2010 subimos casi al 52% y en el año 2014 estamos en 55%. Si nos comparamos con la media de la Unión Europea 28, hay que decir que estamos sensiblemente por debajo en todo el periodo. grande ese desfase en el 2005, donde estaba prácticamente la Unión Europea 28 en un 66%, en el 2010 hay casi 20 puntos de diferencia ya que la Unión Europea 28 está en el 70% y en el 2014 estamos hablando de un lag de 55,2 hasta 72,5. Todavía sería mayor si nos comparamos con países, curiosamente el que más destaca es Polonia, pero si nos comparamos con Alemania o con el Reino Unido pues también se puede observar que efectivamente la situación es comparativamente negativa. Solamente mejoramos de todos los países que aparecen aquí en esta tabla la situación de Portugal que arrancaba en el 2005 con un bajísimo 27% y todavía en el 2014, estamos hablando en un pobre 43%. Teniendo en cuenta la gran importancia que tiene una buena formación del capital humano en la economía de conocimiento, pues obviamente estos son datos muy relevantes y que tienen que tenerse muy en cuenta. El capital humano en definitiva recoge el conjunto de intangibles que se encuentran incorporados en la fuerza del trabajo, tales como la educación recibida, la formación y también la especialización en el trabajo, la experiencia laboral adquirida y las condiciones de salud. No son solamente los datos que aparecen ahí en la tabla y que nos hemos dedicado a comparar con los países del entorno. Todos estos intangibles que forman parte del capital humano se consideran una forma de capital de la que su adquisición es el resultado de visiones previas de inversión y su utilización debe contribuir a una mayor productividad. De hecho, las teorías actuales del crecimiento consideran al capital humano un factor importante. El factor estratégico de crecimiento contribuye a elevar directamente la productividad del trabajo y la renta per cápita, a la vez que sirve de vehículo para la generación y difusión de nuevas ideas y procedimientos, es decir, de progreso tecnológico. No solamente esto, sino que es una fuente muy clara de externalidades positivas, por lo que su acumulación unida al capital físico contribuye a crear un ciclo virtuoso de crecimiento económico. Además, el aumento de los niveles de capital humano contribuye... ...favorece la igualdad de oportunidades, lo que ayuda a que exista un consenso sobre la importancia estratégica de la educación y la formación tanto desde el punto de vista económico como político. y y social bien aquí pues ya para acabar esto ya es un tema que conocemos creo que muy bien los análisis más recientes sobre la influencia de la educación en el crecimiento económico muestran que además de la cantidad de ecuación su calidad es un factor muy destacado tenemos por ejemplo los informes pisa que son informes comparativos como bien sabéis en españa pues no sale muy bien muy bien para comentar en este sentido ya para acabar el gasto público en educación en 2011 expresado como porcentaje del producido bruto ascendía en españa al 48 por ciento mientras que en la media de la unión europea 28 se situaba en el 5,3 por ciento como consecuencia del anterior si bien el gasto por alumno es producido en términos relativos los niveles educativos de la población en edad de trabajar han crecido progresivamente recortando las diferencias que sin embargo aún persisten con los países de la unión europea tal como aparece Entonces, en definitiva, yo creo que en este capítulo, desde luego, estamos hablando de recursos disponibles para el crecimiento económico, sin duda, en una economía de conocimiento el recurso imprescindible es el capital humano y ahí, aunque no solo es formación, no solo es educación, pero esa formación y esa educación tiene un papel muy relevante y estos datos muestran que aún nos queda un camino por recorrer. Y hasta aquí, ya digo que el capítulo 2 yo creo que es mucho más relevante desde el punto de vista económico, en el capítulo 3 pues ya entramos en cuestiones más de indio demográfico, sociológico, etc., incluso medioambientales, que nosotros ahí, al tener alguna referencia, es más que suficiente. No sé si tenéis alguna pregunta, alguna cuestión que me queráis trasladar. Y comentar que el próximo... El próximo día, después que viene, vamos a intentar, yo creo que sí que nos va a dar tiempo, a abordar el capítulo 4, la formación del capital y el capítulo 5, innovación y cambio tecnológico. Este último, especialmente... Bueno, los dos, desde el punto de vista económico, muchas gracias, especialmente. especialmente el cambio tecnológico. Alguna cuestión que me queráis trasladar, lo decía al principio pero algún compañero se incorporó un poco más tarde, hemos grabado la sesión, de hecho ahora le tengo la...