Vale, pues creo que ya le he dado a grabar, si ya está esto así, vale, perfecto. Bueno, pues vamos a empezar un poco la clase. Bueno, comentaros que como ayer fue 8 de marzo, que es el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, pues, y además pues por cuestiones así, pues que es un tema muy a flor de piel, yo no sé si habéis visto mi vídeo este que tengo el de los caníbales y tal, pero sí que considero que toda la cuestión de feminismos ahora mismo y todos los pensamientos subalternos en general y las críticas a la recepción poscolonial, creo que son pensamientos que hay que tenerlos como muy presentes en la actualidad porque si, no sé, como que hay ya pensamientos que ahora no están como en el aire de los tiempos, entonces como que no ejercen demasiado, no son muy incisivos en lo que ocurre, ¿no? Y sin embargo cuestiones como las del feminismo, y se nota muchísimo en las ampollas que despierta, yo creo que sí que están haciendo... Están haciendo una muy buena labor de transformar la realidad, horadarla, problematizarla y además no solo ya veremos ahora con feminismos, porque los feminismos, claro, son una corriente de pensamiento, son corrientes de pensamiento, entonces lo que hacen es agarrar de otras corrientes, entonces como que hacen que muchos pensamientos se vuelvan otra vez vivos, ¿no? Y eso a mí me parece bastante importante de determinados pensamientos, y bueno, por eso ahora me dedico a hablar de canibalismo y cosas de estas. Porque creo que aglutina en terminología que puede atraer, sí, es muy transversal, sí, es muy transversal y sobre todo pues eso, que es muy vivo. Quiero decir que no, o sea, que si yo me pongo ahora a hablar, pues yo qué sé, de la cuestión de, yo qué sé, de si las esencias, y las esencias en Santo Tomás, y si no hay esencia sino que hay potencia, etc., etc., pues tengo un discurso súper escolástico, ¿no? Que es muy interesante, pero por ejemplo, ahora vamos a ver en las cuestiones de feminismos como este debate vuelve a aparecer y sin embargo está como muchísimo más vivo, mucho más chispeante, se entiende muchísimo mejor, etc. Entonces, hola, ¿qué tal? Te perez. Sería lo mismo hablar de libertad e igualdad, claro, claro, se puede hablar en términos mucho más, claro que es verdad cuando nos metemos en ailar fino, en terminología, etc., etc., pues claro, nos salen unas cuestiones muy finas, pero es que los feminismos son súper finos, en realidad. Y luego además también lo que ocurre es, a mí me llama la atención, ¿por qué no se estudian filosofías si solo hay filósofos en el grado? Ah, filósofas, ah, perdón, habían tenido filosofías, fijaos, ¿no? Sí, sí, es que hay muy poca, sí, es que bueno, ya sabemos que el patriarcado, esto que sí que es más mediático, ¿no? Pero ya sabemos que el patriarcado, pues el borrado de la mujer es impresionante. No solo el borrado, sino el no acceso. Yo quiero que lleguemos hoy... Sí, sí, las hay de muy buenas, sí, sí, hay muchísimas, bueno, no hay tantas filósofas, pero hay muy buenas filósofas, lo que pasa es que claro, para llegar a ser una filósofa en la tradición tienes que ser realmente muy buena. porque, claro, la criba que hay en los hombres y en las mujeres es muy distinta, ahora lo veremos. A mí me gustaría que llegáramos, hoy he puesto feminismos, voy a intentar hacer un mapita, un mapita un poco riguroso, solo para que veamos, ¿no? Sabéis que hay gente en la UNED, también le va al cárcel, que se encarga del feminismo, y, bueno, a mí me gustan los feminismos así más, alguien diría que posmodernos, a mí no me gusta el término posmoderno, pero bueno, los más activistas, podríamos decirlo, los más cañeros o los que están más en los territorios así más rarunos, más cerca de lo queer y cosas de estas. Entonces yo voy a hacer un mapita así un poquito general y luego nos vamos a meter. Hoy querría hablaros de Silvia Federici, en particular, que me parece una, una referencia impresionante, cerca de qué, hola, esto yo creo que llega tarde, pues cerca de los intersticios de la ontología y de las estéticas y de ver qué pasa con los objetos extraños, que es difícil, los objetos, los sujetos, los elementos, que es muy difícil. ¿Se para el vídeo? Uy, a ver, a ver, se entrecorta, ¿ahora? Porque, bueno, lo puedo... Si es que nos han cambiado la cosa esta. A ver, ¿se ve bien o no? Bueno, voy a seguir hablando, ¿a ti te va bien? Vale, vale, bien, va bien. Estaba por esto, ¿no? Por los intersticios, ¿no? Por estos feminismos que abordan... que también se pueden aplicar a las obras de arte, que se pueden aplicar a bastantes cosas y que tienen que ver con cuestiones ontológicas que son cuestiones que no están perfectamente encajonadas, que lo que supone es un problema a los encajonamientos. Entonces, bueno, ya veo que hay problemillas hoy con la imagen. De todas maneras, mejor casi ver el PowerPoint este moradito que se ha puesto que a mí y mi cara porque, bueno, pues no es tan interesante. Bueno, empezamos entonces con la cuestión de los feminismos. A ver si llego a la Silvia Federici, que a mí me interesa mucho. Me gustaría que diéramos una serie de feminismos. Hoy voy a intentar llegar a Silvia Federici. Donna Haraway me gustaría mucho que la diéramos porque además tiene mucho que ver con la cuestión epistemológica y se puede aplicar a muchas cuestiones artísticas y de hecho se usa ya. En muchas cuestiones artísticas. Judith Butler quizá tocarla un poquillo, aunque no sé porque de Judith Butler yo creo que casi todo el mundo ya sabe un poco. Es verdad que es bastante complicadita de leer y bueno, que a lo mejor si queréis os comento porque además tiene lo último de Odradek y cositas de estas que os he puesto ahora por aquí y que son realmente interesantes. Judith Butler es una cabeza importantísima yo creo en todas estas cuestiones y además se mete mucho en la cuestión jurídica. El nombre por favor, vale. Si de todas maneras ahora lo pongo todo Judith Butler. Vale. Ahora viene todo en el PowerPoint que sabéis que os podéis descargar, ¿vale? Vale. Bueno, pues empezamos. Voy a empezar así un poco diciendo obviedades, pero bueno, son obviedades que, como hemos dicho antes, cuando los eslóganes están secuestrados por los media, pues ya ni siquiera son eslóganes que puedan hacer efecto. Incluso, pues eslóganes bastante interesantes como la imaginación al poder o la diferencia y cosas de estas que han tenido muchos efectos políticos y tal, pues claro, una vez tomados ya por los media, pues empieza la cosa a ser orden más que un eslógan. Entonces, bueno, para romper un poco la cuestión esta del feminismo este que nos viene en bote y que todo el mundo opina como si hubiera solo uno y entonces aparecen gente muy enfadada con el feminismo y otra muy abanderada del feminismo, pues lo primero que habría que notar es que no hay feminismo, hay feminismos y que no es una única corriente y que tienen problemáticas muy distintas y que tratan incluso la misma problemática de modos muy distintos. Y lo que hay es muchísimo debate y lo que es muy importante es que pueda haber ese debate, ¿no? Entonces, bueno, pues como hay unos feminismos que se conocen más, yo me voy a ir a los más marcianitos, ¿vale? Que además a mí me gustan. Os sigo contando cuestiones de feminismo. Un poco la... La etimología o la genealogía, más bien, del término feminismo y nos lo dice Paul Preciado, que no sé si lo conocéis. Es un profesor que ha pasado por varios nombres, comenzó siendo Beatriz Preciado, pasó a ser el profesor Beatriz Preciado y ahora es Paul Preciado finalmente. Y, bueno, a mí me parece un poco plancha, aunque es muy bueno en determinadas cosas, lo que pasa es que sí que aplana algunos problemas. Pero bueno, no creo que lo vayamos a tratar, hay muchísimos vídeos, está muy bien, yo lo aconsejo muchísimo, es muy creativo. Y él nos dice que feminismo es un término que en primer lugar se utiliza para denominar a hombres, no es una cuestión que tenga que ver con las mujeres en un comienzo. Bueno, aquí os cuento un poquito, feminismo es un epíteto feminista, es un epíteto que empieza a darse a los hombres que tiene una masculinidad evaluada, parece ser que uno de los medicamentos y de los tratamientos que había para tuberculosis hacía que los hombres se hormonaran en cierto modo, entonces pues le empezaban a salir pechos, se le empezaba a quitar la barba y cosas de estas, y entonces se afeminaban. Y parece ser que las primeras... Las primeras registros que hay de este término pues son justo dedicadas a hombres. Luego empieza a ir aumentándose y son estos hombres inferiores que se parecen a mujeres, inferiores, ya veis la connotación, ¿no? Estos hombres devaluados, inferiores, que empiezan a parecerse a mujeres, esto estamos hablando del siglo XIX, ¿vale? Porque ya veremos con Silvia Federici que antes no pasa esto. De hecho hay matrimonios... Los adeptos... Del FAI, ¿no? Todos los matrimonios entre hombres, etcétera, etcétera. Con la mujer no hay problemas, pueden ser madres solteras, etcétera, etcétera. Esto ya lo veremos con Silvia Federici. Pero hacia el siglo XIX, pues... ... Un insulto es ser feminista, es un hombre venido a menos, un hombre que tiene un parecido con las mujeres o que defienden a las mujeres o que asumen en cierto modo los roles de las mujeres. Entonces ahí se ve que el feminismo curiosamente, es la cosa divertida que ya empezamos un poco con las cuestiones queer y performativas, pues es un término que se ha pillado justo de la devaluación del hombre. Entonces es como, bueno, tú pones un hombre devaluado y lo llamas feminista, pues yo cojo el término feminista y lo cambio de sentido, cambio su espacio semántico. Esto tiene mucho que ver con la cuestión queer y es bastante interesante en general. Esto se ha hecho mucho con la cuestión puto también, etcétera, etcétera. Y luego como os sigo contando, pues en la actualidad tiene muchísimo que ver con todos los estudios de subalternidad. Aquí os pongo qué significa subalternidad. Y subalternidad. Es subalterno, ¿no? Es que el otro, el alter, es sub, está debajo. Y la subalternidad tiene mucho que ver con las lógicas de la exclusión y donde lo otro ya siempre es algo pasivo, homogéneo, ¿no? Nosotros siempre somos muy diferentes, cualquier otro es lo mismo, ¿no? O sea, pensad por ejemplo toda la cuestión del islam, ¿no? Pues nosotros pues tenemos miles de religiones, pero no, el islam solo es una, ¿no? Como si no tuvieran tradiciones, etcétera, etcétera. Pues normalmente la subalternidad, lo que denuncia es precisamente estas lógicas, ¿no? Donde lo otro siempre es pues algo subalterno, algo que no tiene discurso, algo que como no tiene discurso pues se puede explotar perfectamente, ¿no? Porque no se queja, etcétera, etcétera. Pues estos otros son la mujer, lo no determinable fácilmente, las otras culturas, otras morfologías, otras caras, los animales, la naturaleza, etc. Por eso hay muchos puntos en los que feminismo, ecologismo, subalternidad, etc., van a tener relación. ¿Cómo lo llevamos bien? A ver, estamos cansadillas hoy, cansadillos, ¿no? Por eso vuelvo a repetir esto, hay múltiples feminismos y bueno, pues cada uno alude correcto. Bien, vale. Si me pongo muy tostón, me decís, ¿vale? Y voy yo más ligera o lo explico mejor, ¿vale? Pero vamos, yo creo que aquí no hay problema, ¿no? Pues por eso, que ya hablar de feminismo en singular pues ya es un poco extraño porque no engloba a un montón de corrientes, ¿no? Y bueno, pues eso es lo que os contaba antes, ¿no? Dependiendo de la perspectiva. Dependiendo de la perspectiva que se tome, pues hay cuestiones que se responden de manera distinta, hay temas que se plantean de manera distinta y sobre todo daos cuenta que hay dos zonas bastante diferenciadas, que una es más la teórica y otra es más la empírica, ¿vale? La empírica tiene mucho más que ver con cuestiones de economía feminista, con cuestiones de legalidad, de jurisdicción, etc., etc. Y la teórica pues sí que se puede aventurar a repensar, podríamos decirlo, que está un poquito en el centro de la teoría. Y que se toma saca de esa cuestión empírica y por lo tanto incluso problematizar. De todas maneras, pues eso, no sé si habréis visto, pues con las cuestiones, por ejemplo, de la prostitución, de la promiscuidad, etc., etc., de lo trans o no trans, si hablamos de mujer o de hombre o de otras cosas que no sean mujeres y hombres, etc., pues cada tipo de feminismo o cada corriente más o menos te dirá una cosa distinta, ¿no? Por eso es interesante estudiar algunos. Os sigo comentando, os pongo aquí, bueno, este es muy rápido, esto lo descargáis y os pongo simplemente un mapita pseudo cronológico, poco riguroso, de un poco como ha ido más o menos como los hitos un poco de la cuestión feminista. Tenemos a Olympe de Gouges, que es la primera que se considera feminista, que es de la revolución francesa, es una pensadora y una activista de la revolución francesa y ante la declaración de derechos del hombre y del ciudadano que se establece en la revolución francesa, pues ella se le ocurre decir que bueno, que esto del hombre y del ciudadano, pero que bueno, que también existe una cosa que es la mujer y la ciudadana. Y que a lo mejor también tendría que tener ella derechos. Esto sienta un poquito mal y bueno, ella acaba en la guillotina, ¿vale? Por estas cuestiones. Luego tenemos varias, ¿no? Varias pensadoras, así del siglo XX, la más conocida es Simone de Beauvoir, ¿no? Y ya lo que empieza a hacer Simone de Beauvoir es separar esto que habremos escuchado un poquito en la cantinela, que es la separación entre el sexo, que sería biológico, que es, pues qué genitales aparentemente tienes, porque además sabemos ya que no, que la genitalidad externa tampoco corresponde a veces con la interna, y se puede ser mafrodita y que hay muchísima gente que es mafrodita, pero bueno, el sexo, es decir, la genitalidad biológica y el género, ¿no? Es muy famosa la frase de Simone de Beauvoir que dice no se nace mujer sino que se llega a serlo, es decir, cuando a ti te designan y empiezan a inculturarte, ¿no? De cómo te tienes que comportar. Entonces acaba siendo, pues una mujer. Esto había casos todavía muy curiosos en siglos precedentes, incluso en el XX. Por ejemplo, a Oscar Wilde le ocurrió que su madre quería una niña y como le salió un niño, pues le vistió de mujer hasta bastante tarde. Entonces, bueno, también es verdad que esto del sexo biológico y el género social realmente hasta hace un tiempo que se nos ha puesto como muy estricta la cosa, realmente había una permeabilidad impresionante. Lo muy curioso es que a, por ejemplo, a Oscar Wilde, al pobre, pues en pleno victorianismo le hicieran estas cosas, ¿no? Pero bueno, sería un ejemplo bastante interesante. Luego está Gail Rubin, que es bastante interesante, que es una antropóloga y ella ya empieza a introducir la cuestión del sistema sexogénero. Y ya empieza un poco, es una precursora un poquito de la teoría queer. Os cuento un poquito lo que viene a, le interesa toda la cuestión del tráfero de mujeres a partir de Levi-Strauss y el parentesco. ¿Se podría aplicar a los hombres? Perdona, J. Bayerri, ¿el qué se podría aplicar a los hombres? ¿Esto de inculturación? Sí, sí, claro. Es decir, lo que vienen a decir, así banalizando mucho, es tú naces, tienes un sexo biológico, es decir, es decir, lo de nacer hombre, claro, no, no, o sea, se supone que, o sea, todas estas teorías lo que vienen a decir es, tú naces en cierto modo neutral, ¿no? O con bastante neutralidad o con bastante agencia, podríamos decir, ¿no? El asunto es que por tu sexo biológico te caracterizan. Por tu genitalidad externa te caracterizan, porque no es el primer caso de gente a la que, pues yo qué sé, tenía algo así como un falo y de repente le vino la regla. Y hay bastantes casos. Entonces, después de que te asignan el sexo biológico, empiezan a tratarte de determinada manera. Entonces, pues si eres niño, pues empiezan a decirte tienes que ser valiente, compite, no te dejes aplastar, hombre machote, mea de pie, cosas de estas. Y si eres una chica, pues cuida, quiere aprender a ser mamá, pertenece más al ámbito de lo privado, no te hagas tanto de lo público, compite de otra manera, etcétera, etcétera. Entonces, sí, habría dos campos, podríamos decir, se establecerían dos campos. Ahora volvemos a Bourdieu que trata... Claro, el problema es el estereotipo ese. Sí, pero hay muchas teorías, es decir, hay muchas, muchas y todas tienen muchas cuestiones porque... Esto establecería una neutralidad al nacer y bueno, hay bastantes polémicas con todo esto, ¿no? Seguimos con Rubín, la antropóloga, sigue con esta cuestión, prosigue la cuestión del sexo y el género. Lo que pasa es que ya ve el sistema sexogénero y es como un sistema circular. Entonces, se basa un poco en cómo ser mujer empieza a ser en una sociedad... Moneda de cambio, es decir, lo que enseña Levi-Strauss es que todas las relaciones sociales se llevan a cabo por un tráfico de mujeres, ¿no? Entonces, tú te casas con la... una hermana del otro, entonces te vinculas una tribu con otro, un hombre se vincula con otro a partir de sus mujeres. Esto es muy curioso porque es un poco cuando se dice mucho de cómo no vamos a respetar a las mujeres si son nuestras madres y nuestras hijas. Eso es tratar a las mujeres justo como moneda de cambio, es decir, tráfico de mujeres. ¿Cómo no vamos a respetar a las mujeres si es nuestra moneda? Leves, Viveiros de Castro y toda la cuestión del canibalismo es muy curioso porque rompe justo esta estructura porque una de las cuestiones que se da en el canibalismo es que tu enemigo lo integras en la tribu, lo casas con tus mujeres, es decir, las mujeres siguen siendo algo con lo que se trafica, pero luego te lo comes. Al cabo de siete años más o menos, entonces claro, ya la cuestión de la mujer que es la que permanece por ahí ya empieza a terminarse. Tiene que tener otro estatuto, por eso es muy interesante toda la cuestión del canibalismo, aunque esto nos saca un poco del tema. Pero bueno, lo que viene a decir la teoría queer o esta precursora de la teoría queer es el sistema sexogénero que lo que viene a decir es que tu sexo biológico lo que hace es hacer que te traten de determinada manera por lo cual tú al final tienes un género social, pero es que además ese género social lo que te va a decir es cómo tienes que vivirlo. Es decir, si naces mujer, te empezarán a tratar como una mujer y eso implica finalmente que tú desees a los hombres o tengas que desearlos, ¿no? Si naces hombre, genitalmente masculino podríamos decir, eh... Te tratan socialmente como si pertenecieras al género masculino, o sea, si naces con determinados atributos físicos, te tratan como si fueras del género masculino y entonces tendrás que tener una sexualidad esperada, que es que te gusten las mujeres. Entonces este sistema sexogénero acaba siendo sexogénero-sexo, es decir, el sexo te convierte en unos patrones que tienes que ser y además esos patrones dicen qué sexualidad tienes que tener. Entonces, toda la cuestión de Rubin ya introduce toda la cuestión del lesbianismo y ya empieza a meter toda la teoría queer. La teoría queer empieza con Judith Butler, con el género en disputa, a ver, ¿se podría aplicar una eticidad determinada según ese género? Sí, sí, hay normas. De hecho, estas cositas que parecen un poco estúpidas, o sea, no parecen estúpidas, pero bueno, que parecen muy sociales, acaban calando incluso mucho. En las ciencias naturales, toda la cuestión de cómo se comportan los bosones y cosas de estas de física, acaban diciéndote cosas así como, pues es que, cómo eran los bosones y los neutrones o algo así, ¿no? Y los bosones, que es que se comportan como mujeres, entonces pues tienen disputas entre ellos, no pueden estar agregados en un mismo lugar y no como los neutrones, que sí que pueden. Bueno, no me acuerdo si eran bosones. ¿Bosones y neutrones? Esto es un poco, no me acuerdo cuál era, pero sí se aplica un sistema de valores enterito según el género. enterito, o sea, esto de los varones son nobles unos con otros y las mujeres siempre se están tirando de los pelos y convirtiendo etcétera, pues eso, es muy difícil plantearlo si no has puesto de antemano que el objeto de deseo de la mujer por el cual tiene que competir con otra mujer sea pues justo el hombre, ¿no? El bosón de Higgs, sí, yo creo que va es que no me acuerdo cuál era lo de pero hay explicaciones, si queréis os lo busco para el otro para el próximo día y si queréis en alguna de estas que trataremos a Bruno Latour y como lo social y lo natural no tienen tanta diferencia que es el planteamiento de Bruno Latour y como todas las medidas que se han tomado en ciencia o muchas medidas que se han tomado en ciencia, lo que vienen es del calcado de lo social pues nos podría interesar, esto si queréis os lo guardo para otro día Bueno, sigo con la teoría queer no sé si estoy diciendo muchas banalidades si esto ya os lo sabíais pero bueno, luego encontramos a Judith Butler que esta es la supercrack del mundo mundial, del feminismo, bueno una de las cracks y ese comienzo de la teoría queer coge de Austin mi hermana es física y nunca soltaría algo así, eso son malas inteligencias, que diría Clara Montesí, obviamente pero te lo encuentras, te encuentras cosas, te encuentras explicaciones así te encuentras tipo, esto lo venía a decir como si hay una eticidad determinada según el género, si hay una manera de pensar, hay una manera de estar en el mundo hay una manera de distribuir la sensibilidad hay una manera de eticidad No hay que generalizar, sí, sí, entendido. Sí, sí, no hay que generalizar, pero sí que se ven cosas así, ¿eh? Pues eso, cosas así como la física mecánica es masculina y la cuántica es femenina, cositas así, ¿no? Que te quedas así un poco, ¿qué será eso, no? No se entiende muy bien. También muy bien, mucho por toda esta cuestión de la performatividad que mete Judith Butler, que viene de Austin, ¿no? Toda la cuestión de la performatividad, os apunto aquí. Austin, creo que se escribe así, que viene de Austin, que lo que dice es, bueno, pues que con el lenguaje se puede hacer muchas cosas y una función del lenguaje es la performatividad, es decir, no es lo mismo decir hola con un tema, o sea, con un gesto que con otro. Entonces lo que introduce es un poco como los modos de estar, los modos de performar, ¿no? Los modos de aparecer, ¿no? No es lo mismo decir la taza está rota, ¿no? Que es informativo, oh, la taza está rota, a decir la taza está rota. Y si dices la taza está rota, pues ahí hay una pragmática, ¿no? Un pragmatismo, ¿no? Que lo que te va a decir un poco es estoy enfadada porque has roto la taza, ¿no? Entonces tiene mucho que ver esto de Austin con los modos del lenguaje y una zona es la performatividad, es decir, cómo te sitúas en el mundo, ¿no? Y la teoría queer, queer significa raro, tiene que ver con performar otros géneros, ¿no? Y esto ya tiene unas cuestiones... de artísticas y de performance y de activismo bastante interesantes, ¿no? No sé si lo habréis visto, pues grupos de mujeres vestidas de hombres, funcionando como hombres, diciendo burradas, etcétera, etcétera, o muchas mezclas, ¿no? Entonces, bueno, esto es bastante interesante. Una mujer blanca inglesa, por ejemplo, Virginia Woolf, que ser, por ejemplo, la criada de Virginia Woolf, ¿no? Hay mucho tema con esto porque Virginia Woolf tenía una manía especial a su criada. Entonces, bueno, Virginia Woolf, que se supone que es el feminismo, podríamos decir, el que más funciona, ¿no? El de una mujer, esencialmente mujer, que se atreve a escribir, es decir, pertenecer al ámbito público. Eso sí que suena interesante, sí, sí, es que eso es muy interesante, ¿no? Entonces, este tipo, que es el canon de la feminista, podríamos decir, resulta que puede ser bastante perniciosa para otra mujer que haya detrás. Luego es muy interesante porque, claro, ya se empiezan a cruzar. Luego os hablaré de Spivak. de Gayatri Spivak, que es india, y lo que viene a decir también es, bueno, y también hay un tipo de feminismo que nos lo han importado los hombres occidentales. Entonces mucho cuidado con lo que nos vamos exportando los occidentales, ¿no? Estos son feminismos muy críticos, feminismos ya muy interesantes, ¿no? Pero Spivak en la frase que dice es, los hombres blancos nos enseñaron a las mujeres café que teníamos que tener miedo de los hombres café, ¿no? Ahí entra el clasismo, ahí entra la cuestión de la raza, ahí entra la subalternidad de la subalternidad, es decir, hay grados de subalternidad. Dentro de ser mujer, pues no es lo mismo ser mujer adinerada, por ejemplo, muchas de las mujeres filósofas o literatas que conocemos son mujeres que evidentemente pertenecen a una clase que pueden, por su clase, tener más mundos, podríamos decir, pueden disfrutar de distintos mundos, distintos modos de ser. ¿Por qué? Porque tiene más dinero. Si eres pobre, tienes menos alcance a menos mundos, ¿no? Esto pasa mucho ahora en política. Una de las cosas para que quiten la universidad es, pues eso, que se les había ocurrido a los pobres que podían ser universitarios, no hombre, no, no, no, no. O sea, que queremos una Virginia Woolf, pero la criada de Virginia Woolf, cuidadito, cuidadito, esa que siga estando ahí. O la negra en Mozambique, pues que se quede ahí y tal. O que la india esta, bueno, pues ya vemos... Será Willy Foch a salvarla, que la quemen en la hoguera estos indios salvajes que resulta que tienen que convivir con ellos, entonces ya llegaremos los europeos masculinos blancos a salvarlas, ¿no? Entonces, Angela Davis ahí ya empieza a meter esta cuestión, ella es muy cañera y muy política, y mete mucho la cuestión de la raza y de la clase, es decir, no es lo mismo ser Virginia Woolf que ser su criada y no es lo mismo ser la criada negra de no sé quién. Y se puede hacer safo una maravillosa poetisa porque eres de clase alta o se puede ser Virginia Woolf porque eres de clase alta. Entonces, incluso dentro de las pocas mujeres, poquísimas mujeres que hay en el mundo filosófico, que también hay muy poquitos africanos masculinos y femeninos, y también hay poquitos indios masculinos y femeninos, etcétera, etcétera, pues ya se introducen todas estas cuestiones de la subalternidad. Y esto de Angela Davis, pues ya que veáis que esa línea, el capitalismo que abarca a todos, sí, sí, pero es curioso, es curioso porque, bueno, ahora me gustaría por eso ir a Federici porque Federici tiene esta teoría que es genial de que el protocapitalismo y el machismo o el patriarcado tal y como lo conocemos ahora es lo mismo. O sea, tiene la misma raíz. Que es la cuestión de los cercamientos y la cuestión de la quema de brujas y la cuestión de establecer quién es el caníbal, ¿no? Esto a ver si consigo llegar. Ya llevamos media hora, soy más pesada que nada. Bueno, más feminismos que os cuento para no quedarnos sin nuestras feministas que son fantásticas y son de las más cañeras. En España, bueno, hay muchos tipos de feminismo, además, de todos, o sea, podemos encontrar de todos, ¿no? Aquí, pero he de decir, yo no es una línea que vaya a seguir aquí, es la de los derechos humanos, la de la universalidad, la de la igualdad, es una línea súper legítima, pero bueno, a mí me parece que es más conocida, ¿no? Y que mejor irnos a, bueno, también por afinidades, ¿no? A mí me interesa más la subalterna o la genealógica o la híbrida. Pero bueno, sabéis que tenéis a Celia Morós, que es una, es la feminista, vamos, la que abrió más o menos la cuestión, toda la cuestión feminista en España. Amelia Valcárcel, que es profesora aquí de la UNED. Luego María José Guerra y Ana Harris son muy interesantes. Tienen varios textos. Alicia Puleo ya se va más hacia el ecofeminismo. Y luego ya veremos, ¿no? Porque está Amalia Pérez Orozco y toda la cuestión de la economía feminista, ¿no? Porque hay ahora, bueno, desde hace ya unos años hay una corriente que es economía feminista, ¿no? Meterse en toda la cuestión de la economía, ¿no? Que eso es bastante interesante. Tiene más que ver con lo empírico que con lo teórico, pero mete muchas cuestiones ya teóricas, ¿no? Sobre todo toda la cuestión de los cuidados, que también lo trata Silvia Federici, ¿no? De esto de hay que tener cuidado con los cuidados, que ahora se habla mucho de las lógicas de los cuidados, pero las lógicas de los cuidados siempre acaban haciéndolas las mujeres. Es decir, pues vamos a liberarnos y vamos a emancipar a la mujer occidental, pero entonces que venga alguien de Latinoamérica, por ejemplo, ¿no? Y que por muy poco precio y sin contrato, pues que cuide de... Esto que nos tenía a las mujeres occidentales, pues encadenadas como todos son los cuidados de los hijos, de los ancianos, etcétera, etcétera. Sí, mira qué bonito, ¿no? Pues sí, es que esto se nos suele colar, ¿no? Toda esta cuestión. Entonces, claro, todas las economías feministas ahora lo que están haciendo desde hace unos años, las economías feministas, intentar optar por una igualdad de salarios, etcétera, etcétera. Una igualdad real entre las mujeres y los hombres, pero además también darnos cuenta de que toda la... Todos los cuidados son trabajo, ¿no? Entonces, esto ya os lo contaré un poquito con Silvia Federici porque se empieza a ocultar toda la cuestión de la reproducción y además es ideológico y además tiene fecha. Es decir, se empieza a fechar sobre el siglo XVII cuando el trabajo de la reproducción del proletariado, es decir, de los niñitos y niñitas que luego serán trabajadores, va toda a cargo de la mujer. Y además esa mujer ya no trabaja en el ámbito público, trabaja solo en el ámbito privado y por lo tanto desaparece, se invisibiliza su trabajo. ¿Qué ocurre? Que en la Primera Internacional, por ejemplo, esto nos lo cuenta Federici, ya me estoy yendo a otro lugar, pero bueno, en la Primera Internacional el proletariado es masculino. Hay que crear mano de obra, claro, hay que crearla y criarla. Es decir, y además sabemos que la definición de proletariado de Marx y Engels es los que venden a su prole, es decir, los que venden al mercado laboral, libre, igual, etcétera, etcétera, los que venden la prole. ¿Es Engels? ¿No es Marx? ¿Es Engels? Pues no hemos avanzado mucho. No, de hecho, la tesis de Silvia Federici es muy chula Claro, no hemos avanzado mucho desde el siglo XVIII, pero es que en el siglo XVI y XVII estábamos mucho más avanzados. Es decir, la mujer, que luego vienen a ser las brujas, pero por ejemplo todas las parteras son mujeres, todas, todas, todas. Y toda la gente que está cerca de las cuestiones médicas, todo lo de las hierbas y todo esto, son mujeres. Por eso es muy fácil llevarlas a brujas, porque luego cada vez que aparece una mujer que hace potingues, es decir, una mujer que es susceptible de ser independiente porque trabaja y vende hierbas y las recoge en los campos comunales, que eso con los cercamientos también se acaba, pues claro, se dice que es una bruja y se la tiende a quemar. En la zona peninsular ya estamos bastante, esto es la última diapositiva, pero bueno, en la zona peninsular tenemos ya bastante con intentar cargarnos a los musulmanes y a los judíos, que son las otras diferencias para establecer la Europa de los estados-nación y esta Europa tan fuerte, etc. Y en España funciona más, la constitución del estado-nación español es más expulsando a musulmanes e islámicos. Y también pasa mucho por las mujeres y por ver quién es más independiente, ya sabéis que sobre todo el islam tenía mucho que ver con toda la cuestión de hierbas y todo esto, entonces se aplica. Pero bueno, en el resto de Europa hay una persecución a las mujeres brutal, cada vez que ven a mujeres haciendo hierbas o con algún hijo por los caminos y cosas de esas, cosas que antes se podía dar, pues empiezan a quemarlas, ¿no? Pero es una cosa, es decir, no hemos avanzado mucho respecto... Respecto del siglo XVIII o finales del XVII, pero resulta que había otros sistemas que eran bastante interesantes, ¿no? O por lo menos que deberíamos poder tener referencia de ellos, no pensar que esto siempre es así ni que en todos los sitios es así y poder aprender de estas cosas, ¿no? Entonces, bueno, ya me he ido a la economía feminista, tal, tal, bueno, os cuento un poquito de ecofeminismo, ¿no? Porque ya os he contado un poco que toda la cuestión de la subalternidad pues tiene, ya une a toda la cuestión de raza y clase, pero también une a toda la cuestión de la naturaleza. ¿Por qué? Porque, claro, cuando se establece este paradigma, un poquito hacia el siglo XVII, ya hemos dicho, XVII y XVIII, pues lo que empieza a ocurrir es que, pues eso, la mujer es como la tierra, pues no sé si conocéis esta frase de Francis Bacon, ¿no?, o de Maquiavelo, ¿no?, de la mujer pues hay que saberla seducir o hay que saberla violar, es decir, a la naturaleza, que es una mujer, hay que saberla seducir o violar, etc., etc. ¿No? Entonces ya se establece... Se establece un paralelismo entre tierra y mujer que nos va a llevar muy pronto a toda la cuestión del ecofeminismo. El ecofeminismo, vamos, una de las primeras es Mary Daly, que es una teóloga y es muy esencialista, entonces sí se cree esta unión entre la tierra y la mujer y empieza a, pues, pedir derechos un poco de la tierra a partir de los derechos de la mujer porque en esencia se comparten, ¿no? Y además también parte de una concepción muy esencialista. Porque todas las otras que habíamos visto, pues claro, hay una cuestión de género, no se nace mujer, o sea, tú porque tengas unos genitales, pues no tienes determinados comportamientos, al igual que todos estos experimentos que se hacían también los bestias estos del siglo finales del XVIII y XIX, ¿no?, de coger un recién nacido y... Y no hablarle nunca. Entonces, pues resulta que estos al final no solo no tenían capacidad de lenguaje, sino que tampoco tenían capacidad de empatía, morían muy pronto, etcétera, etcétera, estas burradas que hacían con los niños y las niñas. Pues claro, pensar que por ser mujer, por nacer con determinada genitalidad, pues te comportas como la tierra, la naturaleza, que todo lo da y todo, etcétera, etcétera, como si no hubiera pues mujeres o trans o mujeres macroditas o mujeres estériles y que no pueden parir o mujeres que no tienen ganas de cuidar para nada o mujeres, etcétera, etcétera, ¿no? Luego ya la cosa se va a ver más interesante con Caroline Merchant. Que ya se empieza a poner con condiciones políticas y sociales, es decir, vuelve a toda la cuestión de la subalternidad y de las clases. Es decir, no es que la mujer y la tierra tengan mucho que ver, o sea, esencialmente, sino que cada vez que hay una crisis ecológica son las mujeres las que primero pierden, es decir, frente a una sequía son las primeras que caen las mujeres. Entonces, eso hace notar también pues toda la cuestión de que es el eslabón de la cadena más delicado, ¿no? Entonces, bueno, pues en la medida en que podamos proteger ese eslabón de la cadena, estaremos haciendo una protección también del ecosistema y por lo tanto seremos más respetuosas y más respetuosos, ¿no? Luego Carol Adams publica la política sexual de la carne y esto me lo ha comentado un colega nuestro que va a hacer un trabajo sobre ecofeminismo vegetariano y vegano, nuestro amigo Pedro Pinilla que le saludo por si está por ahí y publica la política sexual de la carne. Y ahí ya introduce una cuestión que también la trata Silvia Federici que es que yo os la aconsejo muchísimo porque es la releche esta mujer y es la cuestión animal, la cuestión de cómo a partir del siglo XVII más o menos, del XVI-XVII cuando empieza toda esta ideología acerca de quién tiene que ser la mujer y qué es lo que tiene que hacer y qué es lo que tiene que ser el hombre y qué es lo que tiene que hacer y qué es lo que tiene que hacer un estado y qué es lo que tiene que ser y qué es lo que tiene que hacer una religión y qué es lo que tiene que ser. Cuando empezamos en esta época de las definiciones más gruesas, podríamos contar así el cuentecito, luego hay, esto es un poco pues tomado entre pinzas pero bueno, poniendo más o menos ahí que hay un patrón ¿no? que cambia un poco la epocalidad y se ponen determinados patrones, la cuestión del animal que luego ya van a reivindicar a partir de Carol Adams, de Rida, Agamben, etc. La cuestión animal empieza a tratarse a los animales y al cuerpo como si fueran mecanismos ¿no? O sea, si os acordáis de esto que dimos en el instituto y que habréis visto aquí en el grado ¿no? de Descartes, de las res cogitans y la res extensa, pues el animal, el cuerpo, la mujer, etc. empiezan a caer de la parte de la res extensa, mientras que las res cogitans ¿no? lo pensante pues es el principio de... La virilidad, la racionalidad, etc. Por lo tanto, esto lo comento a algunos compañeros que han escrito en el foro, el pensamiento es neutro. Todas estas teorías lo que vienen a decir es que si la racionalidad se pone del lado de lo masculino y la mujer cae del lado del mecanismo como el animal, pues difícilmente la racionalidad será neutra, sino que será masculina. Entonces, establecer otras racionalidades o socialmente otros discursos que se puedan dar, pues caerá un poco de ese otro lado. Esto es bastante curioso. No sé si es Derrida o Agamben quien lo cita, que es muy interesante porque ya en Oxford y toda esta cuestión de descartes y tal, se dedicaban ya a pegar patadas a los animales y a los perros sistemáticamente para demostrar que solo se quejaban por una cuestión mecánica, que no tenían evidentemente alma y ahí es donde se hace la primera separación y patrón entre naturaleza y cultura. Ahí tenemos a los humanos haciendo cosas de humanos, a los animales que solo son mecánicos, perdonad, y a las mujeres que son bastante animalitas. Y luego ya está Donna Haraway, que también hablaremos más de ella. Y ya está ella también en la... Lanzada con estas cuestiones, ¿no? De, bueno, mucho cuidadito con estas excisiones, que... Estas lógicas binarias, ¿no? Que esto también Jordi os ha comentado, ¿no? Estos problemas que tienen los dualismos y las lógicas binarias, que son bastante bobas, ¿no? Pero resulta que una de ellas es hombre-mujer y otra es animal humano y otra es cultura y naturaleza. Entonces, mucho cuidado con estas cositas porque al final resulta que somos mezclitas de más cosas. Entonces... Ya empezamos a problematizar, ¿veis? Como el feminismo lo que está problematizando es muchas cosas que nos atañen mucho, ¿no? Entonces, bueno, Donna Haraway tiene ahora últimamente pues todas las cuestiones, las visiones de primate, ¿no? Ya que se mete en toda esta cuestión. ¿Qué tal lo llevamos? A ver, ¿me contestáis a alguien y me contáis si estoy muy aburrida? ¿Muy aburrida? ¿Sí? ¿Vaimos bien? Hacemos un cuartito de hora más y lo dejamos. Bien, ¿os va interesando la cosa o os estoy diciendo mucha banalidad? Todo guay, vale, vale, vale. Necesito ánimos de vez en cuando. Vale, me alegra. Gracias, gracias. Es que necesito ánimos porque me siento un poco sola yo aquí hablándole al ordenador. Ya os lo dije el otro día. Bueno, algunos feminismos. Y estos son los que a mí más me gustan, ¿no? Y estos... Estos son los que me gustaría un poquito contaros aquí en sesiones, ¿no? Voy a intentar... Voy a... Obviamente por el tiempo que tenemos y por el tipo de curso y... Porque tampoco querría dar un monográfico. Aunque sí que me va a salir un poco de feminismo. De hecho Jordi y yo vamos a hacer... Vamos a ir juntando temas, ¿no? Yo... Vamos, hemos hablado y parece... Y yo voy a dar un poquito de feminismo. Luego él también en el curso que viene le va a dar algunos. Entonces vamos a ir pudiendo ver si también sistemáticamente, ¿no? En diferido porque él ya hizo pues... Pues así, pues Kant y Hartman y pensadores así de clásicos, ¿no? Y yo pues me voy a dedicar un poco a feminismo. Si así entre los dos pues vamos cubriendo huequitos, ¿no? Entonces yo me voy a dedicar un poquito al feminismo. Ya que he empezado... Entonces, os voy a simplemente decir quién es mi top ten, podríamos decir, y vamos, mi top ten, lo que más conozco y que, bueno, pues os voy a ir contando en estos días, de todas maneras ya sabéis que lo vamos decidiendo, etcétera, etcétera. Os comento, está nuestra querida Silvia Federici, que a mí me tiene muy alucinada y vamos, os cuento un poquito, lo que hace es mucha genealogía, es decir, se mete mucho en toda la cuestión de la historia y su temática es la cuestión de las brujas y, como ya os he contado un poco, la cuestión de la reproducción y de los cuidados. El lado de la reproducción, de la mano de obra que va a producir en el sistema capitalista. En el sistema capitalista se la lleva la mujer, es decir, todos los cuidados se los lleva la mujer, ¿no? Y si no es la mujer occidental, blanca, etcétera, etcétera, pues será otra mujer subalterna a esa mujer. Difícilmente será un hombre, o será un hombre cuando son criados, ¿no? Criados o esclavos, ¿no? Pero bueno, siempre detrás de un esclavo hay una esclava, ¿no? Reproduciendo, ¿no? Toda la fuerza de trabajo, ¿no? Y tiene toda la cuestión de las brujas. Y es una de las que está metida en toda la cuestión del canibalismo, que a mí me interesa mucho. De hecho, el nombre de su libro se llama Canibán y la bruja, que como sabéis, Canibán es el salvaje de la tempestad de Shakespeare y hace un juego de palabras entre caribán y caníbal, ¿vale? Porque es un salvaje que viola, etcétera, etcétera, ¿no? Es la imagen del... del que tiene que ser esclavizado y enseñado porque en estado de naturaleza es un bárbaro. Relacionadas con Silvia Federici, en la economía encontramos a Maya Pérez Orozco, que podríamos decir que el eslogan es, se llama su versión feminista de la economía, creo, y habla un poco de cómo no solo hay una ética detrás de los hombres y de las mujeres, sino que también hay una economía y que resulta que hay una economía oscura que funciona muchísimo, que es la de los cuidados. No está visibilizada, no está bien pagada, etcétera, etcétera. Ni siquiera está pagada, ¿no? Pues sí, resulta que el abuelo o la abuela es de tu familia o de la familia de tu marido, ni siquiera te van a dar un sueldo. Si contratas a alguien, le das un sueldo de mierda. Pero si eres tú misma, probablemente no tengas ni siquiera un sueldo y ni siquiera tengas el reconocimiento, porque esto también lo dice Silvia Federici, aparece en la imagen de... el pobre hombre que tiene que alimentar a un parásito que es su mujer, ¿no? También sale ahí todo el asunto de la suegra, etcétera, etcétera, ¿no? Todo este imaginario tan espeso que hay alrededor de las mujeres, etcétera, etcétera. Demasiado radical, ¿no? Pero todo ese imaginario evidentemente tiene un comienzo, es decir, no es natural. No es natural, ¿no? Y entonces, pues no sé, por ejemplo, un Madame Bovary, ¿no? Que es muy bonito y que... y que Flaubert está... Flaubert, ya sabéis, que decía, no, yo soy Madame Bovary. O sea, yo soy esa mujer, ¿no? Pero la historia de Madame Bovary es un... eh... Así, literal, feo, es un pobre hombre médico que se casa con una mujer que quiere ser de una clase superior y además que es una puta y se apuesta con otra gente. Y entonces esta mujer tiene su merecido. Claro, el asunto es que Flaubert ya es bastante listo y le está dando la vuelta, está diciendo, pero bueno, ¿qué es esto? Pero eso es el pan nuestro de cada día a partir del siglo XVIII, es decir, la mujer queda invisibilizada a todo su trabajo hasta que la mujer se inserta en el mundo laboral, que también es una cuestión que pertenece bastante al patriarcado, es decir, que de repente solo con el sueldo del hombre pues no se puede alimentar la familia porque se baja el ingreso y también tiene mucho que ver con el capital, ¿no? Entonces se baja el ingreso. Entonces el hombre machote que antes decía tú chata te quedas en casa, luego dice tú chata sal a trabajar porque es que no nos da el sueldo. Entonces, bueno, todo acaba siendo una cuestión de, como veis, a mí me ha... me ha vendido bastante la moto Federici, es decir, me parece muy razonable lo que dice y es que la estructura patriarcal tal y como la conocemos y la estructura capitalista es que tienen un origen muy cercano y criticar a una es criticar en cierto modo a la otra, ¿no? Y el hombre que se queda en casa también es considerado parásito chulo calzonazos. Bueno, es que esa imagen ya nos... claro, esa es brutal, ¿no? O sea, imaginaos, o sea, no sé si ahora que han cambiado muchas cosas todavía es el azote de los chicos, ¿no? Eso Pierre Bourdieu, que está aquí, aquí Pierre Bourdieu, esto incide mucho porque él es un hombre y dice, no, hombre, que la dominación masculina, se llama su libro, ¿no? La dominación masculina no solo afecta a las mujeres, es que afecta de una manera brutal a los hombres, entonces claro, el azote de un hombre es quedarse en casa parado, ahora por ejemplo con la crisis esto lo vemos de una manera sangrante y es una pena también que haya tanto sufrimiento no solo por la crisis, porque además el capitalismo y el patriarcado están muy unidos, sino también pues estas cosas también que les pasan a los hombres tan brutales que se quedan en casa y a lo mejor trabaja la mujer y se hunden absolutamente porque se sienten un parásito, un calzonazos, un chulo, etcétera, etcétera, entonces claro que sí, claro que sí, o sea azota, azota, es decir, y esto ya integrando un poco, porque es verdad que no hay que generalizar tanto y empíricamente se dan varios casos. Pero invisibilizar toda la tarea de reproducción, es decir, si tú vas a la fábrica y haces 28 tornillos, aunque no los disfrutes, tú has hecho 28 tornillos, o si haces un escrito, tú haces un escrito, pero la labor reproductiva, es decir, la de cuidados, la de limpieza, etcétera, etcétera, está muy invisibilizada y además es muy sacrificada, es decir, tú limpias el polvo y al rato ha salido otra vez. Esa es una labor de reproducción, ¿vale? O tú haces la comida y al rato tienes que hacer la comida. Eso no se hace, o sea, cuando uno tiene un trabajo asalariado, entra, hace lo que tiene que hacer y sale, ¿vale? Y se objetiva en cierto modo el trabajo. La labor de reproducción y la labor de cuidados no tiene esa objetivación tan clara, por lo tanto no se considera producción en el sistema capitalista, puesto que no circula ahora ya más con todo el sistema desde que la esclavitud se acabó allá por el siglo XIX o XX en Europa. Porque siempre Europa dice que América y los esclavos y todo esto, pero Europa lo tenía. Pero desde que se acaba toda la cuestión del esclavismo, eso queda, sí que circula más por la cuestión de las contrataciones de la gente que hace los cuidados, pero está muy invisible, muy invisible. Y sí, ese fermoso a los hombres también les azota. Es decir, cuando hablamos de feminismo, y ya lo he dicho al principio, no estamos hablando de mujeres, porque además hablar solo en términos democráticos. Mujeres, a pesar de que muchas veces cae sobre lo que se considera mujer, a pesar de que sí cae en ella, no cae solamente en ella. Es decir, al lugar hombre le corresponden otras tantas cosas y otras tantas pesadillas. Y ya se ha contado un poquito a Bocutien que habla un poco de eso, de que el campo, podríamos decir, del campo de acción y los hábitos, es decir, las posturas que se pueden... ...pueden tomar en determinados campos están puestos tanto para la mujer como para el hombre. Y si alguno de los dos cae en el otro... Cuidadito, cuidadito Claro, porque si os he contado Pues el feminismo empieza siendo Esos hombres venidos a menos O sea, es una cosa Claro, las mujeres es que ni existen O sea, el lesbianismo No empieza a considerarse hasta Bastante tarde en el siglo XX Porque podría haber un hombre Perfectamente a dos mujeres acostadas Y como las mujeres casi no tienen entidad Vale, hola Que se ha Hola, ¿estáis por ahí? Es que ha habido un problema con el servidor O yo no sé si se ha acabado el aula Sí, bueno Uy, no, espera Permanecer en la página, ay mierda Ay vaya por Dios Has desaparecido, sí Me está dando problemas No sé si es mi internet o qué Hola, nos vemos A ver, yo creo que ya estamos De todas maneras Sí, ya Bueno Ya esto no lo voy a grabar Yo creo que Como ya hemos pasado una horita El próximo día os sigo contando A ver, ah Os iba a contar Los feminismos en el arte, etcétera Pues si queréis el próximo día Seguimos con Es un problema cultural A ver, sí, vamos a hacer preguntas ahora Espera, voy a grabar Clase 3 Parte 2 Vale Venga, sí Vamos a hacer un poquito de preguntas Y ya, si dejo yo de daros la chapa Que soy una pesada A ver, es un problema cultural ¿A qué te refieres, J. Bayerri?