Bien, bueno, pues en la sesión de hoy vamos a hacer una, como hemos hecho otras veces, a diferencia de como hemos hecho otras veces, mejor dicho, una introducción así más o menos transversal y general que sirva como marco a la historia de Egipto. Ya dejamos el Próximo Oriente, hemos ido viendo las civilizaciones que se suceden desde el mundo sumerio al mundo persano que unifica, por así decirlo, todo el espacio mesopotámico en torno a un único poder y bueno, ahora nos cambiamos de ámbito para hablar de Egipto. Quizá podríamos abordar primero, que será lo que haremos en la clase próxima ya en 2018, las peculiaridades institucionales, culturales, sociales, etcétera de Egipto, pero bueno, prefiero que hagamos primero una introducción histórica por dos razones, ¿no? Primero porque, aunque Egipto es un estado, pues bueno, notablemente estable desde el punto de vista político, pues bueno, también cuando uno analiza la evolución histórica pues va viendo como en determinados momentos, sobre todo en el reino antiguo, se van configurando algunos de los principios básicos del Estado egipcio, por lo cual, bueno, también en la clase... de hoy diremos algo sobre cómo se organiza Egipto desde el punto de vista político y segundo porque entiendo que a la hora de presentar la historia de Egipto desde un punto de vista diacrónico, es decir, en la evolución cronológica, os va a ser más sencillo, recordando aquellas cosas que veíamos a principio de curso entre milenios, ¿no? Ya hablábamos del cuarto y el tercer milenio, la unidad, el tercero y el segundo milenio con otra unidad y la segunda mitad del segundo milenio y comienzos del primero con otra unidad, pues os va a ser más sencillo entender qué es el reino antiguo, qué es el reino medio y qué es el reino nuevo, ¿no? Que son esas tres unidades cronológicas en las que para su estudio se divide la historia de Egipto, ¿no? En principio, en esa división cronológica, reino antiguo, reino medio y reino nuevo, el reino antiguo corresponde a Egipto. El reino antiguo correspondería al cuarto y tercer milenio, cuarto y primera mitad del tercer milenio. Si os acordáis en Mesopotamia, lo podéis ver en el cuadro aquel que está subido al curso virtual y a la página de horarios donde hay un cuadro sin óptico sobre la historia del Próximo Oriente y hay incluso algunos personajes citados a propósito de Egipto para encuadrarlos, ya lo voy a volver a subir por si se nos hubiera despistado, ¿no? Para encuadrarlos desde el punto de vista de Egipto. Desde el punto de vista cultural, bueno, pues decíamos que el cuarto y el tercer milenio antes de Cristo correspondía fundamentalmente a un momento clave que tenía que ver con la aparición del Estado y el inicio de la articulación burocrática y de la articulación administrativa, pues bueno, de esos estados antiguos, ¿no? Con lo cual, el reino antiguo corresponde a Egipto. El reino antiguo egipcio, perdón, va perfectamente... Ahora no voy a encontrar el... Bueno, ya lo buscaré. Bueno, ahí os lo dejo. Lo podéis abrir y veréis como en la columna de la derecha aparecen algunos de los faraones que vamos a citar. Bueno, pues entonces si el reino antiguo corresponde al tercer y al cuarto milenio, que eran momentos de consolidación de la ciudad-estado y en segundo lugar de... primeros estados imperiales bien organizados, pues el reino antiguo se caracteriza fundamentalmente por eso. El reino medio correspondería al tercer y primera mitad del segundo milenio y el reino nuevo a la segunda mitad del segundo milenio y el primer milenio. Si el reino medio corresponde a ese periodo entre el tercer y la primera... Segunda mitad del tercero y la primera mitad del segundo, que decíamos que era un periodo caracterizado... en el próximo oriente por el auge de los grandes imperios, pues bueno, también será un estado marcadamente centralista, muy bien articulado, con algunas de las fases de mayor clasicismo desde el punto de vista histórico y político, en fin, con mucho desarrollo desde el punto de vista estatal. Y el reino nuevo, aunque tendrá una primera parte de cierta estabilidad, pues bueno, tendrá una segunda a partir del 1270 más o menos, habéis trabajado en la PEC II, de hecho, el Tratado de Cádiz, que pone de manifiesto ya esa regresión progresiva de los estados hasta los episodios de los pueblos del mar, que precisamente conocemos a partir de una inscripción egipcia y el declive institucional de la mayor parte de los estados clásicos del próximo oriente. Lo veíamos, por ejemplo, para el estado hitita y para otros ámbitos. Además, esa división reino antiguo, medio y nuevo, que tendría su paralelismo en la división tradicional que vimos la semana pasada, bueno, perdón, hace varias semanas cuando explicábamos la historia del próximo oriente antiguo, en el caso de la historia de Egipto está acentuada por una peculiaridad. Fijaros, el cambio entre reino antiguo, reino medio y reino nuevo permite hablar de un primer periodo intermedio al final del reino antiguo, un segundo periodo intermedio... al final del reino nuevo y una baja época a partir de finales... perdón, un segundo periodo intermedio a partir del reino medio, al final del reino medio, y un tercer periodo intermedio... y una baja época a partir del reino nuevo. ¿Qué implica eso? Que en todos los momentos en los que se cambia cronológicamente de reino, a veces se hablaba de imperio, pero en fin, parece que es más bien reino porque el modo de organización de Egipto es fundamentalmente monárquico aunque haya un cierto afán de expansión que lo haga, y desde el punto de vista territorial, esos periodos intermedios son periodos de dificultad que en el caso egipcio suelen ser crisis internas, muchas veces sucesorias, intrigas palaciegas, crisis de descentralización, regiones, el Alto o el Bajo Egipto, el Alto o el Bajo Nilo, que tienen más protagonismo que otros espacios. Egipto tiene esa peculiaridad de que el Nilo hace columna vertebral, pero llega a distribuirse... llega a repartirse el territorio, me parece que son 24 distritos, eso que luego en el Egipto helenístico se llaman los nomos, que cada uno tiene a sus nomarcas, que son los gobernadores, digamos, provinciales y puede haber zonas que por la riqueza económica despeguen incluso más que la capital. Entonces los episodios intermedios, los periodos intermedios suelen coincidir con crisis internas de desequilibrio territorial, como se habla ahora mismo. Momentos, tampoco sé si decir independientes, independistas, pero sí secesionistas o de mayor protagonismo de determinadas regiones de la periferia, por así decirlo, frente al centro. O en tercer lugar, la tercera amenaza que tiene Egipto, que es un país tan estable, es siempre la fronteriza. Estos estados tan maduros desde el punto de vista institucional, lo veíamos, por ejemplo, del Imperio Acario, lo veíamos en la Babilonia de Hammurabi, o lo hemos visto también en la Babilonia casita o incluso en el estado de Asirio, claro, ejercen un efecto llamada sobre los pueblos del entorno y ese efecto de llamada a veces se traduce en invasiones de nubios, de Ixos, de individuos extranjeros que inquietan un poco la articulación estatal y territorial de Egipto. De ahí los periodos intermedios, que son momentos en los que, por así decirlo, Egipto se reinicia cultural y políticamente. Y normalmente después del Reino Antiguo y su crisis de desequilibrio intermedio, aparece un reino medio clásico con un gran centralismo hasta que vuelven a aparecer episodios, por así decirlo, como comentábamos antes, de desequilibrio territorial. Creo que en una de las diapositivas de este dossier tenéis la distribución de Egipto en distintos nomos. Lo estoy diciendo de memoria, efectivamente, tenéis esos 24, como dije antes, desde Nubia hasta el Delta, los distintos distritos en función, como veis, del cauce del Nilo o esa tierra negra fertilizada por el río, que es la que da sentido a la vida y que es donde están todas las ciudades. Bueno, pues se dividen todos esos distritos y es lógico que haya momentos en que determinadas zonas tengan más protagonismo que otras. Bien, partiendo de esos criterios que son un poco terminológicos o un poco de parcelación cronológica propios de la historiografía. Egipcia y que han tenido éxito como términos reino antiguo, imperio, reino medio y reino nuevo con sus correspondientes periodos intermedios. Vamos a ir caracterizando cada uno de los periodos en esas tablas que tenéis ahí que podéis descargar, tenéis una síntesis cronológica, pero como veis por la terminología siempre está organizada de lo más antiguo en la parte inferior a lo más moderno. El primer periodo intermedio es el final del reino antiguo y antes propiamente de que comience el reino antiguo. Lo que tenemos son los periodos predinásticos, esos momentos que más o menos corresponden a esos episodios aldeanos de Hasuna, de Samarra, de Teljalaf, de las primeras culturas preurbanas mesopotámicas. También en Egipto hay unas culturas pre- o protodinásticas. Nagala, por ejemplo, con una cerámica extraordinaria ya como elemento contenedor de cerámica. Real, decorada, en fin, con muchas peculiaridades típicas de la cerámica y de la producción del momento. Pero en realidad el tiempo histórico, las primeras dinastías no empiezan a contar hasta que se produce la unificación. Unificación que se debe al faraón Narmer, que sería el primer faraón. Ese Narmer menés de la protodinástica representado en esta paleta, que es uno de los iconos, por así decirlo, de esas primeras periodos dinásticos y que, como veis ya desde el momento de origen, los historiadores lo dividen entre la época tinita y la época menfita. En función de si es Tinis o es Menfis, la ciudad, la capital que más importancia tiene. Ya adelanto y lo podríais ver en el cuadro que he subido hace un momento. Bueno, no lo voy a abrir. Que precisamente si vais al cuadro, para ese período del cuarto milenio pre-dinástico en Mesopotamia, ¿qué personajes tenemos como característicos en la periferia de Mesopotamia? Bueno, pues los grandes faraones de la cuarta y de la quinta dinastía, conocidos sobre todo por las pirámides y por tanto por la madurez también de la capacidad organizativa. Porque en definitiva nadie construye unas pirámides como esas después de los intentos de Zoser, la pirámide de Saqqara y otras. Bueno, pues ese es el momento del primer gran clasicismo. La dinastía quinta y quizá la dinastía decimoctava, que es la de Tutankamón, desde el punto de vista artístico, corresponden a periodos de madurez que obviamente, como el arte egipcio es un arte muy estatal, corresponden también a periodos de madurez en lo político. Por eso el reino antiguo se caracteriza fundamentalmente por, al margen de los aspectos peculiares de cada uno de los periodos, se caracteriza fundamentalmente por tres elementos. Primero, el surgir de una organización estatal con una base claramente económica, pero en la que la escritura desde el primer momento, a partir de las dinastías cero, cero y cero, en la que aparece propiamente la escritura, lo otro sería esa época que en Sumer llamábamos de los héroes, de la que se tiene un recuerdo envuelto un poco en la mitología. La aparición de la escritura va directamente unida desde el primer momento a la legitimación dinástica. El hecho de que enseguida aparezcan esto que epigráficamente en Egipto llamamos los cartuchos, que son símbolos con ideas pictográficas que atribuyen a cualidades o que remiten a cualidades del faraón, indica que la escritura no sólo es aunque el Estado tenga una base económica, no sólo es una escritura de base económico como las tablillas o los cilindros sellos sumerios, sino que hay también una representación de la realeza, que es una de las instituciones, la faraónica más estable en Egipto. En segundo lugar, otro rasgo, además de esa base económica de la evolución histórica, es el desarrollo progresivo al ritmo de la explotación. La explosión productiva, es decir, Egipto, Heródoto llegó a decir que era un don del Nilo porque era el que fertilizaba las riberas y el que daba a ese espacio una fertilidad, por así decirlo, extraordinaria a los ojos siempre de un griego que siempre veían esas casas de tierras tan condicionante. Bueno, pues lo característico es que cuando el reino madura, y eso se ve muy en el Reino Antiguo, es porque los medios de colonización territorial y la actividad agrícola, bueno, pues ha desarrollado el hecho de que a partir de Snefrú, de Zóser y luego con Keops, Kefrén y Miquerino se construían esos grandes monumentos después del período de esos enterramientos predinásticos o del dinástico arcaico de Abidos o de Hierakómpolis, donde están un poco los primeros templos y la idea de unidad. Bueno, pues que se construían esos grandes monumentos funerarios piramidales con la inversión tecnológica o técnica arquitectónica que eso supone indica que el Estado tiene capacidad económica y ya hemos dicho que el crecimiento se produce, por así decirlo, al ritmo de la vida productiva. Pero ya también en el Reino Antiguo una característica prácticamente desde el paso de la dinastía cero cero a la dinastía uno y dos, con los períodos de unificación Tinis y Hierakómpolis, después con el mayor protagonismo de Memphis, que se mantiene durante todo el Reino Antiguo y con el propio primer período intermedio, ya se percibe que el verdadero problema de Egipto va a ser bueno, pues la amenaza constante de la inestabilidad política por las crisis internas, por las crisis sucesoras. Por las historias, por las usurpaciones o por las transformaciones, como hemos dicho antes, de carácter territorial. El gran mérito del Reino Antiguo, desde Narmer, pero sobre todo con los tres faraones clásicos, que también lo son desde el punto de vista desde el punto de vista artístico y político, Keopskefen y Mikerino, entre la cuarta y la quinta, es la forja definitiva de una idea del poder. Y fijaros, también os lo explica muy bien en este párrafo. Una idea del poder en la que la teocracia, la legitimación por vía divina tiene mucha importancia. No se trata sólo de que el faraón sea representado como un hijo de Ra y que actúe, por tanto, como un hijo de un dios, sino que en la estatuaria, en las actitudes, en cómo se le presenta, van también unidas una serie de funciones asociadas a la idea de poder. En la clase siguiente, cuando hagamos un desglose de la sociedad y la política faraónica, las principales funciones del faraón, veremos que una de las fuentes principales para conocerlas es la iconografía y ver al faraón en distintas actitudes, administrando justicia, dirigiendo los legados de los templos, dirigiendo las obras, las obras públicas, repeliendo al enemigo, controlando las existencias del almacén. Pues bueno, vemos esa imagen del rey sacerdote, del rey constructor, del rey legislador, que es bastante moderna para lo que veíamos en el Próximo Oriente, donde el rey legislando sólo aparece a partir de la tercera dinastía de Ur, por tanto ya viene entrado el tercer milenio antes de Cristo. Junto con la idea de poder que aparece con los primeros reyes y con la propia autorrepresentación de esos primeros reyes, aparece un elemento muy característico que va a ser responsable de la crisis del primer período intermedio, que es toda la aristocracia provincial. Aparecen dos niveles dentro de la administración egipcia, la administración faraónica, que es la administración central y la administración provincial, que es la administración territorial. En la administración faraónica, la administración central, el faraón y su visir, que es una especie de primer ministro, que ya desde la cuarta y la quinta dinastía, pues bueno, lo vemos acumulando bastante función delegada del faraón, supervisa el tesoro, supervisa las obras públicas, en fin, supervisa también la corte imperial o la corte faraónica. Y luego, en otro nivel, aparecen todos esos individuos con encargos en provincias que van poniendo de manifiesto el papel que a partir de ese momento van a tener los nomarcas, los gerentes o los gestores, mejor dicho, de los nomos. Fijaros, de hecho, el término nomarca, que es un término griego en su variante egipcia, que no recuerdo ahora como se llama, significa el gestor de los canales. Y al faraón también se le atribuye desde este momento, en esa teología de carácter solar, la idea de gestor del maat. ¿Qué es el maat? Bueno, pues el maat es un principio, escrito con dos aes, es un principio básico de la teología más antigua egipcia que equivale, por así decirlo, al orden cósmico. ¿Cuál es la gran responsabilidad del faraón? Gestionar maat. Maat es, bueno, pues todos los elementos que garantizan que el río crezca cuando tiene que crecer, que el equilibrio estatal de base económica está garantizado, que las provincias no tienen más peso que el resto. Con una teología de esa característica en la que, como se explica ahí, el poder del rey está vinculada a la gestión de maat y a distintas divinidades, Ator, Horus, Horá, Horus, Horá. Lo lógico es que cuando haya períodos de inestabilidad se señale al faraón como culpable, por así decirlo, y eso facilita también las usurpaciones. Esto en la historia del arte se ve muy bien, porque en la medida en que se construyen algunas de estas primeras pirámides, en torno a las pirámides se entierran con pirámides subsidiarias, con hipogeos más simples. Toda esa élite de la administración central o de la administración territorial que quiere parecerse al faraón, que quiere imitar esos privados, que quieren imitar el poder del faraón. Las funciones de faraón, visires y no marcas en cierta medida remiten a un modelo, valga la redundancia en este caso, de sociedad piramidal que está articulado en este momento y en el que se ve muy bien cuáles son las áreas estratégicas de poder. La capital del estado, Tínis primero, antes ya era Cómpolis o Abidos y finalmente, sobre todo en la mayor parte del reino antiguo, Memphis, la administración central, los archivos reales. De ahí el papel, ya lo veremos, que van a jugar desde el primer momento, casi desde las necrópolis reales de Abidos o del templo de Hieracómpolis, los escribas, que son los que controlan la información oficial y luego las casas de administración de justicia. Es un momento en el que la idea de propiedad en el reino antiguo está extraordinariamente marcada. La tierra habitualmente se presenta como tierra del faraón, que la arrienda a individuos para su gestión. Y de hecho, la mayor parte de los propietarios delegados del faraón son, por ejemplo, los templos o las fundaciones privadas que surgen en el entorno de algunos templos. La inestabilidad dinástica que surge a partir de la séptima dinastía y hasta la décima, en el que la administración provincial se hace bastante grande y tiene casi más peso que la administración central y en el que, fijaros en el segundo punto, determinados cargos tanto de la administración central, el visir, como de la administración territorial, el nomarca, se hacen hereditarios, es decir, se convierten casi en derechos adquiridos para su transmisión. Todo eso pone de manifiesto un periodo de crisis, de inestabilidad, que rompe en cierta medida el gran mérito de los primeros momentos del reino antiguo, que había sido unificar el junco y la abeja, como dicen los egipcios, unificar el Alto y el Bajo Egipto en torno a un solo poder. El periodo intermedio es un periodo de atomización frente a esa unidad que había caracterizado, sobre todo entre las dinastías segunda y la dinastía sexta. Es por tanto un periodo de fundación estatal, un periodo de ideologización pensada en la lista real de Sumer, en los primeros mitos sumerios, también la teología menfita, que es la teología del poder y de la muerte que se configura en este momento, se hace para legitimar ese nuevo poder. Pero también es una época de inestabilidad si no fronteriza, si al menos interna, aunque determinadas regiones van obteniendo más poder que el centro. Esa lucha centro-periferia va a ser bastante constante en la historia de Egipto, incluso después durante el periodo romano. Reino medio. Bien, fijaros, las claves del reino medio, que las tenéis ahí arriba, junto al título de la diapositiva, en realidad se entienden bien cuando uno analiza la que ha sido la puerta de entrada al reino medio, que es el primer periodo intermedio. Si el primer periodo intermedio ha sido un periodo de disgregación, el reino medio va a ser un periodo de gran centralidad, de gran centralización del faraón, que trata de controlar el poder, aunque obviamente necesita a las autoridades no marcales, a los responsables de cada uno de los distritos para gestionar desde el punto de vista territorial, bueno, pues cada uno de esos centros en los que se dividía o regiones en los que se dividía la gestión del territorio egipcio. Si una consecuencia del primer periodo intermedio, que hemos visto que era esa acumulación de poder, pues bueno, con un poco en los grupos periféricos. Si una consecuencia es el mayor centralismo, también podemos decir que desde el punto de vista ideológico, de legitimación teológica del poder y de representación incluso pública del faraón, una característica básica del reino medio es el gran clasicismo institucional. Os lo dice ahí en el tercer punto, pero yo de gran clasicismo, bueno, también en la arquitectura, el papiro de Sinué, por ejemplo, está inspirado en la célebre novela es de este funcionario de provincias de este periodo. Pero bueno, está en el templo de Karnak, de Luxor, en fin, la arquitectura templaria más que la funeraria, que en pirámides tiene su cénit en las construcciones del Reino Antiguo y en templos y en hipogeos tendrá su cénit en el Reino Nuevo, con el Valle de los Reyes, las reinas, en fin, que conocéis bien. Aquí, en este caso, las construcciones templarias son muy importantes. Esto también tiene una consecuencia o nos da una pista también de cómo es el poder en este periodo. Si hemos dicho que el Reino Medio es una reacción a la desmembración del Imperio Medio, ¿por qué se hacen los templos? Los templos son sobre todo lugares de administración de justicia, lugares por los que el faraón desfila para administrar justicia en el territorio, con lo cual en este momento el faraón vuelve a controlar la tierra, vuelve a controlar la actividad edilicia, vuelve a controlar la actividad política. Está además, lo veis ahí en esos relieves de la decimotercera o la decimocuarta dinastía a la vanguardia del ejército, cuando procede en conflictos con el exterior, por ejemplo, la llamada entrada de los asiáticos se le representa también a veces a la manera divina. Fijaros en el punto segundo de la parte superior, renovación religiosa en Amon-Ra y en Osiris, divinidades a las que se asemeja el faraón para dar sensación, por así decirlo, de unidad. Ese clasicismo se transmite sobre todo en el clasicismo arquitectónico de las grandes ciudades, sobre todo Memphis y Tebas. Tebas en los periodos más antiguos y Memphis ya hacia el final del Reino Nuevo y en el Reino Medio y en el segundo periodo intermedio y de nuevo la renovación de la articulación territorial, aunque aquí con un cierto olvido del territorio. Hasta al menos la decimoquinta dinastía y esos tres años en los que se abre el tercer periodo intermedio, en los que de nuevo hay un protagonismo bastante notable de las provincias o al menos de los distritos. Básicamente, desde el punto de vista político en el Reino Medio, Egipto sigue siendo faraón, nomarca y alcalde, una figura importante. Los gestores de las ciudades que organizan la actividad económica de cada una de esas ciudades, pero en todos esos niveles, tanto de la administración central como en la administración provincial. Los dos grandes ejes institucionales son el palacio y el templo. El templo lo habíamos visto, aunque había una profunda teocracia en el poder, lo habíamos visto todavía un poco oculto en el Reino Antiguo. Pues en este momento en el Reino Medio, el templo, como hemos dicho para esas giras judiciales del faraón, etcétera. Pues empieza a tener muchísimo poder. ¿Qué pasa en la dinastía décimo quinta y prácticamente desde la décimo tercera, que son los periodos intermedios o el segundo periodo intermedio? Pues que empiezan a penetrar en la aristocracia, sobre todo provincial, los Ixos, una serie de individuos llegados del exterior. No se sabe muy bien realmente sobre su identidad. Que al final dividen Egipto en varias regiones. Los nueve primeros nomos, entendiendo los más meridionales controlados por los Ixos, Nubia, la última región meridional como la más independiente, absolutamente independiente y el Alto y Bajo Egipto controlados por el faraón de Tebas. Por tanto, un Egipto totalmente compartimentado. Fijaros esto que puede parecer en un estado tan unitario como Egipto. Esto, ¿cómo se entiende? Pues fijaros a qué corresponde cronológicamente la segunda parte del segundo periodo intermedio de la historia de Egipto, a todo ese periodo en el que de nuevo veíamos una atomización de ciudades en Mesopotamia repartiéndose el poder territorial, Ur III, Sisín, Larsa, Mari y finalmente la restauración babilónica de Hammurabi, que no es más que poner a Babilonia en la cumbre, por así decirlo, de las ciudades del territorio sumerio, de las ciudades del territorio en este caso, bueno, de la Mesopotamia central, más que propiamente Sumeria. La reacción, obviamente, ya veis que es como acción-reacción la historia de Egipto, ¿no? La reacción a esa descentralización va a pasar con el Reino Nuevo, ¿no?, que va a ser, al menos en este periodo, hasta el tercer periodo intermedio, dinastías XVIII, XIX y XX. Fijaros Nefertiti, Tutankamón, los grandes colosos de Abu Simbel, del Valle de los Reyes, de las Reinas, de Memnon, bueno, pues todas las obras de arte de referencia de la arqueología egipcia. Bueno, pues va a ser un periodo que en las primeras dinastías se caracteriza por un florecimiento y restauración de ese clasicismo. Los reyes tienen un gran poder a partir de una herramienta que en torno al 1700 hemos visto, se os decía de hecho aquí, ¿no?, que había empezado a ser utilizada en el Próximo Oriente, que es la diplomacia y precisamente Egipto es un estado que se da bien con el Imperio Itita, con el Reino Urrita de Mitanni, con Cardunias, que es la Babilonia ocupada ya por los casitas. Bueno, son como los últimos destellos de un estado bien organizado que mantiene, por así decirlo, la unidad al menos hasta el Tratado de Cádiz en el que ya se percibe una renuncia, por así decirlo, de Egipto a sus áreas de influencia en el norte, a sus áreas de influencia al norte de Siria. Y una especie de mantenimiento del status quo clave entre Mitanni, hititas y egipcios. Precisamente como es además un período de tremendo contraste, pero que arranca entre las dinastías XVIII y XX con una cierta estabilidad. Fijaros, surgen algunas instituciones de las que no teníamos mucho conocimiento en las fuentes anteriores, por ejemplo, el papel del ejército en el Tratado de Cádiz, que habéis analizado en la PEC. Se habla de las condiciones de ese pacto, de episodios también de extradición, de campañas militares. Fijaros también que se habla aquí de algunas expediciones con Amenofis I y Amenofis y con Camose a la zona de Nubia. También empieza a tener una gran importancia el comercio, por ejemplo, con la zona del Mediterráneo Oriental, en torno a Creta. También con la representación del faraón como un personaje peremne que garantiza la estabilidad del Estado. Fijaros, por ejemplo, en los apelativos que acompañan algunos de los faraones del momento. Tutmosis I, el amado de Maat, es decir, que ese equilibrio cósmico ama al rey porque el rey sabe gestionarlo adecuadamente. El feliz en años, los llamados templos de millones de años, que era una idea que empieza a surgir en este momento y que en cierta medida revestía o reivindicaba la idea de peremnidad del Estado, de estabilidad. Y luego también un elemento que quizás es importante y sobre el que también hay su particular mitología en la iconografía y en el arte, que es el papel de las princesas y de las regentes, Hatshepsut, Nefertiti, Nefertari. Que ponen de manifiesto cómo en determinadas líneas sucesorias la mujer empieza a tener una cierta importancia, pensada en el valle de los reyes y de las reinas separadamente, que se construye también en este momento como ejemplo. También es un momento en el que la administración central se hace tan fuerte, se hace tan solemne, que llegan a aparecer incluso varios visires, hasta tres a la vez, auxiliando la labor del faraón y repartiéndose los archivos, el ejército, la administración de justicia, la gestión de las obras públicas y de la economía pública. En fin, hay toda una tendencia progresiva a articular el Estado con un capítulo, por así decirlo, centralista. La fase inmediatamente anterior al tercer periodo intermedio se produce ese cisma que sustituye el culto de Ra por el culto de Atón, perdón, la primacía de Amón por la primacía de Atón y que pone de manifiesto con el traslado de la capital a Amarna un nuevo periodo sobre el que siempre se discute su incidencia en la política, en la política territorial y también en la gestión religiosa o del hecho religioso. Si realmente es un paso bueno, pues que caló más allá de la propia iconografía. O bueno, fue realmente una revolución cultural. Como se os dice ahí, probablemente se quedó más en esto que en otra cosa. Y desde el punto de vista político, pues tampoco fue un cambio que tuviera especiales consecuencias para la población. Sin embargo, fijaros en torno a finales del del Reino Nuevo, en la decimoctava dinastía se produce la represión por parte de los ramésidas del primero tratado de Cádiz. Esta paz con Hatti y luego la represión repulsa a los pueblos del mar. Aquí en realidad está este párrafo tendría que estar al principio porque es posterior en el tiempo a la reorganización de Tutmósis I o al renacimiento constructivo de Hapsesud. No es como el último hito de resistencia al exterior, que se ve muy bien en ese templo de Medinet Habú en la decimoctava dinastía. A partir de ahí se abre un periodo en el que hay una agitación política constante con momentos de capitalidades dúplices. Tebas, Saís, por ejemplo, y en el que en definitiva Egipto entra ya en la órbita de los grandes estados del Próximo Oriente Antiguo que tenemos alrededor. Básicamente Asiria, los persas y finalmente después en la llamada Baja Época, que fijaros que ya es siglo VIII a.C., la irrupción de el imperio persa primero y posteriormente el mandrino y el helenístico, el tolemaico, como habitualmente solemos llamarlo más tarde. Con lo cual, repasando todo lo dicho, reino antiguo, periodo de maduración y de inicial teología del poder, unas bases estatales muy semejantes a las que hemos visto para el mundo sumerio, con un rey preocupado sobre todo por su proyección política y por la base económica del poder, con una explotación del territorio muy activa que hace que determinadas regiones en la periferia tengan mayor importancia. Un primer periodo intermedio que hace que los primeros momentos del Reino Medio sean momentos de recuperación del pulso a las instituciones tradicionales egipcias, tratando en cierta medida de mantener la estructura del faraón y dejarse un poco de ciudades y de provincias en el que también se produce al final una ruptura por la invasión. En este caso, no tanto. Final del Reino Antiguo tiene más que ver con una crisis interna. Al final del Reino Medio tiene que ver con los Ipsos y por tanto con un episodio de inmigración exterior y de alteración fronteriza en el que, bueno, pues en definitiva se cuida menos el territorio y lo que se hace es estabilizar el poder central del faraón. Y un reino nuevo en el que sobre todo las dos primeras dinastías 18-19, por ende manifiesto como Egipto tiene muy articulado el sistema sucesorio de reclutamiento. Es el estado maduro, la madurez estatal egipcia, pero entra ya dentro de esa órbita segunda mitad del segundo milenio, un poco de la no agresión, del no crecimiento, una paz con Hattusa es que en cierta medida deja tanto a Hattusil como a el faraón en una posición de no agresión, pero tampoco bien parada y que pone en manifiesto la debilidad. De estos pueblos y bueno, pues que mete a Egipto dentro de esa línea del colapso territorial y demográfico típico. Lo tenéis también aquí. En uno de los mapas que vi antes. Típico de la segunda mitad del segundo milenio. No fijaros como entre el 1600 y el 1200 antes de Cristo, pues bueno, arameos asolando la costa de Siria, huida de los hebreos hacia el territorio de Canán con la lucha a su vez con los filisteos, que son uno probablemente de los pueblos del mar, invasión de los pueblos del mar tanto en Anatolia como en la parte meridional de los principados hititas, como en Chipre y en el Delta, donde son impulsados entradas también de los libios, irrupción de los nubios. Bueno, pues toda esta movilidad que afecta a los grandes poderes del momento. Jatusas, Asiria y Mitanni, las ciudades costeras fenicias que ya explicamos en la semana pasada, sobre todo en la parte norte de la Franja de Siria de Palestina y Egipto.