Bueno, vamos allá. Razonamiento condicional. ¿Qué le pasa al razonamiento condicional? Tenemos que hablar del razonamiento condicional. Solo vamos a ver dos cosas, el razonamiento condicional y el bicondicional. El razonamiento condicional es sí entonces, entonces es una implicación material. El razonamiento con el bicondicional es una equivalencia material. Entonces hay que separar eso tranquilamente, tranquilísimamente. Es un poco lo que vamos a ver luego. Voy a poner un café. Aquí vamos a ver, se dan los cuatro. La primera, Pepis, así que va a ser en paro, entonces estudia un máster. Pepa se queda en paro, estudia un máster. Se dan el modus ponens y el modus tollens. Pepa no estudia. La única diferencia es que en la segunda premisa, Pepa no, o sea, el consecuente, Pepa no estudia un máster. Esa es la diferencia. Por lo tanto, no se acuerda. Si se queda en paro, estudia un máster. No estudia un máster, por lo tanto, no se queda en paro. Vamos a ver las dos afirmaciones falsas. Esta es la tabla básica del condicional. El modus ponens es válido. Si en el mueble están las llaves, entonces está la cartera, la segunda premisa. Están las llaves, está el T. ¿Vale? Lo concluimos con Q. Modus ponens. Modus tollens. Simplemente la segunda premisa va negada, va negada la conclusión. Si en el mueble están las llaves, entonces está la cartera. No está la cartera, por lo tanto, no están las llaves. ¿Vale? ¿Qué cosas no podemos hacer? Afirmación del consecuente. Es un argumento inválido. Negación del antecedente. El mismo ejemplo. Si en el mueble están las llaves, entonces está la cartera. Aquí no podemos decir Q. Entonces. ¿Es P? No, es falso. Está la cartera. ¿No? Sí. Estamos con un enunciado condicional. Donde hay una implicación material. No equivalencia. En bicondicional esto sería verdadero. La afirmación del consecuente, la negación del antecedente, solo pasa en el condicional. O sea, solo es falso en el... En el condicional. En el bicondicional es verdadero. No ocurre en estas. Pues, básicamente es un poco esto lo que vamos a ver. Modus ponens, válido. Modus tollens, válido. Afirmación del consecuente, no válido. Negación del antecedente, no le tocó la lotería. Luego no se compró el ordenador. No podemos llegar a esa conclusión. Aquí sí. Si Juan le toca la lotería, se compra un ordenador. No se compró el ordenador, luego no le tocó la lotería. Es el modus tollens. En la negación del antecedente, estamos negando el antecedente en la segunda premisa. Que no le tocó la lotería. Pero no podemos concluir que si se compra o no se compra. Si le toca la lotería, se compra un ordenador. Le tocó la lotería, se compró un ordenador. El modus ponens. Si no se compra un ordenador, es que no le tocó la lotería. Esos son válidos. Pero no puedo decir que Juan se compró un ordenador y por ello inferir que le tocó la lotería. ¿Vale? Y en la negación del antecedente, como no le tocó la lotería, no se compró el ordenador. Tampoco es válido. Y esto es lo que tendrán el bicondicional. Este es el bicondicional. Es igual, es parecido. De hecho, en la PES tenéis unos ejercicios 3, 4, 5, 6 al final. Que tenéis que definir, que tenéis que poner ahí la tabla de verdad. ¿Ves? Y esto ya no me interesa tanto. ¿Por qué? Porque ahora vamos a ver el tema. Porque estamos hablando un poco de la PES. No os voy a hablar ahora del modelo de reglas mentales, modelo de revisiones, modelo de top. Los que están hablando del bicondicional, el bicondicional ahí peleándose unos con otros. ¿No habéis firmado todo? Dejadme que me mire mi chuleta. Ah, sí. Yo quería... A ver, no quiero aburridos, ¿eh? Pero, ¿dónde estamos? Bueno, en la 76. ¿Dónde va, loco? Que yo hago una presentación que está aburrida a los... Ah, aburrido. Esto sí os va a entrar en la PES. ¿Vale? Que es... Razonamiento de reductivas, que ya no lo veo, ¿eh? Permite pasar unas premisas. ¿Vale? Sí, estamos hablando del razonamiento. Permite pasar... Pasar una información a otra. Puede ser reductivo, para unas premisas y una conclusión. Reductivo, las conclusiones se siguen necesariamente a las premisas. ¿Son verdaderas o falsas? En el deductivo hay verdad o falsidad. En el inductivo solo es más o menos... Están apoyadas con una probabilidad, más o menos probable. ¿Vale? El deductivo está en progresión de dirección hacia abajo y el inductivo hacia arriba. Metáfora direccional de Platón y Aristóteles. Y luego... Vale. Validez. Cuando es deductivo hablamos de validez. El razonamiento es deductivo. Pero el inductivo es de fuerza inductiva. Un argumento deductivo es válido si es imposible que su conclusión sea falsa siendo sus premisas verdaderas. La verdad de las premisas garantiza la verdad de la conclusión. El inductivo es fuerte. ¿Cómo? Solo si es improbable que su conclusión sea falsa cuando se ha dado cuenta de que la conclusión es falsa. Las premisas son verdaderas. Por lo tanto, aquí las conclusiones son más o menos probables. ¿Vale? El deductivo. La proposición. Un enunciado donde se afirma o se niega algo. Dos premisas y una conclusión. Es lo que vamos a hacer. ¿Cómo se escribe? La I se escribe con una V boca abajo. La O con una V boca arriba. La negación. Un palote ahí. Y el condicional, flecha y bicondicional. Esto es lo que vamos a ver. Un poco más y ya lo vamos a... Ah, sí. Y tenemos que hallar las reglas. ¿Vale? Reglas comunicativas. Modus ponen, no pones. El mando se niega. Reglas de la firma hipotético, definitivo, etc. Y las tablas de verdad. Tablas de verdad. No. Estas no. Ejemplo de diferencia válida del modus. Tenemos que identificar. Este es el modus ponendo pones o el modus ponendo toles. O aquí, la falacia de la firmación del consecuente o la negación del antecedente. Y vamos a ver. Bien, decimos. Ya, ya no. Ya no. Ya sí. Vamos a ver esta diapositiva. ¿Cómo la vamos a ver? Vamos a ver esto. Hay que leerlo. Capítulo, definitivamente, el capítulo 2 y el capítulo 5. ¿No? Es lo que hemos hecho, ¿verdad? Vale. Procedamos. Hermano. Vamos a hacer un análisis comparativo entre razonamiento conductivo y deductivo. Inductivo, deductivo e inductivo. Luego, vamos a identificar el operador que domina en esa agrupación de proposiciones y a formalizar las premisas y conclusiones de un argumento según la notación. Identificar en un argumento la regla de inferencia que hemos utilizado. Identificar la regla de premisas en una deducción. Determinar si la validez de una inferencia utilizada en un operador es falsa. E identificar el tipo de falacia, si es verdadero o es falso. Y hacemos un comparativo del condicional y del bicondicional. Vale. En esta tabla te presentan un análisis comparativo. Entre el razonamiento deductivo y el inductivo. Hay que completar unos datos. De todas maneras, si miráis, es sencillo. La metáfora direccional del razonamiento es un procesamiento dirigido hacia abajo. El deductivo es hacia abajo. Porque vamos de lo general a lo particular. El argumento es válido solo si es imposible que su conclusión sea falsa cuando sus premisas son verdaderas. Y las conclusiones son tautológicas. ¿Por qué? Porque sólo comprende la información que viene ahí. No me da más información. Que viene expresada en las premisas. Por lo tanto, la verdad de las premisas garantiza la verdad de las conclusiones. ¿Estamos de acuerdo? Por otro lado, un razonamiento inductivo en la metáfora direccional del razonamiento es un procesamiento dirigido hacia arriba. ¿Por qué? Vamos de lo particular para llegar a lo general. Si tenemos un tipo de manzana concreta, tenemos que llegar a la categoría manzana. Y aquí en el razonamiento inductivo, el argumento es fuerte solo si es improbable que sea falsa su conclusión, si es de sus premisas verdaderas. Y las conclusiones en el razonamiento inductivo son probabilísticas. ¿Por qué? Debido a que va más allá de lo que se expresa en las premisas. ¿Y las conclusiones cómo son? En el otro eran válidas o no. Aquí son más o menos probables, dependiendo del grado en que se encuentren apoyadas por las premisas. Vamos a ver, pasamos al siguiente. Si hago dieta P, entonces perderé peso y haré ejercicio. ¿Qué domina ahí? Es el condicional. Si P, entonces Q. Me lo indica la flecha, ¿verdad? Y además, ponemos la V poco abajo. Y R. Y el consecuente del condicional en este caso es Q y R, ¿no? ¿Vale? Segundo, si hago dieta P, entonces perderé peso, Q. Y hay coma, hay una coma muy importante. Y haré ejercicio. ¿Y cómo lo representamos? Si hago dieta, entonces perderé peso. Eso va entre paréntesis. Y además, haré ejercicio. ¿Qué domina? En este domina la conjunción, la I. Si hago dieta, entonces perderé peso. Y el consecuente del condicional, ¿cuál es? No es Q y R. Es Q. La condición es, perdón, perderé peso. Siguiente. Si hago dieta P o hago ejercicio O, he dicho O, Q, entonces perderé peso. Y ahí lo tenemos representado. P. P arriba es la distintiva O. P o Q, entonces perderé peso. Domina el condicional. ¿Y cuál es el antecedente del condicional? Es P o Q. Claro, los dos. Se lo he puesto en una distintiva. Haré dieta P o si hago ejercicio Q, entonces perderé peso. P. Haré dieta P o paréntesis. Si, entonces. ¿Dónde tenemos el si, entonces? Lo tenemos dentro del paréntesis, Q, R. Entonces perderé peso. Domina la distinción. Lo mismo que antes dominaba la conjunción. ¿De acuerdo? Dominaba la conjunción. Está el condicional, pero hay más cosas, ¿no? Vale. Entonces aquí domina la distinción. Y el antecedente del condicional es... El antecedente es Q, porque es QR. El Q es el antecedente, R el consecuente. Si hago ejercicio, perderé peso. Ahora vamos a ver cómo tenemos que explicar esto. Esto es un poco lo más curioso. Me gusta esquiar y me gusta nadar. Primera premisa, conclusión. Me gusta esquiar. Me gusta nadar. ¿Qué reglas estamos utilizando? Ustedes van aquí a la... No, del tema 2. ¿Dónde está ahí el tema 2? ¿No? Pues... Nos ponemos ahí los 12 tablones de la ley delante y empezamos a ver. ¿Qué reglas estamos utilizando? Pues aquí las tenemos. P y Q. Utilizamos la regla de simplificación. La 2. ¿Voy al trabajo en coche? Conclusión. ¿Voy al trabajo en coche o voy al trabajo en autobús? P. Primera premisa. P o Q. ¿Qué tenemos ahí? Mira, se parece a la 4, a la ley de adición. ¿Tienes ahí el libro? No, no, yo lo tengo. Yo también lo tengo, pero... Lo tengo para ti. Para tenerlo delante y comprobarlo. Bueno, creáis lo que yo os digo, yo os prometí. Yo soy un humano y soy propenso a... A barrecharlo todo. No digamos mentir. ¿Y la primera pregunta? La primera pregunta es... ¿La primera conclusión? ¿La segunda? ¿La tercera? Ah, sí, perdón. La conclusión 2 es Q. Sí. La conclusión 2 es Q. ¿Verdad? No. Sí, sí, es Q, claramente. No lo hice deprisa y no... La premisa es Q. ¿Qué hay Q en Q? Vale. Voy al trabajo... Hemos dicho que es la adición. O voy... O voy P. O Q. Y luego en la segunda... En la conclusión voy a trabajar en un coche o en autobús. Eh... Si yo me cojo el paraguas, ¿yo he visto? Cojo el paraguas. Bueno, es un modus... Modus ponendo ponens. Y es P y Q. Vale. Si preparo la asignatura, ¿aprobaré el examen en junio? Aprobaré... Si aprobaré el examen en junio, no estudiaré en vacaciones de verano. Conclusión. Si preparo bien la asignatura, no estudiaré en las vacaciones de verano. Esta la buscamos y la encontramos igual... La ley del silogismo distintivo. Perdón. Hipotético. I-P-O-T-E-Q-U-R-T-E-R. Eh... 5. No es el caso que Alicia no se vaya a presentar en el examen. Negando, negando, negando... Llegamos a la doble negación. La 6. Si hace frío, me pongo el abrigo. No me pongo el abrigo. No hace frío. Negando la segunda premisa. Modus ponendo ponens. La 7. Nieva. Hace frío. Nieva y hace frío. ¿Dónde está la suma? A función. Nieva y hace frío. Hemos sumado. Se puede ocultar en la conclusión y el orden es indiferente. La 8. ¿Te llamo por teléfono o te envío un mensaje? Te envío un mensaje o te llamo por teléfono. Te llamo por teléfono y te envío un mensaje. Te envío un mensaje y te llamo por teléfono. ¿Vale? Leyes conmutativas. T-I-Q o T-O-Q. Cualquiera de las dos. En la 9 tenemos la ley del logismo disyuntivo. Que dice... Si voy a las vacaciones iré a la montaña o a la playa. Si voy a la montaña... Entonces iré a Pirineo. Ay, yo le doy más calidad. Vamos bien, ¿no? ¿Estás tomando nota o algo? ¿Por cuál vamos? Me he perdido. Decimos la 9. T-I-Q. Si en las vacaciones iré a la montaña o a la playa. Si voy a la montaña iré a Pirineo. Si voy a la montaña entonces iré a logismo. Si logismo disyuntivo. Si voy a la playa iré a Santander. En las vacaciones iré a Pirineos o iré a Santander. U-S-R-O-S. O voy a los Pirineos o voy a Santander. La 10. ¿Matricularé en psicología o en trabajo social? No me matricularé en trabajo social. Me matricularé en psicología. Modus tolendo ponens. Hay dos premisas unidas por la disyunción y se desniega una, entonces se puede concluir la otra premisa. Vale. Y luego nos queda... Sí, solo si termino el grado en psicología ejerceré como psicólogo. Conclusión. Si termino el grado en psicología, ejerceré como psicólogo. Y si ejerzo como psicólogo, habré terminado el grado en psicología. P, entonces Q. Y Q, entonces P. Ley de las proposiciones bicondicionales. Aquí las tenemos. El número 8. Aquí vamos a aplicar reglas de premisas. Lo mismo. Tenemos que averiguar... Si Lucía tiene un seguro médico, entonces no tiene que pagar la consulta. Lucía tiene un seguro médico y asiste a consulta. Lucía tiene un seguro médico, por tanto no tiene que pagar la consulta. Estamos en las reglas de premisa. Perdón. Se puede concluir P y se puede concluir Q. Si Lucía tiene un seguro médico, entonces no paga consulta. Tiene un seguro médico. Tiene un seguro médico, por tanto no tiene que pagar la consulta. P y Q. Si Lucía tiene un seguro médico, entonces no tiene que pagar la consulta. Se deberían ser incondicionales. Tiene un seguro médico y asiste a consulta. Yo creo que así me ha ayudado un poco. ¿Por qué? Porque la primera es, si Lucía tiene un seguro médico, entonces. Sí está. Entonces, en la regla de simplificación no me aparece. Por lo tanto. Lucía tiene un seguro médico, tiene un seguro médico y asiste a consulta. Asiste igual me la. No la tengo tan clara. No, el Modus Toledo Tolens no es. El Toledo Ponens tampoco. Ponen de ponen. Ese es un rey del cirujismo. Vale, vamos a ver la siguiente. No voy a mirar la regla de simplificación. Premisa 2 es alimento 1. Premisa 1. Si practico una detección o hago ascenderismo, realizo actividades saludables. Con atención. O. Ascenderismo. Pues. Practico una detección y con atención. Realizo actividades saludables. Aclaro. Para el significado de la adicción. Ley de la adicción. Vamos a ver. O. Vale, sí o hago ascenderismo. Entonces, sí o hago ascenderismo. Ley de la adicción. Premisa 3. Esto no lo tengo demostrado. Es esta parte. Como lo hice el otro día. Pero ahora, ahora me está fallando un poco. Pues, ¿de qué decís? ¿La habéis hecho alguna? Esta. Pero esto es O. ¿Es? La adicción es la ley de la adicción. O una cosa. Sí, bueno. Sí, es la ley de la adicción. Es. Una cosa o otra. O. Si es todo lo otro. Si una premisa es cierta, entonces la disucción de esta. Y otra cualquiera también lo es. O hago ascenderismo o practico natación. Practico natación o hago ascenderismo. Ahora sí se parece a la ley de la adicción. Por tanto, realizo actividades saludables. La primera la voy a... Argumento 1. Error 2. Vale, seguimos que estamos yendo lentos. Son las 17.25. La 3. Doble negación. Esa está clara, ¿no? Si salgo antes de las 8 iré a hacer la compra. No es el caso que no salga antes de las 8 de trabajo. Por la premisa, salgo antes de las 8. Por tanto, iré a hacer la compra. Doble negación. Vale. Permite pasar una premisa única a la conclusión con la doble negación. Vale. Premisa. Si estudio tres horas todos los días y hago los temas de los temas que estudio. Aprobaré los exámenes. Sí. Regla de asunción. Si ambas premisas son ciertas, se pueden ocultar en la conclusión y el orden es indiferente. Si estudio tres horas todos los días, hago los temas de los temas que estudio. Y debajo habrá algo más. Me habéis firmado. Perdona. ¿Me diste la hoja? Vale, siguiente. Nos faltaba. Estudio tres horas todos los días. Vale, es la regla de asunción. Así lo entiendo yo. Tema. En el ejercicio 5. Ya estamos terminando, ¿eh? Ejercicio 5. Seis argumentos. Cuatro con implicación material o inferencia condicional. Si entonces dos de ellos con la equivalencia material, vale. Cuatro del condicional y dos con la equivalencia material. En la bicondicional. Entonces, debemos ver si es un enunciado condicional o bicondicional. Seleccionar la tabla de verdad. Señalar las columnas y decidir si es verdadero o falso. Te han dado hechos unas. Y ver cuál es la regla de inferencia. Vale, pues ahora sí vamos al tema 6. 5. ¿No ves como digo mentiras? Nada más que me doy cuenta. Y tenemos que ver si me toca la lotería, me compraré un ordenador, me toca la lotería. Por tanto, me compraré un ordenador. Entonces, tú vas a la tabla de verdad. Y a buscar. ¿Dónde está? Ah, estaban en el tema 2. Te han dado hechos las dos primeras. Solo tienes que rellenar. Las. Si es válido. Eso sí es válido, ¿no? P. La segunda premisa. Me toca la lotería. Conclusión. Me compro un ordenador. Si me toca la lotería, me compraré un ordenador. No me he comprado un ordenador. Por lo tanto, no me ha tocado la lotería. Es el modus collendo tollens. Buscas ahí. Modus collendo tollens. La tabla de verdad. Modus collendo tollens. Yo lo tengo aquí. Me falta algún. Entonces, me pasa el libro. ¿Vale? Metamos coin. Teas coin. A ver cuánto he hecho de menos a chiquito. Siguimos. Argumento tercero. Si me compra, si me toca la lotería, me compraré un ordenador. Me he comprado un ordenador. Por lo tanto, me ha tocado la lotería. No, no me lo creo. Me has comprado un ordenador, pero no te ha tocado la lotería. Es inválido. Es la afirmación del antecedente. Perdón. Afirmar el consecuente. Es la afirmación del consecuente. Y en el otro. Lo entendéis, ¿no? Si solo... Sí, solo sí. Este es un bicondicional. Me toca la lotería, me compraré un ordenador. Me he comprado un ordenador. Este sí es bueno. Es válido. Porque es el bicondicional. La implicación. Perdón. La equivalencia material. En el cinco. Si me toca la lotería, me compraré un ordenador. No me ha tocado la lotería. Por lo tanto, no me compraré un ordenador. Argumento inválido. Porque negar el antecedente y concluir es la falacia del... La negación del antecedente. ¿Entendemos? ¿Se entiende? Y en el seis, otro bicondicional. Sí y solo sí. Me toca la lotería, me compraré un ordenador. No me ha tocado la lotería, no me compraré un ordenador. Es válido. El bicondicional no tiene falacia de negación del antecedente. Bueno. Y ya luego tenéis que comparar esos argumentos y defender. Porque es implicación, porque es el bicondicional, porque es el bicondicional, porque es falso. En el ejercicio tres, una implicación material. Es un condicional. Implicación material. Y es una condición suficiente, pero no necesaria. Una condición. Si me toca la lotería es suficiente, pero no necesario para que me compre un ordenador. Me puedo... Si me toca la lotería me compraré un ordenador, pero me puedo comprar el ordenador por otras muchas razones. Distinta a lo que... A la lotería. Por tanto, no es válido afirmar el consecuente. Afirmar que si me compro un ordenador es que me ha tocado la lotería es la falacia de afirmación del consecuente. También lo tenemos en el cinco. Como es el tres y el cinco. El tres con la falacia de afirmación del consecuente. Y el cinco con la falacia de negación del antecedente. Pero no es necesario. Claro, nos falta la necesaria. El bicondicional sí. En el seis, equivalencia material del bicondicional. Como es una equivalencia material condición necesaria y suficiente. Sí, sólo si tal me compraré un ordenador. No me ha tocado la lotería. No me ha tocado la lotería, pues no me compré. Obviamente es eso. ¿Qué es eso? Un ordenador. Automanotas. No se ve en los ejemplos. Aquí la pantalla virtual no sale. Ya. No se ve en los ejemplos. Lo siento Yusko, pero... Estábamos viéndolo por la PEC. No tengo la... La PEC en subida a la plataforma. Se ha entendido. ¿Qué crees que me habrán entendido desde este caso? Nada. Me tienen bastante... Con lo que he hablado... ¿El dolor de cabeza está suficientemente elevado? ¿O necesitan que hable 5 minutos más? Ya, ya, ya. Yo tampoco. Lo tengo claro. Ni si voy a comprarme algún ordenador. Pero sí, es que lo siento. Llevo dos horas y media el trescuarto hablando. Pasito seguido. Y al que está a punto de empezar le da dolor de cabeza. Pues si no... Todo bien, todo bien, todo bien, todo bien. Acabamos de volver a la vida. Sí, sí. A ver. ¿Qué? ¿Esto? Sí. Es el tema 2. Veo en la pantalla... Veo a la pantalla. Lógico, razonamiento. Las reglas. Sí, estábamos mirando la PEC. Le quería decir, pero... Yo no puedo publicar. Yo la he hecho, pero yo no puedo... Entiéndeme. Además, se puede estar equivocado. Os puedo equivocar. Yo casi siempre me comprometo un poco a hacerla con vosotros. En mi pasado lo hice igual. No suele ser complicada. Lo que pasa es que esto es un material muy difícil, ¿eh? O sea, para meditarte en ello... Es que el cerebro dice... ¡No! ¡Eso no! ¡No! Y luego nada. Y luego se te escapa la idea. Sí, es un material duro de roer. Duro de roer. Pero bueno, está muy delimitado. Por eso le dije al que está en casa también... Que es localizar. Es lo que he hecho hoy. Lo hemos visto. El principio del tema 5. Lo que va a entrar. Condicional y bicondicional. El principio del tema 2. ¿Qué es lo que te entra? No te entra nada más. Acotas esas páginas. O resumen eso como trabajes. Y te lo puedes sacar en tu casa. No, hombre. ¿Sí? No, hombre. Esto lo ponen para la TEC. Yo no sé lo que van a poner en el examen. A mí no me lo preguntan. Ya les diría. ¿No? Ponerlo fácil. Que no. No pueden. Pero... Para la TEC sí, sí. Siempre se hace más difícil. En teoría. En diseño. Te ponen todo para que tú elabores ahí y tal. O no sé qué. Pero mirar preguntas de exámenes anteriores... Yo no sé lo que preguntan. Yo no he mirado. Ay, lo siento. Listo. No puedo seguir. Es una vacuna. Bueno, míratelo. A ver si te... Cuando lo cuelgues, te lo miras. A ver si te orienta un poco. ¿No? Es lo único. El único. Y no estoy parando. Luego me voy a informar. Bueno. Me voy a dejar con el cuidado. Es que soy... No sé, hay un... Mi pie se pervertió y... Uf. Toda la justicia. Tira. Me diste el plazo. Vale, pues. Lo grabé, ¿no? Sí.