Bien, pues muy buenas tardes. Vamos a comenzar la primera sesión de esta semana. Comentábamos ahora todavía a micrófono cerrado que esta semana tenemos dos sesiones en este centro. La de hoy, que acaba de empezar, y el viernes que viene, día 8, a la misma hora, porque adelantamos una de las sesiones, la única en la que teníamos previsto tener sesión del mes de enero. Con lo cual, al final de esta semana, habremos visto el Musteriense, el Paleolítico Medio, que vamos a abordar ahora, y el Solutrense, que abordaremos en la sesión del próximo viernes, que en cualquier caso también será emitida y grabada, y dejaré también el enlace con el material que ya he adelantado en la plataforma ALF en el curso virtual. Bien, nos toca abordar, como pasaba también en la última sesión que tuvimos, a propósito del HLNCE, un periodo dentro de la prehistoria importante y se puede decir que también bastante actual, en el que, como os dice el manual, contrasta bastante la visión tradicional histórica, por así decirlo, del Musteriense, del Paleolítico Medio, con la visión actual. Digamos que es uno de esos periodos que también, como algunos de los que veremos en las próximas sesiones, sobre todo cuando hablemos del Solutrense el viernes y también de los periodos transicionales hacia el Paleolítico Superior, en parte en la sesión del viernes, pues se trata de un ámbito que ha sufrido bastante rehabilitación desde el punto de vista investigador. Tradicionalmente, lo que llamaba la atención, la visión tradicional del Musteriense era la de ese periodo en el que se producía la gran revolución tecnológica en términos de la industria lítica, el origen, en definitiva, de las industrias sobre el asca y de las industrias que actualmente llamamos de modo tres, y eso quizá había dejado en un segundo plano el protagonismo que en ese proceso también tuvo que tener el Neandertal, que de hecho había sido visto además como una especie de bruto, de salvaje, que ha sido objeto de una progresividad. Una progresiva rehabilitación en los últimos años. Con lo cual, esa visión tradicional que era dependiente del gran invento del Musteriense es la revolución tecnológica, los sistemas de laminado y de lascado y en concreto una de las técnicas más popularizadas que es la técnica Levalois y un periodo en el que aparecía esa otra humanidad que llamamos el Neandertal que había sido normalmente caracterizada como un personaje bastante bruto, como he dicho antes, contrasta con cómo empieza a verse ahora mismo el Musteriense. Y en eso han tenido que ver, el manual señala como tres hitos en la investigación que han hecho que el Musteriense empiece a ser visto desde el punto de vista historiográfico con otros ojos. Primero, la constatación de que desde el punto de vista cronológico los límites entre el paleolítico inferior y el paleolítico medio, el Musteriense, no son rígidos y por tanto hemos de conceder un lugar a espacios en los que las industrias que se van desarrollando ya con la tecnología de modo 3 conviven con industrias de modo 2. Esas industrias con bifaces o sin bifaces que caracterizábamos para los periodos del achelense mediano. y del achelense superior. Esto es algo que en cualquier caso, bueno pues si mirábamos las habituales catalogaciones tecnológicas del Musteriense, pues bueno ya se había señalado cuando Bordes hablaba de ese Musteriense de traición achelense, todas estas piezas de la parte inferior de la lámina en la que efectivamente había muchas industrias sobre lascas y sobre láminas, pero seguían persistiendo algunos bifaces. Pero bueno, en los últimos años se ha reivindicado que los límites cronológicos del paleolítico inferior no son rígidos y que por tanto, segundo elemento, las tecnologías del achelense superior y del Musteriense que llamaríamos típico, caracterizado por esa panoplia que tenéis en pantalla y que conocéis bien por la asignatura de Prehistoria I, pues bueno, no serían elementos en los que existiera, una ruptura, por así decirlo, tan profunda. Además, ha habido una cierta discusión en la historiografía sobre hasta qué punto hay una separación, tanto desde el punto de vista tecnológico como desde el punto de vista filogenético, entre el Neandertal y el Heidelbergensis, entre el Heidelbergensis como propio de los estadios como el gran protagonista de ese periodo que entre hace 400.000 o 350.000 años antes del presente y 28.000, 30.000 años antes del presente denominamos como el Musteriense. En esa rehabilitación, en cualquier caso, el elemento, luego volveremos a hablar sobre él en la parte final de la clase, cuando hablemos de la subsistencia y de algunos elementos relacionados con la ritualidad, el elemento que más ha contribuido a la rehabilitación es el Musteriense. El elemento que más ha contribuido a rehabilitar el Musteriense en la península ibérica ha sido precisamente la rehabilitación de la figura del Neandertal, desde distintos puntos de vista. La constatación de probablemente algunos intereses simbólicos y espirituales del Neandertal, lazos familiares, artísticos o intereses de carácter cultural que rompen esa idea de una especie de animal de gran porte que podía competir con los grandes animales, que era quizá donde se ponía el acento en el análisis del proceso de dominización tradicional. También en esa rehabilitación del Neandertal ha tenido mucho que ver el estudio, que para la península ibérica además es determinante, de esos periodos en los que se produce el cruce entre Neandertales y Sapiens, necesariamente a un cruce biológico, que parece por algunas evidencias que ya comentaremos y que ya anticipamos que pudo darse, sino a una convivencia, a una coetaneidad entre unos y otros. Ese atractivo del tema de la extinción del Sapiens en la península ibérica, donde parece que se fueron refugiando los últimos Neandertales europeos y del triunfo del Sapiens, se produjo en ese periodo transicional Musteriense. Y eso ha contribuido a esa rehabilitación del Neandertal. También porque conocemos ahora mejor la filogénesis del Heidelbergensis, sobre todo a partir de la cima de los huesos y conocemos mejor el Neandertal a nivel incluso europeo, porque es un hallazgo que ha tenido bastante trascendencia por los Neandertales de la Cueva del Sidrón, un yacimiento de referencia. En lo que a la reconstrucción del ADN Neandertal respecta y, por tanto, muy implicado en esa rehabilitación de los Neandertales. Esta convivencia entre Neandertal y Sapiens, que ha contribuido a rehabilitar la imagen del Neandertal y el interés de la prehistoria por el Musteriense, también se ha beneficiado de que, de la misma manera que los límites filogenéticos y culturales entre la chelense superior y el Musteriense no son rígidos, se ha visto que tampoco son los límites entre el paleolítico medio y las culturas, sobre todo el gravetiense y el aurignaciense, iniciales del paleolítico superior. Eso ha hecho que, como suele suceder en la investigación en general de las ciencias históricas y de manera contrastada en la prehistoria, pues bueno, haya habido un mayor interés por el Musteriense que permite que ahora podamos hacer, que es lo que hace el manual, pues bueno, una mejor caracterización de cómo es el Musteriense en la península ibérica, que la haremos a continuación, una mejor periodización, que la haremos de manera sintética y también una mejor caracterización, a partir sobre todo del análisis de ese protagonista que es el Neandertal, una mejor caracterización de las formas de vida, ¿no? De los aspectos tanto principales... Como rituales o espirituales que rodean al Neandertal. Bien, empezando, vamos a dividir, por tanto, nuestra aproximación al Musteriense en esos tres grandes temas, ¿no? Rasgos generales, periodización y algunos yacimientos y formas de vida. Bien, pues partiendo de ese primer punto, los rasgos generales, el manual en la página 263 dice El paleolítico medio en la península ibérica. Se caracteriza por su larga duración, 350.000-28.000 años antes del presente, que incluye el proceso gradual de neandertalización biológica y el desarrollo de los diferentes tipos de Musteriense con una peculiaridad respecto al Musteriense europeo, y es que no hay excesiva innovación desde el punto de vista tecnológico, en subrayar que probablemente algunas de esas industrias que separaban a los antecesores de los heidelbergenses podrían haber sido la base de ese proceso de cambio tecnológico que se da en el Musteriense y que vamos a caracterizar. Teniendo eso en cuenta, que puede ser un poco la verificación marco, ¿no?, de en qué consiste el Musteriense en la península ibérica, vamos a dar como cinco grandes características que me parece que son transversales y que explican bien en qué consiste el Musteriense peninsular. Primer elemento, como sucede con el Musteriense europeo, la principal novedad también del Musteriense en la península ibérica es la generalización, como antes dije, de las industrias de modo 3 y, por tanto, de los útiles sobre las casas. Las casas que forman parte... No lo olvidemos de esa cadena operativa, de ese proceso de preparación del útil a través de un diseño mental que, bueno, pues selecciona el tipo de formato que se quiere dar a un objeto para que luego reciba un proceso bien detalla, primero bien de retoque, más tarde, que le pueda conferir una función, ¿no? La materia prima deja de ser, por tanto, el nódulo, como era típico de las industrias de modo 1, o el núcleo, como había sido típico de algunas de las tecnocomplejos que vimos para el modo 2 y, por tanto, para el HLNC, y la materia prima de referencia, el subproducto de referencia, son las lascas que se van a ir retocando para dar forma a distintos útiles. Fundamentalmente, los... Cinco que tenéis en la imagen, que, bueno, pues no es más que una síntesis de las novedades tipológicas y tecnológicas del paleolítico medio. Raederas, raspadores, que nos hablan del trabajo de la piel y de todos esos productos derivados de la caza en los que Neandertal va a tener un gran protagonismo en su transformación. Puntas musterienses. Número 4, por ejemplo, veíais una también en formato piedra, no en dibujo, en la diapositiva anterior, en la parte inferior izquierda, y también la presencia de un musteriense que, de hecho, Bordes le dio, pues bueno, una cierta singularidad, como vemos en la siguiente diapositiva, porque habló del musteriense de denticulados, este que tenéis aquí, un musteriense caracterizado por lascas o láminas. Fundamentalmente lascas preparadas a partir de un sistema orientado a obtener una serie de filos, generalmente convexos o apuntados, que nos hablan del trabajo de la madera, de la perforación de la madera y que a veces se individualizan en piezas como la número 17, perforadores o la número 15, o sencillamente lo que llamamos denticulados, que tienen una función probablemente relacionada con... la... el trabajo, como decía antes, de la madera, ¿no? Y por último los cuchillos de dorso. Tenéis aquí uno, ¿no? Esta pieza número 29, también la teníais en más grande en la lámina anterior, el número 12 o el número 13, ¿no?, que bueno, son normalmente útiles sobre lámina, en los que se ha dado un retoque abrupto, ¿no?, que garantiza la generación de un filo muy cortante, y que si... sirve, pues bueno, como una especie de bisturí o de navaja de precisión, pues bueno, que nos habla también de esa progresiva, bueno, pues leptolización o estrechamiento o aminoramiento del tamaño de la tecnología lítica, que ya va a ser un continuum o una constante durante todo lo que nos queda de la prehistoria antigua hasta, bueno, pues las formas microlaminares del magdaleniense o, por supuesto, también del epipaleolítico. Dentro de esa... Primera característica, que es el predominio de las industrias de modo 3, bueno, pues obviamente, en esto sí que comparte el musteriense peninsular rasgos con el musteriense europeo, van a tener mucha importancia todas las técnicas de lascado que permiten generar una transformación en el núcleo para la obtención de lascas o de láminas. Por ejemplo, ese modelo tipo Juncker... Como veis ahí, ¿no?, que sería el típico de la técnica Levalois, por medio de la cual el núcleo es faceteado, descompuesto en una serie de negativos siempre verticales de los que proceden una serie de láminas que pueden ser el subproducto de partida para fabricar un cuchillo de dorso o el subproducto de partida para, partiendo esas láminas, generar una serie de láminas. Hay una serie de lascas sobre las que se fabrique una raedera o un raspador, ¿no? Bueno, ahí tenéis también otra imagen que explica muy bien el proceso de trabajo del núcleo, ¿no? Veis el canto rodado, primero ese faceteado, bueno, pues que se va haciendo para obtener una serie de láminas o de lascas que tengan una caracterización más o menos regular. En cualquier caso, no es el único modelo de talla porque en ocasiones, bueno, pues se puede utilizar lo que el manual explica como la talla discoide por la cual el núcleo es golpeado de una forma no vertical, como veíamos en ese modelo Juncker, sino tangencial y entonces, como veis aquí, no aparecen láminas alargadas con un faceteado regular, sino que lo que aparecen son una serie de lascas más o menos ordenadas, pero que pueden tener formatos irregulares, ¿no? También dentro de esa variedad tecnológica, bueno, pues en esto se comparte el musteriense peninsular algunos aspectos con el musteriense europeo. Existen también modelos de talla de obtención de láminas que no son Levalois y que obtienen las láminas a través de otro sistema que no tiene que ver con las técnicas que hemos visto. Cierto que ese sistema de obtención de una talla laminar no Levalois no tiene bastante presencia en la península ibérica, se trata de sencillamente obtener láminas desde los extremos del núcleo y no sometiendo el núcleo a esa devastación en sentido vertical. O también lo que Bordes en su catalogación del musteriense denominó el musteriense de tipo Kina, de tipo Ferrasi, por el peso que en su caracterización tuvo el yacimiento de la Ferrasi, uno de esos primeros yacimientos neandertales que también vinculábamos a las primeras manifestaciones de espiritualidad del Neandertal, en el que, bueno, pues la novedad o la diferencia es la utilización de lascas de gran tamaño, de lascas gruesas además y de buen porte que tienen que ver probablemente con la elaboración de útiles sobre lascas de gran tamaño, que no sean láminas o lascas pequeñas para ser utilizadas como un raspador, el número 24 como una raedera, el número 8 que son útiles de pequeño tamaño, sino quizá para el trabajo, como decía antes, de la piel o de la madera en superficies de mayor tamaño. Primera característica, por tanto, útiles sobre lascas, es predominio del modo 3 y generalización de una serie de técnicas que permiten obtener la materia prima, lascas o láminas, mayoritariamente, como hemos visto, lascas desde las que fabricar una serie de útiles concretos. Segunda característica que el manual señala como rasgos generales del musteriense peninsular, frente a lo que sucede en otros ámbitos del musteriense europeo, el musteriense peninsular, el musteriense peninsular no presenta una variedad de útiles demasiado amplia, como sí presentan otros ámbitos, como decía antes, de Europa. De hecho, por ejemplo, una novedad que en el ámbito europeo dio sentido al musteriense de tradición achelense, una peculiaridad del musteriense en la península ibérica es que en algunas sociedades, siguen perviviendo esos bifaces y esos sendedores, esos limaces que llamábamos la semana pasada ilimandes y los bifaces tradicionales conviviendo con, como le llamamos antes, la panoplia típica del musteriense, que básicamente son raederas, denticulados, cuchillos y puntas. En la página 262, de hecho, tenéis un cuadro síntesis de los modelos, de industrias del musteriense, los tipos de musteriense y básicamente para la península ibérica habla del típico, de los denticulados, del de tradición achelense y el de tipo quina, que es el modelo estándar de organización de la tecnología del musteriense, pero no todos, como sabemos, tienen la misma importancia o la misma presencia. Tercer rasgo característico, la amplitud cronológica del musteriense. La amplitud cronológica del musteriense en la península ibérica, desde hace 350.000 años hasta hace 28.000 años, desde finales del Paleolítico Inferior, más o menos desde la Glaciación Gris, hasta los inicios del Pleistoceno Superior y, por tanto, a la Glaciación Wurm IV, caracterizado todo ese periodo por un periodo frío, pero que es un periodo que se ha convertido en un periodo de la glaciación. Con cambios constantes que evidencian o que ofrecen en la península ibérica un contexto de gran diversidad ambiental, una especie de microclima singular, sobre todo en los comienzos del periodo, en la península ibérica bastante atemperado respecto al resto de los ambientes y de las circunstancias de habitabilidad en ese momento en el ámbito europeo. También dio razón de ser, como veremos cuando veamos los distintos periodos y nos aproximemos un poco a la geografía de los asentamientos, dio una buena oportunidad a la capacidad de adaptación de los neandertales. La península ibérica se convierte en una especie de fondo de saco por esa circunstancia microclimática en el contexto de un frío con cambios constantes, pero con una nota general. Glaciar y el hombre, como veis, se organiza sobre todo en zonas costeras que prácticamente son una constante tanto en el nordeste como en el sureste peninsular como en el Atlántico como en el Cantábrico buscando unas condiciones de adaptación y de vida más favorables. Esto también hablaremos un poco cuando la semana que viene hablemos del porqué el solutrense se organiza en unos espacios. Espacios concretos que tienen que ver también con estas circunstancias de benignidad de algunos ámbitos costeros en un panorama general, como decía antes, de frío. Bien, el hecho de que los últimos neandertales europeos procedan de la península ibérica, sobre todo la cueva Gorham en Gibraltar, pone de relieve que estos grupos bastante endogámicos ya en ese momento se fueron refugiando en estas latitudes, europeas más meridionales y menos desfavorecidas por los cambios constantes entre finales del Pleistoceno inferior e inicios del Pleistoceno superior, que sería ese radio de acción entre hace 400.000 y 30.000 años, como hemos dicho anteriormente. Cuarta característica. Los expertos señalan que el ambiente neandertal que exhiben los fósiles neandertales peninsulares parece que deja poco margen a la innovación. Es una cultura que no fue muy innovadora desde el punto de vista tecnológico ni tampoco desde el punto de vista del control y la expansión territorial. Pero, similmente, el neandertal en este momento ya tiene esa situación de acantonamiento, como decíamos antes, en zonas protegidas. Y bueno, pues parece que en la península ibérica no es un neandertal especialmente innovador. Esto dicho como concepto general. Es cierto que en algunos ámbitos, sobre todo del sureste peninsular, algunos de los yacimientos con fósiles de neandertales han aportado las primeras colecciones de adornos personales dirigidos a neandertal y que nos indican una preocupación del neandertal por la espiritualidad, más allá de que la tecnología pueda tener raíces en el heidelbergensis y que no sea muy amplia desde el punto de vista de la diversidad de útiles, sí que hay algunos elementos de innovación. Y por último, en quinto lugar, casi contradiciendo todo lo anterior, pero apoyando lo último que he dicho, sí que es verdad que el musteriense peninsular ha aportado algunos de los yacimientos de referencia para algunos de los problemas también de referencia del musteriense. Pues la Cueva Gorham, por ser el último y más tardío neandertal europeo. La Cueva del Sidrón de Asturias, porque de ella se ha podido reconstruir la cadena de Neandertal, la Cueva de los Aviones o la Cueva de Antón en Murcia, porque nos han aportado información precisamente sobre esas conchas perforadas y sobre algunos indicadores de lo que pudo haber sido un primer body art y por tanto un primer contenido, por así decirlo, desde el punto de vista espiritual. Por eso, aunque el poblamiento sea discontinuo y los materiales no sean tan representativos desde un punto de vista evolutivo como lo son en otros ámbitos europeos, lo cierto es que algunos de los yacimientos, no sólo en zonas costeras, sino también en zonas del interior, han aportado algunas estratigrafías o algunos materiales concretos especialmente representativos. Ahí tenéis el mapa de los principales asentamientos que hemos visto antes y un pequeño encarte relativo a algunos de los yacimientos del ámbito castellano leonés de los que habla el manual. Ahora citaremos algunos ejemplos hecha esa caracterización general. Vamos ahora a hablar de la periodización, cómo se ha cometido en la prehistoria peninsular la periodización del musteriense. Bueno, pues se ha partido, como es tradicional, en tres etapas paleolítico medio antiguo, paleolítico medio clásico y musteriense. La primera etapa, como veis en la diapositiva, iría del 350.000 antes del presente a hace 128.000 años antes del presente. Se caracteriza por un hábitat en cuevas. Pensad, por ejemplo, en la Cueva de Bolomor como uno de los ejemplos y por una cierta concentración del poblamiento en el área del Levante peninsular y quizá en algunos puntos del norte peninsular. Que se explican por la búsqueda de medios costeros donde la suavidad del clima, que caracteriza siempre a los entornos marítimos, pues pudiera ser un aliado de estos grupos humanos. Parece que ese período del paleolítico medio antiguo es un período de progresivo avance de los neandertales, de progresiva también musterización de las industrias de la chelense tradicional, de períodos en cierta medida de convivencia entre industrias de modo 2 y la progresiva entrada, esa musterización de la que acabamos de hablar de las industrias de modo 3, todo ello en un ambiente climático marcado fundamentalmente por el frío, aunque con algunos estadios templados que hacen que la fauna también varíe y que nos encontremos desde jabalíes, cabras o caballos, como veis ahí en la escena, que serían ya típicos de los períodos templados dentro de esas oscilaciones que decíamos antes entre gris y bur 4 a mamuts o rinocerontes de un ámbito mucho más frío, propio de los períodos más glaciares. Un segundo momento sería el paleolítico medio clásico definido entre hace 128.000 años y 40.000 años. Es un periodo que coincide con un ámbito, con un momento interglaciar. Ese interglaciar gris bur con un consiguiente calentamiento, por tanto inicial, aunque pronto en la fase final aparece un periodo nuevamente glaciar y que va a hacer de nuevo que nos encontremos una fauna, un contexto en el ámbito peninsular, pues bueno, probable, animales templados en algunos ámbitos. El oso cavernario, por ejemplo, el lobo, el bisonte y otros animales más fríos o más esteparios como los mamuts, los renos o los uros para muchos prehistoriadores. Tanto desde el punto de vista del lugar de los asentamientos como de la tecnología de referencia. Bueno, pues, nos encontramos con varios rasgos que acercan el paleolítico medio clásico peninsular al genuino paleolítico medio europeo. Pues bueno, tanto desde el punto de vista de la tecnología lítica como también de esa definitiva neandertalización evidente. Pues bueno, en yacimientos que han aportado fósiles humanos, como el de la Cueva Negra, el cráneo que tenéis abajo a la izquierda, la mandíbula, por ejemplo. De la Cueva de Sidrón o de los otros restos óseos de la cima de las palomas de Cabezo Gordo en Murcia, que tenéis a la derecha. De hecho, bueno, normalmente cuando escribimos la historia de los neandertales peninsulares, bueno, pues son un poco esos yacimientos, el sidrón, como dije antes, y los yacimientos de los neandertales murcianos, como a veces se les ha dicho, con los que contamos tradicionalmente. Pero fijaros cómo desde el punto de vista de la localización de los enclaves que antes se citaba al margen de ese espacio, bueno, pues costero, con ese espacio un poco excepcional, que sería la zona de Castilla y León, sigue siendo el ámbito costero, pues bueno, el ámbito más característico y donde esos neandertales proliferan. Y por último, tendríamos un tercer periodo dentro del musteriense peninsular que coincide con ese musteriense final, 40.000 años antes del presente, 28.000 años antes del presente, caracterizado por una oscilación climática ya a la final del inicio del Pleistoceno Superior y con una especie, como decíamos, de aislamiento, de endogamia de los grupos humanos que parece que puede estar también detrás de la extinción final del Neandertal, una de cuyas características precisamente parece que es esa, su escasa interacción, aunque ocasionalmente pudiera producirse con otros grupos humanos. Ese es el contexto en el que además aparece el Sapiens en la península ibérica, es el contexto en el que esas industrias ya anticuadas y tradicionales musterienses conviven con industrias innovadoras, tanto desde el punto de vista lítico como desde el punto de vista de la generalización de la industria ósea propias ya del aurignaciense y que compiten en cierta medida con ese chattel perroniense más típicamente neandertal, que se concentrará sobre todo, lo veremos en la clase del viernes en los yacimientos de la zona. En la zona norte, donde sí que parece que hay cierta innovación tecnológica y sin embargo en la zona sur, donde tendríamos el yacimiento estándar de la cueva Gorham en Gibraltar, el manual habla de cómo es la tecnología y cuáles son algunos de esos yacimientos de la zona sur. Página 287 y siguientes. Bueno, pues el hombre neandertal quedó definitivamente refugiado. Pues bueno, en esas evidencias de una difícil adaptación y de una difícil también convivencia con esos nuevos grupos humanos desde todos los puntos de vista. Teniendo todo esto en cuenta, vamos a caracterizar tercer apartado. Qué podemos decir sobre los modos de vida del neandertal? Y hablaremos de el tipo humano, de los asentamientos, de la subsistencia y obviamente porque es la primera fase. No en la que esto se manifiesta, como ya vimos en el tema de la paleo etnografía y la paleoantropología peninsular. Hablaremos también de la ritualidad. Bien, el grupo humano. Bueno, el gran protagonista es el neandertal, no? Cuando hablamos del neandertal, obviamente tenemos que señalar muchas de las novedades que la investigación sobre neandertal ha ido generando, muchas de las cuales, como he dicho antes, han tenido que ver con yacimientos peninsulares. Por ejemplo, si ahora se habla de que el neandertal pudo ser el primer tipo humano, pues bueno, en tener capacidad de habla, pues es porque en los neandertales de la cueva del Sidrón se ha podido evidenciar que quizá estaba ya presente el gen que permitía al hombre una capacidad afonadora o de emisión de sonidos. Bueno, ahí tenéis porque creo que lo sintetiza mejor que si yo voy enumerando cada uno de ellos un encarte que procede del país semanal donde tenéis toda esa rehabilitación de los neandertales desde el siglo XIX hasta el 2010. Incluso más tarde, no? Donde hemos ido viendo muchos aspectos que han conectado antecesor con neandertales. Neandertal y muchos aspectos que han evidenciado también que dentro de nuestra cadena de ADN del Sapiens o del hombre anatómicamente moderno, bueno, pues hay muchos elementos heredados del neandertal. Quizá ese es uno de los elementos característicos que podría alimentar, aunque bueno, sobre esto van y vienen también las teorías, no? La idea de si hubo o no hubo cruce. El manual plantea que puede ser que no lo hubiera, pero puede ser que le hubiera desaparecido la evidencia y algunos fósiles como el enterramiento del agarbello, por ejemplo, que tenéis ahí encartado en el lado izquierdo o las cadenas de ADN tanto del sidrón como de la cueva Neander que permiten pensar que hay muchos genes que tienen que ver con adicciones, con tabaquismo, con determinadas enfermedades, con problemas de fertilidad que parece bueno, sobre esto cada vez hay más noticias. No me parece que arrancan de los neandertales y que todos tenemos un porcentaje en la especie humana actual, en el tipo humano contemporáneo, pues bueno, derivado de los neandertales. Bueno, muchos de esos tópicos se han superado a partir de yacimientos peninsulares o a partir, como decía antes, de hallazgos concretos como estas conchas perforadas de la cueva Antón en Murcia, que bueno, pues este personaje, este ilustrador Mauricio Antón ha recreado también como uno de los primeros objetos artísticos que podría utilizar el neandertal. Teniendo en cuenta, bueno, aquí tenéis también algunos rasgos que han llegado a nosotros a partir de los hallazgos de la cueva del sidrón que parece que derivan de los neandertales, pues el Gustavo Ambargo, el Grupo Sanguíneo, algunas adicciones, la capacidad fonadora, como comentábamos anteriormente. Bueno, no me detengo en ello porque lo podéis leer perfectamente en las diapositivas. Si me interesa detenerme, pues bueno, en aspectos no tan historiográficos, porque algunos además ya los vimos cuando hablábamos de la paleotenografía de la península ibérica, sino más de los modos de vida de este grupo humano. Primer elemento, ya lo hemos dicho, parece que son grupos que eligen el sur de Europa como un área de referencia y que, bueno, pues proceden de áreas de Centroeuropa y han ido arrinconando a las poblaciones hacia el sur. Parece que viven, como permite conocer el hallazgo de los individuos de la cueva del sidrón en bandas de cazadores recolectores de unos 20 o 30 individuos. El grupo del sidrón en concreto está compuesto de 12 individuos fallecidos por una avalancha que quizá, por los estudios que se han hecho comparativos de ADN, pudo utilizar el hábito del intercambio de mujeres entre clanes, lo que pone de manifiesto esa profunda endogamia de los neandertales que últimamente, junto con su escasa capacidad de vida corporal frente a los cambios climáticos de los inicios del pleistoceno superior, viene poniendo el acento en que esa pudo ser una de las razones de la crisis o de la extinción de los neandertales. Y luego debieron ser grupos que, buscando siempre esos ámbitos costeros, también porque venían de ámbitos septentrionales europeos, debieron tener una gran movilidad. ¿Cómo es su hábitat, su asentamiento y algunos aspectos también sobre sus formas de vida? Bueno, ya hemos hablado Cueva del Sidrón, Cueva de Bolomor, Cueva de los Aviones, Cueva Antón... Bueno, el punto de asentamiento por excelencia son las cuevas o los abrigos rocosos. Pero es verdad que Neandertal es el primer tipo humano que parece que en esas oscilaciones climáticas o en las variantes estacionales temporales alterna el hábitat en cuevas con esos campamentos de verano, como a veces de una manera un poco moderna se les ha denominado campamentos al aire libre para periodos benignos en los que el hombre empieza también a progresivamente... explorar otros recursos. De hecho, es bastante posible que los asentamientos de este tipo asociados a Neandertales, pues en la Cueva Esquileu o en la Cueva del Castillo o en la Cueva Gorján de Gibraltar, puedan tener que ver con un interés por parte de Neandertal de, a través de los ríos, explorar los valles fluviales, familiarizarse no sólo con la caza de animales carnívoros, sino también el conocimiento del movimiento de las manadas de herbívoros y buscar recursos como el que dibuja un poco ahí la parte inferior, como el que dibuja Mauricio Antón de nuevo en esa segunda viñeta, que pudieran ofrecer entornos más ricos que sencillamente la caza y la recolección de esos animales, a veces templados, a veces de fauna fría, que comentábamos anteriormente. Esto permitiría pensar que el Neandertal sí que desarrolla una estrategia de caza vinculada a la elección del asentamiento y que en esos periodos estacionales, al estar asentándose en un ámbito o en otro, está pensando también en las presas o en los animales o en los recursos a los que puede llegar. Dentro de esas circunstancias de hábitat, hay una que sí que está indiscutiblemente atribuida a los neandertales, no sólo en la Península Ibérica. Ya hablábamos de esto o ya estudiaréis esto en la asignatura de Prehistoria 1. También los primeros hogares parece que se generalizan a partir del Neandertal en Centroeuropa, en la Costa Azul y en otros ámbitos también costeros. Bueno, sí que en la Península Ibérica tenemos contextos muy bien datados en los al Neandertal, preparando los asentamientos, organizando, por tanto, el espacio y compartimentándolo de manera estándar para distintos usos. Algo que sabemos por la dispersión de la BRIC romaní en Girona por parte del equipo precisamente de UDAL Carbonell, donde, como veis, se delimita una zona para el descanso, otra zona para defender la cueva, otra para la cocina, otra para el trabajo de la materia prima y siempre con un elemento vertebral en la organización del espacio que va a ser el hogar, los fuegos como elemento, la materia de articulación o de minimalismo, por así decirlo, en la articulación del espacio. ¿De qué viven desde el punto de vista de la subsistencia estos grupos de neandertales peninsulares? Bueno, pues obviamente los cálculos que precisamente las cadenas de ADN que se han podido hacer, bueno, pues han permitido elaborar, nos subrayan que el hombre, por su gran corpulencia, y por todos esos rasgos físicos del neandertal que ya conocéis, necesitaría unas 5000 kilocalorías para la subsistencia y la mujer un poquito menos, en torno a 4000 kilocalorías. Eso les orienta hacia una preferencia general por los grandes animales, bisontes, ciervos y caballos, especialmente bien documentados en contextos neandertales del norte peninsular, pero también en algunos ámbitos, sobre todo a partir del paleolítico medio clásico y en el musteriense final, con orientación, quizá porque no queda otro remedio por la competitividad, quizá también por la presencia de sapiens. La preferencia por animales más pequeños, tortugas, liebres, conejos o incluso recursos marinos, en el caso de la elección de la exploración por parte de los valles fluviales o incluso de la elección del enclave de Gibraltar para ese último grupo de neandertales. Probablemente esa corpulencia que les obligaba a una caza de gran porte también les hacía más competitivos en esa caza de gran porte, porque neandertal, bueno, esto en el documental este de la Odisea de la especie, que ya he recomendado alguna otra vez, está por ahí en YouTube y en el canal de televisión española La Carta. Bueno, pues se ve muy bien que neandertal estaba muy bien dotado para el contacto cuerpo a cuerpo con el oso cavernario, con los lobos, con los bisontes. Pero sin embargo, eso le hacía más torpe para una actividad pesquera o de recogida de animales más pequeños, que son los que luego se van generalizando esos animales de fauna templada que tienen un porte menor, no me refiero exclusivamente a pequeños animales. Como conejos o liebres que están atestiguados también en contacto con el neandertal, sobre todo en los ámbitos meridionales de la península. Por último, llegaríamos al ámbito de la ritualidad, a eso que el manual llama el o define el musteriense como el período de desarrollo del simbolismo, en concreto una expresión de la página 283. Bueno, y aquí tenemos que hablar de los tres elementos que tenéis ahí citados en el subtítulo de la diapositiva. Los enterramientos, la antropofagia y la cuestión que quizá es la que está más clara del adorno personal. Bueno, sobre los enterramientos, el primer elemento que hay que decir es que en la península ibérica curiosamente no tenemos evidencias de enterramientos de neandertales y los neandertales que han sido atestiguados han muerto por catástrofes, tanto en la cima de las palomas como en la cueva del Sidrón o como en la Cueva Gorham, que no es una catástrofe, pero es un hombre, una mujer que muere allí ya en solitario, en las que no ha habido, por tanto, deposición ritual. Pero bueno, aquí tenemos que contrastar que aunque no se hayan conservado esas evidencias, tenéis ahí una viñeta del enterramiento neandertal con ritualidad muy exagerada por las flores, los ocres, etcétera, de la cueva de Sanidar en Irak. Hemos de pensar que en la península ibérica lo que no está atestiguado no quiere decir que no existiera y muy probablemente hubiera episodios de enterramientos, pues como vemos en Europa, de niños, de ancianos que nunca superan los 40, 45 años, pero sencillamente la evidencia no se ha conservado. Sin embargo, ya hemos visto que no disponer de enterramientos no ha sido un problema para caracterizar la cadena de ADN o identitaria del neandertal, como decíamos anteriormente, para el caso de la cueva del Sidrón. En segundo lugar, el problema de la antropofagia, que arrancaba prácticamente desde el lomo antecesor y que, bueno, pues a través de algunas evidencias de los huesos atestiguados en algunos de los asentamientos, pues sigue teniendo abierto el debate sobre si es una antropofagia de carácter ritual vinculada a ceremonias de eliminación de rivales en periodos de gran presión territorial o presión demográfica o sobre los recursos, o si más bien hemos de pensar en un canibalismo de carácter gastronómico de necesidad en esa competencia, precisamente por los recursos y en esos periodos también de oscilación climática. Donde sí que no hay discusión y ahí la península ibérica ha sido, como decíamos al principio, bastante determinante en el contexto de la rehabilitación del neandertal, ha sido en que muy probablemente se deba a los neandertales el protagonismo de haber sido los primeros creadores de una serie de objetos de carácter artístico, como esas conchas perforadas que pudieron ser portadas por, como colgantes, también quizá, bueno, pues dando un cierto simbolismo a esa alternancia cromática que la propia concha tiene y que pudieron ser portadas por los jefes de esos clanes o de esas bandas en las que Neandertal se mueve, pues bueno, como una marca de prestigio, de estatus, de individualidad que en cierta medida habla también del carácter complejo de estas sociedades. También los hallazgos que también para todo el ámbito europeo, incluso en el enterramiento de Sanidad, están atestiguados de ocre sobre algunos de los restos de neandertales que no son, como hemos visto, funerarios, permite pensar que Neandertal, como de hecho lo recogía en cierta medida el dibujo de Mauricio Antón que hemos visto anteriormente, ese que tenéis ahí, pudo ser el primer protagonista de esa suerte de body art, de arte corporal, de pintura corporal, que parece que es así como hay que entender algunas de las acumulaciones de ocre, incluso la tesaurización de bolitas de ocre que se da, por ejemplo, en el musteriense africano o en algunos enterramientos del musteriense europeo, mejor que pensar, bueno, pues en un espolvoreado de ocre sobre los cadáveres para evitar su incorrupción o como una ofrenda funeraria en la que, bueno, pues de alguna manera se había interpretado este signo con anterioridad. Bien, por tanto, visto este recorrido que hemos hecho por los rasgos característicos del musteriense, en algunas cosas veis que hay una conexión con el musteriense europeo, en otras veis que hay elementos de singularidad, pero quizá lo que es más determinante es el gran peso que determinados hallazgos vinculados al neandertal, al gran protagonista de este periodo en yacimientos de la península ibérica. Bueno, pues ha tenido esos yacimientos y esos hallazgos para la caracterización general del musteriense peninsular y también del musteriense europeo. Preguntas? Dime.