Buenas tardes, queridos y queridas estudiantes. Vamos a seguir, a continuar con la segunda grabación del tema 6, Estado de bienestar y desigualdad, la segunda y última parte de este tema. Y bueno, ya tenéis colgado el documento en la pestaña de documentos de vuestra asignatura. Esperemos que os sea de utilidad. Aprovecho también para desearos muy buena suerte en vuestros exámenes, para los que lo harán en la primera semana y también en la segunda. Sabéis que a través de mi correo electrónico seguiré estando más disponible para cualquier duda o comentario que os surja en estos días. Así que, sin más, vamos a continuar con esa segunda parte del tema, como os decía, del Estado de bienestar. Habíamos visto ya la caracterización o la tipología de los Estados de bienestar según Inés Binándar, que es el autor que maneja el libro de texto de referencia de la Asignatura de la Asignatura. Habíamos visto también un pequeño repaso por las etapas de la construcción del Estado de bienestar en nuestro país, de la recientísima construcción del Estado de bienestar en nuestro país. El próximo apartado se llama los tres pilares del Estado de bienestar, pensiones, educación y sanidad. Y nosotros haremos un repaso por las tres principales coberturas o prestaciones que han conformado y que dan sentido al Estado de bienestar español. ¿Cuáles son sus características? ¿En qué se refieren? ¿Cuáles son sus características? ¿Qué diferencian del resto de los países y cómo son percibidas por los ciudadanos españoles? Bueno, ya hemos repetido, y es una idea que atraviesa todo el capítulo del libro, que efectivamente el sistema de pensiones en España se ha convertido en la piedra angular del Estado de bienestar. Su punto más crítico se alcanza en la crisis del 92-93, cuando el desempleo alcanzó cotas por encima de las necesidades de los ciudadanos españoles. Bueno, el 20%, el 23% para ser exactos. Y además se produjo una relación bajísima entre cotizantes y beneficiarios. Fijaros si era baja que rebasó el nivel volumbral de transporte. El sistema español, como bien sabéis, es un sistema de reparto, un sistema de transferencia entre trabajadores en activo y trabajadores jubilados. Y se pasa efectivamente en una especie o suerte de pacto intergeneracional en virtud de la cual los trabajadores presentes, o en activo, pagan las pensiones de los jubilados en la confianza de que cuando estos activos dicen a la jubilación, otros activos harán lo mismo por ellos. En la actualidad es un sistema general, el sistema general de la seguridad social, porque integra la mayoría de los sectores sociales. Solo hay algunos regímenes especiales, cada vez más residuales y derivados también de nuestra historia. Bueno, pues el proceso, si no es desaparición, sino homologación con el sistema general. Es un sistema, como dice, el autor maduro, porque todos tienen derechos adquiridos de hace tiempo y, además, relativamente generoso. Pensado, según esa carácterización del modelo mediterráneo, para las familias con un marón cabeza de familia o prestador o sustentador principal. Bien, en la firma del Pacto de Toledo, bueno, el pacto más importante que se ha firmado en nuestro país por las pensiones es un intento de sacar a las pensiones del debate político. En la última etapa del gobierno del primer, bueno, no del primer gobierno, pero sí de la primera etapa de gobiernos socialistas, el sistema de pensiones con vilipendiades como parte del debate político, pues viene el Pacto de Toledo, que se firma inmediatamente después de la gran y profunda, aunque breve, crisis del 93-94. Es un intento también por actualizar algunas de las prestaciones, mejorar algunos de los sistemas que estaban dando y también, sobre todo, a efectos de debate político, intentar sacar a las pensiones de ese debate, ¿no? Bueno, y efectivamente, aunque no tuvo muchas consecuencias, sí, por ejemplo, en el tiempo de cotización, que sirvió de referencia para el futuro, sobre todo, bueno, pues también fue un intento de no… que no sirviera el sistema de pensiones como arma arrojante. Bien, a partir de 1996 y hasta la crisis actual, el sistema ha permanecido básicamente sin tensiones debido a varios factores. Por un lado, porque desde la recuperación del empleo y de la economía, a partir precisamente del año 96, hay un crecimiento continuo de la afiliación, derivado de ese crecimiento exponencial del empleo, un crecimiento en la afiliación que tiene dos nuevos colectivos o dos colectivos que se han hecho, bueno, pues… …muy significativos en estas décadas, que son los inmigrantes y las mujeres, bueno, se han incorporado más o menos también al mercado de trabajo. También se ha producido alguna medida racionalizada del sistema, como la separación de las fuentes de financiación entre pensiones contributivas y no contributivas. Estas últimas antes también se financiaban vía seguridad social, lo que hacía soportar mucha más tensión al sistema. Con la reforma lo que se hace es que las pensiones no contributivas se financien vía impuestos. Con lo cual se relaja o se le quita algo de presión al sistema de pensiones de la Seguridad Social. También el Pacto de Toledo incluyó entre las medidas que se ha cumplido, además en todos estos años, la creación y mantenimiento de un fondo de reserva. Fijaros que hemos vivido de él hasta diciembre del 2011, en el que el último superávit de la Seguridad Social, pues, llegó tres años más allá de la crisis, gracias también a ese fondo de reserva. Y luego, bueno, pues también hubo causas de… …tipo demográfico porque, efectivamente, en estos años, en esta década, en estos quince años, estos últimos quince años, el sistema ha estado un poco tensionado también porque las cohortes que se han jubilado han sido un poco numerosas relativamente comparadas con otras. En la reactividad posguerra introdujeron ahí un elemento de pérdida de efectivos y de reducción de la calidad en las generaciones inmediatamente siguientes. Y esa rebaja del tema de las cohortes que llegaron a la jubilación en estos años, pues se ha notado también introduciendo menos presión al sistema. Por contra, se espera que el sistema tenga mucho mayor presión la mitad del siglo, justamente cuando las generaciones de los baby boomers que retengan al menos hay que jubilarse. Bien. El futuro de las pensiones no es, según el autor, un problema estrictamente económico ni demográfico. Sino básicamente político. ¿Y esto por qué? Bueno, pues una doble implicación o una doble dimensión. Bueno, porque el sistema público de pensiones, de alguna forma, sigue estando en manos de la ciudadanía y depende de los votantes. Es por eso que el autor no prevé cambios significativos, ya que una parte muy importante de los votantes a los dos grandes partidos es población inactiva y, por tanto, extremadamente sensible a cualquier cambio que se realice en el país. Por eso los partidos van a estar sujetos a una doble tensión, una contraria, un doble vínculo. La presión por realizar reformas y, bueno, una contraria que estaría más cerca de la demagogia, de la lucha electoral, que, bueno, pues implicaría no reformar ni cambiar básicamente nada del sistema. A tenor de lo que está ocurriendo, todavía no sabemos cuánto, ¿verdad? Porque estamos en una época de cambios y de experimentación que no sabemos cómo va a terminar. Pero hasta ahora lo que sabemos es que el sistema de pensiones, precisamente, sigue esa tendencia que el autor, Juan Jesús González, bueno, pues imaginaba y adivinaba, ¿no? Puesto que todos los servicios públicos están sujetos a intensas reformas, a intensas reestructuraciones, a privatizaciones, a copago, en fin, y en cambio es el único que, de momento, parece que no se va a mover. Es más, las pensiones han sido las únicas rentas del Estado que han subido, ¿no? O de las cuales el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, prometió en campaña electoral y cumplió la idea del Gobierno que no se rebajarían. Con lo cual, sería un elemento más de esa implicación de la que nos habla González en el sentido de él. La educación. ¿Qué ha pasado? ¿Cómo se entiende que la educación pública en nuestro país, la educación como un bien de redistribución, como una oferta del Estado de bienestar? Bueno, lo primero que habría que decir es que, oficialmente, cualquier sistema público de educación debe cumplir dos funciones que, aparentemente, pueden parecer contradictorias. La primera es que, por un lado, tiene la obligación de igualar a los individuos ante el Estado, es decir, igualarlos en su opción a estudiar o en su capacidad para entrar al sistema educativo. Pero, al mismo tiempo, esa educación y el completar niveles de esa educación lo que provoca es una desigualación de esos individuos ante el mercado, ya que les dota de una capacidad de mercado, en términos de habilidades. Es decir, las organizaciones que están en función de las aptitudes individuales y que el sistema certifica en forma de titulaciones y credenciales. Por lo tanto, la educación también es una fuente de estratificación. Por tanto, aquí la educación pública, que se ha realizado, no tiene la obligación ni el objetivo de reducir, ya no acabar, no reducir las desigualdades de salida, sino asegurar en la medida de lo posible que las desigualdades se realicen. a resultas por el paso del sistema educativo son una consecuencia estrictamente del mérito y la capacidad y no de la ascripción ni de la reproducción de desigualdades anteriores. Por tanto, la educación desiguala según el mérito, pero ha de igualar en la entrada, en el origen y también en los resultados según la capacidad y no según desigualdades previas o de tipo ascriptivo como la clase, el origen, la renta, etc. Bueno, ya no digamos el sexo o la etnia. En la práctica, según sea el estado de bienestar, la educación cumple más o menos este objetivo. ¿Qué ha pasado en el caso español? ¿Cómo diríamos que se ha comportado en relación a esa igualación de oportunidades de origen y esa atenuación de las desigualdades ascriptivas? Pues bien, como saben... El sistema de clases, el sistema de estratificación en España ha pasado de ser un sistema basado en clases patrimoniales en pequeños empresarios y pequeños agricultores de pequeña propiedad a un sistema de clases medias funcionales, de cuadros profesionales y técnicos que se han definido sobre todo, que definen su posición en la estratificación, en la estructura de ocupaciones por su cualificación y por su nivel educativo. Dicen los autores, y así lo muestran los estudios en Período, que en el caso español, en la estructura de ocupaciones que se han hecho sobre este particular, que este paso del sistema de clases patrimoniales al sistema de clases funcionales está indisolublemente unido a la expansión del estado de bienestar en nuestro país. Y ello por dos motivos. Porque ha permitido, tanto en los niveles primarios, de educación primaria como secundaria, como en los niveles universitarios, el acceso de muchas generaciones a la educación pública universal y gratuita, cosa que en este país no existía o no existía de manera universal. Y también ha permitido que esos mismos jóvenes que se formaron en los institutos y en las universidades públicas de los años 80, 70, a finales de los 70, 80 y 90, hayan sido también destinatarios de los empleos creados por ese mismo estado de bienestar. Es decir, que ha permitido, por un lado, el estado de bienestar generar profesionales en una cantidad y con una calidad que no existía ni de lejos en nuestro país. 50 años antes o 40 años antes. Y al mismo tiempo ha dado empleo, ha dado lugar o ha dado destino a esos cualificados profesionales y técnicos precisamente en ese estado de bienestar, de sanidad, de educación y servicios sociales. Bien, entonces los estudios de movilidad social han mostrado que el ideal meritocrático y el papel de la educación pública solo se materializan en la educación pública. Igualdad de condiciones cuando el sistema educativo y el cambio estructural confluyen en la generación de nuevas oportunidades laborales. Es decir, que la escuela por sí misma no puede hacer todo el trabajo de la meritocracia o de pasar a un régimen meritocrático o puramente meritocrático, porque después también el mercado de trabajo reproduce unas desigualdades que incluso habían quedado veladas en el sistema educativo. Un caso, para que lo entendáis muy claro, es el tema del género. Sabéis que las mujeres estudian más. Y estudian mejor, es decir, sacan mejores calificaciones, tienen mejores rendimientos en todos los niveles educativos. Están presentes ya en casi todas las titulaciones en mayor medida que los varones y sin embargo en el mercado de trabajo tienen más dificultades para encontrar empleo, tienen más dificultades para alcanzar niveles de cualificación y niveles sobre todo de dirección sobre los varones. Y tienen problemas para incluso ganar a igual trabajo, bueno, igual salario que los varones. Esto es lo que significa que la movilidad social o la educación por sí misma no es capaz de generar movilidad social ascendente e igualatoria sin el concurso de otras agencias. En este caso pues también sería la familia, el propio estado, en otras de sus dimensiones y el mercado de trabajo, que viene a ser, como decimos también, un elemento importante. Un elemento de desigualación incluso por encima del que ha jugado la educación pública en este país, ¿no? Aumentando desde luego las oportunidades de muchas personas pero luego encontrando otra vez y de nuevo dificultades cuando se trataba de ellos. Bien, por eso y abundando en lo que estamos comentando conviene distinguir, como lo hace Javier Echeverría, sabéis que es uno de los autores españoles que más ha trabajado el tema de la movilidad en España, pues bien, digo que conviene distinguir la adquisición de recursos educativos y la activación de dichos recursos en el mercado del trabajo. Porque la adquisición depende efectivamente de una accesibilidad universal al sistema educativo y se relaciona con políticas y medidas educativas, pero la activación depende ya no solamente de un sistema de educación pública sino de otros factores como la situación económica, los mecanismos de inserción profesional, la subcultura empresarial, la rentabilidad, etc. Las redes sociales o incluso el clasismo han venido en dificultades de acceso a determinadas clases según que puestos en el mercado del trabajo. Bien, luego el autor es bastante crítico también con las reformas que se han llevado a cabo en el sistema educativo en todos estos años puesto que han estado faltas de financiación, han tenido un exceso de retórica y quizás esto habría que efectivamente vincularlo a un exceso de debate de politización de la educación en el debate político. Cualquier observador medianamente avieso de la realidad española podrá al menos contar o recordar cuatro o cinco reformas educativas en el transcurso de los últimos veinte, veinticinco años y eso pues tampoco ha sido un elemento que haya favorecido especialmente a la concepción de las reformas, ¿verdad? Porque cuando llegaba un reglamento de la Constitución, a cambio de gobierno de turno, pues enseguida tenía su propia ley de educación que si no falseaba al menos atenuaba o reformaba hasta hacerles reconocibles las reformas propuestas por el anterior gobierno. Bien, la sanidad. Bueno, el régimen franquista fue el creador en primera instancia del sistema sanitario público en nuestro país pero nunca se propuso llegar a una cobertura general ni universal. La ley de la seguridad social solamente se conseguirá en el año ochenta y cinco con la ley de la sanidad y con el primer gobierno socialista. Cuando se intenta cambiar, de hecho la UCB intentó universalizar o por lo menos ampliar el sistema de cobertura sanitaria porque sabéis que hasta que se hizo universal el sistema nacional de salud pues contaba con dos sistemas o dos subsistemas, un sistema público para cotizantes, y familiares y beneficiarios y otro sistema al margen de la red de la seguridad social básicamente formado por hospitales provinciales, organismos de beneficiancia, etcétera que daban atención sanitaria a aquellas personas que no disponían de cobertura sanitaria a través del mercado de trabajo, a través de la cotización en la seguridad social como cotizante principal o como beneficiario. Pues bien, la UCB ya intentó en una primera etapa dar mayor cobertura o dar una cobertura más universal a este servicio pero se encontró con dos dificultades, la oposición de izquierdas y los modelos privados de gestión que todavía no tenían mucho predicamento entre la población. La sanidad privada es desde luego una evolución o marca una evolución a lo largo de estos años pero en el inicio de la transición esa sanidad privada no podía dar respuesta a las demandas de calidad y de universalidad que tenía hasta ese momento la seguridad social. Por tanto, habrá que esperar al primer gobierno socialista como digo para que ese gobierno de izquierdas hace una extensión universal de la seguridad social pública y que esa asistencia sanitaria privada quedará relegada nada más a un sistema para quien quisiera pagarlo y en cualquier caso mucho menos protagonista que los anteriores gobiernos habían querido darle. Por tanto, la primera reforma de ese sistema se lleva a cabo como digo en el año 86 con la Ley Medial de Sanidad incluye el acceso general y gratuito a todas las prestaciones la provisión de servicios a través de los centros públicos recordar que son los años de expansión de los hospitales públicos no solamente de los que había sino la creación de muchos nuevos y también de toda la red primaria de atención sanitaria a través del modelo de centro de salud y ambulatorio de especialidades que empiezan desde luego a ser una realidad en poco tiempo. Hubo una inversión de fondos muy notable en dotar de financiamiento público. Se separa orgánicamente la seguridad social y la financiación de la sanidad a cargo de los impuestos y hay una centralización de la financiación todavía luego seguirá de una mayor descentralización y una descentralización de la gestión a través de las comunidades autónomas. En 1986 con la Ley General de Sanidad por tanto se marca la transición desde una antigua seguridad social de corte corporativo y cotizante a la asistencia universal en el marco de un servicio nacional. Bien, después de haber visto qué características tienen y cómo han evolucionado esos tres pilares que llamamos del estado de bienestar en nuestro país sanidad, educación y pensiones es el momento de dedicarle al menos un minuto a esa reforma del estado de bienestar. Daros cuenta que el libro está escrito antes de la crisis económica y antes del recambio de gobierno por tanto todo lo que aquí se diga vale hasta el horizonte temporal que marca el libro que es básicamente el 2004. Bien, y hasta el 2004 como ya comentábamos en la primera clase a pesar de las retóricas neoliberales a pesar desde que el modelo de corte liberal ha permanecido como modelo hegemónico de gestión de la economía y a pesar de los embates y de las críticas al estado de bienestar pues hasta ahora los países los países del entorno han renegociado, reestructurado y modernizado sus sistemas de bienestar pero sin desmantelarlos. Lo más llamativo si acaso ha sido el adelgazamiento del sector público y diríamos que más en la vertiente de estado empresario que de estado asistencial. Es verdad que muchas de las provisiones de los servicios públicos ahora se hacen mediante la iniciativa privada en términos de gestión pero manteniendo el control y la financiación los organismos públicos. Bien, bueno, según Spinanders el caso más paradójico se ha producido en los regímenes de estado de bienestar corporativo precisamente dentro del cual España o del que formaría parte España. Bueno, ¿por qué? Pues porque ha mantenido sistemas de pensiones relativamente generosos pero difíciles de sostener con tasas bajas de ocupación puesto que se basan en el sistema de reparto como hemos dicho donde los cotizantes en activo son los que pagan las pensiones de los que están inactivos. Hay unas bajas en general en este modelo corporativo y singularmente en el Mediterráneo hay una baja tasa de ocupación femenina con problemas de inserción laboral y de formación de nuevas familias bueno, qué decir de la caída de la fecundidad en las familias españolas de las dificultades extraordinarias para la conformación de las carreras fecundadoras y fecundatorias de las familias españolas con el consiguiente reducción de la natalidad y el consiguiente retraso de la construcción de esas trayectorias de fecundidad. Bueno, esas bajas tasas de fecundidad desde luego dificultan el reemplazo generacional y por tanto se puede decir que todos estos hechos se realimentan negativamente es decir, el estado de bienestar corporativo tiene mal futuro si no cambian las bases sobre las que se asienta es decir, ese modelo familista y de overload de demandas a la familia ha de cambiar si no queremos que entre en crisis por una falta de efectivos o de financiación que lo mantengan tal como está estructurado. Bueno, cómo corregir entonces y rediseñar ese modelo contributivo para quitarle un poco ese sesgo de política contributiva y bueno, pues darle un poco más de alternativa a aquellos que han llegado un poco al margen del sistema veamos que son los trabajadores precarios en el mercado secundario y también de los jóvenes en contra de esos mayores. Por tanto hay que equilibrar un poco más el sistema y dotarlo de más bueno, de mayor garantía de futuro incluyendo un modelo que sea más igualitario aquí no sale la transparencia pero en vuestra en el documento que he dejado colgado que es exactamente el que estamos manejando no sé por qué no sale aquí sabéis que de vez en cuando lo de la videoconferencia hace lo que quiere con las presentaciones en este caso os ponía un gráfico donde se ve con relativa claridad cuáles son el distinto papel del estado de las familias y del mercado y cómo se puede lograr un estado de bienestar con más visos de garantía y de permanencia en el futuro con familias más democráticas y un estado más preocupado de las familias de lo que ha estado hasta ahora. ¿Cómo han percibido y cómo perciben los españoles el estado de bienestar? ¿Cuál es la actitud que mantienen ante el estado de bienestar? ¿Cómo ha ido evolucionando si es que lo ha hecho esa actitud? ¿Y cuáles son los desafíos en términos de percepción por parte de los usuarios de nuestro estado de bienestar? Bueno, pues los estudios que maneja el texto de referencia se refieren fundamentalmente a los años del gobierno socialista porque bueno hasta en el momento de la edición del texto se contaba con pocos pocos estudios de la época de la democracia de los ocho años del gobierno del PP de Aznar que donde claramente y sin ambajes y de forma absolutamente objetiva se puede decir que hubo una reducción en el gasto público pero no se puede todavía evaluar términos de percepción puesto que no contamos con esos datos. El punto de partida es que comparado con los países del entorno la sociedad española parece bastante igualitaria incluso más igualitaria que otras de su inmediato entorno y eso según el autor puede deberse a dos factores relacionados en la sociedad española hay demasiada desigualdad los españoles nosotros pensamos que en la sociedad española todavía hay demasiada desigualdad y que por tanto hay una relativa injusticia en la distribución de los recursos y por eso relacionado con lo anterior consideramos los españoles que el Estado tiene la obligación de corregir dicha desigualdad mediante políticas distributivas o sea que de alguna forma existe la percepción de que hay desigualdad y que además esa desigualdad puede y debe ser corregida por el Estado a través de la redistribución de la renta. También esto es más difícil de comprobar pero efectivamente forma parte también un poco de la subcultura histórica de nuestro país es que ese igualitarismo parece que se relacionaría con un cierto sentimiento anticapitalista derivado a su vez de la relación que tuvo con el franquismo. Sabéis que muchas de las simbologías y muchas de las instituciones bueno lo hemos visto con la Iglesia lo hemos visto por ejemplo con los empresarios lo hemos visto con los símbolos por ejemplo como la bandera y el himno y en que fueron profusamente utilizados y que de alguna forma estuvieron muy relacionados o muy vinculados al franquismo pues derivaron sobre todo en los primeros años de la transición y los primeros años 80 y 90 en un cierto sentimiento anti todo eso que había sido parte consustancial del franquismo por oposición al propio franquismo. Pero bueno eso también en esos primeros años explica que por ejemplo el estado de bienestar haya sido también afectado entre los españoles y que merezca valoraciones como veremos muy positivas. Bien a pesar de esa valoración positiva el autor señala algunos problemas primero la revisión de la cobertura por desempleo se revisó bueno funcionó de forma bastante generosa hasta la crisis de los años o durante la expansión de los años 80 pero se revisó en la crisis de los 90 y ponemos puntos suspensivos para lo que pueda pasar. Daros cuenta que nunca hemos estado tan sujetos a una crisis de financiación como la que estamos viviendo ahora y nunca antes las medidas de austeridad fueron tan universales hablando en torno europeo y tan drásticas así que insisto como todo lo que hemos dicho en este tema lo que valía hasta el 2011 puede que dentro de un par de años sea algo bastante diferente. El cálculo coste-beneficio del estado de bienestar por parte de la población todavía es más exigente o es cada vez más exigente debido al incremento de la presión fiscal derivada o asociada a las políticas de bienestar es decir el estado de bienestar cada vez cuesta más y por tanto cada vez los españoles exigen más. Esto unido a los rendimientos decrecientes que toda institución lógicamente y toda prestación de servicio tiene al principio esa prestación de servicio tiene un altísimo rendimiento pero conforme se va instalando y la población lo va usando y se va acostumbrando a la provisión de ese servicio pues ese rendimiento en términos de electorales de satisfacción y de la propia prestación del servicio pues tiene rendimientos decrecientes por eso también cada vez mayor existe una mayor demanda de servicios una mayor demanda de eficacia y de calidad en la prestación de los mínimos y además que eso cueste lo menos posible. Y bueno pues efectivamente hay también un elemento que lógicamente se asocia al estado de bienestar y es que los costes asociados al estado de bienestar medido en cotizaciones en altas cotizaciones también para los empresarios y sobre todo para los empresarios han podido frenar la creación de empleo estable y han castigado como hemos visto en las lecciones de mercado de trabajo sobre todo a jóvenes y a mujeres. Bueno lo primero que se les pregunta en estas encuestas a los españoles es qué tipo de igualdad es deseable puede ser una igualdad de oportunidades más que una igualdad de resultados y eso sugiere más un principio de equidad que de igualdad absoluta es decir que todos tienen que tener las mismas oportunidades aunque luego de resultado no todos perdón no todos consigan los mismos objetivos. Entonces ahí lo que se pretendería sería garantizar la igualdad de oportunidades en el bien entendido que ello esa equidad de salida pues previene para la reproducción de desigualdades anteriores. Bueno qué opinan los españoles si se les pregunta el gobierno que es responsable del bienestar de los ciudadanos pues fijaros que ese porcentaje ha sido mayoritario en las dos etapas consideradas tanto en 1995 como en 2005 que es el último dato del que disponemos incluso ha crecido con lo cual esa atribución de responsabilidad del bienestar al estado permanece no solamente estable sino creciente y además prácticamente uno de más de uno de cada o dos de cada tres españoles pues piensa que debe ser así. En cambio a la pregunta digamos que es su contraria los ciudadanos son los verdaderos responsables del propio bienestar que hablaría de un modelo minimalista estado de bienestar o modelo liberal donde el individuo y la familia en todo caso sería a cargo del bienestar de sus miembros y no el estado pues esto concita poco acuerdo entre los españoles y además ha descendido ¿no? Entonces esto que era del 15% en 1985 va a tener un repulso en 95 pero una reducción muy significativa en el año 2005 incluso considerando que sean impuestas diferentes y que metodológicamente pueda haber algún salto en estas cifras lo cierto es que es una opinión minoritaria así de común. Bien ¿cómo ha sido la evolución de la política fiscal? Bueno pues en las tres etapas hasta el 2004 que es lo que considera el libro pues ha habido un cierto sesgo dependiendo de quién ha gobernado de manera que el ámbito centro democrático puso las bases del estado de bienestar como sabéis creó la fiscalidad directa a través de la reforma del IRPF bueno la reforma en realidad la creación del IRPF y después de esa reforma fiscal en los años en que gobernó alcanza el 30% de los ingresos del estado o sea que en pocos años consigue una más que notable recaudación impositiva a través del sistema fiscal moderno durante los años de gobierno del partido socialista del 82 al 96 pues hay un aumento en el continuado de la presión fiscal y se iguala prácticamente a los estándares europeos también se reduce a la mitad el diferencial en la prestación de servicios con la UE con la Unión Europea y se duplica el número de declaraciones de la renta PP del 1996 al 2004 los 8 años de gobierno sigue aumentando la presión fiscal pero a menor ritmo y además baja la imposición directa a favor de la indirecta que es menos progresiva y más desigualitaria el resultado efectivamente ha sido una menor progresividad en la política fiscal bien como es la percepción por parte de la ciudadanía de esa carga fiscal pues llega al máximo en la década del 80 al 90 precisamente cuando se produce por primera vez ese aumento de la presión fiscal hay que darse cuenta que los españoles no teníamos costumbre de pagar impuestos y mucho menos en el monto o en la cantidad en la que se exige paralelamente a la saturación del estado del bienestar del sistema de carga fiscal desde el año 90 en adelante bueno de hecho ahí está los españoles pagamos mucho en impuestos eso sería una pregunta de la encuesta a ver cómo ha evolucionado en términos de grado de acuerdo en porcentajes de grado de acuerdo tenemos ese pico como decíamos en los años 90 derivado del aumento objetivo de la presión fiscal y esa reducción de la percepción de pagar muchos impuestos más por esa diferencial en los impuestos directos que se reduce un poco y también por qué no decirlo por toda la retórica del gobierno del partido popular como es común en los gobiernos de centro derecha pues se basa en la bajada de impuestos siempre en sus campañas electorales y en los en los bueno pues en los programas electorales ¿no? bien ante otra más otra frase como en general los impuestos se cobran con justicia esto es pagan más los que más tienen bueno pues no hay dos o tres de cada cuatro personas no están de acuerdo con lo que debería ser ¿no? los impuestos no se cobran con justicia sería otra forma de ver lo anterior pues claro es al revés aquí dicen tres de cada cuatro dicen que sí y esto ha crecido esa injusticia del pago de impuestos ese acuerdo con la injusticia en el pago de impuestos ha crecido del 85 al 92 y luego como veis se ha mantenido bastante estable pero aún así en un porcentaje muy alto tres de cada cuatro españoles piensan que no se cobran con justicia los impuestos esto tiene que ver efectivamente con la percepción de que hay fraude fiscal hasta el extremo que 80 de cada 100 españoles o 8 de cada 10 españoles creen que sí hay fraude fiscal frente a 2 de cada 10 que creen que no bueno que no que no hay mucho o bastante probablemente si preguntáramos si hay fraude fiscal el 100% diría que sí pero daros cuenta que aquí se están asimilando respuestas de mucho o bastante y mucho o bastante aún así 8 de cada 10 personas piensan que hay mucho o bastante fraude como ha sido la evolución en el tiempo de esta categoría bueno pues se han mantenido bastante estando es decir aquí los gobiernos han sido poco exitosos en políticas de persecución del fraude y si lo han hecho desde luego esas políticas no han calado a la opinión pública que sigue pensando de manera abrumadoramente mayoritaria de que es muy alto el fraude fiscal en nuestro país bueno es verdad que la tradición tampoco ayuda porque históricamente nuestra hacienda ha sido poco equitativa y nada transparente pues por la ausencia prolongada de la democracia y por esas prácticas clientelares que eran típicas y asociadas a todos los gobiernos desde que tenemos noticia de ellos prácticamente hasta la llegada de la democracia donde las reglas del juego democrático ya imponen unas limitaciones a esas haciendas públicas y bueno aunque efectivamente la política fiscal desde la transición y la construcción democrática ha mejorado y mucho la progresividad del sistema lo cierto que todavía es muy alto ese fraude fiscal en el último dato oficial proporcionado por Hacienda que es del año 1994 suponía el 5,5% del PIB un fraude fiscal muy alto bien también efectivamente hay una estudiante de tipo más cultural menos estructural menos histórica del ciclo político y económico entonces es por eso que se analiza la pregunta sobre la capacidad de los distintos gobiernos para administrar impuestos y ahí observamos una evolución de la opinión vinculada a los gobiernos que con el paso del tiempo ha sido expresar el malestar con la presión fiscal como hemos dicho ese malestar tuvo su punto álgido su punto máximo en 1992 pues porque efectivamente había la conjunción de tres elementos coyunturales todos del mismo signo y además de mucha intensidad la subida de los impuestos realmente la crisis económica con lo cual se tenía menos capacidad para pagarlos y además un discurso del deslegitimador del PP a propósito de esa subida de impuestos que también caló en la opinión pública española bien por eso este cuadro resume qué opinan los españoles respecto de el gobierno administra los impuestos saldo mejor o peor y de ese saldo pues es un saldo positivo en 1935 es decir todavía los ciudadanos piensan que el PSOE administra mejor que el CD pero también es positivo en el 2000 cuando los ciudadanos piensan que el PP administra mejor que el PSOE en cambio cuáles son los puntos negativos pues en 1992 PSOE peor que el PSOE ya ha habido un gobierno socialista estamos en el segundo la segunda legislatura socialista ha subido la presión fiscal hay una crisis económica muy notable y los ciudadanos piensan que efectivamente se está administrando peor los impuestos que en la etapa anterior igualmente en el 2003 el PP los ciudadanos ya piensan que lo hacía peor que en la legislatura anterior del PP probablemente con esa segunda legislatura ya hay una subida de los impuestos sobre todo de los indirectos y los españoles perciben que además está habiendo una rebaja de la calidad de los servicios públicos con lo cual pues el resultado es que sube la opinión de aquellos que piensan que el gobierno administra peor que hacía unos años los impuestos bueno ¿cuál es la actitud general de los españoles ante la política fiscal? bien no puede hablarse según el autor de una actitud de rebeldía fiscal son colectivos muy concretos pero tenemos a disposición dos encuestas en momentos clave que es en el 92 en la etapa de peor balance socialista y en 2000 en la etapa de mejor balance popular justo cuando consigue su primera mayoría absoluta entonces en ambos momentos el porcentaje de españoles que consideraban que los impuestos son necesarios para que el estado pueda prestar servicios públicos carreteras etcétera son del 52,1 y 56% respectivamente como veis bastante altos y además bastante estables en tiempo es decir que incluso en el peor momento comparado con el mejor momento la percepción de los españoles es que los impuestos son necesarios para que nuestro país se haga un país mejor sea un país más rico sea un país más moderno bien qué ha pasado con la actitud de rebeldía esa que podría quedar explicitada en la siguiente frase los impuestos son algo que el estado nos obliga a pagar sin saber muy bien a cambio de qué pues bien esto ha tenido también mucha estabilidad en esos dos momentos es decir a pesar del enfado respecto de la presión fiscal eso no se ha manifestado en un crecimiento de la actitud antiimpositiva puesto que solamente el 30% el 30,1 el 29,5 respectivamente piensan que los impuestos no sirven para nada o que no saben muy bien para qué sirven bueno lo que sí cambia entonces es la configuración interna de los rechazos y las aceptaciones porque hay una desindicación del rechazo de los impuestos por parte de los votantes del PP en el año 2000 y eso no significa por qué bueno pues si nos hacemos la pregunta de por qué los votantes del PP han ido haciéndose más favorables a la política fiscal de bueno del estado de bienestar de pagar impuestos para tener servicios a cambio esos bueno pues hay primero una modulación del discurso de la derecha que cuando gobierna no es tan desde luego agresivo con con los impuestos como lo demuestra el hecho por ejemplo que el gobierno de Rajoy pues efectivamente todo ha tenido que subir la presión fiscal en contra de lo que dijo en su propio programa electoral entonces bueno eso naturalmente al gobernar pues modulas el discurso en relación también a esa presión fiscal también el voto PP se ha hecho mucho más interclasista y por tanto han empezado a votar al PP gente que realmente cree también o creía ya en la presión fiscal como medio de igualar las rentas de nuestro país y también pues porque al paso del tiempo efectivamente aquellos individuos más renuentes a la política fiscal pues han ido haciendo más se han ido acomodando más en ese tipo de política viendo que es necesario pagar impuestos para obtener al cambio servicios públicos bueno la tercera posibilidad que se daba en la encuesta ha constituido una forma redistributiva de adaptación de los impuestos los impuestos son un medio para distribuir la riqueza y esta es la que menos acuerdo suscita tanto en el año 2002 como en el entonces es verdad que esta opinión es mucho menor que la visión redistributiva del estado de bienestar como visión de intercambio o contraprestación que es como la ven realmente la mayoría de los españoles aquí están los porcentajes aquí hay una errata esto es 11,2 en el 2000 11,7 en el 92 y la errata está en la anterior diapositiva perdón donde pone 22,2 debe decir 11,2 bien bueno pues aquí está resumido todo lo que hemos ido comentando estos son las perfecciones de los españoles el porcentaje de acuerdo con las frases de las tres formas de entender un estado de un estado como los impuestos como o estado como un estado redistributivo estado como un estado de contraprestación y estado como estado liberal donde cada uno se deja al ciudadano a su suerte bueno entonces esencialmente lo que sabemos es que los españoles aceptan un modelo fiscal de intercambio o de contraprestación y ahora cabría preguntarse para terminar cuál es entonces el grado de satisfacción con el funcionamiento de los servicios de las obras de los servicios asociados a esa actividad del estado como estado de intercambio y el juicio sobre el presupuesto dedicado a cada una de esas áreas que son dos cuestiones más que incluye las encuestas en general pues permitirá conocer el grado de satisfacción de los españoles con los servicios públicos bien el grado de satisfacción es algo con la administración de justicia que tanto en 2000 como en 2005 cuando se repite esa encuesta acumula los mayores niveles de insatisfacción es bastante claro y es bastante obvio el resto de los servicios públicos transporte sanidad obras públicas educación servicios sociales recogen valoraciones y las demandas del estado como estado de bienestar también están incluidas con el ciclo político lo que vendría a mostrar que efectivamente hay distinta preocupación de los gobiernos por el gasto público y que además esa distinta preocupación es valorada y percibida por la opinión pública por eso la demanda social de mayores servicios habría disminuido entre 1992 y 2000 salvo en justicia que seguridad ciudadana debería aumentar y en 2005 con el regreso del PSOE al gobierno la demanda social vuelve a crecer probablemente por el mayor énfasis de este gobierno en su carácter social distributivo porque es algo que si repiten pues que termina por calar en la opinión pública o también por un relativo descuido de los servicios públicos en el gasto social por parte del anterior gobierno del PP que llegó al final de la segunda legislatura con una reducción y un alejamiento de los estándares europeos en gasto social y esto es la diferencia entre lo que debería diferencia entre los que creen que el estado debería gastar más y los que deberían gastar menos como veis ahí es la evolución a lo largo del tiempo pues mostrando claramente que hay también un componente de gobierno o de diferente percepción según el gobierno o según la expectativa de lo que vaya a hacer ese gobierno entonces ahí claramente tenemos que destacar que el gasto en defensa siempre es negativo es de saldo negativo es decir los españoles siempre creen que se gasta más en defensa de lo que se debería gastar aunque hay que decir que ese porcentaje se ha ido reduciendo con el paso del tiempo y que en seguridad esa demanda ha aumentado aunque ahí es verdad que también una forma diferente de medirlo porque en el 92 se preguntaba por orden público y orden público sonaba permitía mucho al franquismo y siempre piensan que se debería gastar más de lo que se gasta en seguridad eso ha sido una demanda creciente también en obras públicas bueno pues en cambio se han reducido precisamente porque hemos hecho un intenso proceso de modernización de nuestro país en transporte es una reducción y luego se ha mantenido ha vuelto a los niveles del del 1992 en justicia se ha mantenido estable y desde luego en enseñanza en vivienda y en sanidad es donde las personas todavía piensan que se podría gastar más o son mayoría los que piensan que el estado podría gastar más también por eso porque lo hemos considerado servicios públicos esenciales y con esa percepción de del estado del bienestar por parte de la ciudadanía pues no es extraño que apoyen el mayor gasto en en servicios públicos bien con esto terminamos vamos por terminado la lección de estado del bienestar el tema 6 estado del bienestar y desigualdad en la confianza de que os haya sido de alguna utilidad esta explicación que encontraréis el texto de referencia en este powerpoint en la pestaña de documentos de vuestra asignatura en la tutoría y bueno reiterar mis mejores deseos esta semana y la que viene mi disposición a estar a través del correo electrónico disponible para cualquier duda o aclaración y para los que continúe espero que sea la mayoría si no todos nos vemos en el segundo cuadrimestre muchas gracias