Vamos a ver si empieza. Bueno, inicio otra vez la grabación. Habíamos quedado aquí, al final vamos a tener la grabación en dos partes cortadas, pero ya lo comentaré en el foro que va a haber dos vídeos, uno de unos pocos minutos y otro de unos cuantos más. Bueno, después de estas pérdidas de tiempo por problemas técnicos, si ahora ya me escucháis, pues ya seguimos. Bueno, pues estamos con esa idea de que los manejistas empiezan a pensar los edificios para ser vistos de distintas perspectivas. Y de hecho, aunque esta escalera de la Biblioteca Valenciana tiene esa perspectiva uno focal, si te pones enfrente también te obliga a moverte y si lo pensamos, si vemos la escalera desde el lateral, pues también está pensada para que sea vista. De cierta forma, desde otro punto de vista, pero que funcione igualmente de forma estética desde ese lateral. Eso por un lado. Y por otro lado, hay una serie de elementos también muy típicos del manejismo. Por ejemplo, el tema de las proporciones. Hemos hablado que el manejismo juega con las proporciones y que ese equilibrio de las proporciones, el manejismo va a intentar alterarlas. Y que va a alterarlo precisamente para crear un efecto estético. Si el Renacimiento consideraba que un edificio era estético, si estaba equilibrado, si las proporciones estaban equilibradas y perfectamente ensambladas, lo que va a hacer, por el contrario, y el concepto estético del manejismo, por el contrario, está en eso, es alterar las proporciones precisamente para llamar la atención, para crear un shock, para crear un efecto de sorpresa en el observador. Podemos decir que casi aplica en esa frase de un verso de World Wars que decía aquello de que no hay belleza sin algo extraño en las proporciones. Pues esa idea de algo extraño en las proporciones, algo que causa extrañeza, una divergencia que nos obliga a centrar la atención en lo que estamos viendo, e incluso que nos obliga a centrar la atención en distintas partes de lo que estamos viendo, un poco impidiéndonos centrarla. La atención en ninguna va a ser muy explotada por el manejismo. Los edificios nacentistas funcionaban en una sola dirección, entrabas por la puerta, las naves estaban dispuestas como ya habías intuido por el exterior y tenías una perspectiva limitada. En cambio, los edificios y la arquitectura manejista está pensada para hacerte llevar la cabeza de un lado para otro mirando, dando vueltas, viendo la misma obra desde distintos puntos de vista y sin saberlo. Y eso es lo que nos permite entender muy bien cuál de ellos es realmente el privilegiado y al que debes de mirar propiamente dicho. Y de hecho, si te sitúas en la escalera, en ese punto de fuga privilegiado, y miras hacia atrás, lo que te encuentras es esta pared desnuda. Esta pared desnuda con esos lienzos de pared decorados con esas ventanas, ventanas que podéis ver un poco, si las comparáis con la puerta, de un tamaño desoporcionado. Casi son más altas que la propia puerta y que están apiñadas, menos en este paño de muro que prácticamente está libre y vacío. Y curiosamente es el que ves si te das la vuelta desde la escalera, es decir, está creando ese lienzo vacío de muro casi para llamar tu atención con extrañeza porque las otras paredes están apiñadas, están esas ventanas y esas columnas. Así, puestas de una manera claustrofóbica y casi comprimidas en ese espacio. Por lo tanto, está inmediatamente llamándote la atención, creándote desconciertos cada vez que miras cualquiera de los elementos. Y como digo, esas ventanas de un tamaño desproporcionado y que además de ser de un tamaño desproporcionado, de estar tan profusamente, tan claramente decoradas, que es extraño para una ventana interior que tenga esta decoración tan requerida, tan cargada, con estas pilastras, estos frontones, tanto curvos como cuadrados, es un poco extraño. Y además son ventanas que miras para ellas, las ves profusamente decoradas, pero de repente están cegadas. Están cegadas, están totalmente cegadas, no funcionan como ventanas. Por lo tanto, ese hecho de encontrarte en una ventana pero que no puede funcionar como tal porque ha sido tapiada, podía haber dejado el muro desrecebado, podía haber dejado el muro totalmente blanco, podía haber dejado simplemente los paños de muro sin ventanas y no tenía por qué haber mantenido incluso esa decoración que está enfatizando esa ventana en el interior. Porque estas ventanas, como veremos luego al hablar del exterior, de ver un poco el estilo de la biblioteca nomenciana, estas ventanas están también fuera de la biblioteca nomenciana. Es decir, estas ventanas son unas ventanas que tienen continuidad en ventanas, que están cerradas. Estas ventanas están fuera en el exterior, pero que han sido cegadas. Podrían haber funcionado tranquilamente como ventanas, pero Miguel Ángel, para contrariar al espectador, ha decidido decorarlas incluso más claramente que sus congéneres del otro lado de la pared y ha decidido cegarlas, o sea, ha decidido totalmente crearnos una situación un poco extraña. De repente encontramos ahí un montón... de ventanas muy decoradas, esas columnas, todo apiñado. Y es un poco una situación un poco crastofámica. Incluso nos pensamos un poco en el espacio de la propia estancia... Perdón. Vamos a irnos un poco más adelante. No, más atrás. El propio espacio... Perdón, me estoy yendo adelante en vez de atrás. El propio espacio donde está... Ahora se me escucha, ¿no? Se me está escuchando, ¿no? Voy a comprobar por si acaso. Ahora se me está escuchando, ¿no? Bueno, si pensamos un poco en el espacio que ocupa esta escalera, vemos que la escalera es tremendamente grande para el pequeño espacio que ocupa. Esta estancia en la que está la escalera es una estancia de un tamaño muy limitado, de forma cuadrangular, que se prolonga hacia arriba como un cubo, muy alto pero muy estrecho, y en el que... De repente te encuentras prácticamente ocupando todo ese espacio de esa estancia a esta escalera. Por lo tanto, ahí estamos de nuevo jugando con la desproporción. Una desproporción entre el tamaño de esa escalera, esa escalera que tiene que ser por necesidad una escalera monumental, pero que se hace con un tamaño tal que prácticamente nos deja un espacio muy reducido. Lo suficiente para que nos podamos desplazar con holgura, pero que visualmente no deja de dar... No deja de dar la impresión de una cierta claustrofobia, de estar un poco constreñido el espacio en ese aspecto. Y si unimos todo eso, ese apiñamiento de ventanas, de semicolumnas adosadas a las paredes, pues vemos un poco ese apiñacimiento de elementos que nos da un poco la situación de esa desaturación que quiere crearnos el artista. Eso por un lado. Por lo tanto, bueno, esa concepción de modularidad que había en el nacimiento, si pensamos un poco en cómo organizaba tan equilibradamente, modularmente los espacios Brunelleschi y pensamos en la desproporción entre esta escalera y el espacio que queda a los lados, pues vemos que rompe con ese principio de proporción y de modularidad totalmente de la arquitectura renacentista. Y luego, estos juegos, juegos ilusionistas, esas ventanas que no pueden ser... Son ventanas porque están cegadas, no pueden hacer de ventanas. Esas arquitecturas que, si os fijáis un poco, es una arquitectura extraña para un interior, porque son una arquitectura que crea muchos juegos de luces y sombras, con columnas, aquí esta gran liozo morena que casi hace de pilastra, columnas que se reúnen en los muros, que eran los juegos de luces y sombras. Es casi más... El aspecto de estas paredes es casi más estas ménsulas, estas ménsulas que tenéis aquí, de un tamaño también bastante considerable, pero es casi más el aspecto del exterior de un edificio, de la fachada de un edificio, que el de un interior. Resulta muy extraño encontrar en un edificio, encontrarte una sucesión de ventanas, como si estuvieras en la fachada de un palacio manierista, pero encontráteras en el interior de una estancia. Es como si hubiera cortado en distintos fragmentos la fachada de un palacio renacentista. De un palacio renacentista, como muchos de los que va a plantear Miguel Ángel, y hubiera cada una de esas partes lo hubiera colocado formando las paredes de esta estancia. Es una situación un poco extraña. Un interior que parece más por su decoración interior, unas ventanas que no son ventanas... Está un juego de juegos teatrales ilusionistas que está contraviniendo un poco las nociones que un espectador, que va todavía con su mirada y con su estética renacentista, esperaría encontrarse al entrar en este espacio y plantearse que voy a encontrar una escalera. Y de hecho, esta estancia donde está la escalera es una estancia de forma cúbica y tremendamente alta. De hecho vemos aquí, en este segundo tramo, que hay unas ventanas que sí actúan como ventanas, que Miguel Ángel no ha cegado como las ventanas del cuerpo más bajo. Por lo tanto, tenemos un espacio que se prolonga hacia arriba, prácticamente hasta el tercer lado, un espacio con unos elementos arquitectónicos de un tamaño desproporcionado y que nos lleva esa monumentalidad hacia un espacio muy alto. Y claro, cuando vemos eso y entramos con los ojos al arte renacentista y atravesamos esta puerta, lo que esperamos encontrarnos al otro lado de esa puerta es un espacio igualmente alto con esos grandes techos. Pero cuando atravesamos la puerta a la que nos lleva esta escalera de la Biblioteca Lorenziana, lo que nos encontramos por contraste es precisamente un espacio muy alargado pero muy bajo. Tremendamente bajo. Estableciendo un contraste muy marcado en lo que habíamos visto el interior, lo que esa zona de entrada nos había dado como expectativa, nos había sugerido como expectativas y lo que luego nos encontramos allí, que es totalmente lo contrario. Y de hecho, si os dais cuenta, la altura de este techo queda fundamentalmente a la altura de este entablamento. No pasa de ahí. Esta... Ahora, como veremos dentro de un rato, esta estancia cúbica es una torre. Luego la estancia en la que se sitúa la Biblioteca Lorenziana tiene una altura más baja. Pero eso es utilizado intencionalmente por Miguel Ángel para dar precisamente esa situación de ilusión que te genera unas expectativas y cuando atraviesas la puerta te encuentras un espacio totalmente distinto y organizado de una manera totalmente distinta. Con principios arquitectónicos totalmente distintos. Al contrario que en el Renacimiento, que veías la fachada de una iglesia, veías los arcos que tenía y decías tres naves, una nave principal con un arco de herradura más grande y nada más atravesar esa puerta voy a ver un punto de fuego que me va a llevar hasta el altar. En cambio aquí, pues tenemos saltados uno por uno todas las convenciones de esa estética y ese arte renacentista. Por lo tanto, es un ejemplo muy claro. Bueno, ahora voy a enseñaros unas imágenes de esta biblioteca. Esto que tenéis aquí, esta torre esa estancia cúbica donde está la escalera y esto todo que tenéis aquí es esa biblioteca propiamente dicha esa estancia de biblioteca alargada y de techo bajo. Por lo tanto, bueno, veis que no hay tanta diferencia en altura entre esta torre y esta estancia, pero bueno, el tejado es a dos aguas, claro, eso supone con ese tejado, con ese artesonado pues supone comerse un poco de la altura pero también juega un poco con esto y con sobrevalorar un poco esas alturas con respecto a la poca altura que hay en ese espacio interior Miguel Ángel. La biblioteca laureciana es una biblioteca que está en esta iglesia la Iglesia de Santo Lorenzo de Florencia que es una iglesia patrocinada por los Medici y la biblioteca laureciana va a ser patrocinada por León X. León X, que es un papa de Roma pero que es el papa de la familia Medici y uno de los grandes hitos de una familia noble italiana era que alguno de sus hijos pues se sentara en el trono pontificio. Por lo tanto, León X, un poco para hacer honor a su familia, a la familia de los Medici una de las familias más importantes en la provincia florentina, pues va a crear esta biblioteca laureciana dentro de esa iglesia que es un poco el estandarte y la forma arquitectónica de exaltación de su familia en esa ciudad. También hablamos de la tabla israelí laureciana en otras asignaturas como por ejemplo Arquipoder que también es uno de los ejemplos de ese uso de la arquitectura para mostrar el poder de las élites urbanas. Pues como digo, pues crearon esa iglesia y aquí tenéis uno de los claustros de la iglesia de San Lorenzo donde precisamente en este primer piso tenemos esa puerta de acceso a ese espacio donde está la escalera de la biblioteca laureciana. Y veis aquí que esas ventanas que están cegadas en el interior existen realmente en el exterior y se han cegado. Obviamente, posiblemente de forma funcional pues Miguel Ángel tal vez consideró que no era necesario crear ese doble juego de iluminación arriba e iluminación abajo. También podía haber suprimido la iluminación alta pero claro, al situar el foco de luz en la parte superior permite que haya cierto juego de luces y sombras que también hace destacar la arquitectura además tan apiñada con esos volúmenes en esa estancia donde está la escalera. Y las ventanas que veis que tienen esa estructura tan renacentista y esa modularidad, esas ventanas que van haciendo de módulo pero que cuando llegan aquí pues se ciegan para impedir y para crear interiormente ese efecto tan manuelista. Claro, funcionalmente la necesidad de crear una escalera monumental de acceso en este espacio con esta torre pues obviamente también tenía sus condiciones pragmáticas pero Miguel Ángel podría haber optado por hacer una escalera también monumental pero de unas dimensiones menores sin comer tanto espacio no podía haber pensado no hacer una decoración que llama tanto la atención y con esa estructura casi de fachada trasplantada a un interior. Casi la fachada que tenemos fuera el exterior que tenemos fuera es menos exterior es menos fachada exterior que lo que tenemos dentro o sea, contrasta muchísimo la desnudez casi brunellesquiana que tenemos en el exterior de esta biblioteca lorenciana con lo que tenemos dentro el recargamiento que tenemos que ya es propiamente manierista y totalmente totalmente establece totalmente un contraste o sea, es de nuevo otra vez esos juegos de que ves el exterior y te esperas una cosa entras en el interior y te encuentras algo totalmente distinto que te rompe los esquemas. Y el otro ejemplo que vamos a poner también de Miguel Ángel va a ser la piazza del Campidoglio la plaza del Capitolio del Campidoglio que es una de las plazas arquetípicas de Roma donde está donde había estado el templo de Júpiter o el Pimmo Massimo la colina donde había estado el templo de la divinidad principal de Roma con el foro romano que tenéis aquí detrás, con las ruinas del foro romano el propio palacio que tenéis aquí el palacio de la Asignatura que era el palacio del gobierno municipal de la ciudad de Roma obviamente el soberano de Roma y de los estados principios era el Papa pero Roma también tenía su propio gobierno municipal, gobierno municipal que debía vasallaje al Papa aunque había tenido durante toda la Edad Media unas relaciones bastante conflictivas el senado romano medieval con el Papa, había habido bastantes conflictos incluso que habían obligado al Papa a escapar de Roma por lo tanto vemos aquí este edificio muy emblemático donde está el gobierno municipal principal de la ciudad de Roma en un lugar muy emblemático del pasado de Roma y también muy emblemático de el propio poder de los Papas porque cuando los Papas eran elegidos como tales como jefes de la iglesia pero también jefes políticos de los estados pontificios realizaban en torno a Roma una especie de ruta inaugural en una especie de procesión triunfal en la que iban demostrando un poco su poder como señores de Roma y la plaza del Campidoglio era uno de esos puntos esenciales de esta procesión triunfal del Papa el día de su inauguración porque uno de los actos de esta era cuando el Papa subía la colina del Capitolio iba al palacio del senado, de la asignatura del senado romano, el gobierno municipal romano, no pensemos en el senado de la antigüedad romana este es otro, este edificio no tenía nada que ver con el senado de Roma pero conservaba ese título del gobierno municipal de Roma del senado un poco haciendo referencia a ese pasado glorioso y una vez que entraba allí recibía como señor, como soberano, como señor feudal de la ciudad de Roma el homenaje del gobierno municipal que en cierta forma se postraba y demostraba su obediencia a su señor natural por lo tanto formaba parte de esos actos rituales con los que el Papa demostraba un poco su poder y por lo tanto cuando el Papa le plantea a Miguel Ángel esta reforma de Campidoglio está buscando una escenografía que sirva de de una reforma arquitectónica que sirva de escenografía precisamente a esa muestra del poder papal y esa sumisión del gobierno de Roma y para ello Miguel Ángel plantea este proyecto que inmediatamente si pensamos un poco en eso que comentamos ya de la perspectiva monofocal del triángulo visual si pensamos un poco como organiza arquitectónicamente esta plaza del Campidoglio, del Capitolio Miguel Ángel vemos que es un gran trapecio cortado y cuyo lado más largo no está en este lado que es donde se situaría el espectador sino al fondo es decir invierte la pirámide la pirámide que podríamos suponer ideal de esa pirámide visual de esa pirámide monofocal de la perspectiva unilineal renacentista por lo tanto aquí ya tenemos una especie de juego visual que nos va a crear una especie de efecto peculiar porque de repente encontramos al hacer este utilizar este trapecio con esta especie de pirámide visual invertida hacemos que ese espacio se vea un poco magnificado al mismo tiempo coloca en ambos lados de esta plaza dos palacios para cerrar tenemos este palacio de aquí el palacio del Conservatori el Palacio de los Conservadores que actualmente es uno de los museos de la ciudad de Roma y este otro palacio el Palacio del Conservatorio es un palacio arquetípico como ya veremos en su día al hablar del palacio renacentista con todas las partes y todos los elementos del palacio renacentista pero este otro palacio que tenemos aquí es un palacio como veis truncado truncado es un palacio que está colocado al otro lado pero que su función única es de servir de contra imagen porque de hecho tiene el mismo tipo de columnas el mismo tipo de decoración el mismo tipo de fachada que el palacio del Conservatorio al otro lado de hecho no está pensado como un palacio para funcionar como el palacio autónomo sino simplemente como una fachada arquitectónica que cierre ese espacio y que haga el juego de simetría con respecto a ese Palacio del Conservatorio que cierra esos lados de la plaza pero al mismo tiempo esta rampa escalera de acceso al Capitolio ves que es una rampa bastante marcada Roma como ya comentamos es una ciudad con una topografía muy tortuosa con grandes desniveles y el Capitolio es una de las colinas de la antigua ciudad de Roma por lo tanto hay un gran desnivel que tiene que ser salvado por una escalera o por una rampa y se decide por una rampa escalera ¿por qué? porque fundamentalmente el Papa en esa procesión triunfal va a caballo entonces para subir correctamente no puede subir por una escalera porque eso para el caballo es difícil de subirlo entonces una rampa escalonada en varios tramos casi una rampa escalera que por la que el Papa pueda subir a caballo hasta llegar a esa plaza del Capitolio desmontar y entrar en el Senado recibir el homenaje de los patricios romanos pero cuando se plantea esta escalera aunque esta foto casi nos da la impresión de que es una perspectiva lineal ortodoxa vemos que es lo mismo esta escalera es más ancha en su parte superior y decrece en tamaño hacia la parte hacia su inicio por lo tanto tenemos de nuevo invertido ese triángulo que hipotéticamente idealmente si fuera una reforma renacentista esperaríamos encontrar casi dirigiéndonos en esa manera la perspectiva claramente definida pues aquí no aquí de repente hace eso pero esto además genera juegos visuales de hecho como la perspectiva visual funciona también como una forma de calcular la distancia visualmente crea un efecto óptico que hace que nos dé la impresión de que esta escalera es más corta de lo que es por lo tanto con medida que vas subiendo la escalera te das cuenta de que sorprendentemente esta escalera es más larga de lo que te había parecido cuando estabas abajo lo habíamos visto un poco cuando hablábamos de esos planos hacia las ideales las figuras los edificios que se sitúan escalonadamente hacia el fondo de esa perspectiva lineal donde convergen todos los puntos de fuga van poco a poco haciéndose más pequeños a medida que se alejan ley visual obvia lo que está más lejos es visualmente más pequeño y lo que está más cerca lo vemos más grande entonces por lo tanto si jugamos con esa ilusión y creamos un espacio más ancho más ancho y por lo tanto más grande arriba y abajo un espacio más pequeño nos da la impresión de que nuestro ojo corrige la ese juego de visual y nos da la impresión de que esa escalera es más corta pero realmente se hace más larga y cuando llegamos arriba a esa plaza abierta en ese trapecio invertido tenemos además dibujado en el suelo todas estas líneas todas estas líneas curvas que nos confunden y crean otra vez ese juego visual que nos descentra un poco y nos hace nos hace dar un poco nos desorienta un poco visualmente y que curiosamente combinado con ese trapecio lugar hace que muchas veces la gente cuando sube y ve esa plaza pues tiene la sensación de que precisamente la perspectiva que existe aquí es la contraria de hecho que tiende a pensar que esto está organizado como un trapecio con pirámide visual típica y tópica que pues no esas ilusiones visuales con las que juega Miguel Ángel pues están nos están engañando por lo tanto ilusionismo y cuando el Papa sube en su caballo por esta plaza llega aquí y aquí a los lados hay dos colosales a una escala mucho más que humana, estatuas de Castor y Polus, Castor y Polus son los Dioscuros que en la antigua Roma eran patrones de la aristocracia ecuestre romana por lo tanto los patrones de la aristocracia romana en una plaza donde está el senado municipal de Roma reciben reciben a ese Papa que llega también a caballo también de forma ecuestre y en medio de la plaza encontramos la estatua del emperador Marco Aurelio justo en la confluencia de esas líneas de perspectiva la estatua del emperador Marco Aurelio que no estaba en estos momentos en esta localización y se coloca es profeso para crear ese efecto en este momento tenemos por un lado el senado municipal el Papa que ha subido por esa escalera recibido por los Dioscuros y en medio la figura del emperador creando una imagen, una analogía entre el Papa que sube a caballo y el emperador que lo espera haciendo la idea de que en cierta forma el Papa es el heredero el heredero como señor de Roma de los emperadores romanos y esto está muy bien pensado porque el Papa además había siempre tenido y siempre había reclamado su primacía como como en cierta forma herederos de la legitimidad imperial con respecto al imperio romano el Sacro Imperio Romano Germánico de hecho los Papas reclamaban que por la donación de Constantino directamente el imperio había pasado a ellos y por lo tanto un emperador solo podía ser coronado por el Papa que a su vez había devuelto a Constantino su corona imperial una vez que se le había sido cedida por lo tanto esa falsa donación de Constantino era el precedente de esa supremacía papal que los Papas reclamaban falsa y esa imagen tan potente en lo ideológico y de fondo el gobierno municipal donde acto seguido el Papa recibe el homenaje del Senado Municipal Romano en tiempos bastante levantistas y bastante rebelde contra el Papa por lo tanto ese juego entre la forma que nos crea estos efectos expresivos y el significado que hay detrás de todo esto pues va a estar muy en la línea de marcar ese efecto escenográfico y teatral de toda esta representación y una vez pasado el manierismo y ya entrando todavía más en crisis esos principios del clasicismo estricto entramos ya en el barroco que podemos ver ejemplificado por un lado en esta imagen y en esta frase de Wolfring que dice que el barroco no ofrece ninguna terminación y de hecho si lo veis en la imagen lo veis frontones de los edificios que de repente en vez de continuar se cortan y se introducen en medio imágenes de escudos o de santos el propio entablamento que se parcela se corta en una serie de tramos se especie de troquelan en distintas maneras por lo tanto indicándonos esa falta de terminación la quietud desaparece este juego de volutas de formas redondas de por ejemplo en este entablamento que unas partes salen para fuera otras partes se rehunden para adentro crean este juego de luces y sombras todo eso que indica en la fachada un movimiento que estaba totalmente ausente por ejemplo en un edificio renacentista si vemos un edificio renacentista como cuando típico y tópico del siglo XVI vemos inmediatamente edificios que fuera dan una impresión ya lo vimos hablar de Brunelleschi o de Alberti son edificios que dan por fuera una sensación de quietud y de falta de movimiento de equilibrio total esa idea de que cuando quitamos algo como vemos algo inmediatamente se rompe ese equilibrio en cambio el barroco va a jugar precisamente a crear esas sensaciones de movimiento a que el espacio una fachada de un edificio no sea lineal, no sea continuo esté cortado unas partes se hundan otras se adelanten de repente el frontón se parta y se introduzca incluso en medio otro elemento que impide cualquier conexión visual entre esas dos partes del frontón todo ese juego de tensiones que ya estaban un poco anunciados en esas contraindicaciones que hacía el manerismo al nacimiento pero que ahora se van a llevar a un estado todavía más radical podemos decir introduce el devenir la tensión, la inestabilidad y de todo ello resulta la sensación de movimiento un movimiento desaforado y una cierta inestabilidad y una cosa que yo siempre comento por ejemplo de este caso de Santa Clara que no es una iglesia que dé tanta sensación de movimiento en su fachada como otras pero sí que enfatiza mucho esa idea de inestabilidad y tensión porque está coronada aparte de estos estas entradas y salidas del entablamento de estos fortones cortados veis que está coronada por un gran mole cúbica un gran cubo de piedra un gran cilindro de piedra que pesa realmente toneladas o sea que está sostenido casi en apariencia en equilibrio sobre estos elementos realmente no está tan en equilibrio está perfectamente colocado, ensamblado y no hay posibilidad de que se caiga pero la sensación visual que tienes cuando estás aquí debajo del completo de Santa Clara en Santiago y ves estos espacios que el entablamento sale para afuera el frontón se corta e incluso veis que el frontón de arriba de todo sobresale un poco hacia afuera y encima tiene ese gran cilindro de piedra pues tiene esa sensación de estabilidad que muy poca gente conozco que no haya tenido esta flota no lo refleja bien pero muy poca gente que conozca no ha tenido esa sensación estando justo debajo o al lado de que de repente ese gran cilindro de piedra se te va a caer encima y te va a espachurrar es realmente una sensación de tensión en cualquier momento se nos cae esa mole de piedra que está ahí para que parece no muy bien sostenida y que además tampoco tal y como están dispuestos los elementos no nos permiten ver que está perfectamente anclado y que no hay posibilidad de que caiga por eso tanto el juego de ilusiones esa realidad esa tensión generada por todos estos elementos pues nos da esa sensación esa sensación de zozobra tan típica del barroco que pretende impresionarnos, que pretende crearnos esas tensiones al ver esas obras barrocas y ahora vamos a ver un poco más en detalle las características que tiene el barroco y también haciendo un poco contraste con el renacimiento propiamente dicho y también ese manerismo hay elementos que el barroco va a mantener el manerismo en oposición al clasicismo renacentista pero al mismo tiempo también va a haber elementos con los que entraba en conflicto el manerismo que sin embargo sin embargo perdón, sin embargo el barroco va a recuperar va a recuperar pero de otra forma distinta, una interpretación bastante distinta que la que ofrecía por ejemplo el arte renacentista por ejemplo, uno de los elementos claros del barroco es que pierde el carácter modular esa idea de unos módulos que se repiten fijamente pensábamos por ejemplo en los edificios incluso podíamos ver en esas fachada interior de esa estancia de la escalera de la vivienda clandestina que veíamos esas ventanas que no seguían la proporción pero que si seguían esa modularidad de ventana, ventana, ventana columnas adosadas ventana, ventana, ventana bueno pues esa modularidad ahora en el barroco se pierde esa idea de repetir una serie de módulos para crear un ritmo desaparece va a buscar el ritmo y mucho más y mucho más el movimiento que el renacimiento que era un arte muy quietista muy inmóvil pero lo ha buscado otras formas sin embargo aunque pierde ese carácter modular recupera la idea de proporción y la idea de eurisma de buena disposición entre las partes de las dos nociones que estaban vinculadas al contrario que el manerismo que iba a jugar con la desproporción iba a alterar las proporciones iba a hacer que no cuadraran las proporciones para precisamente llamar tu atención el barroco va a estar muy preocupado por establecer y determinar las proporciones canónicas y aplicar esas proporciones a todo edificio y así mismo va a estar muy en la cabeza de los arquitectos barrocos la idea de que las proporciones colocadas de una determinada manera crean esa buena disposición ese ritmo y esa belleza esa eurimia pero la concepción de la eurimia que tiene y de la proporción que tiene el barroco comparada con la concepción que tiene de la eurimia y la proporción el renacimiento es totalmente distinta habíamos visto que cuando el renacimiento se planteaba las proporciones pensadas a la medida humana en una escala humana una escala antropomorfa incluso habíamos comentado la idea de que las proporciones del cuerpo humano daban unas bases para las proporciones de la arquitectura que a su vez eran reflejo de un orden cósmico en cambio ahora lo que pretende el barroco precisamente es buscar unas proporciones que den precisamente idea de superación de ese antropomorfismo van a negar el antropomorfismo van a buscar columnas que sobrepasen las proporciones totalmente antropomórficas espacios y fachadas con unos elementos arquitectónicos que van a ser tremendamente voluminosos tremendamente grandes y que por otro lado van a dejar al sujeto que los ve totalmente apabullado y van a dar una idea de que ese es un espacio que no está hecho en dimensiones humanas intentando transmitir con ello una sensación de trascendentalidad de induir al espectador en un espacio que escapa del humano que va hacia el trascendente que por lo tanto también escapa de las dimensiones humanas no es un mundo ya hecho a la imagen del hombre sino es un mundo en que el hombre contempla una arquitectura hecha a la imagen de potencias que son superiores al hombre en este caso en concreto fundamentalmente van a ser la iglesia y el estado absoluto que va a intentar apabullar al observador con esas imágenes monumentales que transmiten un poco su poder que sobrepasa al poder del hombre y del individuo no existe por lo tanto y eso es también muy típico de la mentalidad de Rocco esa confianza en las posibilidades del hombre, de las posibilidades del sujeto y de las posibilidades de la razón por lo menos individual si lo habrá en las posibilidades de la ciencia para cambiar la realidad el hombre no es nada con respecto al poder de Dios, no es nada con respecto al poder de la iglesia o del estado absolutista de estos momentos Importancia y también la importancia de la relación entre el espacio exterior y el espacio urbano mientras que los edificios renacentistas funcionaban dentro de un contexto urbano comentamos que había ya los inicios de esa idea de planificación pero cuando se plantea un edificio renacentista se planteaba como una unidad cerrada con respecto a ese exterior urbano si, está en ese exterior urbano pero no se piensa en interrelacionar el edificio y su vida interior con ese medio urbano voy a explicarlo con el caso de los palacios cuando vemos un palacio renacentista vamos a ver que los palacios renacentistas son grandes cubos cerrados en sí mismos con una pared con ventanas continua que nos cierra totalmente la posibilidad de entrever lo que está ocurriendo, la vida de corte que está ocurriendo dentro de esos palacios de la élite ciudadana en cambio cuando llega el barroco esa idea de que la vida de corte está cerrada por ese muro y que no se expresa hacia afuera en el contexto urbano se va a disolver totalmente los palacios barrocos se abren al exterior al contrario de esos muros cerrados de esos espacios cúbicos cerrados totalmente acantonados dentro de sí mismos y que solo juegan solo juegan en la medida que cierran esa vida privada de corte o esa vida un poco más restringida con respecto al contexto urbano exterior los palacios barrocos se van a abrir van a abrir plazas incluso van a hacer juegos visuales que permiten observar zonas del interior del palacio o intuir que se puede incluso circular el espacio de ese palacio está un poco interlacido con la vida y con la circulación de personas en la vida urbana por lo menos en teoría y por lo tanto van a expresar esa vida de corte ese poder de las élites hacia afuera de los muros de esos palacios de la élite lo mismo sucede con las iglesias las iglesias renacentistas estaban pensadas para ser planteadas en un mundo urbano pero lo que era importante una iglesia renacentista es el interior la fachada era importante tenía sus ciertas lógicas pero la apoteosis de una iglesia renacentista es cuando entrabas y contemplabas esa pirámide visual que te iba llevando hacia el altar en cambio las iglesias barrocas funcionan muy de forma muy activa con respecto a su contexto urbano exterior y lo vamos a ver ahora claramente en este ejemplo San Carlos de Cuatro Fontanes es una iglesia cuya fachada como veis aquí está realizada en una esquina de una pequeña plaza en la que concluyen varias calles y que veis una arquitectura totalmente espectacular que está pensada para interaccionar con la gente que circula por allí la fachada está pensada para que la gente vea esa arquitectura y se sienta un poco interpelado por ella en cambio si pensamos por ejemplo en Santa Teresa de Manto vemos una fachada de iglesia así pero no nos llama tan de cerca la atención, hay que también pensar por ejemplo cuando vemos estas iglesias por ejemplo San Carlos de Cuatro Fontanes está situada en una confluencia de calles, una pequeña placita que marca un cruce de calles dentro de una ciudad como es Napa entonces hay que pensar también que está muy pensada para interactuar con toda esa vida urbana no solo con la vida urbana cotidiana sino sobre todo con por ejemplo las grandes festividades los grandes hechos de esa vida pública urbana por ejemplo procesiones triunfales porque entra el nuevo virrey de esta ciudad en este caso no, porque es Roma pero por ejemplo en Nápoles algún otro ejemplo las procesiones de virrey o el emperador que entra en este caso en la ciudad de Roma y para ver el papa también su recorrido está jalonado por estas iglesias y en cierta forma está buscando un juego visual con esas numeraciones más importante todavía en el caso de las iglesias las procesiones, procesiones como la Semana Santa, el Corpus que hay que entender también que la ciudad se llena con toda una serie de arquitecturas efímeras complementarias con las que al mismo tiempo esas arquitecturas no efímeras de las iglesias pues van interactuando de repente esos cruces de caminos pues te encuentras en las fachadas de esos cruces de caminos en las esquinas, pues esas iglesias esos edificios que inmediatamente juegan también a transmitir ese mensaje ese mensaje que de otra manera pues está transmitiendo esa procesión religiosa ya sea el Corpus ya sea la Semana Santa toda adornada con esas imágenes tan barrocas de Cristos sufrientes y de toda esa serie de cuestiones por lo tanto se busca en cierta forma un efecto teatral que interaccione con esa vida urbana, cosa que era totalmente novedosa con respecto al Renacimiento y en la línea de esa búsqueda te da ayuda tenemos esa búsqueda de atención, de la sorpresa tú vas por una calle normal de Roma y de repente al llegar a un cruce de repente tu atención se ve tremendamente atraída por esa iglesia de San Carlos de Puerto Fortale no puedes evitar fijarte en ese espectacular iglesia que está transmitiendo ese mensaje ¿cuál es el mensaje? pues sumamente una iglesia está transmitiendo una exaltación del poder de la iglesia en una época tan convulsa como es la contrarreforma en la que la iglesia tiene que plantearse una forma de transmitir su mensaje de forma sencilla y accesible conmoviendo al público a través de la arquitectura, a través del arte a través de toda esta serie de cuestiones la monumentalidad es impresionante por sus dimensiones y por la propia uso que hace de la arquitectura con ese movimiento total estos frontones que prácticamente hacen esa especie de ola caprichosa, todos esos espacios cóncavos convexos que andan una serie juego de luces y sombras espacios más rehundidos espacios que sobresalen y que al cabo del día pues distintas incidencias del sol en cada una de sus partes pues va creando perspectivas y juegos de luces y sombras distintos en el exterior de los edificios ese juego y uso de la luz y no digamos ya en el interior en el que muchas veces se juega a ese contraste entre el tenebrismo y el uso de puntos de luz concreto que a lo largo del día inciden en una imagen, en un retablo concreto creando esos efectos muy estereográficos y muy teatrales que busca siempre el barroco San Carlos de Puerto Fortale entramos en San Carlos de Puerto Fortale que ya casi nos pide entrar en San Carlos, ver esa de repente encontrarnos en esa esquina de ese cruce de calles este edificio tan impresionante y cuando entramos pues vemos todo ese juego de volúmenes lobulados con esas semicúpulas sobrepechinas, esa cúpula que nos lleva hasta arriba muchas veces, en este caso no pero muchas veces las cúpulas o las bóvedas de las iglesias renacentistas juegan de hecho con esa idea de trascendentalidad o sea, nos llevan hasta esa cúpula y cuando llega a la cúpula las columnas que ya han acabado porque han llegado al entablamento, de repente la pintura ilusionísticamente nos dibuja otras columnas que siguen todavía prolongando más arriba la arquitectura hasta que de repente llegan, se acaban y empieza el cielo, empiezan los ángeles empiezan las imágenes de los santos de la trinidad, una serie de elementos que ya hace que casi podamos ascender visualmente hasta ese mundo sobrenatural ese mundo divino que nos lleva a ese mundo trascendente transmitiendo precisamente ese mensaje religioso, el mensaje en el caso de los edificios civiles de los edificios que fundamentalmente va a patronizar la ética urbana o las monarquías va a ser el de exaltación precisamente del poder de esas monarquías, edificios con unas dimensiones muy muy sobre sobrepasa mucho la escala humana precisamente para dar la idea de lo poco que es el individuo delante del poder del estado del estado en sus estados absolutos y además con refrendo teocrático porque son reyes por la gracia de Dios ¿es posible que representen la trinidad en la fachada? estás hablando del yesu ¿no? bueno el yesu anterior me parece un poco no, no es la trinidad creo que son santos porque aparte si os fijáis un poco tienen vestidos traje como de monjes o de frailes no sé quién es este personaje central y eso que es otro santo bueno, tendré que consultarlo ¿a la solución de la fachada? no, no exactamente no creo que haya esta asociación porque de hecho aunque veis que está partida en tres partes esta organización en tres de la fachada que también veis por ejemplo en este otro edificio barroco pero es un poco más inicial que es el yesu que también hay una división en tres de la de la fachada no no responde tanto a esa idea de transmitir una verdad teológica es más bien lo explicaremos cuando hablemos de las tipologías es un esquema que está imitando y reformulando un modelo clásico que es el modelo del arco del triunfo el modelo del arco del triunfo el llamado esquema del arco del triunfo cuando hablemos de él va a ser reutilizado de forma muy creativa durante inicios del nacimiento para crear la forma arquetípica de la fachada de una iglesia primero nacientista después barroca y llegará prácticamente hasta la época neoclásica ese esquema que será muy recurrente que es el que se utiliza pero a la manera barroca o sea con esas juegos de curvas de ondulaciones que rompen totalmente cualquier parecido casi como el original pero manteniendo como veremos pues los las grabaciones me pregunta vuestro compañero pues están colgadas están colgadas en INTECA y creo que en alguna parte de vuestro curso habitual tendréis que tener algún enlace a eso pero bueno si no después si no las habéis encontrado pues podéis consultarla y junto con las grabaciones en vídeo también está está la presentación en pdf de que os paso aquí en cada en cada tutoría podéis descargar directamente junto con el vídeo cuando entréis en esa en esas grabaciones bueno y quedamos aquí en el yesu vamos a dejar el yesu para el próximo día y sólo comentar sólo comentar del yesu de nuevo pues algunas cosas bueno vamos a comentarlo todo empezamos tarde bueno pues el yesu lo que hablábamos un poco de ese juego con la decisividad sombras aquí si lo vemos nos da la situación nos da la sensación de ser una fachada bastante plana con bastante poco relieve desde luego tiene bastante menos relieve por ejemplo que sea Carlos IV de Fontanes que es una iglesia ya barroca más más tardía ya está el del barroco un poco más desarrollado el yesu de Viñola que es un autor que está a medio camino entre el barroco y el manierismo pues todavía es un barroco podemos decir incipiente pero ya tiene todos los elementos ya tiene todos los elementos como veremos en otras tutorías y podéis ver que si el muro es bastante liso no tiene muchas luces y sombras pero si nos fijamos en el mismo edificio a otras horas del día el hecho de que haya estas pilastras que sobresalen el hecho de que se corten por ejemplo en tres partes los frontones no tan a lo bestia podríamos decir como San Carlos de la Puerta de Fontanes que prácticamente todo está troquelado y partido cada uno de los elementos de arquitectura clásica está partido en distintos fragmentos ensamblados pero veis que ya unos elementos se ponen más hacia delante otros se rehúnden y eso hace que a lo largo del día según Ícido del Sol se van creando juegos de luces y sombras en el exterior siendo una iglesia que todavía pues comparada con otras iglesias barrocas posteriores pues desarrolla bastante poco ese claro oscuro en la fachada pero cuando entramos en el interior pues vemos eso que os comentaba también sobre los interiores con esas aquí no se ve en esta imagen pero esta movida que tenéis aquí arriba pues tiene precisamente ese juego de arquitecturas ficticias que continúan hasta que nos encontramos precisamente con la gloria los ángeles, los santos, todo ese mundo divino que nos lleva ya a otra esfera edificios muy ricos decorados con oro en el que como veis las ventanas están aquí en una posición muy alta porque hablamos un poco también al hablar de la biblioteca valenciana Miguel Ángel para precisamente jugar un poco también con esos contrastes en la arquitectura de los luces y las sombras déjala la iluminación de más abajo cegada en favor de la iluminación superior lo cual hace que se cree en esta parte baja sombras, sombras que a lo largo que se mueve el sol como he dicho se mueve la tierra a lo largo del día con respecto al sol pues vaya creando hilos de luz que van iluminando de una forma u otra las arquitecturas y manteniendo esa especie de juego de penumbras juego de luces y sombras el Marroco es un arte las iglesias marrocas en su interior son en cierta forma tenebristas pero también son muy necesarias en el Marroco el uso de la luz porque la luz está constantemente usada para precisamente para entrar en medio de esas tinieblas de esa arquitectura un poco en penumbra y destacar unos elementos u otros y muchos retablos barrocos aunque esto ya es escultura pues están pensados precisamente para que a lo largo de todo el día pues ese juego de luces y sombras de iluminación por un lado iluminación por otro pues ve dando distintos aspectos distintas imágenes esas imágenes para impresionar un poco esa retina del espectador y como veremos pues en su día el yeso es uno de los ejemplos arquetípicos y prototípicos de esa arquitectura barroca por otro lado el niño clásico que creo que vamos a dejar para el próximo día y que podemos adelantar que por ejemplo si el manierismo y el barroco son una reacción contra determinadas convenciones de la estética clasicista renacentista el niño clásico a su vez es una reacción contra el barroco y que paradójicamente por un lado va a recuperar elementos obviamente de la estética clásica del renacimiento pero al mismo tiempo va a plantear y ahí es donde está la paradoja una serie de contradicciones y de negaciones de algunos elementos que por otro lado eran nucleares en la teoría arquitectónica de renacimiento lo cual da una declaración es más un revival de renacimiento pero al mismo tiempo el barroco y el siglo XVII no han pasado en vano y hay una serie de elementos que de la teorización renacentista que ya están un poco de moda y que ya empiezan a ser aceptada como general la crítica de estos entonces por lo tanto el niño clásico va a responder un poco a estas dos esta dicotomía de tal forma como revival pero al mismo tiempo como revival que niega un poco también al renacimiento pero bueno, esto lo dejaremos para el próximo día muy rápidamente al principio pues ya remataremos esto y empezaremos ya con el segundo tema introductorio que es el tema de la teoría de los órdenes muchas gracias y el próximo día continuamos vamos a ver