Arturo, Jorge, Lizardo, Laura, Magia, Milagrosa, Milagro, Soraya, Sonia, bienvenidas, bienvenidos todos, buenas tardes, gracias por estar aquí en la sesión en directo. Bien, como este tema es un poco largo vamos a comenzar, vamos a comenzar, ¿de acuerdo? Ya estamos grabando la sesión. Comenzamos hoy la segunda parte del manual dedicado a Espacio, ya hemos visto hasta ahora Cuerpo y ahora vamos a Espacio. El primero de los temas propuestos, Espacio 1 va a versar sobre conceptos geográficos, ¿verdad? Ecológicos también, paisajes y mapas. Os pongo aquí en pantalla de qué va, ¿verdad? Verdes paisajes y vamos a estudiar aquí. Itinerarios sagrados y piedras que se mueven, lugares que se mueven, mapas y paisajes, naturalismo y esquematismo. Paisajes que se oyen y no se ven, el elemento visual más que el auditivo. Paisajes como visiones del mundo, cosmologías, cosmogonía y finalmente una poética del espacio. Ha entrado Soraya, Milagro, Arturo, Carlos, Jorge, Luisardo, Laura, Maricarmen, Gijón. Ha entrado Milagrosa, Milagro, Soraya, Sonia. Bienvenidas, bienvenidos. Bien, a partir de aquí ya comenzamos, ¿de acuerdo? Bien, espacio 1. Paisajes y mapas. Verdes, paisajes. Así comienza el primer epígrafe de este manual. Lo primero que tenemos que reflexionar cuando hablamos de paisaje es entender este término como un producto, una construcción cultural. Construimos el paisaje de acuerdo con nuestras apropiaciones culturales. En este sentido es un poco subjetivo, ¿verdad? El paisaje natural dado por la naturaleza ya anterior es el paisaje que nos viene de adentro. Pero que nosotros transformamos, el hombre transforma, el antropos transforma, lo antropiza y pasa de ser paisaje natural a un paisaje ya cercano. Hasta el punto de que el concepto paisaje es una calificación universalmente asumida. Ya no es la naturaleza natural, es algo que incorporamos, que antropizamos. ¿Verdad? Y ha llegado, forma parte del patrimonio de la humanidad de la UNESCO. La UNESCO tiene un epígrafe dedicado a paisajes culturales. que tienen esa categoría patrimonial esto es un paisaje cultural de tal manera que el paisaje implica un modo un modo de mirar el paisaje en torno natural a partir de que ese entorno natural lo miramos y le asignamos unos valores, se convierte en paisaje la etimología del paisaje viene de país como referencia física, como referencia facial parece que esto implica cierto objetivismo, subjetivismo porque paisaje implica ya una visión una visión subjetiva, cultural lo culturalizamos lo construimos, lo idealizamos lo interiorizamos y le asignamos valores emotivos, estéticos visuales por lo tanto paisaje es una especie de descubrimiento cultural de la naturaleza que está ahí y el concepto se ha asociado a cambios demográficos económicos y a formas de vida que arrancan desde el siglo XVIII y XIX básicamente Tiene que ver con el desarrollo de las ciudades, la migración de la población rural a las ciudades, hasta el punto de que luego en Europa el paisaje es la contemplación del campo que hace el individuo urbanitario, es decir, la ciudad. ¿Verdad? Una construcción intelectual sucede hoy, cuando nos vamos a la sierra a ver los paisajes de la sierra, porque vivimos en la ciudad, en el asfalto, en las calles, en las plazas, y descubrimos el paisaje. El supuesto, como dice nuestro manual, discutible, supuesto discutible, y hasta cierto punto real, es que lo que vive en el medio rural no contempla en el paisaje como lo contempla. ¿Por qué no contemplamos lo que averiguo de la ciudad? Porque estas personas que viven en el medio rural son los propios sujetos integrados en el paisaje, forman parte de él. Por lo tanto, no lo perciben de la misma manera que lo percibimos nosotros, los urbanos. ellos no han trabajado, han roturado los campos han trabajado en las montañas con sus ganados con las ganaderías, el caso de la ciudad de Cali de Basalema, de Villaluenga, de Menocá el que vive en el pueblo, el paisaje para él no tiene el valor que tenemos nosotros, es el medio donde se absorbe la vida y donde se va con el ganado a pastar en el campo y a recoger ganado, eso es sustento por lo tanto la valoración intelectual es distinta distinta valoración intelectual y todo esto nos lleva a reforzar sobre una antropología del paisaje y aquí está en la página 316 la interpretación psicologista de Gombrich página 316 la interpretación psicologista de Gombrich que remite a pautas culturales Que remite a pautas culturales. Hay ideologías asociadas al paisaje, como cita Berlingham, 1986. Ideologías. La pintura de paisajes es una realidad y mezcla una ideología de una clase social que ve el paisaje desde un punto de vista burguésico. Es decir, el campo visto desde una posición social dominante de una burguesía, de una realeza a la que el campo le estacía. Porque lo ve como una verdadera maravilla, distinta a lo que lo tienen que trabajar. Aquí va a surgir la pintura paisajística y la representación idealizada de la realidad social del campo. Pintura del 18, el 19 y la pintura romántica. Por lo tanto se está en la línea de las elaboraciones ideológicas. El paisaje y ideología de una clase, vinculada en este caso, que se está expresando, a las parcelaciones de los cercados en Inglaterra. Por lo tanto el paisaje es objeto estético, objeto cultural, representaciones idealizadas. que se contradicen con la realidad social del campo. Aquí estamos entrando en el terreno de las ideologías, de la jerarquía, de la clase y del poder. Hay otro análisis en la página 318 que es el que hace Green, 1995. El análisis de Green. Una versión particular de una élite en la cultura occidental. O sea, el paisaje debería estar para quién. Volvemos al poder, ¿verdad? ¿Qué sentido tiene? Tiene otros aspectos del paisaje en las propias sociedades occidentales. Influencia en los estados de ánimo del paisaje, en el urbanismo, los jardines, las plazas, ¿verdad? En el ocio. Hay muchas petáforas asociadas al término paisaje. Paisaje, ¿verdad? Para mucha polisemia o metáfora, ¿verdad? Paisaje interior, paisaje del alma, como decía Unamuno, ¿verdad? Paisaje del alma. El valor de los paisajes. Paisajes de las distintas sociedades humanas. Ideas, creencias asociadas. Paisajes contemplados. Paisajes experimentados. Hasta el punto de que van a surgir etnoteorías del paisaje. etno-teoría del paisaje paisaje asociado a distintas visiones desde distintas etnias de distintas visiones del mundo de lo que puede ser el paisaje por supuesto transculturalmente, ¿verdad? El siguiente epígrafe es itinerario sagrado y piedras que se mueven ¿se sigue todo bien? Bien ¿Xavier Miquel se acaba de incorporar? Bien, de acuerdo Seguimos El siguiente epígrafe tiene que ver con itinerario sagrado y piedras que se mueven Ahora nos vamos a trabajos de campo etnográfico en sociedades de Papua Nueva Guinea y de Australia y vamos a ver aquí que hay otras formas de construir los paisajes estamos en el relativismo cultural relativismo cultural en la construcción cultural del concepto de paisaje cada Cultura tiene una concepción, de ahí que podamos hablar de etnopaisajes. Antes decíamos etnoteorías del paisaje y ahora podríamos decir etnopaisajes. Visiones del paisaje asociadas a cada cultura. Ejemplo, paisajes míticos de las sociedades de Nueva Guinea y Australia. Son episodios del pasado que son registrados y experimentados espacialmente. Se registran en rasgos geográficos, quedan grabados en la geografía. Quedan grabados en colinas, en montañas, en ríos, en lagos. Lo tenéis en la página 319-320 en esta cita de Cama, de 1990. Y aquí se observa que hay piedras con un valor mítico. Y esto lo conocemos también en el valor de las montañas, de los volcanes, de muchas culturas. Paisajes que se hacen míticos. Humanos, se inmortalizan. En estas sociedades el mito está hecho lugar. Como han trabajado Ramsey y Weiner, año 2001, el mito emplazado. Place miss. Esta forma de registrar los mitos indica una fuerte identificación de la gente con la tierra. Los ancestros, la sustancia, el poder revelado, la fertilidad. Es un paisaje percibido con valores y significados. Los hitos, la montaña, el río, el lago, la piedra, la barca, el árbol, son claves. Claves con las que se identifican las personas y las colectividades. Porque están enlazando en esos lugares geográficos lo emocional, lo social. Lo político. Se está recargando la memoria del pasado. Y se proyecta en el presente de cada pueblo, de cada etnia. Por eso, etnopaisajes, etnoteorías del paisaje. Hay dos tipos de itinerarios en estas sociedades melanésicas, que son sobre las que estamos hablando en estos trabajos etnográficos, y sociedades melanésicas y australianas, que son, por una parte, itinerarios sagrados, y por otra parte, lugares que se mueven. Lugares. Fijos, pero que se mueven. El primero de ellos, el itinerario sagrado, está trabajado en la página 325. Son los itinerarios del sueño, itinerarios del sueño, entre origen australiano. Estamos hablando de su cosmovisión, del sueño entendido como tiempos míticos, tiempos sagrados, tiempos del nacimiento, ¿verdad?, de los primeros héroes, de los primeros dioses. Uno de ellos son las rutas para la obtención del agua, vital. Y estos puntos de la ruta están asociados a episodios del mito, a leyendas del mito, como la del canguro guatimán y la del hombre, el gualán. También en estos itinerarios sagrados hay dibujos en la tierra, dibujos en la tierra. ¿Cómo interpretarlos? ¿Son paisajes o son mapas? Pues no son solo territorios, sino que son mapas. Son rasgos físicos, episodios legendarios, míticos. El mito crea el paisaje. Por lo tanto, el paisaje deviene un producto cultural. Esto lo expresó el informe Mumford de 1935. El paisaje, por lo tanto, supone una cosmovisión, una visión del cosmos. Cosmos es el orden, ¿verdad?, del mundo. Cosmos, sabéis que lo opuesto es caos. Cosmos, orden. Caos, desorden. El paisaje es una cosmovisión del mundo, una visión del mundo ordenado, una forma de concebir el mundo, de pensar el mundo. En este sentido, el paisaje, por lo tanto, es un producto cultural. Viene a continuación el estudio de Glowczeski, 1991, que tenemos en la página 322, sobre los Walfili, una etnia, una tribu del Cáceres. El territorio norte de Australia. Aquí los ancestros han dejado marcas en la tierra, vigilan en los lugares. Los lugares tienen nombres propios. Surge una toponimia y una antroponimia, donde se toman nombres de anheladas, de plantas, de fenómenos naturales, que se convierten en lugares totémicos. porque se entiende que esos lugares están habitados por los antepasados y para toda la eternidad, hasta el punto de que esos tótemes van a dar lugar y a nombre al patriclán que vive disperso en ese territorio tribal. Estos seres tótemicos, de cualquier clase, dejan huellas, marcas, y tienen itinerarios con episodios narrativos que se transmiten en el seno de estos clanes o patriclanes, y estos actos se realizan en el paisaje y son secretos, y los lugares son inaccesibles para los no iniciados, los habitos de paz. Así que tenemos aquí tótemes, relatos, es decir, historias, orales, itinerarios míticos, todos ellos reciben el nombre genérico de curawiri, curuari, perdón, curuari. Lo objetivo es pintar un modelo. Y pintar un motivo asociado a un lugar. Y pintar un motivo asociado a un lugar le hace creer que tienen acceso al itinerario. Es como si dibujásemos un mapa y pudiésemos viajar a través de ese mapa. El sueño les va a permitir el contacto con los ancestros. Y a través del sueño introducirse en ese espacio mítico que ellos llaman Yukurpa. Es decir, por abreviar, esta cosmología muestra que los itinerarios míticos de estos Walu Piri no delimitan territorios. Más bien, significan paisajes. Constructos culturales. Esta cosmología no establece fronteras formando espacios cerrados. No pone límites al mundo. Enlaza lugares y les conduce a los Walu Piri de un lugar a otro llevados por el sueño. Son itinerarios del sueño. Los paisajes son a la vez figuración gráfica y construcción cultural. Otro caso es el de los Yulku. Yulku, los ricanos, dibujos de paisaje local. Hay aquí una conexión con los ancestros. Otro caso, los Ngaraca, los huesos de los ancestros. Vemos aquí que se produce una especie de triada, una relación triádica entre clan, ancestros y lugar, el terreno. Esto equivale a una conexión entre gente, patrilinaje, tierra, derechos y ancestros, continuidad. Por eso, itinerarios ancestrales. También están presentes conceptos como mitos, que tienen el valor de la continuidad. El mito establece una continuidad entre el presente y el pasado, entre la gente actual y sus ancestros. Historia, pasado, memoria. Mito y tierra, presente. Luego están los lugares que se mueven. En la página 326. Elementos del paisaje que viajan. cuevas, piedras o que se mueven o que cantan un ejemplo etnográfico es el de los Garingin los Garingin de Kimberley un territorio de Australia occidental aquí se muestra en estos lugares que se mueven como tierra y cuerpo están interpenetrados como como coda de este primer avance dice nuestro gobernador una doble paradoja los paisajes melanísticos y australianos es decir, los itinerarios míticos o sagrados los lugares que se mueven estos paisajes permiten comprender por contraste dos concepciones del paisaje en occidente que se deben a un supuesto naturalismo, entre comillas conjuntos e englobantes en los que se sitúan elementos singularizados por una parte y por otra entendernos como marcos fijos Entender el paisaje como un tiempo detenido, y se refieren a seres humanos, a personajes, elementos transitorios. Esto, por una parte, es lo siguiente. En cambio, los itinerarios míticos de las sociedades aborígenes australianas están hechos, estos itinerarios, de puntos conectados por la memoria de los antepasados. Hay una fuerte carga mitológica en estos itinerarios míticos. En ambos casos hay vinculación entre la Tierra y los seres humanos, pero no se trataría de un universal cultural. No es un universal cultural. Las diferencias están en el modo y en el grado como los seres humanos se entremezclan y se distancian de ellos. Estamos ante una situación paradójica, dice Honorio Velasco. Se es elemento del paisaje, formo parte del mismo, pero para apreciar el paisaje me tengo que distanciar. Tengo que tomar perspectiva para verme desde fuera. Bien, pasamos al siguiente epígrafe, paisajes y mapas. Paisajes y mapas. Sé que se están incorporando nuevas personas, les doy las buenas tardes y continuamos. Bien, paisajes y mapas. Mapas y paisajes. Ahora entramos en los paisajes como formas con visiones impuestas por el entorno. Es decir, el paisaje se modela por las formas de la orografía, las formas del terreno. Así recuerdan a rocas, a montañas, perfiles de animales, de humanos, de seres sobrenaturales. Yo recuerdo antes que era verdad la peña de los enamorados. Es una peña que recuerda a un enamorado, con su frente, la nariz, ¿verdad? Eso está ahí en Tequera, en la provincia de Mara. Toman formas, perfiles de animales, de humanos, de seres sobrenaturales. El volcán, como el padre, la madre, ¿verdad? La madre tierra. Incluso olores del paisaje, sabores, edad, edad, vértigo. En los aborígenes australianos, Rajnoji marca para su supervivencia, sin duda. Y lo nombran para tener conexiones entre lugares donde pueden obtener recursos. Le facilita la identificación del lugar, con lugares donde se puede obtener agua, caza, frutos, ¿verdad? Va a surgir aquí el mapa. Una parte del paisaje, pero luego el mapa. El mapa es una construcción previa al paisaje. Es una imagen de un espacio con un fin utilitarista. Puede ser para la supervivencia, para la explotación comercial. Los mapas de minas, ¿verdad? Expresado en términos sincrónicos, aquí y hoy. Pero por ejemplo, hemos citado antes los hualpiri del territorio norte australiano, la toponimia incluye en el mapa la dimensión-tiempo, la memoria, la diacronía, nuestros mapas son sincrónicos. En el mapa hualpiri se acumula, además del espacio, el tiempo, la diacronía. En este sentido el mapa sería posterior al paisaje. El mapa sería una especie de abstracción geométrica, una construcción abstracta de lo que es el paisaje físico, que es real. Aquí nos estamos refiriendo un poco, ¿verdad?, y podemos recordar lo que hemos aprendido en esquemas y modelos culturales, planes, guiones, en la antropología cognitiva y psicólica. El mapa sería el nivel más alto de abstracción, mucho más que el paisaje. Con un mapa podemos esquematizar el mundo entero, el universo. El mapa da sensación de objetividad, el paisaje de subjetividad. Los mapas se construyen con una pretensión de validez universal. Ahí está la geografía. Aquí, con un siglo de matemáticas y geometría, se han construido los paisajes y mapas convencionales. Y están culturalmente codificados. Hoy día ya, más lejos, el Google Map. Ahí lo tenemos, ¿verdad? El Google Earth también. También, mapa del universo. Incluso tenemos los mapas, si entramos en determinadas aplicaciones, mapas de nuestra galaxia. Podemos llegar a conocer. La representación espacial está presente en todas las sociedades humanas. Bueno, desde siempre. Parece que es una dotación cognitiva de nuestra especie. Esa representación espacial y pasarla con un esquema en el suelo, ¿verdad? Aquí está el este, el oeste, aunque con otras palabras, ¿verdad? Derecha, izquierda, arriba, abajo, lo representamos. Una especie de orden de experiencia. Parece que estamos dotados para representar el espacio-mundo. Que podría ser una metáfora del espacio, una metáfora visual del espacio. Estamos acostumbrados a construir nuestro mundo a través del espacio y del tiempo. Bien. Como ejemplo, os pongo aquí a la izquierda el mapa de Zatalu Yuyuk en Turquía, datado en el año 6200 a.C. Esto es un mapa que se ha encontrado y se ha coloreado y se ha visto que es así. Parece que es el mapa de una ciudad donde cada cuadrado tiene que ver con una vivienda. Otro es el petroglifo de Valka, Mónica, datado en el 2500 a.C., de Brescia, de Itália. Lo tenemos aquí a la derecha. Los primeros mapas cristianos, en el sentido TO, lo tenemos en la página 331, están citados mapas en las etiquetas. La etimología del San Isidoro de Sevilla, ya en el siglo VI-VII. El mapa como enciclopedia. basado en fuentes bíblicas clásicas latinas ¿qué reflejan los mamás de esta época? pues la ciudad de Dios, de San Agustín donde Jerusalén es el centro del orden y el centro se situaba arriba, el este arriba otro caso es el mapamundi de Beato de Liebre del 776 la finalidad de este mapamundi es indicar gráficamente el lugar que corresponde a cada uno de los apóstoles en su diáspora los apóstoles cristianos, cuando muere Cristo una diáspora por todo el mundo y van a tener una labor misional entre los pueblos hasta el punto de que a Santiago se le representa como que está en Hispania de ahí contribuir al mito de Santiago el agonizador Santiago Apóstol y el mito de las peregrinas y de Santiago pues ya estaba anunciado por Beato de Liebre porque escribe la cabeza de Santiago a Galicia en Hispania Muy potente, pero ahí está. Aquí tenemos estos casos, a la izquierda el mapamunde de Beato de Llébana, este ejemplar, este mapa se conserva en el manuscrito de Burgo de Oshma, fechado en 1886, la copia es de 1023, y el este está en la parte superior, con los doce apóstoles. Otra representación del mundo, el mapamunde de Aledrisi, 1154, siempre el este, que es el centro Jerusalén, arriba, el este, arriba, Jerusalén, la ciudad celestial, el ombligo del mundo, en términos de Mircea Elía. El mapamunde de Aledrisi incorpora los conocimientos de los comerciantes, de los exploradores árabes, sobre África y el Océano Índico. Aquí, en este diadrisi, la clave es que el polo norte se encuentra en la parte inferior del mapa, el polo norte abajo. y el polo sur arriba, porque estas culturas vivían en el sur, entonces el sur se pone arriba, que es lo importante. Son rutas comerciales, son rutas comerciales, aquí hay dos elefantes, parece ser, pero en medio, rutas comerciales, ¿por dónde pasar? Pueden ser montañas, aunque pasen trompas de elefantes, pueden ser montañas, cordilleras, y pasos naturales para ubicarse en el tiempo y saber dónde dejar las caravanas. También hay cartografía en Egipto, Grecia, Roma, Nacimiento, hay muchos mapamundis históricos. Otro es el de la Catedral de Jerez, lo tenemos aquí a la izquierda, principio del siglo XIV del Reino Unido, o el mapamunde del Salterio, de la abadía de Westminster, en Inglaterra, de hacia 1265. Fíjense, en el centro, aquí. el ombligo del mundo Jerusalén el ombligo del mundo para las tres culturas, religiones monoteístas y el este aparece arriba el este, la ciudad arriba, bajo Jesucristo con el paraíso terrenal, el paraíso no terrenal en el este, arriba una simulación de lo que es el cielo otro es el japonés budista de Jotenjiku Zu del catorce, asociado a los lugares de la vida de Buda aquí se mezcla para el linaje mente-relación, todos utilizan recursos semejantes de construcción del espacio un marco de orientación orientarse hacia oriente el este hecho oriente nos orientamos hacia el este, el centro del mundo el vago mundi ombligo del mundo el axis mundi, el eje del mundo es oriente, el este un mundo circular con el oriente arriba, el este que nosotros ponemos arriba, el norte estas culturas ponían el oriente, el este Muchas veces estos mapas tenían la función de enciclopedia, una información bíblica, con fuentes clásicas, latinas, divulgaciones de conquistas, viajes de Alejandro Magno, muchas veces con fines didácticos, como el mapa Mundi de Jerez o de Inglaterra. Además, mapas como marcos de orientación, asociados a consumovisiones de los miembros de las respectivas culturas. En la tradición bíblica, Oriente se situaba en la parte superior del mapa, porque era el lugar del paraíso, Jerusalén, el este, arriba, en la parte superior. Ya luego los mapas tolemaicos, mucho más científicos, ya están liberados del sesgo religioso. Ya empiezan a aportar una conexión laica del mundo, y la orientación es heliocéntrica, el norte en el centro, del lado superior del plano. Ya empiezan a ser mapas de la ecumene, del mundo conocido, desde la India hacia el este, hasta las Islas Fortunadas, lo que son las Islas Canarias al oeste. Ahí está el mapa que hemos dicho de Al-Idrisi, del siglo XII, que sitúa en Arabia, en la posición central, arriba, en lo que se llama etnocentrismo transcultural, o el que hemos dicho antes del mapamundi y del salterio. Por lo tanto, los mapas y los supuestos ideológicos que los mantienen. En el mapa se traduce en jerarquías, ambiciones de denominación, mapas políticos, con mayor énfasis actualmente al hemisferio occidental que al oriental, más al norte que al sur. Ahí están convenciones a través de las cuales subyacen ideologías políticas, ideologías culturales, imperialismos, colonialismo, con este privilegio del hemisferio occidental sobre oriental, del norte sobre el sur. Hay muchas convenciones en los mapas, en los signos icónicos, en las leyendas, son distintas para cada cultura. Vean las interpretaciones que se establecen en las páginas 335 y 336. Gracias. Las convenciones en los mapas actuales abarcan todo, formas, escalas, marcos de habitación, tierras, mares, cordilleras, ¿cómo nombrar los mapas?, ¿en qué lengua?, ¿de acuerdo?, muy vinculado con los imperialismos, con la lengua de los imperios. ¿Y qué han de reflejar?, depende de cada cultura, muchas veces son convencionales, presencia humana, grupos humanos, ocupación, propiedad, terrenos, aguas, son reflejos de los instrumentos en la interacción entre los grupos humanos y los territorios, son interpretaciones culturales del mundo y simbólicas. El mapa sí es verdad que debe ser objetivo, debe de contener en sí mismo muchos elementos de conocimiento para facilitar la comprensión. Están focalizados en el terreno, en la geografía, y muchas veces no está presente el agente, está como oculto. Ya hemos dicho que un mapa implica convenciones, predominios geoestratégicos. Relaciones de dominio y de subordinación, configuraciones centro-periferia, tipificación de otros pueblos. Y hay distintos tipos de mapas como conocemos, mapas geológicos, físicos, políticos, climáticos, enciclopédicos. El paradigma de mapa, no obstante, es el mapa físico. Y hay mapas con nombre y sin nombre. Las sociedades ágafas también tienen los únicos, con otros códigos, pero los tienen. Utilizan otros signos convencionales, pero los tienen. Los mapas tratan de proporcionar una ilusión de realidad, es una metáfora, es una extracción. Son productos culturales y son modelos de, y también modelos para la realidad. Modelos del mundo, modelos para la construcción del mundo. Vamos ahora a naturalismo y esquematismo. Página 342. Paisajes y mapas como dos polos de la representación del espacio. Una parte naturalista, pero el mapa es esquematismo. Con el mapa lo que hacemos es construir un paisaje en pequeña escala. Y también hay mapas de gran escala. El ejemplo lo tenemos en Google Map. En Google Map entramos y podemos hacer la escala que queramos. ¿Y qué tiene que reflejar un mapa? Nosotros podemos describir un mapa. Hacemos un viaje, nos cogemos un papel, un lápiz y dibujamos nuestro mapa. ¿Y qué vamos a recrear? Lo que nos interesa. Una montaña, los mineros, dónde hay minería y qué tipo de minerales. Espacios físicos, ríos, vías de comunicación, carreteras, caminos, sendas, veredas, cartas náuticas, los mapas del mar. Todo ello muchas veces conectado, sobre todo los primeros mapas, con la expansión del colonialismo. Por ejemplo, los mapas en la toponimia de origen europeo. Tierra de la madre de la reina Isola, tierra de la reina Victoria, tierra del rey Felipe, isla filipina, Felipe II. Estamos traduciendo ahí, en la toponimia, la reclamación de territorios ultramarinos para las metrópoles. Obvio, ojo, que esta tierra ya se conoce como tierra del rey Tamas. Es decir, que está del rey de Inglaterra, del rey de Holanda, de la reina de Holanda, de la reina de Escandinavia, de la reina de España. Es una especie de apropiación del espacio. Primero se produce ese espacio, se nombra en una lengua. Luego se produce la apropiación con el imperialismo y el capitalismo. Muchas veces los mapas surgieron con un fin plenamente utilitarista, político, imperialista. Comercial. Hay un estudio etnográfico de Gou, 1997, página 343, muy interesante, sobre un poblado de la Amazonia peruana, Santa Clara, en un estudio reciente etnográfico. y la implicación del parentesco en el paisaje. Aquí estamos vinculando parentesco y paisaje. Espacios, construcción de vivienda, pobladores, chamanes, muertos, difuntos, gente. Gou sugiere que los mapas, en este caso peruanos, y los paisajes pintados no son tomados de muchas culturas orales como representación de los espacios. Esa es una visión endocéntrica. En determinadas culturas no están dirigidos a nadie los mapas. Ni pretenden que en ellos se vean espacios. Representan poderes, institucionales, su parentesco, su realidad. Los poblados son tanto escenarios del parentesco como producto de él. El paisaje como referencia de narraciones de experiencias personales. En el caso, aquí está el esquema del paisaje de Santa Clara en la página 344-345. El río, la selva, vueltos, poblados, la parte del espacio, la parte de los pobladores, la parte de los parientes, almas, difuntos, en fin. Los chamanes todos. Gou, este etnógrafo, sugiere que los mapas y los paisajes pintados no son tomados en muchas culturas orales como representaciones de los espacios. En estas culturas, estos mapas representan poderes, instituciones, y se imponen como un sub para éste, su realidad. Pasamos ahora a paisajes que se oen, paisajes acústicos, diríamos, ¿verdad? Es un sesgo en la visión del paisaje, que estamos habituados a decir que el paisaje es algo que se ve, al sentido de la vista, a la percepción visual. Y ahora estamos ante un contraste cultural extremo. Estudios sobre sociedades de Papua Nueva Guinea, del norte de Australia, que confirman que hay en nuestra visión del paisaje occidental un sesgo etnocéntrico, visualista. Por lo tanto, ahora tenemos que vernos con unos paisajes en ambientes selváticos, donde tenemos... Donde entra la luz, donde el entorno visual es restringido. Ejemplo de la película, el piano. No sé si han visto esta película, el piano. Ahí vemos perfectamente en qué consiste un bosque de estas culturas. Un bosque oscuro, húmedo, donde no entra la luz y donde no hay claridad. Por lo tanto, no seguían el paisaje, las rutas del paisaje no son auditivas, perdón, no son visuales sino auditivas. Hay dificultades en mostrar el paisaje en estos ambientes selváticos donde la visualidad está restringida, son cerrados a la vista, pero se pueden potenciar otros sentidos, sentidos acústicos, sonidos, olfativos, olores. Esto se ha estudiado en culturas como los caluri, los zoi y los humedas. Estas ciudades no carecen de paisajes, los tienen, pero los construyen de otra manera. Ya no son paisajes visuales sino sonoros. Sound escapes, ¿verdad? En término británico, paisajes sonoros, sound escapes. Un caso de interacción entre ecosistema y construcción cultural del paisaje. Una aproximación naturaleza y cultura desde otro centro, el auditivo. Por lo tanto, aquí surge onomatopeya, el simbolismo del sonido, donde la iconicidad no es visual ni conceptual, sino es fonológica, auditiva, acústica. El icono suena, se percibe por el oído. Por ejemplo, el simbolismo del sonido en la lengua humera de Papua Nueva Guinea y la lengua kaluli, también de Papua Nueva Guinea, que tenemos en las páginas 347 y 351. Bien, el agua que cae, en el caso kaluli, el agua al rociar, que fluye, la débil recta, que hace giros en especial, el agua salpicando, o en la lengua bosal, ¿verdad? En la lengua bosal también. Es importante entender a la lógica de esta importancia de los sonidos en pueblos de selvas tropicales. Una experiencia que se ordena según ejes de espacialidad y temporalidad. Aquí el paisaje, más que visual, está tenido de sonidos incesantes, distintos. Y los sonidos evocan lugares puntuales, es algo así como si sonorizasen lugares. Y yo recuerdo en qué lugar estoy con el sonido que asocio a él. Lo que la vista no permite, lo va a facilitar el sonido. De ahí la alta iconicidad del sonido. Estamos sustituyendo el sesgo visualista por un sesgo acústico, por el distinto ecosistema, por las selvas ocultas. No se ve, pero se oye, se percibe. De ahí la alta iconicidad del sonido. Encontramos... Encontramos ello con la baja iconicidad visual. Entre los calumni, el paisaje no es una construcción visual, sino kinestésica, sonora. En el caso de los mozabes, los nombres del lugar son nombres de tierra conformadas por el agua, nombres para sonidos del agua moviéndose, en fin. Pasamos al concepto de paisajes como misión del mundo, paisajes como misiones del mundo. volvemos a la construcción cultural del paisaje que se lleva a cabo con miradas, con sonidos, con gestos pero también muchas veces con sentido los paisajes son fragmentos concretos de una visión en nuestra cultura, sesgo y solita normalmente el paisaje es visto estas culturas que hemos comentado es cierto que resulta así, pero en nuestro mundo occidental nosotros el paisaje lo vemos con los ojos y también es escuchable, evidentemente si vemos un paisaje en el campo, pues podremos percibir sonidos evidentemente, sonidos de las hojas al caer sonidos de los árboles, sonidos de los pájaros pero básicamente visualistas hay dos caracterizaciones de estos componentes de los paisajes yugán por una parte, anclaje, espacio temporal de acciones, acontecimientos es la trama física de la memoria colectiva y personal Una memoria incorporada, incorporada a través de la fijación de elementos acumulados a lugares determinados. Otro ejemplo etnográfico que nos suministra el manual es la toponimia de los apaches occidentales en Estados Unidos. Los nombres describen detalles físicos de los lugares. Aquí se usa la toponimia para recordar que algo importante para una etnia sucedió allí. Y así el paisaje va a evocar la memoria, los sentimientos, estados de ánimo. Los paisajes van a recordar el parentesco, la continuidad como pueblo en esos mismos lugares, historias ejemplares. Sobre todo aquí en los indios de los apaches de los Estados Unidos asimilados culturalmente por las culturas blancas. Los nombres de los topónimos en apache, en la lengua local, indígena, relatan acontecimientos. Condensan su historia, evocan un paisaje moral, paisaje interior. los topónimos hablan los topónimos memorizan acontecimientos míticos de estas culturas las leyendas tradicionales en Europa por ejemplo la página 356 que enlazan topografía toponimia episodios históricos de poblaciones en muchos casos las leyendas de fundación de santuarios en nuestro propio país en España fíjense, muchas veces el orden es, el área se usa una luz una imagen la imagen se asienta en un lugar y se produce una inversión simbólica de la identificación de la población con el lugar a través de la imagen un topónimo un nombre físico se hace primero agiónimo, el nombre sagrado virgen de la montaña y termina siendo antropónimo, por ejemplo virgen del valle valle se convierte en nombre la virgen del valle aparece en el valle y el valle se hace ya topónimo y la virgen del valle se hace nombre de mujer Es el sentido del lugar como un universal relacionado. Es decir, que los paisajes permiten reconocernos a los individuos, a nosotros mismos y a las poblaciones a sí mismas. En este sentido, para finalizar este epígrafe, citar la Convención Europea del Paisaje de Florencia, año 2000, insistiendo en el mantenimiento de los paisajes transfronterizos. Un ejemplo de la raya hispanolusa entre Portugal y España. Paisajes transfronterizos compartidos. La raya hispanolusa, la frontera entre España y Portugal, desde Ayamonte, Huelva, hasta La Guardia, en Tui, en Galicia. Pasando por Octavucía, Extremadura, Castilla y León y Galicia. El paisaje también se ha incluido en las listas de paisajes de interés europeo. Porque dice la Convención Europea del Paisaje, el paisaje coopera en la elaboración de las culturas. Y representa un componente fundamental del patrimonio cultural y natural de Europa. contribuyendo a la consolidación de la identidad europea, el paisaje. Finalizamos con Poética del Espacio. La reflexión antropológica que estamos desarrollando en esta sesión descubre los paisajes dos dimensiones, espacio y lugar. Espacio como fondo, vacío, abstracto, carente de sujetos. Y lugares, cuidado, ya son formas perfiladas, ya son antropológicos, delimitados, concretos, con presencia de sujetos, con focos de referencia, como decía la psicología de la Gestalt. En este sentido tiene mucho que ver la obra de los lugares y no lugares de... Lugares y no lugares. A ver, ¿quién era el autor? Demar Auge. Es la diferencia entre un mapa físico, sin sujetos, con sujeto abstracto, espacio físico, y el mapa mental, con sujeto, espacio humanizado. Se citan aquí las distinciones de Merleau-Ponty, página 358, espacio geométrico, sin sujeto, espacio antropológico, con sujeto. O la de Cepto, versión estática, geométrica, versión dinámica, antropológico. Paisaje como una configuración cultural, donde interseccionan el espacio abstracto y el lugar antropológico. Lo geográfico, geometría, lo sociológico, antropizado. La diferencia espacio-lugar recoge dos tradiciones de análisis simbólico. Por una parte, la poética del espacio, tratada por Bachelard en el año 57, y la vinculación sociedad-lugar que hemos comentado, que implica la existencia, social-lugar implica la existencia de los no-lugares, como construcciones de la postmodernidad. Mara Ullé, su obra sobre los no-lugares, que hemos estudiado, ¿verdad?, y que vamos a estudiar en este epígrafe, en este tema de Espacio 4. La poética del espacio ha privilegiado el estudio de las... de la mitología clásica, las artes, la poesía europea, como ha puesto de manifiesto Durán. La Cuática del Espacio dice en nuestro manual, Honorio Velasco no ha tenido en cuenta los datos proporcionales por la ecografía. Véanse los símbolos, los símbolos ascensionales, espectaculares, diaréticos, que muestran situaciones de ruptura. Como expresa Durán, y tenemos en la página 360, símbolos ascensionales, símbolos espectaculares, símbolos diaréticos. Aquí hay una crítica, la mezcla de elementos de tradiciones y culturas diferentes. Mucha vez este análisis puede estar descontextualizado y susceptible de ser tomado como idéntico o ya insignificado cuando no lo son. Asunciones de universalidad de la política del espacio está en la página 360. Por ejemplo, la postura corporal vertical de la especie humana. El predomino del sentido visual, como una posición de altura. ¿Ves? Con todo lo que es teorema de simbolismo asociado y de jerarquía metafórica. Hay una crítica a la poética del espacio de Durán, efectuada en 1981. Critica esta poética del espacio de Bacharach, ¿de acuerdo? Bien, es un artículo largo, es un tema largo. He intentado ser breve, no sé si lo he conseguido, pero ya lo hemos terminado. El próximo día hablaremos de espacio y cuerpo. Espacio y cuerpo, ¿de acuerdo? Por mi parte, pues nada más. No sé si tienen alguna cuestión que quieran plantear. Bien, muchísimas gracias. Gracias a vosotros por estar ahí. un placer que hayan asistido a la sesión buenas tardes Soraya creo que te ha quedado la última buenas tardes despedimos, voy a cerrar