Sí, podéis entrar. Ya tenéis la grabación de la semana pasada. Acordaos que la primera semana hubo líos. Normalmente las tendréis a partir del viernes, salvo que me surgiese algo, como hacemos nosotros la encolación de todo eso. Yo el viernes por la tarde tengo un rato y es el momento que aprovecho para hacerlo. Además, hoy miércoles, mañana les da tiempo a ellos subirlo a la plataforma, nosotros la encontramos y hacemos todo el proceso y demás. Entonces, normalmente, salvo que hubiese alguna causa de fuerza mayor, el viernes lo tendrías y si no, como mucho, el domingo por la noche. Estaría a vuestra disposición. Bueno, nos habíamos quedado con los monofisitas o como queráis, los que calculan que el principio, la fe, es un elemento. Y luego tenemos otros dos autores, básicamente, tres. Sí, consideramos Aristóteles... Aristóteles, quita, borra. A Pitágoras, como también otro, que es el número. El número es la perfección, por lo tanto, es el origen del universo, lo perfecto, la matemática, todo eso. Que es un poco lo que se explica. Luego ya vimos que son... tipo un poco secta que funcionaban y acabaron metiéndose en líos y acabaron siendo expulsados y casi los cargan y todo eso, porque en fin, era un poco así en plan hippie, en ese sentido, con mucha matemática, pero no es así. Luego teníamos dos personajes. Uno que decía que nada se mueve y el otro que dice que se mueve todo. Muy bien. Ya hemos visto Pantarray, que ahí Panta, Efei, todo fluye y todo transcurre, que dice que la vida es cambio, el cambio es motor y realmente es así. Sabemos que todo lo que hay en el universo, como decían los romanos, pulpus eris et pulpus reverteris, polvo eres y en polvo te convertirás y aparecerás hecho una plantita, no sé qué, tal y cual, y volveremos a la cadena y demás, ¿no? Bien. Pero hay algo que no les cuadra y esto es lo que representa Parménides, el ser. Ya os dije que el término ser, el verbo ser, de cualquier lengua del mundo, da igual que sea de origen indoeuropeo o de cualquier lugar del mundo, es el término más controvertido que existe, porque el ser implica existencia pero también cualidad. Yo soy alto, bajo, lo que sea, pero yo soy. Entonces, ¿cómo lo entendemos esto? Pues ese es el problema. Y el problema del ser, de la existencia, el ser como existencia, el ser humano, lo que os comentaba, consideramos que el mundo existe. Muy bien. Muy bien. Cerramos los ojos, ya no existe. Luego vuelve a existir. O sea, hay una realidad que a nuestros sentidos se nos escapa, de alguna manera. Lo que está pasando de al lado no nos enteramos. Y si estamos ahora viendo esto, no estamos haciendo otras cosas, por lo tanto, no nos enteramos de nada. Y gracias a eso existe el mundo del periodismo, que nos informa de lo que ocurre, ¿no? Es decir, no tenemos capacidad de entenderlo todo. Nosotros vemos la realidad según nos pasa a nosotros, lo que siglos después, en el siglo XXI... En el siglo XX dirá Ortega y Gasset, yo soy yo en mis circunstancias. Somos hijos del modo que nos ha tocado vivir, la época y demás. Esto creo que está claro, ¿no? Bien. Pues dentro de esto hay una realidad. Para los griegos tenía que haber un principio, y ese principio era eterno. Y la eternidad para ellos lo entendían como algo inamovible. Algo que tenía que ser siempre igual. Vale, entonces, os lo comenté ya el otro día, esto volvemos a repasar un poco. Bien, ¿qué ocurre? Que si era siempre igual no podía moverse, no podía cambiar porque ya sería otra cosa. O sea, incluso lo que os dije, si se desplaza, aunque sea la misma masa, ya no está exactamente ahí mismo, ya no es exactamente igual. Hay que ver, ¿eh? No tener internet ni televisión, lo que lleva a hacerle de darle al copo al personal, ¿no? Bien, pues bromas aparte, ese era Parménides. Algunos autores ven en Parménides una respuesta consciente a Heráclito, otros ponen Heráclito después de Parménides, otros, en fin, para gustos colores. Simplemente lo que quiero es que cada autor daros cuatro ideas para que luego cuando lo estudiéis podáis verlo, ¿no? Bien, el evidente oposición a Heráclito encontramos en Parménides el concepto de ser. Solo el ser es, en cambio el no ser no es. Esta es la frase fundamental. Me gusta por lo bien que te explicas. ¿No? Bien, es lo que os dije, para resumirlo. Lo que pensamos. Teoría del Big Bang. Explota algo, muy bien. Eso que explota, ¿existía o no existía? Existía, ¿vale? Pero alguna vez se debió crear. Si viene del no ser. No, ya estaba. Entonces entendemos la eternidad. Pero la eternidad, ¿cómo surge? ¿O es que el tiempo es infinito? No, el mismo dice que el tiempo surge a partir de la explosión. Las dimensiones surgen tal. Estamos en esa, ¿no? O sea, nunca sabremos el fin. Bueno. A este ser le atribuyen Parménides los mismos atributos que Penófanes al Dios todo. Es decir, es eterno, inmutable, es idéntico a sí mismo, es la única realidad. Cuando tenemos que explicar algo que no podemos ver y tal, ¿cómo lo hacemos? Tenemos dos opciones. Una, aplicarle todos los calificativos que queramos intentando ajustarlo a algo que la gente entienda, como era el concepto de Dios. O esto es cómo. Como esto, como otro, intentando explicarlo, ¿no? Pues claro, ellos lo hacían de esta manera. De hecho, Parménides cuando empieza todavía lo hace en verso. O sea, Parménides escribe todavía. También verso. Y esto es la diosa que le ha dado, siempre eran los mismos los dioses que le daban ahí talas. A ver si es que se habían tomado algo o lo que sea, ¿no? Dirían algunos autores lo afirman. Pero bueno, son de una escuela un poco rara, ¿no? Bien, entonces eso tenía que ser eterno. Si era eterno, lo lógico nos dice que en primer lugar, si tiene que ser siempre igual, es indivisible, porque ya serán dos iguales, ya será otra cosa. O sea, veis un poco la lógica del mundo clásico, ¿no? Bien, luego os va comentando el ser que es algo infinito, acabado y semejante a una esfera perfecta y homogénea. Esto es fundamental. Para los griegos, la figura perfecta era la esfera. No tiene aristas. Por lo tanto, representa la perfección. No hay nada que pinche, no hay nada que tenga alguna arista. Eso es la perfección absoluta. Por lo tanto, ellos lo representaban ahí. Bien, luego en otras épocas del ser humano se dan otro tipo de figuración. Pero para el mundo clásico era la esfera. Para ellos era la pera limónica, ¿no? Según interpretación, fijaros que el libro siempre se está haciendo lo mismo, Diego. Según esta escuela, según estos otros, según... Porque es que con los textos que nos ha llegado, si a lo mejor si Parménides se levantaba y aparecía por la puerta, me daba hasta en el carnet por decir tonterías porque yo no quería decir eso. Pero bueno. No sé si te viene mucho el caso, pero es una curiosidad que me surge cada vez que hablamos sobre este tipo de filosofía. La filosofía moderna, todo esto que explica, o sea, eso es algo como lo que es la filosofía, en esta época está desfasada, no existe, todo eso... No, no existe, hay escuelas neoplatónicas hoy en día, adaptadas al mundo moderno. O sea, ten en cuenta que la filosofía, nosotros vamos a ver cómo la filosofía... Y ahora estamos buscando algo que nos explique el porqué del mundo, porqué de la existencia, ¿no? Y entonces con esto ahora estamos viendo los que son el mundo material. Entonces Heráclito y Parménides se preguntan por esa existencia que es, que existe, cómo tiene que ser. Heráclito dirá que todo fluye, que todo cambia, que es el mundo en movimiento porque lo ves. Tú ves que llegan las estaciones, es como explican ellos las estaciones del año. Perséfone, Cárdenas... Esto de Hades, todo eso se mueve, ¿no? Vale. Claro, de Ocubina, que para explicar estos conceptos, lo veremos ahora cuando lleguemos a Platón, estos conceptos de movimiento y no cambio... ¿Qué es lo más sencillo? ¿Cuál es el conejo de la chistera? Creo dos mundos. Un mundo que sea eterno, inamovible y el otro que es un reflejo de eso. Y cada uno lo va a explicar. Platón y Aristóteles lo veremos, lo va a intentar explicar de una manera o de otra. Aristóteles era el mundo del hiperunano, más allá del universo conocido. Mientras que Aristóteles dirá, vale, eso existe, porque tiene que haber algo que sea inamovible, que sea eterno. Pero yo no puedo conocerlo. Lo único que puedo hacer es intuirlo a través de lo que tengo en la Tierra y por deducción puedo intentar entender eso. Así aparece la ciencia, ¿no? Y Aristóteles, como era un poco... Siempre lo comparo así con los alemanes, un poco cacodrasos, no saben qué les gusta. Y para clasificarlo, pues Aristóteles siempre hago la broma, que es un poco en este sentido. Y empezó a sistematizar el conocimiento. Las categorías, todo eso que se lo habéis leído haber dicho, ¿y este hombre qué hace? Bien, no os preocupéis, no tenemos que conocernoslas todos de cara al examen porque no es eso. Tened en cuenta que si solo hiciésemos Aristóteles y Platón teníamos que dedicar un año entero a cada uno, para entenderlo bien. O sea, para entrar en cada... ¿Qué quiere decir cuando está aplicando esta categoría? ¿Qué quiere decir cuando todo eso? Pero simplemente es así. Bien, ¿qué ocurre? Que las religiones, poco a poco, ocurre al final del Imperio Romano, empiezan a introducirse otra vez el concepto de inmortalidad. Aquí hemos visto que están los misterios, el Eusino, todas estas cuestiones que sí que hablan algo de alma, ¿no? Sócrates lo meterá, todo eso, pero al final del Imperio, ya veremos el mundo helénico, si lo habéis leído, en el mundo helénico se acaba la metafísica y yo siempre digo que son libros de autoayuda, o sea, ¿cómo paso por este mundo? Pero el ser humano tiene tendencia a ir más allá. Entonces aparecen las religiones que prometen la eternidad. O sea, que no solo es el cristianismo, también estaba el culto de Mitra, de origen oriental, que tenía muchísimos afectos en Roma. Y de hecho hay un par de sitios que podéis bajar a ver los templos de Mitra, que en Roma tenían mucha fama. Lo que pasa es que el cristianismo ganó más adeptos. Seguramente por todos los motivos que se fueron perseguidos, no perseguidos y demás, tenían esa cuestión. Bien. Cuando el cristianismo coge eso, ¿qué va a hacer la religión? Una religión, que eso le va a pasar al judaísmo y al islamismo, que es el tema que vemos. O sea, yo tengo mi religión. Pero esa religión no es sólo creer, no es sólo una cosa de decir uuuh, sino que tengo que consolidarla, demostrar que es verdadera a través de la ciencia. ¿Y la ciencia del momento qué es? La filosofía. Entonces tienen que cuadrar esa religión dentro de los movimientos filosóficos. Entonces, les va muy bien a todas las religiones que haya un mundo. Un mundo eterno, que sería Dios, y un mundo cambiante, que es la Tierra. Es el mundo material, ¿no? Luego ya, si es la dueña Aristóteles, ya lo veremos, cambia. Muy bien. ¿Qué ocurre? Que teniendo esa imagen perfecta, Dios hace todo y ya está. Pasamos todo a la edad media. En la época moderna se produce un cambio brutal. Porque ya veréis, habéis visto que saltamos del siglo XIV a Descartes. Nos saltamos prácticamente todo el Renacimiento porque no hay filosofía y de hecho hay el renacer de la escuela platónica y aristotélica. En Italia cuando cae Constantinopla, o sea, todo eso existe pero tampoco podemos verlo todo y mucho menos. Sino que lo que ocurre es que aparece Descartes, después de romperse la cabeza en un molino porque se fue a pensar un molino y con las ruedas aquellas ñiqui ñiqui ñiqui, yo siempre me ha hecho gracia, que se pasó meses ahí dentro sin salir hasta que escribió el discurso del método y dijo aquello de Códito Ergo Sum. Pienso, yo, luego yo existo. ¿Cuál es la base de mi existencia? No es Dios. No son los seres, no es la naturaleza. Es mi vida. Es mi propio yo. Yo soy el centro del universo. A partir de la filosofía moderna todo eso desaparece y poco a poco se va asentando en el ser humano. Eso lo veremos en la segunda parte de la asignatura, va avanzando y llegar al último gran metafísico que es Hegel. Yo creo que no se entendía ni él. Pero bueno, o sea, si un día queréis un libro así para hacer unas buenas siestas, cogeros alguna de las obras de Hegel y vais a acabar con dolor de cabeza porque, no, está haciendo, hay algunas obras de Aristóteles que son también para decir, bien, me siento, respiro hondo y a ver si me entero de algo. Claro, porque intentan explicar las cosas de tal manera que realmente es complejo seguirlos. Pues Hegel va a hacer lo mismo, pero claro, Hegel va a seguir con la metafísica, pero no puede fijarse en Dios. ¿Dónde va a meter ese mundo inmóvil? En mí, en el ser humano, pero en mi alma, en mi espíritu. Claro, tiene que mantener eso. Después de Hegel desaparece prácticamente la metafísica. Después vendrá ya el otro que dirá Dios ha muerto. ¿Sí? Sí, dirá Dios ha muerto y a partir de haber matado a Dios, pues ya solo queda el ser humano. Se centra en eso porque es algo que él puede explorar, descubrir, ¿no? Sí. Porque yo veo como lo antaño, que yo respetaba en un mundo en el cual no podían acceder. Ahí está. O sea, la esencia del ser humano no es la materia. Todos tenemos esa cuestión de que somos algo más, lo que os dije el primer día. Tenemos una batería de la cel, perdón, de las marcas, que no podemos hacer por nada, o tenemos un espíritu, o tenemos, como dirían los franceses, lo griego es un neuma, que es un aliento vital y es un buen día desaparece. Entonces, cuando morimos, las primeras horas seguimos tal, pero luego ya, realmente, si has tenido la desgracia de tener que ver a algún familiar, llega un momento que te das cuenta que ya no está. O sea, lo miras y dices, ya no está. Es su cuerpo, pero de alguna manera, inconscientemente te dice algo de eso. La conciencia, ¿qué es eso? Ni idea. Pero esto funciona y este es el gran drama del ser humano, ¿no? Pues la filosofía moderna va a hacer eso. Se va a adaptar a eso. Y poco a poco, lo veremos en la próxima. En la segunda parte, solo queda la filosofía. Cuando Nietzsche dice Dios ha muerto, ¿qué queda? A ver, nos hemos cargado un santo, tenemos que poner otro. Quito a Dios y ¿qué pongo? ¿A quién adoro yo ahora? Porque el ser humano necesita seguir algo. Adoro al ciencia. La escuela de vida. Todos son científicos. Todo es ciencia. La ciencia no lo explicará todo. Sí, el atomismo lógico de Raser, el lenguaje, porque el lenguaje es la manifestación del ser humano. Muy bien. Intenta analizarla. Falló estrepitosamente porque es imposible. Yo se lo digo a mis alumnos de latín y griego. Cuando vengan de matemáticas o de física diciendo que ellos son los listos, los mandáis a pasar. ¿Y lo que la gente no puede explicar? Pues como os decía, bueno. Simplemente, ¿qué pretenden ambos autores? Esto, entender el modo con que las cosas se articulan y nos muestran el mundo en cuanto a lo que es la totalidad y toda la unión entre ellos. O sea, el mundo es complejo. La famosa frase esta latina, unum estio nil estio, S-C-I-O, la C se pronuncia acá, estio, que diría un religioso, que significa una cosa sé, nada sé, en la que utiliza normalmente el sabio. Es decir, cuanto más conozco, más cuenta me doy de lo que me queda por conocer. Hoy en día sería eso de guárdate del que ha leído un solo libro. Vendría a ser algo así. O sea, el mundo es complejísimo. Y lo que intentan explicar esta gente, estamos hace dos mil setecientos años, intentan explicar esto, dos mil quinientos más o menos, intentan explicar esto desde su punto de vista. Bien. ¿Qué ocurre? Bueno, pone esto, la verdad o desvelamiento que le da Lecella, del ser de las cosas, de las cosas aparentes. Y empieza a hablar también de lo que es real y de lo que es aparente, porque el ser humano tenemos, pues a veces... A veces podemos tener despistes o que nos parece algo, ¿no? O sea, entendemos la realidad de una manera o de otra. Pues todas estas cuestiones es lo que George Van plantea. Bien. Seguiremos que si no... Me enrollo y no hay manera. Os he dejado aquí las diferencias y características de cara a haceros un pequeño esquema. Esto está por internet, estos son maravillosos. El ser. El ser es algo que no es material. No es del mundo material. Por lo tanto, ya tenemos la idea clara de que eso tiene que estar en otro lado, ¿no? ¿No? Representado por la lengua misma, es decir, por el verbo ser. El ser existente, como tal. Reúne todas las cosas en sí mismo. Todo lo que tiene cada cosa. Ente, en latín, el ente es participio del presente, ens entis, del verbo sum, es lo que es. Algo, un ente es algo que es. Lo dejamos ahí, no vaya a que si nos lo rían. ¿No? Bien. Y el ser este, el ser este eterno, si cambiáis esto y ponéis Dios, lo entenderéis enseguida. ¿No? Ilumina todos los demás entes. Es decir, es el origen de todo. La diferencia. Heráclito dice que hay un devenir perpetuo es eterno, es común para todas las personas pero independiente de quien lo escuche, es decir, cada uno lo entiende a su manera y fluye eternamente es imposible detener, todo lo cambia y representa el cambio perpetuo y continuo y para eso Heráclito dice que el Arjé es el fuego ¿no? lo vemos ahora con el volcán que todo va cambiando, o sea, ya os digo los Arjés estos materiales intentan representar algo sin embargo para Parménides nunca cambia es eterno e inmutable y el ser puede ser pensado y comprendido porque, ¿cómo lo afirma? a ver, esto ya es cuestiones de lógica y lo veremos en San Anselmo, ¿no? San Anselmo y el insensato lo que dice es cómo puedes pensar que no existe quien te ha creado o sea, esto son cuestiones de lógica, ¿no? dice, comprendido, no existe tal cosa que no sea es único y si hubiese más de uno no se podían diferenciar, esto es la raíz de todo lo que hemos visto, bueno, otra igual puso unos cuantos y Y frente a estas posturas de los monofisitas o demás, y Heráclito y Parménides y Pitágoras, vienen los que hacen unos cuantos, ¿no? Unos cuantos elementos. Porque un único elemento falla un poco, ¿no? ¿No? Entonces, ¿y si es la conjunción de una serie de elementos? Porque está muy bien el agua. El agua, si te pegan con un cubito, te hace daño. Pero que el agua se convierta en granito, no me acaba de cuadrar, ¿no? Bien. Pues los mecanicistas, recordad que os dije que estas escuelas estaban ahí, empezamos con Empédocles de Aguirre, surdita. Bien. También se da, por resumir, con el ser y no ser. No se puede venir de la nada e ir a la nada. Estamos en el mismo concepto. Existe algo que no sea. ¿Puede haber algo que no sea que empiece a ser? Bueno, estamos ahí, ¿no? Bien. Y fijaros, el nacer y morir es mezcla y disolución de sustancia eternamente igual e indestructible. El principio físico. La materia se transforma, no se destruye. Ellos ya de alguna manera ya lo entendían. ¿Y él qué va a hacer? Pues va a juntar los cuatro elementos, dice, si hacemos aquí una mezcla de agua, aire, tierra y fuego, y él le llamará las cuatro raíces. Evidentemente, estas raíces no serían, volvemos a lo mismo físico, por eso les daba el carácter divino. Serían como los dioses creadores que serían esa materia, ¿no? Bien, el pil, que es el fuego, el jae, que es el aire, el idor, que es el agua y el gaya, que es la tierra. Serían los cuatro elementos. Lo he puesto en griego porque siempre queda un poquito mejor, ¿no? Así, porque la mitad de términos que vamos a utilizar simplemente son términos griegos. Griegos que para nosotros suenan incomprensibles, pero para ellos es de lo más común. Bueno, ¿qué hay? Mezcla y separación a partir de estos cuatro elementos. Muy bien, y para resumir, tengo cuatro elementos. ¿Cómo lo mezclo? ¿Compramos una máquina de batir o cosas de estas? Vale, esa máquina con electricidad, ¿no? Bien. ¿Cómo se mezclan estos elementos? ¿Qué es la fuerza? ¿Veis que siempre necesitamos una energía? Ahora que nos cobran la electricidad a precio de ganario joven. O sea, siempre necesitamos una energía que mueva todo eso. Entonces, ¿cuáles serían? ¿El amor o el odio? ¿El amor o la discordia? Evidentemente, el amor te diría muy bien, nos juntamos y todo eso. Y si hay discordia, se separan. El ser humano es así, siempre va así, ¿no? Bien. ¿Qué tiene de fundamental el mundo de los pluralistas? Que con Empédocles aparece el concepto de elemento. Porque el otro es como el agua, como, como, pero no hay un elemento concreto. Aquí es lo que dice que tengo cuatro ingredientes. Harina, huevos, azúcar y limón. Y lo mezclo y me sale una coca. Si cambio las proporciones en lugar de una coca, cambiarla primero por una A, lo que saldrá porque no saldrá bien, ¿no? O sea, a esto se refiere, que es decir, tengo ya cuatro ingredientes. elementos de la receta que los voy cambiando el orden y esa letra y así ahora ya me puede salir un caballo una granito o una rana para entender no bien estos elementos son inmutables es decir que intentan pedófiles explicar la eternidad y el movimiento tengo cuatro elementos que hagamos lo que hago con ellos son inmutables son parménides pero según como los mezclen son el ácido ya no se ha cambiado todo entendéis por qué los cuatro elementos son fundamentales bien con esto ya intentan explicar eso es decir yo tengo cuatro canicas de acero indestructibles que según como la mezcla y me saldrá una cosa u otra que será distinta por lo tanto el movimiento pero la esencia de eso será en esas cuatro bolas que no se mueven que son eternas entonces ahí intenta explicarlo de esa manera muy bien el elemento en las águas tres cuartos de lo mismo dice que no son cuatro elementos de la naturaleza sino que son las espermadas En griego, espermata son semillas. Esperma, espermatos es semilla de trigo, de lo que queráis. Ya veis que la medicina tampoco se ha roto mucho la cabeza. Si cogemos los términos latinos y griegos que le da el nombre al cuerpo, en fin, deja mucho que desear. Dicho así en clásico queda muy bien, pero luego si lo traducimos, en fin. Bien, estos serían semillas. ¿Por qué? Porque aquí tenemos otro concepto. Nosotros cogemos una semilla de maíz y o la metemos en el microondas o no la comemos o la sembramos. ¿No? Si la sembramos, una pequeña semilla de maíz, trigo, de cualquier cereal, del que queráis, se convierte en una espiga. Es algo totalmente diferente, pero en esencia sigue siendo lo mismo, ¿no? Aquí ya tenemos otro concepto. Bien, todo está en todo y todo es divisible. Los elementos de los que proceden las cosas. Es decir, hay la unión, una semilla es una planta en potencia, que esto lo habréis visto en Aristóteles, potencia y acto. ¿Cómo explica eso? También lo aplicará términos agrarios, pero los griegos eran básicamente agricultores. Comercia antes y tal, pero básicamente agricultores. No, vean. Esta explicación de Anaxágoras de los espermata, Aristóteles llamará homeomerías. Homoi es igual, meros, semejantes. Las homeomerías son partes semejantes, iguales. Y el problema, Aristóteles va a decir, muy bien, todos estos elementos, ¿cómo se mueven? Antes hemos visto que era por amor o odio, ¿no? Bien. Con Aristóteles, que ya le daba más al coco, va a decir que se mueven por el nous, por el entendimiento, por la mente. Es decir, algo que tampoco es material. En nuestro entendimiento, el entendimiento, ponele aquí alma, lo que os dé la gana y lo entenderéis mejor. O sea, muchas veces, si cogéis estas cosas, le ponéis los conceptos, nosotros aquí que estamos en el mundo occidental cristiano, cuando los entendáis volvéis a dejar el nous y todas estas cosas. Termino, si ya lo tenéis. Bien. Permite la distinción de los elementos, ¿por qué? Por la percepción. Bien. ¿Por qué es importante? Porque yo puedo captar esos elementos básicos, no. Pero el ser humano tiene percepción de la realidad. Luego ya la percibe como ley de la guerra, ¿no? Pero bueno, ya entraríamos en otro concepto. Bueno, básicamente Anaxágora lo que nos dice es esto. Y llegamos al que más nos interesa. Demócrito siempre lo pinta al pobre hombre, sobre todo en los barrocos, como un abuelete así con la nariz roja medio colocado y que se lo pasa a uno. O sea, si cogéis su imagen en todas las obras barrocas suele aparecer así siempre. Pobre hombre lo pusieron así, ¿no? Bien. Leucipo fue el primero que habló también de esos elementos. Como nos pone muchas cosas, pasamos directamente a Demócrito. Fijaros que ya es el siglo V o IV, ¿no? Siglo de pericles, estamos ya muy avanzados. Bien. La imposibilidad del no ser. Siguen diciendo que no puedes venir nada de la nada. O de la nada no puede aparecer algo, como queráis. Y, todo es agregación o desagregación al nacer o morir. Lo que se crea es por unión. ¿Por qué? Cuando algo se corrompe, cuando algo se pudre, se desaparece. Entonces, estas son las ideas. Tenéis que tener en cuenta eso, que ellos se fijaban en lo que veían. Bien. ¿Y cómo lo va a llamar? Hay-a-zomoi, idea. Figuras indivisibles. Idea, hay dos en griego, es forma. Cuando tenemos una idea, a ver, en los tebeos, en los cómics, cuando alguien tiene una idea, no escriben dentro del bocadillo, sino que dibujan algo. Pues eso es la idea, es el dibujo, es esa forma, ¿no? Serían esas formas ideales, esas figuras indivisibles ideales. Serían figuras ideales y serían indivisibles porque somos, en griego es división, pero la partícula a, en griego significa in. ¿Qué es un átomo? Un átomo es algo no divisible. Hoy en día sabemos que tiene más partes, pero hace 100 años que lo sabemos, tampoco es que podamos tirar cohetes, ¿no? Pues consideraron que ya no eran semillas, ya no eran los elementos naturales, sino que tenían que ser algo que evidentemente no podemos percibir. Es decir, ahora no están con el bosón de Higgins y cosas de estas y casi alguno decía que ya había visto a Dios y no sé qué. Pues estamos en eso, todavía no acabamos de saber exactamente qué hay, ¿no? Pues ellos decían que eran tan pequeñas, tan íntimamente pequeñas, que sus tamaños no les permitía ser divididas más. Tener mayor división. Y estos son los átomos. Bueno, ¿qué ocurre? ¿Qué número de átomos hay para que pueda hacer todo y limitarlos? Los características... Las características y limitados. No nacen ni perecen ni cambian en sí mismos. ¿Esto qué es? Eterno, el ser de Parménides. Y todo nacer y perecer es movimiento, Heráclito. ¿Veis que se están peleando, dando tortas para unir a estos dos? Heráclito y Parménides. Si no hubiesen nacido, la filosofía hubiese sido otra cosa. Pero es ese, entender. Los griegos necesitan explicar eso. Explicar por qué cuando uno tiene 20 años está como un queso y luego ya cuando tienes 80 estás para tirarte ya directamente tal y oigan que soy el mismo. Sí, pero no. Esta es la gran idea. Tenéis que entender la filosofía griega desde este punto de vista. Bien. ¿Qué ocurre? ¿Cómo explica el movimiento? Por el nos, por amor, por odio, no, por chiripa, por azar. El azar. Habéis visto Matrix. Vale. ¿Cuándo se dan cuenta que aparece en él? Te pone una pantalla de fósforo verde y una de las líneas se dispara, ¿no? Pues este es el azar del atomismo de Democritus. Es decir, todo se mueve. Ordenadamente, pero el cambio se produce porque por azar algo no va por donde toca. Y eso permite el cambio. Por lo tanto, no hay intervención divina, no hay intervención humana, no hay nada, sino que es algo mecánico. Es algo de la naturaleza. Y mira si los hermanos eso lo aprovecharon para hacerme una peli, ¿no? Bien. Como son ilimitados, no nacen ni perecen, no son emprendables, son indestructibles e inmutables. Y la única diferencia que tienen es que podríamos montar un tetris. Tetris, tal, que te salen barras y no sé qué. Pues esa es la idea. Diferen entre sí solo en forma o figura geométrica. Es decir, ¿qué tiene que ver a este hombre por qué se le ocurrió la figura geométrica? Porque los griegos eran unos auténticos frikis de la geometría. Entonces, claro, para unirse tienen que coordinarse, tienen que acoplarse. Consideró que con distintas figuras podría... Adecuarse y ir generando los cuerpos. Vale. Estos son los tres grandes movimientos que tenemos, ¿no? Los átomos necesitan el no ser. Os he dicho que caen por un espacio, claro, pero para moverse necesitan el no ser. Nosotros sabemos que ahora aquí en la sala estáis en casa, pues delante de vosotros no veis nada, pero hay algo. El aire, las moléculas y todo eso, ¿no? Y que evidentemente si vais y está la puerta cerrada e intentáis pasarla, si la pasáis avisad que es un fenómeno paranormal. Os pegaréis un trompazo. Bien, ¿qué ocurre? Esa, permitidme la chorrada, pero esa es la idea que tenía. O sea, ¿qué dice Demócrito? Para que se mueva no tiene que tener delante otra cosa. Por lo tanto, acepto que el no ser existe. Y este es el gran cambio. O sea, ahora o no había o había. Y entonces Demócrito dice, bien, yo tengo esto, pero tengo que admitir que para que se mueva no puedo chocarme con nada. Por lo tanto, tiene que haber algo vacío y el vacío es el no ser. Por lo tanto, con Demócrito se acepta el no ser, ¿no? Los átomos, el vacío y el movimiento es la explicación de todo. Los átomos que se mueven por el vacío y el movimiento fruto del azar, ¿no? Que no asigna causa inteligente al nacimiento del mundo, sino que va a ser un fuego a chirir. Un encuentro mecánico y no de una inteligencia ni divina, ni suprauraniana, ni nada por el estilo. Esto lo veremos un poco más adelante, que Epicurio tomó el atomismo, pero para explicar también algunas de sus cuestiones de física. Y el atomismo moderno, eso que os he dicho, es el de Russell, por el análisis lógico del lenguaje que veremos en la segunda parte de la SINAM. En resumen, los antecedentes homeros, los poetas, los misterios órficos, las condiciones favorables, los materialistas basados en la física, que los vimos el otro día, Tales, Anaximenes, Anaximandro, Heráclito, todo fluye. Y los pitagóricos, concepto de orden fundamental, y lo que ya le llaman los oscuros, realidad inaccesible a los sentidos, es así. O sea, a partir de ellos no podemos conocerlos. Y los mecanicistas, básicamente, son los mismos. ¿De acuerdo? Bien. Pues, seguiremos. Los tenéis aquí. Si los queréis bajar, creo que podréis bajar. Creo que ya los podéis bajar si os interesa. Bien. Tenemos esta filosofía. Ya visteis que eran las escuelas que estaban ahí pululando y dentro de este mundo aparecieron un grupo de personajes que son los que hicieron que yo esté aquí. Y cualquiera haya ido a clase o de clase, pues desde ahí, permitidme la broma, que son los sofistas. Hasta ese momento el conocimiento era fruto de, pues no una diversión, pero sí una curiosidad. Y los sofistas aprovechan la polis. A ver, un ciudadano abrió. ¿Cómo llegaba a ser ciudadano? En Mallorquín dicen que quien no te padrí no se bautiza. El que no tiene abuelo, padrino, no se bautiza. ¿No? Es así. Es decir, si no tienes a alguien que te enchufe en el sentido de que te presente socialmente, no hay. Esto es muy viejo en el Mediterráneo. Esto ya veis que tiene muchos años. Bien. En Grecia lo que ocurría... Seguías tu educación, ibas pasando por distintos cursos y demás y los ciudadanos de las distintas polis participaban de la vida pública. Y para eso tenían que hacer retórica, tenían que aprender todas estas cuestiones. Y entonces aparecieron unos personajes que eran los sofistas, que eran gente, eran sabios, eran gente que enseñaban, cobrándole, empezamos a poner la pela por el medio, empezaron a cobrar por enseñar a los jóvenes la participación en la vida pública. Un joven normalmente entraba en la vida pública a partir de los 20-21 años, que era cuando acababa todo eso, a los 17 empezaba el servicio militar y necesitaba de alguien. Comprase la armadura, todo eso, hacía todo eso y luego ya cuando era ciudadano ateniense, por ejemplo, luego a su vez se podía convertir en padrino de otro que necesitase y así se iban perpetuando lo que era la democracia ateniense de los que podían. Que lo fuesen dando, ¿no? O sea, no eran tal. Por eso os digo que la democracia sí está muy bien, pero no hemos de entenderla hasta ese punto. Solo con los persas, cuando la gente del pueblo le dijo, ¿quieres gente para remar en las trieres? Vale, pues yo participo. Si no participo, vete tú a remar. Entonces les dejaron. Pero hasta ese momento, nada. Bueno. Bueno, sofista es un sabio. Bueno, ¿qué ocurre? Este sabio confía en la razón, en lobos, la palabra. La palabra es conocimiento y ese conocimiento es fruto de lo que yo como ser humano soy, ¿no? Bien. Es el siglo de pericles. El pueblo puede llegar a cargos públicos. Las oligarquías tradicionales están sufriendo un cambio y más desde la... ...de las invasiones de los persas y demás. Y es un momento propicio para que se produzca todo ello. Son los primeros que cogeran alumnos, cobraban bien, ¿no? Y difundían tanto sus indagaciones como desarrollaron la educación. Y luego otra cosa fundamental. Hasta esa época, los griegos, los helenos, que los griegos lo llamaban los romanos, ellos se llamaban helas, helenos, pues eran bastante, digamos, del terruño. Eso pasa hoy en día, porque en lugar de tal, si eres de un pueblo, el pueblo de al lado, ñeñeñeñe. O sea, se sigue dando, ¿no? Pues estas ciudades-estado comerciaban y demás, pero cada uno se sentía orgullosísimo de ser de su ciudad y se mezclaba un poco con otros. Claro, esto lo veremos cuando acabe todo esto, que llegue el mundo helenístico, cae este conflicto. Bien, ¿qué ocurre? Que los sofistas, como cobraban, iban de ciudad en ciudad. Y poco a poco empiezan a ampliar ese concepto a algo más general, que sería no solo las poli griegas, sino un concepto de heleno. De todos aquellos que más o menos tenemos la misma cultura. ¿Cómo fue? Porque Francia y el Estado compartían el mismo concepto. Bueno, cada uno tenía su dialecto. Tenían sus cosas. Los tres grandes básicos son, coinciden con los tres grandes pueblos que invadieron la zona, que son los dorios, los jonios y los corintios. Y normalmente cuando lo que hay hoy en día es un, incluso el griego clásico es una mezcla de todo esto, ¿no? Pero bueno, sí, compartían la raíz indoeuropea, se entendían entre ellos. Bien. ¿Qué ocurre? Coincide también el siglo de Pericles con el final de este periodo de la Fisis. Ya hemos visto los pluralistas porque ya no saben cómo exprimir más el libro. Bien. ¿Qué ocurre? El ser humano, esta gente, los sofistas, lo que van a hacer es decir, yo, como persona, puedo entender el mundo. Entonces empieza lo que llaman, el libro expone y todos los manuales ponen, que sería el periodo más o menos humanista. Ojo, no tiene nada que ver con el renacimiento y demás, pero hay ese giro, ¿no? Ahí nos hemos cansado de buscar, hemos buscado un solo elemento, no ha funcionado, hemos buscado varios. No, tampoco da mucho. Y los sofistas, sin pretenderlo, empezarán a girar hacia el ser humano. Porque quien va a pretenderlo y lo va a lograr va a ser Sócrates, que era un sofista. Lo que un sofista le salió rana, y en lugar de dedicarse a cobrar, pues dijo, no, me aparto de vosotros y quiero buscar el qué, la verdad. Si busca la verdad, pues mal asunto. Bien, vamos a ver. Primero, obtener prestigio entre discípulos y oyentes, jerarquía política, social y monetaria. Y esto, no sé si nos sonará, que hoy en día sigue siendo así, la persuasión de bien en virtud del hombre, porque viven de cara a la sociedad. Y ellos cobran por enseñar a la gente a vender burras. Porque si en un principio son movimientos en que realmente forman a las personas, acabará siendo ya... ...un descaradamente torticero lo que intentarán hacer con la gente para que diga o haga, ¿no? Ese será casi casi el... y tú más. Bueno, inicialmente está bien visto, porque era una imagen intelectual y carismática del saber, pues cuando se convirtió en medio lucrativo, pues manipulación social, relativos o falsas nociones, todas estas cuestiones, acabó siendo mal. Y de ahí Sócrates, que entró en las escuelas estas, se dio cuenta... ...de todo ello y no lo hace. Entonces salió y creó su propia escuela. Y es fundamental Sócrates porque no solo estaba Platón, estaban también entre sus discípulos, crearon distintas escuelas helenísticas. O sea, es que fue fundamental, por eso le tenían la tigre ya que le tenían los 300. Pero bueno, ¿qué dicen los sofistas? Relativistas. La verdad depende del sujeto y la interpretación que hace de la realidad. No, si a mí me parece perfecto. Toma, ya lo vieron. A ti te va bien, a los demás te lo vayan ondulando, ¿no? Bien, ¿qué es el verdadero o falso? ¿Qué es el bien o el mal? Pues bueno, si me va bien a mí, ya va bien. También hubo una escuela de estas, ¿eh? En fin, ya lo veremos. Son escépticos y relativistas de la cultura, la moral y la política. Y el relativismo lleva a... Acabará adaptando aquella postura que a mí me favorece por encima de los demás. Claro, esto socialmente en un mundo democrático como era el suyo, que estaba muy bien que discutiésemos, pero ya también no te pases, pues simplemente empezaron a caer mal. también porque porque el conocimiento lo convirtieron lo que los griegos llamaban episteme que es saber conocimiento lo convirtieron en dosa la dosa es mera opinión yo no digo que esto sea así a mí me parece que es así que lo que dice no nadie dirá como que el concepto de barman o sea que tú crees que les daba igual 3 que 33 si lo relativizan todos no es que esto es así hombre depende ya veremos y cuando empezamos con él depende ya veremos quizás no sé qué pues aceptó pulpo como animal de compañía y básicamente permitirme la broma será una cosa de ésta no bien en la decadencia conocimiento y al menos ya no sirve para nada y en la decadencia aparecerán los nihilistas ya veremos el nihilismo de nietzsche y todo esto porque ya no creen en la sociedad ni en el mundo heredado del judeo cristianismo y demás no que se convertirá en asesores políticos dicho rápido es decir se supone que los hay evidentemente que tal pero para que nos entendamos es decir no tienes que decir esto para que la gente crea que vas por aquí y vas por allá no tiene que decir la verdad pues tienes que hacer esto tienes que hacerlo es decir argumentos carciosos o incluso directamente falsos pero que dichos conveniencia y todo eso la gente luego lo analizan ya no pues simplemente eran este tipo de gente que eran filósofos y veremos ahora los principales autores de una forma muy rápida bien con ellos se toma el camino antropológico lo que os he dicho protagoras y borjas estos dos autores no tenemos tiempo veis un poco los distintos diálogos de platón y todo eso pero están en ellos yo recomiendo cuando podáis una lectura de verano las primeras obras de platón también en lugar de coger las obras los últimos bestsellers de los grandes premios que resulta que son como dios uno y trino son unos y tres uno y tres pero bueno cosas de éstas pues escogiendo de los primeros diálogos porque es pura filosofía pero explicada ya lo veremos como si estuviésemos en un café tomándonos 11 entonces tú te acuerdas la semana pasada hablamos del bien y quedamos que esta opinión así que manteniendo no volverás porque no se hace esta cosa en lugar de hablar del tiempo o de fútbol o de deportes total hablamos de eso no quiere platón los recuperó porque plato no los conocido a través de socios conocía muy bien su filosofía y en la primera etapa platónica los utilizó luego ya veremos que avanza hacia otros hacia otros niveles gordias siglo cuarto quinto más o menos protagoras trasimaco indias son los más conocidos veremos algunos protagoras es del siglo de pericles muere En un naufragio, cuando iba a Sicilia, tened en cuenta que hasta hace más de ciento y algo años, así como ahora te piden el pasaporte COVID para embarcar, antes te pedían testamento, directamente. Porque podías, tenía muchas posibilidades de pillar un temporal y morirte. Hoy en día con los grandes buques, pues la cosa está más normal, pero antes eran cascarones de madera. Bueno, obra, razonamientos demoledores. ¿Sobre la verdad o sobre el ser? Esta es su obra. Muy bien. Esta, sobre la verdad o sobre el ser, es una obra en la que intenta argumentar, intenta aportar una serie de argumentaciones que luego servirían en la vida pura. Básicamente, ¿qué es importante de él? El hombre es la medida de todas las cosas. Metron antropon. El hombre como medida de todo. En griego, la palabra metron es medida. O sea, el metro es una medida, es la medida exacta. ¿No? Bien. Todo es relativo. ¿O no lo hacen así los sofistas? No hemos visto que toda la verdad es según me parezca o me deje de parecer. Bien. Bien. El hombre en medida de todas las cosas, de las son en aquello que son y de las que no son en aquello que no son. Esto no nos recuerda a Parménides lo que ese es y lo que no es, ¿no es? Más o menos. Y esto será el relativismo occidental que tanta fama tendrá en el siglo XX y demás. ¿No? Bueno. ¿Por qué? Porque se dan cuenta de una cosa. O sea, de eso hay que reconocerse. No hay existencia de un criterio absoluto. Podemos decir que algo es absoluto. Algo que sea absolutamente cierto. Algo que me sirva de árbitro para decidir lo que es o lo que no es. ¿Hay algo que sea universal, que sea ese arjé, que me permita que todo sea igual? No. ¿Por qué? Porque cada uno ve la procesión según le va a él. Es decir, cada uno, su criterio es válido para cada uno y las perfecciones. Más relativismo que esto no puede haber, ¿no? Así, bueno, a mí ya me va bien, ¿no? Bien. Pues esto es la idea fundamental de... Muy bien aquí esto, ¿verdad? Sí. Sí, yo creo que debieron venir por aquí algunos. ¿Qué le interesa? La argumentación. Hay que reconocer a los sofistas que hicieron evolucionar mucho esto. Sócrates lo era. Y Sócrates lo veremos, lo que es la forma que tenía de la mayeusis socrática. Su madre era comadrona y la mayeusis es un parto. El término mayeusis viene a significar parto. Parto del conocimiento, ¿no? Bien. Entonces, el sabio no es aquel que conoce la verdad. Es el que conoce aquello relativo a lo que... Es el que es más útil. ¿Tienen más peligro? Esta gente que es así, ¿no? Bien. Entonces, ellos, los sofistas, ¿qué va a ser bueno? Lo que me sea útil. ¿Qué va a ser malo? Lo que me sea perjudicial. Si para mí es útil, pero te fastidia a ti que te vayan a tu problema. O sea, veis un poco este planteamiento. Porque ante todo esto Sócrates se revela. Y Platón y Aristóteles lo mismo. Volverán a ese mundo de las cosas como tienen que ser. ¿No? Bueno. La sabiduría. Lo que os he dicho antes. Saber reconocer aquello que es nocivo o es útil para la convivencia ético-política de los hombres y en saber demostrarlo a los demás convenciéndolos de ello. Ya os digo, tenían peligro. Y porque cada uno vende su burra particularmente. Esto sería el relativismo. En fin. Gorgias va un poco más allá. Todos los autores clásicos escribían un perifisios o sobre la naturaleza. Nada existe. Gorgias veis que va ya en plan aquí a saco. Si existiera no se podría conocer. Y si fuera posible conocer el ser, no podríamos decir qué porque no tenemos ni idea. Por lo tanto, me da igual. En francés diría je m'en fous. Me da exactamente igual. Me enfote muy ilustrado. ¿Y qué hay que hacer? No puedo conocerlo. A ver, estoy haciendo un poco de cachondeo en este sentido, por ahora que lo entendáis. Pero ellos llegan a una cuestión que es fundamental para la filosofía, aunque sean un poco fetas en el sentido de que desarrollan todo eso. Lo que están haciendo ellos es darse cuenta de los límites del ser humano. El ser humano conoce hasta dónde llega. Y esto lo va a decir Descartes muchísimos siglos después. Y lo va a decir también la filosofía medieval. Yo llego hasta dónde llego, pero luego sí, Dios lo ve más allá. Hombre, está más arriba y lo ve mejor, ¿no? Pero yo quiero mi parcelita de conocimiento, ¿no? Ellos se dan cuenta de eso. La relatividad del conocimiento. ¿Puedo conocer el ser? No. Porque la mente humana nos lleva hasta lo que nos dio. Punto. O sea, que tampoco es todo, no es que sean unos gamberros absolutos, sino que todo esto que os digo así un poco en plan alegre es fruto de un pensamiento muy... ...muy profundo que no tenemos tiempo de analizar, ¿no? Bueno, ¿cómo os he dicho? Nadie existe. En caso de existir no puedo conocerlo. Por lo tanto, el ser y el pensamiento quedan separados. Y el supuesto de ser pensable es inespesable. Muy bien. Muy bien. ¿Qué ocurre? Que esto para los griegos era un problema, porque no podían llegar a la verdad absoluta, a la vercella. Claro, al no poder llegar, de alguna manera se descargaba ese problema, ¿no? La razón solo puede iluminar hechos o situaciones. Solo puede analizar. De ahí el lenguaje. De ahí el desarrollo un poco de la lógica. Luego ya esta parte ya no estaríamos tan de acuerdo. Una misma. La condición puede ser buena o mala según quien la realice. ¿No? Ante esto se van a revelar Platón y Aristóteles y dirán, las acciones o son buenas o son malas. No, aquí no hay nada. ¿No? Vale. ¿Y cuál es la única verdad absoluta del ser humano? La palabra. Viven de la palabra ella, ¿no? Y realmente, ¿qué nos diferencia de los animales? Que somos capaces de crear un lenguaje, de comunicarnos, de hacer. Los animales hacen también lo suyo, tienen su propio lenguaje, pero no está tan evolucionado, ¿no? Entonces, eso era la diferencia que teníamos entre ellos. Bien. Es decir, reconocen el límite de la razón humana, se amudan a ello y, por lo tanto, ¿qué pretenden? No nos vamos a preocupar, sino que nos vamos a adaptar a aquello que nos pueda ir mejor. Pero claro, si pasas a la segunda parte, que es aquello bueno o malo, según me interese, aquí ya nos vamos hacia los cínicos y todo esto, ¿no? Pero bueno, ellos filosóficamente... Filosóficamente aportan esta parte, este giro hacia el ser humano y reconocer que la razón llega hasta donde llega. Desarrollan la lógica y la palabra como expresión máxima del ser humano. Esto es lo que van a plantear los sofísticos. Por lo tanto, la retónica, como os he dicho, es lo que se va a desarrollar. Y, en la vertiente estérica, la poesía. La poesía no propone interés práctico, sino un apacé, un engaño poético, en cuanto tal. No le daba más relevancia a esto, en el libro creo que comenta algo, pero ya está. Bueno, pues lo dejaremos aquí con los otros sofistas, porque ya se nos ha hecho la hora. Tenemos a Cródigo, Ipiar y Antífonte, que tenéis aquí algunas cosas que siguen en el mismo texto. Fijaros, Cródigo fue maestro de Sócrates. Fijaros en qué se entretenían. Distinción entre los exactos matices de los diferentes sinónimos. Es decir, ¿es lo mismo cuando escribo un texto poner una palabra u otra? No. ¿Le das un pequeño matiz? Pues en eso se entretenía este hombre, y este fue el maestro de Sócrates. Bueno, lo dejamos aquí y haremos un pequeño repaso el próximo día. Muchísimas gracias en casa y nos vemos el próximo miércoles. Hasta luego.