Bien, el objetivo de la sesión de hoy, tal como estaba previsto, era abordar el paleolítico inferior. Por tanto, comenzar ya con el proceso que nos va a ocupar en las próximas semanas de caracterización de los tres grandes periodos del paleolítico inferior, del paleolítico en general, atendiendo sobre todo al ámbito europeo, que es el que va a vertebrar las clases, aunque lógicamente, precisamente a propósito del HLMSE, del paleolítico inferior, hay algunos elementos que son mucho más visibles cuando estudiamos el paleolítico en África o en otros ámbitos geográficos a los que necesariamente, por tanto, tendremos también que hacer referencia. Ya decíamos la pasada semana que a la hora de hablar de la terminología relativa al paleolítico se habían extendido en los últimos años algunos términos alternativos que trataban de hacer, por así decirlo, más justicia a la diferenciación que existe entre el paleolítico inferior, que tradicionalmente llamamos el paleolítico inferior, que llamábamos soldubayense, porque prácticamente es exclusivo del ámbito africano y eso que tiende a llamarse el HLMSE o en los últimos años el paleolítico inferior arcaico. También se da la circunstancia, y lo veremos, que en los últimos años, tanto el paleolítico inferior como el paleolítico medio, como algunos episodios transicionales, sobre todo el gravetiense, en parte también el solutrense del paleolítico superior, después de verse como periodos muy unívocos, pues un paleolítico inferior muy unido a las industrias de modo 1, o un musteriense muy unido al Neandertal, o un paleolítico superior muy unido al Sapiens y a las industrias sobre láminas. Bueno pues en los últimos años el foco que se ha puesto en determinados momentos, Y determinados periodos, bueno, pues ha hecho que se vayan amplificando la importancia o se vaya estimulando la importancia de estos periodos. ¿Por qué? Bueno, pues porque se han visto novedades importantes que quizá no eran periodos tan unívocos y tan estándar como hasta el momento se había pensado. Y bueno, pues todo eso ha dinamizado la investigación en todos estos momentos que son los que vamos a ir caracterizando en las próximas semanas. En esta el Paleolítico Inferior, la semana siguiente el Musteriense y la siguiente el Paleolítico Superior. De modo que, bueno, pues en este mes de noviembre, si no me equivoco, habríamos visto toda la evolución del Paleolítico para dejar temas posteriores para los próximos días relacionados con ya antes de Navidad. Con el arte y con otras manifestaciones, tanto del arte mobiliar como del arte parietal que van unidos al Paleolítico, pero que tienen una entidad especial dentro de los temas que nos ocupan en la asignatura de Prehistoria I. Desde el punto de vista, entrando ya en el Paleolítico Inferior, desde el punto de vista conceptual, el Paleolítico Inferior es la fase más temprana y también la peor. La fase más conocida, como suele ser habitual en las sociedades antiguas del Paleolítico, en parte porque donde mejor se ha documentado es en África y sin embargo se ha visto que el Paleolítico Inferior en África tiene unas características totalmente diferentes al Paleolítico Inferior en Europa. Y también porque, bueno, pues es un periodo en el que... El problema de la conservación del registro es bastante determinante. Al final, en la península ibérica, pues bueno, donde se ha conservado registro del Paleolítico Inferior es en esos ámbitos en los que, bueno, pues existe una acumulación estratigráfica muy potente. En el caso, por ejemplo, de los yacimientos de la Sierra de Atapuerca, lo que nos da un poblamiento que para el Paleolítico Inferior Peninsular... Parece como muy concentrado, ¿no? Para los periodos más arcaicos, básicamente en los yacimientos de la Sierra de Atapuerca, en la Cuesta de la Bajada en Teruel y luego para el achelense ya medio en Ambrona y en las Terrazas del Manzanares, que son los grandes yacimientos peninsulares del Paleolítico Inferior. Por tanto, si queremos caracterizar la cultura europea en el achelense más antiguo, prácticamente lo único... Lo único que podemos hacer es mirar a los ejemplos que nos ofrecen los grandes yacimientos de los que hablamos a propósito de los primeros pasos del proceso de hominización, con esos útiles que podrían incluso ser anteriores al Homo habilis en algunos casos y que estaban asociados a esos yacimientos donde teníamos los primeros fósiles de los hominidos. En un ámbito geográfico vinculado a la... ...a África Austral y al África Meridional en el que se desarrolla, pues bueno, esa cultura que tenéis ahí resumida en donde pone elementos técnicos que llamamos cultura oldubayense caracterizada por los útiles de modo uno, los choppers y los chopping tools. Ya vimos en su día, aunque hoy volveremos a hablar sobre ello, que se trata de útiles sobre nódulo. Tantos apenas trabajadores... ...trabajados con un retoque unifacial o que en un retoque bifacial, unifacial choppers, bifacial chopping tools, con una gran presencia del córtex, es decir, se trata de útiles con una cadena productiva muy corta, desde el momento en el que se siente la necesidad de utilizarlo y la fabricación y el uso están como muy seguidos en el tiempo, ¿no? Y con una gran presencia desacortada. ...que permite también mostrar que serían útiles de uso simple, ¿no?, directamente con la mano y además para una serie de usos muy diversos, ¿no? Probablemente los útiles que luego vemos en el achelense clásico, en el achelense medio y en el achelense superior, que son bifaces y hendedores, recuperan en cierta medida los útiles sobre canto rodado de choppers y chopping tools. En algunos ámbitos, por ejemplo en la península ibérica, en algunos de los yacimientos de la sierra de Atapuerca, pero también en otros ámbitos geográficos, en la cuesta de la bajada, por ejemplo, aparecen los llamados triedros, ¿no?, que bueno, pues tienen la peculiaridad de que se trata de útiles que recuerdan a los choppers y a los chopping tools, pero que en realidad tienen un aspecto relativamente diferente, ¿no? No es un detalle tan unifacial, pero sí que coincide el hecho de que sean útiles sobre nódulo, ¿no? En algunos casos pueden ir asociados en África los primeros fósiles de australopiteco, pero parece que el uso de estos útiles tiene que estar necesariamente vinculado a la labor del hábilis, como el primer hombre, como se dice, habilidoso, ¿no?, capaz de fabricar estos útiles y, bueno, pues capaz por tanto, de ser el responsable de ese primer gran desarrollo tecnológico que conocemos dentro del ámbito de la prehistoria universal y, por tanto, también de la prehistoria europea. Su uso es muy diverso, como veis ahí, pues bueno, como hendedores, como golpeadores, un poco a veces se ha dicho, ¿no?, que los choppers y los chopping tools y también, de hecho, luego los bifaces constituyen un poco la navaja suiza, ¿no?, de la prehistoria, ¿no?, en la que, bueno, pues esa pieza, en ese caso quizá ya sobre núcleo, bueno, pues se podía utilizar, trabajada por una cara o por dos, bueno, para el consumo de carne y de herbáceas, que va tan asociado, ahora lo veremos, a ese marco geográfico y a la posición de los yacimientos en los que han aparecido estos útiles. Dime. Tengo una pregunta, Javier. Cuando hablas de que las herramientas de este primer periodo estaban realizadas, seguramente, como somos hábiles, pero utilizadas por el resto propio tiempo, o sea, ¿hay una preexistencia de…? Bueno, no, buena pregunta, no. Más bien hay algunos útiles asociados a los primeros fósiles de australopiteco que no queda claro si son útiles o no. ¿Son útiles en yacimientos que tuvieron una frecuentación posterior del hábilis o son útiles que eventualmente, apenas trabajados, pudo utilizar el australopiteco? Pero no implica una coexistencia porque, lógicamente, ahí hay un salto, ya lo veíamos, evolutivo entre el género homo y hacia atrás el género de los pitecos, ¿no?, pero sí que en algunos de estos yacimientos, pues donde teníamos las huellas de la etólica, o incluso en Old Dubai, bueno, pues hay algunos fósiles de australopiteco con algún útil semejante a los choppers que eventualmente pudo haber sido fabricado, bueno, más que fabricado, podríamos decir utilizado por el australopiteco como elemento de caza y de consumo, pero sin que eso implique una habilidad seriada en la fabricación, que es el rasgo, digamos, que añade homo albis, ¿no? Lógicamente, esa cultura oldubayense… Básicamente de industrias de modo uno, aunque también se da en algunos ámbitos, como dije anteriormente, de la península ibérica, lo cierto es que prácticamente solo la podemos documentar como tal, como el dubayense, en África. Por eso en los últimos años se ha tendido a sustituir ese término por el de preachelense o achelense inferior o paleolítico inferior arcaico. Pero como el dubayense o como sunguriense, si se trata de unos útiles en los que los filos del chopper o del chopping tool son bastante cortantes, que forma esa cultura, pues ese tecnocomplejo sunguriense está muy unido, pues bueno, a los yacimientos básicos del África Oriental y del África Meridional, que casi todos, como veis ahí, pues bueno, corresponden con los yacimientos. Donde aparecían fósiles del australopiteco afarense o del homo avis, sungura, jagar, melca cultur, covifora, oldubay, la propia laetoli que comentábamos antes. Y el medio ambiente es un medio ambiente muy parecido al que describimos para el modo de vida de los australopitecos y muy parecido al que en cualquier caso cuando Erectus se expanda a partir del achelense medio… …por el ámbito europeo se atestiguará en la Sierra de Atapuerca o en las terrazas del Manzanares, en Leganés hay varios yacimientos de este perfil, ese ambiente estepario, de sabana abierta, como dice ahí, con zonas de agua y una fauna en la que conviven, por así decirlo, herbívoros y carnívoros y en los que el carroñeo probablemente por unos recursos poco abundantes… …que debió ser una práctica habitual en ese contexto de plantas arbóreas de poca talla, pero en las que el hombre tiene que otear el horizonte y defenderse de esos rivales, que son también rivales en el carroñeo y en el consumo de los recursos cárnicos y en el caso de los herbívoros, también de las herbáceas. Cuando pasamos ya al achelense propiamente europeo, el responsable, como veíamos, de esa expansión es ese homo ergaster y el homo erectus, los grandes exploradores y difusores del género homo, los responsables de la primera gran hominización por el ámbito asiático y por el ámbito europeo y que va a dar lugar a esas variantes un poco locales. Bueno, pues que vemos en el homo erectus pequinensis o el homo antecesor o el homo heidelbergensis, de los que hablábamos ya en la sesión sobre el proceso de hominización. Ya vimos que erectus es un individuo perteneciente al género homo con una capacidad de adaptación bastante potente, con una notable corpulencia y que, bueno, pues precisamente… Esa corpulencia le permite, pues bueno, ser un buen explorador, un individuo capaz de adaptarse al medio físico y que probablemente fue también, como vemos a la derecha, pues bueno, el primero, luego también en Europa específicamente el antecesor en domesticar el fuego y que ese se convirtiera en el gran aliado de esa expansión del hombre por todo el ámbito europeo. Que junto a ese dominio del fuego el hombre se expandiera a partir del aprovechamiento de los periodos interglaciares en los que, bueno, pues el retroceso de la masa de hielo, bueno, pues pudiera desde luego permitir que, bueno, pues el camino del hombre por los espacios europeos y asiáticos fuera mayor. Bueno, lógicamente la ventaja de erectus y de la primera gran expansión del género homo es que frente a ese olduvayense, ese paleolítico inferior arcaico, frente a este que sería el paleolítico inferior como llama ahí a chelense o a veces se le llama también a chelense clásico, ¿no? Bueno, pues ya tenemos restos de útiles en muchos ámbitos geográficos, bueno, pues que presentan también… Variantes desde el punto de vista de los tecnocomplejos como variantes presentan también desde el punto de vista de esos propios útiles, ¿no? Bueno, ahí tenéis una síntesis de algunas de esas culturas fuera del ámbito europeo, la de Uweidilla en el Próximo Oriente, lo soaniense en la India, en fin, otras, ¿no? Que en general suelen ser industrias de modo uno y, como veis, sobre todo en… En el ejemplo B y en el C de modo dos, ¿no? Con la presencia de protovifaces o de industrias sobre grandes lascas del tipo de los hendedores, ¿no? De los que, bueno, pues hablaremos cuando caractericemos el chelense clásico, ¿no? Bueno, el chelense medio, ¿no? Propiamente es el más abundante en Europa. En Europa ya vemos también una cierta especialización. Hay distintos tecnocomplejos en los que empieza a abrirse camino una fórmula concreta de trabajo, de talla en concreto, de los útiles, que es la técnica Levalua, ¿no? En algunos casos el empleo, como sucede en la cultura soaniense, ¿no? De grandes lascas que pueden tener que ver con actividades de aprovechamiento de la madera para el preparado de las viviendas, ¿no? También de los mariscos. Bueno, pues abre paso a algunas culturas como el clactoniense, atestiguado en Clacton-on-Sea, en el sur de Inglaterra, o el tallaciense, con algunas presencias también en el ámbito peninsular, que, bueno, pues tienen la peculiaridad de que el modo dos irrumpe con el empleo de grandes lascas para la fabricación de raederas y raspadores, que son sobre todo del útil quizá más característico del achelense clásico europeo y que luego se presentará durante el musteriense. Lo tenemos aquí en el cuadro final, luego lo repasaremos, que es el endedor, ¿no? Con una variante o unas variantes en función de la forma y demás a la que le han dado nombre, como casi siempre, los prehistoriadores franceses que fueron los primeros en desarrollar esta asistencia. Y, bueno, pues también tenemos la sistematización de la tecnología en virtud, pues bueno, de una serie de yacimientos como tradicionalmente los hemos llamado, pues epónimos o de referencia, ¿no? Para hacer la tipología, como veremos, por ejemplo, la próxima semana a propósito del musteriense, ¿no? Que permite a Erectus expandirse y cuáles serían los rasgos básicos de ese paleolítico inferior clásico que estamos caracterizando en el mundo de la tecnología. Este primer paso, digamos, del achelense europeo. Bueno, pues una mejora en la eficacia de los útiles que tiene que ver con una mayor distancia entre el momento de utilización del útil y el momento del diseño mental del útil. Al revés, ¿no? ¿Por qué? Porque ya no se trata de industrias sobre nódulo, sino mayoritariamente de industrias sobre núcleo, en las que además se hace una apuesta bastante notable por la selección de la materia prima, que incluso lleva a este Erectus o al propio antecesor a moverse por largos espacios geográficos buscando la materia prima más adecuada para que preste servicio, ¿no? A una fractura mejor y a un uso más resistente, porque empiezan a utilizarse los percutores blandos para obtener filos y retoques, por así decirlo, más precisos y empieza a atestiguarse una notable diversificación funcional que abre la posibilidad a muchos útiles que hasta entonces no existían. Los raspadores relacionados quizás, sobre todo a partir del achelense medio y luego durante el musteriense con el trabajo de las pieles, los perforadores o los buriles, aunque estos se extienden ya más durante el musteriense, con el trabajo de la madera, que pone en relación también con ese punto que dice ahí de estructuras de hábitat y de subsistencia que ahora pasaremos a comentar. Ya hemos dicho también que en la expansión de Erectus debió tener, con bastante peso, el dominio del fuego. El fuego permite definitivamente a Erectus una mejor colonización de los espacios de poblamiento y una mejor preparación frente a las condiciones glaciares fuera de esos periodos interglaciares que pudieron ser quizás los de más expansión de este tipo humano. Por eso, como veíamos la semana pasada, en esa panorámica que hacíamos en el Paleolítico, el modo de vida incluye el asentamiento en campamentos base que tienen una frecuentación más o menos ocasional o permanente, siempre además con protecciones que permiten mejorar las prestaciones de ocupación de esos espacios, a veces con muretes de piedra, con monsoleilac o con cabañas con vegetales y hogares en el centro, como en el caso de Terramata o con pieles, como en la cueva de Lazaret en Dordogna, que precisamente traíamos una imagen la semana pasada como ejemplo de ese modo de vida. Ya hablamos el otro día de que en este momento, y no diverge mucho eso de lo que hemos dicho para Homo habilis en el contexto africano, la caza debió ser desarrollada en cazaderos, en los que se aprovechaba la debilidad del animal a través de trampas, a través del hostigamiento y siempre en competencia con otros animales carnívoros, en ese contexto en el que como también decíamos al final de la clase pasada, el canibalismo gastronómico, el canibalismo por necesidad, como a veces se ha denominado, pues también debió tener un gran impacto en la vida de los animales. También debió tener un peso bastante importante. Bien, ¿cómo organizaríamos? Teniendo en cuenta que los dubayenses, el Paleolítico Inferior Arcaico está muy unido a Homo habilis y que el achelense clásico medio y superior está unido a Erectus y sus distintas variantes europeas, ¿cómo organizaríamos cronológicamente el Paleolítico Inferior? Bueno, en estas tablas irán saliendo más a lo largo de las clases, y de los temas que iremos viendo, siempre ordeno el material de manera, digamos, estratigráfica. Lo más antiguo está en la parte inferior y lo más moderno está en la parte superior. De hecho, veis cómo el Paleolítico Inferior Arcaico tiene una cronología más antigua y el achelense superior tiene una cronología más decente con algunos episodios a partir de esa cultura llamada mikokiense que anticipan eso que será, lo veremos la semana que viene, el musteriense de tradición achelense. El Paleolítico Inferior Arcaico vendría a ser en Europa el equivalente a ese oldubayense que comentábamos hace un momento, ¿no? Industrias de modo uno, sobrecantos rodados, con una percusión externa dura, no se utiliza todavía ni madera de bock, ni huesos para dar un retoque más o menos verificado a la pieza y que permita que haya un filo más o menos dirigido, sino que es un percutor externo de carácter duro. Es decir, chocando una piedra contra otra, como habréis visto a lo mejor en algunos de estos dibujos del equipo de ata-puertas, en los que aparece siempre el antecesor golpeando piedras para generar útiles de modo uno, útiles sobre nódulo. Bueno, aunque ahí habla de las terrazas del Rossellón y el yacimiento de Bayonet como uno de los más antiguos, la grandolina ata-puerca con el paso de los años ha adelantado esos hace 800.000 años a 1.300.000 años, incluso algo más para algunas de esas piezas. Es decir, es una de las industrias más antiguas asociadas además al protagonista de esa colonización del ámbito peninsular, como dijimos que es el Homo antecesor, bueno pues del que ya hemos hablado anteriormente como una de las variantes europeas del Erector. Sin embargo la multiplicación de los asentamientos, como sucede en todos los periodos de la prehistoria europea, a medida que nos acercamos, al presente, bueno pues esa multiplicación de los asentamientos se produce o se opera en el contexto del llamado achelense medio, el achelense clásico, que se caracterizaría por industrias fundamentalmente de modo dos, por tanto que incorporan bifaces y que empiezan incluso a incorporar algunas industrias sobre las que, y sobre lámina, y que abren un panorama tecnológico novedoso, que en cualquier caso el responsable de su generalización por el ámbito europeo será el Homo neandertal, que será el responsable precisamente de la difusión sobre todo de la técnica levallois, el yunque y todas esas técnicas de laminado, o de lascado. Dentro del achelense medio hay un pack de útiles típicos de ese achelense clásico, por ejemplo los de los yacimientos de las terrazas del Manzanares, de Tautabel, de Vertes Zolos o de Maguerno, en terrazas que controlan grandes llanuras desde las que hay un dominio visual de las manadas de animales que se mueven por esos espacios, San Isidro o Butarque en Leganés y en Madrid son dos buenos ejemplos de los yacimientos típicos, los asentamientos típicos del achelense medio con unos tecnocomplejos que incluyen bifaces, lascas, es decir, raederas y raspadores. Pero hay también, como veis ahí, algunos tecnocomplejos en los que los bifaces no tienen presencia y lo predominante es fundamentalmente el empleo de lascas y en ocasiones de cantos trabajados. Ya hablamos del levaloisiense, el tallaciense o el clactoniense anterior. Por último, hay un periodo en la prehistoria antigua europea, en el achelense europeo, que sería el achelense superior, en el que prácticamente las industrias de modo 3 han ganado terreno a las industrias de modo 2 y lo que tenemos es un predominio de los útiles sobre lasca con la irrupción además de los primeros útiles sobre lámina. Los llamados cuchillos, en particular los llamados cuchillos de dorso y algunos buriles. Quizá el ejemplo de tecnocomplejo más característico de este momento, por así decirlo, transicional es el mikoquiense, que en cierta medida se identifica con ese musteriense de tradición achelense. A propósito de esto, precisamente en la península ibérica se discute mucho por qué no hay un mikoquiense desarrollado frente a lo que sucede en otros ámbitos europeos y por qué se mantiene un achelense clásico durante bastante tiempo hasta que irrumpe el musteriense. Y hay quien considera que eso tiene que ver con un cierto carácter más arcaico desde el punto de vista tecnológico o desde el punto de vista industrial del homo antecessor frente al neandertal, que es el que trae una tecnología nueva. Es verdad que esto se está discutiendo, lo veréis cuando estudiéis la asignatura cuando llegue, de prehistoria antigua de la península ibérica, aunque hay gente que la cursa inmediatamente después de prehistoria porque así la tiene la base más reciente. Es una asignatura del tercero, pero hay gente que la hace inmediatamente después de la prehistoria I y II, la prehistoria antigua de la península ibérica y la prehistoria reciente de la península ibérica, porque al final uno tiene más frescos los grandes procesos de la prehistoria. Y que es verdad que esa teoría de que la ausencia de mikoquiense, digamos, o de algo semejante al mikoquiense en la península ibérica tenga algo que ver con un carácter más conservador del antecessor frente a las industrias musterienses traídas por neandertal, hombre, pues también tiene mucho que ver con la escasez de evidencia material, al menos en comparación con otros periodos, el propio musteriense que tenemos para el achelense peninsular, donde precisamente yacimientos como, cita antes, la Cuesta de la Bajada o Grandolina, o incluso la Sima de los Huesos, bueno, pues al final dependen mucho de nuestro estado de conservación y sobre todo de nuestra vida. Y sobre todo de unas circunstancias muy concretas de acumulación de grandes niveles de sedimento que nos han permitido, bueno, pues conservar un registro que de otra manera, no sólo porque no se dé la sedimentación, sino porque circunstancias extraordinarias como puede ser el reventón o de esa llamada trinchera del ferrocarril han sido los verdaderos protagonistas, bueno, pues de la conservación de un registro que probablemente existe en otros ámbitos europeos y peninsulares, pero que sin embargo no se ha conservado, más que en esos casos en los que efectivamente, bueno, pues ha habido una conservación derivada, pues bueno, de un azar de la investigación bastante afortunado, como ha sido el caso de los yacimientos de la sierra, de Atapuerca, que bueno, pues han modificado también nuestra visión sobre el achelense europeo y han escrito una de las páginas más nítidas también del achelense peninsular. Bien, como visteis también en el curso virtual os dejé una carpeta en la que venían una serie de láminas sectorizadas con tecnología lítica para cada uno de los periodos de la prehistoria que vamos a estudiar, por tanto, válidas para la sesión de hoy, la de la semana siguiente y aún la de la semana siguiente, ¿no? Se trata de, bueno, pues láminas en las que, bueno, pues se trató de mostrar cuál es la tipología y os facilito también, bueno, pues una forma de describir los útiles con cierta exactitud pensando en vuestras text y pensando también, por supuesto, en las descripciones que tengáis que hacer en el examen que, bueno, pues puedan tener un lenguaje más o menos coherente, ¿no? Yo siempre recomiendo, hombre, no digo aprenderse de memoria estas descripciones pero a veces sobre el dibujo, sobre la fotografía es difícil saber si el retoque es cóncavo o convexo y en cambio, bueno, pues si uno, o si es abrupto y si uno en cambio identifica siempre el cuchillo de dorso con el retoque abrupto, pues no se equivocará nunca o la raedera con los retoques cóncavos o los raspadores con los retoques abruptos, bueno, pues de esa manera uno se familiariza con la terminología. Básicamente por números veis que tendríamos el 1 y el 2 industrias de modo 1 correspondientes al paleolítico inferior arcaico el 3, el 4, el 5, el 6, el 7 y el 8, es decir, todo lo que la diapositiva llama paleolítico inferior evolucionado, achelense medio, achelense medio serían industrias de modo 2, las industrias de modo 3 la presencia ya de todo tipo de útiles sobrelascas, el 8, el 9, bueno, el 13, perdón, el 11, el 12 sobre lámina, el 9 y el 10 y todos los de la parte inferior que en realidad corresponden a, todavía al modo 3, pero a esos bueno, pues periodos en los que se produce una transición hacia el ámbito mikoquiense, hacia el ámbito del musteriense llamado también, lo veremos la semana que viene, de tradición a achelense. Bien, entiendo que para el paleolítico inferior arcaico explicar que es un chopper y un chopping tool no tiene sentido ya lo hablamos cuando hablábamos del proceso de hominización y creo que los dos dibujos, de hecho en el dibujo de la derecha aparece el corte bifacial para que no quede dudas de que la pieza ha sido trabajada por los dos lados aunque es verdad que entre la pieza 2, la 3 y la 4 no hay mucha diferencia, por eso a veces se habla de protobifaces porque son chopping tools que no están hechos directamente sobre nódulo pero bueno, normalmente el término protobifaz no se suele utilizar tanto y hablamos o de chopping tool o directamente de bifaz arcaico o de bifaz sí que es un bifaz clarísimo la pieza 3 y sobre todo la 4 que son bifaces que la diferencia que tienen por ejemplo con el 5 que serían los típicos bifaces que os aparecían antes en la diapositiva anterior ilustrando el achelense medio bueno, pues es que la 4 es mucho más tosca y la imagen número 5 es un bifaz que ya no es evidentemente sobre nódulo sino que es sobre núcleo es decir, que en definitiva marca una transición en el proceso tecnológico este tipo de bifaces lanceolados a cierta medida los también el scaligur de la cima de los huesos marcan un poco la transición entre ese achelense arcaico ese paralítico inferior arcaico y el achelense medio clásico que decíamos anteriormente fijaros como también son típicos de las industrias de modo 2 del achelense las piezas 7 y 8 que son o bifaces marcadamente ovalados el llamado limace en la terminología francesa o bifaces que tienen un aspecto casi cuadrangular, casi rectangular que funcionan como hendedores con un filo bastante cortante y que sirve para machacar o cortar la carne, las herbáceas que sabemos también por el desgaste de los aparatos dentarios de Erectus y sus variantes europeas de manera particular pensar en el cráneo 5 de la sierra de Atapuerca que evidencian un consumo bastante notable de esa dieta de herbáceas que durante mucho tiempo se pensó que no era muy compatible aparentemente con los prejuicios o los preconceptos que teníamos sobre el modo de vida de los hombres del paleolítico inferior y luego con el achelense medio empiezan a aparecer los útiles sobre subproductos derivados del núcleo como por ejemplo las raederas o los raspadores ¿Cómo distinguir una raedera de un raspador? Tradicionalmente lo que solemos hacer es si el retoque está en paralelo al eje de la pieza a un lado o al otro es una raedera si el retoque está perpendicular al eje de la pieza es un raspador por ejemplo sería la diferencia entre la pieza 6 donde ese retoque un poco escaleriforme que tiene a la izquierda que marca por qué lado se ha utilizado y en cambio la pieza 16 donde el retoque del mismo tipo o la 15 está en la zona transversal al eje de la pieza marcaría que es un raspador En el caso de la pieza 15 además la presencia de esa raedera protuberancia hacia la izquierda de esa especie de saliente junto a un hocico o cóncavo le convierte también en un perforador ya vimos que en el trabajo de la madera en el trabajo de la madera era un útil bastante habitual porque nos permitía trabajar la madera y todos esos soportes vegetales que servían para la preparación de las viviendas como comentábamos anteriormente Fijaros cómo sólo en el achelense superior en la fase final que vaya al ámbito transicional hacia el musteriense empiezan a aparecer algunos útiles que sobre todo se convertirán en los fósiles directores más característicos del musteriense me refiero a los cuchillos de dorso laminares, piezas 9 y 10 y al muril es verdad que también hay aquí en la parte inferior todos esos útiles 14, 15, 16, 17, 18 al margen de su función unos son perforadores otros son raderas otros son raspadores encajarían muy bien sobre el llamado musteriense de denticulados que es una variante del musteriense muy típica bueno pues de el musteriense típico valga la redundancia ese que Bordes definió como el más característico el más nítido del musteriense europeo fijaros cómo junto a láminas de denticulados cuchillos de dorso 9, 10 14, 15, 16, 17 y 18 con sus distintos usos ya se cuela aquí que veíamos que en el micoquiense empezaba a tener una cierta presencia y también en el clactoniense los buriles que no son más que útiles sobre el asca habitualmente que tienen siempre un retoque que se marca en el dibujo con una flecha en la fotografía es prácticamente imperceptible, veis la flechita que tiene aquí en el ángulo superior izquierdo, lo que pasa que casi se pega al propio dibujo y casi no se percibe y que nos indica eso que comentábamos antes esa relativa especialización en el retoque para generar útiles destinados al trabajo de la madera fundamentalmente y veremos que luego ya durante el paleolítico superior también para el trabajo y la abrasión del hueso y para el trabajo y el grabado sobre la pared como empleo, como base para el arte parietal que empieza precisamente a partir del gravetiense con el trabajo primero del hueso en el arte mobiliar y luego del grabado en el arte parietal bueno la ventaja, como os dije de la tecnología lítica es que tiene un carácter claramente acumulativo entonces bueno pues en esta primera sesión es bueno que os familiaricéis con los útiles básicos de la primera panoplia del hombre prehistórico en el paleolítico inferior, teniendo en cuenta que prácticamente lo único que habrá que añadir a partir de ahora son distintos tipos de cuchillos de dorso porque las maderas raspadores ya los tenemos y no hay grandes variantes y que hay algunos raspadores como muy típicos de determinados periodos del musteriense y luego un elemento que aparecerá profusamente en el musteriense que son las puntas de flecha aunque ya tenéis algunas la 11 y la 12 es verdad que la lámina os dice que son de tipo musteriense porque anticipan ese musteriense de tradición achelense y es así que tendrán una cierta diversidad tipológica a medida que pase el tiempo y que la iremos viendo en los próximos temas cuando vayamos viendo la tecnología lítrica del paleolítico medio la semana que viene o del paleolítico superior la siguiente