En la elección de estudiantes del Centro de la UNED en Calatayud hemos organizado esta conferencia en la cual el profesor Luis Español, que actualmente es profesor titular de la Universidad de La Rioja y director del Departamento de Matemáticas y Computación y también es presidente de la Comisión de Historia del Comité Español de Matemáticas ha tenido la gentileza de aceptar nuestra invitación a venir a Calatayud a contarnos cosas sobre la historia de las matemáticas. Luis Español, hablar de Luis Español es para mí un honor muy grande porque aparte de haberlo tenido como profesor, él lo ha sido casi todo en las matemáticas en La Rioja. Él ha... ha organizado congresos, ha impartido clases, ha sido vicerector de la Universidad de Zaragoza también porque sus raíces, la Universidad de La Rioja las tuvo en la Universidad de Zaragoza como he dicho, fue profesor titular de la Universidad de Zaragoza ha trabajado en Historia de las Matemáticas y en Historia de la Ciencia porque ha sido presidente también de la Sociedad Española de Historia de las Ciencias y de las Técnicas durante seis años y bueno, realmente La Rioja tiene un valor con Luis muy importante y yo nada más, simplemente le agradezco la bienvenida y os dejo con él. Muchas gracias por venir y cuando quieras pues. Muy bien, pues... Muy buenas tardes a los que me escuchan en esta sala y a los que me escuchan distribuidos por la red. Yo siempre tengo un especial gusto cuando hablo y estoy en Aragón aunque a mí por 35 años de profesión se me identifica mucho con La Rioja y yo tengo todo lo bueno del mundo que decir de La Rioja pues bueno, yo soy manico, soy manico y cuando estoy en Aragón pues me gusta hacerlo. Sobre todo y también cuando no estoy. Bien, mi charla va a titularse Hace 100 años estudiar matemáticas en España. Y tengo en la transparencia siguiente expuestos tres motivos para hablar de esto. Bueno, naturalmente el primer motivo para hablar es porque alguien te invita a hacerlo y la invitación que te nojo no me ha hecho. En nombre de los estudiantes de la UNED de Caratayur lo agradezco mucho y se lo agradezco especialmente a él porque, claro, alguien que ha sido alumno tuyo y te invita puede ser, digamos, una tentación a presumir de, mira, no dejo mal recuerdo. Pero si uno es molesto, se conforma, si es modesto, se conforma con decir, oye, al menos no me han tachado y han dicho, de este no quiero saber nunca más en la vida. Bueno, pues muchas gracias Antonio por esta invitación. Pero además ahora los matemáticos, los matemáticos que estamos un poquito al tanto de las cosas de nuestra profesión y de la vida matemática del país, pues estamos muy metidos ya en los preparativos del centenario de la Real Sociedad de Matemática Española, que se cumplió el año pasado. Que se cumplirá en 2011 y que, bueno, pues estamos ya iniciando preparativos. Entonces, esta situación parece que me invita a hablar de hace 100 años de matemáticas España, hace 100 años. Y por otra parte, estamos en el momento actual en una situación también de planes de estudio, de cambios. Estamos adaptándonos al espacio europeo de educación superior, tenemos que cambiar planes de estudios. Tenemos que cambiar formas de docencia, tenemos que pasar a entender el aprendizaje de otra manera, a los ritmos de estudio y aprendizaje distintos. Cambiamos incluso los calendarios para, digamos, para hacernos europeos. Esta idea de que ser europeo es bueno porque nosotros somos europeos de algún modo y lo venimos siendo desde hace mucho tiempo, pero hemos sido europeos de segunda fila y tenemos que intentar ser europeos de primera fila. Esa es una muy vieja aspiración, como luego hablaremos de ello. Y entonces ahora yo he puesto ahí ese eslogan que enseguida se entenderá porque lo he puesto, ¿no? Eso de Europa igual docencia, esa especie de ecuación, la docencia universitaria en este caso tiene que ser europea. Tenemos que cambiar todo para ser europeos, lo cual, bueno, tiene como siempre sus discusiones, pero eso es normal, no hay nada importante que se pueda hacer. Es indiscutible eso. Entonces, estos tres motivos me llevan a hablar del título que he expresado, este título de hace 100 años, y dentro de la matemática española desde hace 100 años he elegido estudiar matemáticas, que es un título muy... Es esquemático y como tal, igual a alguien le puede hacer pensar cosas distintas de las que yo voy a decir, pero el índice lo aclarará un poquito más. El índice indicó que hay como cinco trozos que van a ser desiguales en el tiempo, en la intensidad de mi exposición. El primero será, pues bueno, a propósito del centenario, decir algo de la institucionalización de la matemática en el periodo del que yo voy a hablar. La anterior, la que influye en lo que pasaba hace cien años. El plan de estudios será la segunda parte. El plan de estudios es de 1900, porque el que había hace cien años, 1910, 1911, pues era el de 1900 con algún mínimo retoque. Pero yo hablaré del plan de 1900, aunque hablaré en un recorrido aproximado de 1900 a 1920, lo que es el entorno de diez años adelante atrás a lo que es justo los cien años de ahora. Claro, este plan, como todo en la vida, tiene sus críticas y el plan a unos les pareció bien, por eso lo planteé. Y a otros les pareció mal, y por eso lo criticaron, y evolucionó con la resistencia a cambiar de los que les parecía bien y con los intentos por cambiarlo de aquellos que les parecía mal. Y algo de eso hablaré en la tercera parte, que son las críticas al plan, reformas y relevos hasta aproximadamente 1900, tampoco más. Y dedicaré también una cuarta parte a hablar un poco del doctorado. Cuando hablamos de las carreras universitarias, claro, parece que solo las licenciaturas importan. Después de las licenciaturas había las diplomaturas. Grados, másteres, bueno, todo ha cambiado mucho. Pero lo tradicional, digamos, era la licenciatura, en la época a la que me voy a referir, estaba el bachillerato, la licenciatura, aparte de otros estudios más profesionales, ¿verdad?, de comercio, de artes y oficios, lo que luego fueron los peritajes y luego las ingenierías técnicas, en fin, había todo eso. Pero digamos que una carrera universitaria era un bachillerato, una licenciatura y un doctorado. El doctorado, pues, pocos, pocos lo hacían, ¿verdad? Pero el doctorado... El doctorado prácticamente no servía más que para la carrera universitaria, casi como ahora. Pero el doctorado es un asunto muy relevante porque igual entonces que ahora es escaso y es escaso, entre otras cosas, porque es importante el esfuerzo que se necesita para hacerlo y es escaso el rendimiento en empleo que tiene. Y una de las características que yo creo que nuestro país necesita para tener un peso científico mayor es que el doctorado sea relevante, sea efectivamente... Un paso adelante en la formación, que hace mucha más gente de los niños más jóvenes que lo hacen ahora y que luego eso se aprecia como capital humano en el empleo de cualquier tipo que en este caso los matemáticos puedan tener. Eso todavía hoy está siendo sobre. Y en el doctorado pues aparecerá Rey Pastor. Rey Pastor irrumpe la matemática española en esta época y algo hablaré de él porque no obstante pues Rey Pastor es un poco una de mis especialidades históricas. ¿No? Motivada por un hecho que es que yo estaba en Logroño, Rey Pastor es de Logroño y un segundo hecho que es la España autonómica. En la España autonómica los de cada terruño tenían la obligación de exaltar a sus personajes y un tercer hecho que era que desde Zaragoza Mariano Osmigón me impuso cariñosamente con ese cariño obligatorio que él sabía imponer a sus proyectos a los amigos que yo que estaba en Logroño tenía la obligación de ocuparme de ellos. Rey Pastor. Bueno, pues efectivamente Mariano acabó teniendo algo de razón y bien o mal lo he hecho durante este tiempo y por tanto es natural que yo siempre aproveche para hablar de Rey Pastor. Pero además ahora es que viene a cuento, viene a cuento. Y hablaré de la batalla. Bueno, la batalla es una cosa un poco espectacular, ¿verdad? Un poco retórica pero bueno, las peleas que él tuvo con los catedráticos digamos veteranos para hacerse el hueco que él creía que debía tener el doctorado. Y bueno, finalmente parte quinta de esta exposición. Y unas reflexiones a modo de conclusión para terminar. Terminaré y según me han indicado pues luego podrá haber discusión, preguntas desde la sala o desde Allende en la red. Bien, tanto el título cuanto el índice dan idea de la charla que puede ser equivocada si no se ponen a lo mejor algunas limitaciones. Que yo mismo quiero indicar que mi exposición va a tener con una facilísima excusa. Que es que claro, una exposición de conferencia pues tiene una duración más o menos estandarizada y uno no puede hablar de todo. Pero a los historiadores o a los matemáticos, a los científicos cuando hablamos sobre todo de historia nos gusta mucho insistir siempre en que todo debe ser contextualizado. O mirar las cosas en corrito pequeño está bien porque hay que conocerlo. Los detalles, pero es obligatorio tener siempre puntos de vista amplios de las cosas, de contexto social, contexto institucional, de muchos tipos. Y en ese sentido yo quiero simplemente poner de manifiesto algunas limitaciones que yo puedo anunciar a priori y otras muchas que los escuchantes, de verdad, pues pondrán por su cuenta. El aspecto institucional del que voy a hablar al principio, claro, va a ser simplemente una introducción rápida para centrarme en el tema. Cuando mencione profesión... Profesores y planes de estudio me voy a centrar en Madrid. Eso, bueno, efectivamente había más... Hay universidades en las que se utilizan matemáticas, no muchas más, ya hablaré de ello, pero claro, pues detrás de Madrid está Barcelona y no hablar nada de Barcelona. Alguno podría decir, ¿qué pasa? No existía Barcelona. Y Zaragoza, que era entonces la tercera universidad con matemáticas completas. Bueno, había una gran homogeneidad de plan de estudios, los planes de estudio eran por decreto para todo el país, luego por tanto todo lo que yo diga de plan de estudios vale para todos, pero en cambio efectivamente las menciones que yo voy a hacer a personas van a centrarse, salvo pequeñitas excepciones, en Madrid, y bueno, que me perdonen los demás. Tampoco voy a centrarme en mencionar el número de estudiantes ni aspectos de la organización docente, voy a explicar sólo qué se estudiaba y cómo evolucionó poquito lo que se estudiaba. Pero bueno, alguna cosa suelta puede que diga, pero no hablaré, digamos, de esa especie de la sociología universitaria del momento, ni también... Y también dentro del plan de estudios me voy a centrar en lo que podríamos llamar lo más puro de matemáticas, y las cosas que se estudiaban de física, química y astronomía, que podríamos considerar más aplicados, pues los voy a dejar un poquito de lado. Claro, no voy a hablar de biografías, mencionaré personas, pero con algún detalle quizá de su significado, pero no puedo entretenerme en dar biografías. Y Sabor y Pastor, que le dedicaré un poquito, los demás no. Y también... Y también mi explicación del doctorado va a ser muy breve. O sea que, bueno, dentro de las limitaciones yo espero que se acabe siendo una charla interesante. Bien, la primera parte, pues, a propósito del centenario de la Real Sociedad de Matemática Española, que celebraremos en 2010. En la segunda mitad del siglo XIX España vivió un proceso interesante de institucionalización de la ciencia en general y de la matemática en particular. En esta imagen que puede verse ahora en pantalla hay dos columnas. La columna de la izquierda son iniciativas, digamos, oficiales, institucionales, de los poderes públicos. Y en la columna de la derecha hay iniciativas que son más de, digamos, lo que diríamos la sociedad civil, ese término que ahora se acuña mucho. Y aunque para realizar actividades siempre era necesario algún apoyo oficial, la existencia de esas sociedades era, digamos, privada. La iniciativa. Por orden cronológico, lo importante a resaltar es que, claro, las ciencias hasta casi la mitad del siglo XIX no aparecen como tales. Porque las facultades de filosofía, que dentro de la vieja división de la Universidad Española eran facultades menores, en el año 43 pasan a mayores. Y se crean secciones de ciencias, o sea que ya digamos, la matemática ya no es uno más de los conocimientos englobados en ese saber general que es la filosofía, aunque se le dedica un rato, sino que ya dentro de las ciencias y con otras ciencias ya va teniendo una cierta personalidad en la universidad española. Y en el año 48 hay una cosa también importante en la que España también va un poco retrasada respecto a los países que consideramos avanzados de Europa, que es la creación de la Real Academia de Ciencias en la que claro que hubo matemáticos desde el principio, matemáticos como tales, como Cortázar, ese gran catedrático de matemáticas que llena el centro del siglo XIX y con sus libros y también hubo mucha gente que tenía las matemáticas dentro de su hacer profesional, ingenieros, militares, etc. Y el año 57 es un año muy importante porque en el año 57 la famosa ley Moyano ya se crean las facultades de ciencias como tales y dentro de las facultades de ciencias ya exactas, que es el nombre digamos inicial de matemáticas, la sección de exactas ya es una sección propia y con el desarrollo de la ley Moyano en el 57 aparece ya lo que propiamente es el primer licenciado en matemáticas. El primer licenciado en matemáticas desde esa época. Y bueno... La facultad va evolucionando, no me entretengo más que en su arranque y por otra parte más tarde, después ya de los años revolucionarios del año 64, la Revolución Setembrina, ya aparecen las reales sociedades españolas de tema científico. La primera es la de Historia Natural, el año 71, recogiendo el gran desarrollo que había tenido en cuanto al número de científicos y actividades a partir de todos los programas ilustrados de Carlos III, de creación... de jardines botánicos, en fin, y por qué el nuevo mundo y toda la explotación mineral y todos los estudios botánicos y todo el uso para farmacia, etcétera, de esas cosas, pues llevó a un desarrollo de la Historia Natural potente que cuajó en que las personas que en ello estaban se constituyeran en sociedad al amparo real, pero siempre como una sociedad digamos civil. Hay que tener en cuenta que tampoco era fácil que hubiera sociedades... de tipo civil antes porque la posibilidad de asociarse no fue permitida por la ley hasta precisamente los años de la Revolución Setembrina. Y los biólogos, los geólogos fueron los primeros en arrancar con este asociacionismo y luego ya metidos en el siglo XXI. En el siglo XX, los físicos y químicos crearon su sociedad en 1903, y los matemáticos en el XI. Entonces, este esquema general hay que tenerlo un poquito en mente para ver cómo había evolucionado el aspecto institucional de la ciencia española en esa época. Y esta siguiente lámina que se refiere a este mismo punto primero, a propósito del centenario, está lo que quiere es explicar otro trasfondo que hay a lo largo de estas transformaciones, que es que había una polémica en la ciencia española. La polémica de la ciencia española en principio es una polémica, digamos, con Francia, con alguien que dijo que la ciencia no le debía nada a España. Era un ilustrado francés, y entonces hubo reacciones a eso. Pero a su vez dentro de España, como sucedió cuando Napoleón, dentro de Francia venía un ataque, en España algunos estaban, no diré de acuerdo con el ataque, pero sí dándole la razón. Es que es verdad, nosotros tenemos literatos y artistas, pero no tenemos científicos. Y la polémica se trasladó también un poco a España. Yo he puesto ahí algunas pequeñas referencias. ¿Se echa? El ingeniero, matemático, primero en la literatura, en ese momento tan prolífico, y que como llegó a una edad muy avanzada, en perfectas condiciones intelectuales, pues cundió mucho en el siglo XIX y primeros años del XX español. Cuando se le hizo académico, en la Academia de Ciencias, en el año 66 del XIX, en su discurso, pues se apuntó a decir que efectivamente la matemática española era un desastre y que había que, en fin, con ánimo constructivo en el sentido de sacudirla. Conciencias para desarrollar la matemática española, pero poniéndola a caldo. Y como Echegaray era un hombre muy elocuente y con esa retórica que a veces nos parece un poco cursi de su época y de su estilo, pues decía aquello de que en la ciencia, digamos en particular en la matemática, la historia de la matemática no ofrece nombres que labios españoles puedan pronunciar con facilidad. Todos son nombres rarísimos de gente extranjera. Y en cambio, otros después intentaron llevarlo al contrario. En general eran gente erudita que estudió mucho los detalles más pequeños y más grandes de la historia científica y matemática española y se acaba a relucir. No estamos tan mal, mira este, mira el otro, no me puedo entretener yo. Pero vamos, había una polémica y había un sentido. de que había que progresar y otra discusión sobre tampoco estamos tan mal el siglo terminó con el desastre el desastre escuefilpinas y el desastre fue sentido en España como un desastre nacional como su nombre indica pero además causado en buena medida nuestro retraso científico y tecnológico porque cuando nuestros barcos fueron hundidos por los barcos americanos, nosotros llevábamos una madera con velas y ellos llevaban unos hierros con carbón y hecha de humo y claro, esa diferencia de potencia industrial de potencia traducida en artefactos para la guerra pues llevó al ánimo de impulsar unas reformas de hecho con ese motivo se suprimió el ministerio de ultramar que España tenía con los funcionarios que sobraban de ese ministerio se creó el ministerio de instrucción pública que hasta entonces dependía del fomento de una especie de ministerio para todo y es en esa fecha de 1900 cuando tenemos digamos en el ministerio de educación con el nombre de entonces de instrucción pública y se planteó una gran reforma educativa y se tuvo la conciencia de que lo mismo que también para el ismo ahora porque ahora vivimos una crisis que bueno es económica no bélica afortunadamente pero esa esa crisis también nos lleva a decir necesitamos una nueva producción necesitamos un nuevo un nuevo hacer científico tecnológico para que nuestras nuestra capacidad industrial aumente nuestra capacidad de producción de bienes y servicios originales aumente etcétera bueno pues entonces también había un movimiento de decir tenemos que ganar en ciencia y tecnología para ser un país puntero y pocos años después el filósofo de la igasete de alguna manera capetaneo intelectualmente este sentido de la regeneración nacional del que hay naturalmente otras cosas anteriores pero en toda esa campaña de escritos que tenían mucho eco distintos periódicos de madrid que ortega hacía pues en 1906 llegó a escribir que en españa no había había habido grandes científicos pero como he hecho a islao no como como una organización social para la ciencia de hecho allí puesto un texto literal la ciencia no hombres de ciencias y es en nosotros la ciencia un hecho personalísimo y no una acción social Y entre otras cosas, para remediar eso, se creó la JAE, que pongo allí, la Junta para la Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas, intentando crear una acción social en favor de la ciencia y poniendo a su cabeza uno de esos hechos personalísimos, el premio Nobel de Santiago Ramón y Cajal. Y bueno, pues la JAE tuvo varias misiones, entre ellas mandar gente a estudiar a Europa, a formarse en las mejores universidades, a los alumnos brillantes de España mediante becas y reformar el magisterio, en fin, crear laboratorios de investigación, muchas cosas que yo ahora no me puedo entretener, pero sí que había como reacción al desastre, había un gran movimiento y una gran acción política dedicada a la ciencia. sociedad sin mar, real ha salido lo de real pero yo hablaré siempre de real en la matemática española y simplemente ahí está indicado que Octavio Toledo uno de los matemáticos importantes del momento, del que luego tendré más ocasión de hablar, entonces ya dijo que había que empezar en la revista de la sociedad a crear unas papeletas para que la historia de la matemática estuviera bien conocida entonces una de las cosas que había entonces era preocupación por conocer bien nuestra historia en función de toda esa polémica que antes había habido indico allí un par de referencias interesantes, unos libros de los hermanos García Camarero, un libro donde se recopilan muchos discursos que tienen que ver con la polémica y el libro de Elena Usejo profesora de historia de Zaragoza que se refiere en su tesis doctoral a la asociación española para el proceso de las ciencias bueno, y llegamos ya al plan de 1900 el plan Garcialis de 1900 estaba en matemáticas formaba parte de una gran reforma que afectaba a todo a toda la enseñanza aquí me voy a ceñir a matemáticas y lo voy a fechar en 1910 cuando ya había habido un pequeño cambio porque, como por ahí está indicado debajo del cuadro, este plan tuvo pequeñas modificaciones en 1909, 1915 1917 y 1920 las últimas afectaron solo al doctorado en 1908 la que ya está ahí reflejada, la comento luego y ideas generales que hay que decir sobre esto primero en horizontal, ahí he reflejado los cuatro cursos de la licenciatura la licenciatura de cuatro años no sé si hemos sido modernos para algunos les parece un desastre pero hace unos años se pasó de cinco a cuatro años empezamos el siglo con cuatro tampoco estamos inventando la pólvora eran cuatro eran muy distintos y luego la última columna es el doctorado y como se ve ahí había tres tipos de asignaturas primera línea, geometría segunda línea, análisis en general, digamos lo que entonces palabras de Klein que hizo muy famoso, la triple A aritmética al faro de análisis que digamos, iba todo junto luego lo comento un poco y luego, tercera línea pues, química, física y las ciencias de la tierra y la astronomía ese era el perfil del matemático estos estudios entonces eran casi iguales a los de física La diferencia con física era un par de asignaturas, quita astronomías y pon ópticas y cosas de esas, y acústica, eran matemáticos y físicos casi iguales. Otra cosa importante que se debe decir en líneas generales es que Madrid, Barcelona y Zaragoza eran las únicas universidades en las que se podía estudiar esto, y el doctorado solo en Madrid, pero durante medio siglo solo en Madrid, para ser doctor había que estudiar en Madrid necesariamente. Y luego había otras universidades, en ese plan de estudios, los dos primeros cursos, como eran comunes a muchos, a físicos y a químicos, y a algunas asignaturas servían para otras facultades también, eso sí se explicaba en muchas universidades donde hubiera facultades de ciencias, aunque no hubiera la licenciatura de matemáticas completa en exactas. De manera que los catedráticos que estaban más extendidos por la geografía nacional, en general eran catedráticos de análisis matemático, y catedráticos de analítica, que normalmente se encargaban de dar la métrica también. Y por otra parte, los catedráticos ya de tercero y cuarto solo estaban en esas tres ciudades que he dicho, y el doctorado solo se daba en Madrid, eso hay que tenerlo en cuenta. En nuevo alumno se era reducido. Los dos primeros cursos tenían más alumnos, pero luego ya tercero y cuarto y doctorado muchos menos, pero hablando de Madrid, que podíamos empezar cerca de cien en las asignaturas generales comunes a muchas carreras, para acabar en veinte o menos de veinte, en tercero y cuarto en Madrid y media docena, como mucho, en doctorado. O sea que en realidad los números en Madrid eran reducidos. En Zaragoza, por ejemplo, cuando acabó Cámara, los que yo he estudiado, Rey Pastor, Cámara en el seis, Rey Pastor en el ocho, eran el único estudiante de matemáticas en ambos casos. O sea que en Barcelona había algo más también, pero bueno, quiero decir que el número de estudiantes es pequeño. Y el doctorado tenía alguna cosa muy curiosa. Se hacían unos cursos, unos cursos más o menos livianos en cuanto, pero se hacía un trabajo en general relacionado con la tesis, que los estudiantes, digamos, mejores lo hacían al acabar el curso y los que se tomaban la cosa con más calma al año siguiente. Se defendía una tesis doctoral, que era un trabajo más o menos original, pero más bien un trabajo de estudio, que es lo que ahora llamamos de investigación. Y además tenía la particularidad de que para que te dieran el título estabas obligado a imprimirla por tu cuenta y a regalarle a la facultad treinta ejemplares. O sea que, en fin, habría que ser un poco pudiente para hacer el doctorado, porque si no, no. Por otra parte, las asignaturas, las primeras, casi todas, eran de una hora diaria de clase, pues tres teóricas, dos prácticas, pero bueno, no voy a entrar en estos detalles. Hay un libro, salido hace poco, Auterelo, con motivo de cumplirse 150 años de la licenciatura en matemáticas, a un catedrático de topología, jubilado, se ha tomado la molestia de buscar por los archivos toda la historia de la licenciatura, y hay un libro muy gordo que editó la Facultad de Ciencias Matemáticas de la Complutense de Madrid, donde hay todo detalle de profesores, planes de estudio, en fin. Es un libro no para leer de corrido, sino para tomar datos cuando uno los necesite. Porque, digamos, aquí está la letra, pero no está la música. Ahora no hay nada contado. Es un relato de datos, datos, datos, pero muy interesante. Bien, entonces, es interesante también darse cuenta que en la columna de cuarto, ¿cómo acababa la carrera de matemáticas? Acababa en tres, como la culminación eran tres cosas muy aplicadas. La geometría descriptiva, la geometría de ingenieros y arquitectos, la mecánica racional, lo otro lo expliqué, luego la mecánica racional, es decir, parece que se estudia análisis para poder entender la mecánica de Lagrange y Hamilton, y luego la astronomía, que culmina los estudios generales de física, química, cosmografía. O sea que, digamos, el final que podíamos llamar un poco más teórico de las cosas reaparece en doctorado, pero para generar un licenciado estamos preparándolo para que aprenda la geometría de arquitectos e ingenieros, para que aprenda la mecánica racional y para que aprenda astronomía. De hecho, los observatorios astronómicos eran una salida, por si acaso, importante para los matemáticos entonces. Bien, y el otro asunto, ya lo comento ahora al ver, bueno, lo único de esa casilla donde hay dos asignaturas es porque en un momento determinado, que fue en 1909, en la primera reforma, se añadió un poco más de cálculo infinitesimal, unos complementos de cálculo infinitesimal, que se consideraba que era una sola asignatura de cálculo infinitesimal, pero eso lo voy a explicar justo a continuación. Bueno, a este plan se le llamaba el plan de las geometrías, porque había mucha geometría. ¿Y qué tipo de geometría salía? La primera, la de primero, que era la geometría métrica, era la geometría de Euclides, geometría axiomática, con axiomas no muy rigurosos en la parte lógica, en la lógica axiomática de la teoría, pero sí una geometría. Una geometría tipo Euclides, del plano, de la recta, el plano, del espacio, de áreas, volúmenes. Un puntito de cosas que apuntaban a la proyectiva, por supuesto razones dobles, armónicas, en fin, toda la geometría que se puede hacer desde el punto de vista euclídeo con un pequeño asomarse a lo proyectivo, muy pequeño. Había un catedrático que además en aquella época duraba mucho tiempo, Jiménez Rueda, que tenía sus libros de texto, que todo el mundo estudiaba el libro de texto del catedrático, etc. La analítica era la geometría coordenada que todos conocemos con un sinfín de coordenadas, porque entonces estudiaban cartesianas, pliquerianas. Las pliquerianas son las coordenadas de la geometría proyectiva, las coordenadas homogéneas. Pero entonces, más que haber una geometría proyectiva todavía muy específica, que enseguida la hubo, por estos años empezó el propio Vegas, cambió sus libros por entonces y ya los hizo más proyectivos. Pero en general lo que había a lo largo del XIX era una colección de coordenadas. Coordenadas varicéntricas, coordenadas trilineales, coordenadas homogéneas. Y era como una colección de coordenadas. Y aunque las pliquerianas que pongo allí son las específicas de la geometría proyectiva, no había una analítica proyectiva como la entendemos. Pero sí se hacía una clasificación más o menos rigurosa de cónicas, cuadricas, etc. Y el catedrático también durante muchísimos años Vegas. Y la analítica esa de segundo era la única que se hacían cuentas algebraicas. Todo lo demás era sintético. Todo lo demás era razonamiento a partir de axiomas. La geometría de la posición era el nombre que recibía la geometría proyectiva, que era la geometría proyectiva sintética. También axiomas y deducción, intentando razonar sobre lo que la geometría podía imaginar. Porque todas las geometrías de esta época no pasaban de la dimensión 3. No se hacía geometría ni dimensional. De hecho, los libros y los cursos se estructuraban a recta el plano y el espacio. Figuras de primera categoría, figuras de segunda categoría, etc. Con el lenguaje de entonces. Y luego había una geometría superior, que era la geometría... Bueno, luego la descriptiva, que ya he comentado, aplicada. A la que se aplicaba métodos métricos cuando eran proyecciones ortogonales. La geometría descriptiva básicamente lo que hace es representar en el plano figuras de espacios. Los planos que llevan enrollados debajo del brazo los técnicos que construyen edificios, piezas, etc. Y lo que se trata es de ver en un plano lo que luego hay que hacer en el espacio. Y eso se puede hacer por proyecciones ortogonales. Que usan geometría métrica o por proyecciones desde un punto de tipo cónico. Que usan técnicas de geometría proyectiva. Digamos que, en definitiva, la descriptiva se apoyaba en la geometría de la posición. Y en la parte métrica que se deducía de la geometría de la posición. Y la geometría superior volvía a extender los temas sintéticos de posición y descriptiva. Con algún ejercicio práctico usando... analítica ya de tipo proyectivo, porque ya no pero este esquema fue muy estándar y estuvo muchos años vigente y la mejor manera para conocer esto es un artículo de Ana Millán que habla de los estudios superiores de geometría superior en España en el siglo XIX que aunque estamos hablando de los primeros años del XX esto es la continuidad natural porque digamos el hombre importante aquí que era Torroja, don Eduardo Torroja que era el catedrático de geometría descriptiva y de la geometría del doctorado, era el que imponía criterios y de hecho Torroja tenía posición oficial en el Ministerio de Estudio en Pública y fue el que inspiró y el que diseñó el plan de estudios de matemáticas y las críticas como ahora veremos se dedican al plan de las geometrías le llamaba dentro de un poco de expectivo, basta de geometría no tanta y no tan antigua porque esta geometría sintética se consideraba ya por parte de muchos una geometría anticuada que había en análisis la línea de análisis tenía en primero y segundo unos análisis que eran más o menos una asignatura muy grande en dos años, verdad que era el análisis matemático primero y segundo luego venía el cálculo infinitesimal luego a partir de 1909 la asignatura esa de complemento de cálculo infinitesimal que se simultaneaba con la mecánica racional y luego había más análisis en el doctorado que se estudiaba entonces bueno a mi me gusta al análisis 1 y 2 me gusta llamarle con un nombre tradicional que rey pastor utilizó en su primer libro, análisis algebraico porque hay toda una tradición de análisis algebraico que ahí expongo en qué significa significa explicar los sistemas de números las operaciones, como los números se van ampliando para resolver las operaciones inversas si tengo la suma y quiero restar tengo que tener negativos si tengo el producto y quiero dividir tengo que tener fracciones, etc. si tengo potencias y quiero hacer raíces o quiero hacer logaritmos necesito números reales y si quiero levantar la restricción de que eso solo se puede hacer con positivos necesito los complejos, etc. entonces esa idea de ir resolviendo las operaciones inversas para que los números crezcan Y unas operaciones que se van haciendo que siempre tienen muchas leyes comunes, la asociativa, la conmutativa, etc. Bueno, todo ese tema. Y luego temas matemáticos elementales como son aritmética, combinatoria, determinantes y sistemas lineales, los polinomios y la divisibilidad de polinomios, si el curso era elemental en una variable y si el curso era un poquito más superior en varias variables, que es más difícil. La resolución de ecuaciones algebraicas, la resolución numérica, todo aquello de la acotación, separación, aproximación de raíces, raíces complejas, el número de raíces contenidas en un recinto, todo este tipo de teoremas estaban ahí. Y la resolución algebraica, aunque el análisis algebraico llegaba a la raya de teoría galván. Ahí terminaban los mejores textos o los mejores cursos de análisis algebraica. Acababan demostrando la imposibilidad de resolver por radicales la ecuación del galo quinto. Y algunos de esos simplemente lo mencionaban, pero nadie entraba en la teoría galván, eso ya era el álgebra muy superior. Y por otra parte, entrando ya en lo que ahora mismo no identificamos más con el análisis, porque esto último que he dicho ahora lo identificamos con álgebra, pero entonces el álgebra era parte del análisis, el álgebra era algo así como la teoría de funciones fácil. Las funciones más fáciles son los polinomios. Y luego venía la parte más de... de los límites, las series, etc. Y productos infinitos. Y digamos que el análisis algebraico tenía como una culminación que le daba redondez, que era coger las funciones elementales y expresarlas en series de potencias. Que las series de potencias, pues que eran polinomios con puntos pensivos. Tenían un tratamiento formal algebraico y las cuestiones de convergencia, hasta que Cochino las puso en vereda, no se trataban mucho. Entonces, esta vieja idea de que hay un análisis que enseñar, que se refiere a las funciones elementales y a los algoritmos finitos o infinitos, contando con el límite que se hacen a partir de los números, esa idea ya está en Euler. Que Euler cuando estructuró en sus cursos una teoría de funciones, separando el análisis matemático de su aplicación a la geometría, pues ya hizo la introducción al análisis de los infinitos, luego hizo cálculo diferencial integral. Está también cuando Lagrange hace su teoría de funciones basada en desarrollos en serie, también es una teoría formal algebraica, es como el álgebra de puntos pensivos. Y Cauchy hace lo mismo, Cauchy separa el análisis algebraico del cálculo diferencial integral, pero ya mete la continuidad, ya dice en las series hay que mirar la convergencia, mete la convergencia, hay que mirar la convergencia. Pero bueno, hay una tradición muy grande que unos autores le llaman análisis algebraico y otros no, pero ese tipo de matemática es la que estuvo en la enseñanza europea durante el final del 18 y prácticamente todo el 19, y esa es la que aquí se refleja en este primer curso. Porque el análisis matemático primero y segundo contenía todo esto que yo estoy llamando análisis algebraico, más algo más que era pues la obligación de llenar el programa. Al principio había trigonometría, pero luego enseguida diré que en la reforma del año 15 la trigonometría se pasó a la geometría, esa geometría métrica. tenía que explicar trigonometría plana y esférica, con lo cual la asignatura de análisis cogió del infinitesimal la teoría de la derivación de las funciones de una y varias variables y ya la idea esa del análisis algebraico más puro se quedó un poquito, pero en cambio el análisis algebraico este carecía también de variable compleja. La variable compleja era más difícil y todo lo que se hacía, se hacía solo real, lo que se puede hacer desde un punto de vista real, porque el análisis complejo, si uno lo lleva en los desarrollos en series de potencias a su estudio teórico más perfecto, pues se enlaza enseguida con la teoría de las funciones analíticas de Baystrass. Entonces, este tipo de cosas que era un análisis básico previo y que contiene aritmética algebraica de análisis, esa vieja idea del análisis algebraico es la que estaba en 1 y 2. Lo de cálculo infinitesimal hay que explicarlo menos porque eso es más conocido, en fin, con las técnicas y los métodos de entonces, pero cálculo diferencial, cálculo integral, aplicaciones a la geometría diferencial sencilla y ecuaciones diferenciales. O sea que, bueno, luego cuando ya hubo complementos, pues los profesores podían ir metiendo más cosas. Y cuando aquí, fijaros que ahí hay otra cosa importante, menciono los catedráticos, Octavio de Toledo era el gran catedrático de análisis de la época, luego ahora enseguida le voy a dedicar un poquito más de tiempo a este personaje, y Villafañe ya estaba a punto de jubilación, ¿no? O sea que ya su importancia en este era mayor y era menor, su importancia en este ámbito. Y Rueste no es de los más llamativos, pero se encargaba de todo el cálculo infinitesimal. Y cuando se hace la ampliación de cálculo hay que darse cuenta allí de que el catedrático que se ocupa de ellos es el de mecánica racional, Ruiz Castizo. Este es el momento también de decir que entonces la organización de la enseñanza universitaria, en cuanto al profesor se refiere a una distinta hora, una cátedra se daban por asignaturas con tantas horas de clase y con tanto sueldo. No tenías dedicación exclusiva, tú tenías que dar esta asignatura. Que según las horas semanales y según tal, te pagaban tanto. Y a veces los catedráticos acumulaban otras cátedras. Por ejemplo, los catedráticos de provincias, pues si sacaban cátedra análisis 2, además daban la 1 por acumulación, que se decía. Con lo cual ganaban un poquito más de dinero y tal. Y si además estaban en Madrid y hacían libros, como había alumnos y los vendían, pues el último sobresueldo. O sea que en realidad, y algunos daban clases en otros sitios y preparaban para acceso a las ingenierías, los famosos cursos preparatorios. Porque no hay que pensar en el profesor en dedicación exclusiva, que está todo el día allí o debe estar porque a él le pagan y tiene un cierto número de clases que dar. No, ahí te pagaban. Por tu cátedra. Y había cátedras con muchos alumnos que estaban mejor pagadas que otras. Y, por ejemplo, las cátedras del doctorado eran todas acumuladas a cátedras de licenciatura. Todos los catedráticos de doctorado, que eran en esta época Octavio de Toledo en análisis, que la tenía por acumulación de su cátedra de análisis matemático 1, Torroja primero y Vegas después en geometría, que la tenían por acumulación a sus respectivas cátedras de licenciatura, e Íñiguez, el astrónomo que tenía también, me parece que no la tenía acumulada porque su otro puesto estaba en el observatorio astronómico. Pero, en general, los catedráticos tenían cátedras acumuladas. Por eso no es raro que un profesor se encarga de otra cosa. Aparte de que a veces es porque no había, porque no se había cubierto la plaza. Pero muchas veces había, en general, menos catedráticos que asignaturas. Porque se le daba el proceso este de la acumulación. Aunque se creara la cátedra, la cátedra se daba por acumulación. Bueno, entonces, de la mecánica racional tampoco tengo mucho que explicar. Se explicaba el cálculo vectorial al estilo físico, la estática, la dinámica, etc. Al final, la mecánica lagrangiana. Y, bueno, pues era una manera de culminar los estudios de análisis. Y eso sí, importante notar que las funciones de variable compleja, que los números complejos sí se daban. Y de la resolución de ecuaciones en complejo... ...y el teorema fundamental del álgebra, todo eso sí se daba. Pero ya lo que son las funciones complejas en el sentido más sencillito de Cauchy, teoría de residuos... ...no se daba hasta el doctorado. Solo los que hacían doctorado aprendían eso. Y en esta época todavía la variable compleja, la rima, no se sabía en España. Bueno, en análisis matemático esto era algo muy importante. Este señor de mirada triste. Esa mirada triste está ya mayor en esta foto. Y, bueno, yo creo que el hombre tenía motivos para estar triste. Porque tuvo su biografía personal. Tuvo desgracias personales con la muerte de los hijos. En fin. Sé que, en definitiva, pues bueno, era un hombre que transmite esa cara un poco así lánguido, ¿verdad? Pero era el hombre importante en el análisis matemático. Empezaba a enseñar en primero y terminaba de enseñar a los que hacían el doctorado. El tipo de libros que él escribía para texto de estas asignaturas... ...aunque se llamara elemento de la métrica universal, coordinatoria, determinantes... ...todo eso es lo que yo estoy llamando aquí el análisis. El tratado de álgebra. El tratado de álgebra formaba parte del análisis algebraico. Y tenía un libro de trigonometría que fue famosísimo. Se editó durante muchísimos años. Y los que lo han usado y los que han escrito de él en esa época... ...han dicho que era uno de los mejores libros de la materia durante muchos años en España. Y luego tenía un libro modesto, en mi opinión, de barra de compleja. Un solo a la coxí de 1907 que era lo que explicaba el doctorado. Este hombre sufrió, digamos, la llegada del rey pastor. Cuando el rey pastor llegó a Madrid en el curso 14. En el curso 15, pues digamos, le dejó anticuado a Octavio de Toledo. Los libros que hizo rey pastor bloquearon la publicación ya de los libros de análisis algebraico de Octavio de Toledo... ...que ya no tuvieron ediciones prácticamente, salvo los más elementales, ese de calculatoria hasta el 25... ...porque se usaban en enseñanzas elementales. Pero a partir de esa época en la que el rey pastor le desplazó un poco de la hegemonía matemática... ...él fue un decano de la facultad de ciencias muy dedicado a... ...a mimar y a cuidar su facultad. Hay una biografía hecha por Peralta en la receta de la Resmes... ...donde este señor, que así como Torroja era el hombre importante con su acólito Vegas... ...para la analítica en la parte geométrica, pues este en esta época era el hombre importante... ...de análisis matemático en Madrid. Y pasamos al punto 3 de las críticas. Bueno, Torroja preparó el plan, un hombre severo, austero, de mirada un poco inquisitorial, aunque casi no se le ven los ojos, ¿verdad? Un hombre que se le considera en la historia de las matemáticas como eso que se dice los sembradores, Echegaray, Torroja, Galeano, los que empezaron. Y eso es verdad, yo creo que Torroja hizo un esfuerzo muy importante allá por los años 80 de importar la geometría, o sea, de modernizar matemática española. En mi opinión el problema de Torroja es que modernizó y esa modernización la hizo durar 30 años y eso ya es demasiado. En una época en la que las matemáticas estaban muy vivas y muy cambiantes, modernizar de joven y jubilarte con lo que has modernizado de joven, pues no, eso ya no. Y desde entonces... Desde ese punto de vista había otro catedrático, el gran Zagraozano, por su trabajo, ¿verdad? Como yo soy riojano, pero él era navarrico. Y como yo soy aragonés, pero vamos, el gran catedrático de Zagraozano, el García Galeano, pues ponía verde a este plan el exceso de geometría y lo criticó. De hecho Galeano apoyó mucho la reforma general de planes de estudios que hubo en 1900. Apoyó mucho la reforma general que se hizo en la Facultad de Ciencias, pero en concreto en matemáticas decía que un desastre. En concreto en matemáticas mal, porque hemos perdido una ocasión de ser modernos. Claro, Torroja y García Galeano eran catedráticos muy diferentes. En la transparencia anterior, la vuelvo a poner, se ve que son casi de la misma época. Son coetáneos, de un año de diferencia. Pero tienen unas trayectorias personales y actividad muy distintas. Torroja era un arquitecto y era prácticamente un geómetra. No es que no supiera lo demás de matemática. Pero era un hombre focalizado en la geometría y en la descriptiva, y en la proyectiva como base de la descriptiva. García Galeano era un hombre de letras que se hizo matemático tardío y que era un hombre humanista y que veía las matemáticas de una manera muy global. Torroja es verdad que hizo la recepción de la geometría de Stout, pero García Galeano fue toda su vida un promotor de toda la matemática moderna. Necesitamos saber muchas cosas en España que no sabemos. En Europa hay esto y esto y aquí no lo conocemos. Entonces, Torroja... Quedó muy anquilosado con ese esfuerzo que hizo por Staudt, que eso hay que aplaudirlo, pero luego ahí se quedó. Y en cambio, Aldeano no paró de tomar iniciativas, de las cuales la más importante es el Progreso Matemático, la gran revista de matemáticas de finales, los años finales, en dos épocas, que ha estudiado muy bien Mariano Almigón. Y él vivía un poco en Madrid, en su mundillo, muy metido en escenas judiciales, porque era un hombre de mucho prestigio y mucha categoría. Y en cambio, Aldeano era un poco rechazado por el Grupo de Madrid. Se sospechaba, bueno, son cosas difíciles de probar, intentó ir a Madrid a alguna cátedra y no la ganó. Bueno, se discute si la merecía o no la merecía, pero en realidad no era bien visto en Madrid. Y Torroja no tenía relación con la matemática internacional, y en cambio Aldeano estaba completamente relacionado con Europa, con la matemática europea, sus congresos, de hecho fue miembro de la Comisión Internacional, para la instrucción, asianza de las matemáticas, que fue creada en 1908, en el Congreso Internacional de Roma. Digamos, por resumir, yo he puesto ahí dos palabras. Torroja representa la matemática española autosuficiente, autosatisfecha, ¿no? Qué buenos que somos, qué libros más gordos hacemos. La de Aldeano representa autocrítica. Nos falta mucho por saber, hay muchas teorías que se conocen en Europa, que aquí todavía no las conoce nadie. Eran dos hombres muy distintos. El esquema de críticas, pues era fácil de entender. Exceso de geometría sintética, más álgebra teórica, entremos en la teoría galoá, que era un poco la gran asignatura pendiente, más teoría de funciones, más geometría con uso de polinomios, la juráica, y más geometría con uso de infinitesimales y de análisis, más geometría diferencial, y en general más puesta al día, y más investigación, que entonces la investigación era como una cosa que uno hacía alguna vez, o una cosa, pero más dedicación. Y que, por el empuje de los críticos, ese cambio se hicieron, pero la verdad es que muy poquitos. Ya he comentado que en 1909 se puso la asignatura de complementos con tres horas semanales para que se pudiera. También hay que decir que la asignatura de tercero de elementos de cálculo infinitesimal tenía más horas a la semana que las demás. Tenía más intensidad docente. En 1915 se le añadió a esta asignatura de complementos una hora más, la trigonometría pasó del análisis matemático de primero a la geometría métrica de primero, con lo cual ganó espacio para explicar más cosas, el análisis más cálculo, y en el doctorado la astronomía se retiró. No se retiró, perdón, primero se añadió como opcional la física matemática que tenían los físicos, que entonces daban viejísimo Echegaray, que luego dio Carrasco, y en el XVII se quitó la astronomía y se puso la mecánica celeste, una cosa ya pues también más teórica y no sólo observacional, en la que apareció un catedrático nuevo, Plans, que llegaba de Zaragoza. Y en el año XX, pues bueno, apareció una asignatura de metodología y crítica matemática, pues para dar un poco de satisfacción a Rey Pastor por esa batalla del doctorado, de la que si luego hay tiempo hablaré más tarde. Pero se puede ver que desde 1910 hasta 1920 los cambios son muy pequeños y digamos, significa que la estructura matemática que había en el país estaba muy quieta y muy poco al aire de los grandes cambios que se estaban produciendo en la matemática internacional. Bueno, en esto es donde aquí irrumpe Rey Pastor. Rey Pastor... Rey Pastor tuvo una... Rey Pastor se licenció en Eslogroñés, ¿eh? Eslogroñés, nacido en 1888. Se fue a estudiar a Zaragoza, donde hizo la licenciatura. Ahí tuvo dos profesores que él recuerda con entusiasmo, Galdiano y Álvarez Ude. Galdiano, el que le explicó el cálculo infinitesimal, y Álvarez Ude, el que le explicó la geometría de la posición y la descriptiva. Álvarez Ude por entonces era un discípulo predilecto de Torroja. Y luego cuando llegó al doctoral lo hizo a la Estela, de Torroja, y de hecho se doctoró en geometría. O sea que curiosamente, Rey Pastor tenía, digamos, el sello de discípulo de los dos enfrentados del plan. De los dos enfrentados del plan. Enseguida empezó a ir a congresos, a publicar trabajos, los congresos de la Estación Española. Se creó la Resme, empezó a publicar en la revista, participó en la creación de la Resme, fue uno de los primeros secretarios. Y en junio del año 11, es decir, muy jovencito, ganó una cátedra en Oviedo. Y entonces otra de las cosas que su época puso a disposición de los jóvenes, que era la JAE, estuvo un año en Berlín, dio un año de clases en Oviedo, se fue un año a Gotinga, en Múnich estuvo también de paso. Berlín y Gotinga entonces eran las universidades cumbres del mundo. París también, perdón, los franceses, pero Berlín y Gotinga eran los lugares donde estaba la matemática en primerísima línea. Y en el 14-15, cuando la guerra mundial le obligaba a volver apresuradamente a Madrid, y no se sabe si hubiera seguido yendo a Alemania, pero como estañó la guerra, pues ya no hubo ocasión, empezó a dar clases en Madrid. Y inició su batalla. Su batalla en Madrid fue modernizar la enseñanza y pedir atacar al funesto plan vigente con más análisis. De alguna manera, por aquellos años, Torroja ya empezaba a desaparecer porque antes de jubilarse, que se jubiló enseguida, estuvo años enfermo y digamos que probablemente el rey pastor hubiera sido más cauto con Torroja delante porque le tenía un cierto respeto. Pero en cuanto desapareció Torroja, empezó a dar caña a los catedráticos mayores porque eran viejos. Estaban viejos matemáticamente hablando, que no estaban enseñando matemática nueva. Pero lo cierto es que luego se marchó invitado a Buenos Aires, que luego al final se fue a vivir a Buenos Aires. O sea que tuvo unos años de mucha intensidad que yo los intento contar en ese artículo que allí está reflejado de la Gaceta Matemática del año 2006 hasta la historia del rey pastor desde el año 20. Y el rey pastor, Aquí he puesto dos comienzos. Su comienzo doctoral, su tesis doctoral, no hay tiempo de exponer ahora, pero marcó diferencia con las tesis doctorales hasta entonces. Digamos, puso otro nivel. Seguía siendo una geometría sintética, seguía siendo un poco antigua, pero otro nivel de categoría científica. Y su primer curso en Madrid, que ahí está reflejado en los apuntes del año 1415, marcó un nivel también respecto a los cursos de Octavio Toledo. O sea que él llegó y marcó una diferencia. Y bueno, aquí por poner algunas fotos. Este era el rey pastor de entonces. He puesto una foto, una cosa que me gusta mucho y que me gusta mucho primero, porque esa foto sentado en el sillón del año 15, ese sillón es el sillón del director entonces del Instituto Goya. Esta foto le tengo yo un cariño especial porque me la regalaron, me la regalaron una copia, del Instituto Goya donde yo estudié mi bachillerato, mi segunda parte. La primera fue en Madrid, en el Instituto San Isidro. Y hace unos años, siendo un compañero mío de curso director, una compañera matemática me trajo la foto. Desmontaron el cuadro para hacer una foto y dármela. Fijaros que esa foto es una de las famosas fotos del rey pastor. Ese dibujo a carboncillo que está hecho en Buenos Aires cuando estuvo allí el año 17-18. Seguro que el rey pastor llevaba esta foto en el bolsillo y alguien la hizo copiándole de esa foto. ¿Qué pasó aquí? Alguien lo hizo copiándole de esa foto. Y esa foto es la que luego el año mundial de las matemáticas se utilizó para el sello. Esa es la que se utilizó para hacer el sello conmemorativo que es la figura del rey pastor. O sea que esa figura que la filatelia ha inmortalizado está dibujada a partir de una fotografía hecha el rey pastor en Zaragoza en el sillón del director del Instituto Goya. Bien, y aquí pongo dos obras que son los fundamentos de geometría proyectiva, que es un premio que le dio la Academia de Ciencias en el año 14 y que no se publicó hasta el 17. Y una representación, sobre la teoría de la representación conforme, en unas conferencias que dio en el Instituto de Estudios Catalans y que las redactó en Catalán Terradas, otro gran matemático ingeniero de la época. Estos dos libros demostraban que la batalla de Madrid por el doctorado estaba justificada. La geometría que hay en este libro de fundamentos es muy superior a la que hay en muchos más modernos. Una geometría axiomática, a la manera de Pash y Schur, que es mucho mejor que lo que se estaba explicando. De hecho, Vegas unos años después intentó explicar este libro y el rey pastor le criticó porque decía que lo explicaba mal, porque no lo entendía. Y esa variable compleja era ya variable compleja Riemann, mucho más moderna que la variable compleja que Octavio Toledo explicaba en el doctorado. Y entonces el rey pastor se indignaba porque no le dejaban explicar el doctorado. Y entonces la batalla del doctorado de esta época es, digamos, una lucha interesante por la hegemonía de un matemático que llega moderno y con ambiciones, y unos matemáticos que están instabaos y que están un poco anquilosados. El plan de estudios del año 17 lo voy a pasar muy por encima, porque salvo algunos cambios de persona es muy similar. Es que las cosas habían cambiado muy pocos, habían cambiado muy poco. Quiero destacar de este cuadro únicamente que Álvarez Ude ha pasado de Zaragoza a Madrid porque se ha jubilado Torroja y ocupa su cátedra, pero Vegas, el más viejo geómetra, mucho peor matemático que Álvarez Ude, se queda por antigüedad con el doctorado. ¿Por qué? Entonces es una cátedra de acumulación, es un dinerillo, en fin, bueno, aquí entran las cosas estas de la vida misma. Por lo demás, poco han cambiado. Poco han cambiado las cosas. Rey Pastor asoma junto a Ruiz Castizo en los complementos del cálculo infinitesimal. Rey Pastor es catedrático en realidad de primero, y se va alternando con Octavio de Toledo y Rey Pastor. En realidad, yo ahí he puesto Rey Pastor en segundo y ya no estoy ni seguro de si está bien o está mal, porque el primer año Rey Pastor 14-15 dio primero, al año siguiente dio segundo. Era muy frecuente que los de primero y segundo rotaran para dar la asignatura de 1-2 entera a la misma promoción, digamos. Bueno, entonces... Pero Rey Pastor quería tirar para el rectorado, se metió con Ruiz Castizo en el complemento de cálculo, pero el doctorado se le vedó. Pero entonces, y eso es muy importante, lo indico allí, la JAE creó el Laboratorio de Inseminario Matemático. Y allí la batalla del doctorado tuvo la segunda parte. Allí se creó un núcleo de investigación y la gente hacía el doctorado investigando con Rey Pastor y otra gente en el Laboratorio de Inseminario de la JAE. Y los cursos de doctorado quedaban como una especie de trámite que había que hacer. Pero luego los tribunales los ponían los catedráticos del doctorado y ahí había una pugna de... Bueno, interesante. A veces se parece un poco a las pugnas que puede haber ahora entre facultades y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas y cosas de estas. Bueno, estas historias no tenemos mucho tiempo en dedicarnos a ellas. Ahí cito un trabajo de Ausejo y Millán muy importante sobre cómo estaba organizada la laboratoria. Y es muy importante también ver que la astronomía desapareció del doctorado, apareció la mecánica de este compliance. Y esta idea la voy a desarrollar un poco. Bueno, esto es simplemente poner gráficamente a los herederos de Torroja. Torroja que era un patriarca de la matemática española y un mandamás de la matemática española. Tanto era así que, como los reyes, aquellos reyes aragoneses antiguos, su reino se partió en tres. En tres. Y entonces tuvo un heredero en el doctorado, que fue Vegas, a la sazón 60 años más o menos. Un heredero en la cátedra, que fue Álvarez Ude, a la sazón 40 años. Y el joven rey pastor que pedía sitio y no le dejaban sitio en lo que daba dinero, y le dejaron sitio en lo que no daba dinero. Que era, le hicieron académico. El puesto en la Academia de Ciencias se le dio a rey pastor. Bueno, Vegas ya lo era. Y el rey pastor, bueno, se enfadó mucho y se acabó yendo a Argentina. ¿Hay quien dice? Y él decía que porque estaba muy desilusionado con el tratamiento que se le estaba dando en Madrid, que no se le dejaba hacer cosas. Pero esta lámina da un poco una idea de cómo el tiempo de duración de Torroja fue muy amplio y que hay como tres generaciones o tres épocas. Su primer gran discípulo, que fue Vegas, al que tenía aparcado como ayudante en los aspectos de la analítica. Su primer gran discípulo de talla matemática, aunque poca actividad investigadora, que fue Álvarez Ude. Y su último discípulo, y hombre muy brillante, que fue rey pastor, aunque discípulo solo en el doctorado. Bien, un pequeño esquema de cómo estaban las tesis doctorales. Hay que hacerse cuenta de la pobreza de la estructura matemática superior de entonces. Entre 1905, que fueron las primeras tesis del plan de 1900, y 1921, 35 tesis doctorales, solo en Madrid. Hay que observar que el total, bueno, las geometrías analíticas, las tesis de astronomía eran los grandes bloques, las tres asignaturas. Podía haber tesis de temas difíciles de clasificar. Pero con el tiempo apareció la historia y con el tiempo apareció la mecánica. Porque antes se ha hablado de que había una historia en el doctorado opcional. Se la regalaron a rey pastor para que no protestara porque no le dejaban acceso al doctorado. Como a él le gustaban los temas de la matemática, le dijeron, pues te ponemos una de metodología y crítica para que cuentes historia de la matemática. Y Plan se empezó a dirigir tesis en mecánica. Es importante notar que las tesis caen. 15, 11, 9. Pero ¿por qué caen? Las 9 del periodo 1621 más la 1, una que marco en azul ahí, una de geometría del 15, están ya hechas en el laboratorio de diseño geomatemático y son de un nivel... diferente al anterior pero como se exige más hay menos la cosa luego remontará en el tiempo pero de momento hay porque antes cualquiera que se apuntaba grabado haciendo una tesis ahora ya había que dar un cierto nivelito en fin y había discusiones sobre cuál era realmente el nivel que había que tener pero curiosamente en una época en la que la estructura de la investigación digamos sufre un impulso hay menos tesis doctorales hay menos tesis doctorales pero aumenta sensiblemente la calidad y bueno ahí he puesto los nombres de los primeros que ya son personas más o menos conocidas de la historia del siglo 20 en la matemática española pero que voy a pasar por delante cito al final como referencia una tesis un trabajo no una tesis un trabajo mío y de otros colaboradores sobre el doctorado en matemáticas en esos años y a modo de conclusión voy a presentar dos láminas una que es un tema que a mí me subyugó y que bueno para reflexionar sobre las cosas pueden estar contenidas en esta charla puede venir bien el rey pastor escribió el año 53 en la bc un artículo sobre torres quevedo y el 98 en la cual defendía varias tesis y algunos historiadores como cacho view y tal época reciente a las han defendido parecidas decía la generación de 98 que es una generación más literaria es mentira la generación impactada por el 98 por el desastre es los adolescentes de entonces dice rey pastor entonces los quedamos jovencitos entonces nos avergonzamos del país los que entonces ya eran jóvenes y andaban ya iniciando profesiones y tal pasaron de largo los célebres literatos no deben apropiarse del 98 porque jóvenes en aquella fecha no supieron prever el desastre les dejó desorientados y no los silenciosos científicos cincuentones los que antes hemos llamado los sembradores eso sí descubrieron los males de españa y se empeñaron a solverlos entonces yo pongo hay una pregunta un poquito retórica y la verdad es que la verdad es que los matemática pero la que yo le dedica un artículo convención ahí detrás hay una analogía generación matemática entre estas cosas que rey pastor dice en este artículo yo encuentro alguna semejanza con el hecho de que él admire a echará y torroja y y aldeano que serían los cincuentones que previeron los males de españa y que se impulsaron a remediar los aunque digamos que torroja sean que usará un poco quizá y los jóvenes que sería la generación intermedia los vegas octavio de toledo que se sentaron en el centro de la cadena de la cimitada de fijo que estupendo somos que hoy en lo hacemos y a vivir 25 años sin cambiar nada y su generación para que se apunta poco con entusiasmo diciendo somos los que de nuevo queremos cambiar el país yo en esta En ese artículo pretendo ver si esa analogía matemática puede existir. Y otro tema para reflexión final, quiero hablar de la ideología de los científicos, pero también son unas líneas para acabar en un minuto ya y no extenderme más. Hormigón ha escrito mucho y bien sobre paradigmas y matemáticos, intentando adaptar las teorías de Kuhn a las ciencias experimentales a las matemáticas. Y cuando él dirigió esta obra colectiva que es Paradigms and Mathematics, que sale de un simposio que se hizo en Zaragoza, un ruso académico de la Unión Soviética, Mitov, un gran historiador de la ciencia y la matemática, habló sobre la ideología de los científicos y decía, en una sociedad científica hay un paradigma, en este caso matemático, que son los saberes y los métodos que en ese momento se usan. Hay una ideología. Hay una ideología matemática que significa cómo la gente piensa, qué es importante en la matemática, qué no, qué se debe poner, qué no, qué se debe hacer, qué es lo que influye en planes de estudios, en orientación de investigaciones, etc. En preferir a veces a unos u otros en oposiciones, aparte de las cuestiones de particularismos y personalismos, etc. Y la ideología general, es la forma en que uno ve el mundo y su ideología que se parece ya más a la ideología política también infiere en estas cosas. Y esto es importante a la hora de reflexionar sobre las cosas que yo, he contado, de hace cien años y las cosas que también están pasando ahora. Disputas sobre este plan y este otro plan. Y también es bueno disponer de alguna categoría teórica para la reflexión sobre estas cosas y ver dónde estás defendiendo una práctica matemática, dónde estás defendiendo una ideología matemática, es decir, qué piensas tú de lo que las matemáticas son o deben ser. Dónde estás defendiendo una ideología general y otro ámbito muy común que no he puesto allí, intereses particulares, en fin, muy humanos, pero al mismo tiempo, pues a lo mejor, un poco inconfesables y por eso ni se ponen en estas cosas. Termino también diciendo que una vez a mí sobre este tema se me ocurrió escribir un artículo intentando encontrar en la discusión sobre la dialéctica, el cálculo infinitesimal, una aplicación, que es un tema viejo y nuevo, una aplicación de este tipo de ideologías. Y ya con esto termino. Al final nos estamos fijando en una época de hace cien años que nos sirve para ver que había muchos problemas. Problemas muy parecidos a los de ahora y al mismo tiempo muy distintos porque son épocas y tiempos completamente diferentes. Y animar a todo el que le interesen estas cosas, pues a que lea sobre los hechos concretos de la vida matemática y a que lea sobre las reflexiones filosóficas e históricas que proporcionan categorías intelectuales para poder explicar los fenómenos históricos un poquito mejor. Pues yo con esto termino. Muchas gracias. por la atención a los que la han tenido y disculpas a los que he aburrido. Nada más. Muchas gracias, profesor Español. Si a la gente que está en el chat le parece interesante realizar alguna pregunta, pues puede hacerlo ahora. Yo tenía una pequeña pregunta y es que en toda la charla de todos los planes de estudios que has expuesto, los aspectos topológicos y más... Se habla mucho de análisis matemático, pero un análisis más algebraico. Sin embargo, los aspectos topológicos me parece que están ahí como a caballo entre varias cosas. Primero, es pronto para hablar de la topología en la enseñanza, incluso en la enseñanza universitaria. En esta época había cursos de topología con el nombre de análisis situs en universidades punteras, pero eran cursos de los especiales, que eran profesores. La topología tiene dos vías de acceso en la matemática. La topología tiene dos vías de acceso en la matemática para configurarse en una disciplina autónoma, que tiene ya nombre propio. Una es la vía geométrica. La vía geométrica la podemos empezar en Puentes de Königsberg, la podemos empezar con las caras más vértices a listas más dos... Hay una geometría sin medida. La geometría etimológicamente significa medir figuras y medirlas. Pero hay otra geometría que no mide nada. Habla de posición, que habla de propiedades geométricas independientes de la medida. Y en cierto modo a eso es a lo que Leibniz le llamaba análisis situs. Y algunos matemáticos han entendido por análisis situs cualquier tipo de geometría que no mida. Desde ese punto de vista, la geometría proyectiva puede ser un análisis situs, porque es una geometría... De hecho, el nombre que le hemos visto ahí es geometría de la posición, no geometría de la medida. Bueno, pero... Estas cuestiones se fueron configurando los poliedros, las formas de hacer poliedros. ¿Para qué tipo de cuerpos vale eso de caras más vértices a listas más dos? ¿Qué vale para los poliedros regulares, platónicos? ¿Cómo tiene que ser un cuerpo para que valga esa fórmula? Por ahí se van haciendo multitud de desarrollos y ya es un tipo de geometría que no mide nada. Y que eso va llevando a lo que ahora podríamos llamar la clasificación de superficies, una clasificación de tipo combinatorio de superficies. Y eso es una rama de crecimiento de la topología que quizá se va haciendo algebraica y que podríamos a lo mejor culminar en Poincaré, en análisis de Poincaré, en la teoría de los fundamentales, en Mebius antes, etc. Pero hay una línea histórica. Y luego hay otra línea histórica que básicamente es la que empieza Cantor, con la teoría de conjuntos de Cantor, aparte de los conjuntos en sí con elementos y más, están los conjuntos composición, los conjuntos próximos, composición dada por límites, los de acumulación, los de tal y cual. Y bueno, esas dos líneas andan por ahí. La línea geométrica entra en los planes de estudio muy tarde, es lo que podríamos llamar la que lleva a la topología geométrica. La topología cantoriana entra antes y por esta época que yo he estudiado empieza a asomar cuando, y en Rey Pastor asoma claramente, cuando los autores explican el análisis de varias variables. Cuando se salen de una variable ya necesitan un poco, bueno, los conjuntos del plano, que es una curva, que es una curva, pues ya hace falta ir metiendo topología. Pero es una topología que es... Es la que el análisis necesita. Y el álgebra es lo mismo. El álgebra es parte del análisis. El álgebra es, como he dicho antes, la teoría de funciones de las más fáciles, que son los polinomios. Las cuentas, lo que uno hace con los polinomios, la teoría de funciones polinómicas, entonces decían funciones enteras. Pues eso son los... ese análisis es el álgebra. Claro, el álgebra como hoy día lo entendemos. El álgebra... Como paradigmas de la matemática axiomática del siglo XX, viene más tarde. Viene más tarde. Y en España no hay asignaturas de álgebra ni de topología, ahora no me lo sé de memoria, pero hasta los años 50 y algo. Hasta entonces ha habido cursos de doctorado, ha habido cursos, pero digamos una asignatura que se llame álgebra, que se llama algebraica, y una asignatura que se llama topología, la que se diferencia un poco antes. Y una asignatura que se llama topología es de posguerra avanzada. O sea que en este tiempo es muy temprano para hablar de álgebra en el sentido axiomático. Aquí en estos libros de análisis algebraico y cuando se habla de polinomios hay unas cosas muy bonitas de estudiar. El principio de permanencia de las leyes formales ya da idea de que hay una especie de estructura abstracta de la que participan todos los números. La idea de cuerpo, la idea de grupo, pero las teorías ya puramente axiomáticas como hoy día se estudian son siglo XX. Son siglo XX, aunque tienen gérmenes evidentes en la segunda mitad. De aquí en Kronecker, pero es siglo XX. Y en España y en planes de estudio universitarios, a posguerra. ¿Qué opinas, profesor Español, sobre la reducción de asignaturas de matemáticas en los nuevos grados? Pongo que se referirá más a los grados de ingeniería, quizás. Bueno, a mí me parece mal. La reducción de asignaturas de matemáticas en los grados se produce en todos los grados, en mi opinión. En los grados de ingeniería y en los grados de empresa, en empresa quizás, bueno, ahora es muy difícil hablar de esto en general, porque como cada universidad puede hacer su plan, aunque hay muchos intentos de coordinar y de uniformizar, pues habría que estudiar cada caso. Pero yo creo que en general se produce una disminución. En empresa, yo creo que en los estudios de empresa se produce una disminución. Y a mí me parece que incluso más notoria, en algunos sitios cosas que yo conozco, que la que se produce en las ingenierías. Las ingenierías profesionalizantes, las que tienen directrices propias y tal, ese criterio general ha reservado un mínimo, pero donde los colegas universitarios de otras especialidades han podido hacer por su cuenta, están tirando a una reducción de las matemáticas severa. Que yo creo que alguna vez se pagará. Porque, claro, las matemáticas son necesarias. Yo tengo una idea personal que también es un poco contraria a la idea tradicional de que las matemáticas se han de acumular en los primeros años. Las matemáticas se podían diversificar a lo largo de sus estudios dándoles la intensidad que se necesite en cada momento y aprovechando que el estudiante ve su necesidad para una mejor motivación y no embotellarlas en un primer curso. Pero con una argumentación... Con un argumento, en mi opinión, un poco cínico. Algunos de los colegas de otras titulaciones dicen que si son tan básicas habrá que darlas al principio, aunque sí, ¿no? Entonces, bueno, no son buenos tiempos para las matemáticas en las carreras en las que las matemáticas tienen una presencia auxiliar. Y en el grado de matemáticas también hay una disminución porque, claro, si comparamos con la licenciatura, pues hay una reducción. Lo que pasa es que, claro, lo que antes se explicaba en la licenciatura, pues ahora se hará en grado más máster y los que hagan máster, pues a lo mejor... Algunos acabarán haciendo incluso más, ¿no? Pero claro, el grado... Y luego hay otro motivo de reducción. de las matemáticas, los grados de matemáticas en muchas universidades, sobre todo en las más pequeñas o en las menos grandes, porque la situación de crisis económica reciente, pero no tan reciente, de disminución del número de alumnos ha llevado a que los poderes académicos, autonómicos y universitarios impongan coincidencia de asignaturas entre varias carreras. Por ejemplo, en unos sitios que matemáticas tenga mucho en común con física, en otros que matemáticas tenga mucho en común con informática, lo que hacemos en Logroño, para, digamos, economizar. Eso hace que matemáticas tenga menos matemáticas que podría tener y que informática tenga menos matemáticas. Y que matemáticas tenga más matemáticas que podría tener. Pero esos intentos de concentrar titulaciones para economizar, porque estamos en época también de escasez de alumnos, etc., pues también hace que a veces las carreras, los contenidos hayan disminuido. Y luego, otras veces, la disminución afecta más a un sector de la matemática que a otro, algo más teórico a veces que a otro. Pero también quiero indicar que, aunque yo creo que hay un carácter general de descenso, hay que mirar universidad por universidad, porque ahora hay mucha capacidad de, dentro de una cierta homogeneidad, de ser distintos en los enfoques. Este, Carmen, que era la persona que preguntaba, dice, creo que ya no estamos pagando con nuestros hijos y sus niveles de matemáticas y eso y la exigiedad. Ese es un problema severo, pero ese es un problema severo que tiene dos enfoques. Hay un espíritu matemático que se cultiva aprendiendo matemáticas de verdad, no matemáticas auxiliares para otras ciencias. Pero también es verdad que hay una formación como profesor que a veces la carrera de matemáticas descuida. Y, digamos, los aspectos de matemática horizontal, de matemática cultural, de matemática que importa mucho para ser buen profesor, a veces los propios matemáticos los descuidamos. Y, bueno, pero en general yo creo que ahora que estamos empezando a dar másteres de formación de profesorado, en la especialidad de matemáticas, nos encontramos con que hay muchos matemáticos, muchos alumnos que no son matemáticos, ingenieros de diversos tipos que conocen matemáticas. Sí, pero un conocimiento, digamos, tecnocrático, un problemilla que saben resolver, pero no esa idea, y para ti que es la matemática, esa idea la tienen muy poco desarrollada, ¿no? Muy poco desarrollada y eso es muy perjudicial para la enseñanza. Y por otra parte, también hay que tener en cuenta... Hay que tener en cuenta que se han hecho intentos de crear un mínimo de estudios matemáticos, un mínimo de créditos equivalentes, pero todos esos créditos, todas esas ideas no acaban de triunfar, porque quien quiera se puede escapar de esos criterios homogéneos de muchas maneras. En este momento faltan matemáticos en el país, con los grados que ahora estamos poniendo en marcha. Los matemáticos ya se colocan en muchas cosas, no solo en la enseñanza, pero el número total de matemáticos que producimos en España, es menor que el número de plazas que se ofrecen en todo el conjunto del país para la enseñanza. Entonces, claro, nos quejamos de que vienen de otras titulaciones, pero es que no hay más remedio. Es como quejarse de los inmigrantes. Si hay oferta y no hay gente, pues vendrán. Yo también de los inmigrantes a veces me gusta decir, por llamar un poco la atención, ¿qué son los inmigrantes ahora en España? Los hijos que no hemos tenido en los últimos 50 años, que se han acabado las familias numerosas, pues vienen de fuera. Falta gente, falta gente. Entonces faltan matemáticos, pero no vienen a las aulas, no vienen. Tenemos otra pregunta de R. Fernández 55, que no sé cómo se llama, le he preguntado aquí en el foro, pero no sé el nombre. Él pregunta, ¿habrá un cambio real en la enseñanza universitaria con los nuevos grados o se trata de un cambio de nombre en la vinculación? Bueno, como no sé si se escuchan las campanas... Bueno, estas campanas tocan para que congregar matemáticos jóvenes que quieran estudiar matemáticas a las titulaciones de todas las universidades españolas. Venga, que se escuchen bien por la red porque estas campanas tocan a matemáticos jóvenes a las matemáticas. Bien, la pregunta que con estas campanas de ahí... ¿Habrá un cambio? Habrá un cambio. Bueno, esto va... yo creo que sí va a haber un cambio y se apreciará, y no solo un cambio de nombre. Lo que pasa es que, bueno, se apreciará con el tiempo. Hay una manera anecdótica de explicar el cambio. Yo estoy en una edad que ya es próxima a la jubilación y por tanto tengo muchos amigos un poco mayores que yo que ya están en jubilarse y en mi vida personal pues hay dos conversaciones que ya son muy frecuentes, las de jubilados y las de abuelos. Bueno, pues en este ámbito uno ve con frecuencia compañeros algo mayores que yo. que se quieren escapar de la universidad, y eso es algo que todo esto que viene es un lío. Claro, se vienen a escapar en general de una manera crítica, porque hay que enseñar las clases de otra manera, porque es un rollo burocrático preocuparse del detalle que ahora te piden los programas y los planes. Pero en el fondo de todo esto, y quizá con un exceso de burocratización, y quizá con un exceso de propedeutica pedagógica, y quizá con algunos excesos, en realidad en el fondo lo que se está pidiendo es, hágale usted más caso al alumno. ¿No? Y eso está bien. Y si eso se hace, pues está muy bien. Porque, en fin, recordemos tiempos bien próximos y algo incluso lejanos, y una frase muy extendida entre los científicos y entre los matemáticos era aquello de el que vale para investigar, investiga, el que no vale para investigar, enseña, y el que no vale para enseñar, enseña como se enseña. Bueno, pues te tienes que dedicar a enseñar, y enseñar bien, y con atención, y con dedicación, y con tal. Pero también están fallando cosas. O sea, que hay cosas de las personas, las haremos. Yo todavía tengo unos años para hacerlas, mejor o peor. Pero depende mucho de la manera en que lo sintamos y seamos capaces de hacerlo. Y también depende un poco de los medios, porque, curiosamente, una de las características de Bolonia es esta cosa del espíritu del Estado Europeo, el grupo pequeño, y tal. Lo primero que han hecho las universidades en muchísimos sitios es pasar por alto todo el grupo pequeño porque no hay dinero para pagar las necesidades del profesorado que eso conlleva. Claro, también... También el hecho de la crisis económica y las reducciones presupuestarias es coyuntural, ya veremos. Pero yo creo que el cambio potencialmente va a cambiar algo más que los nombres. Y si la estructura Grado Máster consolida, y Máster Profesionalizante, y Máster de Investigación, y los nuevos doctorados que están todavía por ver cómo van a ser, y las escuelas de doctorados, y todo esto consolida, yo creo que el cambio será más que de nombre. Y si sólo cambia el nombre, pues es que ha fracasado. Este profesor se llama Roberto. Estoy contestando a Roberto, que ya nos ha dicho cómo se llamaba. Bueno, pues si no hay más preguntas, creo que ya sólo queda agradecer, en primer lugar, al profesor Luis Español por esta maravillosa charla, y yo creo que ha sido muy amena.