Tienes la palabra. Vale. Pues, muchas gracias a Ramón, presidente del Tribunal de Tesis por su generosa presentación y a los organizadores del Congreso por haber contado conmigo y especialmente a mi antiguo director de Tesis, José Manuel Núñez Eixas, contigo bueno, eso debe ser de por vida ya. Sí, quería empezar con una frase de nosotros tenemos algo que decir constantemente. Tenemos algo que debe sonar constantemente en las Cortes Españolas. Esto lo suscribiría hoy en día cualquier dirigente de una asociación española en el exterior, de Europa o de América, pero es una frase de 1913 pronunciada por Carlos Malagarriga, republicano, catalán. Hay una biografía reciente hecha por el profesor Ángel Duarte, muy interesante. En el primer congreso de la Confederación Española de Argentina, en los salones del Club Español, en mayo de 1913. Lo que nos indica esta frase es que se trata de una cuestión de muy largo recorrido que, como explicaré después, sigue sin resolver y de profunda significación histórica. Yo, en concreto... La ponencia está dedicada a la significación política, pero me voy a centrar en un aspecto de la participación política, que es la participación electoral, que si bien evidentemente no agota lo que es la participación política, sí que en las sociedades democráticas actuales es el elemento fundamental y especialmente para actuar a la distancia en los casos en los que en la sociedad de origen hay un sistema democrático. En todo el proceso del voto exterior, el papel de las asociaciones es central. Tanto en una primera fase, como ocurrió en el caso español, como motores de la reivindicación, hablaba el Congreso de la Confederación de 1913, que es cuando las asociaciones españolas de Argentina piden formal y solemnemente tener representación en el Congreso, sino en él. En el Senado, de hecho, de ese Congreso, que no fue precisamente un éxito y tuvo continuidad como modelo de organización de la colectividad española en Argentina, fue lo que quedó. Seguí hablando en España en años después, cuando incluso en Argentina estaba olvidado. Hay otro momento, otra confederación equivalente, que sería la reunión en Luxemburgo en 1976 de las Asociaciones de Migrantes Españoles en Europa, inmediatamente después de la muerte de Franco, en demanda de esos canales de participación política que no se habían conseguido antes de la Guerra Civil y que en aquel momento sí que lo lograron. Una vez que existe el derecho al voto desde el exterior, el papel de las asociaciones cambia. Suelen funcionar como plataformas de los partidos, normalmente penetradas por ellos o en colaboración con ellos. También forman parte de las redes literarias, sobre todo en un caso como el español, en el que había voto en las elecciones autonómicas o existía hasta ahora en las municipales. Estas asociaciones se convierten en intermediarias entre las élites del país de origen y la proactividad del exterior. De hecho, por ejemplo, la persistencia de un centenar de sociedades gallegas municipales en Argentina en los últimos años, pese a la reducción de la población de primera generación, yo creo que se explica en buena medida porque había voto municipal. En los próximos años es probable que el proceso de fusión sea más fácil al ya no existir esa presión de los alcaldes y esas ganas de tener uno. Y por último, también tiene un papel fundamental en las campañas, tanto como sería el espacio de sociabilidad de realizar las campañas electorales para los partidos cuando van a América como intermediarios para prácticas más o menos legales. Hay tres indicadores que se pueden utilizar para cuantificar el voto en el exterior. El habitual, que sería el del interior, es la participación. ¿Cuánta gente de un censo electoral vota? En el caso del exterior, yo creo que es especialmente engañoso. Por ejemplo, en las elecciones mexicanas en el exterior del año 2006, las primeras de la historia, votó el 80% del censo. Pero este censo era de 40.000 personas. Había lo que le llamaron en México unos candados excesivos envueltos por el PRI que pensaba que le iba a hacer desfavorable el voto en el exterior. Y el censo era muy pequeño. Entonces, claro, que tengas un 80% de participación de un cenzonal no te dice nada. En Italia en el 2006 y en el 2008 tuvo un 40% de participación en el exterior aproximadamente, pero estaban censados prácticamente todos los italianos y extranjeros. El volumen sí que era muy alto. Otro indicador que tampoco creo que sea muy correcto que se suele usar en la prensa a veces por balance o por falta de tiempo o de medios es el del porcentaje del censo. Tenemos un censo, por ejemplo en España el 4% del censo reside Este indicador también tiene el problema de que las formas de votar bien por correo bien en urna son muy distintas en cada país. Y entonces la medida en que ese censo se plasma del proceso electoral es muy diversa. Entonces para mí el método más válido para cuantificar el voto en el exterior es el de ver de cada 100 papeletas que se meten en un país que tiene voto en el exterior, cuántas eran de extranjero. Y es lo que vemos aquí. Y esta evolución nos muestra el carácter ascendente que tuvo en España durante el actual proceso democrático y el corte brutal que supuso la reforma del año pasado en las últimas elecciones generales. Esto es de cada 100 votos al Congreso de los Diputados, cuantos llegan del exterior. Para valorarlo tenemos elementos iniciales. Digamos que tampoco existe una... Una gran investigación sobre esto a nivel comparador. En los únicos datos del primer manual internacional en el exterior, son los que podéis ver en este gráfico, y ahí se ve... Que todo lo que supere un 2% es una proporción alta o muy alta. Y desde el 1% sería relevante, ¿no? España que tenía el 1,5% pues estaban niveles relevantes, pero con un reparto territorial muy desigual. En este otro gráfico se puede ver cuál era el impacto máximo que se atrajo a las elecciones autonómicas y ahí se ve que sobre todo tiene incidencia en Galicia, Asturias, Canarias y también Castilla y León. ¿Qué es el voto en el exterior? Bueno, el voto en el exterior hace referencia a un proceso electoral que se celebra entre los ciudadanos de un país no residentes en él y que tiene efectos en el país. Surge en Oceanía a finales del siglo XIX, principios del XX, cuando se autoriza el voto por correo de los marineros neozelandeses y australianos y tiene su primer proceso despachado. Tiene una expansión durante la Primera Guerra Mundial cuando hay grandes desplazamientos de personas a Europa y se produce un hecho pionero que es la primera gran experiencia masiva y el primer caso de gran manipulación del voto en el exterior como manipulación al servicio del poder que son las elecciones canadienses de 1917, cuando el gobierno canadiense cree que va a perder las elecciones porque ha establecido la ley obligatoria pero los soldados pueden apoyar esa medida. Entonces permite votar a los soldados. y gracias a eso se mantiene el poder. Después, en la Segunda Guerra Mundial se desarrolló sobre todo con la incorporación del voto militar de Estados Unidos En la posguerra fue un crecimiento lento y lo que Samuel Huntington llama la tercera ola de democratización que se inició en Portugal en 1994 con la revolución de los claveles es cuando se produce el impulso definitivo que se acentúa especialmente con la globalización y con Internet como se puede ver en este gráfico en el que están el número de países que fueron implantando el voto por el exterior en el exterior por décadas. En el caso español, como decía antes, es un proceso de muy largo recorrido, si bien hasta 1976 no se permitió por primera vez el voto de los residentes en el extranjero, y este proceso de largo recorrido consideramos que se inicia en 1905, que es cuando por primera vez dos destacados españoles de Buenos Aires, el republicano asturiano Rafael Calzada, que podemos ver en la imagen, y el monárquico gallego Nansenua Villaramigo, intentan entrar en el Congreso de los Diputados por ministritos del interior de España. En aquel momento la legislación exigía que para votar había que tener dos años como mínimo de residencia dentro de España, pero en cambio, para tener el derecho al sufragio pasivo, o sea, ser elegido diputado, o ser candidato a ello, bastaba con tener nacionalidad española. Esta es la vía cunera que trataron de utilizar tanto Calzada como Villaramigo en las elecciones de 1905. Ninguno de ellos salió diputado por distintos pucherazos. En 1907 Calzada sí que entró y Villaramigo, que le concedieron el acta al final de la legislatura de 1905-1907, no tomó posesión, pero en 1907 Calzada se convirtió en diputado. Pero lo realmente interesante de la experiencia de 1905 es la polémica que se desató en la prensa de Madrid. Es una polémica, por lo general, de poco impacto tipográfico, pero sí muy reveladora en su contenido. Entonces, aquí podemos ver lo que sería el frente. Bueno, podemos ver los periódicos, la época y el imparcial del frente antiboto en el exterior, o antiparticipación de los españoles del exterior. Y estos eran los partidarios, el globo y el país. El único que lo destaca realmente, y se puede ver los españoles de América, es el país. Los otros, los espacios tipográficos, son pequeños. Hay una frase muy interesante de la época, por ejemplo, que dice que apuesta por negar el derecho de intervenir en la política española a los que no cumplían esos deberes de ciudadanos. En cambio, el globo sostenía, de negarles ese derecho, deberíamos haber rehusado las espléndidas y continuas demostraciones de patriotismo, con que siempre nos han demostrado compartir nuestras penas y desventuras. En estas discusiones, lo que se ve son distintas valoraciones del hecho. El hecho migratorio. Mientras que para el imparcial y la época, que eran los periódicos del sistema, uno liberal y el otro conservador, frente al globo que era republicano posibilista y el país que era verdaderamente republicano, esta alineación de los periódicos está relacionada con la posición de Calzada. Porque si bien la candidatura de Villaramigo por un distrito de Coruña existía, la que realmente capitalizaba la atención era la de Calzada, que era por Madrid y era una figura. La que era mucho más conocida del grupo de republicanos de Buenos Aires que habían financiado a la RUX. Entonces, mientras el imparcial y la época insistían en que la migración era una solución egoísta, los otros decían que estaba forzada por las circunstancias. En la caracterización del derecho migratorio de los contrarios a la participación, era como una traición. Y los otros lo veían como el producto de la situación del país. Hay un libro reciente del año pasado de una socióloga mexicana, Leticia Calderón, especialista en el voto en el exterior, que habla de la dicotomía de los inmigrantes como superhéroes o villanos según interesen a los actores políticos. Y esto es un poco lo que también refleja la polémica de 1905. Realmente lo que se discutía en 1905 no era si los... Si los inmigrantes podían votar o no, sino si podían participar en la política doméstica, si podían ser diputados en Madrid. Pero ya en ese momento empieza a surgir la idea de que tienen que poder elegir a sus propios representantes. Y es en 1907 cuando Calzada se vuelve a presentar, cuando propone en un periódico de Buenos Aires, en el diario español, dirigido por Justo López de Gomara, se publica el primer texto de los españoles de América, en el que se defiende abiertamente... ...que España haga el hecho nuevo de incorporar en esa línea que se hablaba para mañana de la sangre nueva de Raúl a los españoles de América con su capacidad innovadora, portadores de una tarea de regeneración en el parlamento. El gran animador de todo este movimiento, que era circunscrito básicamente a las élites españolas de Argentina en un primer momento y luego del resto de América, aunque siempre generó oposición incluso dentro de la propia diáspora, el gran animador, como decía, era Justo López de Gomara, director del diario español, que realizó sucesivas campañas con la reedición de un folleto suyo para intentar convencer a las élites españolas para que abrieran esos canales para la diáspora. El gran paso sería... ...como contaba al principio en el congreso de 1913, cuando un centenario de asociaciones españolas... ...en... bueno, es un debate muy complejo en el que se discute pedir la nacionalidad en bloque en Argentina... ...porque realmente esta apuesta por la participación en la sociedad de origen, en buena medida se explica... ...por la situación de bloqueo en la que se veía en la sociedad de acogida. ...de acogida. Podían nacionalizarse pero no lo hacían, consideraban ultra-hungry... ...el trámite para abolir la nacionalidad. Estaban... se sentían, como ha explicado Ángel Duarte, se sentían mucho mejor en su posición de extranjeros... ...protegidos por sus embajadas y redes síndicas y al mismo tiempo con grandes facilidades para actuar en la sociedad argentina... ...y la proporción de nacionalizaciones era muy escasa. En 1913 piden formalmente entrar en el congreso, por lo menos en el senado. ...en... la fórmula era convertir las asociaciones españolas de América en entidades reconocidas por España... ...como las sociedades económicas de amigos del país del interior, de manera que tuvieran un derecho a uno o varios senadores. ...en... La gran ventaja que tuvieron es que esta petición conectó con el hispanoamericanismo, con ese tronco de la corriente regeneracionista que apostaba por reubicar a España en el mundo a través de su conexión con las antiguas colonias. Esto les sirvió para entender que tuviera su demanda una gran difusión en la sociedad española en los círculos políticos y que incluso se pudiese interesar con ella algún destacado político del momento como fue el conde de Romanones, que en eso realmente fue un pionero, aunque si bien les daba su apoyo cuando estaba en la oposición y se olvidaba de ellos cuando estaba en el gobierno. También en eso fue un pionero. Lo cierto es que durante la restauración no se dio ningún paso, tampoco se acometió la reforma del Senado y en 1926, en Primo de Rivera, dentro de la parodia de referéndum llamado Plebiscito Nacional para legitimar la monarquía, en la monarquía de la dictadura, convocó esta consulta también en los consulados y el primer caso de participación, si se le puede llamar así, de los españoles del extranjero. En uno de los periódicos se avisa de que se puede ir a firmar a favor de Primo de Rivera que era el consulado y en el otro, Eduardo Blanco Amor, hace una crítica acerada. En la dictadura de Primo de Rivera se discutió, de cara a la conformación de la Asamblea Nacional Consultiva, también la posibilidad de que las asociaciones españolas de América por la vía corporativa tuvieran representantes, pero el plebiscito le salió bastante mal a Primo de Rivera y después se olvidó. En la Segunda República, como ya había pasado, en los años anteriores la demanda, digamos, que se galleguiza. Vemos en la imagen a Ramón Suárez Picayo y a Antonio Alonso Ríos, que fueron diputados en el Congreso en Madrid, formaban parte de la embajada de la delegación que mandó a la Federación de Sociedades Gallegas de Argentina a Galicia para impulsar el proceso del autogobierno. Y en este tiempo... En este tiempo de la República, si bien no hubo ningún avance a nivel español, sí que la cuestión de la representación de los emigrantes se incorporó al debate del Estaduto de Autonomía de Galicia y acabó entrando en un artículo en el que se preveía que los emigrantes pudiesen tener escaños en el Parlamento Gallego, lo que no llegó a crearse por la guerra civil y el golpe de Estado. El franquismo creó un paréntesis. Durante el que, sobre todo en la fase final, la reivindicación reabrió ya desde bases muy distintas porque se había europeizado. Como contaban antes las asociaciones de españoles de Europa, en las que sobre todo había un gran peso de los partidos de izquierda, pasaron a reivindicar el derecho al voto de los emigrantes, que por fin se aceptó para el referéndum de la reforma política. En ese momento el gobierno de Suárez pensó que los emigrantes le iban a votar y entonces dio grandes facilidades. Pero como los emigrantes estaban asociados a organizaciones de izquierdas, impuso grandes trabas para que no votaran en las elecciones legislativas de 1997, que es lo que criticó Peridis en su chiste, que creo que no se ve, pero bueno, dice habla pueblo, habla, no puedo. ¿Qué te impide hablar, humilde trabajador inmigrante? Trabas consulares, del papeleo. Confidentialmente hay mucho rojo en mi grado. Y luego dice, pero mandamos divisas, las divisas vale, pero los votos no. En mal empezamos. Bien empezamos. Este chiste de Peridis resume la fase, lo que yo llamo la fase de la decepción, que se le reconoce el derecho al voto en la transición, pero en la práctica no existe. Ahí se abrió un proceso reivindicativo que sobre todo empezó a dar sus frutos en los años 80 con la ley del régimen electoral general, estableció un escrutinio separado para el exterior en los juzgados, lo que les daba tiempo a que llegaran los votos, hicieron campañas dos partidos, se creó el Consejo General de la Migración, ahora tiene otro nombre, el Consejo General de la Ciudadanía Española del Exterior, en el que los... ...de despatriados hicieron sentir sus reivindicaciones y acabaron por conseguir que en el final del felipismo, cuando el PSOE pensaba que iba a perder el poder, acercaran la inscripción de oficio. Eso significó que todos los apuntados en los registros de matrícula de los consulados se convirtieron automáticamente en electores. Estuvieran vivos o muertos porque eran censos que estaban muy mal actualizados. Ahí se ve en el gráfico. El crecimiento del censo entre 1996 y 2000, fruto de la inscripción de oficio. Pero el PSOE ya no pudo recoger los frutos porque tuvo que adelantar las elecciones y ya fue el PP el que gestionó en esa fase. Después continuó una fuertísima escalada del censo gracias a esta inscripción de oficio y a las sucesivas políticas de nacionalización de los descendientes. Lo que comentábamos antes, que no corresponde a una migración. De hecho, la evolución del censo está muy desconectada. De los movimientos migratorios españoles hacia el extranjero. Estos datos del PERE, Padrón de Españoles Residentes en el Extranjero, del año pasado, muestran el parámetro fundamental de composición de la diáspora española, que casi en dos terceras partes está compuesto por personas nacidas en el extranjero. Yo creo que esto también es un dato muy a tener en cuenta, no sólo para establecer los mecanismos de participación, porque evidentemente no son los mismos los derechos de la primera generación y una segunda y tercera, sino también a la hora de pensar en la evolución de las asociaciones españolas en el exterior. Todo este proceso político seguido en las dos últimas décadas en torno al voto en el exterior está condicionado por una característica muy española, que es que se cumple el viejo principio de la restauración de Cano Macigar y se agasta de que el que convoca gana. O sea, las elecciones no hacen los gobiernos, los gobiernos hacen las elecciones a través de mecanismos de fraude, porque el voto se hace por correo sin que se garantice la personalidad del electo. Ahí se puede ver que sólo ganó el PP en el 2004, que fue cuando estaba gobernando, y que de todas formas en el 2011, con un volumen de voto ya muy bajo, por la reforma que explicaré después, se produjo un empate. El momento de mayor visibilidad y mayor tensión del voto exterior en España fue el 19 de junio de 2005, cuando, podemos ver aquí a Manuel Farage Barbe, brindaba con champán las elecciones que perdió. Y brindaba con champán porque le quedaba una última oportunidad, que era en el recuento de Ponterrera con el voto en el exterior, salvar ese escaño de la mayoría absoluta. Finalmente, como el PSOE gobernaba en Madrid, y José Blanco había aprendido de los métodos del PP contra la restauración argentina, las posibles maniobras... ... las maniobras hechas por el PP y el PSOE multiplicó por tres sus votos... ... y el PSOE multiplicó por tres sus votos de manera, con el apoyo del gobierno argentino, publicó clarín una información muy interesante, que era ayuda secreta de la Casa Rosada al triunfo de los socialistas en Galicia. Seguramente si en lugar de Kirchner estuviera Menem en el poder, pues a lo mejor Farage hubiese brindado con champán más días que ese. Así llegamos a la... ... a la reforma de 2011, que fue realmente sorprendente, porque con ese principio de quien convoca gana y con resultados favorables para el gobierno, pues había un turno perfecto. El partido en la oposición denunciaba las irregularidades, pero luego llegaba al gobierno, se beneficiaba del sistema, y lo defendía... Había un discurso técnico de los funcionarios que creía imposible establecer el voto de urna, y así pasaban los años. En la decadencia del PSOE en España, se llega a un momento en el que se cruza... Se cruzan los tumores de PSOE y de PP, ¿no? Que el PP quiere cambiar el sistema estando en la oposición, porque en el 2009 perdió un estaño en Galicia que le quitó el PSOE con la inmigración en Ourense, y tiene miedo a que le quite más en las generales, y el PSOE tiene miedo a lo que pueda hacer el PP una vez, como pasó el 20 de noviembre pasado, cuando el PP ganase las generales en España y con vistas a futuras autonómicas gallegas. Y entonces hacen una reforma que yo, considero que es un pacto de desarme entre PP y PSOE, porque más que regularizar las elecciones en el exterior, lo que buscaron era reducir drásticamente el volumen de votos llegados desde el extranjero. Es una verdadera chacuza legislativa, porque superpone la reforma de 1995, que era expansiva con esta restrictiva de 2008. De manera que España es de los países más generosos del mundo a la hora de censar a los... residentes en el exterior, lo que los considera inmediatamente electores, pero también les ponen unas trabas tremendas para que puedan votar, porque tienen que hacer el trámite del voto rogado por correo, que es muy penoso y complicado. Esto lleva a que la extensión en las últimas elecciones fue del 5%, y yo sólo conozco algún caso en Honduras que hubiera una extensión mayor a la... Perdón, la extensión fue del 95%. La participación del público, ¿no? Yo sólo conozco algún caso de Honduras del 97% que hubiera una extensión mayor. Tanto en las municipales del año pasado como en las generales se comprobó las deficiencias de este sistema, que tenía la parte positiva de eliminar el voto municipal, que no tenía ningún sentido y era una fuente de clientelismo endecimonónico, y también de intentar darle una solución a este problema, que sobre todo se notaba en Galicia, de grandes impurezas en el sistema electoral. La cosa es que en lugar, como decía, de tener una voluntad de regularización, lo que se trató fue de reducirlo al máximo. Esto sobre las asociaciones... Bueno, la principal consecuencia sumado a la crisis económica en España es que las acciones de los gobiernos, sobre todo autonómicos y también centrales, en el extranjero se están reduciendo bien. Lo que comentaba por la mañana, Ramón Villares, de la pasividad ante la crisis del centro gallego de Buenos Aires. Seguramente si en lugar de 70 mil votos en las generales para toda España hubiesen llegado 400 mil como llegaban antes, pues habría menos pasividad. Por último quería comentar esta comparación entre las elecciones en el exterior en los países del entorno más cercano. Los datos que doy son de los últimos procesos de cada uno, sea España legislativa, de 2011 a Portugal en 2011, las presidenciales francesas de 2007 y las italianas del 2008. En España, como se ve, llaman la atención por la elevadísima tasa de abstención. En cambio, la proporción del censo electoral, que es la tercera columna solo superada por la de Italia y el impacto sobre el voto total es el más bajo de todos, por lo menos en España. Por lo que comenté antes del efecto del voto rogado. De todas formas, en Francia el voto en las presidenciales es en urna, el censo es voluntario y ahora en Francia en las elecciones presidenciales dentro de unos meses, por opinión de los franceses en el exterior, van a poder elegir a sus propios representantes en la Cámara Baja, en la Cámara de Diputados. Ya los tenían de forma indirecta en el Senado. Esto lo que va a significar que tanto en Italia, en Portugal como en Francia los emigrantes tengan sus propios escaños. Lo que yo creo que intensificará la presión para que en algún momento España cumpla lo que sobre todo prometió el PSOE, pero también el Partido Popular de Galicia ha demostrado alguna de su simpatía, de que hubiera escaños por lo menos en el Senado propios para los habitantes. Como decía antes, bueno, antes de terminar, quería hacer la pregunta, con referencia a lo que se habla de la contrarreforma. Después del fiasco de las elecciones del 20 de noviembre, PP y PSOE, bueno, parece que la reforma la hicieron cualquiera menos ellos, ¿no? Porque claro, qué calamidad, ¿no? Que conste que ahí también lo que hicieron con esto del voto robado fue recortar una reivindicación que ya había hecho hace bastante tiempo el Bloque, que no quería que los emigrantes votaran y todas esas cosas, porque el Bloque se acababa muriendo. Y eso tenía muy malos resultados. También es verdad que nunca entró en las redes de fraude, porque bueno, nunca pasó del 5% en el exterior y no creo que fuera traficando con sacas, ¿no? Y entonces el Bloque defendía que los emigrantes no votaran lo menos posible, pero se les contara a la hora de distribuir los escaños dentro de España, de manera que a Galicia le tocaran más escaños. Es otro ejemplo de cómo los partidos con la migración utilizan la calculadora de forma descarnada. Yo veo difícil que... que se vaya a una reforma electoral para la migración. Mira, es cierto que en los congresos del PP y PSOE la pidieron. Empezó con los del PSOE, que se resolvió por muy poco entre Rubalcaba y Chacón y había un movimiento en el exterior a favor de Chacón. Entonces yo creo que los dos candidatos entraron en esa puja y lo acabaron poniendo y también lo han puesto en el genio del PP. Ahora están reunidos representantes del PP y PSOE para plantear la reforma. La reforma la deberían hacer, pero... yo no veo voluntad de que se haga. ¿Cómo la deberían hacer? Hombre, yo creo que lo primero es un mecanismo de defenso racional. No tiene sentido que cualquiera que esté en el consulado automáticamente sea elector. De hecho, una vez entrevisté a una señora que me contó que había dejado de ir a... se había puesto enferma, no había podido ir al consulado a cumplir la fe de vida, le habían retirado la pensión, la habían dado por muerta, pero en cambio le habían seguido matando el voto. Pues entonces si para la fe de vida y ir al consulado pues por lo menos cada cinco años estaría bien inscribirse. Y entonces el mecanismo este del voto rogado, pedirlo por correo en cada ocasión, es un mecanismo realmente penoso. Si te inscribes cada cinco años luego tendrías derecho a ir a votar y yo creo que se debería de establecer un mecanismo de voto en urna en el consulado de forma que fueran representantes... legales españoles y de los partidos los que supervisaran el voto. Lo que no creo que sea muy positivo es este proceso de péndulo de los partidos de Indoamérica, de decirle a los inmigrantes que son los depositarios de las grandes esencias de la patria y luego inmediatamente, precisamente cuando hay un rebote no tan potente como se dice, pero real de migración española en el exterior y cuando España necesita más en exportar y proyectarse cara al exterior dado la depresión del mercado interno se le dé la espalda a los españoles del extranjero. Y bueno, esto era...