Bueno, las eríneas, recordad que representan la venganza de los crímenes familiares y nacen del contacto de la sangre de Urano con la tierra al ser castrado por su hijo Crónico. Eran unas diosas, por lo tanto, preolímpicas, anteriores a los dioses olímpicos, cuya función era terrible porque era torturar a los condenados en el infamilio, especialmente a aquellos que habían cometido crímenes familiares, ejecutando la venganza que la víctima no pudo ejercer. Hesiodo habla de ellas en la Teogonía, pero adquieren gran relevancia en el siglo V a.C., tras el éxito de la tragedia de Esquilo, donde vengan la muerte de Cliftenestra, persiguiendo a su hijo y asesino Orestes hasta enloquecerle. Por influencia de Esquilo, las eríneas tuvieron forma femenina, rasgos horribles como las gorgonas o las artías y cabelleras de serpiente portando una antorcha. Las gorgonas, Medusa, que es una de las gorgonas, acordaros que tiene cabezas de serpiente y cabellos de serpiente también, en las herinias son físicamente parecidas. Se la representa en un vaso de figuras rojas en el Museo de Nápoles, que muestra a Orestes desenvainando la espada, mientras que a cada lado se ubica una herinia con una larga túnica y una serpiente enrollada en cada brazo. Si os dais cuenta, las serpientes son el símbolo del mal en todas las culturas, son seres que rezan, entonces en el cristianismo las asociamos con el pecado original y la expulsión del paraíso, pero en la antigüedad clásica también. La herinia de la derecha porta un espejo en el que se refleja el rostro de una mujer, que personifica a Clifton Nestra, constituyendo un caso único en el que se representa el alma del difunto en un espejo. Todo esto aparece en este vaso. Este mito fue representado por los pintores románticos y simbolistas del siglo XIX por su temática tenebrosa y fantasmal, destacando a pintores como Mogó o Klim. Entonces esto va muy vinculado, todas estas historias, con el mundo del romantismo. Bien, vamos a ver quiénes son los grandes castigados en la mitología. Los seres que desafiaron a Zeus van a ser encarcelados en el Tártaro y van a sufrir una tortura sin edil, es decir, para el resto de la eternidad, exactamente igual que en el cristianismo. Era un claro mensaje moralizante para quienes osaban oponerse al poder establecido. Zeus es el garante del orden mundial. Todo aquel que se enfrente a Zeus va a recibir un castigo por toda la eternidad, exactamente igual que en el cristianismo. Homero, en la Odisea, habla de tres grandes condenados. Uno va a ser Tizio, otro va a ser Tantalus. Y otro va a ser Sísifo. Y vamos a ver a ellos. A Tizio le devoran el hígado dos buitres. A Tantalus, que tenía hambre y tenía comida a su alcance, pero nunca la podía alcanzar. Y a Sísifo, que el pobre está obligado a subir una y otra vez una roca a la cena de una montaña, en cuanto llega arriba, pumba. Allá abajo la tiene que volver a subir. Por lo tanto, son unas torturas tremendas. Virgilio en Roma, a estos grandes condenados, agrega otros dos, Isión y las Danadas. Bueno, pues vamos a ir viendo a los cinco grandes condenados, uno por uno. Primero vamos a hablar de Tizio. Tizio, la historia se remonta a la diosa Hera. Hera, celosa del amor de Zeus y Leto, Leto es la madre de los gemelos Apolo y Artemisa, va a desencadenar en Tizio, Tizio es un gigante hijo de Zeus, un deseo incontrolable de violar a Leto. Pero Tizio fue fulminado por Zeus y le precipitó al Tártaro, no permitiéndolo. Aquí ya quién tenía que haber condenado esa Hera, que es la que le desemboca ese... Ese deseo irrefrenable, porque al fin y al cabo Tizio... Bueno, Tizio fue fulminado por Zeus y precipitado al Tártaro. Y allí dos serpientes o dos águilas, o dos buitres, depende de las versiones, le devoran su hígado. Pero como el hígado, acordaros, que renace con las fases de la luna, pues es un castigo. Que no va a tener nunca fin, porque si te come otro órgano, el órgano se acaba. Pero el hígado se va a estar regenerando siempre. La iconografía del martirio de Tizio nos recuerda iconográficamente al de Prometeo. Os acordáis que ya hemos hablado de esto. Los emblemas morales de Sebastián de Covarrubias, publicados en 1610, ejemplifican la idea de castigo eterno con la frase, no muere para que pueda morir a menudo. Fijaros, es terrible. Como este es un personaje que no muere, pues entonces realmente lo que le está haciendo es torturándole sin edir durante toda la eternidad. Y es el mismo castigo al que se somete a Prometeo. Que los águilas, que un águila le come el hígado y que como se regenera va a ser un castigo eterno. Pues no se les diferencia de ninguna manera, porque son dos personajes que les come el hígado el águila, entonces te tendrás que acercar a la cartera y ver si pone Tizio o pone Prometeo. La iconografía es la misma. Con lo cual, ¿qué hay que hacer con esto? Si nos sale algo en un examen... Si decir que puede ser, salvo que tú conozcas mucho la pintura y la puedas asegurar, que iconográficamente puede ser Tizio o Prometeo. La diferencia, o sea, el castigo es el mismo, lo que difiere es la finalidad. Prometeo es castigado por ayudar a los hombres a entregarles el fuego y Tizio por intentar violar a la esposa de Zeus. ¿De acuerdo? Pero el castigo es el mismo. Y la iconografía es exactamente igual. En el Museo del Prado hay una pintura de Tiziano y otra de Rivera con el tema de Tizio. Las fuentes literarias de las furias son las metamorfosis de Ovidio. O sea, para hablar de este tema, los pintores se ilustran en las metamorfosis de Ovidio. Y también a veces recurren a la Eneida de Virgilio, que narra en el sufrimiento eterno en el Hades de Tizio de Tántalo y de Sísica. Hemos dicho que Tizio le devuelve... Ahora, un buitre o un águila, el hígado, Tántalo, que tiene mucha hambre y el pobre, tiene comida y bebida cerca y no puede comer. Y Sísifo, pues que va a cargar con esa gran roca. Y vamos a ver el porqué. ¿Y Sion? Había tratado de seducir a Juno o Hera, la esposa de Zeus, por lo que fue condenado a dar vueltas sin fin sobre una rueda. O sea, a ver, ¿cómo se le ocurre a alguien intentar seducir a la esposa del hombre más poderoso? Bueno, pues entonces del dios más poderoso. Pues por intentar seducir a Hera o a Juno, pues es condenado a dar vueltas sin fin sobre una rueda. Bueno, Tiziano, mirad, había recibido de los Habsburgos el encargo de varios retratos, pero María de Hungría, María de Hungría es hermana del emperador Carlos V, estos son los años de nacimiento y muerte, acordaros que tanto el emperador como su hermana María y su hermana Leonor, los tres mueren en 1558, es una casualidad. Le encargó María de Hungría, la reina María de Hungría. María de Hungría le encargó las furias a Tiziano, con una clara finalidad política para que colgasen en 1549 en la gran sala del Palacio de Vinche. El Palacio de Vinche era uno de los grandes palacios de Flandes que hoy en día no se conserva. Pero fijaros, María de Hungría le encarga estos temas, lo que se conoce como las furias, que son los grandes condenados en la mitología. ¿Por qué encarga María de Hungría esto? Pues muy sencillo. Al palacio de Vinche acudían los príncipes de Centroeuropa, que en vez de venir a España a visitar al emperador Carlos V o a su hermana María de Hungría, iban al palacio de Vinche. Entonces, ella muy estratégicamente le encarga a Tiziano las cuatro furias y las pone en la sala. Y entonces, cada una de las furias representa el castigo y el tormento que están sufriendo estos seres por enfrentarse al ser más poderoso y garante del orden social que es él. ¿Quién es el ser más poderoso y garante del orden en el siglo XVI? El emperador Carlos V. Es decir, les está lanzando un mensaje político y cronográfico de que quien vaya contra... ...el emperador, en este caso los príncipes luteranos o protestantes que están surgiendo a su alrededor, van a ser castigados como en su día feo es garante del orden social castigo a esta serie de seres. Es un mensaje iconográfico y político clarísimo. La ubicación de los cuadros en una parte alta entre los grandes ventanales revela un programa iconográfico pensado para mostrar el castigo reservado a quienes... ...se alzan contra el orden establecido. Me da igual que el orden establecido sea en el Olimpo o sea aquí en la tierra por el emperador Carlos V. Quien vaya en contra de ese orden va a sufrir esos castigos. Así que Tizio y Sísifo de Tiziano y Tántalo de Cosí ocupaban un lado largo de la sala enfrentados a una serie de tapices que simbolizaban la victoria de las virtudes sobre los vicios. La avaricia de nuevo representada por Tántalo. Entonces fijaros en el mensaje es clarísimo. Hace unos años en el Prado hubo una exposición que se llamaba Las Curias. Y estaba basado en esto. En los cesteros colgaban medallones de Adriano y Julio César. Es decir, Carlos V era el nuevo Julio César de la época o el nuevo emperador Adriano de la época. Y sobre ellos cuadros de Cosí con la contienda de Apolo y Marcias y el anterior degollamiento del sátiro. Mira, Apolo y Marcias es una historia muy moralizante. Ya lo veremos cuando lleguemos a Apolo. Marcias es un sátiro y reta al dios Apolo. Y si ya es osado retar a un mortal igual a nosotros, pues imaginaos a un jefe o a un dios. Con lo cual, bueno, pues al final Marcias pierde, como era previsible, y Apolo lo que hace es degollar el libro. Y entonces es otra de las mensajes que se está lanzando, no oses retar a un ser superior a ti porque siempre vas a perder. Con las furias encargadas tras la batalla de Mühlberg, María quiso mostrar en clave mitológica el destino reservado a quienes se rebelaban contra el poder legítimo, equiparando el desafío a los dioses con el de los príncipes alemanes al emperador. El mensaje era clarísimo. En la representación de los temas se utilizaban elementos de la iconografía cristiana en la mitología. Las furias van a permanecer en el palacio de Vinche hasta que se destruyan. Este palacio fue destruido por las tropas francesas en 1554. En 1558 María de Hungría se las deja a Felipe II, que las destina al Alcázar de Madrid y permanecieron en él hasta el incendio de 1734 cuando ardieron Isión y Tántalo. O sea que fijaros, se libran de la destrucción del palacio de Vinche en Flandes. María de Hungría se las manda a sus sobrinos. Felipe II las cuelga en el Alcázar. pero en el incendio del Alcázar de Madrid desaparecen Isión y Tanta. Tras un efímero paso por el Buen Retiro, se cuelgan en el Palacio Real actual, que se llama el Palacio Real Nuevo, hasta que llegaron al Museo del Prado en 1821. Bueno, pues vamos a empezar por Tiziano, el Cicio de Tiziano, basado en las metamorfosis de Ovidio. El castigo es el mismo que el de Prometeo, como su hígado se regenera todas las noches, pues es un castigo eterno. La obra que posee el Museo del Prado actualmente es una réplica tardía del original pintado por Tiziano para María de Hungría, para la Gran Sala del Palacio de Vinche de Bruselas, en 1548. Y es una de las furias o condenados que realizó el artista. Tiziano realiza esta pintura. Como advertencia para que no se desafiar el poder imperial, es decir, a los príncipes protestantes. Las obras están concebidas para contemplarse en alto, con figuras desnudas de monumentales anatomías. O sea, la vista es siempre estas pinturas en alto. En el modo de representar los episodios, se ve la iconografía cristiana trasladada a la mitología, lo que os decía antes. Entonces, estos osaron enfrentarse a Zeus, que era el garante del orden social, igual que los príncipes protestantes están osando enfrentarse al emperador. Se presuponía que con todas estas cosas, al final, el catolicismo se iba a imponer sobre el protestantismo, pero nunca llegó a ser así, terminó el mundo cristiano dividido. Tiziano recurre a fuegos mientras el carácter negativo de los personajes se sugiere por las serpientes. Las furias son inconcebibles sin el paso de Tiziano por Roma, ya que en 1546 él contempla allí la estatuaria clásica y, por supuesto, ve el arte de Miguel Ángel, y eso va a influir muchísimo en Tiziano. La impronta de Miguel Ángel. Entonces, se percibe en Tiziano mostrando un águila devorando el hígado de Tizio cuando las fuentes antiguas hablan de un buitre, pero realmente nos vamos a lo más moderno. Tiziano llegó, mediante el color, a resultados diferentes a los que había llegado Miguel Ángel. En su día ya vimos este, cuando hablamos... porque este tema lo iba a dar al final del todo. Entonces, en su día vimos esto, acordaros, el águila... Esta pintura de Tiziano que le está comiendo el hígado a Tizio, pero bueno, podía ser Tizio como podía ser Prometeo porque la iconografía es la misma. Acordaros, la serpiente como símbolo de pecado, de mal, etcétera, y Tizio como esa tortura eterna. Ahora, nos vamos con otro de los grandes condenados, el Sísifo de Tiziano, que está en el Museo del Prado, que son los dos originales que nos quedan de la época, también de 1548-49. El gran pecado de Sísifo, hijo de Olo, el dios del viento y fundador de la ciudad de Corinto, fue contarle, este fue un pecado por ser un poco cotilla, fue contarle al dios del río Asopo que su hija... ...Egina fue raptada por Zeus. Bueno, esto se lo cuenta al dios del río, evidentemente Zeus se enfada muchísimo de que le haya contado eso, y devuelve su cólera contra él. Y envía a Tánatos, al dios de la muerte, para que se le lleve al tártaro. Pero Sísifo le encadenó allí, provocando que los seres humanos dejasen de morir y teniendo que intervenir Zeus. Mirad, cuando alguno de los dioses con funciones muy claras se dedica a otra cosa que no es lo suyo, se para lo que se tiene que parar. Si Tánatos se encarga de otra cosa, deja de haber muertos, la gente no se muere. Acordaros lo de Deméter, Deméter aplica de sus funciones y la agricultura no funciona. Es decir, cada personaje tiene su función y tiene su misión. Entonces, si a alguno de estos personajes le encargan algo diferente, pues las cosas dejan de funcionar. Entonces, Sísifo vuelve al tártaro, anciano, obligado por Hermes, y Zeus le impone como castigo ejemplar empujar una roca astral. Sísifo va a la cima de una montaña escarpada. Imaginaros, esta pintura es tan absurda. El pobre va por la montaña empinada llevando la roca. Cuando está a punto de conseguir llegar arriba, pum, va, la piedra se vuelve a caer por la pendiente y otra vez tiene que volver a empezar. Imaginaros toda la eternidad subiendo una gran roca por una pendiente pronunciada y cuando ya estás a punto de dejarla arriba, otra vez volverá a empezar. Una tortura terrible. Para visualizar el Hades, Tiziano recuerda... Recuerda la idea cristiana del juego. Siempre se va a hacer esto. Y en el caso de Sísifo, también a dos enormes monstruos con las fases abiertas que nos hablan directamente de las imágenes del juicio final. El carácter negativo de los personajes se sugiere acompañándolos de serpientes. A recordaros, siempre que hay una serpiente, símbolo de pecado, símbolo de mal, de algo negativo siempre. Siempre. Elementos ignorados por Ovidio y presentes en el grabado de Cántala. O sea, Ovidio nunca habla de serpientes, la serpiente normalmente es algo más vinculado al cristianismo que siempre se asocia al pecado original y al mal. En Sísifo, la sensación de dinamismo que se va a plasmar en la tensión del cuerpo, también en las lenguas de fuego y de lava y en las pinceladas de rojo y amarillo. El movimiento. El movimiento es el cambio de lugar o de posición de un cuerpo en él. Mirad, esto, quería aclararos esto, porque los historiadores del arte utilizamos mucho la palabra movimiento y dinamismo. Un alumno me dijo, ¿esto es lo mismo? No, no es lo mismo. Movimiento es que tú cambies de lugar o de posición. Movimiento es que yo me levante de la mesa y vaya, camine, me mueva hacia un lado y hacia otro. Mientras que el dinamismo es la energía, es la transformación de la actividad. Yo puedo tener dinamismo sentada porque muevo los brazos, me muevo, pero no me estoy moviendo, o sea, no me estoy desplazando para que lo entendamos. Entonces, cuando en arte hablamos de movimiento, hablamos de desplazamiento de un lugar a otro. Una figura se mueve cuando se desplaza o intenta desplazarse o cambia de posición, mientras que el dinamismo significa alguien que está haciendo algo, está haciendo una actividad, tiene una energía determinada. ¿Comprendido eso? Entonces, os lo quise aclarar aquí porque sí que en alguna ocasión la gente no entendía, pensaba que era lo mismo. Bueno, pues aquí tenéis al personaje de Sidney. Entonces, aquí vemos esos tonos rojos y amarillos a los que yo os aludía, que están representando el infierno, y aquí al pobre Sisyphus, que está en ese lugar infernal de fuego que va a hacer un calor horrible. Pues imaginaros que está subiendo, ¿veis bien con la luz? Están subiendo la roca hasta arriba y cuando llega arriba, ¡pum! La roca se cae y otra vez voltea. Es una apertura terrorosa. Y luego mirad aquí, a la izquierda, veis que hay dos monstruos con las fauces abiertas. Mirad, aquí está el ojo y aquí fijaros las fauces. ¿Lo veis? Y aquí están los otros dos ojos y la boca. Mirad, aquí hay una enorme serpiente de la que por aquí está el cuerpo, no sé si lo veis bien, aquí está el ojo y aquí está la boca. Por lo tanto, se está cogiendo la mitología clásica pero mezclándola con los elementos del infierno cristiano. Las lenguas de fuego, el fuego, los monstruos con las fauces abiertas, la serpiente de símbolo del pecado y del mal, pues estamos haciendo ahí una mezcolanza de los dos. Pues este es otro de los grandes contenedores. Tizio, Sísifo, vamos con los siguientes. Vamos ahora con Tántalo. Tántalo a lo mejor es menos conocido. Tizio y Sísifo los tenemos en el Prado. Tántalo era rey de Libia, era hijo de Zeus y de Laceani de Pluto. Fue muy estimado por los dioses e invitado a los banquetes del Olimpo. Bueno, pues como era hijo de Zeus, Y de una oceánide se le invitaba a los banquetes de los dioses, era un miembro más de la familia, pero no era un dios. Entonces se tenía tantas atenciones con él porque era uno de los hijos de Zeus que esto le volvió muy soberbio. A veces hay que dar cuidado que la gente no sabe distinguir. Entonces se volvió soberbio y se atrevió a robar el néctar y la ambrosía de los dioses que otorgaban la inmortalidad. Acordaros que el néctar es la bebida de los dioses, la ambrosía es la comida y eso es lo que proporciona esa inmortalidad a los dioses, lo que los hace estar eternamente jóvenes y ser inmortales. Bueno, pues tanto fue a los banquetes del Olimpo que se atrevió a robar por su soberbia el néctar y la ambrosía que otorgaban esa inmortalidad. Pántalo mató a su hijo Pélope para poner a prueba los dioses. O sea, que fijaros hasta lo que llevó. Le coció en un caldero y le sirvió en un banquete. Pero Zeus se dio cuenta del engaño y buscó un castigo terrible para Pántalo. O sea, fijaros que Pántalo era un personaje tremendo. Mató a su propio hijo Pélope. Y lo cocinó y se lo sirvió a los dioses en un banquete. Entonces, claro, era como probar a los dioses, yo soy más inteligente que ellos. Entonces, Ceus se dio cuenta enseguida del engaño y le buscó un castigo terrible. A mí me parece un castigo muy suave para lo que se merecía. Pero bueno, como roba el néctar en la ambrosía, que son comida y bebida, y además sirve a su hijo en un banquete, pues le condenan a que esté siempre muerto de hambre y muerto de sed y que tenga comida y bebida cerca, pero no los pueda alcanzar. Y ese va a ser su castigo forever, para toda la eternidad. Entonces aquí tenéis a Dántalo. Es una copia de un Rivera. Es un Dántalo del siglo XVII que está también en el Museo del Prado de Madrid. Entonces ahí le tenemos con la boca abierta intentando comer, con las manos en alto intentando coger las frutas y nada, muerto de hambre, muerto de sed y que no puede coger absolutamente nada. Pues este es el castigo de Dántalo, que comparado con el uno que le comen el hígado y al otro que sube la piedra, es que me parece pecataminuta, pero bueno. Le sumergimos. Lo hicieron en un estanque con el agua hasta el cuello. sufriendo hambre y sed eternamente, es decir, solo podía tener la cabecita afuera y paseándosele comida y bebida continuamente y sin poder acceder a ello. En cambio aquí en esta copia de Rivera no se le pone en el estanque, sino que se hace una versión un poco más sui generis en la que abre la boca y levanta los brazos intentando llegar a la comida. Y cuando quería beber, y se acercaba tanto al agua cuando quería beber, pues el agua empezaba a huir de él. Y cuando quería comer, pues lo mismo, las frutas de los árboles sobre su cabeza, que las tenía al lado cuando las quería coger, pues nada, se alejaban cada vez más de él. Entonces, bueno, ese es el suplicio de Tanta, lo que yo digo para lo que hizo, me parece bastante suave. Bueno, pues este mito tuvo mucho éxito durante el Renacimiento y el Barroco y fue representado por Tiziano. Por Rivera y por otros autores del aire. O sea, que Tántalo, el que tenía hambre y sed, tenía todo a su alcance, pero no podía comer ni beberlo. Vamos, ¿cómo está la dieta? ¡Vaya! Bueno, vamos con Isión. Isión. Es una pintura de Rivera que tenemos en el Museo del Prado también. Yo, en la medida de lo posible, siempre os pongo ejemplos que podáis ir a ver. Y Sion es una pintura de Rivera que tenemos en el Museo del Prado de 1632. Intentó soplantar a Júpiter en el lecho de Hera. O sea, imaginaros, intentó acostarse con Hera suplantando a Júpiter, pero Zeus formó una nube con la imagen de su esposa Hera e Sion se unía a ella sin percatarse de que era una nube, sin percatarse del engaño, engendrando al centauro. Y Sion es el progenitor, por lo tanto, de la raza de los centauros, que también Zeus escuchó. Es complicado, ¿eh? O sea, él ve que intenta engañarle con su esposa y para ello toma su apariencia y Zeus lo que hace es crear una nube con la imagen de su esposa Hera y él realmente se une a esa imagen sin darse cuenta de que no es la diosa y así es como explica en la mitología el nacimiento de la raza de los centauros. Isión es ese progenitor de la raza de los centauros. Zeus le castigó a girar eternamente atado a una rueda de fuego fabricada por Hefesto para espiar sus culpas. Es decir, Hera no, la nube con forma de Hera. A ver, vuelvo a repetirlo. Isión intenta suplantar a Zeus e intenta unirse a Hera, pero Zeus lo que hace es coger una nube con la imagen de Hera e Isión se une a una nube que tiene la imagen de Hera. Y así es como cuenta la mitología que se engendra el centaurio. Bueno, pues yo no intento que lo… Yo no intento que sea racional. Os digo lo que hay, ¿vale? Bueno, la nube es la que engendra el centaurio, efectivamente. Bueno, Isión es el progenitor de los centaurios. Zeus le castiga a girar eternamente atado a una rueda de fuego fabricada por Hefesto para espiar sus culpas. En la Edad Media, el mito de Isión se va a asociar con uno de los pecados capitales, la lujuria, evidentemente. Rivera plasma una imagen de Isión boca abajo, acentuando la tensión dramática mediante la luz, la monumentalidad de las figuras, las forzadas anatomías y la expresividad gestual. Isión es la única furia de Tiziano de la que no nos queda ningún testimonio visual y tampoco fue tratada por pintores anteriores. La verdad es que como es un tema tan peculiar, pues no se trata poco. El Isión de Rivera es fruto de la imaginación del propio pintor. Su tratamiento del cuerpo humano, sometido a condiciones extremas y la capacidad de transmitir al espectador el horror de la escena son muy impactantes. Entonces, bueno, pues aquí lo vamos a tener ahora. En primer plano vais a ver que Rivera pinta el cuerpo del gigante que parece desplomarse hacia el espectador. Y en Isión no es el condenado sino el verdugo quien transmite con su mirada la crueldad del castigo. Realmente Rivera le da más protagonismo al verdugo que al propio Isión. Rivera actó por una figura masculina cuyo rasgo distintivo son los cuernos y unas orejas afiladas. Es una creación del pintor porque las furias eran tres figuras femeninas encargadas de velar por el cumplimiento de los suplicios de los condenados en el TAP. No hay ninguna fuente clásica o renacentista que alegra a un personaje con estas características, o sea que los personajes con orejas de asno, siempre que veáis un personaje con orejas de asno, me da igual que sea una pintura, un tapiz, lo que sea, representa la ignorancia. Los tapices de Rubens que mandó a hacer Isabel Clarogenia que están en las descalzas reales, que ya está abierto y podéis ir a verlo cuando queráis, pues en uno de los tapices aparecen las orejas de asno y siempre que aparecen las orejas de asno siempre es símbolo de ignorancia. Siempre vinculamos a los asnos con alguien ignorante. De hecho los niños pequeños, por lo menos antes se decía, qué bruto eres, eres un asno, se decía como algo peyorativo. Entonces esas orejas de asno representan la ignorancia. Bueno, estos temas mitológicos tenían carácter ejemplarizante para todos. Aquellos que desacataban la autoridad de los dioses o de los reyes y que tenían intención de igualarse con los dioses o con los reyes. estas pretensiones tanto en Grecia como en la Europa del siglo XVII eran consideradas dignas de un castigo eterno en 1634 el cuadro fue adquirido por una marquesa posiblemente para el palacio del buen retiro y aquí tenemos a Isión con sus orejas de asno la veis aquí pero Rivera le ha dado mayor protagonismo al verdugo que le está castigando la verdad es que es una obra rara porque lo que noticia la mitología es que se le condena a girar en una rueda y lo lógico es que le hubiera puesto con las orejas de asno con lo que quisiera pero girando en la rueda yo cada vez que voy al prado y veo esta pintura, si no la han cambiado de sitio porque últimamente están cambiando todo está arriba donde al lado de la escultura del emperador Carlos V y el furor pues estaba ahí, no sé si la habrán cambiado no, no, es que no ha puesto rueda, con lo cual lo que tenemos es ahí una especie de verdugo con una anatomía la anatomía del verdugo es impactante y el esforzo del verdugo fijaros, es una pintura eminentemente barroca con ese tenebrismo ese fondo neutro negro, oscuro donde hay un foco de luz que destaca sobre la anatomía del verdugo Sobre esa espalda, ese brazo y el personaje de Isión en la parte inferior en el que lo único que aparece es un trocito del cuerpo de Isión con ese rostro que si os dais cuenta tiene el ceño fruncido, la boca gritando, fijaros la boca está gritando, las orejas de asno y bueno pues se hace alusión al castigo. Pero realmente si hubiera seguido al pie de la letra en la mitología pues tendría que haber puesto la rueda y que realmente se le considera como un asno y por eso se le ponen las orejas como tal, pero realmente Rivera no se ciña lo que es el mito, coge el tema como castigo ejemplar pero no se ciña el mito. O sea que es difícil de identificar, lo entiendo que es una obra difícil de identificar porque normalmente nosotros identificamos las obras. Porque siempre hay atributos al lado, tanto en la mitología como en la iconografía religiosa, en este caso es que no hay ningún atributo, pues es muy difícil de identificar. Pero bueno, como la tenemos en el prado y la podéis ir a ver, pues no hay problema. Bueno, y por último vamos a ver las Danaides. Mirad, las Danaides eran las 50 hijas del rey norteafricano Danao. Después de un conflicto con su hermano gemelo, Egipto, se llamaba el hermano gemelo, el rey huyó con sus hijas a Argos en Grecia. Es una historia la más extraña, ya veréis. Las Danaides son las 50 hijas de un rey norteafricano. Los 50 hijos de su hermano las persiguieron para reclamar a sus hijas como esposas. Dos hermanos, uno tiene 50 hijas y el otro tiene 50 hijos. Y esos 50 chicos se quieren casar con sus primas, con las 50 hijas del otro rey. Hasta ahí seguimos la historia porque es un poco complicado. Bueno, Danao accedió a que sus hijas se casaran con ellos, pero le dio a cada una una daga para poder matar a su esposo durante la noche de bodas. O sea, el tema es, todas las hijas hicieron lo que su padre les había dicho, pero Hipernestra se había enamorado de su marido. Y se aseguró de que no sufriese ningún daño. O sea, que de las 50 uniones, 49 matan a sus maridos la noche de bodas, menos una porque le quería. Horacio narró la terrorífica noche de bodas, imaginaros el panorama, la terrorífica noche de bodas con esas 50 majeres matando a sus maridos, salvo una, que solo una respetó el matrimonio. Pero claro, al respetar a su marido porque le amaba, traicionó a su padre y fue desleal con el padre. Finalmente fue encerrada por orden de su padre hasta que se celebrara un juicio porque había traicionado al padre. Al final la diosa Afrodita, que es la diosa del amor, intervino para liberarte. El resto de las Danaides, es decir, sus 49 hermanas, se purificaron en un ritual ordenado por Zeus. Por Hermes y Atenea, y volvieron a casarse con hombres de años. Tras su muerte, las Danaides fueron castigadas para toda la eternidad por su horrible crimen, ya que fueron enviadas al Tártaro. Es el único caso de mujeres que tenemos en el TAR. Fueron enviadas al tártaro para cargar agua en recipientes sin fondos durante toda la eternidad. O sea, imaginaos, te pasas la vida cogiendo agua en un recipiente que no tiene fondo y otra vez volver a empezar. Este tema se representó en el siglo IV a.C. en la cerámica y solía acompañar a la pareja de aves y persefani. Y fue retomado en 1885 por Rodin y en 1925 por un pintor que a mí me encanta, Kershigian Sargen. Tenemos bastante pintura de Sargen en el píxel. E hizo una composición que está en el Museo de Bosch. Bueno, conclusiones. El inframundo clásico regido por aves y persefani fijó unos motivos iconográficos que se hacen en la historia de la humanidad. Se actualizaron en el occidente medieval y pasaron a formar parte de la tradición cristiana. Bueno, pues el libro vuestro de mitología de 2018, pues cuando se cambió el libro. El Pierre Rimal, la voz del Museo del Prado, mi propio blog. Ay, perdón, me he equivocado. Aquí tenemos a las Danaides. Waterhouse, las Danaides, una pintura de 1905 que está en la Art Gallery de Escocia. Ahí tenemos a esas 49 jóvenes, porque acordaros que solamente una no mató al marido, y las otras, por matar a los maridos en la noche de bodas, pues están condenadas durante toda la eternidad en el cártaro a estar rellenando recipientes de agua que no hubo. Entonces, mirad cómo lo está plasmando el artista, porque nos pone aquí, sí, se fueron efectivamente cuando murieron, las mandaron al cártaro para espiar sus crímenes. Acordaros, 50 mujeres que se casan con sus 50 primos. El padre las da una daga y las obliga a matar a sus maridos en la noche de bodas, salvo una que se había enamorado del marido y entonces no le mató. Y el resto, las otras 49, matan a sus maridos. Y cuando mueren son condenadas en el cártaro por toda la eternidad. Entonces aquí tenéis, fijaros, 2, 4, 6, 7 mujeres con los cártaros de agua. Y aquí, ¿cómo se ha representado de una forma clara para que lo veamos? Pues las vemos rellenando recipientes de agua, echándolas aquí en una gran vasija. Pero si os dais cuenta, la vasija está abierta, es como una fuente. Por lo tanto, nunca van a terminar su misión. Aquí va una que se marcha con el cántaro ya vacío a la derecha, otra que viene con el cántaro lleno que está goteando agua. Pues imagínaros toda la eternidad acarreando agua y echándola en un recipiente para que sea como una fuente. O sea, que ese es otro de los grandes... Es parecido al de Sísifo, pero al revés, ¿no? Sísifo sube la piedra y cuando está arriba se le cae y las Danaides, pues llenando durante toda la eternidad. Esos recipientes de agua. Bien, con esto termina este tema que era bastante largo y he aprovechado hoy que teníamos dos plazas seguidas para que no perdieramos... Es que es un tema un poco complicado para que no perdamos el hilo. No me acuerdo qué número de vuestro libro es. Es el 7, el 7 de vuestro libro. Pues ya lo tenéis ahí. ¿Dudas, preguntas sobre el tema? Dime. Dime. Pues sí, efectivamente, Tantalos recuerda a la gula. Tantalos más que la gula es la soberbia. O los podéis unir, ¿no? La gula y la soberbia. Es la soberbia porque quiere ser un dios y entonces roba el néctar y la ambrosía para ser un dios y luego tiene la soberbia y la osadía de matar a su propio hijo y servirlo en un banquete. O sea, es que es una cosa tremenda, ¿no? Es soberbia, es gula, es parricidio, es de todo, ¿no? Para mí es el peor de todos. Y en cambio el castigo es para mí el más suave, por decirlo de alguna manera. Pero efectivamente, vistas desde ese prisma, es una buena observación. Y estas pobres, pues la vida... Pues sí, yo... Yo me he elegido hoy por eso, porque así lo veíamos completo. De todas formas, nos quedan...