Vamos a comenzar, ¿de acuerdo? Ya estamos grabando la sesión. Buenas tardes a todas, a todos. Gracias por vuestra asistencia. Retomamos este tercer trimestre que vamos a dedicar a Antropología del Espacio. Hemos finalizado Antropología del Cuerpo, nos quedan cuatro temas bastante densos e interesantes dedicados a Antropología del Espacio. Hoy vamos a comentar Espacio 1, paisajes y mapas. Y les pido que tengamos cierta capacidad de imaginación, ¿verdad? De elevarnos sobre la cotidianeidad y ver un poco más allá en clave simbólica y espacial. Y pensar que el paisaje puede ser concebido desde distintos puntos de vista y entendido, ¿verdad? Simbolizado. Desde distintas perspectivas. El primero de los epígrafes que tenemos en este manual, paisajes y mapas, verdes paisajes, página 315, nos va a hablar del paisaje como un producto de construcción cultural. Paisaje como producto, como construcción cultural. El paisaje natural. Teniendo en cuenta que el paisaje natural es anterior, es lo primero. Lo primero que se nos viene, un paisaje natural, pero que nosotros, con nuestra acción antrópica, modificamos, antropizamos. Por lo tanto, el paisaje, dentro de una calificación universalmente asumida, ya ha formado parte del patrimonio de la humanidad de México y está ahí reconocido como los paisajes culturales. no desprovisto de convicciones y no desprovisto en los paisajes, nuestros paisajes. La etimología de la palabra paisaje nos lleva a país, nuestra tierra, nuestro mundo cercano. Paisaje hay que entenderlo como una referencia física, geográfica, espacial, y eso parece ser que implica cierto objetivismo. Lo que yo veo es lo que ve todo el mundo, que me sitúo en los altos de la montaña, veo un valle y ese paisaje es subjetivo, es para todos iguales. Pero también no cabe duda de que el paisaje implica un modo de mirar, una visión que por lo tanto es subjetiva, cultural, hasta el punto de que nosotros construimos el paisaje, lo idealizamos, lo interiorizamos y resulta que hay muchos paisajes, ya no es uno, uno es lo que veo, pero mi paisaje es distinto, porque influye en él mis visiones, mis propios cognicentrismos. Hablar de paisaje es como una especie de descubrimiento de la naturaleza que está asociado, como dice el libro Manuel, en la página 316, a cambios demográficos, cambios sociales, económicos, y a formas de ver la vida que tuvieron lugar hacia los siglos XVIII y XIX fundamentalmente, que es cuando empieza a tener constancia de la pintura paisajística. Porque está relacionada con el desarrollo de las ciudades, el desplazamiento de la población rural a la ciudad, las ciudades, la primera revolución industrial. Y va a surgir el concepto de paisaje como una contemplación del campo hecha desde la ciudad. Es una especie de ignorancia de lo que dejamos. Yo vivía ahí, me fui a la ciudad, a trabajar en la fábrica, a vivir en el suburbio y rememoro esa idea idílica del paisaje que dejé atrás. Una contemplación del campo desde la ciudad. En cuanto, en ese sentido, una construcción intelectual, dialectal, de diálogo campo-ciudadano. El supuesto, como dice el texto, discutible, pero es así, yo lo he vivido. Los campesinos no contemplan el paisaje como nosotros que venimos de la ciudad. Porque el campesino forma parte del paisaje. Él no se puede ver desde fuera. Él vive en la choza. Él vive en el campo con la vaca, la bombeta y las camas. No se puede ver desde fuera. Yo que vengo de la ciudad veo esto y digo, oh, qué bonito. Pero él, que forma parte del paisaje, no se puede ver. Es como si el campesino viera la ciudad y me vea en la ciudad. Qué bien vivir vosotros. No creas tú, aquí estamos normal, vivimos en la ciudad. Es un juego de diálogo, ¿verdad? Pero es cierto que los campesinos forman parte, están integrados en el mismo. Un campesino no puede percibir el paisaje desde los mismos supuestos que lo percibimos nosotros. Y yo lo sostengo, yo voy a muchas razas negras, vivo allí con ellos, y lo que yo veo del paisaje, ellos se quedan con la boca abierta. Tú has estado ahí, tú lo has visto. Ellos no se dan cuenta por qué forman parte de él. Estos campesinos trabajan, son su sustento. Por lo tanto, la valoración intelectual del paisaje depende, depende del ojo de los seres humanos, depende del ojo de los seres humanos. Por lo tanto, la cuestión del paisaje es una cuestión subjetiva, es un concepto subjetivo. Esto ha dado lugar a una antropología del paisaje. Fíjense, toda una disciplina, antropología del paisaje. Por ejemplo, la interpretación psicologista de Gombrich, que remite a pautas culturales, que tenemos en la página 316. Página 316. Hay ideologías, pautas de pensamiento asociadas al paisaje. Por ejemplo, en esta misma página 316 tenemos la que aporta Berbín. La pintura de paisajes. ¿Qué refleja una pintura de paisajes? Es realidad, es ideología. Es la historia de una clase social. Posiblemente sea el campo visto desde ese burgués que contrata a un pintor para que refleje el campo desde una posición social dominante. Así, esta pintura paisajística y la representación idealizada, idealizada, no refleja la dureza, que ese campesino está sometido a unas rentas que no puede pagar, que está explotado por el terrateniente, pero es una pintura idealizada, idealizada, romántica, en cierto sentido, de la realidad social que no está en la pintura, esa dureza del campo. Por lo tanto, hay aquí elaboraciones ideológicas de clase, paisaje e ideología de clase, como nos refiere el manual, con la historia de los cercanos de Inglaterra. La página 316. Es un objeto estético, el paisaje, y un objeto cultural. Las representaciones idealizadas que se contradicen con la realidad social del campo. Idealizo la pintura y no tiene nada que ver con la realidad. Ahí hay subyacentes, ideologías, jerarquías, clase, poder, como sucede con estas parcelaciones en el campo. En Inglaterra, como caso citado por el manual, puede haber más casos, evidentemente, en otros contextos políticos y sociales, donde aparecen aquí, en Inglaterra, nuevos propietarios de tierras comunales. Finalmente, para finalizar este epígrafe, hay el análisis de Grimm, un autor que ha hecho trabajo de campo en este sentido. En 1995, el análisis de Grimm, lo tenemos en la página 318, y está enfocado a una versión particular de una élite en la cultura occidental. El paisaje, a ver, dice Grimm, belleza ¿para quién?, ¿y qué sentido tiene? Esta es una visión un poco crítica, ¿verdad? Este paisaje, ¿a quién le gusta?, ¿a quién le gusta el paisaje?, ¿verdad? Otros aspectos del paisaje en las propias sociedades occidentales son, influencias en los estados de ánimo, ya estamos hablando de un clave psicologista también, ¿verdad?, en el urbanismo, en el ocio, y las metáforas asociadas al término paisaje. Ahora, el término paisaje extrapolado a otros contextos, como puede ser el paisaje interior, el yo interior, paisajes del alma, y, finalmente, el valor que tiene cualquier paisaje en las sociedades humanas, en las ideas, en las creencias asociales, paisajes contemplados, paisajes experimentados, hasta el punto de que llega a hablarse de etnoteorías, teorías afectadas por las etnias, etnoteorías del paisaje. Esto lo tenemos en la página 318, etnoteorías del paisaje. Bien, pasamos ahora al epígrafe itinerarios sagrados y piedras que se mueven. Entramos ahora en el terreno de la etnografía. Entramos ahora en el terreno ya de la etnografía. Hasta ahora, yo todavía he comenzado con una parte teórica, ¿verdad?, verdes paisajes y enfoques teóricos. Este epígrafe itinerario sagrado y piedra que se mueve desciende al trabajo de campo, aquí han dicho los antropólogos, en sociedades de Nueva Guinea, y en Australia, donde los paisajes se ven, se viven, y veremos más adelante, y suenan, son sonoros, paisajes sonoros. Estamos ante otras formas, hemos hablado antes de etnoteorías, teorías asociadas a grupos humanos que enfocan el paisaje de distintas maneras. Este es un ejemplo, otra forma de construir los paisajes. Estamos ya en clave del relativismo cultural, en la construcción cultural variante, relativa del concepto de paisaje. En los paisajes, ¿verdad?, lo que hemos dicho antes. Cómo cada cultura, cada sociedad, construye su concepto del paisaje y para qué le da. Los paisajes míticos de las sociedades de Nueva Guinea y de Australia, aquí vamos a ver episodios del pasado, biografías que son registradas y experimentadas espacialmente en términos de rasgos geográficos. Es decir, colonias, montañas, ríos, lagos, arroyos. Tenemos la cita en la página 319 y 320 de Kahn, texto del año 1990. Esta geografía, estos espacios, reflejan biografías del pasado. Las piedras tienen valor mítico. Ahí hay un recuerdo, es como si fueran parte de un sedentario el recuerdo. Hay un paisaje humanizado. Están inmortalizadas. En estas sociedades el mito está hecho lugar, como aportan Ramsey y Byron. Emplaced myth, el mito emplazado. El mito está en el lugar. Se ha hecho cuerpo en Nueva Guinea. Se ha incrustado en Nueva Guinea. Esta forma de registrar los mitos implica una fuerte identificación, no cabe duda, de la gente con la Tierra. La biografía pasa a la Tierra, al espacio. Ahí están los ancestros, la sustancia, el poder revelado, la fertilidad. Es un paisaje percibido con valores, con significados. Los hitos geográficos, el monte, la colina, el río, la fuente, operan como claves, tienen eficacia simbólica para esas identidades personales y colectivas. Estos lugares emplazados, estos hitos, enlazan lo emocional, biográfico, con lo social y lo político. Se recarga la memoria del pasado para proyectarla en el presente, los ancestros que están ahí. ¿Verdad? En este sentido, dice nuestro manual, el sistema, dos tipos de itinerario hay en las sociedades melanésticas y australianas. Por una parte, los itinerarios sagrados y por otra, los lugares que se mueven. ¿Quién es ese? Un lugar que se mueve. Para nosotros, es una paradoja, ¿verdad? Es algo difícil de aceptar. Pero lugares parece que se mueven en estas cosmogonías australianas, melanésicas. Itinerarios sagrados. Veamos el primero. Los itinerarios sagrados en la página 321. Ejemplos. Itinerarios del sueño. Fíjense. Itinerarios del sueño entre aborígenes y australianos. En su cosmovisión, el sueño les retrotrae a tiempos míticos. Rutas para la obtención del agua. Relacionadas con episodios del mito, de las leyendas, las del tamburo, las del guatimali, la del wálame, el hombre wálame. Eso es un itinerario del sueño sagrado. Otro itinerario sagrado. Dibujos en la tierra. Son paisajes, puestos en la tierra, o son mapas para orientarse. Evidentemente no son solo territorio, sino rasgos físicos que mezclan episodios legendarios y míticos. El mito crea el paisaje. Por lo tanto, este es un caso muy claro de paisajes como producto cultural. Fíjense en el informe de 1935. También paisajes como cosmovisión del mundo. Una forma de pensar el mundo, el paisaje como producto cultural. Hay un estudio que tenemos en la página 322 llevado a cabo por Blouseski sobre los Walpiris del territorio norte de Australia. Estudio de Campbell. 1991. Tiene 30 años prácticamente. ¿Eh? ¿Y qué ha descubierto este nóbraco, Blouseski, cuando hace su trabajo de campo entre los Walpiris del territorio norte? Pues fíjense. Este señor descubre que los ancestros han dejado marcas en la tierra. Que los ancestros visilan los lugares. Los lugares tienen nombres propios. Hay una antroponimia del lugar. Toponimia y antroponimia. Nombres de animales, de plantas, de fenómenos naturales. Adquieren la categoría de totémicos. Son lugares que se consideran habitados. Esto es importante. Por los antepasados para toda la eternidad. Están ahí. No se han ido. Son totes que daban al nombre al Patri-Clan. La parte del clan asociado al ladro paterno. Patri-Clan que vive disperso en el territorio privado. Y estos seres totémicos dejan huellas. Dejan marcas. Tienen sus itinerarios con episodios narrativos que se transmiten dentro de los clanes. Estos actos se realizan de acuerdo con un paisaje. Dentro de ese paisaje. Son actos secretos. Los lugares, estos lugares míticos, totémicos, son inaccesibles a los no iniciados. Volvemos a lo que hemos dicho antes en conocimientos neográficos. El proceso ritual. De hacer lo de los ídolos. Los iniciados. Los que han pasado la fase eliminada. Han pasado el rito. Son iniciados y ya tienen acceso. Estos lugares prohibidos. Secretos. Totem, relatos y itinerarios míticos van a recibir en estas culturas el nombre de Curavara. Curuvara. Y hasta el punto de que muchas veces en estas culturas pintar un motivo asociado al lugar les hace creer que ya tienen acceso a la intimidad. El sueño les permite el contacto con los ancestros. Soñar con ellos les permite tener contacto. Y soñar con ellos significa introducirse en el espacio-tiempo mítico. Lo que ellos llaman como Cucurrupa. Cucurrupa. Todo esto lo tenéis en la página 324-325. ¿Vale? Es decir, que en esta cosmología de los Gualpiri, de sus itinerarios míticos estos itinerarios no delimitan territorios Esto es importante. No territorios sino paisajes. Paisajes culturales. Reales o míticos. Enlazan lugares a través del sueño. Por lo tanto estos paisajes son figuraciones gráficas pero al mismo tiempo conclusiones culturales. Otro caso es los Yulgur. Ellos practican el Dikar. Dibujo de paisajes locales. Les sirve de conexión con los ancestros. De nuevo, el paisaje repite a espacios que los conectan con los ancestros. Con los Ngaraka. Los huesos de los ancestros. También lo ven en la página 325. Vemos que podemos establecer una relación triádica. Triádica. Entre clan, ancestros y terreno. Espacio. Una relación triádica. El clan, fundamental. Muchas veces patrilineal. Los ancestros, los que se fueron. Y el terreno donde están. El territorio mítico. El espacio. Así establecemos una conexión entre gente, el patrilinaje, la tierra, los derechos sobre ella y los ancestros. La continuidad. Y generar los ancestrados. Vemos que los mitos implican una continuidad, introducen una continuidad presente-pasado entre género. Involucra a los ancestros. La historia, el pasado, la memoria. Ancestros y tierra. El presente. Ancestros, el pasado. El recuerdo. Pero están conectados, están conectando estos mitos ese pasado con el presente. Y el presente es la tierra. Que los que estamos aquí ahora estamos viviendo. Por lo tanto en nuestra tierra estamos nosotros y los que se fueron. Y la dualidad es muy fuerte. Sobre todo a través de estos itinerarios que hemos hablado. Que se mueven. Los itinerarios sagrados. Y ahora vamos a ver con los lugares que se mueven. La página 326. Lugares que se mueven. Pues ve, aquí nos expresa en el manual elementos del paisaje que viajan. ¿Qué viajan? Esto para nosotros es nuevo, totalmente, ¿verdad? Cuevas, piedras, o que se mueven, que cantan. Como ejemplo, el caso de los Yaringuin de Kimberley en Australia Occidental, Western Australia. Tierra y cuerpo están interpenetrados. Finalizamos este epígrafe sobre el paisaje que se mueve con una doble paradoja, como dice el manual. Página 326.3 Estos paisajes melanésicos, melanesia, australianos, itinerarios míticos o sagrados, lugares que se mueven, permiten comprender de manera comparativa, por contraste, dos concepciones del paisaje en Occidente y que se deben a un supuesto naturaleza. Dos concepciones del paisaje. Una, conjuntos e englobantes en los que hay elementos simbolizados, definidos. También, eso por una parte, por otra, marcos fijos. El paisaje concebido como tiempo detenido. Y se refieren a seres humanos, a personajes o elementos transitorios. Esto por una parte. Por otra, frente a estos paisajes melanésicos que hemos dicho, hay otros, los itinerarios míticos de los aborígenes australianos que están hechos de puntos conectados por la memoria de los antepasados. Los itinerarios míticos conectan memoria de personas que se fueron, y que hay que tener presentes para que no nos vengan los espíritus a molestarnos. Si no los tenemos presentes y olvidamos la memoria, podemos tener problemas. Pueden visitarnos los espíritus. Hay muchas películas sobre estas cosas. Espíritus que no están tranquilos, ¿vale? Personas que no se han reverenciado, que viajan, ¿vale? En ambos casos hay vinculación entre la tierra y los seres humanos. Pero no se trataría, no se trataría de un universal cultural. Las diferencias están en el modo y grado como los seres humanos se entremezclan y se distancian de ellos. Estamos ante una situación paradójica. Somos elementos del paisaje, no cabe duda, formamos parte de él, pero para vernos en él tenemos que adoptar una distancia. Para apreciar qué hacemos nosotros en un contexto nos tenemos que ver desde lejos. Tenemos que tener una especie de perspectivismo. Saber vernos desde fuera, ¿vale? Y no es fácil. El siguiente epígrafe en mapas y paisajes. En los denbos ocurriría algo así. Sí, sí, absolutamente de acuerdo. Se refiere al ritual y los ritos de paso, ¿verdad? Cristo, Manuel, absolutamente cierto. Por eso digo que esta asignatura está muy conectada con conocimientos neográficos de cognitivo y simbólico. Bien, pasamos a mapas y paisajes. Página 328, ¿de acuerdo? Vale, los paisajes se forman con visiones impuestas por el entorno, evidentemente. Esa forma son rocas, montañas, perfiles de animales, de humanos, de seres sobrenaturales. También el paisaje lo forma el olor penetrante, ¿verdad? El sabor, la sequedad, ¿verdad?, el vértigo. Todo deja marcas y huellas y son eficacias simbólicas, conexiones para obtener recursos, para obtener recuerdos. Aquí surge el mapa. El mapa es una construcción previa al paisaje. Es la imagen de un espacio con un fin utilitarista, como una supervivencia expresada en términos sincrónicos. Un mapa expresa un momento, un momento puntual sincrónico del estado de la cuestión en una geografía espacial. El mapa responde a una época. Hay mapas de hace miles de años, del Imperio Romano, del Imperio Tita, ¿verdad? Mapas de la conquista de América, mapas del siglo XVIII, del siglo XIX, mapas, momentos puntuales, sincrónicos, ¿no? Pero, por ejemplo, con contraste, para los Walpidi de Australia la antroponimia incluye la división tiempo. La antroponimia incluye el tiempo, no solo el espacio. Un mapa para mí es espacio, pero para esta escultura el mapa es espacio y tiempo. Esta roca está asociada a una biografía de un avance. Por lo tanto, en este sentido incluye la diacronía, la evolución en el tiempo. Por lo tanto, el mapa sería posterior al paisaje. El mapa sería un astrazón. Así que hay que distinguir entre mapa, carta y plano. El mapa es mental. Y el plano, como hemos visto en esquemas y modelos culturales, en los planes, en los guiones de antropología con el siglo XI, el plano es plano. El mapa es mental. El plano es un plano. El plano es más bien para guiarse. Dame un plano de la casa. Dame un plano de la ciudad para guiarse. El mapa es mental. El mapa es mucho más abstracto. El plano es más concreto de alguna manera. El mapa sería el nivel más alto de abstracción en el paisaje. Mucho más. Porque con un mapa podemos... Un mapa del mundo, fíjense. Excepciones amplias. El mundo entero. El universo. El mapa da sentido de objetividad. Es universalista. Y el paisaje es subjetividad. Es localista. Los mapas se construyen con pretensión de validez universal. La geografía es un auxilio de las matemáticas, de las biometrías, ¿vale? Pero paisajes y mapas son convencionales y están culturalmente codificados. Lo que me gusta es que la representación espacial está presente en todas las sociedades humanas. Parece ser que es una dotación cognitiva de la especie. Podría ser un universal. O sea, saber dónde estoy y geolocalizarme yo a mí mismo parece que es algo cognitivo universal. Todos tenemos la necesidad de saber dónde estamos. Quizá por un instinto de diversión superviviente. ¿Dónde estoy y por dónde puedo salir de donde estoy? ¿Y dónde está mi salida positiva? ¿Y dónde está el calibre? Yo creo que es una especie de auto... De eso, de recursos de supervivencia. ¿Vale? Sería un orden de la experiencia. La representación del espacio-mundo mediante la metáfora del espacio. Construimos nuestro mundo a través del espacio y del tiempo. Como ejemplos, como ejemplos de todo esto tenemos la representación de los mapas. Este mapa que tenemos aquí de Satal y Yig en Turquía ¿eh? Hacia el año 6200 a.C. Ya que tenemos una primera representación espacial un mapa de una ciudad en Turquía. También tenemos el petroglifo de Valka Mónica 2500 a.C. Brescia Italia también ¿eh? Los primeros mapas cristianos orientados según TO ¿vale? Según TO ¿de acuerdo? Lo tenéis en la página 331 ¿de acuerdo? Las etimologías de San Isidoro de Semilla siglo VI siglo VII mapa con carácter enciclopédico que aluden a fuentes bíblicas fuentes clásicas latinas. El de San Isidoro de Semilla o el de San Agustín IV Todos estos mapas en clave cristiana tratan de reflejar un poco la cosmología la ciudad de Dios de San Agustín ¿verdad? ¿Cuál es el centro del mapa? Jerusalén Si el mapa es en clave islámica el centro es la meta Ahí se sitúa el mapa Hay un mapa muy interesante que es el de Beato de Liebra que tenemos aquí a la izquierda de Burgos de Osma 1086 que está copia ¿vale? Consiste en la parte superior está hecho para indicar gráficamente el lugar que corresponde a cada uno de los apóstoles cristianos en su labor misional entre los pueblos Es el año 776 que se llama Ramón ¿no? Y aquí se sitúa a el apóstol Santiago en el occidente Evidentemente Luego está el mapa mundo ideal Idrisi lo tenemos aquí de 1154 que incorpora los conocimientos que los comerciantes y exploradores árabes habían acumulado sobre África el Océano Índico a los que ya tenían Por lo tanto es un mapa donde el polo norte se encuentra en la parte inferior del mapa el polo norte está aquí y el polo sur también Es un mapa para orientarse comercialmente con las caravanas comerciales de la Arabia Hay más cartografías en Egipto en Grecia en Roma en el conocimiento los mapas mundis históricos por ejemplo el de la catedral de Herford el mapa mundi de Herford de Inglaterra del siglo XIV los tres o el mapa japonés budista de del siglo XIV un mapa relacionado con dos lugares de la vida de mundo que relacionan el peregrinaje con la mente y con la nación Pues bien el de Herford y el de Konjiku ambos utilizan recursos semejantes de construcción un marco de orientación un mundo circular como el oriente arriba y el norte También hay mapas enciclopédicos con informaciones bíblicas de todo el mundo Aquí tenemos el mapa mundi de Herford de Inglaterra del siglo XIV Es decir mapas como marcos de orientación asociados a compromisiones de los miembros de las respectivas culturas Mapas tolemaicos mapas de la ecumenia la tierra conocida En el caso del Idrisi del siglo XII aparece Arabia en el centro Esto es un claro caso de etnocentrismo transcultural Lo hace un árabe un musulmán el Idrisi y sitúa a Arabia en el corazón en el cogollo Luego está el mapa mundi del Salterio en la bahía de Westminster hacia 1265 siglo XIII En el centro y como ombligo del mundo evidentemente Jerusalén el centro del mundo cristiano El este aparece arriba no a la derecha como actualmente el este está arriba Abajo Jesucristo en el paraíso terrenal El este pero el paraíso también es el centro de Jerusalén El mapa mundi del Salterio Por lo tanto los mapas sostienen supuestos ideologos En los mapas están implicadas jerarquías están implicadas ambiciones de depresión Surgen mapas políticos En nuestro caso mayor énfasis al hemisferio occidental que al occidental y al norte que al sur porque somos eurocéntricos ¿vale? Y hay muchas convenciones en los centrismos que subyacen estas ideologías políticas y culturales imperialismo colonialismo privilegio del hemisferio occidental sablonital y del nazo social Por lo tanto los mapas incluyen como he dicho convenciones los tenemos en la página 335 336 Los signos icónicos la leyenda los mapas son distintos dependen de cada cultura y hay distintas interpretaciones ¿Pero qué tiene que reflejar un mapa? Lo que tiene que reflejar un mapa va a depender de cada cultura por lo tanto los mapas son convencionales son relativos ¿vale? Presencia humana grupos humanos ocupación propiedad esto es lo mío los mapas de las colonias donde se le ponía el nombre del país que había llegado para que se sepa que esa isla estaba colonizada por un imperio propiedad terrenos agua minas recursos estratégicos ¿Qué tiene que de qué le hace falta al mapa? Físico político cultural geológico y cultural por lo tanto los mapas en ese sentido se convierten en instrumentos en la interacción de grupos humanos y territorios y sin duda son interpretaciones culturales del mundo interpretaciones simbólicas ya hemos dicho que el mapa es más objetivo que el plan ¿de acuerdo? es más objetivo trata de ser universal y trata de ser global pero no cabe duda que como hemos dicho implican convenciones predominios geoestratégicos relaciones de dominio y subordinación configuraciones centro periferia tipificación de otros pueblos como los alterizantes así surgen distintos tipos de mapas geológico tierra el físico ¿verdad? el político el climático enciclopédico el paradigma del mapa es el mapa físico ¿verdad? las cordilleras los ríos las lagunas los valles mapas sin nombres atención mapas con nombres y mapas sin nombres hay culturas ágrafas hay sociedades ágrafas que no escriben que no codifican por escrito son culturas orales pero también tienen sus mapas los construyen con otros códigos con sitios convencionales y van a reflejar espacios conocidos funciones de otra manera ejemplos en la página 336 y 336 los mapas tratan de proporcionar una ilusión de realidad por lo tanto son productos culturales son modelos de y modelos para la realidad vean la cita de Clifford Gerdt de las páginas 340 y 341 modelos de y modelos para mapas como modelos del mundo diferenciar entre mapas y planos ¿vale? ya lo hemos dicho antes mapas y planos son dos modalidades de productos culturales el mapa trata de reflejar el mundo natural y el plano un mundo mucho más construido es más el plano de una casa el plano de una ciudad el plano de un edificio el plano de salida de una casa en periodo de incendio mucho más técnico ¿verdad? el mapa reflejaría la naturaleza construida en el plano la transformación de esa naturaleza en cultura ¿de acuerdo? naturalismo esquematismo lo tenemos en la página 341 paisajes y mapas pues serían dos polos de la representación del espacio naturalismo esquematismo ¿verdad? paisajes pequeñas escalas mapas grandes escalas evidentemente un paisaje es una pequeña escala un valle un monte un río una montaña el mapa es mucho más universal una gran escala el mapa refleja lo que nos interesa montañas para la minería espacio físico para la guía de comunicación las cartas náuticas para los marineros para la expansión del colonialismo la importancia que tenía cuando se va a los grandes viajes náuticos de los siglos XV XVI contar con un mapa la dirección de los vientos la dirección de las mareas donde estaba la isla donde había agua para aprovisionarse por lo tanto esto es importante incluso surgen los mapas y se le pone una totonimia Isla de la Reina Isabel Isla del Rey Fernando Islas Filipinas de Felipe II para que se sepa que esa isla pertenece a un país a un imperio sobre todo en la expansión náutica para reclamar territorios ultramarinos para las metrópolis en la expansión náutica de los siglos XVII XVIII por lo tanto vemos que es una especie de apropiación del espacio con el desarrollo del capitalismo del colonialismo y van a tener un fin utilitarista político comercial y definitivamente imperialista esta tierra se llama Islas Marshall por el estado americano y se llama Isla de la Nandila porque es Rey Fernando Rey español y el mapa de la isla Victoria Gran Bretaña Islas del Príncipe de Gala Inglaterra y van marcando el territorio con los nombres vale hay un estudio geográfico etnográfico de Vogue en la página 343 sobre un poblado de la Amazonia Peruana Santa Clara y como aquí se muestra la implicación de este paréntesis con el paisaje espacios construcción de vivienda los pobladores los parientes las almas los disueltos los chamanes Gogue en este estudio sugiere que los mapas y paisajes pintados por esta cultura de la Amazonia no son tomados en muchas culturas rurales como representación del espacio no están dirigidos a nadie ni ellos pretenden que se vean en ese espacio representan sus instituciones en la página 344 o 345 el paisaje como referencia de narraciones de experiencias personales véanlo en este esquema esta síntesis etnográfica en este esquema del paisaje de Santa Clara por una parte espacios y por otra parte los pobladores de ese espacio parientes alma difunto gente chaman Gogue sugiere los paisajes pintados no son tomados en muchas culturas rurales como representación del espacio representan poderes instituciones se imponen con su realidad bien paisajes que se oyen paisajes que se oyen estamos ante el sesgo en la visión del paisaje se suele asociar al sentido de la vista un paisaje es algo que veo pero como es posible que haya un paisaje que no sea percepción visual sino que sea una percepción acústica esto es lo que se estudia en este epígrafe paisajes de sociedades nueva linea del norte de Australia que confirman que el concepto paisaje visual es un sesgo nuestro en nuestra cultura el paisaje no es visual es sonoro porque su medio no le permite ver estas selvas amantes esas selvas australianas donde la oscuridad permanente hay una película el piano que está hecha en Australia en esta escultura pues perfectamente podemos ver que esas selvas son oscuras entonces no se puede tanto ver como escuchar la dificultad de mostrar paisajes en ambientes selváticos donde los entornos visuales son restringidos boscosos cerrados para la vista y entonces se abre otro sentido para percibir el sin paisaje los sonidos los olores como sucede entre los caluri los fua los humedal estas sociedades no carecen de paisajes sino que lo construyen de otra manera no con el sesgo visualista sino percibiendo el sonido y los olores serían soundscapes paisajes sonoros soundscapes en versión británica es un caso claro de interacción entre el ecosistema oscuro y una construcción cultural del paisaje una distinta aproximación entre naturaleza y cultura hay que hablar de las onomatopeyas y el simbolismo del sonido o iconicidad fonológica en la lengua umela en la tribu de papúa nueva guinea y en la lengua caluri lo tenemos expresado en las páginas 347 hasta 351 simbolismo del sonido en umela como la manera de evocar el sonido pasa a la escritura lo que son las onomatopeyas si se percibe la lógica la importancia de los sonidos en pueblos de selvas tropicales que confirman que el sesgo visualista puede ser sustituido por un sesgo sonoro o los caluri donde hay metáforas sinestésicas donde se mezclan paisajes con sonidos ritmos danzas y coros otro ejemplo etnográfico que se nos administra página 351 es la onomatopeya para los hombres del agua papua norueguinea ahora lugares asociados al agua y que van a reflejar los sonidos del agua cómo se mueven es una técnica narrativa muy interesante que tiene estructura de canción con una palabra que está ahora muy común el tiktok verdad el paso estamos recibiendo muchas veces tiktok el paso la canción no está en el sonido del agua y se canta como el agua por lo tanto visión sonidos agua movimiento formas de construir paisajes cultural veamos ahora el epígrafe final bueno pero paisajes como visión del mundo paisajes como visión visiones del mundo paisajes entendidos como visiones del mundo la construcción cultural del paisaje se lleva a cabo con miradas con sonidos con gestos y con sentido una visión paisajes como visiones que tienen las distintas sociedades dos caracterizaciones de estos componentes de los paisajes humanos página 353 anclaje espacial temporal de acciones de acontecimientos me queda anclado o memoria colectiva personal memoria incorporada a través de esos elementos del paisaje llenos de biografía que incorporamos hay aquí otro ejemplo etnográfico ahora cambiamos de territorio nos vamos a los apaches occidentales de estado sur los nombres los nombres describen detalles físicos de los lugares. También aquí la toponimia recuerda algo que sucedió allí, la toponimia incorpora la biografía. El paisaje por lo tanto va a evocar sentimientos, personajes, estados de ánimo. El paisaje va a recordar el parentesco, la continuidad como pueblo con esos mismos lugares, con esas historias ejemplares. Los nombres de los topónimos en apaches, latas y acontecimientos, el nombre del lugar, la toponimia, está llena de historia, condensa la historia, evoca un paisaje moral. Es lo que dice Vázquez, hablar con nombres, porque los topónimos están memorizando los acontecimientos. Más ejemplos, las leyendas tradicionales en Europa, página 356. De. leyendas tradicionales. Los cuentos que hemos aprendido de pequeños, que están enlazando topografía al lugar, toponimia, episodios históricos, donde se juntan santuarios, por ejemplo en España, el hallazgo de la Virgen. ¿Qué sucede con el lugar donde aparece una Virgen? Aparece en el monte, ¿verdad? La Virgen del monte, la Virgen del valle, la Virgen de las nieves, la Virgen de lo que sea, ¿verdad? Aparece la Virgen, la Virgen aparece en un lugar, el nombre de la Virgen se asocia al lugar y se produce una inversión. El topónimo, nombre físico, se hace agiónico. Topónimo no es físico, valle, Virgen del valle, el agiónico. Y al final se convierte en nombre de mujer, valle. Valle es un nombre. Monte, monte es un nombre. Virgen del monte, Virgen del valle. Nieve, Virgen de las nieves. Es decir, el lugar, la nieve, aparece la Virgen, Virgen de las nieves. Y luego Virgen de las nieves se convierte en un nombre de mujer. Por lo tanto, el sentido del lugar es universal para la filosofía. Los paisajes permiten reconocerse a los individuos a sí mismos. Luego ha surgido de todo esto la Convención Europea del Paisaje, en Florencia, en el año 2000. Para el mantenimiento de los paisajes transfronterizos. Un ejemplo etnográfico, esto lo he aportado yo, es la Raya Hispano-Rusa, Convención Europea del Paisaje, Florencia. Hay paisajes en medio de la nada, en la frontera. Esos paisajes que no son ni de A, ni de B, ni de España, ni de Portugal. Pero están ahí. Por ejemplo, la Raya Hispano-Rusa. ¿Entendéis? La raya como es. Las líneas fronterizas. ¿Vale? Listas de paisajes de interés europeos. Han surgido listas de paisajes europeos. Porque el paisaje, dice esta Convención, coopera, el paisaje coopera en la elaboración de las culturas locales. Representa un componente fundamental del patrimonio cultural y cultural de Europa. Y el paisaje contribuye a la consolidación de la identidad europea. Los paisajes, sobre todo, de fronteras. Finalizamos con la poética del espacio. La relación antropológica descubre en los paisajes dos dimensiones. Espacio y lugar. Destinamos entre espacios y lugares. Espacios como fondo, vacío, abstracto, carente del sistema. Y lugares, que va a ser objeto después del sistema final. Lugares entre lugares. Espacios y lugares. Lugares como formas perfiladas, debilitadas. Concretos y no abstractos. En el lugar está la presencia del sujeto. El foco de referencia. Como dice la teoría de Aristar. La diferencia entre espacio y lugar es la diferencia entre un mapa físico, sin sujeto, abstracto, el mapa, ¿verdad? Y el mapa mental, el lugar, con sujeto humanizado. Hay una distinción de Merleau-Ponty entre espacios geométricos, sin sujeto. El espacio y espacio antropológico. El lugar, con sujeto. Fíjense que inciden en esto desde distintos puntos, pero todo el mundo. Y excepto habla de visión estática, el mapa, el espacio, versión dinámica, ¿verdad? Con personas. En efectiva, paisaje como configuración cultural. Intersección entre el espacio y el lugar, geográfico y social. Esta diferencia que hemos venido a mantener en principio entre espacio y lugar recoge dos tradiciones de análisis simbólico. Por una parte, la poética del espacio, de Bachelard, de 1957, y la vinculación sociedad-lugar, que implica la existencia de no lugares, de no lugares, como construcción de la posmodernidad. A los no lugares les vamos a dedicar el tema cuarto, espacio cuarto. La poética del espacio, privilegiada en el estudio de la mitología clásica. Arte, poesía, leanlo a estos puntos con calma, con tranquilidad. Para generalizar, las asunciones de universalidad de la poética del espacio lo tenéis en la página 361. Por una parte, la postura corporal vertical de la especie humana, símbolos espectaculares, símbolos diaréticos, y la importancia que nosotros le hemos dado a la lista, ¿verdad? A la lista. Bien, todo esto son elaboraciones de poética del espacio, de Durán y Pascandí. Con esto finalizamos este tema un poquito extenso. El próximo día veremos espacio y cuerpo. El próximo día veremos espacio y cuerpo. Espacio 2. A ver, ahora ya me dedico a lo que habéis comentado aquí. Esquemas de orientación, sí. Las pinturas represas también pueden ser en el mapa, por supuesto. De hecho, lo son. De hecho, lo son. Y muchas veces son mapas cognitivos. Más que mapas espaciales, mapas cognitivos. En una pintura rupestre es difícil ver un espacio. La de la Baja Alta de la provincia de Cali se refleja el paso del ave por la estrella del Mediterráneo. Estas son pinturas que están en la esquina de la frontera, la Baja Alta, no sé si las conocéis. Las pinturas del paso de la figura de aquí de Cali reflejan el paso. Son mapas ecológicos. En el paso de mapa de ave, de paso de ave es un mapa ecológico. Al lado de estas pinturas existía una laguna, la Laguna de las Andas, que era un espacio de migración de aves. Era una laguna enorme donde las aves, digamos, pasaban la invernada y se pintaron. Un mapa ecológico. ¿Vale? En el caso de las pinturas de la Baja Alta es un mapa comercial. El paso del nave, el paso del nave es un mapa comercial y por el exceso de libertad. Candelaria es otro caso aquí, en Canarias, donde apareció el termífero. Se le llama así el lugar donde apareció. La Virgen de las Candelarias. Es el no lugar. Los no lugares son los espacios del anonimato. En situar a una ciudad civil la van de un lugar, dos lugares. Yo creo que el itinerario es más fácil con un plano. En un itinerario quedan reflejadas hitos de paso. ¿Dónde hay una fuente? ¿Dónde hay una ciudad? ¿Dónde me puedo acordecer? ¿Dónde hay una ciudad? ¿Dónde me puedo acordecer? ¿Dónde puedo cocinar? ¿Dónde puedo dormir? ¿No? Yo creo que un itinerario está más cerca del plan, es más concreto, que un mapa. No sé si estáis de acuerdo. Un itinerario de Semana Santa, por ejemplo, que le acabamos de pasar. Aquí ahora está el paso en una calle, en la otra, en la otra, pero ahora lo recogí ya más concreto. Así lo veo yo. ¿De acuerdo? Pues lo dejamos aquí. ¿Vale? A vosotros por asistir. Antonio, Alberto, Concepción, Cristo, Francisco Morel, Jesús, Roberto Mario, Rocío, lo dejamos. Buenas tardes.