Muy buenas tardes, seguimos después de este paréntesis festivo y vamos a continuar con lo que habíamos empezado con Averroes, el filósofo cordobés, Santo Tomás de Aquino y el aristotelismo. Muy bien, habíamos visto a Averroes. Averroes básicamente, para que lo entendáis, es lo que ya lo estuvimos comentando, era el gran comentarista, el que puso, dio valor a Aristóteles en la filosofía occidental. De Aristóteles se conocían unas cuantas cosas en el mundo cristiano, pero era básicamente platonismo, todo a través de San Agustín, Neoplotino y demás. Pero realmente, de los árabes, lo que se transmitía de Aristóteles era también a través de la interpretación árabe. Sin embargo, como Averroes lo que hizo fue comentar directamente la obra aristotélica, quitando todo tipo de hierro, todo tipo de cuestiones religiosas, pues sirvió para que entrase en el mundo occidental. Claro, no es que no lo hiciera, pero sí que era un cambio fundamental en el mundo cristiano. La teoría de la doble verdad, acordaros que esto es una de las preguntas que suelen salir, ¿qué significa eso? Básicamente, es una teoría que no es que diga exactamente que hay una verdad humana y una verdad divina. Simplemente, Averroes, como hacían otros sufís, vimos, si habéis visto los autores árabes, tenemos a Hagi, en ese camino de perfección, ese personaje que crece solo en una isla y llega hasta Dios por su cuenta, pero luego se encuentra el otro que también ha llegado por otro camino. Es decir, tenemos la doble vía, la vía intelectual y la vía mística. Tenemos un doble camino. Para intentar llegar a Dios. Entonces, es lógico pensar que, a ver, Dios es un ser supremo, llamarlo Alá, Yahvé o lo que os dé la gana, y entonces nuestra mente de pringadillos no llega a ese nivel. Por lo tanto, algo que para nosotros es verdad puede que para él no sea. Y al revés. Bien, aquí empezamos la disputa en este mundo, ¿no? Bien, Averroes hablaba también de que el mundo no tenía principio, no hay creación, siguiendo Aristóteles, y eso nos llevaba al contexto histórico en el mundo cristiano. Estamos en el siglo XIII. Llega en el XII, segunda mitad, pero en el siglo XIII empieza a haber los problemas, porque cuanto más se conoce de Aristóteles, más cuentas se da uno, se dan los escolásticos que no, vamos, no casan ni en pintura. O sea, no puede ir ahí, ¿no? Bien. ¿Qué podemos hacer? ¿Dejamos aparte Aristóteles? No, es el magíster. En la escolástica, cuando alguien decía, lo dije, magíster Dixit, Roma locuta causa finitas. Acabó. O sea, lo decía el maestro y ahí ya tenías que agachar las orejas y decir amén. Por lo tanto, ¿qué hay que hacer? ¿Qué se intentará hacer? Adecuar Aristóteles a la filosofía cristiana. Básicamente, San Agustín hizo eso con Platón. No es que la cogiese y lo hiciese conscientemente, porque luego con el neoplatonismo, protino y demás, pues todo se fue juntando y se fue haciendo, ¿no? Pues, si tenemos, para entendernos, San Agustín con Platón, que dio lugar a esta escolástica de San Anselmo y demás, creo, para entender este mundo de la revelación, pues el gran autor, y murió joven, nunca sabremos qué podía haber llegado a hacer, cómo podía haber desarrollado la escolástica con su pensamiento, que va a intentar meter, que va a intentar hacer lo que llevaban los filósofos árabes siglos intentando. Avicenna y compañía. Quien va a intentar todo eso es un dominico, Santo Tomás de Aquino. Él es el que va a intentar meter ahí. Muy bien. Su maestro fue Alberto Magno, lo veremos, y Tomás de Aquino. ¿Qué ocurre? Estamos dando la vuelta ya con ellos, para decirlo así, simple. Hasta este momento, como os he dicho, creo, para entenderlo. A partir de Santo Tomás, es decir, Aristóteles y el método, como dicen por ahí, entre comillas, científico, es entiendo para creer. Es decir, la razón me tiene que demostrar la existencia de Dios. ¿Nosotros qué somos? Somos inteligo. Inteligere es entender, conocer. Somos inteligencias. Aunque algunos no lo demuestran mucho, pero en fin, en muchos campos. Somos inteligencias, necesitamos entender. Entender. Entonces, a partir de la influencia aristotélica, el mundo cristiano, ya os digo, no solo son Alberto Magno y Santo Tomás, hay más gente, pero para resumir los autores que son los punteros, a partir de este momento la labor de Santo Tomás va a ser meter dentro de la filosofía cristiana y del cristianismo lo que decía Aristóteles. Muy bien. Vale. La razón como fuente de conocimiento libre de religión. La razón como fuente de conocimiento libre de religión y teología, pero claro, estamos en el siglo XIII. No puede ser de otra manera. Todo ello subordinado a la religión y la teología. Es decir, tampoco nos hemos de pasar siete pueblos y vamos de un lado a otro como un péndulo. Vamos a ver. Vale, yo voy a usar la razón, pero aquí la razón siempre va a ser la anquila, va a ser la esclava de la fe en este momento. ¿Qué? Y la semana que viene acabaremos viendo cómo unos franciscanos, yo siempre los conozco de gran berretes, filosóficos, pues son los que van a hacer que la razón esté a la misma altura que la fe. Bueno, en el contexto histórico se producen todas estas cuestiones, las universitas y demás. Hay la pugna enorme entre franciscanos y dominicos. Los franciscanos son agustinianos. Bueno, no más que agustinianos. Sí, de la rama para no liar mucho. Y entonces van por el Evangelio, por la buena palabra, por la palabra de Dios, por el mundo espiritual, mientras que los dominicos es la pura ortodoxia de la Iglesia. Esto es lo que hay, son los defensores. Yo siempre digo que el sustituto, el sucesor de los dominicos, posteriormente serán San Ignacio de Loyola, serán los jesuitas, que será la pura ortodoxia eclesiástica, ¿no? Bueno, franciscanos y dominicos, órdenes mendicantes, empiezan con un problema, no pueden tener dinero. Pronto el Papa les dice, hombre, tampoco hay que ser así, porque se acaban haciendo de oro, pero cualquier orden, no solo ellos, sino cualquier orden, porque la mentalidad de la época llevaba a eso. Tú cuando te morías dejabas un dinero no solo a las órdenes mendicantes, sino a la catedral, a la iglesia de no sé qué, a la de no sé cuántos. Hoy estaba en el archivo, he visto el testimonio. Y empieza a dejar dinero a parroquias de Artá, a San Nicolás de Soller. El patrón de Soller es el patrón de los surfistas, porque tiró la capa al agua, se puso encima y se fue para allá. O sea, empezó a dejar por toda la isla dinero. Claro, estas órdenes se forraban. En un primer momento no podían tener dinero. Luego ya el Papa les exigía. Y se eximió, siempre y cuando no lo dedicasen a especular y cosas de estas. Y las órdenes fueron creciendo. Un papel fundamental de la nueva espiritualidad que representaba al mundo mendicante es las universidades. Entran de lleno en el saber, en el conocimiento. Son órdenes que no es el hora et labora, no es el estar meditativo, sino es participar de la vida. Aquí, por ejemplo, aquí en Mallorca, sabéis que de aquí salió Junípero Serra y hizo lo que los jesuitas fracasaron, que fue colonizar o que fuese aceptado en toda la zona de lo que hoy en día es todo el noroeste de México y toda la zona de California. Tened en cuenta que México llegaba prácticamente hasta Canadá. Luego vinieron los protestantes e iban a Enfenet, se lo quitaron de ahí. Pero toda esa zona, si miráis los nombres, son nombres franciscanos. Los Ángeles, San Francisco... O sea, si empezamos a mirar todo eso está dentro de ese mundo, ¿no? Bien, esta gente, Junípero Serra, por ejemplo, era doctor en teología y tenía una cátedra sobre Duns Escoto, que lo veremos, y sobre Ramón Llull. O sea, los conventos eran órganos de conocimiento también, ¿no? Bueno, ¿qué ocurre? ¿Cómo van a presentar el aristotelismo? Los tomistas. Adecuar Aristóteles a la fe. Los franciscanos son más de San Agustín, a través de San Buenaventura. Vale. San Buenaventura niega la posibilidad de adecuar Aristóteles a la fe. ¿Por qué? Porque Aristóteles simplemente habla del mundo natural. Porque los franciscanos hablan de la primacía divina, la revelación. Vale. Y luego tenemos también el mismo punto, esta es la disputa entre ellos cuando aparece el averroísmo. Y el averroísmo es esta doble verdad. Entonces tenemos aquí las tres puntos de vista, ¿no? Uno puramente racional, que serían los tomistas. Uno, revelación, es decir, espiritual, que serían los franciscanos. Y a medio camino, por entendernos, tendríamos, por influencia de averroes, la doble verdad. Bueno, pues ya tenemos una doble verdad aquí y ya veremos qué hacemos con ella. Bueno. ¿Cómo lo plantean? Los dominicos simplemente dicen... ...que la razón es una ciencia autónoma independiente, pero subordinada a la teología. Mientras que los franciscanos, como los franciscanos es alma, es interiorización, pues simplemente lo que dice es que el mundo natural pertenece a Dios y por lo tanto todo es lo mismo. A ver, como veis, en filosofía se trata de buscar el conejo que sacan de la chistera para explicar las cosas. Me encuentro con un problema, tengo que darle explicación, ¿no? Pues esto es lo que van a hacer. Es decir, muy bien, los franciscanos dicen, no, no hay ningún problema aquí. Porque todo es divino, todo viene de Dios. Por lo tanto, no hay nada, no hay problema entre una cosa y otra, ¿no? Eso está, la razón está dentro de la teología. Bueno, eso sería en este punto. Bueno, el agustinismo, las filosofías, se subordinan a la teología y demás, pero hablaban de la iluminación divina. Vale, ¿por qué? Esa iluminación divina es la que nos hace libres, porque tenemos voluntas. Tenemos voluntad. ¿Os acordáis que cuando dije que empezábamos la escolástica, el concepto de libertad moderno aparece precisamente con la escolástica? Porque hablan de la voluntad. Tú tienes voluntad de hacer el bien o el mal, cosa que un griego o un romano no conocía. Entonces, estamos ahí, ¿no? Bueno, pues para los agustinismos las ideas platónicas son eternas, es un modelo platónico, y hablan de la voluntad. Por lo tanto, la voluntad puede llevar a un sitio u otro. Por repasar muy rápidamente, tenemos a Grosetest, traductor de una ética, centra su filosofía en torno a la luz. Fijaros que la luz, primera forma corpórea, la luz... Fijaros que aunque estemos en el mundo teológico, al fin y al cabo, la luz es un fotón, son fotones, no tienen masa. Hombre, hay un chiste muy malo que le pongo a los críos cuando hacemos etimología, y es por qué los fotones no pueden hacer pizza. Y es porque no tienen masa. O sea, es algo incorpóreo. Pues ya lo intuían en el siglo XIII. O sea, la ciencia moderna que nos ha explicado tantas cosas, ellos ya lo entendían. Claro, es luz, pero para un franciscano es luz divina. O sea, no es luz como fenómeno natural, que eso sería para un dominico, sino que es luz divina. Porque todo refiere a Dios. Franciscano, todo refiere a Dios. Luz eterna, pura y eterna, que sería esto. Entonces este es Grosetest. Aquí tenéis un selfie, un texto de él, la única imagen que se conserva más o menos de época. Tampoco se cuidaban mucho los detalles, pero en fin. Alejandro de Hals, una suma teológica. Maestro de San Buenaventura. Y, pues, critica a Aristóteles evidentemente por falta de revelación. Todos los franciscanos, todos los que sigan a San Buenaventura lo van a hacer. Y la Trinidad sigue el modelo clásico. Dios es uno y trino. Aquello que vimos de las tres etapas. El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. El Gens, el Nous y el Alma. Es decir, las tres etapas, que simplemente era de lo más puro. Al mundo material, que parte esa vía. Era eso, pues sigue en ese modelo. Dios crea el mundo. ¿Bien? Aristóteles no cuadraba ni por casualidad, porque Dios dice que todo es eterno. Fijaros que ahora estamos en un periodo científico en el que todo el mundo admite el Big Bang. Por lo tanto, se habla de una creación, un principio. El problema es que lo que explotó salió de algún lado o apareció de la nada. Estamos en el mismo problema, no va de ahí. Pero ahora estamos, digamos, en un modelo que sería franciscano. En un modelo así, en este sentido. O sea, no es aristotélico. Hubo una época en la ciencia en la que se pensaba que el universo era eterno. Entonces, si buscáis la ciencia moderna y os acordáis de esto, lo podéis explicar y diréis ¿pero qué me están contando? Si esto llevamos ya 800 años con las mismas cosas. Es así. Bueno, el alma para los franciscanos... ¿Para los franciscanos es el origen del conocimiento? ¿Por qué? Porque el alma, acordaros de Platón, el ser humano está compuesto... ¿Qué decía Sócrates? El ser humano está compuesto de materia y forma. De cuerpo y alma. ¿No? Vale. También lo decía Aristóteles. Bien. Conocimiento con origen en la iluminación divina sobre el intelecto. ¿Qué es el intelecto agente? El intelecto agente es, digamos, el... ¿Cómo lo podríamos definir así un poco gracioso? El enano currante que permite hacer las cosas. A gente viene del participio del verbo hago, que es hacer. Hagens, que hace. Es el entendimiento que realiza las cosas. Es decir, es el factor, el que lo hace todo, ¿no? Bien. ¿Y eso dónde estaría? En la parte espiritual, porque si decepcionas a una persona no vas a encontrar, hola, aquí hay un conocimiento agente, aquí hay un intelecto agente, aquí hay un conocido. No. Entonces, ¿eso dónde estaría? En el alma. ¿Por qué? Porque está en el alma porque también es algo puro, divino. Por lo tanto, no puedo ponerlo con la materia. Pero bueno, me estoy enrollando. Sigamos. Tenemos a San Buenaventura. Bien. San Buenaventura marca el camino del mundo franciscano. Su obra fundamental es el comentario a las sentencias de Pedro Lombardo y habla del ejemplarismo. Todo es a la luz, a ejemplo del Espíritu Divino. Lo hemos visto al principio, ¿no? Los franciscanos todo remitía a Dios. Los dominicos, la razón, ¿no? Pues el ejemplarismo es todo es a ejemplo de Dios. Todo remite a Dios. Esta es la idea fuerza de la filosofía franciscana. Si todo remite a Dios, ¿qué será para el Aristóteles? Como Aristóteles niega que remita a Dios... Será un filósofo simplemente de la naturaleza, frente al modelo franciscano, que es platónico y neoplatónico, que sería un modelo de sabiduría. San Buenaventura nos habla de un itinerario de la mente a Dios. Estamos, os acordáis con Platón, ¿no? Lo primero que os dije con Platón. Bueno, el modelo de Platón es una escalera de arriba para abajo, de arriba hacia abajo, que están las ideas y eso va degenerando hacia el mundo material. Vale, pues siguiendo este ejemplo, pero un poco al revés, el alma, que es espiritual, que es lo que nos hace ser, busca a Dios. El sabio platónico no buscaba el bien. ¿Quién es el sofo? Dios, clásico. El que busca la verdad, el que busca el bien. Si cambiáis verdad o bien por Dios, blanco y en botella, estamos igual. Es eso. Vale. Por lo tanto, todo lo que existe, por eso lo estamos repitiendo cada vez, todo o cualquier ser vivo es una imagen o vestigio divina. Bueno, ¿el aberroísmo latino qué es? Bueno. Aquí están dominicos y franciscanos dándose de tortas. Entonces los aberroístas pensaron encontrar el santo grial con el que diferenciar fe y razón. Bueno. Los averroístas no son religiosos, es la tercera pata del pensamiento medieval. A ver, un franciscano, un dominico averroísta siguiendo a un musulmán va a ser que no. No. Entonces, era gente que no eran religiosos. Tened en cuenta que cuando se crearon las primeras universitas es unión de profesores normalmente laicos que huyen de las escuelas catedralicias y controlan todo a través de la fe. Intentan abrir el conocimiento. Pues esta gente encontró en el modelo de la doble verdad averroísta, encontró la solución a la disputa que había entre los religiosos. Y a partir de ahí pues intentaron hacer. No. Bueno, vale. Entendimiento potencial y activo son el mismo. El entendimiento potencial, esto, dejadlo que no tiene más. ¿Qué significa? El alma, hay un alma racional común al ser humano y es la única inmortal. A ver, esta cosa, el alma para Aristóteles es inmortal, ¿no? ¿No? Muy bien. Entonces, vamos a buscar la chistera, sacamos un conejo. ¿Cómo sacamos el conejo? Resulta que hay un alma que es común a todos y esa es eterna y inmortal. Pero nosotros, como seres humanos normalitos, la que tenemos es imperfecta y es apropiada. Esa muere, pero está conectada con la inmortal. A ver, no se les ocurrió otra forma de mezclar las cosas. Esa es la idea. Vale, si os fijáis, para intentar explicar las cosas cada vez se están metiendo más líos por en medio. Esto la semana que viene veremos lo que dice Guillermo de Oca. ¿Para qué tantas cosas y con dos palabras basta? ¿Para qué darle el círculo? Lo veremos. Bueno, los averroístas intentaban demostrar la eternidad del mundo frente a los religiosos que evidentemente cogían la Biblia y decían que un buen día Dios estaba aburrido y se puso a crear cosas. ¿No? Vale, vale. La oposición entre razón y fe, la teoría de la doble verdad. Y eso significa que algo que según nuestra razón puede ser verdadero Pero su opuesto, es decir, lo que para nosotros sería falso puede ser verdad en filosofía. Y ahora ves. Ahí está, sí. ¿Con cuál me quedo? Es así, o sea, la doble verdad es... A ver, ellos lo que razonan es la inteligencia divina nos da 20.000 vueltas. Nuestra mente llega hasta donde llega. Y mi razonamiento... La época medieval es la época de la lógica. La estudia. Porque quieren llegar a ese punto de verdad. Pero entienden que nuestra razón llega hasta donde llega. Entonces, claro, mi razón me dice que esto es así. Pero si Dios dice otra cosa, él tendrá sus razones. Entonces, para mí eso no me da mi mente y para mí no tendría que ser. Pero lo dice Dios y hasta aquí hemos llegado. Cualquiera le discute al jefe. Pues esto sería la doble verdad. Una verdad del ser humano, que es imperfecto y todo lo que queráis y demás. Bueno, ¿quiénes propugnaban este averruismo latino? Aquí tenéis al cardenal, Sillé de Brabante. Pues la verdad está en la fe, decía, y por eso fue condenado, su doctrina averruista. Él simplemente decía que la verdad está en la fe, mientras que la filosofía la dejaba como algo para intentar entender Aristóteles. Esta sería la idea de fuerza. Luego tenía cada una de sus... hizo toda una serie de sentencias, como otros, que hacían una serie de proposiciones. Decían, esto es falso, esto es falso. Pero la idea básicamente era esa. O sea, es decir, muy bien, ya veis que lo primero que decía es que la fe está por encima de todo. Pero aún así, ¿cómo podía ser que el ser humano tuviese algo de verdad? De ver, desde luego. Si es que somos, lo que no es. Vale. Por lo tanto, tenemos dos tipos de órdenes en el mundo. Tenemos dos etapas, dos esferas, dos niveles, lo que queráis. Uno natural, que es el que llega a mi razón, como aquel, si no lo veo no lo creo. Sería la naturaleza que mi razón me la permite comprender, ¿no? Y el otro nivel sería el sobrenatural. Este sobrenatural el ser humano no llega. Entonces, ¿cómo comprender eso? Por la revelación divina. ¿Vale? ¿Y cuál es el problema? Que esto es donde les daban pal pelo. Hemos visto que los averroístas niegan la eternidad del alma individual. Habían sacado un alma colectiva, por decirlo de alguna manera. Claro. Se ponían como gatos panza arriba los otros cuando hablaban de eso, ¿no? El intelecto existe separado del cuerpo. Pues el alma no confiere el ser al hombre. Esto es un anatema. Contra el cristiano. Contra el cristianismo o judaísmo o islamismo tradicional. Entonces, por eso eran perseguidos. Porque, claro, ellos lo que intentaban era ajustar Aristóteles con... No, si Dios está ahí, pero... Intentaban esto, pero no había manera, ¿no? Y también, evidentemente, defendían la eternidad del mundo. Vale. Tenemos este problema gordo. Tenemos los franciscanos, tenemos los dominicos, tenemos los averroístas. Los tres a la greña. ¿Quién empieza a... Intentar poner un poco de orden desde la ortodoxia? Alberto Magno. San Alberto Magno. Fijaros que... Vivió 87 años. cosa que es la edad media todo el mundo, se morían a los 40 no, tengo documentos de uno, un pobre hombre que ya tiene tan viejo que dice la mujer que tiene más de 100 años, ya no tiene dientes y solo come sojitas y claro, no puede trabajar y le pide a Sancho I de Mallorca que le den una pequeña subvención para sobrevivir y luego en el Cresques en el atlas de Cresques Abraham en la primera parte hay unas tablas y te pone según el día del mes en que nacías te pone lo que serás y los años que vas a vivir y el día 28, 29, no me acuerdo pone que vivirás 120 años y serás malvado y serás mercader o sea ponía estas cosas es decir, hay un margen vital en el mundo medieval que sí que había gente que debía llegar a los 90 y los 100 años debían ser de hierro con lo que había en aquella época pero sí que llegaban aparte de eso, pues Alberto Magno llegó prácticamente a los 90 también ¿qué ocurre? Alberto Magno será el gran difusor del aristotelismo canónico el aristotelismo cuando humana el que corresponde bueno como Tomista bueno, como Tomista como dominico y ortodoxo y creyendo en la razón se apoyará en la observación y el experimento es decir, lo que sería la ciencia vale ¿qué ocurre? Fijaros que aquí Alberto Magno no sólo separa ciencia aristotélica y científicos de la teología, y fijaros que para separarlos sigue Agustín de Hipona, que es platónico, sino que en los universales sólo existe el entendimiento, ya vimos el problema de esto, o sea, es como es lógico para ellos, y influencia musulmana. De Avicenna toma la distinción entre esencia y existencia. Es decir, es el primero que intenta hacer un cacao de todo esto, ¿no? Bueno, a ver con dónde estamos... Por aquí. Esto mismo. A ver... Sí. El de Roirmo, Siquier, Alberto Magno... Lo tenéis en la página 389. Os lo pone la 389 al final. A veces su inmensa erudición aristotélica no consigue organizarse en una síntesis congruente y armoniosa, pero es indudable el mérito que tiene de poner en circulación una cantidad incalculable de ideas que fueron así conocidas por los pensadores de la época. Y Aristóteles se convirtió en algo que se podía explicar. Estudiar y utilizar fácilmente. Es decir, él es el gran difusor de la filosofía aristotélica. Bien. Por resumir, alma-intelecto. El alma es sustancia y el intelecto es individual como el alma. Dentro de esta alma hablará de los entendimientos. Hemos dicho que agentes, el entendimiento agente es el que hace, es la esencia del alma. Y el entendimiento posible es la existencia del alma. Fijaros que os he puesto acto-potencia. ¿Os acordáis de Aristóteles? El paso de la potencia al acto. Pues era eso, ¿no? El entendimiento posible es el alma en sí y el agente, el que hace las cosas, es la esencia del alma. Aquí lo que intenta es salvar la diferencia entre la no existencia de alma y demás. Bueno. El alma y el intelecto. Alberto, ¿puedes? ¿Puedes negar que el alma esté compuesta de materia y forma? El alma es en sí una sustancia, no un acto. Y esto quiere decir que está compuesta al mismo tiempo que inmaterial. La composición de las sustancias inmateriales. El caso del alma humana es... Os lo he puesto el resumen aquí. Esto lo tenéis en la página 392. Hemos llegado a San Agustín, que era Santo Tomás, que si no... Luego, otro autor, en la 393. Roger Bacon. Fijaros que Rogerius Baco, monacus in Anglia, profesor de Oxford y París, y se hace franciscano. Tiene tres obras. Fácil de acordarse. El trabajo mayor, el menor y el tercero. Uno, dos y tres. Escribió época que fue condenada al año siguiente, fue encarcelado, razón y experiencia. Lo más destacable fue sin duda su dedicación a todas las ciencias conocidas en su tiempo, convirtiéndose en un verdadero investigador y experimentador. Aplicó la matemática a la física, fabricó instrumentos ópticos, fue alquimista, astrónomo y lingüista. Tened en cuenta que la alquimia, el último gran alquimista, o el último no, uno de los últimos gran alquimistas al que dedicó más que a la ciencia fue Newton. La alquimia hasta el 18 era una rama más de la ciencia, una investigación más. Esta gente lo hacía por muy monacales que fuesen. Le daban alquimia. Le daban alquimia, ¿no? Bueno. Básicamente tenemos tres formas de saber. Un principio que es por la autoridad. Magister vinci. Lo ha dicho Dios o lo ha dicho quien sea. Otro, lo que nos dicta la razón, que podemos deducir. Y un tercero será experimentar. Y fijaros que la experiencia es la fuente principal de certeza. Porque sí es palabra de Dios, pero tiene su verdad y nosotros tenemos otra. La razón se puede equivocar. Entonces, ¿qué hace un científico? Si no lo veo, no lo creo, ¿no? La experiencia. Entonces él es la fuente principal. ¿Qué ocurre? Tras estudiar las ciencias, la ciencia experimental le permite conocer la verdad, obtener resultados y construir máquinas. Esta gente ya ha empezado a hablar de coches y cosas de estas. Vale. Os lo pone la página 395. Asegura, va y con estaña construidas máquinas que cambiarán considerablemente las condiciones de la vida humana. Dos puntos. Lámparas perpetuas, explosivos, navíos sin remos ni velas, vehículos que se desplacen por sí solos, aparatos voladores, aparatos elevadores, máquinas sumercibles, puentes sin pilares. Todo eso lo dijo este hombre. Lo tenéis en la 395, en el punto 3, al final de todo. Bien. En cuanto os hablo por aquí, transformar la cristiandad, con esto acabamos este tal. Frente a las falsas religiones, que evidentemente eran las otras del libro, una apologética basada en la ciencia para deslumbrar a los no creyentes. No creyentes. En este punto, vendría a ser una especie de lo que hacía Ramón Llull. El arte de Llull, simplemente lo que quería es, a través de la lógica, una lógica perfecta. Y convencer al infiel, que esto era lo típico de la época. Uso de la fuerza militar, si no te convenzo te venzo. También suele ser habitual, tampoco hay mucho problema, ¿no? Y la creación de una república, fijaros, república cristiana regida por la sabiduría espiritual. Es decir, ese mundo platónico-aristotélico del gobierno de los mejores y todo esto, rezuma, por mucho que fuese cristiana, no podía decir otra cosa, pero rezuma ese mundo clásico. Estamos en una época en la que, y lo veremos la próxima semana, se pone en duda al Papa. En el siglo XIV el papado fue para darle de comer aparte. Que si a Viñón, que si no sé qué, que si todo esto. Entonces el Papa cayó en desgracia frente al pueblo, ¿no? Entonces apareció ese revisionismo que lo veremos la próxima semana. Bueno. Muy bien. Básicamente estamos hablando de ciencia, parece que es un científico, pero claro. Sí, la tutoría... La tutoría, si no os han avisado yo os mandaré un mensaje. La tutoría es el jueves. El viernes es fiesta, pedí que la cambiasen y lo que no sé, no sé si me han dicho, es que ahora no me acuerdo porque me lo comentaron, tampoco lo he confirmado, yo lo preguntaré el lunes, que como hay, claro, todo lo del viernes se tiene que hacer los jueves y no sé si me han tenido que alterar un poco las cosas. No sé si sería a las cuatro y media o a las cinco y media, no lo sé. O lo confirmo el lunes. Esto. Bien, la ciencia es para la salvación. Es decir, todo este mundo científico es para la salvación del ser humano. Con este planteamiento de Alberto Magno y de esta gente, en el que ya vemos que están hablando de ciencia, bajo la religión pero ciencia, aparece la figura de Santo Tomás. Santo Tomás es el que sintetiza toda la escolástica cristiana, árabe y judía. Y lo veremos en las cinco guías aristotélicas de Santo Tomás. Bueno, en 1243 ingresan los dominicos, estudian Monte Cassino y en la Universidad de Nápoles ingresan al tal. Y aquí tenéis, os he puesto un poco su texto vital. En el 45, en el 43 ingresan los dominicos, dos años después están París y estudia con Alberto Magno. Donde va con él, Alemania, porque Alberto Magno es alemán. En el 50 es ordenado sacerdote, dos años después ya está dando clases en París, cuatro años después doctorado en teología y profesor de filosofía en la Universidad de París. Llama la atención del Papa y es nombrado consejero de Alejandro IV. Unos años después, pues controversia con Sigier de Brabante, con los aberroístas, que lo hemos visto antes. Marcha a Nápoles y cuando en el 1274 marchaba al concilio de León, al que asistió Ramón Llull, enviado enferma y muere en un monasterio. Bueno, pues este personaje se le atribuye en más de 800 obras. Seguras, vamos, un 5%. O sea, ya así. Vale. Sus dos obras, sus dos magnas obras son la suma contra gentiles. Los gentiles eran todos aquellos que no son cristianos. Es decir, cómo convencer a los sabios. Básicamente musulmanes sobre la verdad de Dios, del Dios cristiano. Y la suma de teología. Una sobre Dios. Otra sobre la vida moral del hombre. Lo que Kant diría la razón práctica. Y la otra sobre Cristo, que no pudo acabar porque le sobrevino la muerte. ¿No? Bueno. Fijaros que siguen el planteamiento de la lucha contra el musulmán y el estudio y el análisis de Dios. Vale. ¿Qué hace? En primer lugar, va a hacer lo que se hace en el Renacimiento. En el Renacimiento, cuando cae Constantinopla... ... Pocos años antes ya habían empezado, que se las veían venir. Los sabios, los de Grecia, llevan las obras originales de Aristóteles y entonces se hacen revisiones. Es cuando se purifica todo esto. Pues él hace lo mismo. Quiere leer al Aristóteles directamente. Nada de por obras árabes o por otra cosa, ¿no? Hay las tradiciones de Moerbeck que va a utilizarlas. Bueno, entonces, ¿con esto qué va a hacer? Lo que os he puesto aquí. Adapta la filosofía aristotélica a la escolástica desde el conocimiento de su obra y el conocimiento de los padres de la iglesia. Es decir, estaba capacitado para poder unir lo que decían los padres de la iglesia, que eso iba a misa, nunca mejor dicho, y lo que decía Aristóteles. Él tenía capacidad para hacer la síntesis de todo ello. Así como Alberto Magno dio a conocer a Aristóteles y hizo, pero no llegó a esa síntesis. Pues vamos a ver cómo es la síntesis esta. Bien. Fundamental la teología cristiana en el magíster, ¿vale? Pero se encuentra una serie de problemas. Los modos de ser y su teoría de sustancia, ente y motor inmóvil como filosofía primera, lo que vimos, ¿no? Ese es el superior y demás, que es la sustancia, que no es todo eso. Vale. Lo enfoca, como no puede ser de otra manera, desde Dios. Y demostrar su existencia y esencia, que son los cinco puntos, las cinco vías anatomistas. Demostrar la existencia de Dios. Y voy a utilizar cinco argumentos. Y luego, cómo interpretar de forma racional la ética, el alma, los dogmas de la Iglesia. Vamos, que estaba aburrido, porque se metió en un berenjenal de tres pares de narices. Es decir, quería dar una revolución, quería... Porque la sociedad también iba por ahí. Estamos en la Baja Edad Media, estamos en el gótico, estamos en el comercio. Las ciudades, es el momento que ya estamos llegando. En Italia ya estamos prácticamente en el trechento. Es decir, estamos ya en un mundo cambiante. Entonces, hay que adecuarse. Bueno. ¿Qué ocurre? Tenéis aquí la doble verdad y demás. Bien. Miremos esto, que si no, Santo Tomás. Tenéis aquí los platónicos y demás. Adopta Aristóteles que afirma que nuestros conocimientos parten de los sentidos en la experiencia sensible. El objeto de nuestro entendimiento no son las realidades inmateriales, sino el mundo material. Vale, muy bien. Ya tengo un punto. Doble consecuencia. ¿Cómo se construye la filosofía? Pues como hacía Aristóteles. Acordaros cuando os dije que el conocimiento, en la escalera esta que os dije, de Platón es de arriba para abajo, pero con Aristóteles es del escalón de abajo hacia arriba. Pues Santo Tomás va a intentar seguir el modelo aristótelico. Es decir, muy bien, la naturaleza. Mi razón me lleva a esta naturaleza. Vamos a ver qué tiramos por ahí. No, las realidades sensibles. Bien. Y esto le llega a una conclusión lógica, que el conocimiento de Dios es imperfecto, porque no podemos verlo, y será analógico. No digital, ni 8K ni nada de eso. Analógico significa de forma análoga. Es decir, por comparación de alguna manera. ¿Qué conocemos? Tenemos las realidades limitadas e imperfectas que sabemos que proceden de Dios. ¿Veis que es exactamente el mismo planteamiento de Aristóteles para llegar al conocimiento? Aristóteles parte de los objetos más tontos para, estudiándolos, ir subiendo para intentar entender ese Dios, ese motor inmóvil. Pues, lo mismo, básicamente estamos en ello. Vale, pues ya tenemos ahí, ¿no? La filosofía de abajo para arriba. Vale. Si se hace de abajo para arriba, tenemos la razón. La razón llegará a un momento que quedará cortada. No llega más. O sea, cuando ya no podamos ver nada, no podamos tal, ya no puede llegar a más. Y eso lo tiene claro. La razón solo puede moverse dentro de los límites del conocimiento natural acerca de todo. El hombre del universo. No hay semana que no salgan noticias del universo. ¿O no? Siempre están. Ah, hemos descubierto. ¡Uh! En los agujeros negros. Resulta que hay una cosa que es la pera. Esto nos va a arreglar el mundo. Pero llegamos hasta ahí, no llegamos a más. No entendemos nada más, ¿no? Vale. Muy bien. La razón nos llega hasta un nivel. Entonces, ¿lo demás qué hacemos? Pues esa parte es la que queda para la fe. La fe. Porque la fe nos lleva más allá de ese conocimiento y nos acerca a lo que es Dios y al destino del ser humano. Tened en cuenta que el ser humano tiene, se empeña en que el ser humano como tal, la humanidad va hacia algún sitio. Lo veremos en la segunda parte de la filosofía. Todos Hegel. El camino del ser humano es hacia la felicidad, es hacia no sé qué. Cantabria. Marx. Lo mismo, ¿no? Una sociedad justa, tal. O sea, el ser humano está avanzando y se supone que hacia mejor. Yo lo dudo muchas veces, pero bueno. Es así, ¿no? Vale. Bien. Esta fe cristiana, esta fe que nos habla de Dios y el destino del hombre, es algo que se añade gratuitamente a la razón humana y nos permite entender mejor el mundo. Es decir, nuestra razón llega hasta un nivel. Y lo que no entiendo, la fe me lo dice. Y me permite una mayor comprensión. Vale. Muy bien. Entonces, se encuentra con un pequeño problema. ¿Qué diría aquel? Hay contenidos que son del ámbito de la fe y hay otros que son del ámbito de la razón. A mí la fe no me sirve para nada para estudiar un fenómeno óptico. Por mucho que los franciscanos digan que esa iluminación es una iluminación divina, pero tendrá unas causas físicas, ¿no? Pero hay otros que eso no me sirve para entender un concepto divino. Entonces se plantea esa cuestión. Tengo un ámbito razón, un ámbito fe. Y luego, no sé si hacen hoy en día, pero yo me acuerdo cuando hacíamos la teoría de conjuntos y todo eso en majes, entonces había elementos comunes, había zonas comunes en que la razón y la fe chocaban ahí, ¿no? Bueno, fijaros que la fe y la razón hay elementos comunes y tiene una zona de intersección, esta fe y esta razón. Vale. ¿Qué sentido tiene la existencia de elementos comunes? Y él hablaba de carácter circunstancial de estas razones, verdad desastrosa. Las razones asequibles a la razón, impuestas por la autoridad de la fe. ¿Para qué? Para aquellos cuya razón no llega, a través de la fe lo entienden. Esto, fijaros, que lo hemos visto en algún autor musulmán. Y las de carácter estructural, que proceden de la fe y la razón, es decir, de la teología y filosofía, que ya es pensamiento, pues estas dos las va a diferenciar, para que no choquen, por el acceso... ¿A qué contenidos? La razón, el mundo material, y la fe, el mundo teológico. Vale. Muy bien. Ya tengo los dos ámbitos. No es la doble verdad de Averroes, ¿eh? Simplemente he razonado que me llego hasta cierto punto y ahí lo otro. Muy bien. Por lo tanto, como no es lo mismo en esencia, son autónomas. Y como son autónomas cada una, pueden colaborar entre sí. Son autónomos y colaboramos. Bueno, ¿cómo colabora la razón con la fe, básicamente? Pues, la razón es la base de la ordenación científica. Y santo Tomás quiere que la teología se organice de forma científica. Por lo tanto, la ciencia serviría para la teología. Porque la organiza, la estructura. La razón colabora también con la dialéctica propia de la dicha razón. Y datos científicos o aportaciones filosóficas pueden ser útiles... ...para algunos artículos de la teología. Es decir, algunas cosas, la naturaleza, la observación, me puede decir... ...pues sí, tiene que ser así, ¿no? Fijaros que lo hace desde, pero, desde autonomía de cada una de ellas. Al revés. ¿Cómo colabora la fe con la razón? Y aquí, pues ya había empezado muy bien y aquí ya la lía. Porque la fe colabora con la razón, básicamente diciendo, yo mando. En cuanto haya un punto de choque, la verdad es la mía. Es así. ¿Por qué vamos a discutir? ¿No? La fe sirve a la razón de normas criterio extrínseco. Por lo que en caso de llegar la razón a conclusiones incompatibles con la fe, las conclusiones serán falsas. Y así me libro de la hoguera y de que se metan conmigo. Por lo tanto, la razón tiene autonomía hasta cierto punto. Bueno, en cuanto al mundo material, el mundo material acepta la potencia acto-aristotélica, el hilemorfismo, la materia-forma, entre sustancia y accidente, las cuatro causas del mundo aristotélico. Acepta todo eso que lo mete en el mundo cristiano. Vale. Define a Dios según... Conceptos aristotélicos. Dios es acto puro, es lo más perfecto que hay. Puro pensamiento. Y Dios creó el mundo. Es la otra afirmación. Bueno. El hombre, en cuanto a la antropología, una sustancia única compuesta de cuerpo, yo y alma. Y intentará hacer una síntesis de estos. ¿No? Pues, ¿veis un poco por dónde va? Que coge Platón y Aristóteles y vamos juntando. Vale. Pues lo dejamos aquí. Y el próximo día ya veremos las cinco vías, todo esto, lo veremos rápidamente y veremos un... A Duns Escoto y sobre todo a Guillermo de Ocampo. Con eso ya veremos. Pero ¿veis por dónde va la filosofía ya? Ya estamos en el siglo XIV. Prácticamente ya es otro pensamiento. Ya va por otro lado. Bueno, pues lo dejamos aquí. El jueves que viene, a ver si el lunes me comentan exactamente, si lo puedo pedir luego pero creo que ya no estarán, el horario que me dijeron y os lo paso. ¿De acuerdo? ¿De acuerdo? Sí, os mandaré el lugar. No, os mandaré, entraré directamente y os mandaré un correo directo porque en lugar de colgarlo en el foro os mandaré, como puedo mandar un directo a uno a todos los alumnos, os mandaré el correo a todos diciendo, vosotros en teoría tenéis Ágora. En Academus, cuando entras a Academus te vas a Ágora. Con esta asignatura de primero te mandan allí. Y yo lo que voy a hacer es que os mandaré el correo. Y yo lo que voy a hacer es enviaros un correo. Yo lo que tengo hecho es, por ejemplo, en Ágora y tal, tengo el correo redirigido a uno de los míos. Así no tengo que estar entrando. Sí. Por eso. Pues lo haré de esta manera, os avisaré. Vale. Pues muchas gracias. Hasta el jueves.