Bueno, buenas tardes y la verdad es que bienvenidos a la UNED, a nuestra universidad, a la universidad de aquí que estamos en Villarreal pero que es la universidad de toda la provincia y de toda España porque somos una universidad que está vertebrada a través de todo el territorio nacional. Y bueno, estoy haciendo un speak, ¿sí? Lo estoy haciendo. Bueno, porque hay mucha gente que me decía que no conocía la UNED. Pues bueno, pues yo si me dejáis mi minitud de gloria como profesor de aquí de la UNED, pues daros la bienvenida a esta universidad. Las gracias por haber asistido y por estar aquí con nosotros en esta convocatoria. Ya sé que no venís a verme a mí, lo tengo claro. Es decir, sé que venís a ver a Cindy, lo tengo claro por los formularios, ¿vale? Y estoy encantado de que hayáis venido y de que Cindy haya aceptado el estar aquí con nosotros en una conferencia tan importante como la que hoy vamos a abordar. Eso que vaya por delante. Así que lo primero, la bienvenida. Quiero también dar las gracias a toda la gente que nos está siguiendo. Es mucha la gente que nos sigue en directo. La verdad es que tienes muchísimos seguidores, Cindy, y eso se ha notado muchísimo en las solicitudes. Pues hay mucha gente, además de todos los amigos y amigas que tenemos también de este espacio. Este es un espacio que lleva ya 12 años en marcha. Y bueno, la verdad es que hoy es un día muy gratificante para todos los que formamos parte de la comunidad académica de la UNED y los que organizamos este espacio en concreto de conferencias blancas, porque nunca habíamos tenido un auditorio tan representativo, es decir, con un perfil como el que hoy tenemos aquí. Así que la verdad es que estamos muy contentos por parte de la organización. Quiero también dar las gracias a la Corporación Municipal, a los miembros que están por ahí, porque hoy hemos roto un poquito todos los esquemas, pero la verdad es que veo a varios componentes, miembros de la Corporación Municipal, por el apoyo que durante estos 12 años nos han dado y que ha posibilitado que podamos seguir en este espacio. Como no, a mi directora, que está aquí también, María Rosario Andreu, que también fue quien... quien apostó desde el primer momento por este espacio y hoy es día de reivindicar su apuesta y que continúe con ello y que esperemos que continúe. Un poquito de presión también para ella para que continúe apostando, ¿no? También a la Diputación, que es quien mantiene este espacio también a través de su consorcio, a los medios de comunicación que hacen posible que estemos no solamente aquí en directo, la gente que está ahí presencial, sino que mucha gente nos pueda ver ahora en online, pero también en digital. Así que muchas gracias a todos ellos. Y como no, también al equipo administrativo y técnico que tenemos en la UNED, que hace posible que hagamos este espacio también. Por ahí veis a Raúl, pero abajo está Isma, está Lola, también tenemos a Laura, todo un equipo que son los que al final también hace posible. Al final nada es porque sí, todos trabajamos en equipo y eso es lo que hace posible. Quiero también dar las gracias en particular a Adri, a Sepovi... a... Adrián, a Pesovil. A Pesovil, que siempre lo digo mal. Sí, te lo he visto aquí apuntado yo. A Pesovil y a los miembros que también nos han querido acompañar. Muchísimas gracias por estar aquí con todos nosotros y nosotras. Y bueno, ya me... estoy un poco nervioso. Llevo 12 años de verdad con esto. Pero hoy estoy muy nervioso. Es decir, ni es mi... ni es el público... ni son mis alumnos ni alumnas que tengo yo normalmente. Bueno, sí, perdón, sí que tengo algún... Mercedes, te he visto por ahí, Mercedes. Hola, Mercedes. Ni es tampoco con... de verdad. Entonces me siento como un poco abrumado, pero muy abrumado, ¿no? También conocer a Cindy a través de... de cuando preparas una conferencia empiezas a investigar, claro. Yo tengo que dar las gracias a Rosa. Estoy rompiendo todo el protocolo, pero fue Rosa... Rosa, además de ser una persona encantadora que yo conozco, amiga de este espacio donde ha participado en muchas ocasiones, fue quien me recomendó a Cindy. Conocer a Cindy y meterme en el mundo de Cindy, bueno, ha sido una eclosión, la verdad, ¿qué voy a decir? Y entonces aquí viene la tercera parte, que es mi concejal. Mi concejal de Igualdad, de Servicios Sociales y la primera teniente alcalde de Villarreal. Le digo, por favor, ayúdame, pero yo necesito que Cindy venga a este espacio. El mundo de Cindy ya no puedes apartarte. Entonces, ¿ya? ¿De qué manera? Es decir, pues claro, es la colaboración de todos. ¿Me vas a pedir matrimonio y todo? ¿Me vas a dar así a rodillas y me pides matrimonio? No, pero es verdad que ha sido gracias a la ayuda y el esfuerzo de muchas instituciones, el esfuerzo de Cindy por venir porque ella, si lo quiero lo dirá, pero bueno, ha tenido que ajustar mucho la agenda para poder estar aquí presencialmente, que era lo que... poder verte, estar contigo. Así que muchísimas gracias. También a Rosa. Rosa, que viene corriendo también del último pleno ayer que tuvo en Cors también potente, que luego ya dirá lo que te haga decir. Y bueno, y nuestra concejal que, bueno, pues tiene una agenda también, os lo digo yo porque la llevo yo. Es decir, además de ser el profe de aquí, soy su secretario, entonces llevo su agenda y sé el esfuerzo que he tenido que hacer también para poder estar aquí. Así que igual que el de todas y todos vosotros que estéis aquí. Bueno, he roto todo, ¿no? Bueno, ya da igual, pero sí que me gustaría un poco ahora bajar un poquito. ¿Por qué este tema que hoy tratamos aquí? Bueno, estamos en el mes de marzo, aunque sea el día 31, como me decía Rosa Juanlu, el 31 es marzo. Digo, es verdad, el 31 es marzo. Entonces estamos en el mes de marzo. Durante el mes de marzo hemos hecho unas diferentes actividades dentro de la UNED, pero siempre dejábamos una conferencia. Siempre ha sido de estos 12 años como, bueno, pues una insignia que el mes de marzo siempre dedicábamos al 8M. Bueno, no había manera, pues hemos llegado al 31. Entonces esta conferencia la enmarcamos dentro de esas actividades y el tema que tratábamos era un tema bastante delicado, complejo, con muchas miradas, con muchas aristas, pero donde había una idea y eso, como profesor de filosofía y ciencias políticas, ha sido algo que me ha venido. En la prostitución y en la pornografía no hay libertad. La libertad es la condición sine qua non para que el ser humano se pueda desarrollar. ¿Eso? Es algo que tanto, ya lo veamos desde un punto de vista desde la ética, ya lo veamos desde un punto de vista de los derechos civiles, la libertad es lo que nos diferencia del resto de animales. Nosotros podemos elegir. Cuando hay una privación de libertad, el sujeto queda cosificado. Perdonad que introduzco un poquito estos conceptos, pero me parece que es importante. Queda cosificado. Lo veamos desde una perspectiva o de otra. Y ahí perder esa posición. La libertad nos degenera en algo que no somos y no nos podemos desarrollar. Por lo tanto, poder abordarlo con voces autorizadas nos parecía que era muy importante. Por supuesto, desde su visión, eso no niega a decir otras visiones, otros argumentos, pero sí que nos daba la impresión de que debíamos enfocarlo de una manera y hablarlo con las palabras y con la claridad con la que Cindy se expresa y se dirige. Por otro lado, Rosa Pérez es una abogada, es directora del Instituto de la Mujer, es una de las cargas más visibles del feminismo valenciano y sobre todo en una ley que nos parece muy importante y que está dando mucho que hablar, pero que nos parece que es importante que nos la expliquen y que nos la desarrollen, como es el abolicionismo. Quiero darle las gracias, no solamente por eso, sino también por su valentía y sobre todo porque sus convicciones nunca las pierdes, Rosa. Yo desde que te conozco has mantenido siempre tu posición, la tienes muy clara, a pesar de los pesares y muchas veces es complicado de poder mantenerla. Y por último, a doña Silvia Gómez, que bueno, yo qué deciros, os voy a contar solamente una cosa y acaba mi minuto de gloria, luego ya doy paso de verdad aquí en toda. Silvia hizo una apuesta muy importante, nuestra concejal, por lo que es la escritura. La Escuela de Igualdad es un proyecto que se lanzó en la pandemia, funcionó y funciona muy bien, pero es verdad que ha hecho una apuesta muy particular, es decir, en estos dos últimos años tenemos a nuestra jefa de servicios de igualdad, que la he visto en algún sitio. ¿Dónde está Ana? Ana, Ana, Ana. Y os voy a contar mi experiencia. Yo animo a todo el mundo de Vila Real, bueno, puede apuntarse más gente, pero a la gente de Vila Real. Yo empecé yendo porque tenía que ir, porque como ella es la concejal tenía que ir, ¿vale? Es el primer año. Fui porque, Juan, ¿tienes que venir? Vale, claro. Pues si te dice que vayas, pues ella es mi jefa, voy. Y yo iba allí simplemente a enchufar y yo empecé a escuchar todo. Sí, a enchufar los cables, me decían, no, a ver si ella enchufa el ordenador. A mí se me abrió un mundo porque, claro, hablar de igualdad, sí, desde un concepto y nos lo dice alguien que trabajamos con los conceptos, con las ideas, a través de la filosofía, es sobre todo eso, cómo desarrollamos nuestras ideas, nuestro pensamiento. El tema de la igualdad. No solamente es algo que es obligatorio o algo que a mí me han enseñado en la escuela o que estoy aprendiendo en la escuela, con esas famosas gafas de violeta, ¿no? Sino que es una moda, es una forma de entender la vida. Para mí ha supuesto, es decir, el tener que renegar de una posición de privilegio personal, y esto animo a todos los hombres, es el espacio, lo he dicho privadamente, esto lo sabe la gente de mi entorno, pero para mí ha supuesto la renuncia a un privilegio, que me otorga la sociedad patriarcal, pero cada vez me libera. Yo me siento en un espacio que estoy muy cómodo, me siento abrumado por la gente joven que estáis aquí y por mucha gente que no conozco. No me siento abrumado porque sea un público mayoritariamente femenino. Me siento muy cómodo y, de hecho, me gusta que tengáis la palabra, como decía Escobar, es el momento de las mujeres, pero es el momento en el que los hombres estemos detrás, apoyando. Porque os toca, es el momento del protagonismo vuestro, no es el nuestro. El nuestro ya lo hemos tenido y nos lo dan, y nos lo dan, y nos lo dan. Yo solamente decir que gracias a la Escuela de Igualdad he encontrado un espacio liberador. Y animo a todos los hombres que se apunten, que se mantengan y que escuchen. Porque vale la pena renunciar. Yo la verdad es que vale la pena renunciar a esas prebendas que nos da el patriarcado por ser hombres, a esas posiciones de privilegio en relación a la mujer. Para encontrar de verdad un espacio más igualitario y más real. Porque al final la igualdad es una realidad, porque nos damos entre hombres y mujeres. Nada más. Eso es lo que quería compartir. Y ya doy paso, Sidney, para ti. No, perdón, perdón. Me he colado. No, le doy el paso primero a nuestra concejal. Mira, la conferencia va a ser... Disculpad, eh. La conferencia va a transcurrir de la siguiente manera, nuestra concejal. Va a ser la primera en intervenir, luego, a continuación, será Cindy y cerrará doña Rosa Pérez, ¿no? Para que podamos encontrar todo el marco, tanto el testimonio, las políticas que se hacen aquí, como también el marco donde podemos reflejar muchas de las leyes. Porque al final, las leyes son muy necesarias. El marco normativo es necesario. Podemos hablar de igualdad, pero como no esté regulado, es que es muy complicado. Si lo dejamos a que sea interpretado por los demás, es muy complicado. Es decir, el marco normativo es fundamental. Así que, por eso la importancia de que Rosa nos explique en qué momento estamos. Bueno. Muchas gracias, Juanlu. Bueno, la verdad es que nunca he visto a Juanlu tan emocionado y que le cueste salir las palabras. Y será por algo, ¿no? Cindy, yo creo que una de las culpables eres tú, pero también una de las culpables y los culpables sois vosotros, ¿no? Los participantes en esta jornada. Es... Y se lo decía a Cindy antes. Y a Rosa. Antes, bueno, que estábamos aquí sentadas mientras estábamos esperando a que llegaseis todos y todas las asistentes. Que me ponía los pelos de punta. Es el ver este salón de actos lleno de tanta gente joven. De mujeres jóvenes y también de hombres jóvenes, ¿no? Que estáis aquí. Es muy difícil el poder hacer una actividad como esta, de cualquier concejalía, en la que participemos los políticos y las políticas. Y que se llene así y sobre todo... De personas jóvenes. Porque, le comentaba, que los políticos y las políticas, pues ahora, hoy en día, pues parece que no estamos tan bien vistos. Y trabajamos muchísimo, ¿eh? Y trabajamos en la línea de poder mejorar vuestra vida. Y yo digo que, aunque Rosa está trabajando en las Cortes, de hecho también ha llegado una compañera, Sabina Escrís, que aquí de Vila Real, que también es diputada autonómica, que ha llegado también con el aliento. Tenemos compañeras de aquí del Ayuntamiento. De Vila Real. Y lo decía en la comparativa de que la política municipal es la más cercana al ciudadano y a la ciudadana. Es donde recogemos vuestras necesidades más próximas y después las que tienen que hacer las leyes. Y son las a nivel autonómico y a nivel estatal para poder mejorar la vida de los ciudadanos y ciudadanas. Mira, hoy vamos a hablar de un tema que la verdad que me impresiona, ¿no? Que os preocupe, ¿no? Que os preocupe o a lo mejor... Que os interese, ¿no? O a lo mejor veis que puede estar incluso de moda o está a la orden del día, ¿no? Que es lo de, bueno, la pornografía a través de internet o la prostitución. Nosotros desde la Concejalía de Igualdad, como ha dicho Juanlu, yo soy la concejala de Igualdad del Ayuntamiento de Vila Real. Y vimos un reto, el poder trabajar en esta línea, ¿no? El tema de poder educar a las jóvenes y a los jóvenes en este tema. El tema de igualdad. Porque si estamos educados en igualdad, seguro que no existiría el tema de la pornografía o la prostitución. Cuando nosotros hacemos unas reuniones trimestrales más o menos con los coordinadores de igualdad de los centros educativos de Vila Real, tanto de primaria y de secundaria, y ahí planteamos las actividades que podemos hacer a lo largo del año de diferentes ámbitos. Tenemos jornadas de formación para el profesorado, porque es muy importante que el profesorado esté formado en igualdad. Es importantísimo, porque como dice Rosa, si no enseñamos en sexualidad en las escuelas y los centros educativos, pues no vamos por buen camino. Y en esas jornadas lo que se extrajo de los profesionales y las profesionales que fueron allí fue una preocupación importante, porque ahí nos llegó con una preocupación en la que la pornografía estaba. A la orden del día estaba muy, muy cerca de los jóvenes y las jóvenes. Incluso hablaban de las edades de ocho años que puedan acceder a la pornografía a través de internet con ocho años. Yo tengo un niño de trece años y me preocupa. Y por eso, desde el Ayuntamiento de Vila Real, no por mi hijo, sino por todos y por todas las que están aquí. Y yo, como soy concejala. De Vila Real, evidentemente tengo que trabajar por los ciudadanos y ciudadanas de Vila Real. Y creo que vendréis mucha gente de otras poblaciones que no son Vila Real. Imagino que también en vuestras ciudades también se trabajará en esa línea. Tenemos que trabajar por educar en igualdad y por formar para que nuestros niños y niñas no les llame y no aprendan la sexualidad a través de la pornografía. Porque la pornografía no es sana. Tenemos que aprender una sexualidad saludable. Y por lo tanto, la pornografía... La pornografía no es. Entonces, os animo a seguir luchando porque los que estáis aquí estoy segura que sois unas luchadoras y unos luchadores feministas que trabajáis por la igualdad. Agradecer, por supuesto, a Cindy que esté aquí en nuestra ciudad y que nos cuente lo que ella cree. Porque cada día yo la he visto en las redes. No soy muy seguidora. Yo soy un poco de estas de la prehistoria del papel y tal. Pero bueno. Pero bueno, me ha enseñado muchas cosas porque la he entrado y he visto que la verdad que hay unos comentarios muy, muy importantes. Y Rosa, por supuesto, compañera, muchísimas gracias también por estar aquí en Vila Real. Y bueno, yo creo que ya con hacer de telonera de estas dos mujeres tan tremendas, pues bueno, yo creo que ya es suficiente lo que tengo que decir. Muchísimas gracias. Os lo digo de corazón por estar aquí. Era solo darle a Lon. Bueno, qué fuerte es que lleve ya tantos años poniéndome delante de una pantalla hablando de temas tan duros y sobre todo entrevistando a gente de temas tan duros. Y que ya para mí sea como algo absolutamente normal, es decir, como si fuese un trabajo absolutamente normal. Y aún así, qué difícil es para mí siempre tener que sentarme, ya no porque haya gente, mucha gente, poca gente, sino por tener que hablar en una ponencia que lleve, como título, que tenga dentro de su título la palabra prostitución. Además, me gusta empezar así porque, bueno, creo que lo principal para que os pueda hablar de abolicionismo, porque realmente no os voy a hablar de prostitución y pornografía concretamente, creo que es importante empezar contando mi historia y presentándome, aunque me imagino que muchas de vosotras si habéis venido, como dicen en los formularios, por haberme a mí, pues muchas de vosotras seguramente ya sepáis un poco. Antes de nada me voy a presentar, me llamo Cintia, en redes sociales soy Sinita Canassi, soy mujer, soy madre de un niño que se llama Mauro, muy chiquitín, un año y medio, de una niña que se llama Minerva, de tres años y medio. Como ya os he dicho, soy presentadora, tengo ahora mismo varios formatos, estoy en un programa que se llama Queridas Hermanas. ¿Veis Queridas Hermanas? ¿Quién de aquí ve Queridas Hermanas? Levantadme la mano, por favor. Y esto, ah, esto la cámara no lo ve, ¿no? Para pasárselo después a Podimo. Pero bueno, también tengo otro programa que se llama Las Uñas, que no he podido venir aquí antes porque acabamos de grabar la séptima temporada, o sea que estoy súper, súper contenta. Bueno, vais a flipar con la séptima temporada, es maravillosa. Y también con el último capítulo de Queridas Hermanas. Bueno, voy a hacer un spoiler. No voy a contar, Candela, no te preocupes, no voy a contar quién es la invitada. Pero voy a hacer un especial la semana que viene de La Diferencia de Edad. Era un programa que no estaba preparado y digo, bueno, pero que aquí hay unos señores que van arrastrando los huevos por el suelo, de estos que casi caminaran por la playa, dejarían las huellas de los pies y una en el medio, ¿no? En plan así, pues así, ¿no? Pues como hay estos señores que están intentando blanquear las relaciones con diferencia de edad, yo he dicho, sí, que van a hacer un programa también defendiéndolo, pues yo con mi coño voy a otro. Bueno. ¿Vale? O sea que la semana que viene hay un especial de diferencia de edad. Ese es el único spoiler que voy a hacer, pero luego hay otro capítulo con una invitada que, bueno, es que no os la esperáis. Dicho esto, ah, bueno, qué coño, yo antes de esto quería decir, bueno, perdón, porque estoy en una universidad diciendo todo el rato palabrotas, ¿eh? Me perdonáis. Yo quiero decir, quiero dedicarle esta ponencia a una seguidora, ¿vale? No quiero decir cómo se llama, pero, y no me quiero poner a llorar, me ha dado una sorpresa increíble hoy presentándose aquí. Con un ramo de flores. Es una seguidora muy especial, todas le habéis dado muchísimo apoyo, habéis hecho crowdfundings para ayudarla. Gracias a vosotras su caso se le ha dado voz y se está haciendo justicia. No quiero mirarla porque tampoco quiero que se sienta intimidada ahora mismo, pero de verdad te quiero muchísimo. Muchas gracias por estar aquí y eres lo que me da fuerza para seguir día a día y quiero que tu juicio salga lo mejor posible. Muchas gracias y un aplauso para ti. Por supuesto, qué pronto empiezo a llorar, madre mía. Sigo con mi presentación. Aparte de ser presentadora, soy divulgadora, hablo muchísimo sobre feminismo en redes sociales. Me han colgado el cartelito muchas veces de femistar, ¿no? De feminista que se, o de mujer que ha instrumentalizado el feminismo para ganarse la vida. Joder, si yo quisiera ganarme la vida, os puedo asegurar que no hablaría de feminismo. Pero vamos, o sea, desde luego, es decir, si tuviera que ganarme la vida con las redes sociales, para mí sería muy fácil explotar a mis hijos en redes, hacer muchas campañas de, yo qué sé, de Nutella, cosas así, ¿no? Y a tomar por saco, pero no, es que tengo eso y que me gusta que mis redes vayan en consonancia con mis valores, ¿no? Bueno, aparte también soy estudiante de una carrera, estoy estudiando Historia del Arte, Historia y Geografía. No es que sea súper dotada y me esté sacando tres carreras a la vez, es que donde lo estoy estudiando lo han unificado, ¿vale? Y también soy víctima y superviviente. Y también soy víctima y superviviente de violencia de género. Digo víctima y superviviente y es muy importante que se utilicen los dos términos de la mano, porque quiero recuperar una conversación que tuve hace poco con Ana Bernal, no sé si la conocéis, compañera maravillosa que se rompe el coño todos los días por nosotras, o sea que desde aquí un abrazo enorme. Y me comentaba la importancia, ¿no? Yo siempre caigo muchas veces en el error de decir yo soy superviviente de prostitución, soy superviviente de violencia machista, pero es que también soy víctima, ¿no? Es decir, ¿por qué esa dinámica que estamos empezando a llevar a cabo las feministas de no nombrar la palabra víctima? Es por las connotaciones negativas que tiene la palabra víctima, es por lo que el patriarcado nos ha enseñado siempre de no te hagas la víctima, no seas victimista, precisamente para que no le pongamos nombre a nuestros agresores, ¿no? Porque si nosotras no nos reconocemos como víctimas, no podemos señalar a quién ha ejercido esa violencia, ¿no? Al llamarnos a nosotras mismas supervivientes o al llamar a las mujeres que han sobrevivido a la violencia supervivientes, es como si esa violencia hubiese sido perpetrada por la nada, ¿no? Por la nebulosa. Es un poco como cuando se habla de prostitución y no se menciona a los puteros. Vamos a ver quién está violando a las mujeres prostitutas, ¿no? Los puteros. Vamos a empezar a abrazar el término víctima porque es una manera maravillosa de señalar también a las personas, a los agresores, ¿vale? Y bueno, he sido víctima y superviviente de... Ah, bueno, y también muy importante porque no todas se pueden llamar supervivientes porque hay muchas que se quedan por el camino. Esto es lo más importante. Entonces, soy víctima y superviviente de dos relaciones de violencia de género. La primera con 14 años, con un señor con sus testículos llenos de pelos. Es decir, 21 años. Ojalá hubieran existido las redes sociales en ese momento para yo ver esas red flags, sinceramente, no existía ni la palabra red flag, todavía. Esto pasó en el 2007, creo. Y fue una relación de violencia machista terrible. Hubo mucha violencia psicológica al principio, también mucha violencia física, pero nada que ver con la segunda relación de violencia de género. Directamente casi me mata, me he despertado en la ambulancia, he sufrido violaciones en pareja, me ha dejado embarazada puesta para intentar atarme y he tenido que someterme a dos abortos por mi violador. Y es muy importante que diga esto y que lo diga con estas palabras. Es heavy, ¿no? Igual me pongo a hablar de prostitución y me pongo a llorar, pero es heavy lo insensibilizado ya que estoy con este tema. Pero es muy importante y quiero decirlo, quiero explicarlo y quiero mostraros los detalles como escabrosos porque cuando sufres una relación de violencia de género es muy fácil que digas, bueno, ha sido mala suerte. Es muy fácil identificar qué ha sido un maltratador, ¿no? Cuando sufres más de una, ya empiezas a pensar, coño, pero es que entonces, ¿igual la loca soy yo? ¿Igual soy yo la que saca lo peor de ellos? ¿Igual es verdad lo que me llevan diciendo durante cinco años en total que he sido víctima de violencia de género? Y no. Es que con esa primera relación con 14 años o aunque hayáis tenido la primera relación de violencia de género con 30, da igual, esas relaciones no solamente nos han destruido, también nos han construido. Han construido unas ideas que están preparadas estratégicamente, de forma patriarcal, que nos han intentado enseñar lo que es el amor, que nos han intentado enseñar lo que es el sexo, que nos han dicho que la violencia es sexo y eso es lo que hemos aprendido y es lo que después hemos querido replicar y es el patrón que hemos querido buscar. Entonces, tías, violencia de género es una relación, son dos y son siete. No estamos locas, no nos lo hemos gustado. Los agresores son ellos. Sea una, sean dos o sean siete. ¿Qué más? También soy superviviente y víctima del sistema prostitucional. Empecé siendo menor de edad y empecé básicamente porque en la segunda relación de violencia de género que sufrí, pues bueno, yo vivía en una habitación alquilada, ya tenía una orden de alejamiento él conmigo, vivía en una habitación aún así, vivía en una habitación... Es curioso, ¿no? Porque fijaos ya en ese momento, evidentemente estaba la Ley Integral de Violencia de Género, que es maravillosa, que fue una conquista de derechos feminista, pero aún así tiene carencias y a día de hoy nos encontramos con que se está poniendo en juego, ¿no? Con que se está poniendo en riesgo. Pero bueno, tenía que soltar mi puñita. Y bueno, yo el caso es que viviendo ahí, viviendo en la habitación alquilada, lo vi como... Además trabajaba en un sitio sin contrato, 50 horas a la semana, lo vi como mi única salida y de hecho es que era mi única salida. Es decir, es que era mi única salida para poder decir, bueno, pues puedo ahorrar, yo qué sé, 1.500 euros en 15 días para poder alquilarme un piso de una habitación, una fianza, ¿no? Pero, ¿qué ocurre? Que es que yo me despido. La primera vez que fui allí, yo me desperté por la mañana, yo me vestí, yo puse un pie delante del otro, yo me metí en el metro, no había pistolas a mi alrededor apuntándome en la cabeza. Nadie me estaba presionando, nadie me estaba forzando, nadie tenía a mi familia secuestrada, nadie... Yo cuando llegué a esa casa de putas, la que era la proxeneta, no me dijo, pues ahora te quedas aquí hecho el pestillo. Y el problema es el discurso que nos han creado. Me han contado de lo que es la prostitución voluntaria, supuestamente, ¿no? Cómo las mujeres, una vez que estamos sufriendo esa violencia sexual diaria, nos abrazamos a ese discurso de prostitución voluntaria para protegernos, para no entender lo que nos está pasando, para sobrevivir. Básicamente para sobrevivir. Yo cuando consigo salir del mundo de la prostitución, sigo abrazada a este discurso de fui yo... Yo lo elegí, no habían pistolas. ¿Qué me salva la vida a mí? ¿Qué es lo que a mí me hace abrir los ojos? El feminismo. Básicamente. El feminismo es el que me dice, tus circunstancias son tu pistola en la cabeza, tus circunstancias son el cerrojo en la puerta, tus circunstancias son la obligación, son tu familia secuestrada, son todo ese discurso que es el único que sí que conozco. Consideramos que es pertenecer a la trata. Son como los únicos discursos que vemos como malos dentro del mundo de la prostitución. Muchas veces, y sobre todo a día de hoy, son esas circunstancias precarias las que constituyen esa presión y las que sostienen esa pistola en nuestras cabezas. Y bueno, dicho esto, hecha mi presentación, que sepáis que el título de la ponencia es La adicción a la pornografía y a la prostitución 2.0. Y yo me lo voy a pasar por el forro y os voy a hablar de abolicionismo. Es decir, no es que me lo vaya a pasar por el forro. Es que el abolicionismo es esto. Es decir, es que en el momento en el que yo saque aquí los valores abolicionistas, se desmonta. Antes, no me acuerdo quién de vosotros dos ha dicho algo que me ha apuntado aquí, que es que si se estuviese educando en igualdad ni siquiera existiría. Entonces, es que si se estuviera educando en valores abolicionistas es que ni siquiera tendríamos que estar dando estas charlas. Por lo tanto, perdonadme por ser la pesada. La abolicionista. A ver. Y bueno, últimamente para prostituido el término abolicionismo no he visto yo un término que esté más, que más esté manipulando, ¿no? Que más esté... Sobre todo esto pasa mucho cuando desde el regulacionismo y desde el lobby proxeneta se empieza a decir No, pero es que lo que el abolicionismo pretende es dejar a las mujeres sin trabajo. Es que lo que el abolicionismo pretende... Es que todavía sea más precaria la situación de las mujeres. Es que lo que el abolicionismo... Y es como, ¿de dónde os habéis sacado esto? Es que estáis defendiendo discursos que os habéis sacado debajo de la manga. Es que no tenéis ni puñetera idea de lo que es el abolicionismo. Entonces, aquí he puesto una definición como súper teórica, muy aburrida, de lo que es el abolicionismo y ahora quiero que lo veamos bien, ¿vale? El abolicionismo es un movimiento que, mirado desde el feminismo, ¿vale? Siempre desde una perspectiva feminista. Hace referencia a la... Abolición de los métodos y estrategias patriarcales de deshumanización de las mujeres. Quiero deciros una cosa que me hizo mucha gracia, que es que buscando el significado de abolicionismo es como un nunca acabar porque es llevar a cabo la abolición. ¿Y qué es abolición? Abolir. ¿Y qué es abolir? El significado de abolicionismo. Y es como que nunca te... O sea, es que ni siquiera Google te responde bien a lo que es el abolicionismo, ¿no? Entiendo que todas esas mujeres que estén empezando a investigar sobre qué narices es el abolicionismo... Abolicionismo o recurren a ponencias o a teóricas o a mujeres referentes feministas o es muy complicado porque tú te pones a buscar y o encuentras el significado de la RAE que es una mierda o ves el significado del abolicionismo manipulado, el que os estaba diciendo ahora, ¿no? Entonces, ¿cuáles son esos métodos y esas estrategias patriarcales de deshumanización de las mujeres? Aquí he puesto varias, ¿vale? En esta diapositiva vamos a estar... Voy a pasar un rato. Pasad de ella. Hacedme caso a mí. La primera, la imposición de patrones de comportamiento mediante el género, ¿vale? ¿Esto qué quiere decir? Esto es lo que a día de hoy prácticamente no se puede decir porque entonces eres una transfoba, porque entonces eres lo peor, porque entonces estás cancelada de la abolición del género, que dicen que esto es, que no queremos que las personas transexistan, que si tú quieres abolir el género no sé qué. No. El género, entendamos a qué se refiere el abolicionismo. No con la abolición del género. ¿Y qué concepto? ¿De qué concepto está hablando con el género? Que es ese constructo social, ¿no? Esa imposición, esa herramienta que se utiliza para que las mujeres estemos oprimidas, para que el sistema continúe funcionando, ¿vale? Ese trato diferencial que recibimos los hombres y las mujeres, incluso antes, esto es una frase que yo utilicé una vez en un vídeo, que es algo, un sistema que se empieza a articular antes del gender reveal. Es decir, es antes... Después de que ya se haga la fiestecita esta patética de rosa y el azul para descubrir el sexo del bebé, desde ese momento ya hay unas expectativas de género posicionadas en ese bebé que todavía ni siquiera se ha formado. ¿Vale? Género es ese tono diferente con el que te hablan los adultos cuando eres un niño o una niña. Es eso que hace que se empiece a ejercer tan pronto que nos ha llevado a pensar que es algo innato, que es algo biológico, que esa diferencia es biológica. ¿No? Eso... Yo siempre que hablo con madres y con padres me dicen no, pero es que yo educo a mis hijos en igualdad. Yo fútbol para él y para ella. Y levantan la mesa tanto él como ella. Bueno, pero es que no solamente les educas tú. Es que lo maman en la televisión. Es que tienen otros amigos y amigas. Es que tienen otros profesores. Es que no reciben solamente la educación de ti. Es que ven a otros amigos y otras amigas. Es que ven gender reveals en YouTube. ¿Sabes? Entonces, es algo que se empieza a poner en juego tan pronto que nos hace pensar que el género es algo que es una identidad. Y no lo es. Recordemos que es una herramienta del sistema. ¿Vale? Entonces, con esto el abolicionismo es a lo que se refiere con abolir el género. No a que de repente... No sé si habéis visto la serie Raised by Wolves. ¿Habéis visto la serie? ¿Alguien? Es de un mundo utópico así como que de repente nos vamos de la Tierra y llegamos a... Con unos... Con unos robots súper evolucionados a un planeta y en ese planeta los robots como que se les va la olla. Bueno, los robots son a género. Es decir, tú les ves y son todos súper humanos. Se les ve que son como súper humanos pero están todos vestidos de gris. No tienen nada. Ni rosa, ni azul, ni pantalón, ni falda. Son todo como que no sabrías decir qué sexo tienen. El abolicionismo al género no quiere que nos convirtamos en los personajes de Raised by Wolves. Es decir, las decoraciones, el que nos modifiquemos, el que nos tatuemos, el que nos maquillemos, el que tal. Es algo que sí que es inherente a las civilizaciones al que nos pongamos distinciones de otros grupos sociales, etc. El abolicionismo al género, por favor, entendamos que no es que todos nos convirtamos en esos personajes. Dicho esto, siguiente estrategia de las que os comentaba antes que quiere erradicar el abolicionismo. La explotación reproductiva. ¿Qué otro tipo de deshumanización? ¿Qué otro ejemplo más claro de deshumanización tenemos que el de la explotación reproductiva? ¿No? Y bueno, es que además esto ahora mismo, este tema es maravilloso. Es que es increíble. Madre mía, qué blanque... Bueno, y yo os tengo que decir una cosa. Venía marujeando un poco en el coche y decía yo tenía la esperanza de que Tamara Gorro había reflexionado. Es decir, yo digo, se ha arrepentido, por eso ya no hablé del tema. Pero bueno, esto ya es salseo, me callo. He puesto, no solamente he puesto gestación subrogada, vamos a poner todas las comillas que existan al lado de este término, por favor. No solamente he puesto gestación subrogada, he puesto también compraventa de gametos, ¿vale? En concreto de óvulos. Porque esto es algo que hay un nivel de concienciación social tan heavy con la explotación reproductiva en el caso de los vientres de alquiler. Yo estoy feliz esta semana porque estoy muy triste por lo que ha pasado con lo de Ana Obregón, pero a la vez estoy diciendo, joder, cuánta condena social. Y además desde el respeto, que esto es algo que me fascina. Claro que habrá gente que estará diciendo, está gilipollas, está no sé qué, pero por lo normal, yo lo que estoy viendo, la mayoría de críticas que estoy viendo al respecto es desde el respeto. Y yo estoy contenta porque hay mucha concienciación social con esto, pero no así con la compraventa de óvulos. La compraventa de óvulos, para empezar, está prohibida, es ilegal en España. Es decir, tú no puedes vender, me acuerdo que esto está en una ley, tú me vas a ayudar, creo que es como... ¿Restos biológicos? No sé qué. Sí, hay un montón de cosas que no se pueden comprar y vender. Y los óvulos es una de ellas. Supuestamente esto se esconde en que es por las molestias. Las clínicas se amparan en eso, en que es por la molestia de... Yo te voy a pagar esto por tus óvulos porque, claro, el tratamiento que te has tenido que hacer, las veces que has tenido que faltar al trabajo, el tiempo que habrás estado medio mal, aunque bueno, supuestamente este tratamiento es prácticamente inocuo cuando no lo es. ¿Qué pasa? Que yo siempre pongo el ejemplo de una seguidora que cuando estábamos en pleno confinamiento, o sea, de repente salta la pandemia y le pilla justo a ella en pleno proceso de estar hormonándose para después hacerse la extracción de óvulos para venderlos. Supuestamente no para venderlos, sino para donarlos y después recibir el dinero por las molestias. Y entonces no se lo pudo hacer. Es decir, ella se hizo todo el tratamiento, todo el tratamiento, y como empezó el confinamiento, no se pudo hacer el último paso, que era simplemente la extracción. No le pagaron. Y ella dijo, pero ¿y las molestias? Si yo las he sufrido igual. Pero si yo he faltado al trabajo y no he podido estudiar, pero si yo me he cogido un montón de buses para llegar hasta allí, pero si tal... Ya bueno, pero no se ha efectuado la entrega. ¿Qué entrega? Si tú no me estás pagando por esto, si me estás pagando por las molestias. No se paga por las molestias, es compraventa de óvulos. ¿Cuál es el problema? Que estas clínicas se aprovechan de la precariedad de las mujeres. Muchas veces estas clínicas te ponen la pistolita que estaba hablando antes en las cabezas. Muchas veces esa pistolita son los carteles en las universidades, sin ir más lejos. Muchas veces esas pistolitas son estos carteles y este aprovecharse de que las mujeres siempre queremos agradar, siempre queremos ser buenas con otras personas, siempre nos ofrecemos voluntarias a todo y la propaganda de estas cosas siempre hace uso de ello. Sea altruista, sea buena persona, involúcrate en que otras mujeres puedan ser madres y padres. Hazlo, ayuda, ayuda. Y muchas veces en los barrios más precarios, en Madrid, Vallecas está lleno, Carabanchel está lleno. No sé si controláis Madrid, pero estos son barrios obreros. Entonces, bueno, me parece que es un poco como absurdo que os hable mucho más de explotación reproductiva. Simplemente quería remarcar esto de la parte de compraventa de óvulos y quería sacar otro marujo que veníamos en el coche hablando de una noticia que ha habido hace poco de la gente que está empezando a reclamar sus orígenes. Es decir, es que están en su derecho de saber los orígenes todos estos niños que han nacido de la donación de óvulos que no pueden saber sus orígenes. Y aquí se está vulnerando un derecho humano y pasa muchas veces en la adopción, pero pasa por las circunstancias. Nadie ha programado esto, que es lo mismo que pasa con la explotación reproductiva. En la adopción también hay esa separación de una madre y un bebé, pero no está programado. En la explotación reproductiva sí se programa y esta es la muestra de que es una manera de deshumanizar a las mujeres. Y después, y por último, y para mí lo más evidente de todo, la última estrategia que intenta erradicar el abolicionismo es la mercantilización de nuestra sexualidad o de lo que los hombres entienden como nuestra sexualidad. Porque muchas veces ni siquiera es nuestra sexualidad sino es violencia sexual, ¿no? Pero he puesto varios, he puesto Sugar Baby, OnlyFans, el porno, las bragas usadas, la prostitución, ¿no? Bueno, eso lo voy a decir después, lo de las bragas usadas. Y ahora una cosa que quiero explicar después de decir qué es el abolicionismo, es qué no es el abolicionismo. Antes os decía, ¿no?, que muchas veces se intenta defender argumentos supuestamente abolicionistas cuando realmente son cosas que no hemos dicho las abolicionistas y que no entra dentro de nuestro discurso ni de nuestro marco teórico, ¿no? Entonces me parece como súper guay poder traer aquí lo que no es el abolicionismo. El abolicionismo no es prohibicionismo. Las feministas no queremos que esta tarde, después de esta ponencia, salgáis y no podáis entrar a Pornhub. No queremos que si algunas de vosotras están en situación de prostitución, salgáis de aquí y no podáis ir a ser prostituidas y que mañana no podáis pagar el alquiler. No queremos eso, no queremos prohibir. Eso es prohibicionismo. Somos conscientes las feministas que si el prohibicionismo se lleva a cabo empieza un caos mundial. Un auténtico caos mundial. Por eso no queremos que pase esta tarde, habría un montón de mujeres muriéndose de hambre. Habría un montón de personas con auténticos problemas de adicción a la pornografía que entrarían en colapso, que son víctimas del sistema, el que les ha dado acceso facilísimo a la pornografía, a cualquier tipo de pornografía, incluso a imágenes que si se sacaran del contexto de la pornografía serían constitutivas de delito. Es decir, estamos en una situación en la que hay un montón de hombres que han construido su sexualidad y erotizando delitos. Cosas que si después las llevaran a la práctica podrían ir a la cárcel por ello. Hombres violando a sus primas dormidas. Hombres violando a bebés. Esto es lo que está construyendo la sexualidad de los hombres con los que nos acostamos las mujeres. Mirad esto no lo tenía preparado, pero lo quiero, lo quiero. Me acabo de acordar. Ayer me hice una entrevista que la vais a ver. Dentro de poco, una entrevista muy larga. Cuando la veáis vais a saber qué entrevista es en el que me decían bueno. Era un hombre como no el que me entrevistaba y me decía Bueno, pero es que a ver, hay otros trabajos en los que también pasa esto, no? En los que también se utiliza el cuerpo. Digo vale, dime un trabajo. Pues los mineros. Bueno, es que habría que abolir también eso, no? Es decir, es decir, vamos a ver y cuál más? Bueno, pues la gente que se va a la guerra. Digo vale los soldados y le digo pues una pregunta. Un soldado puede trabajar dormido. Creéis que un soldado puede? Ahora me respondéis vosotras. Un soldado puede trabajar dormido y un soldado puede trabajar drogado. Sé que se droga soldados. Me lo dijo él como no el listillo. Sé que se puede ser droga a soldados para que estén más activos y tal. Puede un soldado drogado eh, hasta el punto que tenga que estar tirado por el suelo. Puede trabajar un soldado? Sirve para algo? Y borrachísimo? Y muerto? Pues es que todos estos son nichos de mercado en la deshumanización de las mujeres. Todos. Muertas, dormidas, borrachas, amputadas, todo lo que os podáis imaginar. Hace poco tuve la oportunidad de entrevistar a Mónica Lario. La conocéis? Pues es una, es una puta ama de la vida. O sea, es increíble. Esta mujer ha escrito política sexual de la pornografía. Una tesis doctoral que le llevó muchísimo tiempo. Estuvo cinco meses viendo porno 12 horas al día. Si hay alguien que ha visto porno aquí es ella, os lo puedo asegurar. Y ella me hablaba como no existe un límite. Es decir, cualquier cosa que tú te puedas imaginar y que sea físicamente posible existe dentro de la pornografía. Vale? Entonces, bueno, pues esto es que me ha venido muy bien acordarme de cómo siempre intentan compararlo con otros trabajos. La prostitución, como si esto fuese un trabajo. Y Amelia Tiganus también tiene una frase maravillosa, que es la de la fregona. Dice en la prostitución. Si lo comparamos con, por ejemplo, fregar suelos. Si queremos comparar ese trabajo con el supuesto trabajo sexual, nosotras somos la fregona. Bueno, os he puesto unos titulares aquí sobre pornografía, por si los queréis ver. Entonces, ya sabemos lo que es el abolicionismo. Ya sabemos lo que no es el abolicionismo, que no es prohibicionismo y ahora quiero que reflexionemos sobre cómo se lleva a cabo, cómo se lleva a la práctica el abolicionismo. La verdad me hace mucha gracia porque la entrevista que me hicieron el otro día el hombre este me ha dado como para hacer la estructura de toda la ponencia. Sabes? En plan digo a ver todos los argumentos que me ha sacado este tío va a ser la estructura de la ponencia. Claro, pero sabes qué pasa? Que es porque digo vale, pues esto es lo que la gente no entiende. Sabes? Es decir, si me hacen preguntas como de que yo pienso que es como de tener las neuronas justas para no cagarse encima, digo pues eso es lo que la gente no entiende, pues entonces voy a voy a estructurar mi ponencia. Voy a intentar hablar mejor, perdonadme. Bueno, cómo se lleva a cabo el abolicionismo? Son varios pasos, vale? Creo que creo que lo he puesto en cuatro. El primero educación recuperando lo que habíais dicho antes, que se construya una nueva forma de entender la sexualidad, una manera igualitaria. Es decir, tenemos que problematizar el por qué existen hombres a día de hoy que son capaces de tener una erección y ya no tiene una elección, sino de más. O sea, de llegar a tener un orgasmo con una mujer que no está sintiendo deseo y ya no es que lo esté fingiendo porque esté venga, vamos para acabar ya sí, sí, qué guay o maravilloso. No, no. Una mujer que claramente está manifestando signos de dolor. Por qué hay hombres? Muchos hombres que están pudiendo excitarse, tener sexo con mujeres así porque no han recibido una educación, ya no sexual, sino ya no han recibido una educación que les transmite un mensaje que nosotras somos un igual, no nos ven como un igual. Por eso pueden permitirse el follar, que ni siquiera es follar con nosotras, aunque nosotras estemos llorando. Os voy a contar una cosa muy personal, pero me parece también muy importante enseñaros a contarlo para que lo entendáis. Mi primera pareja, la pareja que me maltrataba, me proponía hacer un juego que era jugar a que me estaba violando. Me decía tienes que decir que no, haz como que no quieres. Llegó un punto en el que para mí era tan terrorífico tener sexo con él que era yo la que proponía que jugáramos a ese juego porque sabía que ese día se iba a correr rápido. Esto es muy fuerte y es lo que nos muestra qué tipo de imagen tienen los hombres sobre nosotras. Qué piensan? Los hombres que son las mujeres. Entonces la manera de erradicarlo es la educación. Hace poco, cuando precisamente se estaba tratando el caso de la seguidora que ha venido hoy a regalarme este ramo tan bonito, cuando se estaba tratando el caso y yo me pateaba los platos de televisión explicando el tema y hablando sobre el tema. Una vez en el que dije me creo que fue una rosa. Me tuvieron siete horas esperando porque esto fuera entrada online. Me tuvieron siete horas esperando. Oye, por cierto, si me enrollo mucho, me mandáis a la mierda. Estaba así esperando entrar y yo escuchaba las noticias y decía una violación. Las noticias que van tratando el programa, una violación en no sé dónde, una violación grupal en tal, una mujer muerta en no sé qué, un tal. Y cuando de repente me toca entrar a mí digo Mira, me preguntan lo que queráis, pero vamos a hacer un análisis rapidito de cómo es posible que todas las noticias que se han tratado hoy antes de esta noche, todas sean de violencia contra las mujeres. Si no es violencia sexual, es directamente asesinatos. Y dije y me pregunto entonces la presentadora me dijo y qué hacemos? Digo Pues coño, educar. Si es que el punto está en la educación. Y ese es el primer punto del abolicionismo. Segundo, alternativas y protección de las víctimas. Quiero que por favor, cuando lleguéis a casa os voy a poner unos deberes. Quiero que cuando lleguéis a casa os pongáis a investigar sobre el regulacionismo. Y os lo digo sin tener ningún tipo de miedo de que os vayáis a volver regulacionistas, porque si estáis aquí es porque sois abolicionistas y yo veo a muchas regulacionistas hacerse abolicionistas, pero nunca al revés. Por algo será. Pero bueno, quiero que investigue sobre el regulacionismo. Quiero que leáis las propuestas regulacionistas, las propuestas pro sex. Cuántas de ellas realmente dan alternativas reales a las mujeres que no sean la prostitución? Cuántas de esas? Cuántas de esas propuestas no se basan únicamente en que la prostitución siga existiendo? Cuántas? Decidme una. Que intente mejorar la calidad de vida de las mujeres prostituidas y que no sea. Mejorando el precio de los servicios, regalándoles condones para que puedan seguir siendo violadas con condones gratis. Gracias por ahorrarme 60 céntimos. Entonces quiero de verdad que busquéis información sobre el regulacionismo, porque vais a flipar, vais a decir pero detrás de este discurso es muy fácil ver que están los putos proxenetas. Es quien lleva a cabo este discurso. Entonces, qué hace el abolicionismo? Buscar alternativas reales para las mujeres, las mujeres prostituidas y las mujeres víctimas y supervivientes de la pornografía. Entonces, una de estas alternativas evidentemente tiene que ser trabajo por narices. Pero otra es el reconocimiento de víctimas de violencia machista. Es decir, cómo es posible? Me acuerdo que hace poco fui a unas jornadas de violencia sexual en La Rioja. Se estaba hablando sobre la ley. Había como un debate sobre leyes abolicionistas y a mí me hacía mucha gracia porque era como. La reparación del daño. No, porque las que las mujeres también puedan encontrar otras cosas, tal. Pero coño, no se menciona los puteros. Era como que nosotras nos metíamos a putas y nosotras mismas nos pagábamos. Sabes? Es decir, yo me meto a puta, me violo yo misma. Me pago yo, yo, yo me lo guiso, yo me lo como. Era tan absurdo que no se menciona ni una vez a los puteros, que no se mencionara ni una vez a que eran los hombres los que nos violan. Que yo, yo al final me pedí la mano un poco egocéntrica soy, pero dije voy a hablar. Yo aquí tengo algo que decir y levanté la mano y dije bueno, es que no se ha mencionado ni un momento a los puteros. Ni una vez, no? Y cuál es la consecuencia de esto, de que no se les mencione? Volvamos al principio de esta charla. Si no nos reconocemos como víctimas, no señalamos a nuestros agresores. Y esto y estoy segura. Eso es lo que está detrás de este. De esta intención. De evitar pronunciar a los puteros continuamente en todos los discursos y en todos los debates sobre prostitución. Hay, por supuesto, muy importante en el momento en el que no solamente que se les reconozca como víctimas de violencia machista, sino que se les dé la protección legal que tiene una víctima de violencia machista, las ayudas que tiene una víctima de violencia machista. Y después el número tres, que es a ver si me sale desincentivación de la demanda vaya para ahorita. Madre mía. Yo cuando el Ministerio de Igualdad sacó una propuesta que ahora mismo no me acuerdo cómo se llama, que era algo también de abolición que se quedó ahí. No hicieron al final, perdón. Pero bueno, cuando el Ministerio de Igualdad empezó a hablar sobre esto y decían todo el rato esa palabra de desincentivación, yo decía ¿cómo lo hacen para decirlo tan rápido y tan bien? Todo el rato lo decía y yo decía Madre mía. Bueno, parte de eso, parte de desincentivar, ha salido, es penar. Es decir, que hay que te pueda quitar más las ganas de violar a una mujer, aunque haya coacción de dinero de por medio. Me estoy hablando de prostitución. Consumir un contenido que es constitutivo de delito. Comprar a un bebé. ¿Qué más hay que te puede echar para atrás que el saber que igual vas a la cárcel o igual tienes que pagar un multón? Digo yo, oye, pues esto ahora es de fascistas. Es verdad. Ahora decir esto, eres punitivista y eres una facha. Es heavy. Solamente se saca este debate del antipunitivismo cuando hay que proteger a las mujeres. Es que, madre mía, bueno, no me quiero calentar. ¿Habéis visto que he puesto penas a los XXXXX? No es que me haya equivocado. Es que el abolicionismo, como he dicho al principio, no solamente habla de prostitución, habla también de explotación reproductiva, habla también de pornografía. Es decir, con penar a los XXXXX, me refiero a todos los que lleven a cabo esas estrategias que os he comentado de deshumanización de las mujeres. ¿Qué más? No solo a los puteros. Y después, esto es súper importante, desadjetivar la deshumanización da igual el nivel. Es decir, me importa muy poco, por no hablar mal, si esa mujer prostituida está siendo prostituida por capricho, porque se quiere comprar un bolso, porque quiere pagar el alquiler, porque quiere reformar su cocina, que esto es un argumento que a mí me han dado unos supropapis defendiendo que la mujer a la que explotaron reproductivamente, que no le hacía falta, ella lo que quería era reformar su cocina. Y llevaba una camiseta de feminista, el tío. Sabéis que es muy fuerte, en fin. Que me da igual, que no me importa el motivo, que no me importa si están en una situación de trata o están en una situación de que son multimillonarias y son adictas al sexo y les gusta muchísimo follar con desconocidos. Me da igual, no hay un nivel aceptable de deshumanización de las mujeres. No hay distintos grados. El único grado distinto es la violencia que sufre la mujer. Y esto es algo subjetivo. Porque os puedo asegurar que tengo compañeras que han pasado experiencias muchísimo peores a las que he pasado yo y están bien, están recuperándose. Sin embargo, yo seguramente no pueda volver a tener relaciones sexuales en mi vida. Pero también hay mujeres que han tenido experiencias como la mía, que se han suicidado, que han muerto de sobredosis. Es decir, el nivel de violencia, el cómo vivimos ese nivel de violencia es subjetivo. Ahí no se puede meter nadie. Por eso todos los casos por igual. Me da igual qué tipo de prostitución sea. No se puede adjetivar. No caigamos en pensar que hay un tipo bueno y un tipo malo de prostitución. Y dicho esto, ¿cómo voy? ¿De tiempo? Sí, sí, sí, sí. Me meto el turbo, perdona. Sí, sí, sí. Venga, voy rápido a ver un momento que me queda en concienciación. Vale. Y yo pensando que me había quedado corta, sabéis? Bueno, dicho todo esto, esto es la forma que tiene de llevarse a cabo el abolicionismo. Y ahora quiero que hablemos sobre la concienciación de nuestro entorno. Acabo de decir una frase que es maravillosa, que es me da igual que te hayas metido a puta por comprarte un bolso. ¿Vale? Y es que yo creo que aquí hay un error en el que caen muchas compañeras abolicionistas y aquí quiero hacer un poco de autocrítica, sobre todo al feminismo radical cuando habla de prostitución, que es usar los casos más escabrosos, los casos de las mujeres secuestradas como comentaba en un principio, las que tienen a sus familias, que si ellas salen del sistema prostitucional las matan, gente que tiene a los hijos secuestrados. O sea, casos súper horribles. Porque sí, esos casos están, esos casos existen, son horribles y merecen ser nombrados. Merecen voz. El problema es que vosotras, si no resulta que no tenéis una vida como la que he podido tener yo con muchísima violencia de género, violaciones, etc. Pues es muy complicado que os podáis sentir identificadas o representadas en un discurso como el mío. Es muy habitual que os sea ajena mi historia. Es decir, todas las mujeres hemos sufrido violencia machista en algún grado o en otro, por desgracia a día de hoy. Pero es muy complicado que os sintáis representadas en la historia de una mujer que ha sufrido mucho. A mí me pasaba con Amelia Tiganus, por ejemplo. ¿No? Entonces yo lo que quiero es traer una reflexión de qué es la precariedad. Hoy justo he subido un vídeo sobre esto. Entendamos que si las mujeres acabamos en prostitución por precariedad, pero a día de hoy la precariedad también es subjetiva, porque resulta que nunca estamos lo suficientemente delgadas, ni nunca tenemos el suficiente maquillaje, ni nunca nos parecemos lo suficiente al canon de mujer perfecta que nos venden desde que somos pequeñas y nunca tenemos el suficiente dinero para invertir lo suficiente en nuestro cuerpo para llegar a parecernos a ese canon. Todo esto puede parecer superficial y puede que si nos metemos todas, puede que si nos metemos todas a putas ahora mismo, según salgamos aquí, para llegar a eso, nos digan que nos hemos metido a putas por capricho. Porque puede parecer algo superficial, pero no lo es. Nos han creado una necesidad y no somos nosotras que somos que caprichosas somos. No, es que esto es un plan patriarcal que está hecho así a posta. Está hecho así para que nunca seamos, nunca, nunca nos consideremos que somos lo suficiente. Siempre nos haga falta algo más. Y entonces la ventana de lo que es la precariedad se abre. Y esto no quiere decir que realmente sea precariedad. Es decir, yo soy consciente de que la precariedad es pobreza y en esto no quiero banalizar. Pero de repente se nos crea una falsa sensación de necesidad, sobre todo ahora con las redes sociales. Entonces claro que hay muchas mujeres que están entrando en prostitución porque con su sueldo de 1000 euros no le llega todo lo que les gustaría tener. Pero esto no es meterse a puta por capricho. Y por eso es muy importante que nunca juzguemos la historia previa de las mujeres que acaban en prostitución o la historia previa de las mujeres que acaban vendiendo sus bragas usadas o la historia previa de las que acaban teniendo bebés para después ponerlos en venta. Y después otra cosa muy importante sobre la concienciación es lo que significan las redes. Yo empecé en las redes sociales. O sea, yo empecé a ser feminista por las redes sociales. Yo siempre he sido muy reivindicativa, muy injusticiera. Había cosas que me chirriaban desde que soy muy pequeña, pero nunca había tenido tiempo, o sea, daba gracias simplemente por el hecho de estar viva. No, no, no me iba a poner a buscar sobre una lucha social. No, pero yo empecé en redes sociales y empecé a abrazar el feminismo. Ahora un feminismo que sinceramente era un feminismo que no incomodaba, porque si no, yo no me hubiera podido sentir representada con él. No me hacía replantearme demasiadas cosas. Me hacía replantearme lo justo para poder pensar qué feminista soy. Voy a ir al 8M, voy a ponerme de morado, voy a comprarme una camiseta tal y empezar a llevar pequeños cambios en mi día a día. Pero no era un feminismo real. Entonces hay un problema muy grande, que es que como el feminismo, como bien dice Mónica Lario, es como la energía. No se destruye, sino que se transforma dentro de ese feminismo que no incomoda, de ese feminismo liberal. Hay muchísimo, muchísimo, muchísimo patriarcado disfrazado, muchísimo patriarcado invitando, invitándonos a sexualizarnos, a supuestamente, supuestamente liberarnos y empoderarnos a través de una serie de cosas que realmente no dejan de ser lo que se espera de nosotras por ser mujeres. Entonces, cuando yo hablo de las redes sociales como un trampolín, hablo del peligro de empezar queriendo ser reivindicativa, continuando haciéndote un OnlyFans y vendiendo tus desnudos integrales en internet, continuando con vender tus bragas usadas. Y al final, sin darte cuenta, te has metido en un círculo. Estás expuesta a una serie de personas que es imposible que no te lleguen proposiciones de tener sexo a cambio de dinero. Las redes sociales a día de hoy son maravillosas porque gracias a ellas yo estoy hoy aquí, pero también están siendo un trampolín a la prostitución. Y luego, tías, es muy importante las que no tuvierais claro si eres abolicionista o no y salgáis de aquí concienciadas respecto a que sois abolicionistas, os preparáis porque vais a discutir, vais a discutir porque vais a incomodar, porque estáis haciendo que se tambaleen los pilares del sistema, porque no hay nada más que le joda a un hombre que perder sus privilegios. Y un privilegio desde luego reconocido a día de hoy es que los hombres pueden violar mujeres a cambio de dinero y que no les pase nada. Quien no vea, es un privilegio. Y también tenemos que entender que en todas estas discusiones que empezamos a tener cuando se empieza a debatir, que por cierto, sí se debe debatir. Sí se debe debatir. Últimamente la izquierda se apropia mucho de esto. No se debate si de todo se debate porque el feminismo es un movimiento de la ilustración. Es un feminismo, es un movimiento de la razón. Si no, si no se lleva las cosas a debate, no hay nutrición, no hay crecimiento. Entonces sí, se tiene que debatir. Dejemos, no dejemos que nos manden a callar con un sobre esto no se debate y si no eres una X FOBA. Entonces entendamos que se van a utilizar todas las estrategias de la culpa. Cómo se nos ha instruido en la culpa desde que somos niñas? Quiénes somos nosotras para meternos en la vida de las mujeres prostituidas? No dejemos, no caigamos en eso. Somos mujeres, somos feministas y estamos usando nuestra razón y sobre todo estamos alzando la voz. Para que se acabe de una vez. Todas estas estrategias de deshumanización y ya para acabar. Os voy a decir, me encanta siempre acabar mis ponencias con esto y es que soy súper fan de Silvia Plath. Estoy escribiendo un libro sobre ella que estoy súper contenta dentro de poco. Yo creo que en este 2023 lo veréis y tiene una frase que a mí me. Bueno, es que nunca soy capaz de leerla y no emocionarme. Que dice tal vez un día llegaré a rastras abatida, derrotada, pero no mientras mi corazón pueda crear relatos y mi dolor belleza. Yo estoy bien, es que me da muchas ganas de llorar. Yo esto un día lo leí cuando estaba fatal, quería dejar las redes. No, pues no podía más con toda la puta violencia que recibo precisamente por incomodar. Y lo leí y dije no se acabó. Voy a hacer. Una apropiación. Voy a hacer una modificación a esta frase, la voy a hacer mía. Y dije lo siguiente Tal vez un día llegaría a rastras abatida, derrotada, pero no mientras mi reivindicación pueda sembrar semillas de reflexión y mi historia. Esperanza. Muchísimas gracias. Muchas gracias. Gracias. Necesito. Bueno, bueno, que buenas tardes a todas el on. Buenas tardes a todas y a todos. Muchísimas gracias por invitarme. Gracias, Cindy. Volvemos a compartir una mesa. Me hace enorme ilusión y además quiero agradecer la fuerza y la valentía que están teniendo mujeres como Cindy, pero sobre todo las mujeres jóvenes que estáis liderando con mucha fuerza esta esta lucha por el abolicionismo, que es además una lucha muy histórica, no Clara Campoamor ya lo defendió. Y hasta incluso consiguió legislación allá por el por el 35. No puedes ver a las mujeres con 17, 18, 19 años hoy levantar con fuerza la bandera del abolicionismo, pues hay esperanza, hay esperanza en que esto un día nos levantaremos y la prostitución habrá desaparecido de la vida de miles y de miles y millones de mujeres y de niñas en el mundo. Así que como tener esperanza y creer en los objetivos que uno tiene es lo que mueve el mundo, o al menos el mundo que nosotras queremos construir. Pues no es fácil. Tienes razón, Cindy. El nivel de de acusación, de desgaste que sufren las mujeres feministas y últimamente las abolicionistas es muy duro. Es preferirse. Es preferible borrarse de las redes y esconderse una en su casa. Así que yo agradezco mucho a las mujeres valientes que están dando una batalla en las, en las, en las redes. Y como decían, es que nos están cambiando lo que es importante en este debate, porque nos están intentando colocar en primera línea del debate permanentemente el derecho de las mujeres a prostituirse. No, no, no. Yo quiero que ustedes me hablen del derecho de los hombres a comprar el cuerpo de las mujeres. ¿Tienen los hombres derecho a comprar el cuerpo de las mujeres por un precio? ¿Tiene alguien derecho a comprar el cuerpo de una persona? Las personas estamos en compraventa. Ese es el debate, porque mientras intentan colocar el debate de prostitución, trata, prostitución forzada, no forzada, están escondiendo debajo de la alfombra a los verdaderos responsables que exista la prostitución y la prostitución existe porque hay hombres que están dispuestos a pagar un precio por acceder sexualmente al cuerpo de las mujeres y no siempre de la mejor manera. Y no siempre amablemente. No, por lo tanto, eso es lo primero que tenemos que tener claro. Yo no quiero hablar del derecho de las mujeres. Yo quiero hablar si en una sociedad democrática y moderna, en base a la ética y a los derechos humanos, alguien a alguien le voy a reconocer el derecho a comprar a otra persona. Y en mis parámetros éticos y de derechos humanos no me cabe. Y como no me cabe, combato cualquier intento de comprar que legitime la compra del cuerpo de las mujeres. Pero además es que el proxenetismo, que hablamos poco de ellos, de estos que quieren ser honorables empresarios, porque detrás de mucho del discurso que tenemos las mujeres son libres, se puede prostituir la que quiera, tendrán acceso a no sé cuántos derechos. Y lo que están buscando detrás de todo eso es que en vez de que le digamos proxeneta y traficante de mujeres, le empecemos a llamar empresario honorable. Porque eso es lo que está buscando el proxenetismo. Ellos saben que se mueven en una economía ilegal. Es cierto que la tercera economía más importante del mundo, junto con drogas y tráfico, con drogas y tráfico de armas, ellos lo que quieren es emerger en la economía global, siguiendo explotando desde la economía ilegal. Por lo tanto, lo único que quieren es que vosotros los consideréis empresarios honorables. Ese es el objetivo de los proxenetas y tienen pelas y ganan mucho dinero, porque en toda esta historia alguien está ganando dinero. Y no son las mujeres prostituidas, porque de hecho la inmensa mayoría de las mujeres que entran en la prostitución por situación de extrema vulnerabilidad no salen. ¿Y sabéis por qué no salen? Porque siguen siendo pobres, porque tienen que seguir manteniendo a sus familias, porque tienen que seguir porque tienen hijos o hijas. A veces no deseados fruto muchas veces de las agresiones y de las violaciones que han tenido, porque tienen deudas con los proxenetas. A las que tienen que dedicar a veces muchos años para poder liberarse de esas deudas y porque poder alquilar una habitación lo pagan a precio de hotel de cinco estrellas cuando es un agujero inmundo. Por lo tanto, entraron por pobres y no salen porque siguen siendo pobres. Y cuando ya no valen, pues no las encontramos en los grandes chalets de Marbella. Las encontramos especialmente buscando un estado que les recupere física, emocionalmente y que les ayude a sobrevivir. Así que tengamos claro que para ellas no es un negocio en ningún caso. Quienes están ganando el dinero son los proxenetas. Quienes quieren legalizarse son ellos que tienen grandes capacidades de marketing, por supuesto, entre otras pervertirnos o prostituirnos el debate. Porque nos colocan a cada uno el mensaje que queremos escuchar. Oye, a los sindicalistas y a los partidos de izquierdas nos hablan permanentemente de los derechos laborales. Es que si se regularizara las mujeres tendrían derecho a la Seguridad Social. Es que les haríamos un contrato, es que tendrían paro, es que tendrían horario, es que podrían denunciar y la pregunta es ¿y qué les impide hoy darlas de alta en la Seguridad Social? En nuestro país, cualquier proxeneta que tiene un puticlub o un burdel, nada le impide darlas de altas. ¿Por qué? Como camareras, como bailarinas, 10.000 categorías profesionales hay. ¿Por qué no las dan de alta? Y la pregunta es si ahora, si no las dan de alta, ¿qué nos hace pensar que las darán de altas como trabajadoras del sexo? Ese es el mensaje a la izquierda y a los sindicalistas. Y no os creáis que es ninguna tontería que tanto los sindicalistas como la izquierda lo han comprado. Tienen también un discurso que lo dirigen, por ejemplo, a los liberales. Libertad individual absoluta, que cada uno puede hacer lo que le dé la gana. Yo voy a respetar un modelo holanda, liberales absolutamente para todo y todo se puede comprar y todo se puede, todo se puede vender. A las feministas, que también están comprando el discurso de la regulación, nos hablan del derecho a decidir sobre nuestros cuerpos. Nos han dicho si las mujeres decís que las mujeres podemos decidir sobre nuestros cuerpos, ¿por qué no vamos a poder ser putas? Bueno, fijaros que hasta incluso han comprado el discurso ecologista que ahora está con fuerza. Y os podré sólo un ejemplo. Lo leí hace poco. En uno de los prostíbulos de Alemania había un cartel en la puerta del prostíbulo en que hacían un descuento a aquellos que fueran al puticup, puticlub en bicicleta. ¿Quién ha dicho que la prostitución esté reñida con la ecología? ¿Os dais cuenta? Cómo nos están intentando engañar todos con el único objetivo de que los que están ganando sigan ganando dinero, explotando a las mujeres solo que siendo honorables empresarios. Por lo tanto, aquí la pregunta ahora es ante esta situación, ¿qué hacemos? ¿Qué estamos dispuestas a hacer y dispuestos a hacer? Si lo consideramos que la dignidad humana de ninguna persona se puede vender, que no podemos deshumanizar a las personas, aunque sean pobres, que es lo que están planteando, algo tendremos que hacer, ¿no? Por lo tanto, en ese sentido, nosotros estamos proponiendo que se regule y que se establezca legislación abolicionista. Que estas cosas que está diciendo Cindy, que estamos diciendo aquí no quede en este debate, sino que lo llevemos a las leyes. ¿Y por qué a las leyes? Hay una cita muy chula. Dicen que los grandes activistas y defensores de los derechos civiles en Estados Unidos, cuando abogaban por las leyes antidiscriminación, a veces dentro de su propio colectivo había gente que le decía eso no sirve para nada, porque si no cambiamos la mentalidad de la gente, el que es racista es racista. Y aunque apruebes una ley, pues va a seguir siendo racista. Hay que cambiar la cabeza de las personas. Claro que hay que cambiar las cabezas de las personas. Pero como decían otros, la frase era muy bonita, que era la de yo aspiro a cambiar el corazón de las personas. Como decía, no solo aspiro a cambiar el corazón de las personas, sino que aspiro a a legislar sobre sus comportamientos. Y en un estado de derecho son las leyes las que deciden qué es para una sociedad aceptable o no aceptable. Por eso es importante las leyes abolicionistas, porque van a ayudar a cambiar mentalidades. Porque cuando tú en una sociedad dice yo soy abolicionista como la sueca, el 70 por ciento de la población sueca rechaza la prostitución. En Alemania el porcentaje es al contrario. Por lo tanto, hay que sensibilizar, pero también hay que decirles que esta sociedad está en contra y sus leyes persiguen todo lo que tenga que ver con la explotación, con la explotación de las de las mujeres. Y entonces cuando abrimos el debate de hay que legislar, entonces te dicen sí, pero primero la trata. ¿Y por qué diferenciamos? Que nos lo estaba ahora explicando, explicando Cindy. Es que acaso las mujeres prostituidas no son mujeres forzadas o por la trata o por sus circunstancias o por la pobreza o por la situación de vulnerabilidad. Todas son mujeres forzadas. Así que vamos a trabajar con ellas y sobre todo vamos a mirar a los auténticos responsables, que son los puteros y los que están en contra. Los proxenetas. Solo os voy a dar dos datos porque se han hecho estudios ahora en la Comunidad Valenciana, en la Comunidad Valenciana y entre 10.000 y 13.000 mujeres prostituidas. La consellera de Justicia habla del corredor de la vergüenza que además está incorporándose a las guías de ocio. Eso significa que dentro del divertimento acabamos de incorporar todo lo que tiene que ver con el acceso de los hombres a la prostitución 52 y hay 52.000 anuncios detectados por los estudios para recordarles a los hombres que hay mujeres que están disponibles y que son son accesibles, no son los datos y la radiografía de nuestra Comunidad Valenciana. Nosotros hemos planteado que podemos modificar las leyes y hemos dicho que los ayuntamientos aprueben ordenanzas municipales por la abolición de las prostituciones. Que declaren sus municipios libres de prostitución. Que sancionen económicamente a los puteros y a los proxenetas. Y en parte ese dinero lo destine, junto con otros recursos públicos, atender a las víctimas porque hay que recuperarlas. Y también quiero decir que no nos engañemos, que pensar que el ingreso mínimo vital durante seis meses saca a una mujer de la prostitución es que no sabemos el mundo en el que vivimos. Y parte de la estructura de protección social que tenemos hoy en nuestro país, eso no es protección social, eso es caridad. Y no sirve, no sirve para sacar prácticamente a ninguna mujer. Por lo tanto, si nos lo tomamos en serio, creemos una buena estructura y unas buenas políticas públicas para recuperar a las mujeres y no las engañemos. El Estado bastante ha sufrido como para que además las administraciones también entremos en el juego de engañarles sobre su futuro. Ayuntamientos, ¿qué hemos dicho nosotras? Comunidad autónoma. Las comunidades autónomas pueden legislar. Sí, yo no puedo reformar el Código Penal. Esa es competencia del Estado. Por eso le pedimos al Gobierno de España que apruebe una ley abolicionista. Para que lleve al Código Penal la persecución de la tercería locativa del proxenetivos, coercitivo y el económico, y que establezca un sistema de sanciones para los puteros. Pero mientras el Estado decide, porque allá como en el mes de octubre finalizó todo el debate de las enmiendas en el Congreso de los Diputados y desde octubre no sabemos nada de esa ley, la han debido guardar en un cajón con siete llaves, porque hay muchas resistencias a aprobar ese tipo de normas. Nosotras hemos decidido que aquí en la Comunidad Valenciana íbamos a hacer las leyes autonómicas, y entonces vamos a modificar la ley de espectáculos. Tenemos una ley valenciana muy chula de espectáculos que dice cuáles son las condiciones que los locales tienen que tener eso del horario, el extintor, la música tal. Oye, ya hay sanciones para todo tipo de incumplimientos. No digo, pues vamos a meter ahí en esa ley que aquellos que en los locales promuevan, faciliten o publiciten la publicidad, va a ser una infracción grave que le voy a meter a ese dueño, le voy a meter una multa y dependiendo de las circunstancias en las que se encuentre la policía, esos locales igual se lo clausuró durante seis meses. Se lo puedo clausurar temporal o definitivamente. Y digo, pero vamos a tener que modificar la ley de las carreteras, porque las carreteras es un espacio donde se ejerce la prostitución, pensando con estas leyes que jamás podemos sancionar a las mujeres. Mujeres prostituidas, porque tienen la consideración, deben tener la consideración de víctimas de violencia de género. Que tiene razón, Cindy. La ley del 2004 no se lo reconoce y la ley del 2004 hay que modificarlas para incorporar a las mujeres prostituidas como víctimas de violencia de género, que eso es lo que nos dice el convenio de Estambul, que lo hemos firmado. Voy un poco rápida porque quiero que abráis el debate. Por lo tanto, siempre las mujeres prostituidas requieren de la atención y de la protección. Nuestro gran objetivo es desincentivar el consumo, haciéndole un poco difícil y sobre todo haciéndole pensar a los hombres que cuando esto se intenta erradicar para que en vez de pensar solo en ellos, piensen qué hay detrás de la vida de esa mujer que no te desea, que seguramente nunca ni en tus mejores sueños hubieras accedido. A una chica de 18 años que mide un 80 y que es una monada. Cuando tú tienes 60. Y eres casi un tonel. ¿De verdad? Alguien le hace pensar que esa realidad. Algunos hombres piensan que hay deseo, no hay deseo. Simplemente es que con el dinero durante equis tiempo compra el cuerpo de una mujer de la que quiere. Quiere desentenderse de por qué está allí. Si a lo mejor mirara un poco más allá. Se gastaría esos 60 euros, 50 o 40 yéndose a cenar o a lo mejor invitando a su mujer. No lo sabemos. O en el psicólogo. Lo que digo es que ellos mismos necesitan deshumanizar a las víctimas porque enfrentarte al dolor de lo que hay detrás de la prostitución, salvo que sean personas salvajes, es imposible si no disocias. Y piensas que es tu derecho, que si está ahí es porque quiere y que además le vas a hacer ganar un dinero que lo necesita, pues es muy importante intervenir, sensibilizar a los hombres y especialmente a los hombres jóvenes en una sociedad donde la sexualidad es libre, donde terminó la época de las mujeres mojigatas, las mujeres deseamos, tenemos diferentes parejas. Queremos compartir la sexualidad. Joder, que la sexualidad no es ningún pecado, pero ha de ser algo compartido, ha de ser algo compartido y deseado, deseado por los dos. Y también con él, con él, con los con los proxenetas. Situación que tenemos en estos momentos. Mala. Ayer el miércoles yo soy diputada, yo llevé las dos proposiciones de ley a las Cortes Valencianas. Me dijeron que esas no eran formas, que había que debatir. Yo pero qué vamos a debatir si se trata de modificar el régimen sancionador de una ley para que a ese empresario que le meto una multa, si cierra las tres cuando tiene que cerrar a la una y no le puedo multar si está promocionando la prostitución en su club. Que tenemos que discutir cuáles son los extremos del debate. Lo digo yo porque eran modificaciones puntuales. Cuando yo modifico la ley, tanteo la modificación de la carretera que hay que discutir. Yo penalizar a quienes en este caso, a los clientes o a los proxenetas que acuden a las carreteras, entre otras cosas, también por una cuestión de seguridad viaria que tengo que discutir. ¿Qué tenemos que discutir? No llevamos años, debates, estudios que hemos hecho. Que hemos presentado en la comunidad valenciana, tesis doctorales, investigaciones y el feminismo años y años hablando sobre la evolución. Pues no, que había que debatir sobre dos modificaciones del régimen sancionador de una ley. Minuto y resultado. Perdimos la votación. Perdimos la votación en el Parlamento valenciano con mucho dolor, porque además no consintieron modificar ese pequeño régimen sancionador. Quiero deciros una anécdota que no es una anécdota, que hace poco hemos aprobado una ley de bienestar animal del que estamos muy contentos. En la Ley del Bienestar Animal hay una sanción que dice que es una infracción grave la venta ambulante de animales y que se considera maltrato la explotación sexual de los animales. Solo dice una ley. Ayer, los mismos diputados y diputadas que aprobaron sancionar la venta ambulante de animales y que se considerara maltrato la explotación sexual de los animales, decidieron con su voto no a perseguir a los puteros y no a perseguir a los proxenetas que se lucran con la explotación de las mujeres y el no vino de la derecha, de una parte. Pero y con esto a cabo para que todos reflexionemos o sobre todo para que la izquierda reflexione, las proposiciones de ley el miércoles fueron derrotadas con el voto de Podemos y con el voto de compromiso. Así que si no hay una posición desde la izquierda diferente, no podremos legislar para abolir la prostitución o convencemos a una parte de la izquierda que ha sido imbuida por el regulacionismo o no lo podremos sacar adelante y si no lo hacemos, pues Cindy podrá hacer vídeos. Yo podría hacer conferencias. Ella como concejal hará lo que pueda en su ayuntamiento. Pero sabéis que el sistema prostitucional será seguirá vivo y ganando millones o miles de millones. Y nosotros lo único que les podremos decir a las víctimas de la prostitución es lo siento, pero para ti solo tengo paracetamol y tiritas. Muchas gracias. No, tú me conoces de sobra. No, lo siento, estoy muy susceptible y. Os pido disculpas por ello, pero de verdad es que son testimonios muy desgarradores que nos ponen sobre todo a los hombres y más yo lo confieso. Tengo que me tengo que hacer un esfuerzo titánico para no ser machista, pero titánico. Tengo que preguntarme si esto que estoy haciendo no estoy haciendo no exista. Entonces cuando estos testimonios no los decís tan de esta forma tan clara, pues yo como hombre me afecta muchísimo. Y sobre todo cuando intento y doy clases de ética. Entonces, claro, imaginaros decirlo. Lo difícil que es para nosotros y sin embargo lo necesario que es. Y me conmueve mucho y doy las gracias sobre todo por ponerte en primera persona, porque no es fácil. Yo no te quería presentar porque quería dejar que fueras tú la que te presentaras, porque yo no soy quien para decir qué o qué, no por esconder nada, sino porque pienso que debes de hablar en primera persona y tú decir lo que tú consideres. Y por eso, es decir, todo el mundo venía. Sabía quién, quién eras y por eso ha sido el motivo. Pero te agradezco de verdad enormemente que en este espacio haya sido tremendamente generosa a través de tu testimonio, sobre todo para ponernos delante un espejo a muchos, a muchos hombres, vale? Así que muchas gracias, Cindy. Y por otro lado, Rosa, qué decir? Muchísimas gracias. Como siempre tiene el que tengas siempre dicho que tengas esas ganas y esa fuerza y que te mantengas. Yo te conozco hace muchos años y sigo diciéndolo. Te mantienes hoy con tu ponencia, con tu discurso. Lo has mantenido, lo has mantenido aquí, lo mantienes en todos los espacios donde te das. Así que gracias por ser también un ejemplo para todos nosotros, los que abrazamos y seguimos tu camino. Así que gracias y a nuestro concejal también. Gracias por esa lucha que estás haciendo. Por qué estoy haciendo esto? Porque no quiero que mi palabra sea la última. Simplemente decir porque hoy no me corresponde. No quiero siempre finalizar. Finalizo yo como moderador de la conferencia y no quiero que sean mis palabras últimas. Quiero que se abra el espacio de preguntas y en donde se quede, se quedará, pero la voz hoy es vuestra, no es mía. Así que por eso quería agradecer para que no perder este momento. Y quiero solamente hacer una mención, si me lo permitís, que es a una de mis profesoras, mis maestras, vale, que para mí y lo denuncio aquí, me parece que ha sufrido un momento de injusticia. Que es mi doña Amelia Barcárcel. Muy bien, muy bien y todo nuestro apoyo. Que sepáis que nos está siguiendo, nos está viendo así que. Pues menos mal que me lo dices ahora, lo llegó a saber desde el principio y entonces ya me pongo más nerviosa. Pues doña Amelia está, está siguiéndonos y además felicita, es decir, la organización de esta conferencia. Así que va por ella, es decir, por eso. Gracias, doña Amelia, por seguir siendo como nuestra guía para muchos de nosotras y de nosotros. Bueno, y ya abro el turno de preguntas, que es lo que corresponde. No sé dónde está. Así que está ya. Vale, sí, eh? Yo creo que ella ha levantado la mano primero. Sí, vale, claro. Es que he mirado y de repente diría vale, voy a apuntarme las buenas. Gracias, Soraya. Gracias, Juanlu. Gracias. Sí, porque me llega de cerca lo que estabas hablando. Y habéis dicho una cosa interesantísima, que es el feminismo. No estamos todas incluidas en el feminismo. No podemos avanzar. Vale, como os he repetido, me viene de cerca, pero os habéis olvidado de las personas transgénero. Hay muchísimas personas que se tienen que dedicar a la prostitución siendo transgénero porque no hay otra posibilidad de tener esa vía de trabajo. Respondo yo, ¿vale? Sí, gracias. Y además te quiero dar... Un saludo que viene de Oakland, de California, que me están diciendo que te están siguiendo también. Y para que veáis que yo también llevo lejos, aunque Juanlu me gana, ¿eh? Pero llevo lejos. No, yo no, yo no, es el caso de la UNED, es la unidad ciudadana. Entonces quería... Porque habéis dicho también otra cosa, creo que ha sido Rosa, que claro, si sacamos a una persona de la prostitución, hay que darle un puesto en esta sociedad para poder evolucionar. Claro, directamente en mi colectivo eso no ocurre. No ocurre y la gente está un poco despistada que solamente ve prostitución en lo que es el género feminismo como tal y no se acuerda de nosotros. Pues claro, primero Cindy, me gustaría que contestaras porque yo me he sentido muy aludida y de cerca y ese tema duele. ¿Por qué te has sentido aludida? Porque yo he tenido que pasar por ahí. Pero ¿y yo en qué momento te he excluido? No, no me has excluido. No has mencionado que hay personas trans que están en la misma situación o peor. Pero también hay niñas y no las he mencionado tampoco. Y hombres también. Es decir, es que ¿sabes qué pasa? Que es que esta conferencia no va de eso. Y te voy a decir una cosa, yo he tenido que chupar pollas con mujeres trans. He tenido que ver mujeres trans que han acabado, amigas mías, que se han suicidado. Jamás en la vida las he sentido, las has excluido. Y precisamente si acabáis, por desgracia como acabé yo, prostituyéndoos, es porque este sistema es un sistema patriarcal. Y porque este sistema a vosotras es el que realmente os quiere excluir, no las feministas. Yo no te quiero excluir de ningún sitio, de ningún sitio. Ahora por réplica te voy a decir que a mí el feminismo aquí se me excluye. ¿Pero por qué? ¿En qué te has sentido excluida? Es decir, es que tampoco he mencionado a las mujeres sin útero, tampoco he mencionado a las mujeres racializadas, secuestradas en trata. No he mencionado a muchísimas mujeres. Entonces, por favor... No, no, no. Tú has nombrado el feminismo radical. Has nombrado tú el feminismo radical. Sí, porque soy feminista radical. Y el feminismo radical a mí no me quiere. Pero es que ¿de dónde te has sacado eso? Entonces, mira, perdón, disculpa. Tienes que saber que es una feminista radical. Soraya, déjale hablar y cuando ya acabe... Lo estoy echando en directo. Has dejado el feminismo radical. Pero mira, a mí me gustaría que me explicaras en qué el feminismo radical no te quiere. Porque es radical, es terf radical. Mira, te voy a decir una cosa, ¿sabes quién te ha penetrado a ti? ¿Sabes quién te ha estado violando a ti? Los hombres. Son ellos los que demandan tus servicios y, por lo tanto, es por lo que tú has acabado así. Son ellos los que te han matado a palizas por ser una persona disidente. Son ellos los que te han oprimido. No yo, no las feministas radicales. Son ellos los que te odian, son ellos los que te quieren fuera del sistema y son ellos los que sienten vergüenza por ti por no pertenecer al sistema de familia tradicional, al sistema tradicional. No yo ni las mujeres. Y te voy a decir una cosa. En este 8 de marzo, yo he tenido que ver, yo como mujer, como yo que estoy calificada de terf continuamente, se me ha puesto una amenaza de muerte en un cartel en Vallecas, en un barrio obrero. En un barrio que las mujeres se han matado por conquistar derechos. Y he tenido que ver cómo el día 8 de marzo, el Día de las Mujeres, sí, de todas las mujeres, ha habido una amenaza colgada, una amenaza de muerte en un cartel. Y he tenido que ver cómo en la manifestación, que sí, en Madrid ha habido dos manifestaciones, he tenido que ver cómo había proxenetas en esa manifestación. He tenido que ver cómo había mujeres defendiendo que los puteros que nos han violado a ti y a mí son clientes y que los proxenetas son empresarios. Y no he ido a esa manifestación a decir que no me he sentido representada. Entonces, te puedo asegurar que si hay alguien en esta sala de quien tendrías que tener miedo, a lo mejor es de él, de él de allí, de él de allí. De las feministas, no. Jamás en la vida os hemos hecho nada. Sí, pasamos a... A ver, a ver. Tenía que levantar otra de las manos, por favor. Es por nada que hable ella. Es que no sé si se me oye. Sí, está bien. Yo quería hacer una aclaración porque yo trabajo con Cindy mano a mano en absolutamente todos los proyectos. Hoy estoy aquí acompañándola como parte de mi trabajo y también somos familia. Entonces, que Cindy venga y hable aquí, en entrevistas, en programas, ante una audiencia y parezca que, guau, cuenta su testimonio y lo dice y dice cosas muy duras. No infravaloremos el trabajo que ella tiene que hacer exponiéndose de la manera en la que lo hace. Yo constantemente voy con ella a todas las entrevistas. Esta que ha mencionado antes, yo fui con ella. Hoy he tenido que revisar un artículo que ha escrito una mujer feminista sobre ella y he tenido que pedirle que cambiara un montón de cosas porque que ella cuente su testimonio no forma parte y cumple un rol, pero que no se nos olvide que es una persona que tiene 269.000 seguidores en Instagram, pero es una persona. Ella lo cuenta, ella lo verbaliza, ella lucha por muchísimas mujeres, pero es una persona con las consecuencias que ha verbalizado, que son tremendas. ¿Cómo os podéis hacer una idea? Que lo cuente delante de todas y que lo cuente en las redes sociales sigue teniendo consecuencias. Ella lo hace y ella lo verbaliza porque tiene una capacidad de comunicación y tiene un don que muchas personas no tienen, pero que no se nos olvide. O sea, creo que es muy importante. Creo que lo que ha contado aquí, las cosas que ha contado son muy duras y ella las cuenta, las ha trabajado, pero que no se nos olvide. Creo que es de agradecer que una persona haga el trabajo que hace Cindy a diario, o sea, a diario, de verdad. O sea, incluso fines de semana que no desconecta se parte el lomo de una forma increíble y creo que es de agradecer y agradecer. Ella no ha excluido a nadie. Ella ha contado y que no se nos olvide que todo lo que ha contado y que es que tienen un nombre, que se llaman puteros y son hombres y ya está. Muchas gracias, Candela. Vamos a ver a más preguntas, por favor. Sí, ahí viene una pregunta. No, Raúl, ahí viene una. Vale, a ver quién más levantar y os voy cogiendo el turno porque es que he perdido. Vale, un momentel y 1, 2, 3, vale. Bueno, yo quería daros las gracias por hacer esta conferencia, porque. Son tan necesarios estos temas y que no se tratan ni siquiera desde las aulas, que es esperanzador escucharos y poder aprender. Yo esta semana me han aceptado el tema del TFM que va sobre abolicionismo, de la prostitución y la pornografía. Y en el máster hemos tratado una asignatura de género donde yo escogí el tema de la prostitución para para poder explicar lo que era el abolicionismo. Y yo quería preguntarte qué? Si crees que el turismo sexual, porque existe un turismo sexual donde hay una supremacía del norte sobre el sur, donde se ve ese imaginario de superioridad ante la falta de recursos de. De otras zonas del mundo. Si crees que es un reflejo de la ideología de la colonización. Antes se conquistaban territorios y ahora se conquistan cuerpos. Yo creo que es un reflejo de la deshumanización, es decir, te refieres al turismo sexual a cuando la gente se va de aquí, por ejemplo, a Ámsterdam? No, bueno, a Ámsterdam o por ejemplo, se va a Cuba, Marruecos y los que consumen ese turismo sexual. Estados Unidos, Japón, Europa. Sí, también de la fetichización. Me imagino. Sí, sí, totalmente, totalmente. Pero es que básicamente es el reflejo de la deshumanización. O sea, no solamente existe el turismo cuando antes he hablado de abolicionismo y ha hablado no solamente de prostitución, es que ese turismo no solamente sexual, es que también es reproductivo, es que cuando en tu país encuentras esas empiezas a encontrar esas trabas de no poder desarrollar el odio que le tienes a las mujeres abiertamente, pues llevas a cabo este turismo no solamente para explotarla sexualmente, sino también de otras maneras. O sea, creo que es el perseguir el poder de seguir deshumanizando a tus anchas como hombre. Y una segunda pregunta. ¿Crees que hay muchas mujeres en las redes que están canceladas, que no hablan libremente sobre el abolicionismo porque tienen que estar canceladas? Porque el año pasado he visto una publicación de Leal Expósito que dijo textualmente El regulacionismo es conformismo. Me conformo con ser víctima del patriarcado, así que al menos regúlamelo. Cada una decide sobre su cuerpo. Por supuesto, pero creo de corazón que ninguna mujer decide ser prostituida. Ella se lo dijo en una entrevista. Entonces, ¿crees realmente que hay mujeres que no hablan libremente por ser miedo a ser canceladas? No lo creo, lo sé y lo sé porque acabamos de tener una conversación, acabamos de tener una charla en la que hemos hablado de prostitución, de abolicionismo y ya ha habido un intento de reivindicación de que nos ha mencionado a las personas trans. Es una pesadilla, es una pesadilla, es una auténtica pesadilla. Es una pesadilla, sobre todo cuando soy una persona que soy abolicionista, no desde hace mucho, desde hace poco, pero le he dado voz en todos mis programas a todo tipo de personas, he dado voz a todo tipo de discursos. Me he sentado con todo tipo de gente que tiene distintas ideologías, siempre y cuando esas ideologías, por supuesto, no vayan en contra de los derechos humanos, no sean personas que quieran, yo que sé, que las mujeres dejemos de existir, yo que sé. Pero es una pesadilla y no solamente abolicionistas y feministas en general. Es una auténtica locura lo que está sucediendo. Y todas estas personas que están posicionadas como las personas más WUK, por así decirlo, las más progresistas, las mujeres más feministas que se siguen en redes y que tienen unos discursos tal, piensan igual que yo, no se atreven a contarlo. Es normal porque tenemos una amenaza colgada en un cartel, una amenaza de muerte. ¿Cómo te vas a atrever? Pero por supuesto, antes he dicho una frase clave. He dicho cada vez conozco más mujeres regulacionistas, más feministas radicales que se pasan a ser abolicionistas, pero esto no es bidireccional. Nunca lo veo al revés. Por algo será. Le pasamos a ti. Sí. Por allí, por favor, decirme en este lado si alguien más de este lado había levantado la mano. Nada, no vale. Quería hacer una pregunta de antes en tu exposición de qué es el abolicionismo. No me ha quedado demasiado claro la diferencia entre el prohibicionismo y el abolicionismo, porque entiendo también yo la palabra abolición como quitar algo. También entiendo que prohibir como verbo también sería como quitar o definir. No entiendo la diferencia. El prohibicionismo lo que pretende es prohibir. Es directamente es que deje de existir. Y una de las medidas de prohibición estas es, por ejemplo, penar, o sea, perdón, multar también a las mujeres prostituidas. Es decir, lo que busca el prohibicionismo es que esa práctica deje de existir. No porque realmente le importe a las mujeres, sino porque no quieren, porque esa práctica se sale de una moral cristiana, no de algo como al final se hace desde una perspectiva más conservadora. El abolicionismo por eso no quiere que se prohíba esta tarde. No quiere que deje de existir. Primero quiere pues eso por los pasos que he estado comentando antes. Desde la educación, o sea, el abolicionismo lo que quiere es cambiar la mentalidad de las personas, que se empiece a humanizar otra vez a las mujeres y que entonces directamente lo que es a día de hoy, por desgracia, es una industria que es la pornografía, que es la explotación sexual. Deje de ser sostenible. Es decir, no quiere que se acabe hoy. ¿Qué pasa con todas esas mujeres que a día de hoy están trabajando de esto? No lo que quiere es educar a la sociedad, que se nos empieza a ver como seres humanos. Entonces no lo va. El abolicionismo no lo va a prohibir. El abolicionismo promueve valores feministas para que simplemente poco a poco deje de existir. ¿Me he explicado bien? ¿Se ha entendido la diferencia? Vale, entonces no, no, no, no acaba. Acaba de la pregunta, fíjese en la pregunta. Entonces llegamos al abolicionismo para porque he venido aquí más también para el formato y tal. Es como un sería como un proceso. Entiendo, no es como una ley de decir esto. Vale. Esto vale, ahora sí que se me oye. No es como una ley de decir mañana entra en vigor y se acaba todo. Es más un proceso aparte de las leyes abolicionistas. Pero de todas formas, aquí está la experta en las leyes abolicionistas. Siempre está la parte de educación. Siempre está la parte de las alternativas y nunca está la parte de multar a las mujeres prostituidas. Vale, vale. Quieres hablar tú que yo creo que no, solo un momento. Aunque yo creo que lo ha dejado claro en un en el sistema prohibicionista. Ten en cuenta que trata por igual a la prostituida que al putero. Los trata por igual. Sin embargo, ese nivel de desigualdad y para poder explicar por qué las por qué razones las mujeres han sido prostituidas es por lo que el abolicionismo lo que hace es tengo que considerar esas mujeres víctimas del sistema o bien por la trata o bien por la pobreza o por sus propias circunstancias. A mí mis valores como sociedad me impiden reconocer o aceptar que una persona pueda ser comprada, por lo tanto voy a protegerlas a ellas. Pero sobre todo. Para yo poder acabar con el sistema o le meto mano a la demanda. Y a los que se lucran de la prostitución o si no, lo que ocurre es si nosotras, por ejemplo, mañana en Castellón o en Villarreal, que estamos en Villarreal, imaginaros que sacamos a 100 mujeres del sistema prostitucional porque hemos hecho un trabajo maravilloso. En menos de 15 días el sistema prostitucional y el proxenetismo te vuelve a colocar a 100 mujeres en Villarreal. Por lo tanto, no habría estado del bienestar que pudiera sostener eso si no taponamos la entrada. Por lo tanto, protejamos a las víctimas y pongamos las miradas. En los responsables y los responsables son quien creen que por dinero pueden acceder al cuerpo de una mujer, de una mujer y quien se está forrando con este negocio de la de la prostitución. Vale, muchas gracias por aclarar la duda. Tenemos a ver si me sabe mal porque vamos a cortar el mes siempre. Bueno, da igual, seguimos y ya está. Seguimos, seguimos, no está bien. Me sabe. Muy mal, no sé. Vale, seguimos. Nada, no. A ver, teníamos una aquí, otra aquí y Arna. No, primero a ella. Primero a ella. Hola. Sí. Nada, gracias por la charla. Ha estado súper bien. Gracias por estar aquí. Las conferencias nunca defraudan. José Luis, eres un crack. Yo quería. Yo soy seguidora de Ana de Miguel y la leo constantemente. Entonces yo quería que nos hablases un poco del tema de cómo encajar el somos libres para hacer lo que queremos y eso como lo encajamos dentro de lo que tú has dicho de ser puta para comprar un bolso, no estoy entendiendo la pregunta. O sea, como yo lo de que si somos a problematizar lo de que si somos libres para hacer lo que queremos, sea porque yo. Yo pienso que realmente no tenemos libertad de elección. Sí, claro. Cómo, cómo, cómo encajarías eso? El que haya gente que tenga que entrar ahí, o sea, que tenga que piense que es libre para que se puede prostituir para obtener. Vale, creo que ya te estoy entendiendo. Corrígeme, lo que me estás diciendo es que claro, que si entendemos que hay mujeres que se están metiendo a prostitución por comprarse un bolso, estas mujeres podrían estar entrando de esas supuestas mujeres por libre elección. No vale. Claro, por eso es muy importante y por eso he reflexionado sobre la importancia de entender qué es precariedad y cómo el sistema nos está colando como necesidades básicas, cosas que realmente no son necesidades básicas. Entonces, si tú como mujer y ya desde que hemos desde que nacemos empieza esa herramienta del género que he comentado antes a decirnos de qué manera socialmente tenemos que sentirnos validadas, que es mediante el ser de X forma, de X forma, pues si a nosotras nos están vendiendo que esas formas son siendo delgadas, siendo deseadas sexualmente deseables para otros hombres y esa es la única forma de validarnos, no es que sea una necesidad real, no es que sea una necesidad básica, pero al final se contempla como tal. Entonces, claro, realmente lo estás haciendo porque quieres. Si tú ya tuvieras esas cosas, realmente estarías ejerciendo la prostitución. ¿Qué hay de libre elección ahí? No, yo siempre. De hecho, yo siempre hablo de este tema de entender que la precariedad es no tanto la precaria, la vulnerabilidad es muy subjetiva. Es decir, cualquier mujer es vulnerable y yo cuando pongo estos ejemplos siempre los pongo para que entendamos que a ninguna de nosotras nos es ajeno. Vale, es decir, a ninguna de nosotras. Yo lo yo lo tengo claro, pero necesitaba que lo volviese a decir porque creo que hay muchas mujeres que esa parte no la entienden. O sea, que el sistema capitalista es el que nos lleva a eso. Sí, acabará ahí. Gracias total. Nada. Y bonita. Vale. Si tú y Ana fíjate tal cual estabas haciendo la pregunta, me venía a la cabeza una frase muy chula de Celia Morós cuando decía El feminismo no cuestiona lo que las mujeres hacen, sino las causas por lo que lo hacen. Por lo tanto, cuando nosotras no hemos venido a cuestionar aquí lo que una mujer hace, lo que venimos es a combatir las razones que obligan o que fuerzan a que una mujer esté ahí y si consideramos que éticamente no voy a aceptar que las personas puedan vender su cuerpo, lo que tengo es que combatir las razones por las que al final las mujeres se ven forzadas. Por la interpretación que se considere de pobreza, de falta de oportunidades, por la trata. Esas son las razones que el feminismo quiere combatir. Jamás las decisiones individuales de las mujeres. Sí, bueno, lo primero se me oye sin agradecerte todo lo que haces y en cuanto a mí personalmente me has hecho muchos clics en la cabeza y te admiro muchísimo. Y uno de ellos es la explotación reproductiva que ya no le llamo si ya no la llamo así. Y te quería hacer una pregunta porque aparte ahora mismo en mi entorno hay una pareja que está en México actualmente todo eso sí, comprando un bebé básicamente. Entonces, claro, yo con mi entorno intento explicar esto y intento decir bueno, la barbaridad que es porque no se sabe y tienen como en todo argumentos que la gente se sabe de pe a pa. O sea, son los argumentos básicos y que dice todo el mundo. Y uno de ellos es que bueno, que sí, que en la situación en que una mujer lo hace por dinero porque está muy mal y lo necesita. Y bueno, que entonces eso vale, pero que cuando una mujer lo hace de forma altruista, porque eso se dice y es un argumento de eso que usan, que te pregunto qué argumento puedo dar yo para decir que sigue estando fatal. Vale, pues vamos a pensar juntas, vale? A ver. De momento es como que hay varias partes aquí no está la madre, la que yo llamo la madre, que ellos llaman gestante, que si lo hace porque quiere comprarse bolsos o reformar su cocina, no pasaría nada. No supuestamente. Están los padres compradores pobrecitos, no? Pero es que me falta algo en la ecuación. El bebé, no? Sí, efectivamente. Es decir, nunca vas a encontrar. Yo empecé a estar en contra de la explotación reproductiva por los bebés. Nunca vas a encontrar un argumento que te hable defendiendo la explotación reproductiva sobre los bebés. Es decir, la evidencia científica habla sobre la tragedia que es para un ser humano recién nacido separarse de su madre. No es algo determinante, no lo es, pero es algo trágico. Sí, es algo trágico. Ya la evidencia científica nos ha hablado de ello. Entonces pasa diariamente con la adopción. Por desgracia, es algo que ocurre por las circunstancias. Nadie lo ha planeado en la explotación reproductiva. Tu deseo de ser madre y de ser padre sobrepasa e incluso tu capacidad como posible madre. Es decir, ya es como que ya está hablando de cómo vas a ser tú como madre si ya de por sí estás priorizando tu deseo al bienestar de esa criatura. Me explico. Entonces nunca va a haber una forma de explotación reproductiva. Mira, yo cuando entrevisté a unos subpapis que compraron una niña en un niño perdón en México y otro niño creo que es en Canadá o en Australia, me hablaban sobre las maravillas que después estuvieron tiempo esa madre y ese bebé no juntos. Es decir, que hubo unos meses en los que incluso le dio un poco de lactancia materna y peor aún. Es decir, porque esto es como algo que lo dulcifica. O sea, yo incluso lo veo como más horrible porque ya ha habido incluso más apego, sabes? Y de todas formas es otro argumento. Pero vamos, facilísimo es que tú puedes decidir lo que tú quieras sin estar embarazada, pero también la evidencia científica ya nos ha hablado sobre la plasticidad del cerebro de las mujeres embarazadas. Ya nos ha hablado cómo cambia la forma de nuestro cerebro y como lo que tú piensas ahora en el momento en el que estás embarazada, lo ves de una manera completamente diferente y aquí hay un contrato que te está agarrando y que te está impidiendo que tú puedas cambiar de opinión sobre tu propio cuerpo. Esto vulnera los derechos humanos de las mujeres e incluso de esa mujer que en principio lo hace para comprarse un bolso, porque está por mucho que haya empezado por eso, ya no puede cambiar de opinión. Gracias. A ver, Cini. Cini, ¿por qué no estudias filosofía? De verdad, por favor. Hace historia del arte. Si no, haz historia del arte, pero filosofía, por favor. Hombre, no, de verdad, me estás reventando la cabeza. Llevo toda la vida con la filosofía y me estás reventando. Tus argumentos son de una... Perdonad que me he entrometido otra vez. Pero es que son argumentos sólidos, ¿vale? Es decir, tanto con la lógica, es decir, analizados desde la lógica como desde el sentido común. Y ante eso, es decir, no se puede rebatir. Son así o más, es decir, olvídate, ya no hay más. Es decir, es así y olvídate, no hay. Así que yo te animaría de verdad a que sigas los pasos. Sí, por favor. Y en la UNED. En la UNED. Perdonad, es que es un... Creo que quedaba así. Sí, a ver, nos quedaba. Ana Portal, por favor. Ana Portal. Y allí me vió un chico. Ay. Un chico preguntándome algo. ¿Se oye? Hola, pues así como tú reivindicabas desde la filosofía, yo lo voy a hacer desde la lingüística aplicada y desde el lenguaje. Muchas gracias a ambas por la utilización del lenguaje y de los distintos registros que habéis hecho cada una. Es curioso que Cindy se disculpara cuando decía alguna palabra que las personas que oyen considerarían malsonantes. Curiosamente, nadie del sistema prostitucional vería eso malsonante porque sería súper light, ¿no? Eso por un lado. A mí me dijeron en algún momento que lo que estábamos debatiendo era entre el sexo pactado y el sexo comprado. Pero yo creo que tú nos has dejado muy claro que el sexo comprado no existe. Lo que existe es se compra violencia. Eso es lo que se compra, violencia. Y eso es lo que no se nos tiene que ir de la cabeza. Entonces te sugiero, porque soy una feminista radical, te sugiero que cuando utilices ese lenguaje, Cindy, tan expresivo, luego no te disculpes. ¿Para qué? Ese registro es maravilloso de recordar... Me estoy disculpando porque estoy en una universidad. Claro, pero tú recuerda, y lo sabemos todas las personas que estamos aquí, yo soy titulada filología, ahora lo cuento así. Fijaos el uso que hacemos de la palabra puta. Lo hemos oído mil veces. Y yo puedo salir de aquí de esta conferencia diciendo que has estado de puta pena. Y resulta que eso lo incorporamos al lenguaje diario y coloquial. Y bueno, pues ahí nos movemos con cierta soltura. Y sin embargo, porque tú utilizas la palabra coño tres veces en un contexto académico, te sientes rarita, ¿no? Bueno, pues a mí me encanta escucharos a las mujeres jóvenes esa libertad que tenéis para hablar, porque a las más mayores incluso nos cercenaban esa posibilidad de la expresión comunicativa del lenguaje coloquial o como fuera. Y aunque me ves así con esta pinta, yo fui punky en los ochenta. Bueno, ella no lo ha dicho, pero es Ana Portal, es la jefa de Servicios de Igualdad de la Diputación de Castellón. Es decir, vale, que ojo. Que vaya allí, ¿no?, que le den el pedido a la chava. Ah, sí. Que le ha pedido hace mucho rato. Ay, se ponen los pies, la piel de gallina. Hola, vale, que mi pregunta es para Rosa. Y que decir que yo fui uno de los alumnos que fue a las Cortes de Derecho y que no acabo de entender por qué el resto de partidos políticos votaron que no cuando todos se mostraron en contra de la prostitución, incluso Vox. Entonces, ¿qué valoración hacéis? Porque me gustaría saberlo. La hipocresía. Porque además este debate lo habíamos tenido antes en las Cortes porque presentamos otro tipo de iniciativa que no obliga, porque allí le llamamos PNL, que es una proposición no de ley donde tú le dices al gobierno insto al gobierno a que haga esto, luego el gobierno si quiere lo hace o no lo hace. Pues cuando en el ámbito de las PNL en las Cortes Valencianas sacamos que instábamos al gobierno valenciano adoptar medidas para la abolición de la prostitución y lo votaron a favor. La mayoría y los demás. Nadie votó en contra. Fijaros, nadie votó en contra. Pero cuando tú llevas al Parlamento ya no instamos a, sino que lo que hoy voto, si lo voto mañana se publica en el diario oficial de la Generalitat. Las caretas se cayeron. Decidieron decir que todos están en contra de la prostitución, pero que esas no eran formas, que no había habido suficiente debate. Que queríamos aprovecharnos de este tema. Lo viste desde allí. Me alegro de tenerte aquí y por lo tanto, entre continuar mostrando la hipocresía en aquello que no creen, pues ayer ya se vieron que si esto lo aprobaban, hoy se publicaba el cambio en la ley y decidieron dejar tiradas a las víctimas y posicionarse para que no haya que los puteros sigan sin tener problema en mi comunidad y los señores empresarios de la industria del sexo hoy, mañana y los próximos meses sigan ganando el dinero que les dé la gana, porque la política no fue capaz de ponerse al lado de la dignidad humana. Me queda vale. Es que no quiero que se quede nadie sin preguntar la verdad. Si una y tenemos dos preguntas. Vale. Muchas gracias por la conferencia. La verdad que no doy los motivos por lo que me considero abolicionista, desde que te conocí entre otras feministas que he ido conociendo poco a poco. Pero realmente, más que una pregunta, quería pedirte un consejo porque tú hablas de que somos de las personas que hemos sido víctimas de violencia de género o agresión sexual, etcétera. Cuando consideras que eres una superviviente? Es decir, porque a lo mejor yo pienso lo he superado, pero a lo mejor no. Sigo con mi vida, sigo con mis estudios, con mi trabajo. Pero a qué nivel introducir a la gente nueva que conoces? O es que no sé cómo aplicarlo. O sea, sigues con tu vida y sabes que lo estás haciendo todo bien, pero como que sabes que tienes algo ahí. Pues bueno, ya le he dicho que hablo con ella después, pero quiero decir una cosa. Es muy bonito lo que me pasa con vosotras. De verdad es muy bonito que hoy me hayan esperado como un ramo de rosas, que mientras que estaba en la conferencia había algunas de vosotras que estáis llorando. Ojalá no pasara. Vale, de verdad que ojalá no pasara, pero es muy bonito y. Yo sé que has empezado diciendo que eres abolicionista. Gracias a mí, entre otras cosas. Pero yo sigo aquí gracias a ti. De verdad. Gracias a ti y a vosotras de verdad. A ver, queda una. Sí, nos va a quedar una pregunta aquí. Otra pregunta. A ver cómo es esto? Es que a ver, es que no me sabe muy mal. Es que estamos a ver estos 20 minutos ya no se los están viendo. Ya os lo digo para que lo sepáis, porque ya. Corta. Lo que pasa es que es verdad que estamos aquí y siempre yo intento darle más valor porque os habéis desplazado y todo, pero es que se van a quedar muchas cosas que es un hijo, es que él bueno, entonces me sabe mal el límite de tiempo y ya está. Si yo por eso quiero cortamos, hacemos tu pregunta. Creo que tenemos una allí que me había pedido. Es que me había pedido hace mucho rato que me habías pedido tú la del fondo y si le parece, dejamos la pregunta. Vale. Buenas, se me escucha bueno, muchísimas gracias. Bueno, yo vengo como Sofía feminista, pero también vengo como profesora porque yo soy profesora desde hace ocho años, entonces todo este tipo de charlas me interesa mucho, pues por cómo les enseño yo a mis alumnos y a mis alumnas, pues todos estos valores, porque son al final ellos y ellas los que se van a quedar en un futuro. Y bueno, tengo descanso. Yo tengo tres años, entonces ya es una edad muy tempranita, pero yo ya tengo alumnos que ves que tienen tintes machistas y me preocupa mucho el tema de la pornografía. El tema de la prostitución yo creo que a edades tempranas se ve desde lejos, pero me preocupa mucho el tema de la pornografía, porque sí que es cierto que si es cierto que desde los ocho añitos empiezan. Yo tengo muchos alumnos. Yo tengo muchos alumnos con ocho añitos y es algo que me preocupa. Entonces, ¿cómo puedo yo llevar estos temas sin que a lo mejor tenga problemas con los padres y todo eso a las aulas? Pues mira, yo he reflexionado de esto muchísimo. De hecho, estuve entrevistando a un chico que se llama David Saavedra y una chica que se llama María Oliver, que son respectivamente, bueno, los dos han estado radicalizadas las dos partes. Me llamaba muchísimo la atención porque yo lo escuchaba y lo identificaba muchísimo con los discursos de la violencia sexual y con la violencia que recibimos las mujeres. Tenéis que ver ese capítulo de Queridas Hermanas, es un ex nazi y una ex latin queen. Y yo hablaba mucho sobre, joder, es muy importante empezar a introducir discursos en contra de los radicalismos desde que son súper pequeños, porque cuando son pequeños es cuando se empiezan a radicalizar. Pues lo mismo pasa con los temas de violencia sexual. Yo respecto a esto... Bueno, y de machismo en general, ¿no? Yo respecto a esto lo veo súper claro. Hay una forma de hablar de sexo con cualquier persona siempre adaptándolo a la edad. Y yo creo que para edades tan tempranas no es necesario hablar de relaciones sexuales, pero son oportunidades maravillosas para hablar del consentimiento. Y empezar a hablar de lo que es el consentimiento. Y el consentimiento muchas veces ni siquiera tiene nada que ver con lo sexual, sino es con lo de no me gusta que me toques. Esta es mi cuerpo y estos son los límites de mi cuerpo. No tiene por qué irse a lo sexual. Y si empiezas por ahí, nunca un padre te va a venir a decirte qué haces hablando de esto con mis hijos. Porque al final yo creo que cuando estos temas llegan al sexo es como la punta del iceberg. Es decir, cuando llega a la violencia sexual es como la punta del iceberg. Pero antes lo que subyace es un montón de misoginia, de creencias misóginas, del no ver a las mujeres por igual. Y si tú empiezas ya a dar esa contraeducación en el cole en las que transmitas estos valores, aunque no sea necesariamente sobre el sexo, ya estás dando un cambio brutal. O sea, ya estás poniendo en un grano de arena, estás poniendo una playa. ¿Sabes? Porque antes he dicho yo una cosa respecto al género. Que está igual cómo eduquemos a los niños y a las niñas en casa. Si es que no les educamos nosotros, si es que los educáis vosotras prácticamente. Y el contacto que tienen con otros niños y con otras niñas. Entonces el cole, la guardería, la escuela infantil, después del instituto es fundamental. Fundamental. Y repito, no hace falta decir cosas explícitamente sexuales. Ya simplemente con hablar sobre el transmitir el que las mujeres somos iguales. Es decir, que somos seres a la par. Ya estás, lo he dicho, haciendo una playa. Sí, por favor. Y ya contigo te terminamos. Quería pedirte un consejo. ¿Qué tipo de argumento? Porque me encantan los debates con mis amigas, con mi familia, con mi pareja. Y muchas veces he tenido el debate de qué contestar con lo que habéis dicho sobre el abolicionismo. En cuanto a los puteros sería como multarlos o etcétera. ¿Y qué solución se les daría a las prostitutas? Porque siempre todo el mundo me sale con ¿y qué hacemos con las prostitutas? ¿Cómo las ayudamos? Claro, pero es que en esto yo creo que tú estás mucho más legitimada para hablar. Pero en esto es que ya estamos ante un ejemplo. Cuando usan ese argumento de ¿y qué hacemos con las prostitutas? Es que ya están intentando contraargumentar un argumento que no es abolicionista. Porque si lo fuera, no haría falta la pregunta ¿y qué hacemos con las mujeres prostituidas? Porque repito, nadie está promoviendo que se prohíba hoy la prostitución. Si parte de las propuestas abolicionistas es precisamente el que... Poco a poco baje la... Venga, como lo digo, que poco a poco se consiga la desincentivación. ¿Y qué pasa con esas mujeres? Pues en todas las propuestas abolicionistas que yo he visto y en las propuestas de ley abolicionistas que yo he visto siempre está la parte de considerarlas como víctimas de violencia machista y por ende tener las protecciones legales y las ayudas que reciben las mujeres víctimas de violencia machista. O sea, es que ya el mero hecho de reconocerla... De reconocerlas legalmente como tal, ya se van a poder agarrar a eso. Otra cosa es, y otro debate es, si son suficientes estas medidas y lo que reciben las mujeres víctimas de violencia machista. Pero es que ahí estamos entrando no solamente en hablar sobre las prostituidas, estamos hablando realmente de todas las mujeres víctimas de violencia machista. ¿Me he explicado? Totalmente. De todas maneras, como nosotras solemos decir, hay miles de vidas de mujeres y de muchas niñas que no hemos... que no hemos hablado de ellas, pero como las meigas es a verlas aislas, lo bien cierto es que si los hombres entendieran la sexualidad en otros términos, la prostitución acabaría. Es decir, esto acaba el día en que acabe la demanda. Y por eso es muy importante desincentivar la demanda con charlas como esta en el sentido de hacer pedagogía, y hacer pedagogía con los hombres, que la sexualidad es otra cosa. Y sobre todo es otra cosa que tiene que ver con el deseo y con lo compartido. Si no podemos desincentivar solo con el corazón, con la razón, pues meterte una multa que te puede suponer 3.000 euros y que la multa te llegue a casa como estés casado, tenemos... No es un problema, estoy ya a las horas que estamos. Pero mirad, yo lo decía antes al principio, está ocurriendo en Alemania y ocurre en el corredor de la vergüenza de la comunidad valenciana. La prostitución a lo mejor de los años 80 o de los años 70 o de principios de siglo era muy diferente a la que es hoy. El nivel de banalización que hay en la sociedad en relación a la prostitución está haciendo que la prostitución se desvanezca. Y que se haya incorporado sin ningún problema en las guías de ocio. Eso significa que la prostitución forma parte del circuito de las cosas que hago por placer. Me voy a la discoteca, me voy en despedida de soltero, hasta incluso me voy a una reunión, me voy a un partido de fútbol y el divertimento máximo es terminar comprando prostitución. Eso tenemos que conseguir hacerlo desaparecer. Pero sobre todo tenemos que conseguir desaparecer la demanda porque ni siquiera tenemos la oportunidad de hacerlo desaparecer. Ni es normal, ni es sano y ya debemos acabar con esta idea de que hay cuerpos sintientes que compran y cuerpos disponibles para los deseos de los hombres. Yo quiero añadir lo último, simplemente porque me acabo de acordar de, mira, cuando me preguntáis argumentos, es que no os podéis imaginar cómo los pienso yo para hacer vídeos, para que directamente... Además, antes cuando hacía más vídeos, porque ahora ya casi todo el contenido que hago es contenido del podcast. Antes empezaba muchos vídeos diciendo, esto es para tu cuñado. Esto es para que se lo mandes a tu cuñado. Pues me acuerdo que una vez hice un guión de un vídeo porque justo leí cómo cuando empezó el movimiento abolicionista de la esclavitud había las personas que querían que se mantuviera la esclavitud, que siguiera siendo legal la esclavitud, utilizaban e instrumentalizaban a los esclavos diciendo ¿pero y qué va a pasar con los esclavos? ¿Sabes qué va a pasar con los esclavos? ¿De qué van a vivir? ¿Qué van a hacer si no saben hacer otra cosa? Entonces, claro, a día de hoy, que ya ha pasado un tiempo y lo podemos ver con perspectiva, nos llevamos las manos a la cabeza pensando cómo no se daban cuenta de que los esclavos estaban siendo instrumentalizados en un discurso que lo único que quería era perpetuar la violencia que sufrían. Y esto, si lo llevamos el abolicionismo de hoy con perspectiva feminista, si lo trasladamos a otros movimientos históricos abolicionistas, es muy fácil detectar qué discurso verdaderamente vela por los derechos humanos y qué discurso es el que pretende que los esclavos tengan. Y es el que pretende perpetuar la deshumanización. Y ya está. Ilustración, igualdad y esperanza. Bueno, y yo como hombre pido perdón. Gracias.