Bien, pues efectivamente vamos a por la penúltima sesión de la EFNA y la del próximo lunes, día 15. Entonces tenemos el reto por delante de explicar el arte en la Edad del Hierro, que bueno, pues como es un periodo muy marcado por la diversificación regional, pues hay muchas realidades artísticas y culturales que caracterizar. Es verdad que el contexto general de transformación de las sociedades en la Edad del Hierro, en cierta medida lo hemos visto cuando hablábamos de las transformaciones del bronce final, aunque volveremos sobre ello en estos primeros minutos de esta sesión. Entonces, bueno, muy probablemente el tema lo vamos a tener que partir entre esta clase y la de hoy. La del lunes y si nos da tiempo he subido la presentación, creo que es la número 12. Bueno, pues veremos alguna consideración sobre el tema ese que no van a preguntar del arte rupestre o el arte prehistórico en general como patrimonio cultural, que en cualquier caso, bueno, pues inciden en cuestiones de sensibilización patrimonial y también de protección del arte como patrimonio. De la humanidad, el arte prehistórico en tanto que patrimonio de la humanidad. Algunas de esas reflexiones ya las vimos en la presentación cuando hablamos de la artificiosidad del concepto de arte prehistórico y bueno, y que lo vinculábamos también a la cuestión del simbolismo, con lo cual, bueno, pues si nos da tiempo a profundizar más, pues lo veremos y si no, pues lo dejamos así. Como estamos diciendo, ¿no? Con la explicación del arte en la que el Hierro había abierto una presentación que no era esa. Bien, bueno, tenemos que pasar de esa segunda mitad del segundo milenio antes de Cristo en el que se produce el colapso del modelo de las sociedades del bronce un colapso que es contemporáneo precisamente al periodo en el que el bronce se generaliza como materia prima en Europa al arte en la edad del Hierro y a las sociedades de la edad del Hierro, que en realidad para entenderlas hay que entenderlas como en tres grandes focos culturales en los que desde el momento en el que se incrementa la demanda del estaño para fabricar bronce en el bronce, el bronce final, queda más o menos compartido el ámbito mediterráneo. La parte centroeuropea donde habíamos tenido las culturas de Montelius, en la fase final de Montelius, de los campos de urnas, de Unetice, por ejemplo, de Otomani, de Otomani-Monteoru, que vimos en el tema sobre la edad del bronce, reunidas en torno a una nueva cultura. Se protagoniza el primer episodio de la edad del Hierro y que en muchos elementos se identifica con lo que llamamos el Hierro I, más o menos desde la segunda mitad del segundo milenio hasta en torno al siglo VII, VI a.C., por tanto ya mediado el primer milenio antes de Cristo. Ese grupo de Hallstatt va a tener, posteriormente en la segunda edad del Hierro, una prolongación hacia el ámbito más occidental de Europa que toma forma, de la misma manera que Hallstatt, la cultura hallstattica, toma nombre del yacimiento austriaco de Hallstatt, por tanto en un ambiente de la Europa central y oriental, la edad del Hierro II, que arrancaría en torno al siglo VII hasta prácticamente el contacto de estas poblaciones con el mundo romano, gira en torno a los focos de la cultura de la Aten, que prefigura en cierta medida lo que llamaríamos el arte céltico. Esas dos distinciones entre cultura hallstattica equivalente a primera edad del Hierro y cultura lateniense o laténica o latén, equivalente a la segunda edad del Hierro, son dos distinciones que se encuentran en torno al siglo VII hasta la segunda mitad del siglo VIII, pero son diferentes porque la cultura hallstattica es fiel a los principios culturales del bronce centroeuropeo y en cambio la cultura de la Aten está muy influenciada al ser más occidental por los otros dos elementos, hablábamos como de tres grandes focos en los que quedaba dividido el Mediterráneo, el foco europeo continental con Hallstatt, y dos focos principales, uno en la fachada atlántica europea que toma forma sobre todo en la segunda edad del Hierro, en el llamado arte céltico, que es en realidad la continuación de la extraordinaria tradición orfebre que vivieron las poblaciones de la fachada atlántica prácticamente desde la cultura de Wessex a los pueblos armonicanos en el bronce medio y en el bronce final. En el otro lado de Europa también el arte tracio, que tiene parecidos con el arte céltico por estar en un contexto de predominio metalúrgico y de cierta tradición también pirometalúrgica, porque ya sabéis que el ámbito balcánico era un ámbito bastante próspero y bastante precoz. También en la producción metalúrgica. Y el último elemento, que en cierta medida va a modificar la zona costera de las culturas de la Europa continental, especialmente de la Aten, también de Hallstatt, pero también de los grupos culturales más tradicionales de la Primera Edad del Hierro en la península itálica o en la península ibérica, que es ese fenómeno que llamamos el orientalizante, que es el concepto que designa la ida y vuelta de influencias en el Mediterráneo desde más o menos el 1100-900 a.C., según los datos de los historiadores romanos, aunque probablemente es una fecha un poco exagerada, Gadir, la colonia fenicia de Occidente. Bueno, la otra colonia fenicia es Carthago, pero a nosotros nos afecta más directamente Gadir. Se habría fundado por los fenicios de Tiro en el año 1100 a.C. Y la colonización fenicia I, entre más o menos el siglo XI y el siglo VI-VII a.C., y la colonización griega más tarde, entre el siglo finales del VII hasta el IV, y el siglo VIII a.C., protagonizan la transformación de grupos culturales de las fachadas costeras de la península itálica, del sur de Francia y del valle sobre todo del Guayana y del Guadalquivir para el mundo fenicio y del Segura hasta el Ebro para el mundo ibérico, que va a dar lugar también a realizaciones culturales locales bien diferentes, ¿no? En ese contexto es en el que surge, por ejemplo, la cultura tartésica y el llamado arte tartésico, tan de moda ahora con el hallazgo de las carras del Turuñuelo, que tuve la oportunidad de ver en persona la semana pasada en un viaje a Mérida, en una conferencia. Y bueno, este día cimiento, cuando se musealice, que va a ser pronto, es espectacular. O sea, las caras son muy bonitas, pero este día cimiento O sea, bajas en realidad al subsuelo de una colina artificial formada por la amortización intencional, parece, de ese centro de culto en un momento en el que se desequilibra la población y los recursos en la zona y deciden romper el centro de culto y marcharse, ¿no? Y entonces martillean incluso a las supuestas representaciones de divinidades las caras que han aparecido gotas por los propios moradores del Turuñuelo de Guareña, a veces, que es un sitio espectacular. Y así surge también el arte etrusco y el arte ibérico. Pero claro, como el arte tartésico, etrusco e ibérico nacen los dos primeros de la influencia fenicia y el ibérico fundamentalmente de la influencia griega, tradicionalmente, cuando hablamos de la cultura tartésica, del arte prehistórico en la Edad del Hierro, también tenemos que hablar, segunda etiqueta, digamos, del subtítulo de la presentación del arte de las colonizaciones. Es decir, bueno, si el arte ibérico o el arte tartésico es el resultado del impacto sobre poblaciones locales de las formas artísticas fenicias y griegas, bueno, ¿qué elementos novedosos trae? No fenicio del mundo griego para que en el ámbito de los valles del Guayana y de Guadalquivir surja esa plástica tan singular, que en cierta medida es parte de los elementos locales amplificados, transformados por los elementos traídos o llegados desde el exterior a partir del mundo griego. El arte ibérico es un aspecto colonial que en general, bueno, pues se incluye en el contexto del orientalizante. Es verdad que en rigor los prehistoriadores tienden a restringir el orientalizante al periodo de la primera Edad del Hierro, en el que sobre todo es el impacto fenicio el que actúa y un poco en la fase final el impacto griego, pero en realidad, bueno, pues el origen del arte ibérico a partir del siglo V. antes de Cristo, y yo que sé, pues la dama de Elche o el sepulcro de Pozo Moro, la dama de Bazán, o los calazos y cerámicos ibéricos, en realidad también son orientalizantes porque el foco cultural en el que se inspira la decoración, las formas, la interacción entre formas y decoración es claramente del Mediterráneo Oriental, en este caso de la colonización. La colonización griega que, bueno, pues se interrumpía a partir del siglo IV con la crisis del siglo IV antes de Cristo, que viven la mayor parte de las poleis griegas y también las que actuaban como metrópolis del proceso colonial y dar a paso, pues bueno, a la disputa del Mediterráneo por cartagineses y romanos, que en cierta medida casi se van a repartir, la herencia territorial de las dos áreas de influencia de ese marco del arte de las colonizaciones. Los fenicios, o el territorio fenicio va a ser el área de dominio púnico, de dominio cartaginés y las zonas de mayor presencia griega van a ser zonas de dominio romano, ¿no? Por eso Sagunto, donde debía haber una fuerte colonia griega, según cuentan los historiadores, cuando narran la Segunda Guerra Púnica, es una aliada de Roma, ¿no?, porque era una ciudad con una gran presencia de componente demográfico colonial griego, quizá caen en contacto con la gran colonia griega en el nordeste que es Emporio, ¿no?, la colonia de Empurias o Empurias en Tirona, que, bueno, pues también hablaremos un poco de ella cuando caractericemos qué elementos culturales traen los grupos coloniales. Bueno. Pues a la península ibérica y, en general, a las fachadas costeras de todas estas civilizaciones del entorno costero del Mediterráneo. Lógicamente, hablar del arte en la Edad del Hierro nos obliga también a introducir, sobre todo para la Segunda Edad del Hierro, pero también para algunos episodios de la Primera Edad del Hierro, ya los elementos escritos. Ya los hemos utilizado cuando hablábamos de la Edad del Bronce y de los palacios minoicos, por ejemplo, aunque, bueno, se pasan muy por encima en la asignatura porque se ven más en arte clásico o en la asignatura de historia antigua, pero en realidad, tartesos como tal o el mundo etrusco, los tirrenoi que se citan en las fuentes, o el mundo de los ópida de la Segunda Edad del Hierro. Digamos, del Aten lo conocemos porque hay unas fuentes griegas y romanas que hablan del reino legendario de tartesos o que hablan de una sociedad floreciente en la parte central entre el Arno y el Tíber, en la península itálica, que es el mundo etrusco, o hablan de una serie de Celti o de Galoi, ¿no? De celtas, ¿no? De celtas o de galos, o de celtíbero y no, de celtas de Iberia en distintas regiones y que permite también que en la Segunda Edad del Hierro, más allá de la materialidad de lo lateniense, las fuentes escritas permitan crear, porque también aquí ha habido mucha artificiosidad luego explotada también desde una óptica a veces autonomista e identitaria, pues todas esas etnias antiguas en las que parece que estaba descompuesta. Pues la península ibérica o la Galia, ¿no? Cuando César dice que la Galia está dividida en varias partes con los belgas, los aquitanos, etcétera. Bueno, pues lo hace como una manera de aprender el territorio y eso no quiere decir que celtas y aquitanos se sintieran entre sí diferentes, sino sencillamente, bueno, pues que tendrían algunos marcadores culturales que a los ojos de Roma eran diferentes, ¿no? Y eso hace también que nuestro conocimiento del arte en la Segunda Edad del Hierro, y sobre todo el arte celtico de la Edad del Hierro II, del arte ibérico, esté muy condicionado también por la información que dan las fuentes clásicas. Lo mismo para conocer a los protagonistas de las colonizaciones, ¿no? Conocemos muy bien el mundo fenicio porque los historiadores griegos y romanos hablan de la colonización. En el Mediterráneo conocemos Tartessos porque los geógrafos griegos hablan del río Tarsis y de las naves de Tarsis y de Tartessos como región. Y conocemos también el modelo organizativo de muchas de las sociedades de la Segunda Edad del Hierro, como por ejemplo las de los tracios, los escitas o los propios celtas, porque en ese... interés un poco etnográfico que tuvo la literatura romana, el propio César de hecho, pero más tarde, por ejemplo, en época ya imperial tácito, pues les gusta contar, bueno, pues cómo hay pueblos que viven un poco a la primitiva y que viven separados de toda gran influencia cultural del Mediterráneo que han tenido... un impacto sobre esos territorios desde siglos atrás. Eso siempre resulta sugerente como elemento novelesco, pues funciona muy bien y nos ayuda a conocer también qué había detrás socialmente del arte celta, del arte escita, del arte tracio, del arte etrusco, que siempre se presentan, insisto, como civilizaciones así como muy puras y a las que no ha llegado todavía la humanidad. Y, por último, la parte de la corrupción, un poco del impacto colonial. Me acordaba, mientras explicaba esto, bueno, la vi el otro día de la película Irati, que no sé si habéis visto, que es una película sobre el mundo vascón del siglo VIII, en ese contexto un poco en torno a la batalla de Roncesvalles, inguarista, etcétera, y que es un poco eso, ¿no? Es una especie como de reivindicación de la pureza de la humanidad. Es una historia cultural de una zona apartada, alejada de las influencias coloniales, sobre todo romanas y ya en el siglo VIII cristianas, y bueno, eso siempre ha funcionado como cliché, digamos, literario. La Germanía de Tácito es eso y la guerra de las Galias de César también es eso, ¿no? Es contar que hay gente que vive o estrabón cuando habla de los pueblos antiguos de la península ibérica. Pues no habla mucho. No habla mucho de los que son los más cultos y los más influidos por las tradiciones culturales fenicia, griega y romana, sino que le despierta mucho más interés en los que son más salvajes, ¿no?, porque tienen costumbres que al lector o al oyente de estrabón pues le parece que le van a interesar más que que le cuente que hay ciudades y ríos y vías y puentes romanos, que es obvio que los hay en un territorio ya provincializado. Desde el siglo II a. C. Estrabón ya escribe en los años 20 del siglo, a partir de los años 20 del siglo I a. C., y de hecho es uno de los autores de los que podemos echar mano para hacernos cargo de todo ese, esa compartimentación de Europa en tribus que en realidad son, desde el punto de vista de su cultura material, típicamente de la Atena, de la Segunda Edad del Hierro, pero que Estrabón llama titos, lusones, velos, belgas, germanos, germanos inferiores, turboletas, les da los nombres que probablemente también en ocasiones o ellos se daban o la administración romana pues contribuyó a la. Bien, teniendo en cuenta eso, bueno, pues vamos a trazar las características básicas de los dos momentos clave de la Edad del Hierro. La Edad del Hierro I, que es la que marca la transición entre el bronce final y la Primera Edad del Hierro y la desaparición del bronce y la irrupción y generalización de la metalurgia del hierro y la Edad del Hierro II, que quizá, aunque esto puede o en esto puede tener algo de influencia. También el efecto de todos estos autores antiguos frente a la gran uniformidad que supone la cultura de Hallstatt, que desde un centro que ni siquiera es un gran centro metalúrgico, sino que es un centro vinculado a la explotación, extracción, explotación y comercio de la sal, que es el poblado austríaco de Hallstatt, con unas instalaciones para mover la sal de un lado a otro. Mineras absolutamente eclesiales. Extraordinaria. Se convirtió como en el gran epicentro, nos recuerda un poco a lo que sucedía en Montelius en la Edad del Bronce, que no produce metales, pero que se erige en cultura importante e influyente por el comercio del ámbar. Pues Hallstatt lo mismo. Uno esperaría que el arte o las culturas responsables de la política, entre comillas y el resto, ¿no?, de la geopolítica en la Primera Edad del Hierro, fueran culturales. Bueno, pues de herreros y de gran actividad metalúrgica, y Hallstatt no lo es. En realidad, de hecho, es una cultura, como decía, extractiva, minera, pero no vinculada al hierro, sino vinculada a la sal. Entonces, en la Segunda Edad del Hierro, bueno, pues quizá hay una compartimentación cultural mayor que permite trazar ese mapa, que en la propia península ibérica vemos muy bien, ¿no? Muy influido también por el relato de los geógrafos y de los historiadores grecoromanos, ¿no? Prácticamente en la Primera Edad del Hierro, todo en la península ibérica son las culturas de cogotas y la cultura de las motillas en la meseta norte y sur, respectivamente, y luego ya empiezan a aparecer en el mundo de la Segunda Edad del Hierro, pues el mundo ibérico, el mundo céltico. El mundo tartésico, bueno, ahí en realidad un mosaico cultural muchísimo mayor. ¿Qué es lo que caracteriza la Primera Edad del Hierro? Bueno, pues en cierta medida la sustitución de la metalurgia del bronce por la metalurgia del hierro y la intensificación de los cambios que se produjeron en Europa en el bronce final, ¿no? De generalización de la metalurgia del bronce, de dependencia de los focos culturales atlánticos de los que se puede obtener el estaño y que eso genera una sobredemanda del estaño que hace que eso en un momento determinado colapse, incluso haya que retirar armas y productos de bronce de la circulación, los famosos depósitos, ¿no?, de los que hablábamos hace algunas semanas. Entonces, el hierro sustituye al bronce desde la época halstática, bueno, y también es un metal que por su abundancia, su accesibilidad y por su calidad, que es más duro, pero también más, una vez trabajado, pero también más flexible a la hora de trabajar. Y, por lo tanto, el hierro, pues, acaba un poco por imponerse, ¿no? Aunque probablemente la revolución cultural del bronce fue mucho más incisiva desde el punto de vista tecnológico, cultural, social, que la revolución cultural del hierro, que por otra parte, desde el tercer milenio antes de Cristo ya se estaba utilizando en algunos territorios del próximo siglo. Otra novedad en la Primera Edad del Hierro es que frente a lo que habíamos visto hasta ahora, en que los grandes focos metalúrgicos y culturales estaban en el Mediterráneo Oriental o en la Europa Oriental, los focos balcánicos de la metalurgia, pues, Bunda Glava, Gulmenitsa, en Serbia, en Bulgaria, en Rumanía, ¿no? Y las culturas del bronce, ¿no? Desde el Egeo, tanto el heládico como el minoico, como el cicládico, bueno, pues ahora Hallstatt en Centroeuropa, por tanto, en la Europa ya, digamos, occidental, se convierte en el gran centro cultural y económico de toda Europa continental que a partir de ese momento, tercera característica, empieza ya a dar muestras clave. Y, por último, la diversificación de la tradición de la edad del bronce. Bueno, es que la tradición de la edad del bronce, la tradición local de la edad del bronce, pues, ha sido muy clara en el mundo precéltico y el mundo hallstático, y grupos muy influidos por los nuevos centros de poder colonizadores que, por el colapso de las grandes civilizaciones del Próximo Oriente, el ejército de la Unión Europea, han sido muy influidos por el del mundo iniquita, el mundo fenicio, el imperio nuevo egipcio. Bueno, pues salen al Mediterráneo, sobre todo los fenicios, porque otros, como el mundo iniquita, se desmembran en una serie de subreinos, digamos, que por otro lado estaban aglutinados en torno a la capital del imperio iniquita. Ya vimos esto en la asignatura de Historia Antigua. Pero los fenicios sí que por la presión asiria salen al exterior y van a contribuir a esa diversificación. regional, porque generan esa corriente que abre el fenómeno cultural del orientalizante. Precisamente esos dos modelos, el modelo más tradicional, más local, menos innovador, digamos, y el modelo más colonial, más influido por los grupos orientalizantes, en cierta medida van a dar lugar a dos modos de dedicación económica diferentes. Sector primario e intercambio local-regional para el primer grupo, para el cultivo. El grupo cultural típicamente halstático. Comercio a larga distancia, redistribución, captación y exhibición de bienes de prestigio para los grupos culturales más impactados por la influencia orientalizante. De ahí que uno compara Halstatt y Tartessos, Son coetáneas y, bueno, pues evidentemente son dos culturas muy desarrolladas de Europa, pero el aspecto, bueno, pues es diferente porque en Tartessos muchas de las realidades, no solo el ruñuelo, también el cancho roano, por ejemplo, y el castillo de Doña Blanca, y tantos enclaves, ¿no? Carmona, ¿no? Pues son ecos de los... modelos palaciales, defensivos de Oriente, y Halstatt en realidad es una evolución de todas esas culturas del bronce tradicional que veíamos hace unas semanas en estas sesiones. ¿Qué sucede en la Segunda Edad del Hierro? Bueno, pues que esas sociedades de la Primera Edad del Hierro aglutinadas en torno de Halstatt se rompen y se desmembran en una serie... a partir del siglo VI-V a.C., en una serie de unidades menores que comparten algunos elementos culturales, pero que sobre todo capitalizan áreas de influencia regional muy concreta, ¿no? Por eso a las sociedades de la Segunda Edad del Hierro se les llama... también la sociedad o la cultura de los opida, con dos P's, ¿no? El término opidum en latín es un término que, bueno, pues los historiadores y geógrafos romanos utilizan con acepciones muy diversas, a veces es equivalente a municipio, a veces es equivalente a ciudad, ¿no? Pero en arqueología sobre todo el opidum designa... a cualquier castro en altura que domina un territorio y que capitaliza el control territorial de una determinada región. Frente a ese modelo de la Primera Edad del Hierro en que hay unos pocos centros que prácticamente se reparten en el dominio de toda Europa, en la Segunda Edad del Hierro hay una serie... de opida, de ciudades-estado, que en realidad lo son, que se articulan, se defienden, se autorrepresentan a través también de su arquitectura y de su cultura material y que en cierta medida prefiguran lo que será luego el mapa urbano de la Europa clásica, ¿no? De la Europa, me refiero, romana, ¿no? Quizá en alguna ocasión, si os ha dado clase o habéis asistido a alguna conferencia suya, de Javier Armendariz, que es profesor aquí en la UNED Pamplona y que escribió un libro sobre el origen de las ciudades-estado en Navarra en el primer milenio, que en realidad es en la segunda mitad del primer milenio antes de Cristo. Él suele siempre proyectar un mapa con los opida de la Segunda Edad del Hierro en Navarra y prácticamente, salvo alguno... ...que luego desaparece porque hay, bueno, pues una reorganización territorial, pues todos coinciden con donde van a estar luego las ciudades romanas, cuyos nombres conocemos, pues a través de las fuentes antiguas, ¿no? En cierta medida, la Segunda Edad del Hierro es el primer gran momento en el que la regionalización se hace a partir de centros que organizan el poblamiento de la escala estrictamente local y comarcal, que mantienen obviamente relación con sus vecinos, que redimensionan el modelo de los bienes de prestigio, ya no es tan importante un comercio a larga distancia, pero sí los pactos, por ejemplo, entre comunidades más o menos próximas, ahí es donde entraría, y aquí en Navarra hay, de hecho, nueve ejemplares en la... ...Custodialidad de Viana, donde precisamente escava el profesor Armendariz de esas teseras, no teselas, teseras de hospitalidad, que son pactos de relación entre ciudades o entre individuos, ¿no? Este período del Aten, aunque Hallstatt-Diar es una cultura indoeuropea, el período del Aten es una cultura también indoeuropea, también céltica, en la que hay una institución fundamental, como sabemos, por la epigrafía, y sabemos también por estos autores antiguos, que es la del hospitium, ¿no? El hospitium es establecer relaciones entre individuos o entre representantes de comunidades que son individuos que representan a una ciudad y que da lugar, bueno, a esas teseras de hospitalidad que en el ámbito céltico, sobre todo en la Segunda Edad del Hierro, son bastante frecuentes y son también objetos desde el punto de vista artístico muy singulares, ¿no? Las que han aparecido, de hecho, en la Custodialidad de Viana, pues tienen forma de carnero, de cerdo, bueno, pues de animales que debieron ser también como símbolos de la riqueza en las sociedades de la Segunda Edad del Hierro, que también tienen, lo sabemos, por las descripciones de los autores antiguos, bueno, pues un gran sesgo ganadero, ¿no? La ganadería y la agricultura son civilizaciones claramente primarias, tiene más peso ahora, aunque ya lo tenía la del bronce, que a lo mejor el comercio. Esa regionalización del territorio, esa cultura de los ópida, como la llamábamos anteriormente, estimula también un gran crecimiento demográfico, parece que es un periodo en el que precisamente el origen de las ciudades tiene que ver con el paso de las aldeas a esos ópida, a esos centros urbanos que acogen a población dispersa en beneficio de un centro que hace de mejor manera productivos los alquileres. Y, por último, la diversificación de los territorios. Como ya en la Primera Edad del Hierro había habido una cierta diversificación regional como consecuencia del impacto fenicio y en la fase final griego, en la Segunda Edad del Hierro la diversificación va a tener que ver con la segunda parte de la colonización griega, con el impacto de Roma y también con el peso que la tradición metalúrgica tiene en la región. La tradición metalúrgica tiene en algunos focos de la cultura de la Aten, por ejemplo en el propio enclave en la Francia oriental de la Aten, que da lugar a esas espadas de antenas que tenéis en pantalla, las espadas latinienses, pero que no se dan en todos los ámbitos de las culturas de la Segunda Edad del Hierro en Europa. Y las culturas, bueno, pues de los estilos. O de los tracios hacia la Europa oriental y del mundo céltico hacia la Bretaña francesa al sur de Inglaterra y en la península ibérica lo que sería la llamada cultura castreña, la cultura de los castros del norte de Portugal, más o menos del Duero hacia el Cantábrico, sobre todo el territorio asturgalaico, no tanto el territorio cántabro, hablando en términos de... ¿no? No tanto de comunidades autónomas actuales, aunque en ese caso casi coincide, sino de etnias antiguas, ¿no? Astures, cántabro, galaicos, etcétera, ¿no? Que en cierta medida son como los grandes destellos de desarrollo artístico, orfebre, cultural y simbólico de la Segunda Edad del Hierro. Bueno, aquí en este mapa tenéis muy bien, bueno, pues un poco la... como en el Mediterráneo, bueno, pues hay una zona costera en la península ibérica, en el sur de Francia, en la península itálica que va a estar muy influida por las idas y vueltas del orientalizante en el Mediterráneo y luego hay como un gran grupo cultural homogéneo céltico en una primera fase con centro en Hallstatt, que veis aquí, y en otra segunda fase con centro en Latén, más, como digo, hacia occidente, bueno, y con una serie de focos que precisamente en la península ibérica corresponden a lo que luego los textos antiguos llamarán la Celtiberia, frente al ámbito ibérico que es en el que impacta la civilización griega, la Celtiberia, que da espaldas de los influjos culturales fenicios y griegos y prácticamente mantiene un modo de vida muy parecido al de esa cultura de Latén, pero claro, los celtíberos, o son celtas de Iberia, son celtíberos tanto los lusitanos, por ejemplo, del territorio actualmente portugués o de la región española de Extremadura, pero también los galaicos y los astures. Y los cántabros y los mardulos, o sea, prácticamente toda la cornisa cántabrica-celtibérica y probablemente hay elementos distintivos entre unas culturas y otras, con lo cual va a ser muy diferente también las manifestaciones artísticas de los grupos costeros que las manifestaciones artísticas y culturales, en cierta medida, de los grupos del interior. En el mapa también se marcan con distintos colores, bueno, pues las colonias fenicias, las colonias griegas, los distintos ópida, algunos de los cuales, de hecho, son conocidos luego por los episodios de la conquista de las Galidas por parte de César. Lutetia, que es la actual París, o Alesia, otras que nos hablan de ese avance ya de la conquista romana, como sabéis, en la década de los, sobre todo, cincuenta, del siglo I a.C., que es el periodo de expansión de Roma en las Galias, a cargo fundamentalmente de las conquistas de César y luego ya más tarde, en época imperial romana, desde Augusto también hacia el interior del mundo, la espalda del mundo galo, que será el territorio germano, que, bueno, pues tanto costó integrar a Augusto por el... episodio de Teotoburgo y luego que los emperadores clavios acabaron incorporando y administrando también desde el punto de vista provincia, ¿no? Bueno, ¿cuáles son los grupos artísticos de la Edad del Hierro? Bueno, pues los dos grupos que son icónicos en la Primera Edad del Hierro, Halstatt, y en la Segunda Edad del Hierro, Laten, y luego todos esos grupos periféricos, que descansan sobre tradiciones metalúrgicas previas muy asentadas, tipo el arte céltico o el arte cita o el arte tracio, o que descansan sobre influjos culturales bastante potentes, influjos culturales bastante potentes derivados de ese fenómeno que conocemos con el nombre del orientalizante y que, bueno, pues hemos caracterizado brevemente unos minutos atrás, ¿no? Bueno, ¿qué caracteriza a Halstatt desde el punto de vista cultural y artístico? Desde el punto de vista cultural lo tenéis ahí muy sintetizado, ¿no? Bueno, pues distintos grupos, predominio del ritual de la inhumación, muy diversa actividad económica, pero centrada en actividades extractivas y sobre todo en la extracción de la sal, modo de vida en poblados fortificados con un urbanismo, bueno, pues que es parecido al que hemos conocido en los enclaves de algunas de las culturas del bronce antiguo y del bronce medio en la Europa central y en principio como con dos variantes, aunque a veces muy interconectadas, ¿no? El grupo halstático oriental o del interior, como veíamos antes, Halstatt está aquí bastante en la Europa central pero un poco basculando hacia la Europa oriental, pero también es Halstatt el territorio, por ejemplo, del sur de Francia influido rápidamente por la instalación aquí en el punto azul que veis de la colonia de Massalia, de la actual Marsella, que es uno de los centros junto con Emporion, uno de los centros clave del impacto griego costero en el sur de Francia. Algunos de los elementos que veis ahí como temáticas o como objetos artísticos, beben un poco en la tradición de Trondholm o de los enterramientos de Egbed o de algunas de las tumbas de Leuvingen, principescas que hablábamos del bronce. Enterramientos de inhumación con carruajes como elemento de ajuar, con un diván sobre el que se coloca el difunto y con todo un ajuar guerrero que incluye desde elementos de producción autóctona como espadas y elementos de armamento a otros importados, bien de la tradición atlántica como esa sítula, el caldero de Hogdorf que es uno de los elementos de adorno personal en la tumba de Hogdorf que tenéis en maqueta en la parte inferior también con el carrito en la parte superior esto también se da en algunas tumbas del ciclo vilanoviano y de la cultura etrusca pero también con elementos de ajuar importados o imitando no necesariamente importados de la influencia griega, por ejemplo esa crátera que tenéis ahí de Vix en el sur de Francia también en una tumba de las culturas halstáticas es una crátera de volutas como las típicas cráteras del arcaísmo griego más o menos del siglo VI antes de Cristo con todo este relieve además en la parte superior con escenas de parada de guerreros que nos hablan también de todo ese mundo un poco heroico que en cierta medida conocemos también por los poemas homéricos que decíamos que se ilustraban muy bien en este periodo un poco entre el 1200 y el 800 antes de Cristo que es un poco el final de la Edad del Bronce y el inicio de la primera Edad del Hierro En la segunda Edad del Hierro en el grupo de Latén como hemos dicho anteriormente lo más característico es que el mundo indoeuropeo penetra desde Europa Central hacia Europa Occidental y hacia la Península Ibérica desarrollando, difundiendo sobre todo un ritual de incineración que sustituye al de inhumación que había sido habitual en las culturas más puras de la variante Hallstattica que hemos dicho a partir de Hofdor o Biggs o las otras tumbas de este periodo y que también evidencia una gran diversificación regional y cultural que deja hueco en cualquier caso a la difusión de bienes de prestigio sobre todo vinculados a el adorno personal y a la representación de la élite social pues los torques, los brazaletes los puñales, las víbulas algunas fabricadas muy toscamente y sin grandes aparatos decorativos como la fíbula tipo Abucisa que se llama o las fíbulas tipo Cogotas en la Península Ibérica que no son más que broches así curvos como los que veis en el lateral izquierdo de la derecho, perdón, de la imagen y otras, bueno pues tienen elementos más de gusto orientalizante fijaros esos dos carneros enfrentados del torques y que bueno se convierten también en elementos marcadores de la gran estratificación social que se vive en torno a esto sópida frente a las culturas aldeanas de la Primera Edad del Hierro las culturas ya plenamente urbanas de la Segunda Edad del Hierro también marcan una diversificación social que se traduce en que hay que marcar al exterior que uno es miembro de la élite y hacerlo a partir de unos marcadores externos que puedan ser, pues bueno todos estos elementos de adorno personal armas, espejos cuentas de collar, etcétera en algunos ámbitos sobre todo los más orientales del área lateniense sobre todo este espacio oriental de la Bretaña Francesa del sur de Inglaterra por ahí hay parte del noroeste peninsular nos encontramos con una orfebrería que como se apoya sobre ese sustrato tan potente de la orfebrería del bronce final y del bronce medio en esas regiones da lugar a las mejores manifestaciones del llamado arte céltico que en cierta medida se caracteriza por todas esas filigranas geométricas animales bastante barrocas incluso por el uso de materias primas que van más allá del hierro que incorporan también el oro que incluso siguen utilizando el bronce tenemos también en la edad del hierro grupos culturales singulares que, bueno pues son el resultado de adaptaciones de la cultura de la primera del hierro o de la segunda del hierro como las dos que tenéis ahí un poco como modelos enfrentados a las influencias coloniales y a las tradiciones locales un ejemplo muy bueno es la cultura en este caso el manual habla del arte obviamente vilanoviano que es el arte de la cultura de Vilanova una cultura del área de la región de Emilia Etruria y parte de Campania que es un poco precursor del arte y de la cultura etrusca que nacerá como consecuencia del impacto de las poblaciones griegas sobre las colonias de la Magna Grecia y sobre todo a partir de la Kumas del gran oráculo del mundo griego en occidente que fue la síbila de Kumas que permitió contactar con las poblaciones itálicas del interior y que en realidad son poblaciones muy aldeanas dedicadas a la agricultura a la ganadería a la minería y al comercio pero que como veis en la cerámica en la derecha reproducen con estos elementos lobulados en los bordes de las bocas de las cerámicas y con todos estos pitorros y también con el tono anaranjado del engobe el modelo de la cerámica fenicia que va a tener esa caracterización lo veremos también la semana que viene el elemento característico de la primera edad del hierro en algunas regiones y que lo fue desde luego en el bronce final que era el de los campos de urnas con urnas que bueno pues tienen ese aspecto más o menos oicomorfo un aspecto de casa que hay lo de oicomorfo que bueno pues habla también de la percepción del enterramiento como una especie de mansión digamos para la eternidad luego lo cierto es que los etruscos también cuando hagan esos sepulcros en Batería pues en Cerveteri en la Toscana pues bueno los hagan también como casas con esa estructura alintelada que luego pues bueno muchas necrópolis romanas pues la de Portus o algunas de las necrópolis de las vías de salida de Pompeya pues mantienen esa estructura un poco edicular ¿no? de edícula de caseta digamos que tienen los sepulcros en ese caso bueno pues muchos también de incineración ya clásicos bueno y que tienen un poco su antecedente en esas osteotecas o en esas cajas de huesos ¿no? que son interpretaciones locales de las urnas carenadas con cenizas dentro y con el ajuar revuelto con el que se ha quemado al difunto que se generalizan a partir del 1200 con el impacto de los urnenfelder de los llamados campos de burlas y para la segunda edad del hierro un grupo cultural con personalidad propia es el del arte tracio ¿no? que se ubica en los focos metalúrgicos de gran tradición orfebre de la Europa oriental en el ámbito de la península balcánica muy en contacto con el mundo griego pero también con tradiciones culturales muy indígenas digamos desde la óptica griega ¿no? pues todo ese relieve con cabezas cortadas que es típico también de estos grupos indoeuropeos o ese kilix ¿no? esa copa de mano ¿no? que hay a la derecha también con todos los elementos iconográficos pues que recuerdan bastante al influjo orientalizante y que en cierta medida bueno pues dan razón de ser de los modelos culturales distintos que hay en Europa ¿no? la península ibérica y lo dejaremos aquí para abordar eso la semana que viene ofrece dos equivalentes al estándar del arte tráceo noviano primera edad del hierro y al estándar del arte tráceo segunda edad del hierro que son el mundo tartésico que es un resultado de la implementación de grupos culturales locales como consecuencia del impacto fenicio y el mundo ibérico la plástica ibérica que es el resultado del impacto griego sobre las poblaciones de eso que en las fuentes antiguas se llamó Iberia y que no es otra cosa que la península ibérica en la antigüedad así llamada por el peso ¿no? que las fuentes romanas y griegas concedían al Iber lo que será luego el Iberus flumen romano el río Ebro que bueno era más próximo a las zonas conocidas por esa primitiva colonización fundamentalmente griega luego Roma penetró hacia el interior pero el Iber siempre fue como un elemento estándar ¿no? en la compartimentación territorial y en la percepción cultural de la península ibérica en la etnogeografía de la antigüedad