Vamos a dar un minuto, que ahora vamos a hablar de todo eso. Bueno, pues bienvenidos a Literatura. Entonces, podría ir a ver... Recuérdame tu nombre, Vicente, que me lo dijiste la semana pasada. Y ya ves que cabeza tengo. Entonces, me perdonas, Vicente. Y estábamos hablando de la lectura de García Soberanera, que Vicente ha leído, y estábamos comentando, antes de arrancar la sesión, pues, algunos sonetos que tienen que ver con su amistad con Boscán. En tanto, hoy vamos a leer un soneto de Boscán a García Soberanera. Hemos leído y estábamos comentando el soneto, uno de los sonetos que García Soberanera dedica a Boscán, además de otras obras más importantes, como la famosa Epístola a Boscán, escrito en versos de casílabos sueltos, de mucha importancia. Entonces, no solamente Boscán está en ese soneto, sino en otras partes de la obra de García Soberanera. Y ahora me estabas comentando algo importante que te he dicho, vamos a grabarlo. Lo de decirlo, lo de que acompaña a las tropas, lo de que acompaña a las tropas. Eso es. Es decir, que compagina su vida guerrera con su vida poética, pero eso desde el principio. Es decir, todas esas fisicitudes políticas o guerreras que le pasan entre ellas, el destierro en una isla del Danubio, pues esa está documentada, en una de sus canciones, en la canción del Danubio. Creo que podemos leerla unos días para ver la canción petrarquista. Entonces, efectivamente, o lo que me hablas de ese paso por Hungría, defendiéndose por Viena, defendiéndose de los turcos, el duque de Alba, etc. Entonces, conmemora esa ocasión en la Égloga II. Es ahí donde... ...describe como si estuviera habiendo un bajo relieve, pero con las hazañas del duque en la ocasión de la defensa de Viena frente a los turcos. Dentro de las glorias que canta el duque de Alba, pues una de ellas será su actuación en Viena, frente a los turcos, que también estuvo, pues también está en su poesía, en este caso en las Églogas. Porque cuando hablamos de la obra de García, sobre la vea, pues tendremos que tener en cuenta los diferentes géneros que cultiva. Es decir, tener claro lo que son las Églogas, una de ellas, vamos a ver la primera, estábamos hablando de la segunda, donde aparece escrita de una manera polimítica, cosa rara. La Égloga II se estrena desde todos los puntos de vista. Desde los puntos de vista de que combina diferentes estrofas. De casila, pues hace el experimento de las rimas internas, de casílagos con rimas internas, y combina diferentes tipos de estrofa en una sola Égloga. La Égloga normalmente, en la primera y en la tercera, hoy vamos a ver un fragmento de la primera, pues utiliza la estancia como forma de expresión, que después hablaré qué es la estancia, para definirla y entender eso de la estancia. Es la forma estrófica más complicada del mundo, en el sentido de que es tan variable, de hacer tantas variaciones, que es difícil definirla, si no es por su forma de, vamos a llamarle, tripartita. Claramente, ¿de acuerdo? Que es lo que vamos a analizar hoy. La forma de la estancia, independientemente del número de versos y del tipo de versos. Porque normalmente la estancia combina los versos de siete sílabas, en casílagos, con los versos de once sílabas, en decasílabo. Y estancia se utiliza tanto para las Églogas, en esas estrofas largas de las Églogas, como para las canciones. Bueno, eso debe ser alguien que quiere pasar. Vamos a ver. Vamos a ver si... Sí, Santiago, vamos a darle paso. Bueno, bienvenido, Santiago, a Literatura de los Relacimientos. Nos hemos visto hace un momento en literatura medieval. Llevo dado un salto de cien años y nos hemos puesto en literatura del Renacimiento. Entonces, pues bueno, primero bienvenido, por supuesto. Y estoy aquí acompañado por Vicente, un compañero tuyo. Y estábamos comentando ya directamente la obra de García Solavega, en tanto que es una de las lecturas obligatorias que tenéis que saber manejar, en tanto distinguir lo que estábamos haciendo ahora, los diferentes géneros líricos que cultiva García Solavega. No solamente escribe sonetos, sino que también escribe canciones. Y ese conjunto de canciones y sonetos, cinco sonetos, perdón, cinco canciones, y casi cuarenta sonetos, constituye lo que se llama el cancionero pecarquista. Pero además también escribe lejías para la muerte del Duque de Alba, como la epístola, como su amigo Boscán, la epístola Boscán tan célebre. O también escribe obras, si queréis, de más aliento lírico, que podemos llamar lírico dramático, que son sus églogas. Escribe tres. Escribe la égloga primera, de la que hoy vamos a ver un fragmento, la égloga segunda, que estaba comentando con Vicente, y la égloga tercera, que es la de las ninfas del Tajo que están bordando sus labores y bordan diferentes escenas mitológicas que aluden a la situación sentimental del poeta. Eso es, obviamente, y son muchos versos, pero tenemos que saber distinguir las partes de sus obras para ver los diferentes géneros que cultivó García. Pero ya ves que has leído muy bien y que es así como hay que hacerlo, y practicando, es decir, en los textos. Entonces eso es fundamental. ¿El examen en qué consiste? Bueno, el examen va a ser una parte teórica y un comentario guiado. ¿Y la teoría qué es? Lo que te pregunte, no sé, la influencia de la imprenta, por decir el tema uno, o el tema dos, los poetas de la generación de Garcilaso y te pregunten en concreto las características de... Todos los temas los tienes en Ágora, que es la nueva plataforma que utilizamos. Ahí tienes todos los temas uno por uno, los sistemas que componen el programa y ahí puedes consultarlo para preparar esa parte teórica donde tienes que hacer una exposición sobre algo que te van a preguntar, características, autores, obras de este periodo, poesía o prosa, todo lo que es el temario. Sobre ese temario te van a preguntar y después la siguiente parte del examen es un comentario de texto. El comentario de texto guiado, es decir, tienes que responder a lo que te preguntan sobre el texto. No tienes que elaborar un comentario desde... contextualizando, estableciendo el tema, la estructura externa... Es que la pregunta no tienes que decir, no tienes que hacer el comentario desde cero y no estructurar todas sus partes sino que tienes que responder a preguntas concretas sobre el texto que tienes que comentar y eso es el examen. Bueno, pues... estábamos muy entretenidos hablando de literatura, de la filasa de la Vega y si os parece podemos pasar a los textos que hoy tenía preparados que son dos. Este primero que es un texto de Juan Buscán, como veis 1492, más mayor, una generación mayor que la de Garcilaso pero su amigo del alma, de hecho en una foto que os he puesto ahí dice las obras de Buscán y algunas de Garcilaso de la Vega repartidas en cuatro libros. Las de Garcilaso ocupan los cuatro libros, es decir, la primera edición de la obra de Garcilaso pues la hace Buscán, poniendo a su amigo en el cuarto libro los textos de su amigo que acabo de... fijaros, me parece que es de 1543 esta primera edición de las obras de Buscán y algunas de Garcilaso y Garcilaso permanecía inédito. Después fue tal el éxito que nos olvidamos de Buscán y empezaron a aparecer las ediciones de la obra de Garcilaso y ya comentadas por grandes intelectuales de la época. Sí, el siglo XVI me parece que la de Fernando de Herrera que son las obras de Garcilaso de la Vega comentadas con todo tipo de erudición pues éstas son de en torno a 1580 me puedo equivocar a lo mejor pero más o menos sobre esa fecha y después aparecen otras muchas así que y todas aparecen pues eso a finales o del último cuarto del siglo del siglo XVI efectivamente vale aquí estamos a principios de siglo y Garcilaso ha muerto, nos ha publicado su obra y entonces su amigo Buscán la va a recoger en esta edición bueno pues dicho eso vamos a leer un soneto de Buscán de su amigo Buscán que dedica Garcilaso con ocasión de lo que tenemos que ver que será el tema del texto y que no lo adelanto para que lo entendamos leyéndolo juntos dice así el texto primero leemos y después ya analizamos métricamente, conceptualmente entendemos lo que hemos leído y dice así Garcilaso que al bien siempre aspiraste y siempre con tal fuerza le seguiste que a pocos pasos que tras él corriste en todo enteramente le alcanzaste dime por qué tras ti no me llevaste cuando de esta mortal tierra partiste porque al subir a lo alto que subiste acá en esta bajeza me dejaste bien pienso yo que si poder tuvieras de mudar algo lo que está ordenado en tal caso no olvidaras que o quisieras honrarme con tu lado o al menos de mí te despidieras o si esto no después por mí tornaras bueno pues este es el texto que hoy vamos a comentar y como veis claramente qué forma tiene es un soneto veis dos cuartetos los he puesto por separado primer cuarteto segundo cuarteto tercer cuarteto entonces claramente es un soneto que es la forma del de la lírica Petrarquista por esencia de hecho la cilasso compone 40 vamos aquí voy pero Mosca han escribido muchos más sonetos todos los autores escriben sonetos el modelo es petrarta es la moda italianizante que vimos la semana pasada poquitos, claro. Con 36 añitos menos, muy pocos años, claro. En el año 36 muere, ¿no? ¿En Niza o en Niza sí? Eso es. Voy a decir en Nima. No es en Niza, sí. Me falta también una fortaleza, una pedrada por lo visto, de escalada y muere en esa acción. Entonces muere muy joven y deja una obra pero que va a tener una repercusión porque todos nos vamos a olvidar de buscar, que es el autor de este soleto que acabamos de leer. Y pues Garcilaso es el que... Pero vamos, la forma es lo importante que identificéis con esta época, que va a ser cuando finalmente se adapte el soneto y el entecasílamo al español. Porque bien es verdad que había habido tentativas, ¿no? Como la del Marqués de Santillana en el siglo anterior, ¿no? Con sus sonetos fechos al itálico modo, pero no estaba adaptado del todo. Y tiene algunas cuestiones y cuando realmente alcanza y se populariza y triunfa dentro de la poesía española, frente a la poesía tradicionalista de Santillana y de los cancioneros, etc., pues va a ser con la adaptación de Garcilaso y de Buscán en esa célebre entrevista que comentábamos antes en Granada con ocasión de la boda del emperador Carlos con Isabel Portugal, ¿no? Bueno, pues ahí el navajero que fue el embajador de Italia, representando Italia en las bodas, ¿no? Pues introduce y dan por hecho, pues, la adecuación del entecasílamo a la poesía española, ¿no? Y ahí es el inicio de, vamos a decir, toda esta explosión de poesía italianizante tan criticada por los poetas tradicionalistas, ¿no? Que no entienden un verso tan grave, ¿no? Para la bíblica o por lo que sea. Bien, pues dicho eso, para situar la forma que estamos comentando, pues vamos a ver si hemos entendido todas las partes del soneto antes de pasar al análisis métrico estrictamente, ¿no? Y analizar una serie de curiosidades porque, claro, la forma soneto implica qué tipo de verso. Eso será qué tipo de estrofas, pero qué tipo de versos. En decasílamo, ¿no? En decasílamo, o sea, versos de once siglas. ¿No? Que es la novedad, ¿eh? Eso es en decasílamo, ¿no? Y en decasílamo es un tipo de verso. Adelante, ¿qué tal? Muy buenas. Adelante. Se incorpora un nuevo compañero, así que, pues, bienvenido a... Estamos... No se veía nada, ¿no? Para entrar. Hay que buscarlo. Bueno, no pasa nada. Estamos en literatura del Renacimiento. Bueno, pero eso cree la construcción de la modernidad. Ese libro yo creo que pertenece a una asignatura de segundo curso, que es Textos del Siglo de Oro. Entonces, esta asignatura es del primer curso y es literatura del Renacimiento. Muchos textos, todo eso abarca el mismo periodo de lo que vamos a hablar. Pero ese libro es más una colección, una antología de textos y bien tiene explicaciones muy interesantes en torno a... cosas muy importantes, ¿no? Entonces, es un libro que te vale perfectamente para preparar la asignatura, pero los contenidos los debes de preparar no con ese libro, sino con los archivos de PDF que están en Ágora, que es la plataforma donde tienes que descargar los contenidos. Entonces, complementariamente, ese libro te puede valer y te valdrá sobre todo en el segundo curso para abordar los textos literarios del Siglo de Oro. Y ahora, si te vas a la fecha, es una asignatura de segundo curso. ¿De acuerdo? Pero sí que te vale para preparar muchas cosas, ¿eh? Garcilaso, las características del tetralactismo, el amor platónico... Está muy bien explicado en ese libro y te va a servir muy bien. O sea, que no es un libro desechable, si bien es el manual de otra asignatura. O lo ha sido, ya no sé si sigue siéndolo. ¿Puedes llamarlo también la estrella asignatura? ¿Se ha recomendado esta asignatura? No. No. Las lecturas obligatorias en esta asignatura, Literatura Española del Renacimiento, son cuatro. Entonces, la primera es la que hoy estamos comentando, la obra de Garcilaso de la Vega. ¿De acuerdo? Entonces, esa es una lectura obligatoria. La siguiente... Ayúdame. Era de encerraje. Era de encerraje. Es una novela morisca. Jarifa y la de encerraje. ¿De acuerdo? Esta la tenemos que leer. Es prosa difícil. Es una colección, novela morisca. Hablaremos de eso. Tenemos también el Quijote, la primera parte. Y se me olvida una, que ahora no sé cuál es. Juan de Valdés. Ah, eso es. El diálogo renacentista. Juan de Valdés, que es el diálogo sobre la lengua, que es un diálogo. La importancia del diálogo en ese libro también te va a informar muy bien de lo importante que es el género diálogo para vehicular de los conocimientos y de las cosas, ¿no? Es decir, conocimientos de la retórica, de la pintura... De cualquier aspecto, de cualquier disciplina, de la gramática o de la lengua, ¿no? Como es el caso de la obra que tenemos que leer, que es el diálogo de la lengua de Juan de Valdés, ¿no? Donde Valdés dialoga con discípulos que le reciben en Roma después de una larga ausencia. Entonces, pueden hablar de la lengua española. Bueno, pues esa es la última lectura. En el orden que hay que hacerla no la sé muy bien. Pero nosotros en la tutoría vamos a comentar textos de... De Garcilaso en primer lugar. Después comentaremos en segundo lugar de Juan de Valdés el diálogo de la lengua. Después creo que tengo los correspondientes a la del encerraje y a la Bella Jarifa. Y después tengo el Quijote. ¿De acuerdo? Eso es el programa que puedes consultar en Academos. Entonces, en Academos ahí están todos los textos colgados. Puede que vaya variando algunos o cambie tal, pero eso más o menos es lo que te sirve de guía que va a seguir ese plan de trabajo. Entonces, ¿qué hacemos aquí? Pues comentar textos, ¿no? Ahora mismo estábamos leyendo un soneto de Boscán, de Juan Boscán a Garcilaso. Y entonces te invito pues a que lo leamos otra vez. Desde el principio no nos pasa nada porque hay que leerlo muchas veces. Y comentar el texto, ¿no? Pues sus principales características. No solamente formales, sino estilísticas, genéricas, ¿no? Del género ya hemos hablado de la forma soneto, cómo es una forma italianizante, ¿no? Que viene de Petrarca, que utiliza el endecasílabo como vehículo, ¿no? Es decir, el verso de once sílabas y nos hemos quedado ahí. Y te he dicho que el endecasílabo era un tipo de verso especial, en tanto que es un verso de los que se llaman métricamente silabotónicos. ¿Por qué? Porque exige que los acentos... de las palabras recaigan en una sílaba determinada. Es decir, no pueden caer en quinta ni en séptima sílaba del acento, ¿no? Los acentos van a caer siempre en sexta sílaba como el principal o en cuarta. Entonces se van a establecer diferentes tipos de endecasílabos según su acentuación, según su ritmo. Entonces es lo segundo que vamos a hacer, ¿no? En esta segunda lámina que os he puesto métrica, pues vamos a analizar ese soneto de Boscán. Pero puesto que se incorpora, vamos a empezar por el principio. A ver, me he quedado sin pantalla. ¿Qué hacemos? Aquí sí, ahí no. Entonces... Bueno, no hay nadie, así que no pasa nada. Entonces, pues venga, vamos a leerlo otra vez el soneto. Juan Boscán, ya hemos gozado de la figura de Juan Boscán, es de las personas que va a introducir la poesía italianizante en España con Garcilaso, ¿no? Y de hecho, como os he puesto en la primera lámina, que podéis ver ahí, ves, esta es una obra, las obras de Juan Boscán con algunas de Garcilaso de la Vega divididas en cuatro partes. Con Privilegio Real, Carles Amorós, con una data de 1543. Es decir, la obra parecía póstuma, ¿no? Tanto que Garcilaso muere en el año 36, ¿no, Vicente? Fue en el año 36 en Miza, Castillo, muy joven. Y entonces no ve publicada su obra. Si es caso, sí, dio publicada su carta a la princesa de César y poco más. Es decir, la prosa de Garcilaso, que se habla muy poco, pero también se puede estudiar porque hay ejemplos claros, ¿no? Con su poesía latina, que es otra parte de su creación literaria, ¿no? Son escritos en latín. Pero nosotros nos vamos a centrar en sus obras escritas en español y etcétera. Bueno, pues lo que vamos a hacer es poner, ¿no?, los que van a introducir este asunto, ¿vale? Después tendremos que aguardar unos años para que aparezcan ediciones muy prestigiosas. En 1580 la de Herrera o la del Brocense, también que va a aparecer posteriormente, que son ediciones comentadas, comentadas estilísticamente, históricamente, en fin, con un aparato de erudicción enorme, ¿no? De acuerdo, de fuentes, ¿de dónde ha sacado ese verso? Pues de Horacio, de Virgilio, de las fuentes que va a tener, ¿no? En fin, estas ediciones van a ser muy importantes y van a considerar a Garcilaso como un clásico, como un maestro, ¿no? Porque solamente se comentan los maestros. A Virgilio, ¿no? A Petrarca, a Dante, ¿no? Pues va a pertenecer al canon de estos porque los grandes intelectuales de la época, Herrera, Fernando Herrera o el Brocense, ¿eh? Un catedrático de Griego en la Universidad de Salamanca, ¿eh? De las Brozas, Sánchez de las Brozas, el Brocense, pues escribe también sus comentarios a la obra de Garcilaso de la Vega y no van a ser los únicos. Otros más también van a incidir en lo mismo, ¿no? Bien, pues eso todo son cosas del género, ¿no? De que pertenece. Vamos a leer el texto, venga. Me dices tu nombre, a ver si después me acuerdo. Daniel, ¿no? Daniel y Vicente, a ver si... Venga, pues mira, el texto es muy sencillo, es un soneto, por lo tanto este es el primer cuarteto, ¿eh? Que dice... Garcilaso, que al bien siempre aspiraste y siempre con tal fuerza le seguiste, que a pocos pasos que tras él corriste, en todo enteramente le alcanzaste. Pero la... la... ¿es rima consonante? Sí, sí, es consonante, pero es A, ¿eh? ¿Eh? Es A, B, B, A. Esa es la rima, ¿no? Aspirastes o no alcanzaste, y seguiste o corriste. Sí, pero es como... ¿Cómo se lo hacía? La rima se produce, ¿no? A partir de la última vocal acentuada, ¿no? Entonces, aspiraste, la última vocal acentuada es AS y la última es TE, ¿sí o no? Pues cuando todos los sonidos son iguales a partir de la última vocal acentuada, los sonidos vocálicos y consonánticos son los mismos, eso es rima consonante. Cuando solamente son igual las vocales y las consonantes difieren, eso es rima consonante. Eso es rima asonante, ¿de acuerdo? Entonces, esta rima claramente consonante, ¿no? Porque aspiraste, ¿eh? Es claramente, ¿no? Aste, alcanzaste, ¿no? A partir de la última vocal acentuada son iguales las vocales A, E y las consonantes, S, T. Y igual en los... en el verso 2 y 3, seguiste y corriste, ¿no? La última vocal acentuada es la I, ¿no? Y los sonidos son los mismos, I, E, S, T. A la última sílaba... Ya, pero el acento no cae en T. El acento cae en A o en I, no en T. T es átona, es el pronombre y es átona, ¿entiendes? Y la tónica es A, no T. Porque efectivamente, si la tónica fuera T, tendríamos una palabra aguda al final del verso. Y cuando hay una palabra aguda al final del verso, hay que sumar una sílaba más, como si ese es brújula. Entonces, hay que restar una sílaba más. Pero si es llana, se queda... coincide el número de sílabas fónicas y el número de sílabas métricas, ¿eh? A no ser que haya otros fenómenos que afectan al cómputo, ¿eh? Sin alefas, dialefas, diéresis, sinéresis y todos los fenómenos que afectan al cómputo silábico, además del final de la palabra del verso. Pero en este caso, son llanas, ¿de acuerdo? Pues eso lo vamos a ver porque vamos a ver el análisis métrico, ¿vale? Rápido. Este es el primer cuarteto. El segundo cuarteto tendremos, dime por qué trastino me llevaste cuando de esta mortal tierra partiste, porque al subir a lo alto que subiste acá en esta bajeza me dejaste. Le dice al amigo, ¿no? Dice, bien pienso yo que si pudieras de mudar algo o lo que está ordenado, en tal caso de mí no te olvidarás. Que, o quisieras honrarme con tu lado, o al menos de mí te despidieras, o si esto no, después por mí tornarás. Bueno, ves, es el tercero, primero y segundo, ¿no? Entonces tenemos la forma del soneto, ¿no? ¿De acuerdo? Pero venga, vamos a los contenidos que después vamos a repasar la forma. ¿Hemos entendido todo? ¿Cuál será la figura central del poema? La figura estilística principal. Ahí la tenéis. Vamos a decir lo del poema, ¿no? Vamos a decirle el primer verso. ¿Cuál es la figura estilística que al bien siempre aspiraste? No, no, no hay hiperbatón. No, y además no es una figura de carácter sintáctico como el hiperbatón, ¿no? Es una figura de carácter pragmático, ¿eh? Es decir, porque afecta los elementos de la comunicación. ¿Sí o no? Es decir... Pero el hiperbatón fue el que no le... Sí. El hiperbatón, ¿no? Es la intromisión de un elemento sintáctico como un inciso entre elementos que no se pueden separar. Eso es el hiperbatón, ¿vale? Pero ahí no hay... Porque al bien aspiraste, al bien... Bueno, podría haber inversión en tanto que el complemento directo antecede al verbo. Entonces podrías hablar de inversión anástrofe, pero no de hiperbatón, ¿vale? Pero eso es una figura, es un complemento rítmico esa figura que se llama inversión anástrofe, ¿no? No. Es una figura de significado, por lo que yo os pregunto, la lírica es fundamental. La metáfora. ¿Cuál es la metáfora? En Garcilaso, que al bien siempre aspiraste. El invocativo. El invocativo, la invocación o apóstrofe. Es decir, está hablando con quién. ¿Quién es Garcilaso? Es el receptor del mensaje, ¿no? Es la segunda persona a quien habla. Pues esa es la metáfora. Es una figura... Bueno, claro, la pela, ¿no? Le llama. Por eso se llama invocación apóstrofe, ¿no? Entonces es una ficción de persona que está fingiendo que habla con Garcilaso. ¿Lo vemos? No habla con Garcilaso realmente, ¿no? Pero finge hablar con Garcilaso. Esa segunda persona es Garcilaso, ¿no? Entonces la figura principal que tenéis que descubrir en ese verso es ese, ¿entendéis? El apóstrofe. O invocación. Se puede invocar a personas, se puede invocar a muertos, se puede invocar a seres inmateriales, a fenómenos de la naturaleza, a los ríos, a los cielos, a los dioses. Es decir, se puede invocar, llamar, ¿no? A cualquier cosa. Entonces es un recurso muy propio de la lírica, ¿eh? Y en este caso se llama, ¿eh? Es una ficción de persona porque se finge la persona del receptor, ¿no? Es decir, la persona de Garcilaso, ¿no? Con quien se habla. Pero ¿cuál es el tema del texto? ¿Qué le pasa a Garcilaso? Garcilaso formará parte del tema del texto, pero ¿qué le pasa a Garcilaso? Bueno, eso es lo que nos dice, ¿no? Un apóstrofe. Garcilaso, ¿qué cualidades o qué atributos le podemos atribuir? Seguir el bien y conseguirlo. Ha conseguido, quizá el bien significa, ha conseguido escribir bien, ¿no? Ha conseguido lo que pretendía, ¿no? Adaptarlos en decasílabos, ¿no? Escribir bien. Bueno, pues eso es algo que le atribuimos a Garcilaso, efectivamente, ¿no? Pero yo no te preguntaba qué le atribuimos a Garcilaso, sino cuál es el tema del texto. El bien de Garcilaso, vamos a ver en la siguiente lámina, ¿no? Que la primera es difícil. En esta sí la tenemos que ver, ya seguro. Le dice, dime. Es decir, ¿a quién remite? A la apóstrofe a Garcilaso, ¿no? Le dice a Garcilaso como si estuviera presente, que le responda, ¿no? ¿Y qué es lo que le pregunta? ¿Por qué no me llevaste detrás? ¿Por qué no le llevo detrás? Cuando de esta tierra mortal partiste. ¿Está inventando un muerto? ¿Está inventando, no? ¿Está inventando un muerto? Eso es, eso es. La muerte de Garcilaso será, por lo tanto, de lo que estamos hablando. Independientemente de que tenga el atributo de haber conseguido alcanzar el bien, que siempre persigue. Aparte de ese atributo, como cualquier otro que le podía haber, dado el poeta a su interlocutor, ¿no? Lo que está claro es que el interlocutor está muerto. ¿No? Es decir, que el poema está escrito después de la muerte de Garcilaso. ¿No? Entonces, ¿está hablando con un vivo o está hablando con un muerto? Está hablando con un muerto. ¿Veis? Está fingiendo la personalidad de Garcilaso. Las dos interrogaciones retóricas, casi se llaman. Esas dos interrogaciones, ¿no? Porque, ¿qué hace? ¿Preguntar realmente o subrayar qué ha partido de esta tierra? Es decir, que se ha muerto. La muerte de Garcilaso. Subraya la muerte de Garcilaso de una manera, expresando sentimiento, expresando, ¿no? Las expresiones estas retóricas, ¿no? Pues, manifiestan un cierto patos, ¿no? Un cierto sentimiento, ¿no? Una cierta expresividad de lo que podía ser el dolor, la desolación por la muerte del amigo, ¿no? Segunda, ¿qué nos dice? ¿Por qué a subir a lo alto que subiste? ¿A dónde subió? Al cielo. Acá, en esta bajeza. ¿Qué bajeza es esa? La tierra. La bajeza. Me dejaste, me dejaste en la bajeza de la tierra. Subiste a lo alto. Subiste al cielo. Es decir, estás muerto, ¿no? Y yo vivo en la tierra y tú en el cielo. ¿No es eso? Es decir, ¿cuál es el tema entonces de Garcilaso? La muerte de Garcilaso. Ese es el tema. Vamos a los terceros para entenderlos mejor. Dice, bien pienso yo, que si poder tuvieras de mudar algo lo que está ordenado, ¿qué es lo que está ordenado? Si tuvieras poder de mudar, de cambiar lo que está ordenado, ¿qué es lo que está ordenado? Eso es, lo que está ordenado. Lo que está ordenado es el destino. ¿Y acaso los hombres pueden cambiar el destino? Es decir, si pudieras de mudar algo lo que está ordenado, que no lo tienes, ¿no? ¿Qué pasaría? En tal caso de mí no te olvidaras, porque son amigos íntimos. La amistad entre Boscan y Garcilaso, pues hemos hablado de eso, ¿no? Es decir, no tuvieras, hubieras podido cambiar el destino antes de morirte, tú hubieras parado y dijiste, bueno, ¿qué pasa? Si tuvieras un destino y me hubieras, te hubieras despedido de mí, no te hubieras olvidado, no te hubieras ido sin despedirte. Dicen, ¿qué? Porque o quisieras honrarme con tu lado, es decir, quisieras apetearme, llevarme contigo, o al menos de mí me despidieras o me hubieras dicho adiós, o si esto no, ni una cosa ni la otra, después volvieras a verme. Pero no tiene el poder. ¿Cómo se llama esa figura que tenemos ahí? Bien pienso yo que si poder tuvieras de borrar algo lo que está adionado, que, en el segundo tercero, que o quisieras honrarme, o te despidieras, o volvieras. Una anáfora de o en los últimos versos, pero además de la anáfora, que sería una figura, una... Una figura por repetición de palabras, principio de secuencia o verso. ¿Qué otra figura muy importante hay ahí? También afecta a eso que hemos llamado asíndeton, ¿no? No, asíndeton no, porque la o precisamente es lo contrario del asíndoton, ¿no? El asíndoton es la ausencia de versos, ¿no? Que sean populativos o disruptivos da igual, pero es la ausencia, ¿no? Y aquí los tenemos bien marcados los nexos, ¿no? Entonces podría ser lo contrario si quieres, ¿no? Podría ser que quisieras, o te despidieras, o tornaras. Y sería lo contrario al asíndeton, que ¿cuál es? Asíndeton, eso sí. No os pregunto yo por esa figura, pregunto por otra. Esa se llama dubitación o aporía, es cuando uno no sabe qué va a hacer o qué va a decir. O finge no saber que va a... No, se llama dubitación o aporía. ¿Aporía? Eso es. Ese es el nombre de esa figura. Es una figura de fingimiento también, ¿no? Donde el que habla finge no saber o dudar, ¿no? Es la que está en un ejemplo clásico, ¿no? ¿Cuál sería? ¿Ser o qué? Claro, dudo. He ahí el dilema. He ahí el dilema. El dilema es una especie de aporía, claro. Sufrir los... los filos de la fortuna injusta o oponerse a este torrente de calamidades y darles fin con atrevida resistencia. ¿Qué? ¿Qué hacemos? ¿Me opongo o resisto los... los... los golpes del destino? ¿Ves? Pues una aporía, una dubitación. Pues aquí tenemos esa figura, ¿lo veis? Bueno, aparte de las figuras yo creo que ya ha quedado claro, ¿no? Y que además que trasluce que un sentimiento de amistad verdadera, ¿no? O como trasluce que un sentimiento de amistad verdadera, ¿no? Es decir, ese... ese pensar que si hubieras podido evitar el destino, ¿eh? O ordenarlo, cambiarlo, no evitarlo, ¿no? No evitarlo. De mudar algo, de su que hubiera cambiado algo, hubiera sido que acordarse de su amigo, ¿no? No lo ha sido posible porque el destino ordenado es ineludible, ¿no? Es la muerte. ¿Lo veis? Bueno, pues eso sería en cuanto al contenido, ¿no? Ahora vamos a ver en cuanto a los aspectos métricos, etcétera, ¿no? Y a la forma y a explicaros un poco la naturaleza del verso en decasílabo que hemos dicho que es un verso de carácter silabotónico. Es decir, exige... exige... un tono más alto. Una tilde, ¿no? ¿De acuerdo? En determinadas sílabas y no las acepta en otras. De manera que a partir de ahí se crean una serie de tipos de decasílabo según su... según donde aparezcan estos... estos... estos refuerzos tónicos, ¿no? Es decir, ¿de acuerdo? Esos refuerzos de intensidad, ¿no? Que al fin y al cabo de lo hablado, ¿no? Bueno, aquí os hago las dos cosas, ¿eh? Os hago, por un lado, la división silábica, entonces, que al ser decasílabo es un verso... regular, ¿no? Al que le afectan, naturalmente, todos los fenómenos que afectan al cómputo silábico, ¿no? Final de palabra o otras... otros fenómenos que afectan, ¿no? Por ejemplo, en el primer verso, ¿no? Tendremos dos sinalejas, ¿sí? Que al y as pi, ¿no? ¿Lo veis ahí? Esas dos sinalejas. Porque si no tendríamos, ¿no? Tendríamos... Si no hiciéramos las sinalejas, si hiciéramos dialejas, tendríamos catorce... once, doce, trece sílabas, ¿no? Pero como no puede... Entonces, ¿eh? Hacemos la sinaleja, ¿de acuerdo? Desde el punto de vista del ritmo, os lo señalo mediante O mayúscula, ¿de acuerdo? Y... y ildes sobre esas O mayúsculas, ¿no? Para señalar cuáles son las sílabas acentuadas, ¿no? Entonces, tendremos las dos primeras, gar, ci, ¿veis? Esas dos las vamos a dejar en anacrusis, ¿eh? No contamos con ellas. Y empezamos a contar a partir de... De la, so. La, so, quial. ¿Veis? Tendremos, por lo tanto, tercera y sexta sílaba. Pues bien, cuando el endecasílabo va acentuado en tercera, sexta y décima sílaba, en este caso, ¿lo veis? Entonces, ese tipo de endecasílabo se llama melódico. ¿Vale? ¿Por qué? Porque los acentos recaen... Tercera, gar, ci, la, so. Una palabra importantísima, ¿no? Bien, sexta, ¿no? Y aspiraste, porque siempre en décima tiene que caer el acento, porque es un endecasílabo, ¿no? ¿Lo vemos? Entonces, tres, seis y diez. Ese responde al tipo que llamamos melódico. ¿De acuerdo? ¿De acuerdo? Puede ser, no lo sé. Pero en cualquier caso... En cualquier caso, vais a trabajar con esto, tenéis que trabajar en el segundo cuatrimestre, cuando hagáis estilística y métrica, ¿entendéis? Pues tenéis que pasar por... Y sí, hay veces que os preguntan sobre el ritmo del verso. Entonces, si tienes que saber el ritmo del verso, pues tienes que saber qué tipo de verso es el endecasílabo, ¿eh? A ser posible. Si te preguntan por ello, que no es descartable. ¿El nombre del ritmo? ¿En el qué? ¿En el aritmólogo? Pues melódico es eso, porque va en tercera. Así se llama ese tipo. Es decir, todos los que vayan en tercera, en sexta, después hay muchas variaciones, ¿eh? Hay muchos que tenemos que decidir nosotros, ¿no? No está tan claro, pero este está clarísimo, ¿no? Este es melódico, porque la tercera, la sexta y la décima sílaba son tónicas. ¿Entendéis? Recaen en esas sílabas. Y ese cuando recae, no es un verso, como os digo, sílabo tónico, ¿entendéis? Pues ese es el tipo. Fijaros que en tres es casi un acento antirrítmico. Que no se conozca la teoría, ¿eh? Pero se acepta como un tipo. Es decir, los endecasílabos, como el axis rítmico es la décima sílaba, todas las sílabas pares son las sílabas rítmicas del verso. Y las sílabas impares, pues, serán antirrítmicas, ¿no? Pero ese verso, ese tipo de tercera y décima se considera melódico. Tanto que el endecasílabo no se sabe si viene del verso de flauta... Bueno, da igual eso, de gaita o de no gaita. Dejaros en melódico, ¿vale? Será el modelo. Vamos a ver el segundo verso. Dice, y siempre con tal fuerza le seguiste el bien, ¿no? Se ve, es el bien. Fijaros, ahí tendremos, el adverbio se acentúa siempre, ¿de acuerdo? Los adverbios, en métrica, pues deben llevar acento. No lo llevan los artículos, las preposiciones, ¿no? Pero normalmente los adverbios, a no ser que por otras razones se lo podamos quitar. Por presencia o continuidad, con palabras... Y además, eso semántico que el adverbio, como los verbos o los sustantivos, ¿no? Pero en principio, siempre segunda, ¿no? Con tal fuerza, fuerza. Esa será la sexta, ¿veis? Entonces este va segunda, sexta y décima. Ese modelo tampoco hay duda. Ese es el modelo heroico, ¿de acuerdo? De ese tipo de endecasílabos se llama heroico. El ságico, lo vamos a ver ahora mismo. Que a pocos pasos que tras él corriste, ¿no? Se dice, supongo que se esforzó por conseguir el bien, lo alcanzó plenamente, ¿no? Y pocos pasos también porque está obligado, ¿verdad? No ha podido dar más el hombre, ¿no? A mi joven en la centena de años, pues fallece, ¿no? Entonces efectivamente dio pocos pasos, ¿no? Y dio poco. ¿No? Pues por pocos pasos que tras él corriste, ese verso será ságico. Otro nuevo modelo, ¿vale? Ese modelo es esencialmente el de cuarta y octava. Puede permitir en segunda el apoyo, pero cuando va en cuarta y en octava es ságico. También hay cuarta y sexta que se considera ságico, pero eso será más discutible, ¿no? Pero cuarta y octava, ságico. ¿De acuerdo? Es decir, tercera y sexta, pelota. Segunda y sexta, heroico. Cuarta y octava, ságico. Y ya está. El enfático es en primera y en sexta. Y es enfático. No tenemos ejemplos aquí, pero... Así es. ¿Ha quedado claro? Bueno. En sexta y décima, sí, sí. Primera, sexta y décima. En décima todas, ¿eh? Se me puede olvidar decirlo, pero claro, en décima. Si la hago en décima, es el axiflítmico. Tiene que tener siempre acento. ¿No? Claro. Aunque sea una palabra que sea átona, da igual. Si está en esa posición del verso, automáticamente, ¿entendéis? Se suma una más métrica y se queda siempre en décima posición. O se resta una en el caso de las dos vírgulas, entonces se queda siempre en décima posición. ¿De acuerdo? Bien. Pues eso es lo que os puedo decir. La sinaleza en quea, yo creo que esa es fácil. Toda entera, le alcanzaste. ¿Veis? La sinaleza va a ser muy usada en este periodo del Renacimiento, cuando realmente la sinaleza se aparece con profusión. ¿De acuerdo? Cosa que en el siglo anterior pasaba con menos frecuencia. Dice, dime, ¿por qué es este sáfico? Aunque puedes decir, bueno, y la primera, pues la primera la consideramos de apoyo. Segunda, tercera átona. ¿Qué tras? Con acentos que vamos a llamar antirrítmicos. ¿Qué son los acentos antirrítmicos? Son cuando hay concomitancia de acentos. Entonces, antirrítmicos serán los que están al lado de uno rítmico, pero que caen en una sílaba que no es rítmica. Es decir, los de quinta, los de sexta, los de tercera, cuando es tercera y octava, que nada más puede ser un acento antirrítmico y no se considera melódico. ¿De acuerdo? Pues todos esos acentos, como veis aquí, lo tenemos más o menos lleno. Entonces, tendremos como rítmicos uno, cuatro, seis y ocho. No cuatro, seis y diez, perdón, no tenemos ocho. Que los pronombres son áconos por naturaleza. ¿Vale? Podemos considerar como sílaba antirrítmica el no. Bueno, ahí efectivamente el que, ese que interrogativo podemos considerar que es el que ocupa el lugar, el sexto, y el décimo, pues, que es el verbo y que no hay más que decir. El siguiente, no tenemos nada reseñable, ¿no?, que señalar, ¿no? Simplemente vemos que es melódico, ¿no? Porque, vamos a decir que los adjetivos, como esta, esto, pues, se consideran adjetivos. Está muy cerca de los artículos que son áconos. Los adjetivos, pues, son los que se consideran adjetivos. Los adjetivos demostrativos se consideran tónicos, ¿de acuerdo? Se les puede quitar esa condición en función de que acompañen en qué posición, ¿no?, pero en general vamos a considerar los adjetivos de este tipo como tónicos, ¿de acuerdo? Entonces, cuando... No, ¿dónde estamos? No me acuerdo. Y sí, de esta, ¿no? Entonces, veis, lo tendremos en tercera. De esta, mortal. Y en sexta. Y en séptima, tierra, es antirrítmico. ¿Por qué? Porque está al lado del rítmico mortal. Mortal, tierra. De manera que, veis, los acentos antirrítmicos, muchas veces os preguntan por ellos, porque no solamente lo tenéis que localizar, sino que el acento antirrítmico tiene un factor estilístico. Es marcar, mediante la intensidad del acento, ¿entendéis?, aspectos esenciales del tema. ¿Cuál era nuestro tema? Mortal, tierra. ¿Por qué se acumulan ahí los acentos? Para que se hacen parques, efectivamente, ¿no? ¿Veis? Por eso, el acento antirrítmico normalmente tiene una función estilística de énfasis, ¿no? De señalar, es un playarado importante del texto, en este caso, el tema. Una pregunta. Porque hay dos versos que son muy importantes. ¿Qué versos son más sáficos si no tienen el acento en la cuarta y octava? ¿En cuarta y octava? ¿Qué versos no tienen en cuarta y octava? ¿Y son sáficos? A ver, pues me habré equivocado, porque para que sea sáfico puede ser que me haya equivocado. ¿Este? Segunda, cuarta, ¿no?, y octava, claro. Ese es sáfico, ¿no? Segunda, que es de apoyo, vamos a considerar de apoyo, cuarta y octava, eso es lo propio. ¿Y el siguiente no le importa? Sí, porque os he dicho que hay sáficos, como que sean más discutibles, que pueden ser de cuarta y sexta. Dependiendo del valor de las palabras en el verso. ¿De qué palabra es más importante? ¿De acuerdo? Así lo pones en un lado o en otro. Entonces, cuarta y sexta también se considera sáfico como cuarta y octava. Es una variedad, el sáfico tiene esa dificultad. Pero sigue siendo cuarta, ¿vale? Cuarta y octava es el más claro. ¿No? Y cuarta y sexta te puede llevar a dudas en el momento que te aparezca uno en segunda. Porque puedes dudar si es sáfico o si es heroico. ¿Me entiendes? Entonces, depende del valor que tenga en el verso esa palabra. Para darle ¿me entiendes lo que quiero decir? Para decidir si lo hace sáfico o lo hace sáfico. No, con que tenga tres es suficiente. Cuarta, octava y décima. O cuarta, sexta y décima. Y la tercera. Esa es aleatoria, esa es auxiliar. Esa no es importante. Sí, puede tener más acentos en verso, pero los importantes son los de cuarta, sexta y décima. Y puede tener una en segunda, por eso es difícil, ¿no? Porque puedes decir, segunda, cuarta y sexta ¿por qué? Porque el heroico tiene que tener la sílaba importante en la dos, no en la cuatro. Es decir, la palabra clave de ese verso está en la sílaba segunda, no en la cuarta. Entonces, cuando la palabra clave está en la segunda, pues entonces segunda, sexta, entonces no hay duda. Tienes que considerarlo heroico. ¿De acuerdo? Pero también puede pasar segunda, cuarta y sexta, y ahí sí que hay una ambigüedad. Porque puedes considerarle sáfico o puedes considerarle heroico. ¿Cómo? Pues dependiendo de qué palabras son las más importantes en esa secuencia. ¿No? Aquí, por ejemplo, ¿cuáles son ya las párrafas importantes? ¿Qué hacen? Entonces, el de segunda es un adjetivo. ¿Pero qué es más importante, el adjetivo o el sustantivo pasos? Claro, ¿no? Y el sustantivo, ¿en qué posición está? En cuarta. ¿No? Pues parece que es sáfico más que heroico porque es más importante los pasos que da en la vida Garcilaso que sean pocos o muchos. ¿Entendéis lo que os quiero decir? Porque semánticamente es más importante el sustantivo que adjetivo. Entonces, yo le considero, aunque tiene acento en segunda, ese acento lo considero auxiliar y considero esencial el de cuarta. Pasos. ¿Entiendes? Y por supuesto el de octava. Él. ¿A quién se refiere? Al bien. ¿No? Al bien que sigue, ¿no? A ver, espérate. Y siempre tal fuerza le serviste que a pocos pasos que tras el bien corriste... Ese pronombre es el bien, ¿no? ¿Veis? En octava. Son las dos palabras fundamentales, ¿no? Garcilaso corre, busca el bien y lo consigue. Garcilaso, tú que eres bueno y has conseguido el bien, ¿no? Sin esforzarte demasiado, ¿qué? Para no dar previsado. ¿Veis? El primer cuarteto solo contiene la invocación, ¿no? Con los atributos del invocado. Y en el segundo cuarteto se termina la frase. Eso va a ser muy corriente en los sonetos. Es decir, que una sola frase ocupe los dos primeros cuartetos. Eso vamos a ver muchas veces y que ahí se conecta. No es nada ineditual. Es decir, que la frase se larga más allá de una estrofa, si no, entre dos estrofas se divide, ¿no? Garcilaso será el sujeto y el predicado, dime, y el complemento directo, lo que viene en interrogación retórica. Dime eso que te pregunto. ¿No? ¿Veis la estructura oracional? ¿Eh? Bien. Y, pues... Pues vamos a pasar a la segunda. Es decir, al núcleo del predicado y sus complementos. ¿No? Pues dime, ¿no? Será el núcleo del predicado. Mira, este, con la sílaba en primera enfática, ¿no? Pero no es enfático. Porque para ser enfático tiene que ser primera, sexta y décima. Y aquí tenemos uno en cuarta. ¿No? El qué de la interrogación. ¿Eh? Bueno, podríamos no considerarle así. Y los adverbios, pues, se pueden considerar tónicos. ¿Eh? ¿De acuerdo? Por la posición que ocupan. ¿Eh? Y entonces este le podríamos llamar sáfico con mucha discusión. Aquí sí que podríamos discutir muchísimo. Pero no hay nada, ¿eh? Que no sea del ritmo que sea relevante. ¿No? Quiero decir, si la lefa, su... Bueno, cuando de esta mortal tierra partiste, pues, ya lo vemos, ese es más fácil, ¿no? Tenemos tercera, sexta y décima. Con claridad. ¿No? Ya hemos señalado eso. Los acentos concomitantes, mortal y tierra, ¿no? Pero que eso es un efecto estilístico. ¿Eh? Que es una manera de llamar la atención sobre la tierra mortal, la muerte, la partida de la tierra. No se va de vacaciones garcilasos. Se va... Se va donde ni come ni bebe. ¿No? Así que ahí es donde se va. ¿Eh? ¿Lo veis? Por eso esa concomitancia. ¿No? Porque al subir a lo alto que subiste, pues, bueno, las sinalefas, ¿veis? ¿Eh? Al... De vocales, ¿eh? Media, y abierta. ¿Eh? Media y abierta. ¿Eh? Y además tónica. Esos... Esas sinalefas son un poco forzadas. La de vocal átona más la de vocal tónica. Se hacen, ¿no? Ya que tenemos un ejemplo, pero vais a encontrar muchas veces que cuando eso pasa no se hace sinalefa, sino que hay hiato. ¿Eh? Se mantienen las dos sílabas por separadas. En este caso, no. ¿Eh? ¿Por qué? Lo es átona, ¿no? La o del o, el pronombre. ¿Eh? Y alto es tónica. Entonces, hemos unido dos vocales. Una media que es la o, que no hacen, ¿no? Y otra tónica, además, que es otro impedimento para la sinalefa. ¿Eh? Que se ha hecho. Entonces, las esquinas son un poco cortadas. Lo coherente es que muchas veces ahí no se hace sinalefa, sino se hace su contrario, sinalefa. Se mantiene el o por un lado y alto por otro. En estos casos vamos a encontrarlo así. ¿Eh? Aquí no, aquí es sinalefa. Porque para tener las once sílabas, tenemos que hacer sinalefa, no es más. ¿Eh? Con tiempo cortado. Y el siguiente es heroico, ¿no? Acá en esta bajé, ¿no? Pues acá, allá. ¿Dónde está? ¿De dónde habla el que habla? ¿Desde el cielo o desde la tierra? Desde acá, es el lugar de, ¿no? Pues fijéis en los deísticos, ¿no? Aquí y allí. ¿Eh? Muy bien. Pues, bueno, métricamente tampoco hay nada reseñable, tanto que, salvo la sinalefa en segunda sílaba, ¿no? No hay nada. Y tenemos segunda, sexta y décima. Claramente, heroico. ¿No? Vamos a seguir, venga. Y rima consonante, ¿no? Una rima que esas rimas se llaman abrazada o paralela, en tanto que es A B B A. ¿Eh? No es muy corriente, ¿eh? Las rimas alternas en los cuartetos, nada corriente, pero podéis encontrarlo. La rima alterna será A B A B. Porque esas se van alternando, ¿eh? En los sonetos, en los cuartetos, no vamos a encontrar en este siglo, ¿eh? Muchos ejemplos, en otros más, ¿eh? Pero en el nacimiento y en esta, en el primer nacimiento, los sonetos casi siempre van a tener la forma de rima abrazada. A B B A. Y no alterna. A B A B. Sí, pero no es lo común. Lo común será, ¿eh? Que la rima sea abrazada. ¿Vale? Bueno, bien pienso, ¿ves? Y dices, oye, ¿por qué no le has puesto la tilde al adverbio? Bien, ¿no? Si los adverbios son, porque están, la puedo dejar, ¿eh? Lo que llama, el sistema que seguimos además, hay que decirlo, es el de Tomás Navarro Tomás, ¿eh? Para simplificar. Es decir, agrupo el verso, ¿no? En pies. Los pies son o grupos de dos sílabas, de dos os, o grupos de tres sílabas. Donde la primera siempre es tónica. ¿De acuerdo? Porque así trabajo solamente con dos pies. Que es el troqueo, tónica átona, dos sílabas, y el gastílico, que son tres sílabas. Tónica átona, átona. ¿De acuerdo? Eso reduce la nomenclatura y la facilidad para comentar el verso. Porque si ese mismo verso, lo analizamos con el sistema clásico de Andrés Bello, ¿eh? Pues los troqueos se transforman, se pueden transformar en yambos. Es decir, se acepta la combinación átona-tónica que en el sistema de Tomás Navarro Tomás, pues al simplificar todos los pies nada más que en dos, de los cinco existentes, ¿no? Pues no tenemos que hacer, no tenemos que tener en cuenta cinco tipos de pie, ¿no? Si no solamente dos. Por eso tienes ventajas trabajar en el análisis rítmico con el sistema de Tomás Navarro Tomás, ¿eh? Es lo que estamos haciendo. Porque el comentario del ritmo lo harás siempre según un sistema, ¿eh? No es igual uno que otro. No quiero decir que no tengan la misma validez, ¿eh? Pero quiero decir que los criterios son diferentes. Y eso ya sí lo aprenderemos, ¿eh? Si llegáis, o si queréis, o si os habéis matriculado más bien, en el segundo cuatrimestre en Estilística y Métrica, ahí tendremos que aprender las peculiaridades de cada sistema ¿eh? De de interpretar el ritmo del caso. Bueno, pues venga, en esta segunda parte, bien pienso yo, tal, bueno, ya sin alefas y decidimos sobre lo mismo. Y entonces, como casi siempre el tiempo se me va, como las Pascuas, esa cancioncilla popular que dice que se nos van las Pascuas, mozas, que se nos van las Pascuas. Pues eso nos pasa, ¿no? Es decir, que el siguiente que tengo preparado, que ya sí es del arcilaso de la veda, pues se nos va a quedar en el bolsillo, ¿no? Entonces, si os parece o si no tenéis preguntas, habéis entendido el contenido, unas figuras importantes que hay en el tal, habéis entendido el análisis rítmico que he hecho, ¿no? Y también el análisis de silábico que hemos realizado, ¿no? Es decir, la separación de las sílabas del verso, ¿no? Como lo hemos visto, haciendo las sin alefas pertinentes y no hay ningún otro recurso, me parece, que afecte al cómputo, como sin éresis, o diéresis, ¿eh? Y por lo tanto, pues bueno, cuando aparezcan ya las reseñas. Entonces, si os parece, podemos dar por acabado este someto de Boscano, su amigo caro arcilaso, en ocasión de la muerte del arcilaso, ¿no? Donde se queja, ¿no? Porque podemos decir que es una queja, ¿no? Es una queja de no poder cambiar el destino y no poder despedirse de su amigo, ¿no? Y lo que transmite es pena sobre todo, ¿no? ¿Nos tenemos que ir ya? No, ¿no? ¿Hasta qué hora tenemos? Hasta menos cuarto, ¿no? Pues sí, terminamos a menos cuarto. Nos queda 15 minutos que va a ser suficiente, ¿eh? Aunque, mira, me hubiera gustado más dedicar más tiempo al de arcilaso, pero como me enrollo y no me cortáis, pues no puede ser. Me tenéis que cortar el rollo. Entonces, venga, vamos a compartir el segundo documento que el segundo documento le he llamado muerte de Lisa. Vamos a ir muy rápido. He tenido como ocasión de comentarlo contigo brevemente, ¿no? Es decir, el contexto, ¿no? Es decir, veis, esta es la edición de las obras del arcilaso de la Vega con anotaciones de Fernando de Herrera. A ver, excelentísimo tal señor, don tal, ¿verdad? La dedicatoria. En Sevilla, ¿no? 1580, ¿no? Es la fecha en la que van a aparecer las primeras ediciones de arcilaso comentado, ¿no? Antes aparecen otras ediciones de arcilaso sin comentar. Y a partir del 80 ya empiezan a aparecer las de Ibrofense, me parece que es antes. Es del 76 o del 78. ¿De acuerdo? ¿Eh? No, esta es la obra en completa de arcilaso. Es decir, si le hemos visto antes, la obra de arcilaso la publicaba su amigo Boscan en la cuarta parte de su poesía, el que publica su poesía y publica las poesías de arcilaso al final de su obra, ¿no? Pero aquí ya no, ya después se separa completamente, empiezan y Boscan casi se olvida, ¿no? Y el arcilaso se convierte en el faro, en el príncipe de los poetas, ¿no? Y ya empiezan a surgir ediciones de la obra de arcilaso y ya empiezan las ediciones comentadas y anotadas por los grandes intelectuales de la época, ¿no? De las obras del arcilaso. Pero las obras del arcilaso son muchas cosas. Hemos hablado de los diferentes géneros líricos que practica el arcilaso, ¿no? Hemos hablado de los sonetos, ¿no? Que son unos 40. Hemos hablado de las canciones, que son 5. Y esos dos géneros, canciones y sonetos, constituyen lo que se llama el cancionero petraquista, ¿no? Pero además tiene elegías, ¿no? A la muerte del duque de Alba, ¿no? ¿De acuerdo? Tiene cartas a sus amigos, ¿no? O la elegía a Boscan, también sobre la amistad. O la epístola a Boscan, una carta en decasílabos sueltos. Entonces, toda esa versión también hay que tenerla en cuenta como sus géneros, ¿no? La elegía o la carta, como sus géneros líricos, ¿de acuerdo? Igual que el soneto o la canción. Pero además tiene églogas, tres églogas, ¿eh? ¿De acuerdo? La primera, la segunda y la tercera. La primera es la que hoy vamos a ver un pequeño fragmento, ¿eh? Una estancia para comprender el concepto de estancia como te decía, la estrofa más complicada, ¿eh? Por su variabilidad. Es decir, porque hay estancias, como las que vamos a ver hoy, de 14 versos, las hay de 18, de 23, de 21, en fin. Entonces, claro, es muy difícil definirla como estrofa por en cuanto al número de versos que tiene. ¿Qué cuarteto? Son cuatro, pues un cuarteto, ¿no? Pero la estancia varía enormemente en cuanto al número de filas y en cuanto a la combinación, porque lo propio de la estancia no solamente es que el número de versos es indeterminado, aunque se tiene que repetir en todos, en todas las estancias, en todas las estrofas del poema, y a veces son poemas de muchas estancias, que vamos a comentar hoy, de la Ecopra Primera, me parece que son 40 estancias. Es decir, 40 estrofas de 14 versos. Hace una filodera de 400 versos, este poema que vamos a comentar, ¿no? Nosotros vamos a comentar nada más que la estancia 21, ¿eh? Que es los versos del 282 al 295. ¿De acuerdo? Solamente esa estancia es la que vamos a comentar y ver como la estancia, las características de la estancia es que combina versos de casílabos, como los del soneto, con versos heptasílabos, de siete sílabas, ¿no? De una manera libre, pero eso sí, de la manera que esté en el primer, en la primera estancia de la composición, en las otras 30 siguientes, es exactamente igual. Es decir, todos tienen 14 versos, todos tienen la misma disposición de las rimas. ¿De acuerdo? Pero claro, entonces ¿veis? Sin embargo, en la en la égoga tercera, en la égoga tercera, la estancia es una octava, es decir, una estrofa de ocho versos. Y en la égoga, la segunda, que es la más difícil de todas, ¿eh? Pues esa es polimétrica, ¿eh? Porque combina diferentes tipos de estrofa. El terceto, mayoritariamente, tercetos con rima interna, ¿eh? Y octavas y otro tipo de de versos, ¿no? Es polimétrica. Todas las demás, y estancia también sirve para la canción, ¿eh? La estrofa de la canción, también la vamos a llamar estancia. Como la estrofa o el conjunto de versos de las égogas, también recibe el nombre de estancia. ¿De acuerdo? Pues bien, ha dicho todas esas cosas, vamos a leerla, y ya me preguntáis, además no tengo mucho tiempo, y no va a ser nada. Y dice así, habla memoroso. En esta égoga primera, tras la intervención del narrador que dedica la obra al duque de Alma, ¿no? Pues introduce a dos pastores que se quejan. Entonces, habla primero, primero Salicio, que se queja de celos, ¿no? O de no ser correspondido en su amor, y después habla o canta, no habla, sino canta, memoroso, que se queja de otra desgracia de amor, que es la muerte de la amada. Se queja porque no le quiere, y el otro se queja porque se ha muerto sobre la morada. ¿De acuerdo? Entonces, lo que vamos a leer es el fragmento de memoroso, es decir, del que ha perdido a su amada. Ese es un fragmento que va a... Bueno, es mucho más grande, ¿no? Empieza el fragmento pues, no sé, en la estancia, a lo mejor, 18 o 19, ¿no? Esta es la... No me acuerdo el número, ¿no? Eso, es decir, un fragmento de todo el canto de memoroso, ¿no? Pero no me acuerdo cuáles son las franjas que responden al canto de memoroso, pues he elegido sumamente, ¿no? Y esa dice así. ¿Quién me dijera, Elisa, Vitamía, cuando en aquel que vaya al fresco viento andábamos cogiendo tierras flores que había de ver con largo apartamiento venir el triste y solitario día que viese amargo fin a mis amores? Esto es el fronte. Después os lo explico. Este primero es el verso de vuelta. El cielo en mis dolores cargó la mano tanto que a sepiterno llanto y a triste soledad me ha condenado. Siento más es verme atado a la pesada vida y enojosa solo, desamparado, ciego, sillumbre, en cárcel temerosa. ¿Ves? La estancia son las dos partes. 14 versos en total. Si contáis los versos de la primera parte, ¿eh? Son seis, ¿de acuerdo? Son seis divididos en dos partes porque el fronte de la canción, vamos a decir, petarquista o renacentista, ¿eh?, pues se constituye de un fronte dividido en dos partes o dos pies. A veces pie significa la parte del verso, pero a veces en este caso significa, en este caso, tres versos. Los tres primeros versos es el primer pie del fronte y los tres segundos versos es el segundo pie del fronte. Un verso de vuelta, por eso tiene una estructura tripartita como las canciones tradicionales, pero esto es una canción culta, ¿no? Una estrofa culta. Un verso de vuelta que rima con la anterior. El cielo en mis dolores rima, ¿con qué rima? La primera parte, con amores y con flores. ¿Lo veis? Porque el verso de vuelta sintácticamente pertenece a la cola pero acústicamente o desde el punto de vista de la rima, rima con el fronte. ¿De acuerdo? Y después tenemos la cola, que es el resto de versos, que normalmente también puede tener dos partes o una, pero a esas partes de la cola se les denomina verso. ¿Por qué? Pues es así, ¿vale? Es la terminología. ¿Ves? Y eso es lo que se llama una instancia. Da igual que tenga la instancia de 18 versos, lo importante es que tenga un fronte simétrico de tres o de cuatro versos, o de cinco, o lo que quieras, pero un fronte, un verso de vuelta, o dos, ¿no? Y una cola. También dividible, indivisible en dos partes que reciben el nombre de verso. En este caso son el fronte de seis versos. ¿No? Porque son tres y tres. El primero. El primero de la siguiente lámina. El cielo en mis dolores. Ese es el verso de vuelta. Y aquí empezaría el primer verso, que no es un verso, es un pario. Largó la mano tanto que hace piterno llanto. Y aquí es que soledad me ha condenado. Esos tres versos serán el primer verso de la cola. ¿Me entiendes? Y el segundo verso de la cola serán los tres siguientes. Y lo que siento más es verme atado a la pesada vida enojosa, solo, desamparado, ciego, sin llumbre, en cárcel tenebrosa. Además, el orden de los versos cambia, ¿verdad? Porque en el primero verso, los tres primeros versos, en el primer verso, son hectasílabos. Tres hectasílabos y un endecasílabo. Y en la segunda parte se invierte la proporción, ¿no? Y tenemos tres endecasílabos y un solo hectasílabo. Solo, desamparado. Sí, o simplemente con una llave, con un paréntesis, ¿no? Dices fronte y haces otra llave, primer pie, los tres primeros versos, y segundo pie, ¿no? Y después, verso de vuelta, señales. El cielo es mi dolor, es una flecha. Verso de vuelta. Y después, todo lo demás es la coda, o coda. ¿Y cómo se divide? En este caso, en dos partes. La primera, los cuatro versos, donde los tres primeros versos, ¿no? Cargó la mano tanto que a Sepiterno llanto y a Piste Soledad me ha condenado, ¿no? Y la segunda parte, que es la siguiente. Y lo que siento más, es verme atado. Sí, y por la sintaxis, ¿no? Porque una cosa es, el cielo cargó la mano contra mí, y otra cosa es, yo siento verme atado a la vida. Cuando mi enamorada se ha muerto. Son dos ideas diferentes, ¿no? Unir dos oraciones. En el punto y coma, en este caso está uniendo dos frases, ¿no? Dos ideas, dos oraciones. ¿Veis claramente las dos partes de la... ¿Eh? Pues así son las cuarenta estancias que compone esta primera égloga. Es decir, la introducción que hace el narrador para alabar al duque de Alda, está escrita en estancias de catorce versos con esa misma relación de arriba. Y así es la actualidad. No es fácil, ¿eh? No es fácil ejercer el tiempo. ¿De acuerdo? Entonces, primero llora Sadicio su desgracia, quiere no ser correspondido por su amada, ¿no? Y en este caso el que llora es negroso, pero ya no llora la separación, no ser correspondido, sino que llora la muerte. Entonces, se entiende Elisa como anagrama de quién. ¿De dónde me lo has dicho? De Isabel. ¿No? Entonces, el de Elisa como anagrama de Isabel, ¿no? Pues una desinterpretación, ¿no? Eh... Y... ¿Qué se le dice más? Y eso es. ¿No? ¿De acuerdo? Preguntas que queráis hacer. Bueno, en cuanto a la métrica, vamos a repasarla y nos tenemos que ir ya en dos minutos. ¿Veis? Lo mismo, los endecasílabos los vamos a clasificar según su tipo. ¿De acuerdo? Como los primeros del fronte casi siempre son endecasílabos en la estancia y casi siempre en la estancia los hectasílabos vienen en la segunda parte de la estancia, ¿no? Es decir, en el verso de vuelta de lo que sigue, es ahí donde van los hectasílabos, casi siempre, siempre hablamos, ¿eh? En la canción petraquista o renacentista. Pues nos pasamos a la segunda parte para que veamos que los hectasílabos como el hectasílabo ya no es un verso sílabotónico, ¿no? Pues tenemos, ya no le calificamos en cuanto a su tipo ¿eh? Sino en cuanto a su tipo rítmico, es decir, o serán trocaicos o serán dactílicos o serán mixtos. Ya no sáficos ni heroicos, ¿no? Esa nomenclatura no la reservamos para el endecasílabo. Los hectasílabos los calificamos, los hectasílabos de trocaicos, si son trocaicos o como sea. Mirad, el primero es trocaico. El, dejamos la sílaba en anacusis, fielo, pues ese será el primer pie del verso, ¿ves? Un troquio. Fieloen, misdo, pues las dos son átonas, mis y do, ¿lo veis? Y ahora, no lo he hecho mal, el fieloen misdo, y ahora la última, lo des. Ocho sílabas, siete sílabas, ¿no? ¿Lo veis? Dos, cuatro, seis y siete. La primera en anacusis y tengo dos, tres llambos. Es decir, un pie que lleva sílabas tónicas, sílabas átonas, sílabas tónicas, sílabas átonas. Pero después decir, hombre, es que mis es un pronombre y es átona. Y digo, sí, pero es rítmica, por lo tanto podría ponerle un acento rítmico. Es decir, igual que las sílabas no coinciden las métricas con las rítmicas, la prosodia pasa igual. ¿Veis? Hay acentos rítmicos que la palabra no la tiene, pero como cae en esa posición, pues eso lo podemos poner. Y entonces tenemos un hectasílabo trocaico. ¿Veis? Dejando la primera en anacusis tenemos tres grupos de dos sílabas que responden al esquema tónica, átona, tónica, átona, tónica, átona. Bueno, no os preocupéis a fuerza de analizar, ¿eh? Vais a aprender y os va a resultar familiar fácil. Y vamos a sacarle partido, ¿eh? Desde el punto de vista estilístico a toda esta cuestión del análisis. Venga, hasta la semana que viene, queridos amigos, y nos vemos. Santiago, no me he dirigido mucho a ti porque no te he visto en el chat. A lo mejor me has hablado, pero tenía yo otra cosa puesta. Hasta luego. Eh, sí, hay una persona conectada, que es Santiago, sí. Pero me he olvidado de él, pobre. Y ya se habrá ido. Así que, bueno, te saludo igual y ya nos vemos la siguiente semana con dos nuevos textos, ¿eh? Ese es el objetivo. Hasta la semana que viene, amigos. Chao.