Hola, buenas tardes, bienvenidos a esta segunda sesión de Contraria Financiera. Vamos a revisar hoy el tema número 2, inmovilizado material, tíbono corriente de naturaleza material. Este inmovilizado está formado por todos los elementos patrimoniales de naturaleza tangible que se pueden tocar, tienen sustancia física, tanto muebles como inmuebles que están fijados estructuralmente en la superficie, al suelo, y que sirven de forma duradera para realizar la actividad de la empresa. El inmovilizado material, juntamente con el inmovilizado intangible, las inversiones inmobiliarias y las inversiones financieras a largo plazo, constituye el tíbono corriente activo fijo o inmovilizado de bala, y constituye a su vez la estructura económica permanente de la empresa. ¿Cuál es el rasgo diferencial de estas cuatro grandes agrupaciones? De todos los inmovilizados, el rasgo diferencial es que se utilizan durante más de un ejercicio económico y por tanto, en lugar de tener un valor de cambio, tienen un valor de uso para la empresa que los posee o los controla. Priorizamos el concepto económico sobre la forma jurídica, control económico por encima de la titularidad jurídica del elemento. Analizaremos los inmovilizados materiales, elementos del grupo 2 del plan general de contabilidad, si lo tenéis a mano, subgrupo 21, en diferentes momentos de la línea temporal. La valoración inicial, la valoración al cierre del periodo o jerarquía contable, la valoración de los desembolsos posteriores a la adquisición y la valoración en el momento de la baja. En el tema número 2 nos vamos a centrar en la valoración inicial y la valoración al cierre. Las correcciones valorativas, lo que serían las amortizaciones y los detalles. Bien, en cuanto a la valoración inicial, el criterio que utilizamos es el criterio del coste en términos globales y en función de que el elemento lo fabriquemos o lo construyamos con nuestros propios medios o no, pues utilizaremos un concepto de coste bónico. Si lo fabricamos con nuestros propios medios, entra en juego el coste de producción. Si lo adquirimos exógenamente, entraría en juego el precio de adquisición, aunque según la forma de entrada de estos elementos en balance, en algunos casos no es que paguemos una contraprestación por ello, sino que nos pueden entrar, por ejemplo, por una operación de permuta, por una operación de adquisición conjunta o por lotes, o bien por una subvención o donación financiados por esta fórmula. Veremos que en algunos casos no se valoran por el precio de adquisición, probablemente dicho, sino que entran en juego otros criterios como pueden ser el valor razonable. Pero vamos a ver tranquilamente en esta sesión. Por tanto, el inmovilizado material, conjunto de elementos patrimoniales de naturaleza tangible, que sirven a la empresa de forma duradera y le permiten generar ingresos, llevar a cabo su actividad. Tienen valor de uso, no valor de cambio. Y para que se registren como tales, en primer lugar, tienen que satisfacer la definición de activo, que no vamos a entrar ahora en juego. La vimos en introducción a la contabilidad. Si queréis mayor detalle y mayor precisión, os recomiendo marco conceptual, primera parte de la definición de contabilidad. Y ahí se define lo que es un activo, lo que es un pasivo, lo que es un neto, lo que es un ingreso y lo que es un gasto. No se registran si no cumple la definición de activo. ¿Cómo puede incorporarse? Al balance de la compañía, pues pueden entrar por diferentes vías, como os he dicho. Por adquisición a terceros, por producción propia, por permuta, por aportación de capital o una aportación no dineraria o en especie, por donación o subvención o incluso por operaciones de arrendamiento. Las características fundamentales, aquí las tenéis, por si las preguntan. Son bienes físicos, tangibles, activos a largo plazo, valor de uso y no se venden con carácter general durante el curso normal del cliente. ¿Dónde aparecen? En el grupo 2 del plan general de contabilidad, subgrupo 21, aunque también vamos a trabajar con el subgrupo 23. Veis que en el subgrupo 21 figuran en diferentes cuentas las principales agrupaciones de elementos de movimiento material, terrenos y bienes naturales, que generalmente no se amortizan, construcciones, instalaciones técnicas, máquinas útiles, etcétera, etcétera. Y en el 23, ¿qué incluiríamos? Incluiríamos aquellos elementos de movilización material que todavía no están en fase... de utilización, es decir, todavía no están operativos todavía no nos ayudan a generar ingresos y por tanto lo reclasificamos en este subgrupo y todos los elementos que figuran en el subgrupo 23 como rasgos distintivos que no se amortizan por criterio de corrección de ingresos y gastos por tanto, como no ayudan a generar ingresos no puede imputar costes relacionados con el desgaste o su resistencia de estos lámparos cuando están en condiciones de uso se reclasifican del 23 al 21 y a partir de ahí se amortizan Bien, para fijar la progresión inicial o coste en origen utilizamos el criterio del coste y como ya sabéis que esto lo vimos en introducción a la contabilidad no se incluyen dentro de este concepto los impuestos indirectos que gravan la operación, el IVA soportado a excepción de que este impuesto indirecto no sea recuperable, un IVA no recuperable o por ejemplo un arancel de aduana si adquiero elementos remobilizado material a un país extracomunitario, por ejemplo compro tres en la China me entran por la aduana del puerto y tengo que liquidar ahí el IVA de la importación es deducible pero lo que sería el arancel no, formaría parte del precio de adquisición. Refrescamos, para determinar el precio de adquisición hay que sumar al importe facturado por el vendedor, importe neto, neto libre de descuento, descuento de todo tipo descuentos por pronto pago, descuentos por volumen de pedido descuentos comerciales, por tanto importe neto facturado por el vendedor, le agregamos todos los gastos necesarios hasta que este inmovilizado esté en condiciones de funcionamiento transportes, montaje, etc. Estos gastos se denominan gastos capitalizables o activables porque forman o constituyen un mayor valor de compra de este elemento y estos gastos se activan en función del principio de correlación ingresos y gastos y suponen un mayor valor del inmovilizado siempre y cuando primero, sean necesarios para que el inmovilizado esté en condiciones de funcionamiento y segundo, se produzcan antes de que el inmovilizado entre en condiciones de funcionamiento gastos posteriores no son capitalizables por tanto, gastos previos a la entrada en funcionamiento de este elemento Por ejemplo, imaginaos que tengo, adquiero una, soy una empresa de reparto y aquí compro un furgón. Y este furgón o una furgoneta la tengo que carrozar, la tengo que llevar al taller para carrozarla, ¿vale? Pues la carrozo y es necesario este coste para que la furgoneta funcione, ¿vale? La carrozo y entra en funcionamiento. Bien, y al cabo de dos meses tengo la brillante idea de decir, oye, pues ¿por qué no la serigrafío para que llegue el logo de mi empresa? Vale, ¿qué pasa con ese coste de la serigrafía? Ya está en funcionamiento, no lo puedo activar. Si lo hubiese serigrafiado antes de que la furgoneta circulase, le digo al taller, oye, pues mira, me la carrozo. Y me la serigrafía. Ese sí que sería un gasto activable, pero a posteriori ya no lo puedo activar. Bien, vamos a ver un ejemplo de adquisición y pago al contado. Tenemos la empresa Altamía que compra una máquina en las siguientes condiciones. Un precio en factura, como veis aquí detallado, de 20.000 euros. Hay descuentos por pronto pago de 300. Gasto de frentes y transporte 535, seguros 40 e instalación 800. Su pago se realiza al contado desde el banco. Primer componente del precio de adquisición. ¿Cuál sería? ¿El importe neto facturado por el vendedor? Pues para calcularlo, cogemos el importe bruto, el precio de factura y le quitamos el descuento. El descuento por pronto pago. El importe neto serían de 19.700. ¿Verdad? Aquí lo tenemos. ¿Y qué más hemos de agregarle para calcular el precio de adquisición? Pues todos los gastos necesarios, los gastos directos para que esta máquina funcione. Pues tengo que transportarlas y a mi cargo pues tengo que pagar el efecto de transporte, el seguro del transporte. Y la instalación. Son gastos necesarios. Cumplen los dos requisitos anteriores. Necesarios para que entren en funcionamiento y se producen antes de que entren en funcionamiento. ¿Vale? Por lo tanto, los activo. Activo 19.700 más los gastos. Total del precio de adquisición 21.075. ¿Cómo registro la operación? Cargo debito la cuenta de inmovilizado, porque estoy ante un elemento que tiene valor de uso. Cargo la cuenta 213 por 21.075. Y la contrapartida en el haber es el pago. La pago al contado. No le debo nada ni al transportista, ni al suministrador, ni a nada. Pago todo. Pago todo cash. Registro una salida de tesorería. Las cuentas financieras de corto plazo son cuentas del grupo 5. Esta es la cuenta, sin duda, que tiene más movimientos en la vía de una empresa. La cuenta 572, la que se concilia, pues, yo incluso aconsejo diariamente. Es la que tiene más apuntes. Y abono, saco la tesorería, abono estativo o corriente circulante. Este es el asiento que registraría en el día. Imaginaros que la operación está sujeta a IVA. Todas las partidas. ¿Qué sucedería con el IVA? Si es un IVA deducible. El 21%. Pues registraría un cargo en la cuenta de Hacienda Pública IVA soportado. Que no es una cuenta, ojo, ni de coste, ni activo no corriente. El IVA soportado es un derecho de compensación que tiene la empresa. Es una cuenta de activo corriente o circulante. Relacionado con el tráfico de la empresa. De ahí que se clasifique una cuenta del grupo 4. La cuenta 472. Pues cargaría, anoto en el debe, el IVA soportado. Tengo un derecho frente a Hacienda Tributaria. ¿Y qué pasa? Que el proveedor o los proveedores me van a faturar con IVA. Por tanto, les tengo que pagar no solamente el precio base, sino el precio base masiva. 25.500. Sería los 21.035 más el 21% de IVA. ¿Lo veíamos? ¿Y qué pasa si el IVA no es deducible? Pues si no es deducible, agrego, incorporo mayor valor a la máquina. La máquina la activo por 21 más el IVA. Por 25.500. Pago lo mismo al IVA. Si digo eso, tengo que pagar al proveedor. Si no lo puedo deducir, pues es mayor coste de adquisición para mí. Veamos otro ejemplo. La empresa Altamira compra una máquina el 1 de marzo del 2002. Con las siguientes condiciones. Precio en factura, descuento del pronto pago. Tendríamos aquí el precio neto, 69.700. Y tengo gastos de frente, transporte, seguros e instalación. Un caso similar al anterior. ¿Pero qué sucede aquí? Hay un matiz muy importante. El pago se realiza por banco. La adquisición de la máquina y todos los gastos asociados se pagan por banco el 1 del 3 del 2002. Pero la extracción y montaje no se termina hasta el 31 de marzo. Por tanto, el 1 de marzo no puedo registrar, activar la máquina como máquina operativa en una cuenta del subgrupo 21. Tengo que ir al subgrupo 23. Está la máquina en montaje. Por tanto, todavía no funciona. No me está ayudando a generar ingresos. Y asimismo no la puedo activar mientras esté en el subgrupo 23. ¿Cómo registro la operación? Aquí lo tendríamos, el detalle del coste en origen, como antes, pero a diferencia del caso anterior, en lugar de utilizar, antes, ¿qué cuenta utilizábamos? La 213. Ahora no. No está en funcionamiento. Pongo maquinaría montaje, subgrupo 23. Pago al contado. ¿Y cuándo reclasifico? Cuando la máquina está operativa, que era el 31 de marzo. El 31 de marzo lo que hago es abono. Abono asiento de reclasificación. Abono la 233 con cargo a la 213. Y a partir de este momento comenzaría a amortizar. ¿Vale? A partir de este momento ya funciona, me ayuda a generar ingresos. Tema complicado. Adquisición de activos con gasto de desmantelamiento y retiro. Si una empresa adquiere un inmovilizado que lleve asociado el gasto de desmantelamiento o retiro en el momento de la baja, hay un compromiso, pues imagínense, yo qué sé, me compro una planta... ...o instalo una planta fotovoltaica y me da una concesión durante 20 años y cuando termine esto me deja el terreno impecado. ¿Vale? Ese hecho tengo que tenerlo en cuenta al registrarlo en el momento inicial. Pues el valor actual, volvemos a los valores del tema anterior, el BAM, yo estimo lo que me va a costar la rehabilitación dentro de X años y lo paso al momento presente. El valor actual de estos gastos lo incorporo al precio de adquisición del bien. ¿Y qué contrapartida utilizo? Aquí me va a aparecer una cuenta nueva, una cuenta de provisión. ¿Qué es una provisión? Pues es un pasivo estimado. Yo estimo que a fecha de hoy tendría que pagar X por el desmantelamiento dentro de X años, dentro de Y años. ¿Vale? La provisión es un pasivo estimado. ¿Cómo se recoge en el plan final de contabilidad? Las provisiones, que las analizaremos cuando veamos los pasivos, pueden ser de largo plazo o de corto plazo. Si son de largo plazo, pues en el subgrupo 1, financiación básica, cuentan del subgrupo 1-4. En este caso sería la 1-4-3. Y cuando se acerque el vencimiento de esta provisión, cuando lleguemos al final de la vida útil del inmovilizado, la reclasificamos a una cuenta de grupo 5. Bien, dicho este rollo, para que os vaya sonando, vamos a ver el ejercicio del ejemplo 2.3. Una empresa ha alquilado por 5 años una plata comercial diáfana a la que divide después por medio. El coste de adquisición y montaje de los paneles, 60.000, estimando su duración para todo el periodo de alquiler, para los 5 años, y calcula en 10.000 euros el valor actual, lo que sería hoy, valor actual del gasto de montaje y desguace de estos paneles. El tipo de interés efectivo es el 3%. ¿Por qué es relevante el tipo de interés efectivo? Porque cada año tendré que ir cambiando la provisión. Tendré que hacer una operación de capitalización financiera, la llevaré hacia delante, y la diferencia entre el valor a cierre del ejercicio anterior y a cierre del ejercicio expulso. Hago una atracción en el haber en la cuenta de provisión, incremento el pasivo y la contrapartida es una cuenta de gasto financiero, que carga una cuenta de su grupo 66. Pero bueno, vamos paso por paso. ¿Cuál es el valor inicial de estas instalaciones? ¿Por cuánto las activaré? Las activaré por los... Por los 60.000 euros, que es el coste a que se quede mi montaje, más los gastos de desmantelamiento a fecha de hoy. Lo que yo estimo, esos 10.000 euros. De ahí que, en la cuenta 215 u otras instalaciones, cargo por 70.000. ¿Qué es lo que voy a pagar ahora? Pues pago los paneles, que son 60.000 euros. Tengo una salida de tesorería de 60.000 euros. Y el resto, un pasivo estimado. Una provisión. A largo plazo, a 5 años, cuenta de grupo 1. Me cuenta... Si fuera... Una provisión a cortos y de grupo 5. Por lo tanto, tenemos aquí un pasivo estimado y tenemos una salida de tesorería que serían las contrapartidas a la activación de la instalación. Y ojo, un tema que os quiero recordar. Con el tema de las provisiones, que a veces los confundís con los deterioros. Los deterioros los veremos después. Un deterioro no es un pasivo. Un deterioro es una cuenta compensadora de un activo. Que puede ser activo no corriente, inmovilizado o activo circulante. También se deteriora. Pero la provisión no es una cuenta compensadora. La provisión es un pasivo estimado. Es un pasivo. Como un piano. El deterioro, una cuenta compensadora de activos. Que nos quede claro eso. Adquisiciones con pago aplazado. Hasta ahora hemos visto pagos al contado. Pero en muchos casos, si el suministrador se aviene y nos cobra un recargo abusivo. Pues nos interesa que nos financie. Nos interesa aplazar el pago de la deuda. ¿Y qué sucede con la carga financiera de este aplazamiento? Bien, se puede incorporar como mayor valor del inmovilizado. ¿O no? Bueno, se ha de incorporar como mayor valor del inmovilizado si cumple dos requisitos. Primero, esta carga financiera se ha devengado. Antes de que el inmovilizado esté en condicionalidad. En condiciones de funcionamiento. Y segundo requisito. El inmovilizado ha necesitado más de un año para estar en condiciones de funcionamiento. Es decir, si es un inmovilizado, por ejemplo, estamos hablando de una planta industrial. Que requiere un plazo de puesta en condiciones de funcionamiento bastante prolongado. Se han de cumplir esos dos requisitos. Y si se cumplen los gastos financieros, se capitalizan o se activan. Vamos a ver. Vamos a verlo con un ejemplo. Tenemos una empresa que cierra ejercicio económico el 31 de diciembre y adquiere el 31 de diciembre del año 2003 unas instalaciones complejas. Con las siguientes condiciones. Precio neto al contado según catálogo, importe neto facturado por el proveedor 70.000 euros. Y nos dice, se pagará el 31 de diciembre del 2005, por tanto, dentro de dos años, 72.800 euros. Estoy aquí y me lo vende por 70, pero dice, mira, págamelo dentro de dos años y en lugar de 70 me va a salir que da 72.828. Uno, dos años. ¿Vale? A mí lo que me interesa es ver esto, qué equivalencia hay. Es al calcular el tipo de interés efectivo de la operación. Y yo sé que 70.000 euros hoy equivalen a 72.828 euros dentro de dos años. Por tanto, pues establezco aquí una equivalencia financiera y yo sé que 70.000 por uno más el tipo de interés que sea al cuadrado, capitalizo dos años, va a ser igual a 72.828. Bueno, pues aquí despejaría. O incluso si queréis con la función TIR de la hoja de cálculo externa, una calculadora financiera, pues también la podemos sacar. El tipo de interés será de un 2% anual. Sería el tipo de interés que iguala esas dos corrientes de flujos. A efectos de examen no os van a pedir que hagáis esos cálculos porque nos dejan tener calculadora programable. Entonces os lo van a dar. Os facilitarían en caso de acción. En caso de acción financiera es un cuadrito y vosotros tenéis que darle a interpretar. Aquí nos dicen que es el 2%. Pues ya sabemos que es el 2%. ¿Qué interés se devenga en el ejercicio 2004? Pues sería 70.000 por uno más el 2%. Sacaríamos el valor a final del 2004. 70.000 equivaldría a 71.400. Los intereses pues serían 1.400 euros. Por diferencia entre el valor final y el inicial. Pues si queréis directamente el 2% sobre 70.000 y ya os sale pues 1.400 euros. ¿Y qué intereses se devengarían en el ejercicio 2005? Pues calcularíamos el 2% sobre 71.400. Y nos daría 1.428 euros. Bien, por tanto tenemos calculados los intereses en el año 2004 y los intereses en el año 2005. Los intereses decíamos que se activan siempre y cuando se cumplan dos condiciones. La primera, ¿se ha producido antes de que el activo esté en condiciones de funcionamiento? Y la segunda, ¿que haya dictado más de un año? ¿En qué fecha está en condiciones de funcionamiento? Nos dice que está en condiciones de funcionamiento el 2 de enero del 2005. Desde que se adquiere hasta que está en condiciones de funcionamiento pasa más de un año. Por tanto, esto lo cumple. ¿Y qué intereses puedo activar? ¿Los del 2004, los del 2005, los dos o ninguno? Pues vamos a la segunda condición. Aquellos que se hayan producido antes de que el activo esté en condiciones de funcionamiento. Por tanto, puedo activar los intereses del 2004. Porque se han producido antes del 2 de enero del 2005 y ha tardado más de un año estar en condiciones de funcionamiento. Cumple los dos requisitos. Activo 1.400 euros. Y los 1.428 no los puedo activar. Estos son los requisitos. Irían a gasto del ejercicio. Por tanto, secuencia contable. El 31 de diciembre del 2003 compro esta instalación por 70.000 euros. Está en montaje porque todavía no está en funcionamiento. La clasifico en una cuenta de su grupo 23. No la pago. Le debo al proveedor estos 70.000 euros. Lo valoro a fecha de hoy. Es una deuda a largo plazo. Cuenta el grupo 1-7 porque le voy a pagar a 23. 24 meses, a más de un año. Bien. Transcurre el primer ejercicio, 2004, y incurro en unos gastos. O devengo los gastos del aplazamiento al 2% de interés anual, que son 1.400. ¿Cómo registro? Inicialmente gasto. Gasto financiero, 6-6-2, y aumento el valor de la deuda. Le debo 70.000 más 2.400. Gasto a pasivo. ¿Y qué pasa? Analizo. Hacía el ejercicio. Sí, estos gastos son activables. Y veo que sí. ¿Cómo los activo? Pues no hay ninguna cuenta en el plan general que me permita esa activación. No hay ninguna. Para otro tipo de partidas sí que veremos que las cuentas sean trabajos realizados para el inmovilizado. Pero para el tema de los gastos financieros no está abierta. Pero como sabemos, el cuadro de cuentas es optativo. Me invento una cuenta. ¿Cómo la puedo denominar? Incorporación adaptiva de gastos financieros. Es una cuenta que me va a ir al resultado financiero, de alguna forma compensando este gasto. Y la noto en el haber, como si fuera un ingreso o un menor gasto, como queráis. Pero va al resultado financiero. Y la contrapartida es otras instalaciones sin montaje. Estoy activando de esta forma, estoy incorporando al valor de la máquina estos gastos. La máquina vale en balance 72.400. ¿Y los gastos financieros? Pues los neutralizo con esta cuenta que me acabo de inventar. Incorporación adaptiva de gastos financieros o como queráis denominarlo. Bien, ¿qué más tengo que hacer a 31 de diciembre de 2004? Un asiento de reclasificación. ¿Por qué voy a pagar a 31 de diciembre de 2005 la máquina con los intereses? Por tanto, reclasifico estos 71.400, les saldo la cuenta 1.23, que es una cuenta de activo no corriente y movilizado financiero. No, perdón, pasión. Pasivo financiero, activo no corriente, esto yo ya se me va la olla, es una deuda. Pasivo no corriente, grupo 1, financiación básica. La reclasifico a una cuenta de grupo 5, a una cuenta de pasivo corriente. Tengo ya en mi balance correctamente colocada esta deuda que tengo con el proveedor. Y nos iríamos al año siguiente. A 2 de enero del 2005, primer hecho, la máquina entra en funcionamiento. ¿Qué hago? La reclasifico. La reclasifico. Doy de baja la 2.3.2 y la paso a la 2.1.5. Y a partir de aquí ya puedo amortizarla. ¿Y qué pasa también en el 2005? En el 2005 tengo que registrar el devengo de los intereses del aplazamiento, que eran el 2% sobre el valor del pasivo, que eran 71.400, que eran 1.428 euros. Registro el gasto con abono a una cuenta de proveedores de inmovilizado acorto, grupo 5, porque al proveedor le voy a tener que pagar estos 71.400 que había ya registrado antes, más los 1.428, pues tendré que pagar 72.828. Por lo tanto, la cuenta 5231 me quedará con saldo acreedor de los 71.400 que había reclasificado, más los 1.428. Tendremos saldo acreedor de 72.828. ¿Lo pilláis? ¿Y estos gastos los puedo capitalizar? No, porque se han devengado después de la apuesta en condiciones de funcionamiento. Se han devengado. Durante el ejercicio 2005. Quedan como gasto financiero. El último apunte que tengo que hacer sería pagar la deuda. Le pago estos 72.828, cancelo pasiva, notan el debe y registro la salida de tesoría. ¿Dudas? Construcimos fabricación con medios propios. También puedo construir los inmovilizados con mis propios medios. Aquí entraría en juego el concepto de coste de producción que ya conocéis. Dentro del coste de producción incluimos no solamente... ...el coste de los factores directos, mano de obra, materiales, sino también parte de los costes indirectos que razonablemente puedan imputarse y que sean necesarios para la apuesta en condiciones de funcionamiento. Aquí incluimos entre otros la ubicación y cualquier otra condición necesaria para que el inmovilizado opere. Cuando los inmovilizados en construcción o fabricación necesitan un periodo superior al año, los adquiera o los construya... ...se incluyen los gastos financieros. ...se incluyen los gastos financieros devengados hasta la apuesta en condiciones de funcionamiento. ¿Vale? El coste de producción es una magnitud que generalmente se calcula acudiendo a la contabilidad de gestión o contabilidad analítica, contabilidad de costes de la compañía. Veamos un ejemplo. Una empresa comienza a construir el 1 de abril del 2005 con sus propios medios una nave industrial que utilizará como almacén. Al finalizar el ejercicio, el encargado de contabilidad de costes prepara un informe en el que se detallan los costes imputables a la nave en construcción. Materiales diversos, sueldos de personal, costes indirectos. Total 60.000. La nave está en fase de construcción. Bueno, ¿qué pasa con estas partidas? Todas estas partidas, en balance, están ya imputadas como costes. Los materiales consumidos en cuentas de Grupo 6.0, los sueldos de personal en cuentas de Grupo 6.4 y los costes indirectos, pues, casi todos en cuentas de Grupo 6.2 de Servicios Exteriores. Es decir, están en cuentas de Grupo 6. Están como gasto. Pero son gastos activables o capitalizables. ¿Cómo los activo o capitalizo? Aquí sí que el Plan General de Contabilidad para ese tipo de partidas no financiadas. No financiadas. Tiene registradas, tiene recogidas una serie de cuentas que están en el subgrupo 7.3. Cuentas de ingresos. Se denomina en este caso, la 7.3.3, trabajos realizados para el inmovilizado material en curso. Mediante esta cuenta que va al resultado de explotación, neutralizo los gastos que tengo registrados anteriormente en mi contabilidad. Gastos de consumo de materiales, gastos de personal y gastos... ...de Servicios Exteriores. Por tanto, aquí tendré registrados los gastos por 60.000 y aquí imputo un ingreso por 60.000. Resultado de explotación cero. ¿Qué consigo de esta forma? Activar los gastos. Los gastos los incorporo en la cuenta Construcciones en curso, en la 2.3.4. El procedimiento es similar al que hemos visto antes, lo que pasa es que sí que aquí aparece ya, si ves el cuadro de cuentas, hay una cuenta para recoger esta operativa. Para los gastos financieros no existe. Pero el funcionamiento es el mismo. Sigo. ¿Aquisiciones conjuntas o por lotes? Hasta ahora hemos visto adquisiciones o fabricaciones independientes de elementos de inmovilizado, pero puedo adquirir un lote de elementos pagando un importe único. ¿Y cómo reparto el coste conjunto entre los componentes del lote, que pueden ser activos inmovilizados de diferente naturaleza? Pues aquí voy a efectuar un reparto atendiendo a los valores de mercado de cada uno de ellos. Veamos un caso. La empresa ROX compra un terreno, un edificio y un equipo informático. Tres elementos de naturaleza distinta, todos materiales. Por un importe total de 120.000 euros. Es una adquisición de un lote. Y me dice los valores de mercado, que serían el valor razonable más o menos, son los siguientes. Terreno 40, edificio 95 y equipo informático 15. El lote vale a mercado 150 pero yo he pagado 120. Es el que ha hecho un buen negocio. ¿Cómo reparto estos 120 entre los elementos que componen el lote? Pues en base a los valores de mercado. Calculo unos porcentajes. Al terreno serán 40 entre 50, le quedo un porcentaje y lo multiplico por 120. Lo mismo haría para el edificio y para el equipo informático. Yo tengo que dar de alta. Y me da mi balance por 120, que es lo que he pagado. Aquí tengo la serie de tesorería. ¿Y cómo real imputo? Pues calculo unos porcentajes. Parto los valores de mercado, no del importe que he pagado y calculo un porcentaje. El terreno es el 26,7% del valor de mercado total del lote. El edificio es el 63,3% y el equipo informático es el 10%. Por tanto, de los 120.000 imputo el 26,7% a terrenos. 26,7% a 20.032. El 63,3% al edificio, 76% y el 10% a el ordenador. Por tanto, 12.000. Y eso es como registro. Registro en la cuenta terrenos y medios naturales 21032. En construcciones 211, 76%. Y aquí, pues para procesos de información 217, 12.000. Vamos a las preguntas, que esto ya es más complicado. ¿Quién me decía? ¿Qué es un rollo las permutas? Bueno, aquí os va a quedar una pregunta seguro. Hay que prestar atención que esto cae. Cae siempre. Bien. Las permutas pueden ser fundamentalmente de dos grandes tipos. Podemos hablar de permuta comercial y de permuta no comercial. Para que nos situemos. Una permuta no comercial... Viene a ser como una operación de trueque. Es cuando intercambio activos de una misma naturaleza y uso. Cambio un coche por otro. Y una permuta comercial vendría a ser como una compra-venta con pago en especie. Aquí intercambio activos de uso diferente. Por ejemplo, imaginaos que estoy en una promoción y uno de los proveedores de la promotora le suministra vigas, que es una mercadería para la promotora, y en lugar de pagarle, pues la promotora le entrega un piso. Es decir, vale, pues mira, tú me das vigas o me das hormigón y yo, pues en lugar de pagarte, te lo permuto por una vivienda. Entonces aquí sí que hay una permuta comercial. La diferencia es sustancial porque las permutas no comerciales, la normativa contable. La normativa contable no permite reconocer beneficio o resultado cero o pérdida y en las permutas comerciales sí que nos va a permitir recoger o reconocer un beneficio. Asimismo, las permutas tanto comerciales como no comerciales pueden ser totales o parciales. Una permuta es total cuando no hay contraprestación monetaria, es decir, cambio un bien por otro. Cambio un coche por una furgoneta. Y la permuta es parcial, tanto las comerciales como las no comerciales. Si, además de intercambiar bienes, intercambiamos también o entregamos una compensación en dinero. Mira, te cambio un coche por tu furgoneta y además te doy 2.000 euros porque tu furgoneta está mejor que mi coche. Sería una permuta parcial. Pero vamos a la normativa ya contable. Analizamos en primer lugar las permutas no comerciales, las más sencillas, en las cuales, como os he dicho, no se puede reconocer el beneficio contable. El inmovilizado entregado, lo doy de baja en mi balance. Por su valor neto contable, es decir, tengo que amortizarlo hasta la fecha de baja y lo doy de baja por el coste histórico y por las cuentas compensadoras que haya, amortizaciones y deterioros. ¿Cómo valoro el inmovilizado que recibo? Pues se evaluará por el valor contable del bien entregado más, en su caso, si es una permuta parcial, la contraprestación monetaria, el dinero que haya entregado a cambio. Con el límite máximo, si está disponible, del valor razonable del inmovilizado recibido, siempre y cuando éste fuera menor. Por tanto, resumiendo, una permuta no comercial voy a valorar a valor contable de lo que entrego, Más dinero, si entrego también dinero, con el límite del valor razonable de lo que recibo. Por tanto, si el valor razonable de lo que recibo es inferior al valor contable de lo que entrego, pues pierdo dinero. Y si es superior, pues no pierdo, pero tampoco puedo reconocer un beneficio contable. Porque me fijaría, cogería el menor de esos dos valores. Veamos un caso. Una empresa dispone de una máquina de la que se conoce la siguiente información. Costo en origen o valor inicial, 50.000, amortización acumulada hasta la fecha de la permuta. Importante, siempre amortiza hasta la fecha. 10.000, el valor neto contable, por tanto, el VNC será 40.000. La empresa permuta la máquina por otra. En principio es la permuta no comercial. El 1 de junio. Y entrega además 2.000 euros en efectivo. Permuta no comercial, parcial. Entrego la máquina, que tiene un valor neto contable de 40.000. La máquina que recibe tiene un valor de mercado, que es un valor razonable de 45.000. ¿Qué pasa de aquí? Pues tengo que valorar por el menor de los dos. En este caso, es menor el valor contable de lo que entrego, que es 40 más 2, 42, que el valor de mercado de lo que recibo. Resultado cero. Caso B. La máquina que recibe tiene un valor de mercado de 39.000. Aquí tengo una pérdida. Porque entrego bienes valorados. Por 42. Y recibo algo valorado por 39.000. Perderé 3.000 pagos. Asientos contables. Caso A. Valor de mercado del activo recibido superior al valor contable del activo entregado más dinero. Pues vale. Yo entrego una máquina que doy de baja por un valor de... Aquí el libro se hace de un doble asiento. A mí no me gusta mucho la fórmula porque... ...da lugar a equívocos, o bueno, sí, yo lo haría todo en un mismo asiento. Porque veis que damos de baja la máquina por 50.000, que es el precio de adquisición, el coste en origen, ¿no? Y luego doy de baja la amortización acumulada. Yo esto lo haría en un único asiento. Hay dos asientos, pero bueno, para que nos situemos. La cuenta compensadora, que es la 281, la voy a cargar. Es una cuenta compensadora de un inmobilizado. Tiene saldo acreedor, la debito con abono, en este caso, a la maquinaria. A mí no me gusta mucho este asiento, pero lo seguimos así. Y luego, para que esta es la máquina que adquiero en la permuta, doy de baja el resto, los 40.000, que es el valor neto contable de la máquina. Doy de baja cesorería, que es entrego por 2.000 y recibo una máquina nueva por 42.000. Yo esto a mí me gustaría más hacerlo de esta forma. Maquinaria entregada, 50.000. Amortización acumulada, maquinaria entregada, 10.000. Maquinaria recibida, 42.000 y bancos, 2.000. Es decir, doy de baja una máquina registrada por 50.000 y amortizada por 10.000. La cuenta de amortización, como sabéis, es una cuenta compensadora y el saldo acreedor la cargo. Y recibo una máquina guardada por 42.000, que es el valor neto contable de la máquina. Entrego más la contrapartida monetaria adicional de 2.000 euros. Esa es la permuta parcial. ¿Habéis pillado? ¿Os habéis perdido? Sí, vale, sigo. Bien, caso B. En este caso, la máquina que recibo, el valor razonable es inferior al valor contable de lo que entrego. Pues aquí tendré una pérdida. Porque tengo que valorarla a valor razonable. Y valoro la máquina recibida por 39. Ok. Y entrego una máquina valorada en 40 más 2.000 euros, 42. Registro una pérdida procedente del limonizado material. Cuenta 6, 7, 1. Esta es una pérdida que va al resultado de explotación. Aquí tenéis resumido los criterios de evaluación de las preguntas no comerciales. En el caso primero... No hay beneficio. En el caso segundo, pues hay pérdida. Por tanto, nunca puede haber beneficio contable en una permuta no comercial. O resultado cero o pérdida. ¿Qué pasa con las permutas comerciales? En este sí que veremos que se puede reconocer el beneficio contable. ¿Y cuándo nos dice el plan general de contabilidad que una permuta es comercial? Nos indica que existe una permuta comercial si se da cualquiera de las dos siguientes circunstancias. Ojo, porque puede ser pregunta también de examen. A. La configuración de flujos de efectivo del inmovilizado recibido difiere de la configuración de flujos de efectivo del activo entregado. O B. El valor actual de los flujos de efectivo tras impuestos a las actividades de la empresa afectada por la permuta se ve modificado como consecuencia de la operación. En ambos casos, la diferencia ha de ser significativa. En el examen, si os preguntan... ...algo sobre permutas, os dirán... ...os pondrán alguna de estas frases para que sepáis diferenciar si es comercial o no comercial. ¿Cómo se valora la permuta comercial? Pues aquí hay más lío. Aquí el criterio prioritario es el del valor razonable. Y si tiene evidencia, valoraríamos a valor razonable del bien recibido. En el caso de que no tuviéramos buena evidencia de este... ...pues iríamos... ...al valor razonable del bien entregado, más las contraprestaciones monetarias adicionales, si es una permuta parcial, como en el caso anterior. Y en el caso de que no conozcamos ningún valor razonable, de forma subsidiaria, tendríamos que acudir al valor contable del bien entregado. Por tanto, el resultado de estas permutas puede ser nulo, pérdida o beneficio. Aquí lo tenéis resumido. Si hay una estimación fiable del valor razonable... ...pues, en el caso de que hay evidencia del valor razonable del activo recibido, valoro a este valor razonable. Y si no, valoro al valor razonable del activo entregado. En el caso de que no haya estimación fiable del valor razonable, pues voy al valor contable. De forma subsidiaria. Veamos un ejemplo. Una empresa tiene un solar cuyo precio de adquisición es de 15.000 euros, valor de mercado estimado, que es el valor razonable de 20.000, lo permuta por una nave industrial que tiene un valor de mercado o valor razonable de 21. Suponga A. Existe evidencia más clara del valor razonable del activo entregado. B. Existe evidencia más clara del valor razonable del activo recibido. En el caso A, si hay evidencia más clara del valor razonable del activo entregado, pues lo voy a valorar a valor razonable del activo entregado, pero teniendo como límite el valor razonable del activo recibido. ¿Cuál es el valor razonable del activo entregado? 20.000. Y el límite, porque puedo valorar, es de 21. Por lo tanto, está perfectamente válida esta operación, lo valoro por 20.000. Por lo tanto, regímenos. Registro construcciones por 20.000, activo recibido. Doy de baja un terreno que lo tengo registrado contablemente por 15.000. Los terrenos se amortizan, no hay cuentas compensadoras y en este caso me aparece un beneficio de 5.000. Aquí sí que puedo registrar un beneficio. Caso B. Si existe una evidencia más clara del valor razonable del activo recibido, siendo este el valor máximo de valoración, pues... ...valoraría por 21.000. Doy de baja el terreno por 15.000 y en este caso el beneficio, veis que se aumenta, pasa a ser de 6.000. Pasamos a las adquisiciones por subvención, donación o legado. Tres figuras jurídicas que intervienen también en la contabilidad. Y aquí nos referimos a subvenciones no reintegrables. Subvenciones de capital concedidas por terceros, distinto de socios o propietarios, pueden ser oficiales. O no, puede ser una subvención de otra compañía. Subvenciones destinadas a financiar activos de larga duración. Subvenciones de capital, no reintegrables. Que figuran en el patrimonio neto, como sabéis, es el tercer componente del patrimonio neto contable. Bien, ¿cómo se valora el inmovilizado subvencionado? Se valora por su valor razonable. Volvemos al tema anterior, si queréis registrarlo de valor razonable. La subvención concedida, importante. Hablo de subvención de capital no reintegrable. Se registra en una cuenta de patrimonio neto cuyo saldo se irá trasladando a la cuenta de pérdidas y ganancias sobre una base sistemática racional. ¿Cuál sería? Si recibo una subvención para financiar la compra de inmovilizado, la base sistemática sería la amortización de ese inmovilizado. ¿Pero qué pasa si el inmovilizado es un terreno que no se amortiza? ¿Cómo imputo la subvención a pérdidas y ganancias? Pues no la puedo imputar. Queda ahí y se imputará de golpe cuando el terreno se dé de baja, por enajenación, por ejemplo, o una venda. Si el terreno se deteriora, no se puede amortizar, pero es un elemento sí que es sujeto a deterioro, en ese caso también puedo imputarlo. Imputar la parte proporcional de la subvención en función del deterioro del elemento. ¡Ojo! Novedad. Dime. ¿Qué determina lo que es un valor razonable? ¿Es el valor de mercado? Pues bien, vendría a ser el valor de mercado. Lo comentamos la semana pasada. Hay una fórmula. Si, por ejemplo, se ha tratado un elemento, el valor razonable es el valor de intercambio entre dos sujetos en condiciones de independencia mutua. Es decir, que no haya ninguno que maneje información privilegiada y que no haya ninguno que esté en un estado de necesidad. De vender un elemento. Por ejemplo, en una jornada necesitas estar siempre en un concurso de acreedores. Necesitas hacer caja. Negocios con un comprador, pues la venta de un lote inmovilizado. El precio que te hace no va a ser el valor razonable, porque esto trata de ser una necesidad. Bien. En un mercado abierto y transparente, como puede ser la bolsa de valores, pues es el valor de cotización de una acción. Si te vas a otro mercado, como comentaba el caso de la lonja del pescado, es el valor al que se intercambian las luces o los rapes. Por cierto, es un mercado muy interesante. Yo cuando voy a mi tierra, allí que me dicen, me lo paso pipa viendo las subastas de... Antes se iban a Vivagoz, ahora ya están todas muy automatizadas. Antes gritaban y sacaban papeles y tal. La subasta del marisco era un show, un espectáculo. Sería ese el valor razonable. En caso de que no lo podamos fijar por un procedimiento de ese tipo, pues puedes acudir a un experto independiente, a un tasador. Pero bueno, te remito al tema número uno. Vale. ¿Qué pasa con las correcciones valorativas por deterioro de elementos que se hayan financiado por medio de una subvención donde hacemos legado? Pues ya tenemos el lío. Son casos muy antípicos, ¿eh? Puede quedar como pregunta de nota. En este caso, el deterioro es irreversible. Cuando analicemos las correcciones valorativas, os diré, oye, las amortizaciones son correcciones valorativas que recogen unas pérdidas sistemáticas y recurrentes de un elemento limonizado y son irreversibles. ¿Vale? Y los deterioros recogen unas pérdidas asistemáticas, pero son reversibles hasta un límite. ¿Vale? Pero si ese elemento se ha financiado por una subvención, total o parcialmente, pues habría que calcularla. La parte proporcional, esa parte es irreversible. El deterioro es irreversible. Bien, vamos a ver un ejemplo. A lo mejor os va a sonar un poco extraño esto, ¿eh? Pero bueno, los estudia con más detalle en el tema número 9. ¿Por qué? Porque aquí aparecen cuentas novedosas. Grupos 9, grupos 8. Si veis el plan de Pymes, ese atornamiento contable no existe porque en el plan de Pymes no hay grupo 9 y grupo 8. Es todo mucho más sencillo. Pero bueno, aquí analizamos las contabilidades del plan general ordinario. Con fecha 1 de enero de 2008 le es concedida a una empresa una subvención oficial no reintegrable por importe de 15.000 con la que adquiere un elemento de transporte. Destino de la subvención, pues adquirir un inmovilizado. Subvención no reintegrable de capital. El gasto por amortización anual del elemento es de 1.500. Entonces se amortiza, veis, un 10% anual. ¿Vale? ¿Cómo registro esto? El día 1 de enero recibo la subvención y que veis en la normativa. Entra la pasta, cargo la 572 y ahora registro esto en una cuenta de ingresos contra el patrimonio neto. Cuenta de grupo 9. Cuenta 940 por 15.000. Con la pasta, la ley de baja, compro elemento de transporte. ¿Vale? ¿Y qué hago con esta cuenta de grupo 9? Las cuentas de grupo 9 y grupo 8. A cierre de ejercicio. Son cuentas de ingresos y de gastos. Se regularizan. Como las cuentas de Grupo 7 y de Grupo 6. Se regularizan. Por lo tanto, son cuentas temporales. A cierre ejercicio su saldo es cero. Pero, ¿cómo se regularizan? En lugar de regularizarse abonando o cargando respectivamente la cuenta 129, la cuenta de pérdidas y ganancias, se regularizan con abono o cargo a cuentas de patrimonio neto de balance distintas de la cuenta 129. En este caso, vemos que se regulariza, se carga con abono a la cuenta 130. Que es una cuenta de patrimonio neto de balance. Vale. Continuamos con el caso. Y este elemento me dice que se amortiza en 1.500 euros. Por tanto, a cierre ejercicio, cargo la cuenta 681, amortización, método directo, cuenta compensadora, al haber 281. Pero, ¿qué me decía? Oiga usted, la subvención le imputa a usted a pérdidas y ganancias siguiendo un criterio racional y sistemático relacionado con el elemento limonizado. ¿Qué criterio sigo? La amortización. ¿Cuánto he amortizado? 10% del precio de adquisición. ¿Qué importe voy a imputar? El 10% de la subvención. ¿Cómo lo hago? Pues aquí me va a aparecer el 21 de diciembre una cuenta de grupo 8, cuenta de gasto contra el patrimonio neto, contrapartida cuenta 746, cuenta de imputación al resultado de una subvención. Esto va a explotación. Y veis que, en alguna forma de explotación, me viene a compensar la imputación de la amortización. Y, ¿qué pasa con la cuenta de grupo 8? Oiga, la cuenta de grupo 8 también se regulariza hacia el ejercicio. Por tanto, la voy a abonar con cargo de cuenta a la misma cuenta que he utilizado para regularizar la cuenta de grupo 9, a la 130. ¿Qué consigo de esta forma? Que la cuenta 130, cuenta de patrimonio neto, inicialmente he hecho una anotación en el haber, incremento patrimonio neto porque importe por 15.000. Y ahora hago una anotación en el debe por 1.500. Me quedará con saldo creador de 13.500. ¿Qué son 13.500? La parte de la subvención que está pendiente de imputar al resultado del ejercicio. ¿Por qué? Porque el resto de la subvención, estos 1.500 euros que estaban en 746, que se pasaron a 746, ¿veis? ¿Qué pasa con estos 1.500? Las 746, a cierre de ejercicio, las voy a cargar con abono que cuentan a 1.29. Haré, entre otros, cargo las 746 por 1.500, con abono las 129 por 1.500. Y que las 129 van a cuentas patrimoniales. Si no, me quedaría dos veces imputada la subvención en patrimonio neto. Entonces, ¿cómo la tengo? Tengo en la cuenta 130, en balance, imputada la subvención, que todavía no he pasado resultados. Y en la 129, en balance, cuenta de balance, 129, tengo imputada también la subvención que he pasado resultados en ese ejercicio. Me quedan 15.000 euros de la subvención imputados en patrimonio neto. Una vía resultados y otra pendiente de imputación. ¿Eh? ¿Lo pillamos? En las 129... A ver, vuelvo a verlas. Esto, para el primer día es que es complicado. Esto se ve con más detalle en el tema número 9. Pero ya me estoy... pam, pam, pam, pam, pam, voy a borrar todo. Bien. ¿Dónde te has perdido? Me he perdido en cuanto a la amortización que hago con ella. La tengo que pasar a las 746. No, no, no, vamos a ver. La amortización, la amortizo. El elemento no la amortizas, ¿eh? La amortización lo va a llevarse a resultados. ¿Qué pasa? ¿Cómo imputo la subvención a pérdidas y ganancias? Porque si vamos a la teoría que nos decía, la subvención la va usted a imputar en función de un criterio racional y sistemático. Si la subvención la ha destinado al adquisición de un inmobilizado, puede ser ese criterio racional y sistemático. La amortización del inmobilizado. ¿Amortizo un 10%? Imputo un 10%. ¿Cómo imputo? A resultados. Pues le tengo que llevar una cuenta de grupo 7, ¿no? ¿Con tú? Subvenciones, donaciones y legados de capital transferidos a los resultados del ejercicio. Mira, no os quiero liar. Si, por ejemplo, trabajáis en una PyME, pues se imputa directamente al grupo 7. Y Santas Papas, antes de la reforma contraria del 2007, también se hacía así. Pero ahora, pues se han aparecido las cuentas de grupo 8 y grupo 9. Se hace un paso adicional. ¿Vale? Entonces, ¿cómo imputo? A resultados tengo que llevar una cuenta de ingresos. Anoto en la vela 746. Contrapartida, cuenta de gasto a patrimonio neto. 840. ¿Por qué? Porque voy a reducir la cuenta de subvención que tengo en patrimonio neto. ¿Cómo lo hago? La 840, la saldo al final del ejercicio. Abonándola con cargo a la 130. Entonces la 130, ¿qué me va a quedar? Con los 15.000 que he registrado aquí, cuando regularizo la 940, menos los 1.500 que acabo de imputar. Me quedará un saldo acreedor de 13.500. Y digo yo, ¿qué pasa con las cuentas 681 y 740? Si la 746 es 681, imputo un desgaste. Pero la 746 también va a resultados. O sea, aquí estoy imputando en resultados 1.500 euros. Con lo cual, en la 129, al cargar la 746, estoy anotando en la 129 1.500 euros. ¿Verdad? Por tanto, ¿qué me queda en cuentas de balance de la subvención? 13.500. En la 1.300, saldo acreedor. Y 1.500 en la 129, saldo acreedor. Esta es la subvención no imputada a resultados y esta es la subvención imputada a resultados. Y las cuentas del grupo 8 y 9 desaparecen. Esto es un poquito incomplejo. Yo lo entiendo que fuese a lo mejor así de primeras. Pero insisto, que se ve con más detalle en el tema número 9. Cuando estemos ya más maduritos, ya más... Bien, vamos con la evaluación al cierre. Los inmovilizados pierden valor por el paso del tiempo, por su uso o por la aparición en el mercado de bienes tecnológicamente más avanzados, por su obsolescencia. Mediante la depreciación se pone manifiesto la pérdida sistemática de valor de los bienes de inmovilizado. La amortización sirve para reflejar contablemente la depreciación sufrida por un bien. Y esta se distribuye entre los periodos de tiempo entre los cuales estima que ese bien... Va a generar ingresos. Va a ser utilizado durante la vida útil del bien. En cambio, el deterioro nos permite recoger pérdidas de valor reversible subocasionales. Por tanto, deterioro ya sabemos que va a ser una pérdida de valor reversible, salvo el caso que hemos comentado antes, la excepción anónima. Si financio un inmovilizado con subvención y lo deterioro, ese deterioro es irreversible. Bien, mediante la amortización se reconoce en balance la reducción sistemática de valor de los inmovilizados. Se reconocen pérdidas y ganancias, el gasto derivado del consumo, el desgaste en el proceso de producción del inmovilizado y también tiene una función financiera. Se retienen en la empresa los recursos necesarios para reponer el inmovilizado. La empresa funciona bajo el principio de desempeño y funcionamiento. Por tanto, entiendo que va a haber una cadena de renovaciones. Cuando llegue el final de la vida útil de este inmovilizado, lo sustituiré por otro. ¿Y cómo lo hago? ¿De dónde saco el dinero? Como la amortización es un gasto que no supone salida de tesorería, de alguna forma estoy haciendo ahí una horchita financiera para reponer o renovar el inmovilizado. Me diréis, oiga, es que la empresa maneja el dinero. Es cierto, es cierto. No es que yo tenga apartado el dinero de las amortizaciones, lo voy usando por otros fines, porque si no tendría un coste de oportunidad elevado. Pero la finalidad de esa amortización, pues también tienes que interpretarla. Desde el punto de vista financiero. Porque estoy imputando un gasto que no supone salida de tesorería de la empresa. Bien, elementos que intervienen en el cálculo de amortización. Esto ya creo que vimos, si no todos, gran parte, en introducción a la contabilidad. Tenemos el coste en origen o valor inicial, que sería el precio de adquisición o coste de producción del elemento. El valor amortizable. ¿Cuál va a ser el valor amortizable? Pues va a ser la diferencia entre este coste en origen y el valor residual estimado. ¿Y qué es esto del valor residual estimado? Es el valor que estimo va a tener el inmovilizado cuando llegue el final de su vida útil. Y ojo, es un valor estimado por la empresa, pero es un valor actual. Estimo que lo que voy a percibir por el inmovilizado, si tengo un coche dentro de 10 años cuando lo dé baja, a fecha de hoy valdría 5.000 euros o 2.000 euros. Por tanto, es un valor actualizado de desecho. El valor que hoy por hoy obtendría, o mejor dicho, para que nos entendamos, el valor que voy a tener dentro de 5 años, pero a fecha de hoy. Lo tengo que actualizar financiadamente. Ese sería el valor residual estimado. Por tanto, ¿qué amortizo? Pues el valor, el coste en origen menos este valor residual estimado. ¿Cuál es el valor neto contable? Otro valor. Es la diferencia entre el coste en origen y la amortización acumulada. Aquí ya no tengo en cuenta el valor residual. Coste en origen menos amortización acumulada. Y si hay deterioro menos el deterioro. Por tanto, coste en origen menos cuentas compensadoras. La vida útil estimada es otra estimación del contable. Es el periodo de duración o uso del bien para la empresa. La puedo determinar en número de unidades producidas. Si es una máquina, en kilómetros circulados. Si es un automóvil o en años. Si sigo un criterio temporal. El gasto anual de amortización es la cuantificación del gasto que imputo a pérdidas y ganancias de cada ejercicio. Y la amortización acumulada es la amortización. Es decir, el gasto de amortización de ese ejercicio más el gasto de amortización de los ejercicios anteriores. Y por último, el coeficiente anual de amortización o tasa de amortización es el porcentaje que aplicó sobre el valor amortizable de cada ejercicio para registrar las cuotas de amortización. Metodos de amortización hay muchos. Vamos a ver rápidamente los más utilizados. El más utilizado y el más sencillo es el método de cuotas constantes. Amortización lineal. Que consiste en amortizar cada año la misma cuota. La misma cantidad. Veamos un ejemplo. Una empresa adquiere el 1 de enero del 2002 un equipo informático de gran potencia para usarlo en la gestión diaria de su actividad. El precio de adquisición fue de 6.000 euros. A este equipo se le estima una vida útil de 4 años y un valor residual estimado de 200. El valor que yo estimo que voy a percibir dentro de 4 años cuando finalice la vida útil a fecha de hoy. Estos 200. El número de horas de servicio es de 10.000 horas. Si tienes que ir, Luis, voy a terminar hoy en las amortizaciones. Porque ya no nos va a dar tiempo a más. Los deterioros, que es un poquito más complicado, lo veremos la próxima semana juntamente con la segunda parte del tema. Bien. Esta vez que el plan de amortización, elaborando el cuadro de amortización. Sigamos al método de cuotas constantes. Amortizo en función de la vida útil. ¿Qué amortizo? El valor amortizable. ¿Cuál va a ser? El valor inicial menos el valor residual. El valor amortizable. Amortizable. UVA. Va a ser 5.800. En cuanto al amortizo en los años de vida útil, 4. Por tanto, la cuota de amortización anual será el coste en origen, 6.000, menos el valor residual, 2.000, dividido entre n, que es 4 años de vida útil. También lo puedo calcular mediante un tanto. Este tanto T sería igual a 1 entre 4, 1 cuarto, 1 entre n siendo n los años de vida útil. Un 0.25. Cada año, si tengo 4 años de vida útil, voy a amortizar un 25%, ¿vale? O un 0.25 del valor amortizado. Me voy al cuadro de la amortización, las fechas, pues amortizo. Si adquiero el 1 de enero del 2002 y llego a una amortización anual, a 31 de diciembre del 2002, 2003, 2004 y 2005. Cuatro años, ¿verdad? Valor amortizable va a ser el mismo que el ejercicio, 5.800. V0, 6.000, menos. Valor residual, 200. La tasa a aplicar, pues va a ser un 25%. 1 entre 4, 1 cuarto. ¿Cuál va a ser la cuota de amortización anual? Pues el 25% del valor amortizable. Cada año es lo mismo, lo pongo en azul. 1.450, 1.450, 1.450, 1.450. ¿La amortización acumulada? Pues la amortización de ese año más la de los años anteriores. El primer año, 1.450. El segundo, 2.900. El tercero, 4.350. Y el cuarto, 5.800. Ojo, valor contable. ¿Cómo lo calculo? Es el coste en origen, V0, menos la amortización acumulada. El coste en origen no era lo amortizable. Por tanto, el valor contable a cierre del ejercicio 2002 será 6.000 menos 1.450. Y el coste en origen a cierre del ejercicio 2005 va a ser lo que no he amortizado, que es el valor residual. Perdón, el coste en origen no, el valor contable, el valor contable, ya me corto el circuito. El valor contable a cierre del ejercicio 2005 va a ser lo que no he amortizado, 200 euros, que es el valor residual. Otro método, método de la suma de los números dígitos. Es un método de amortización... acelerada, amortización decreciente aplico este método degresivo y cada año voy amortizando menos la suma de los números dígitos es una fórmula que puede ser la podemos presentar así por ejemplo si n son 4 será 1 más 4, 5 dividido entre 2 por n 5 dividido entre 2, 2,5 por n me daría la suma de los números dígitos que sería 10 ¿vale? pues a mi me gusta más hacer otra 1 más n sería 5, 5 dividido entre 5 por 4 si, sería 10, efectivamente vale a mi como me gusta hacerlo pues yo me cojo 4 más 3 más 2 más 1 sería 10 ¿no? y el primer año amortizo 4 décimos el segundo 3 décimos el tercero 2 décimos y el último 1 décimo viene a ser lo mismo pero así evitáis tener que memorizar la fórmula pues cojo la suma de los números dígitos si son 4 años pues sean 4 más 3 más 2 más 1 si son 5 años sean 5 más 4 más 3 más 2 más 1 total 15 y el primer año amortizaría 5 quinceavos segundo 4 quinceavos el tercero 3 quinceavos así sucesivamente vale este es un método que nos va a llevar a resultados distintos porque si bien el valor amortizable veis que es el mismo la tasa el tanto no es el mismo el primer año 4 sobre 10 el segundo 3 sobre 10 el tercero 2 sobre 10 y el cuarto 1 sobre 10 la tasa se va reduciendo lo cual implica que la cuota de amortización también va disminuyendo en comparación con el método anterior veis que la tasa era la misma y la cuota igual aquí no aquí amortizo más al inicio de la vida útil del elemento y la amortización acumulada pues en imagen y semejanza del caso anterior es la amortización de ese ejercicio más la de los anteriores por tanto el primer año 2320 el segundo año 4060 el tercero 5220 y el cuarto 5800 ¿Y valor contable? Pues sería el coste en origen menos la amortización acumulada. El cambio viene aquí. Es que la tasa va de más a menos y la cuota también. Es un método de amortización acelerada. Otro método. Método de la tasa constante sobre el valor contable al inicio de cada ejercicio. También es un método de amortización acelerada o de creciente. Pero aquí sí que vais a tener que aprender la formulita. ¿Cuál va a ser el tanto? Va a ser 1 menos la raíz enésima del cociente entre el valor residual y el coste en origen. Por tanto, nuestro ejercicio será 1 menos la raíz cuarta, porque son 4 años de vida útil, del cociente entre 200, valor residual, y 6.000, coste en origen. Esta es la formulita. Y me da un 0.5727. ¿Y qué sucede? Primero, la diferencia sustancial. Este tanto, que va a ser constante, ¿sobre qué lo aplico? No lo voy a aplicar sobre el valor amortizable. Lo voy a aplicar sobre el valor contable. Véis que en los métodos anteriores trabajaba con valor amortizable. Aquí no. Aquí lo aplico sobre el valor contable. Valor contable inicial. Que va a coincidir con el valor contable. Que va a coincidir con el valor contable al cierre de la ejercicio anterior. Por tanto, el inicial. 6.000, tasa 0.57, cuota 3.436, amortización acumulada 3.436. Valor contable final. 2.564, que serán los 6.000 euros, menos los 3.436. Este valor contable final, al cierre del ejercicio 2002, coincide con el valor contable inicial del ejercicio 2003. Y el valor contable final, al cierre del ejercicio 2003. Veis que el valor contable es inferior. ¿Eh? Me da una cuota más baja. La amortización acumulada, pues bueno, la amortización de la ejercicio, más la de los ejercicios anteriores. Y el valor contable final, pues será 2.564. menos la amortización de ese periodo, que son 1.468. Esto serían 2.564 menos 1.468. 1.095, que coincide con el valor contable de inicio del año 2004. Y así sucesivamente vamos haciéndolo. Aquí tienes la tabla, es para que la puedas entender. Yo creo que es fácilmente comprensible y matemáticamente entendible. Lo que sí que tienes que memorizar es la formulita. 1 menos la raíz enésima del cociente entre el valor residual y el coste en óptimo. No creo que os lo pregunten, pero bueno, ahí está. Y vamos con el método de las unidades producidas. En este método no tenemos ninguna referencia temporal. Bueno, tenemos una referencia temporal, pero no la vamos a tomar como patrón de cálculo. Aquí vamos a tomar como patrón de cálculo el uso o la productividad del activo. Por ejemplo, en un vehículo los kilómetros realizados. O en un elemento, por ejemplo, una máquina, las unidades producidas. Bien, en este caso nos dice que la máquina va a durar 10.000 horas de funcionamiento. ¿Y cuál va a ser la cuota de amortización horaria? Pues será el valor inicial, coste en origen menos el valor residual, 5.800. Acordaros que esto era 6.000 menos 200 dividido entre el número de horas. Por cada hora de funcionamiento. Va a tener una... ...amortización de 0.58 euros. Y cada año amortizaré más o menos en función de las horas de funcionamiento. Por ejemplo, si en el año 2002 funciona 3.000 horas... ...pero como ha sido amortizado por 3.000, amortizo 1.740. En el año 2003 ha funcionado más, 4.000 horas, amortizo más. En el año 2004 ha funcionado menos, 2.000 horas, pues amortizo menos, 1.160. ¿Veis? No hay un patrón. Cada año voy a amortizar en función del uso de la máquina. No sigo un patrón temporal. En cuanto al método para registro de amortización... ...técnicamente hay dos posibilidades. El método directo y el método indirecto. El método directo está prohibido por el plan general de contabilidad. Consistiría en registrar la amortización, el gasto, abonando directamente la cuenta del equipo, pero es un método no admitido por el plan general de contabilidad porque se pierde muchísima información. En balance solamente nos figuraría el elemento por el valor neto contable. No tendríamos información del coste en origen ni de la amortización acumulada. Por tanto, el método válido es el método indirecto. El que hemos visto hasta ahora con cuenta correctora compensadora, diferente a la del inmovilizado, que se denomina amortización acumulada. Cuenta con saldo creador y, por favor, la amortización acumulada no es un pasivo, es una cuenta compensadora de un elemento del inmovilizado, del activo no corriente. Y asimismo, insisto, los elementos del activo corriente tienen valor de cambio, no se amortizan. Solamente se amortizan los inmoviles. Bien, ¿qué pasa si se producen cambios en las estimaciones iniciales o que la vida útil, por ejemplo, es un elemento o es un parámetro que estima el contable? Pues en este caso la cuota de amortización debe ser ajustada de forma prospectiva. Lo que está registrado contablemente ya va a misa. No se puede cambiar de forma retrospectiva. Si yo estimo cuando llevo tres años de vida útil... Inicialmente había estimado cinco y decía, pues este elemento en lugar de cinco me va a durar siete. Bueno, a partir de ahí cojo el valor neto contable y de forma prospectiva, de ahí en adelante, en lugar de amortizar el valor neto contable que me queda en dos años, pues lo amortizo en cuatro. Y está este cambio de estimación y el efecto económico ha de detallarse y precisarse en la memoria de las cuentas anuales. Vamos a ver este ejercicio. Y por hoy lo dejamos. ¿Vale? Cierta empresa tiene una instalación cuyo coste en orígenes de 60.000 euros, sin valor residual, con una vida útil de 10 años y con una función de amortización lineal. Pasan seis años y se aprecia que debido a la aparición de nuevas circunstancias, esa instalación... podrá rendir durante dos años más. Por lo tanto, va a tener una vida útil de 12 años en lugar de 10. ¿Cómo se registra este cambio en la estimación de la vida útil de la instalación? Bueno, me doy cuenta cuando han pasado seis años. Por lo tanto, primero que tengo que hacer es calcular el valor neto contable de la instalación al cabo de seis años. ¿Y cuál será el valor neto contable? Pues va a ser el coste en origen, que da 60.000, menos la amortización acumulada. Si amortizaba en función de la vida útil, que da 10 años, sin valor residual, el valor amortizable va a ser 60.000, porque no hay valor residual. ¿Y qué amortizaré cada año? Un 10%, 6.000 euros. Transcurridos seis años tendré una amortización acumulada de 6.000 por 6, de 36.000 euros. El valor neto contable, pasado los seis años... 6 años, al final del sexto año, es de 24. ¿Y qué me quedará de vida útil? Pues me quedarán 4 más 2, 6 años más. Por tanto, tendré que amortizar estos 24.000 en lugar de en 4 años, en 6. Me cambia la cuota. La cuota pasa de 6.000 euros a 4.000 euros. Por tanto, de forma prospectiva, desde esta fecha en adelante, lo que está registrado ya Santa Santorum, no lo puedo tocar, pues cambio la cuota de amortización. Y a partir del año 7, amortizo 4.000 euros. E informo de este efecto en la memoria. Tendré que decir, se ha cambiado la vida útil de este elemento, en lugar de 10 pasadas 12, y esto va a tener un impacto en resultados, con una minoración en la cuota de amortización de este elemento de 2.000 euros. Pasa de 6.000 a 4.000. Informo en la memoria de este hecho. ¿Listo? Pues por hoy vamos a dejarlo aquí, que si no ya es demasiada materia. Ya no meto con deterioros. La próxima semana veremos este tema, y veríamos el tema número 3, que es más cortito y más sencillo. El tema número 3, si queréis leeroslo, iros leyendo la contabilización de los arrendamientos financieros de los leasing, que es lo que os da siempre más quebraderos de carne. Venga, hasta el próximo lunes. Adiós.