Muy bien, pues buenas tardes. Es un placer ver aquí en el aula caras conocidas y en la lista del chat también nombres que me suenan de otras asignaturas, si no me equivoco. Así que nada, bienvenidos a la asignatura de Prehistoria Antigua de la Península Ibérica. Bueno, a diferencia de lo que estoy haciendo hoy con los alumnos de primero del grado de Arte y del grado de Geografía e Historia, que es presentar un poco las herramientas, el curso virtual, bueno, me parece que a los que estáis aquí, bueno, si hay alguien que es la primera asignatura con esto de los microgrados y demás que matricula, pues que me perdone, pero me parece que la mayoría de los que estáis aquí no necesitáis que hablemos de la plataforma, del curso virtual y demás. Y bueno, pues algo que además tenemos el reto de que nuestra aproximación a la asignatura necesariamente será quincenal, pues bueno, vamos a empezar con la paleoantropología de la Península Ibérica, que en cierta medida es una sesión la que vamos... a abordar hoy, que pretende fundir dos temas del manual, ¿no? El que tiene que ver estrictamente con la paleoantropología y el que tiene que ver con la paleotenografía, es decir, por un lado las distintas variedades o tipos del género homo que tenemos atestiguados en los territorios peninsulares en su relación con la península, la tecnología lítica y por otro lado las formas de vida de las que nos hablan esos primeros fósiles humanos que tenemos en la península, ¿no? Bueno, pues yo voy a tratar de fusionarlo para dentro de 15 días, el día 14 de octubre, pasar al paleolítico inferior en la Península Ibérica y luego, bueno, pues seguir el planteamiento de sesiones, que por cierto os he dejado en el curso virtual, al que sé que todavía no podéis acceder, pero me parece que a partir del día 2 o día 3 ya podréis, entonces ahí encontraréis esta presentación, un enlace a la grabación de la sesión de hoy, con lo cual ya adelanto que las sesiones serán siempre grabadas, salvo que haya algún fallo y, bueno, pues un mensajito donde está con la presentación de este tema, un enlace a, bueno, pues qué días vamos a tener sesión, que es muy sencillo, pues hoy hemos tenido la primera, pues la semana que viene no, la siguiente sí y así alternativamente hasta mediados de enero, que no son realmente tantas sesiones, me parece que 5 o 6 como mucho, ¿no? Pero bueno, están ahí especificadas y los temas que se irán tratando. Bueno, como en cualquier caso de esta asignatura yo ya he hecho grabaciones. En años anteriores, bueno, pues hay años en que porque el cuatrimestre es más largo, porque me parece que este año no cae ninguna fiesta en lunes, ¿no? Pero porque ha habido una semana de exámenes más tarde o el semestre ha durado un pelín más, pues bueno, puede ser que haya algún tema que no nos dé tiempo a ver este año y que sin embargo esté por ahí y lo podáis rescatar de grabaciones antiguas. Pero bueno, al menos vamos a hacer un resumen. Bueno, pues el recorrido cronológico tradicional por el político inferior medio superior y por el arte y este tema un poco del proceso de evolución humana, que insisto, corresponde a los temas 3 y 4 de la unidad didáctica, ¿no? 3 y 4 del manual. Lógicamente, y el manual así lo señala, bueno, pues cuando hablamos de la paleoantropología de la península ibérica, lógicamente tenemos que partir de una advertencia preliminar, en cierta medida metodológica, que es importante señalar, ¿no? En África y en el sur de Europa y las fechas de los fósiles más antiguos de la península ibérica, ¿no? Entre hace 6 millones y 2 millones y medio de años tendríamos los más antiguos homínidos, sobre todo en el África austral y el África oriental. Entre 2 millones y medio, 1 millón y medio de años antes del presente tendríamos los primeros restos. De homo habilis y solo a partir de 1 millón 700 mil años tendríamos, sobre todo en el Cáucaso, en el sur de Europa, las primeras manifestaciones de restos de homo erectus y homo ergaster, que como sabéis son los responsables de la expansión de la humanidad, digamos, de eso que ahora parece que el término está un poco más... Hacen desuso, se prefiere hablar de evolución humana en vez de proceso de hominización, pero bueno, eso que tradicionalmente llamamos la odisea de la especie, ¿no? Por utilizar el título también de esta documental, que bueno, recomiendo ver, está por ahí en el repositorio de Televisión Española y yo creo que también en YouTube troceado, ¿no? Que bueno, pues que teatraliza un poco la odisea de la expansión del proceso... De hominización. Ya sabéis que los restos fósiles más antiguos de la península ibérica no se retrotraen más allá de 1 millón 300 mil, 200 mil años antes del presente y que corresponden sobre todo a los restos del homo antecesor y que bueno, pues eso genera ese vacío de información respecto de erectus, ergaster... Habilis o los antiguos homínidos para la península ibérica, ¿no? Hay un claro desfase cronológico entre Eurasia, por así llamarlo, y África y también entre la península ibérica, África y el resto de Europa, ¿no? Es bastante probable que eso obedezca condiciones, digamos, estratigráficas. Ya sabéis que, bueno, pues la antigüedad de los fósiles de Atapuerca, por ejemplo, tiene mucho que ver con los casi 18 metros o 18, de hecho, de potencia estratigráfica que tiene la trinchera del ferrocarril y que permite contactar con depósitos de sedimento arqueológico bastante antiguos que no se han atestiguado en otras zonas donde no se ha podido profundizar en zonas sedimentarias. Tanto, pero también es probable, y así lo plantean los autores del manual, que la propia configuración de la península ibérica, bueno, pues haya contribuido a esa tardía presencia o atestiguación, mejor dicho, del género homo en nuestro territorio, ¿no? Primero, porque la península ibérica es una península... Segundo, porque estuvo aislada por los Pirineos y por el estrecho de Europa y de África y porque precisamente esas dos circunstancias, y lo veremos en algunos episodios concretos de la prehistoria, pienso, por ejemplo, en el solutrense, bueno, pues convirtieron, o también en los últimos neandertales, ¿no?, a finales del musteriense o en la transición... a los episodios transicionales hacia el paralítico superior, convirtieron la península ibérica en una especie de refugio ecológico, bueno, pues donde se desarrollaron, bueno, pues algunos tipos concretos del género homo con peculiaridades locales, bueno, pues que hemos conocido a partir de los últimos hallazgos. ¿No? Contra ese aislamiento y los problemas que plantea, bueno, pues ese decalage que decíamos antes entre los fósiles de África y de Eurasia y los fósiles de la península ibérica, sí que es verdad que los hallazgos que se han producido en la península ibérica en los últimos años, bueno, pues han colocado la prehistoria peninsular a pesar de tener... a pesar de tener muy pocos restos, se ha calculado y el manual da el dato que no son más de 250 individuos para un periodo, el comprendido entre el hombre anatómicamente moderno y el antecesor de un millón y pico de años, o sea que nuestro conocimiento está muy limitado, pero sin embargo, parte de los datos que desde el punto de vista, bueno, pues... de las formas de vida, ¿no?, de la paleotecnografía han proporcionado los fósiles, bueno, pues ha cambiado bastante nuestra imagen sobre los primeros individuos de Europa y también sobre esas variantes, digamos, europeas del Homo erectus, ¿no?, del Homo heidelbergensis, del antecesor, del Homo... del Homo... SP, incluso... de los neandertales, también, como veremos de Neandertal, ¿no?, pensar que, por ejemplo, pues los hallazgos que lo tenéis... sistematizado más adelante, ¿no?, de Miguelón, por ejemplo, el cráneo cinco de Atapuerca, o de la pelvis, ¿no?, de Atapuerca, también, o el hallazgo de... o la reconstrucción de la cadena de ADN de los individuos de la cueva del Sidrón, de los neandertales de cooperationismo. o del niño de la Garbello en Leiría, en Portugal, han permitido reivindicar todos estos aspectos muy novedosos de la herencia del Neandertal en el Homo sapiens y de nuestra conexión con esa otra humanidad y eso es consecuencia de estudios vinculados a fósiles atestiguados en la península ibérica. También toda esa idea de que antecesor y heidelbergensis fueron fundamentalmente individuos herbívoros, en competencia también con otros carnívoros en la caza, se debe al estudio de los aparatos dentarios de fósiles humanos. Con lo cual, aunque tengamos pocos individuos, digamos que la rentabilidad que se le ha sacado a esa información, bueno, pues realmente ha sido extraordinaria y lo cierto es que el proceso de evolución humana se ha reescrito en cierta medida gracias a los hallazgos fósiles que se han producido en la península ibérica. No solo en Atapuerca, que quizás ha sido el yacimiento más mediático, también en la zona del sureste, o el ámbito de Cueva Victoria o de los otros yacimientos, más allá del paleolítico medio de los llamados neandertales murcianos. Bien dicho eso, desde el punto de vista de la introducción metodológica, bueno, pues vamos a ir haciendo el recorrido por los distintos fósiles, siempre relacionándolos contigo. Con tipos concretos de industrias, en este caso los más antiguos con industrias del modo 1, que nos retrotraen al pleistoceno inferior, culturalmente a eso que llamamos el oldubayense y a una cronología, por tanto, en la periodización cronológica clásica de la prehistoria, del paleolítico. Bueno, pertenecen al pleistoceno inferior y están asociados a industrias de modo 1, desde luego a algunos de los hallazgos de la sierra de Atapuerca, que han permitido la mejor caracterización del tipo humano que llamamos homo antecesor. Pero también los hallazgos de Granada, de la depresión de Guadix-Baza, aunque es verdad que algunos de los cráneos o de los fósiles como el cráneo de Orze, bueno, pues están todavía en discusión, bueno, pues que se cuentan entre los fósiles más antiguos que tenemos en la península ibérica, en concreto los más importantes, como decía, el cráneo de Orze procedente de Bentamicena en Guadix-Baza y de Cueva Victoria dos fragmentos de húmero y una segunda falange de dedo que en realidad, bueno, pues no son muy representativas pero se trata de los fósiles que tenemos para esa fecha. De la cima del elefante de la sierra de Atapuerca. En un espacio ya un poco de transición entre el Pleistoceno inferior y el Pleistoceno medio, de hecho encima del elefante han aparecido también fósiles de Homo sapiens frente a Gran Dolina donde fundamentalmente tenemos antecesor y la cima de los huesos donde tenemos Heidelbergensis. Fijaros que no hay nada en Atapuerca. Ni de Habilis, ni de Ergaster, ni por supuesto de fósiles tipo Lucy o australopithecus, ¿no? Esto ha quedado claro ya en el decalage un poco cronológico. Bueno, pues de la cima del elefante en la sierra de Atapuerca con una estratigrafía pues de casi en algunos puntos de la cima del elefante de hasta 25 metros de profundidad en el corazón de Atapuerca. De esa trinchera del ferrocarril, bueno, pues ha aparecido la mandíbula que tenéis en pantalla en el año 2007 y una falange de dedo meñique en el año 2008 y 2009, ¿no?, que inicialmente se identificaron como variantes del llamado Homo antecesor pero que, bueno, pues en los últimos años, sobre todo por la gracilidad de la tradición, se han convertido en la tradición de la mandíbula. Si se compara con algunos ejemplos africanos, digamos, de la misma época, ¿no?, bueno, pues probablemente podría dar pie a pensar que estamos ante el Homo SP, ¿no?, una especie transicional, una especie de eslabón perdido, ¿no?, a medio camino entre el antecesor y el género heidelbergensis y que, por tanto, como le llamamos Homo SP, pues tendría que ser una especie diferente dentro del género homono porque, bueno, pues así lo define el apellido, digamos, que ponemos detrás del género homo. En cualquier caso, para la sierra de Atapuerca las condiciones, aunque yo he recopilado aquí algún encarte. De las múltiples publicaciones que en medios de comunicación de carácter general, bueno, pues salen sobre Atapuerca. Bueno, pues he puesto algunos encartes por ahí del país, habéis visto alguno antes, pero hay un encarte entre las páginas 133 y siguientes de la unidad didáctica donde sistematiza muy bien cada uno de los espacios y de los yacimientos. De Atapuerca yo no entro en detalle, enumero los fósiles y la información que nos dan y luego ahí podéis buscar un poco más información, ¿no? Otro yacimiento, en este caso ya más orientado hacia el Pleistoceno Medio, también en la sierra de Atapuerca, sería Grandolina, también afectado por la trinchera. Del ferrocarril, ¿no?, que, bueno, pues es la Grandolina, que, bueno, pues tiene 18 metros de potencia y ahí sí que cuantitativamente el número de fósiles es mayor, ¿no? Hasta 90 fósiles humanos que incluyen dinero. De potencia quiere decir que la excavación tiene esa profundidad. Es decir, que como Atapuerca se descubre, lo explica precisamente esas páginas del manual, ¿no? Cuando se hace una trinchera en la sierra para hacer pasar el ferrocarril, ¿no? Y entonces esa trinchera se hace con toda esa profundidad que es la que permite contactar con niveles tan antiguos como, pues te puede quedar, de que el depósito estratigráfico siempre es lo más antiguo al fondo, ¿no? Entonces esa es la razón. La potencia me refiero a eso. Estamos a la profundidad de la excavación de la que proceden los fósiles, ¿vale? Entonces de Grandolina con 18 metros de potencia proceden, como decía, 90 fósiles con varios fragmentos de mandíbula y que están asociadas a fósiles, en este caso inequívocamente de Homo antecessor. Y, bueno, pues... Y, bueno, pues, fundamentalmente a industrias, como decía hace un momento, de modo uno, ¿no? Que, bueno, pues son las propias de este periodo del Pleistoceno inferior y la transición hacia el Pleistoceno medio. Si avanzamos desde el punto de vista tecnológico a las industrias de modo dos, no detallo la diferencia entre modos. Modo uno y modo dos, básicamente modo uno, que es lo que identificamos con el olduvayense, son choppers y chopping tools y los llamados triedros y demás, es decir, industrias fundamentalmente sobre nódulo. Modo dos ya implica industrias sobre núcleo y, sobre todo, la presencia de bifaces, ¿no? Que es un poco el cambio ya hacia lo que llamaríamos la industria del paleolítico inferior o del olduvayense, y no de eso que se llama olduvayense o en algunos ámbitos, por ejemplo, el peninsular más adecuadamente paleolítico inferior arcaico, aunque es verdad que el término olduvayense que durante algún tiempo, digamos, que se desterró un poco porque, bueno, pues parece que los olduvayenses de Old Dubai, ¿no?, bueno, pues se utiliza como veis en el manual ahora parece sin ningún tipo de problema. Vale. Bueno, las industrias que tenemos, los fósiles que tenemos asociados a las industrias de modo dos, bueno, pues se concentran en varios enclaves, uno de los más importantes sin duda la cima de los huesos, ¿no? Tiene una cronología que, bueno, pues permite pensar en qué a lo mejor fue, como os plantea el manual. El homo antecesor, el difusor en la península ibérica de esa industria lítica que incorpora los bifaces, ¿no?, y que lo convertiría, de ahí el nombre de antecesor, pues una especie en una especie de antecedente del neandertal, aunque con algunos particularismos locales, ¿no? Bueno, pues resultado de la adaptación de los encubiertos. Los inmigrantes supuestamente africanos hacia Europa y que se adaptan a las condiciones locales, ¿no? Todo esto también para explicar el gap de nuevo que hay entre industrias de modo dos que en África tenemos desde hace un millón ochocientos mil años o en el Próximo Oriente desde hace un millón trescientos mil a un millón de años en el caso de estos yacimientos que vamos a enumerar ahora de modo dos de pleistoceno medio con fósiles en la península ibérica, ¿no? El primero, la cima de los huesos. Quizá el depósito de fósiles mayor de los que tenemos en la Sierra de Atapuerca y en la península ibérica, con un total de seis mil quinientos fósiles humanos esparcidos, además, sobre arcillas y peces. Por debajo de restos de oso cavernario, con una acumulación de hasta veintiocho individuos, ¿no? Que son un poco los que posan ahí en ese dibujo de Mauricio Antón, que es uno de los ilustradores de Atapuerca en la llamada familia, ¿no?, de Atapuerca y que supone con fósiles muy representativos como el Cráneo 5 de Miguelón o el Cráneo 6 de Puebla, ¿no? O el Cráneo 4 de Agamenón, o la Elvis Pelvis, ¿no?, que veis en estas imágenes. Casi, da el dato el manual, el ochenta por ciento del registro fósil del género Homo en Europa y, bueno, pues que supone también una de las mayores concentraciones si comparamos todos los datos cuantitativos que vamos dando de fósiles para los otros yacimientos de la península ibérica. Lo cual vuelve a ser muy importante. La cuestión que decíamos al principio, ¿no? Como a veces tenemos destellos o flashes de mucha representatividad de un conjunto de fósiles o de individuos que conviven con, bueno, pues ausencias muy dilatadas en el tiempo y cubiertas además por una falange o por un fragmento de cráneo también en discusión. Ya sabéis que, además, la cima de los huesos, ahí la tenéis, en un cuadro. Es uno de estos encartes que son bastante útiles, ¿no? Este no sé si es del país, del mundo o del pediario, pero que, bueno, me parece que está, no, de ninguno de ellos, de la Fundación Atapuerca. Que está bastante bien. Bueno, pues de la cima de los huesos procede también, bueno, el Excalibur que tenéis aquí en el centro, ese bifaz de aspecto lanceolado, acorazonado, en tonos también rojizos, aunque, bueno, ahí en la imagen. Bueno. No se aprecie bien que, como es el único elemento no, bueno, pues humano depositado en la cima, bueno, pues tradicionalmente se ha pensado que pudiera ser un fósil, perdón, una ofrenda de carácter votivo y quizá una primera manifestación de una cierta trascendencia o culto. A los muertos, ¿no?, en la prehistoria peninsular. Tal concentración de fósiles en la cima de los huesos ha permitido caracterizar muy bien al antecesor sus formas de vida y sus rasgos también desde el punto de vista físico o propiamente biológico. .