¿Se escucha bien? Vale, perfecto. Pues ya está esto grabando. Si no recuerdo mal, porque he entrado antes a la clase y he dejado precisamente esta diapositiva para recordarme que íbamos por aquí, por este modelo, precisamente, de procesamiento semántico. Estábamos en mitad del capítulo 7 sobre procesamiento semántico. Así que comenzamos desde aquí. Recordad que ya están subidas las clases de la semana pasada, las clases, porque ya sabéis que hubo dos. Una miércoles, otra viernes, que recuperábamos una anterior. Ay, se me ha olvidado compartir pantalla y subir, perdón, no subir, sino compartir también la presentación. Deja un poco abierto, porque hace bastante calor. Y si no, nos va a dar algo aquí. Y ahora sí que... Hola, buenas tardes. Y, a ver, me imagino que ya veis bien la pantalla. Esto es... Ay, que he puesto el capítulo 8, perdón. Es el capítulo 7 todavía. Estábamos aquí. Vamos a empezar por aquí. Bueno, voy a recuperar un poquito, haciendo un poco de puente con la clase anterior. Y vamos a empezar por el capítulo 8, que es el capítulo 8 del anterior modelo que habíamos visto. Estábamos viendo modelos de procesamiento semántico en la primera parte del capítulo, o por lo menos la primera parte referida a los modelos de procesamiento semántico. Ya sabéis que hablábamos de que el procesamiento semántico, el acceso al significado, parece un proceso diferente al proceso de acceso al léxico que vimos en el capítulo anterior. Hay diferentes evidencias respecto a ello, tanto experimentales como desde el punto de vista de los datos neuropsicológicos, de pacientes neuropsicológicos. Y para intentar... para intentar comprender la manera en que se realiza este proceso dentro de nuestro sistema, cómo los humanos realizamos este proceso. También recordar que en psicología del lenguaje lo que nos interesa es la actuación de las personas. Cómo realmente las personas realizan este proceso, cuáles son los procesos, valga la redundancia, cognitivos que hay detrás de todo esto y cómo es nuestra verdadera actuación dentro del acceso semántico, al acceso al significado. Pues hablábamos de diferentes modelos. Estos modelos no se preocupan tanto por cómo se refleja o cómo implementamos esos modelos dentro de un sistema cognitivo como el nuestro, tampoco se basan demasiado en los datos neuropsicológicos, es decir, sobre todo lesiones y imagen cerebral, sino que se basan más en los resultados experimentales y tienen una inspiración más computacional, ya sea desde el punto de vista de la computación clásica o desde el punto de vista del conexión. El primero que vimos fue esta teoría de redes, un modelo jerárquico, una teoría de redes jerárquicas que venía a decir que cada uno de los conceptos, ya sabéis que cuando hablamos de conceptos realmente nos referimos al significado de las palabras, ese referente al que llevan cuando hablamos de la palabra. Buenas tardes. Bueno, pues estaban organizados en estructuras jerárquicas. Jerárquicas quiere decir que los conceptos más concretos o que abstraen menos están en los niveles inferiores y se conectan con niveles superiores que organizan o reúnen o resumen cada uno de los conceptos que tienen debajo. Por ejemplo, un AVE es un resumen más abstracto de diferentes conceptos o diferentes palabras. Canario, avestruz, etcétera, etcétera. Bueno, en este modelo cada nivel solo tiene almacenadas las características que son propias de ese nivel. ¿Por qué? Por una cuestión de ahorro cognitivo. ¿Para qué vas a poner dentro de un canario que vuela cuando todas las aves vuelan? Bueno, realmente no todas las aves vuelan. Algunas lo intentan pero no pueden y otras ni siquiera lo intentan como los cimunos. Mal ejemplo. Pero, por ejemplo, que tenga plumas. Creo que sí, ¿no? Todas tienen que tener plumas, es rasgo definitorio. Bueno, pues ¿para qué lo vas a poner en canario? Porque ya estás completamente en AVE y ya tienes todos los conceptos subsumidos dentro del concepto de AVE con ese rasgo. Así no tienes que, siempre hablando desde el punto de vista de lo que sería una organización cognitiva, representar ese rasgo en todos y cada uno de los conceptos, lo cual ahorra bastante. Pruebas a favor. El hecho de que cuando tenemos que verificar frases, como por ejemplo un canario es un canario, un canario es un AVE o un canario es un animal, nos damos cuenta de que se tarda más cuando hacemos tareas experimentales de ese tipo en verificar la verdad de esa frase o su falsedad cuanto más lejos están los nodos entre sí. Por ejemplo, indicar que la frase un canario es un canario es verdadera tarda mucho menos tiempo. Ya sabéis, medido en milisegundos el tiempo de respuesta respecto a un canario es un AVE y respecto a un canario es un animal. ¿Por qué? Bueno, pues según este modelo o este modelo interpreta esos datos apelando a que están en diferentes niveles jerárquicos. Como tienen que activar. Cada uno de los niveles, cuanto más lejos esté el segundo término respecto del primero en cada uno en relación a sus niveles. Es decir, cuanto más lejos estén, cuanto más separados por más niveles jerárquicos, más se tarda problema de todo esto. Bueno, pues que esto queda muy bien cuando yo digo así los datos, pero realmente no todos los datos se ajustan a esto. ¿Vale? Cuando yo digo un pino es una flor o un pino es una iglesia, ¿dónde tardáis más o qué os cuesta más procesar? Seguramente un pino es una flor, ¿verdad? Porque tienen más cuestiones en común. Pero en cuanto a nivel, en cuanto a separación respecto a jerarquías, vendría a ser lo mismo. Tenéis varios ejemplos en el libro. La cuestión es que hay muchas situaciones en las que no se da ese resultado que corrobora este modelo. Este modelo tiene una predicción clara. Cuanto más lejos esté el concepto, el segundo de los conceptos, más se tarda. Y en muchas ocasiones eso no ocurre así, sino que ocurre todo lo contrario. ¿Qué empieza a pensar uno? Bueno, a lo mejor nuestros conceptos no están organizados de esta manera jerárquica. A lo mejor esto es demasiado artificial. A lo mejor nuestros conceptos y los relacionados se unen de una manera menos estructurada y más por la relación que tienen o por los rasgos o las características que comparten. Bueno, pues ese es el modelo que tenéis aquí. Una teoría de redes, pero que ya no es jerárquica. ¿Vale? Aquí tenemos una teoría de redes muy parecida a las redes conexionistas que hemos visto antes. De hecho, esta teoría surge para intentar explicar algunos de los efectos que no era capaz de explicar la teoría anterior. Si eliminamos la jerarquía y lo que postulamos es que los conceptos se estructuran por las características que comparten en común, entonces nos encontramos con mucha mayor flexibilidad y una mayor capacidad explicativa a la hora de explicar esos resultados. Por ejemplo, el concepto manzana está muy cerca de rojo. O el concepto cereza. Pero también lo están otras categorías, como por ejemplo otros colores. También lo pueden estar ciertos animales o otro tipo de conceptos. La tarea de verificación de frases, o mejor dicho, el tiempo que tardamos en responder en la tarea de verificación de frases, será una función de la distancia que se pare a cada uno de los modos. Si un concepto está muy cerca de otro, se tardará poco. Si un concepto está muy lejos de otro, se tardará mucho. Y eso es independiente de la categoría o del concepto. Por ejemplo, hay veces que un ejemplar de animal, por ejemplo, yo que sé, un animal que sea muy poco típico, el ornitorrinco, pues a lo mejor el ornitorrinco está más lejos del concepto animal que del concepto pico. Y cuando tú hablas de pico, resulta que tardas muchísimo menos. O al revés, pongamos un rasgo de animal que sea... ¿Es mamífero? No. Es mamífero, ¿no? ¿Es mamífero, no? ¿Es? ¿Sí? Joder, estoy yo... Es mamífero, ¿no? Vale, estoy yo bien. Como tiene pico, ¿no? No, es que estoy pensando precisamente en los rasgos característicos para poner un ejemplo sobre ello. Pues si es un mamífero pero tiene pico, quizás seguramente el ornitorrinco esté más cerca del concepto pico, que está más cerca de ave, que del concepto mamífero, que no suelen tener pico. O sea que, ¿veis cómo puede responderse más rápidamente el ornitorrinco? Es un ave. Y tarda más tiempo en negar esa oración porque está más cerca del concepto ave que del concepto mamífero. Esto ocurre con otros animales como, por ejemplo, los pingüinos o las ballenas, que están más lejos de su categoría de referencia en cuanto a las características que de otras categorías o de otros conceptos. Básicamente lo que elimina esto es ese concepto de jerarquía cerrada que está relacionada con una especie de abstracción de su propia categoría. Porque muchas veces los humanos ya sabéis que no funcionamos con este tipo de categorías. A veces incluso las propias categorías, lo comenté en la anterior teoría, se generan ad hoc para un propósito determinado y generan conceptos o relaciones entre conceptos que solo sirven para un propósito concreto, para una tarea determinada en una situación concreta. Por ejemplo, si te vas a comprar un coche, pues a lo mejor generas categorías sobre coches o sobre vehículos que tienen que ver no tanto con sus características como con su precio o con su color o con si son más altos o más bajos. Por ejemplo, o con otro tipo de vehículos que también estás pensando en comprar y a lo mejor esas categorías luego desaparecen, solo sirven para eso. ¿Cuál es el problema de este tipo de modelos? Pues precisamente su flexibilidad. Porque recordad que cuando tenemos un modelo científico, lo principal que tiene que hacer un modelo científico es dar predicciones concretas sobre qué espera para poder falsar ese modelo. Este modelo nos tiene que decir, como la anterior, qué espera cuando nosotros presentamos... Tenemos una tarea. Tenemos una tarea de verificación de frases de ese tipo. El modelo anterior nos decía claramente, si encontramos este resultado, mayor tiempo en función de la distancia jerárquica, entonces esto apoya al modelo. Si no lo encontramos, esto no apoya al modelo. ¿Vale? Pero ¿cuál es la predicción de este modelo? Bueno, pues puede ser que cuanto más características compartan, menor será el tiempo de verificación en frases verdaderas, por ejemplo. Pero ¿cómo decirlo? ¿Cómo definimos esas características? Porque ahí ya empieza a haber más flexibilidad. El problema de todo esto es que tú propones que cuanto más características comunes haya, menos tiempo en la tarea de verificación de frases. pero luego a posteriori hay mucha capacidad para modificar ese significado de característica compartida o incluso para proponer características que son más importantes que otras o que se han adquirido antes para ajustarlo al modelo. Eso aunque parezca algo bueno para el modelo no es algo bueno para el modelo porque una cosa que explica todo y que lo puede explicar a posteriori no es bueno. Las cosas se tienen que proponer a priori y dar predicciones claras. No vale que tú propongas un modelo, aparezcan unos resultados y luego tú ya intentas ajustar el modelo para que explique lo que acabas de ver. Esa es precisamente una de sus dificultades, el hecho de ser capaz de someterse a pruebas concretas que falsen, perdón, no verifiquen la utilidad del modelo o las predicciones que realiza el modelo. Bueno, vamos con el siguiente. Vamos con otra teoría, la teoría de rasgos. De nuevo, es una teoría de una inspiración computacional, más que inspirada en cómo funciona o basada en los datos sobre cómo se organiza nuestro cerebro o qué ocurre si dañas ciertas zonas de nuestro cerebro. Bueno, se llama en realidad el modelo de rasgos probabilísticos de Smith y Medin de 1981. La cuestión clave, y por eso se llama un modelo de rasgos, es pensar que todos los conceptos... ...que tenemos en nuestro cerebro están compuestos por un conjunto de rasgos o de características que no se pueden dividir entre sí, como por ejemplo lo que hemos visto hasta ahora. ¿Vale? Los pingüinos. ¿Por qué están compuestos? Pues por una serie de rasgos. Tiene pico, tiene plumas, no vuela, etcétera, etcétera, etcétera. Como veréis, una de las limitaciones de este modelo, ya lo voy adelantando, es que se pueden descomponer todos los conceptos en rasgos elementales que no puedan... ...descomponerse en nada más. Por ejemplo, el concepto de juego, esto lo decía Wittgenstein en su momento. ¿Qué es lo que tienen en común todos los juegos? Es difícil, ¿verdad? ¿Cuáles son los rasgos diferenciales de cada uno? Tenemos juegos de mesa, tenemos juegos que juegan los niños al aire libre, juegos que se inventan sobre la marcha y cuyas reglas se van generando. Se nos puede ocurrir algo, ¿no? Se nos puede ocurrir cuestiones como la suspensión de la realidad, el no generar situaciones de peligro o cosas así, pero serían demasiadas. ...y sería difícil saber si abarcan a todos. Eso será uno de los problemas, ahora veremos alguno más de este modelo. Pero básicamente lo que propone esta teoría es ese conjunto de primitivos semánticos. Cada concepto tiene una serie de rasgos que los definen. Una lista de rasgos semánticos que definen todo esto. Bueno, esos rasgos se dividen en dos tipos. Los rasgos definitorios y los rasgos característicos. Los rasgos definitorios son aquellos que son obligatorios en una categoría. Por ejemplo, la categoría de ave, para que un ejemplar pertenezca a la categoría de ave, tiene que tener estas características. Ponen huevos, plumas, etc. Otros son rasgos que se denominan característicos. Suelen estar, pero no tienen por qué estar para pertenecer a esa categoría. Por ejemplo, vuelan, viven en nidos, cantan. Muchos de los pájaros que podéis pensar, por ejemplo, el pingüino, pues no vuela. La gallina lo intentan un poco, pero bueno, ahí van, como pueden. Están con estilo, ¿no? Como que es la hija, además. ¿Viven en nidos? Pues ahora mismo no se me ocurre ningún ejemplo. Considero un pájaro que no viva en nidos que tenga apartamentos. No lo sé, no se me ocurre ninguno. Cantan, pues igual. No sé si gritar contará como cantar, pero bueno, ya sabéis a lo que me refiero. Bueno, son rasgos característicos que no tienen por qué estar para pertenecer a la categoría, pero que suelen estar asociados a esas categorías. ¿Esto qué quiere decir? Pues que cada ejemplar tendrá una serie de rasgos. Unos compartirán más rasgos con su categoría, dentro de la categoría a la que se refieren. Otros compartirán menos rasgos. Unos compartirán menos rasgos. Unos compartirán rasgos definitorios y rasgos característicos. Otros solos compartirán rasgos definitorios, pero no los característicos. Pero al revés también puede ocurrir. Conceptos que compartan rasgos característicos, pero no los definitorios. ¿Y eso qué quiere decir? Que pertenecen a categorías diferentes. Según este modelo, eso implica que cuando nosotros hacemos un análisis como el que hacemos en la tarea de verificación de oraciones, realizamos un proceso que tiene dos fases diferentes. Una fase 1, en la que habría una comparación... Una fase 1, en la que habría una comparación global de los conceptos. El pingüino es un ave. ¿Qué ocurre según este modelo en esta fase? A mí me gusta mucho porque la explicación es un modelo muy verbal, como la mayoría de modelos en psicología. Cuando hablamos de modelos verbales tenemos un problema porque cuando describimos un modelo de manera verbal, nuestro lenguaje tiene muchas ambigüedades. No es como las matemáticas, que significan algo. Entonces, cuando tú describes un modelo de manera verbal, siempre te da la sensación de que... ...deja muchas cosas ambiguas o deja muchas cosas sin explicar cómo son esos procesos. Pero bueno, vamos a explicarlo tal y como es. En esa primera fase, lo que se haría es comparar todos los rasgos de cada concepto de manera global. Es decir, es como si comparasen las plantillas así un poco por encima y echas un ojo a ver si la cosa casa o no casa. Si casa muy bien, perfecto, sí, es de esta categoría. El pingüino es un ave. ¿Vale? Si casa muy bien. Si casa muy mal, es decir, si comparten muy bien... ...un poco rasgos, pero así visto un poco de aquella manera, ¿vale? Sería como si hiciésemos un repaso muy rápido. Nuestro cerebro hiciese una comparación muy rápida de plantillas. Como si fuesen tarjetas perforadas y te las pones una encima de otra y yo si coinciden o no, o cuánto coinciden. Si coinciden mucho, perfecto, respuesta rápida, sí. Si coinciden muy, muy poco, perfecto, respuesta muy rápida, no, respuesta falsa. ¿Pero qué ocurre cuando te encuentras con conceptos que comparten algunas características pero otras no? Pues entonces es cuando pasas al estadio número 2. En el estadio número 2 compararías solamente los rasgos definitorios, es decir, si el pingüino tiene los rasgos definitorios de ave, los que son obligatorios. Si el resultado es positivo, entonces darías una respuesta verdadera. ¿Veis de dónde salen, sin explicar nada más, las explicaciones para los resultados en la tarea? ¿Veis la tarea de verificación de frases que se han utilizado para dar lugar a este tipo de modelos? Si hay ejemplares que no son muy representativos o que no comparten muchas características por la categoría a la que supuestamente pertenecen o no pertenecen, necesitaríamos un procedimiento analítico, una segunda fase, un segundo estadio de procesamiento que da lugar a un mayor tiempo en la tarea de verificación de frases. Sin embargo, cuando los elementos son muy diferentes entre sí, daríamos respuestas rápidas porque podríamos... Podríamos decir que es falso muy rápido y si comparten muchos entre sí, también daríamos respuestas rápidas porque podríamos decir muy rápidamente que pertenecen. De hecho, esto también predice otro resultado que se puso a la edad y es que cuanto más rasgos se compartan en frases que son verdaderas, menos tiempo se tarda. Pero cuanto más rasgos se compartan en frases, en la tarea de verificación de frases, en los que compartan muchos rasgos, más tiempo se tarda. Los que son falsos pero comparten muchas características... Por ejemplo, si hablamos de aves, el murciélago. ¿El murciélago es un ave? Tardas más tiempo en decir que no porque comparten muchos de los rasgos característicos de las aves. Tiene alas, vuela, no sé qué tolga de los árboles, pero eso no se hizo cuenta alguno, pero eso se hizo cuenta como nido. Pero comparten muchos rasgos característicos, pero necesitas hacer un análisis más profundo y hacer rasgos definitorios. Pone huevos, ya está, se acabó. Pero ese estadio lleva más tiempo. Limitaciones. Ya hemos visto algunos. Es difícil que pensemos en que los conceptos en nuestra mente, en nuestro cerebro, están organizados en una serie de rasgos porque muchos de esos conceptos serían difíciles de definir en función de rasgos que ya no sean a su vez divisibles en otros rasgos o que engloben a todo el concepto. Por ejemplo, como hemos visto antes con el juego. Además, esto también propone una cosa y es que las categorías están muy bien definidas. La categoría animal está perfecta. Está perfectamente definida. La categoría ave está perfectamente definida. El resto de categorías están perfectamente definidas. Por supuesto, esto no lo he dicho al principio, pero estamos dando por hecho, y lo hemos dado por hecho a lo largo del capítulo, que cuando nosotros hablamos del léxico y cuando hablamos de acceso al significado, estamos dando por hecho que nuestros conceptos están organizados en ciertas categorías. Están organizados según los elementos que comparten o en función de las categorías a las que ponemos. Bueno, tenemos diferentes problemas con esos conceptos difusos porque, por ejemplo, y esto no quiere decir que tenga que ver con su definición específica, ¿vale? Diferenciar entre lo que es la definición de un concepto, la definición formal, que no tiene nada que ver con cómo nosotros lo organizamos, es una cuestión de un diccionario, y cómo está organizado nuestro cerebro. Un tomate es una fruta o una verdura. Desde un punto de vista formal está claro, ¿no? Es una fruta. No sé si se podrá considerar verdura porque tampoco sé la definición exacta de verdura. Si incluye también las frutas de este tipo o incluye solamente otras partes de la planta. Pero está claro que nuestra definición sería una fruta. Pero cuando tú piensas en ella y en función de cómo está organizado tu significado, tu diccionario semántico del cerebro, seguramente esté mucho más cerca del concepto verdura. ¿Verdura? Es más asociado a otros conceptos como lechuga o otras verduras que más cerca de lo que conocemos normalmente como frutas. Naranjas, plátanos, mandarinas, manzanas, etc. Bueno, esa organización difusa en nuestro cerebro es la que dificulta que este modelo pueda explicar algunas situaciones. Porque realmente en nuestro cerebro los conceptos están organizados de esa manera difusa y no tienen límites. Hay conceptos que están bailando entre cada una de las categorías y se parecerían más a nubes que se solapan o a círculos que se solapan que a barreras específicas o a cajones separados. Así que eso da lugar a predicciones que no se cumplen en este modelo. Y eso da lugar a otro tipo de teorías. Esta es muy famosa, seguro que conocéis a Eleanor Roach. Si no la conocéis no la presento. Esta es Eleanor Roach. Que propuso una teoría de cómo está organizado nuestro diccionario o nuestro léxico mental y cómo están organizados sobre todo los significados de ese léxico mental, los conceptos en nuestra mente, que se llama la teoría de prototipos. Y lo primero que pienso es en las dificultades del modelo que hemos visto antes. Es muy difícil aislar rasgos definitorios. No todos los conceptos tienen rasgos definitorios que sean comunes a todos los miembros. Lo que sí tienen... Son algo parecido a los rasgos característicos de los que hablamos antes. Son rasgos típicos, tienen rasgos típicos. Hay cosas que suelen estar presentes en todos los miembros de una categoría. ¿Qué dice Alan O'Rourke? Bueno, pues todos estos conceptos, todos estos elementos particulares de cada concepto se agrupan según su parecido, su semejanza familiar como de parecidos son entre ellos. No hay reglas lógicas detrás, sino que nosotros vamos metiendo los conceptos en nuestra mente según se vayan pareciendo más o menos entre ellos. Por eso seguramente el concepto de murciélago esté mucho más cerca de otras aves que de otros mamíferos. Por eso nos equivocamos más cuando tenemos que verificar frases con ese tipo de conceptos, porque comparten muchas más características. ¿Y cómo definimos una categoría? Bueno, pues no por sus rasgos y sus características, no por una regla lógica. O por una serie de elementos que aparecen en un cajón aislado de otros cajones, sino que lo que elevamos son prototipos. ¿Cuál es el prototipo de ave? Aquel que contiene todas las características que solemos asignar a una ave. Es una especie de ave ideal, ave abstracta, que no pertenecería a ninguna categoría específica de ave o al ejemplar concreto de un ave, sino que abstrae todas las características que son típicas. De ese concepto. Por tanto, todo el resto de conceptos o todos los ejemplares que tengan características comunes a ese prototipo se adscribirán a esa categoría. Pero también pueden estar adscritas a otras porque también tengan características comunes con ellos. De hecho, esa nube que se forma alrededor del prototipo, como lo tenéis aquí, veis el concepto de ave, como es una especie de nube, pero en el centro no está la palabra ave. ¿Os habéis fijado que he puesto la palabra ave separada? En el centro no está la palabra ave. El centro de ese concepto sería un prototipo ideal de ave, que seguramente ahora mismo os estéis imaginando y no como un ejemplar concreto. Seguramente no os estéis imaginando un gorrión o una lechuza. Una lechuza, seguramente vengan una serie de características a vuestra cabeza, picos, plumas, agarras, alas, moviendo, un montón de cosas que forman ese prototipo de ave. Bueno, pues alrededor de ese prototipo se juntan el resto de ejemplares. ¿Cuánto más cerca del centro? Es como si fuese un agujero negro, ¿vale? Como si fuese una estrella alrededor de la que orbitan los ejemplares reales. ¿Cuánto más cerca del agujero negro o de la estrella de la que orbitan? Pues cuantas más características compartan con ese concepto. Los ejemplares o los conceptos de pingüino, emú o avestruz están más lejos porque comparten menos características con ellos. Bueno, pues básicamente esta es la teoría de prototipos. ¿Veis que lo que hace es añadir un poco de flexibilidad a la que hemos visto antes sobre los rasgos? Pensando en un modelo derivado de la lógica o de cómo se organizaría un sistema artificial, que sigue unas reglas muy pautadas, sino en cómo funciona realmente nuestro sistema cognitivo, que tiene que recoger las regularidades de nuestro entorno y tiene que agruparlas de alguna manera para poder sobrevivir, pero seguramente... Según lo que nosotros entendemos como una lógica clásica o como una regla matemática o formal, sino a través de las interacciones con el entorno y de las posibilidades que tiene de actuar respecto a ello. ¿Cuál es el problema? Las limitaciones. Como todos los modelos ya sabéis que una vez que viene la explicación vienen las limitaciones. Pues de nuevo, el problema que teníamos antes, solo que ahora ha aplicado a los prototipos. ¿Cuál es el prototipo de verdad? El de dignidad ya lo vimos la semana pasada. ¿Cuál es el prototipo de verdad? ¿Cuáles son las características que son típicas del concepto de verdad? Pues seguramente cada uno piense en unas que sí coincidamos, pero en otras en las que no coincidamos. Hay otros conceptos abstractos a los que les pasa exactamente lo mismo. Es difícil saber exactamente. De hecho, ¿cuál es el prototipo de verdad? ¿Cuál sería nuestro prototipo? Si tuvieses que imaginar un prototipo de lo que sería la verdad, uno puede pensar en ejemplares concretos, ¿no? Pero ahora que he dicho ejemplares, ahora... ¿Cuál es la siguiente teoría? Bueno, de hecho no la tenemos aquí, pero os voy a hablar muy rápidamente sobre ello porque es básicamente un pequeño cambio respecto a esto. Pero uno puede pensar en ejemplos de verdad, ¿no? De situaciones en las que alguien ha dicho la verdad o ejemplos en las que la verdad ha salido a reducir. O en ejemplos en los que no se dice toda la verdad, pero no en un prototipo de verdad. Bueno, pues esto es una de las limitaciones. Y como os he dicho antes, además tiene otro problema. Esa prototipicidad no depende solo de categorías. No tiene que ver con categorías que sean estables en el tiempo, sino que a veces se generan categorías que contienen prototipos específicos para una tarea concreta. Antes os hablaba de comprar un coche. Si a uno quiere comprar un coche de un tipo, automáticamente la categoría coche o el prototipo de categoría coche deja de ser uno específico y pasa a ser otro que coincide con lo que tú quieres hacer, que es comprar un coche de un determinado tipo. ¿Vale? Entonces a lo mejor a ti te gustan los coches pequeños. Y que consuman poco. ¿Cuál sería el prototipo del coche pequeño? Pues te empezarías a imaginar unas características concretas y organizarías todos los coches en relación a eso. Si luego tienes otra tarea, como por ejemplo, yo qué sé, elegir un coche para hacer una apuesta sobre un coche de carreras o sobre una carrera concreta, pues a lo mejor organizas los coches de otra manera en función de su potencia, de su velocidad, del piloto que la conduzca, yo qué sé, cualquier cosa. Es un ejemplo burdo, pero os podéis hacer una idea de cómo generamos categorías ad hoc a la hora de necesitarlas para alguna acción. De hecho, es una de las cosas más útiles porque algo es prototípico o no de algo en función de las acciones que vayamos a realizar sobre ese algo. Bueno, para mejorar esto o para evitar algunas de esas limitaciones, sobre todo esa dificultad para generar prototipos, se propuso también una teoría basada en ejemplares. Básicamente la teoría es muy similar a esto. Pero lo que propone es que en el centro de los conceptos no hay un prototipo abstracto que reúne todas las características, sino ejemplares concretos que representan muy bien esa categoría. Cuando pensamos en aves, a lo mejor no pensamos en eso que os he dicho antes, ese ejemplo abstracto, sino que lo que nos está pasando por la cabeza son ejemplares concretos de aves que son muy prototípicos. Por ejemplo, el gorrión, por ejemplo, el jilguero, el canario o el águila, que son ejemplares muy prototípicos y que todos hemos visto. No sería necesario generar un prototipo, que a veces no es posible, sino que esos ejemplares actuarían como actuarían aquí los prototipos. Lo mismo ocurriría con los conceptos abstractos, como el de verdad. Lo que se nos pasan son instancias de lo que significa verdad, no una abstracción de lo que sería el concepto de verdad. Quizás sea un modelo que está más anclado a la realidad de nuestro pensamiento, el hecho de que necesitamos anclarnos de alguna manera a conceptos concretos para elevar eso. Por lo menos en los conceptos más abstractos. Dejamos de lado los modelos de inspiración cognitiva o de inspiración computacional y vamos a pasar a evaluar otra serie de modelos que tienen una inspiración puramente neurocognitiva. Modelos que se han inspirado en los datos que provienen de pacientes y neuroimagen. ¿Datos de pacientes? Lesiones cerebrales. ¿Qué pasa cuando se lesiona un área del cerebro? ¿Y qué pasa cuando yo observo el funcionamiento del cerebro? Que ya sabéis, en la FMRI, las típicas lucecitas que te ponen en todas las noticias del telediario que siempre van acompañadas de cerebros iluminándose. Incluso significa hacer algo, pero bueno. Cerebros iluminándose queda muy bien. Y neuronas. Muchas neuronas lanzando chispajes, así como si fuese... Como si fuesen corrientes, como si eso fuese lo relevante. Pero bueno, eso está muy de moda. Sabéis que ha habido estudios sobre esto y sabéis que las posibilidades de que te publiquen artículos en revistas científicas aumentan si pones imágenes de cerebros, con ese tipo de cosas. Si pones imágenes y mapas topográficos de la activación, con lucecitas rojas, verdes y tal, aumenta la probabilidad de que te puedan publicar artículos científicos. ¿Por qué? Pues porque somos humanos y al final cuando revisamos artículos y te ponen cosas así como muy guays, pues te dejas un poco llevar también por eso. ¿Qué le vamos a hacer? No es que se pueda hacer otra cosa. Seguimos siendo humanos en que intentemos ser objetivos. Bueno, de nuevo, ¿qué intentan explicar estos modelos? Intentan explicar los datos, sobre todo de deterioro semántico específico. Cuando hay lesiones en el cerebro, cuando hay lesiones cerebrales específicas que causan deterioro semántico o dificultad para, por ejemplo, nombrar ciertos animales o ciertos objetos o ciertas categorías, lo que nos encontramos es precisamente con deterioros semánticos específicos de categoría. Por ejemplo, te lesionas una parte, sobre todo lesiones temporales, ¿vale? Lesiones en el lóbulo temporal izquierdo o derecho. Vamos a poner el izquierdo. Anteriores. Bajitas, ¿vale? No en la parte superior del cerebro, sino en el lóbulo temporal, pero tirando incluso hacia la parte frontal, pero por la parte de abajo. ¿Vale? O lóbulo temporal temporocitital, si queréis, incluso un poquito más hacia atrás, pero siempre hacia abajo. Y lo que te encuentras es que cuando pones tareas de denominación, por ejemplo, las personas que sufren esa lesión tienen dificultades para nombrar los animales, pero sin embargo no para nombrar objetos artificiales. Les pones objetos, martillos, y te lo nombran perfectamente. Le pones una jirafa y son incapaces. Pero es que ocurre para muchas más cosas. De hecho, se han encontrado en muchas situaciones dificultades para categorías muy concretas, como por ejemplo instrumentos musicales, piedras preciosas y otras categorías muy concretas. Es verdad que cuando se han controlado un poco las cosas, porque estas palabras no solo difieren en su categoría, sino en otras características que ya hemos visto antes, por ejemplo su frecuencia léxica. Hay palabras que son más raras y palabras más frecuentes. ¿Por qué es esta deficiencia? ¿Porque da la casualidad de que los animales son menos frecuentes que los objetos? ¿O es porque la lesión afecta solo a la categoría de animales? Bueno, esto se ha investigado, por supuesto, y estos primeros estudios, que no estaban muy bien controlados, pues se han replicado estableciendo ciertos controles. Y es verdad que muchos de esos déficits específicos que aparecían desaparecen cuando la cosa se controla mejor. Y parece que los déficits son más amplios y no tan basados en categorías. Pero, aún así... sigue apareciendo, por lo menos algunos de esos déficits específicos de categoría. El de animales y objetos aparece constantemente. La diferenciación entre seres vivos y no vivos es algo que aparece constantemente. De personas que tienen un tipo de lesión y tienen un déficit específico, no son capaces de nombrar, de acceder al significado o de recuperar el nombre del significado de una categoría específica como los animales, como los objetos inanimados. Curiosamente, y esto lleva a preguntarse por qué ocurre esto entre las categorías de seres vivos y no vivos, cuando hablamos de no vivos hablamos de objetos, hay algunos elementos que parece que se agrupan o entran dentro de la categoría que no les corresponde. Por ejemplo, los instrumentos musicales suelen lesionarse o suele aparecer el déficit asociado a instrumentos musicales aparejado al de seres vivos. Cuando los instrumentos musicales son... Son objetos inertes, no vivos, pero sin embargo su déficit suele aparecer o su deterioro suele aparecer de manera conjunta. Sin embargo, las partes del cuerpo suelen estar deterioradas de manera conjunta con los objetos artificiales, aunque sean partes de un cuerpo vivo, lo cual lleva a plantearse cuál es la razón de estas disociaciones o de que vayan de manera conjunta y también cómo están, cómo está organizado en los conceptos nuestra red semántica. Nuestro cerebro tenemos que proponer alguna teoría que permita explicar todas estas cosas. Vamos a verlas y vamos a hablar de tres teorías diferentes, la teoría sensoriofuncional, la teoría del conocimiento específico de dominio y la teoría conexionista de Taylor y Moss. Y luego nos quedaremos con esta especie de teoría conexionista con esta red para hablar de dos posibilidades respecto a cómo se organizan los conceptos en nuestro... ...en nuestro... ...en nuestro sistema cognitivo. Bueno, pensad que en forma de red seguro que están organizados porque básicamente las neuronas son lo que forman así que es más probable que la cosa una vez instanciado dentro de nuestro cerebro tenga algo que ver con una red de unidades pequeñitas que trabajan de manera conjunta. Básicamente porque es lo único que conocemos que pueda tener alguna relación con nuestro funcionamiento en el cerebro. Vamos con las teorías... ...la teoría sensoriofuncional. Warrington y Sallis, seguramente estos nombres os suelen de atención. ...de la asignatura de Sallis. ...de la atención de otras asignaturas. Bueno... ...según esta teoría no tenemos una separación real en categorías semánticas, ¿vale? No es que haya categorías separadas, no es que los seres vivos se almacenen por un lado en un lado del cerebro y por otro lado se almacenen los objetos o los seres no vivos o los objetos no vivos en otro lado del cerebro. Según esta teoría, los conceptos están representados por los rasgos característicos que tienen y eso hace que se separen unos de otros porque, por ejemplo, los seres vivos, sus rasgos más característicos son rasgos perceptivos, los que diferencian un ser vivo de otro vivo. ¿Qué diferencia una vaca de un canario? Pues seguramente muchas cuestiones perceptivas que ya tengan que ver con el sonido o tengan que ver con el tamaño, o tengan que ver con la forma o con el color. Una vaca y un canario son fáciles de distinguir por su color y por su tamaño, por ejemplo. Pero todo eso son rasgos perceptivos y a través de, imaginemos que la estamos viendo o que lo estamos escuchando al canario y a la vaca, ¿a través de qué cortezas entra esa información? Cortezas. ¿Corteza visual, occipital? ¿Corteza auditiva primaria? Vale. ¿Qué pasará cuando se lesiona las vías o las zonas que están relacionadas o bien con las áreas perceptivas o bien con las áreas conceptuales y de la memoria, que sabéis que están en los lóbulos temporales? ¿Qué pasará cuando eso se lesiona? ¿A qué afectará más? Pues a los seres vivos que dependen de esa conexión. Al final pensadme en última instancia que cuando yo estoy generando el concepto de vaca, yo estoy viendo vacas, me están diciendo eso es una vaca. Y yo tengo que unir todos esos rasgos perceptivos con el concepto de vaca. Y eso se hace en el cerebro que está procesando la información en determinadas zonas. ¿Qué se está fortaleciendo? Las conexiones entre las zonas perceptivas y las zonas conceptuales o de memoria que están en los lóbulos temporales. Todas esas conexiones, todas esas redes es lo que se está fortaleciendo. ¿Qué pasa con los objetos inanimados? Pues que la mayoría de su diferenciación, las características que diferencian uno de otro no tanto tienen que ver con objetos perceptivos. Muchos son muy similares. Por ejemplo, desde el punto de vista perceptivo, un destornillador y una llave inglesa no son tan diferentes. O una llave de... ¿Cómo se llama? Por ejemplo, la llave de cadena. No está pensando en otra. Está pensando en llave inglesa y otra llave que son de tuercas. ¿Por qué tiene un nombre que no sale ahora? En fin, da igual. No son tan diferentes desde el punto de vista perceptivo. ¿En qué se diferencian mucho los objetos inanimados? En la función. ¿En qué se diferencian mucho los objetos inanimados? En la función. Cuando cogemos un martillo... Un martillo sirve para una cosa y de hecho tiene unos movimientos específicos. ¿Os habéis fijado que cuando he ido a hablaros de los objetos no he dicho características sino que he empezado a mover las manos con los movimientos típicos de cada uno? Eso es muy típico de las teorías de embodiment. El hecho de que generamos, luego lo vamos a ver en el capítulo 8, una especie de simulación sensoriomotora que implica las áreas originalmente relacionadas con la adquisición del concepto. No ha salido automático. He dicho martillo y lo primero que me sale es... ¿Se acuerdan que Gibson decía esto de las jordas? De que cuando percibimos algo no percibimos solamente sus características, sino también su función. Cada percepto nos indica cuál es la función relevante para él. Una silla nos dice siéntate, un martillo nos dice pega golpazos en los clavos. De hecho, conocéis esa frase también de que cuando uno tiene un martillo todo le parecen clavos. Es una frase muy amplia para decir que cuando uno tiene algo específico todo le parece que está en relación a ese algo. Pero es verdad que cuando uno tiene un martillo parece que lo que está buscando son cosas para golpear, porque esa es su función. Bueno, ¿con qué están relacionadas las funciones? Con actividades motoras. Cuando yo muevo el brazo lo que estoy haciendo es intentar golpear algo imaginario, pero se están moviendo mis músculos. ¿Dónde están esas áreas motoras? Áreas frontales. Entonces, la información entra a través de la corteza occipital, normalmente, porque estos objetos en este caso son visuales. ¿Y dónde van? ¿Qué se hace con ellos luego? Se hacen movimientos. Así que, ¿cuáles son las redes que se informan? Pues occipitoparietales o parietofrontales. ¿Qué pasa cuando hay una lesión en ese área? Área frontoparietal o áreas parietales, es decir, de la vía dorsal. ¿Qué se deteriora más? La categoría de seres nómidos. Esos datos son los que trata de explicar esta teoría. De hecho, explica de esa manera esos déficits que ocurren que están asociados a lesiones concretas. ¿Por qué son lesiones concretas? Esos lugares de lesión están asociados a esos déficits normalmente los que os he contado. Las lesiones más ventrales, más relacionadas con la zona temporoccipital, suelen afectar más a los seres vivos, mientras que las lesiones occipitoparietales, o que incluso afectan a la corteza motora, es decir, en la zona frontal, afectan más a los objetos inanimados. ¿Qué es lo que ocurre en esta situación? Pues lo mismo que va a ocurrir en todas las teorías que vamos a ver, que no todos los déficits, o no todos los déficits, ocurren lo mismo. De hecho, hay veces que hay muchas personas con déficits específicos de los seres vivos que tienen igual de afectados tanto los rasgos perceptivos... ...como funcionales. O, por ejemplo, que tienen un déficit en seres vivos, pero no tienen un déficit para instrumentos musicales. ¿Y en qué se diferencian los instrumentos musicales? En rasgos perceptivos. Sobre todo su función suele ser similar. La función de una flauta y un oboe es muy parecida. Y, de hecho, cómo se realiza la acción con la flauta y con el oboe es relativamente parecida. Pero, ¿qué es muy diferente? Su sonido, sus rasgos perceptivos. Bueno, pues hay cosas que no casan. Como siempre, hay cosas que no casan. ¿Y qué se hace cuando algo no casa con un modelo? Pues mejoras el modelo o propones otro modelo. ¿Hay muchos experimentos de este tipo solamente con músicos? Buena pregunta. Seguramente haya bastantes experimentos. De hecho, hay experimentos de este tipo con diferentes profesiones para ver cómo se deterioran esos conceptos. Hay una cantidad de literatura tremenda respecto a cómo ocurre esto. También lo hay en otros ámbitos. Habéis escuchado muchas veces lo de los taxistas y el hipocampo, que lo tienen más desarrollado que el resto de personas, sobre todo personas que tienen que orientarse. Aquí exactamente igual. De hecho, puedes ver cómo afecta a músicos que tienen una lesión específica y si afecta más o menos que a personas que no tengan esa profesión. Seguramente porque se formen otro tipo de conexiones o sean más capaces de distinguir. Por supuesto. Y también por su función en lugar de por sus rasgos perceptivos o por discriminaciones finas o lesiones específicas de áreas motoras de los dedos que afecten a este tipo de reconocimiento. Hay una gran literatura sobre eso. De hecho, podéis buscar en… Ya sabéis que ahora con Google es fácilísimo buscar por palabras clave y podéis ver un montón de literatura, sobre todo entre los años 80 y 2000 y para adelante. Que, bueno, en cuanto a operación técnica de neuroimagen y todo esto, toda la literatura científica se plagó de este tipo de trabajos. Por supuesto. Pues hay un montón específica de diferentes profesiones. Teoría del conocimiento específico de dominio. ¿Qué es lo que dice esta teoría? De hecho, no es ni siquiera incompatible con la otra. Lo que viene a decir esta teoría es que lo que determina la manera en que se organizan nuestros conceptos en nuestro cerebro no es el lugar o las redes funcionales que se establecen dentro de nuestro sistema cognitivo, sino nuestra evolución. El hecho de que haya determinados conceptos, categorías, que son más relevantes para nuestra supervivencia. ¿Y cuáles son esas categorías? Pues animales, que o son comida o son depredadores. Vegetales, que suelen ser comida, aunque a veces sean venenosos. Artefactos, que nos sirven para matar a los depredadores o recoger la comida o pegarle palos a los que nos quieren hacer daño, nuestros congéneres. Y también… Los propios, quizás, los propios congéneres, es decir, en la categoría de seres humanos o ciertos seres humanos. Y que esas distinciones se han establecido porque nuestro cerebro ha evolucionado para tener redes diferentes o zonas de procesamiento diferentes para cada una de estas categorías. Que eso que se ha generado tiene que ver con nuestra evolución y con la manera en que hemos interactuado con cada uno de esos objetos y la relevancia que han tenido. Al final, pensar en un proceso evolutivo siempre. Un humano de hace ciento... Bueno, no sé si llamarlo humano, pero bueno, de hace... Sí, ya sería humano, ya sería Homo sapiens. De hace, ¿cuánto? 50.000 años, pongamos, 60.000 años. ¿Vale? 60.000 años ya había Homo sapiens. Sí, 200.000 años tiene el Homo sapiens aproximadamente. Me pierdo yo a veces con las fechas, iba a decir. Bueno, con las edades. En fin, imaginaros un Homo sapiens de hace 60.000 o 70.000 años. ¿Vale? Un Homo sapiens que por un casual tiene una mutación en el cerebro que hace que sea capaz de distinguir muy bien entre animales y vegetales o entre animales de diferente tipo. ¿Vale? Por alguna razón. Y memoriza muy bien esos conceptos por algún funcionamiento extraño de su cerebro. Otro Homo sapiens al lado, su hermano, que no es gemelo, ¿vale? Así que tiene algunos genes diferentes, pues no tiene esa mutación y no distingue tan bien. Bueno, la primera vez que se encuentran con un depredador, pues son capaces de escapar por suerte o por lo que sea. Pero como uno es mejor que otro, categorizando y aprendiendo esos conceptos y su relevancia para la supervivencia, la siguiente vez que se encuentran con él, van cada uno por separado, el hermano que tiene esa mutación no puede ayudar al otro porque está en el otro lado. ¿Qué ocurre? A uno se lo comen, a otro no se lo comen. ¿Cuál es el que se reproduce? El que está vivo, evidentemente. Así que ese va a pasar con mayor probabilidad a esos rasgos a las siguientes generaciones. ¿Qué pasa al final? Bueno, si eso lo pasamos a toda la población, pues al final hay unos genes que pasan a la siguiente generación y se van transmitiendo y otros que desaparecen. Bueno, pues esto es lo que dice esa teoría básicamente, que toda esa organización que tenemos la tenemos a través de procesos evolutivos. Cosa que por otro lado dices, pues vaya tela, pues claro que la tenemos por procesos evolutivos. Es otro tipo de explicación para lo que tenemos, pero al final no se mete en la cuestión concreta de por qué esa organización. O qué tiene que ver con la organización concreta de cerebro actual, no con los procesos que han llevado a eso. La explicación evolutiva es muy útil. De hecho, debe ser una de las explicaciones que siempre incluyamos en nuestros modelos, porque si no es congruente desde el punto de vista evolutivo habría que descartarla. Si hay una teoría con más apoyo que ninguna otra, es la teoría de la evolución. Así que una teoría que sea incompatible o que dé lugar a pensar que hay características, que van en contra de la presión evolutiva o de la adaptación al entorno, pues es difícil que podamos darla como por lo menos probable o que la auxilie. Bueno, de hecho también hay datos cerebrales, datos de pacientes y datos de neuroimagen sobre esta teoría y efectivamente se encuentran ese tipo de disociaciones. según la localización cortical. Seres vivos, lo que os he hablado antes, seres vivos en el temporo occipital, artefactos en frontoparital. Pero de nuevo, esto también se explica por lo que hemos dicho antes. Lo que pasa es que estamos hablando de diferentes niveles de explicación. Uno relacionado con cómo funciona actualmente nuestro cerebro y cómo se organizan las redes de procesamiento y otro relacionado con cómo ha evolucionado ese cerebro para ser como actualmente es. Así que esto, en principio, no es incompatible con lo anterior. Siempre tienen, simplemente tienen diferentes niveles de explicación. ¿Datos contrarios? Bueno, pues de nuevo, no siempre se cumplen las predicciones de la teoría. No siempre hay esa correlación entre áreas afectadas y categorías implicadas o deterioradas. Por ejemplo, uno de los pacientes que se han estudiado en este ámbito, el paciente EW, ya sabéis que aquí siempre se dan las siglas para proteger los datos de los pacientes, por lo menos hasta que han muerto. Una vez que han muerto, se suelen ya desvelar los nombres reales. Pues que tenía problemas con los animales, pero sin embargo su lesión no tenía nada que ver con lo que se esperaba, porque se esperaría una lesión temporo-occipital y sin embargo tenía una lesión en el frontal izquierdo y en el parietal. ¿Por qué ocurre esto? Bueno, luego vamos a ver algo sobre ello y sobre la diferencia entre la red conceptual y los procesos de acceso a esa red conceptual, que puede tener algo que ver con esto. De nuevo, cuando hacemos tareas de FMR, hay muchas veces la correlación entre las áreas que se activan y las categorías es muy baja, o no ocurre, o se activan muchas áreas a la vez. Y tú dices, bueno, voy a pensar en animales. ¿Se activará todo el rato esta zona, no? Que según esto es la implicada. Bueno, pues a veces sí, a veces no. Y a veces la correlación es muy baja. ¿Es porque hay demasiado ruido en FMR y es porque hay otros procesos funcionando a la vez? Puede ser. Se sigue investigando. No esperéis respuestas definitivas a esto, porque precisamente esto es lo que tenemos que seguir investigando. Por último, la teoría conexionista, que va más a cómo funciona nuestro cerebro, por lo menos la estructura de nuestro cerebro, esas redes neuronales. Y lo que propone es que lo que tenemos es un único sistema semántico. No hay ningún tipo de separación en categorías funcionales. Creo que es una red semántica y que dentro de esa red semántica los rasgos, perdón, los rasgos, los conceptos que comparten más rasgos estarían más juntos o estarían más solapados dentro de esa red semántica. ¿Vale? Básicamente lo que hemos visto antes en la teoría de red asociativa, de red conexionista, que hemos visto que estaban, no la jerárquica sino la otra. Básicamente sería lo mismo pero implementado dentro de un cerebro. Por eso aquellos conceptos que comparten más rasgos suelen estar deteriorados de manera conjunta. Como los seres vivos suelen compartir más rasgos entre ellos con respecto a los seres no vivos, pues suele darse una afectación conjunta de los seres vivos que deja sin ningún tipo de problema a los seres no vivos, menos afectados. ¿Qué ocurre con esto? Bueno, pues está muy bien pensado porque además tiene que ver mucho con la manera en que funciona nuestro cerebro y la manera en que podrían implementarse y podríamos utilizar los conceptos ya implementados para incorporar nuevos conceptos a esa red, aprovechando las conexiones que ya existen. Las redes que ya existen. Pero cuando te vas a los deterioros, pues esto tendría que dar lugar en, si tú tienes una lesión muy focalizada en un punto concreto, debería haber categorías muy específicas que se deteriorasen, ¿no? Que serían el lugar donde, o las que están asociadas al lugar donde tienen la lesión y las que estén muy cerquita porque compartan muchos rasgos. Bueno, pues eso no suele ocurrir. No hay deterioros específicos de categorías muy específicas. Las lesiones específicas, como las peces o las aves, suelen haberlas de categorías más amplias. Incluso cuando hay lesiones focales muy pequeñitas, ¿vale? Lesiones específicas en un punto concreto que uno pensaría, bueno, lo que esté alrededor. ¿Esto es porque la teoría no funciona o es por otras cosas? Porque si afectas a un lugar del cerebro, a lo mejor también la conducción de impulsos a otros lugares está afectada. Ese es el problema de cuando analizas este tipo de lesiones. Que no sabes muy bien hasta qué punto la lesión afecta solamente al área o afecta a otra cosa. O afecta a otras áreas porque esa área es una área de conducción que está implicada en el procesamiento entre otras diferentes lugares. Claro, si tú cortas el cable, pues es lo mismo que si arrancas el enchufe. Al final deja de funcionar la luz. Pues aquí lo mismo, ¿vale? No sabemos si eso es cable o enchufe. Y como muchas veces no lo sabemos, pues no sabemos a qué se deben ese tipo de disociaciones o ese tipo de disfunciones. Sería algo así, ¿vale? Esto sería... Esto está cogido de Trends in Cognitive Science. Por cierto, una de las revistas más importantes en ciencias cognitivas. Es una revista que sólo pudiera ser una revista de ciencias cognitivas. Cuando se publica revisiones, hay más revisiones que para las que ellos hacen invitaciones. Te tienen que invitar y publicas un artículo. Normalmente invitan a grandes popes de áreas concretas a que realicen un artículo de revisión sobre su área de conocimiento. Y es una revista muy importante porque se cita muchísimo. Cuando quieres ver cómo está la cosa, y por eso se llama Trends in Cognitive Science, cuando quieres ver cómo está el estado del arte en la cuestión, pues te vas a alguna revisión de esta o de Annual Reviews in Psychology, que también es muy importante, o algunas otras, ¿vale? Y tenéis este dibujito sobre activaciones cerebrales y veis que tendríamos diferentes áreas dentro de una misma red que tendrían que ver con diferentes conceptos. Veis que aquí lo importante es que todo está muy disperso, los conceptos o la activación de áreas concretas de diferentes conceptos está muy dispersa, pero aquellas que tienen que ver más entre ellas suelen estar más juntas. Aun así, conceptos que tienen rasgos muy parecidos a los de otra categoría pueden estar incluso más cerca de esa otra categoría. Sería algo así, como hemos visto antes en las redes, visto desde un punto de vista más descriptivo, como esos circulitos, esos diagramas que hemos visto antes. Pero en el fondo sería una implementación similar o pensamos que podría ser una implementación similar. ¿Cómo llegamos esto realmente al cerebro? Bueno, pues cuando analizamos todo. Cuando analizamos todos estos datos y cuando vemos todos los datos que han dado lugar a este modelo, nos encontramos con que las redes semánticas, las redes que se activan cuando estamos realizando una operación semántica de acceso al significado, son muy amplias. Están distribuidas a lo largo de grandes zonas del cerebro. Tú te pones a ver qué ocurre en una tarea semántica. Ostras, empiezan a activarse zonas temporales, zonas parietales, zonas frontales también, sobre todo. Frontales y parietales del hemisferio izquierdo, temporales en ambos lados, un montón de zonas. Pero también subcorticales que conectan ambos hemisferios, que conectan diferentes zonas y que incluso tienen que ver con los propios conceptos y significados. ¿Por qué hay áreas subcorticales? ¿Recordáis la amígdala, por ejemplo? Que está relacionada con los propios significados, porque los significados también incluyen emociones. Y la amígdala, sabéis que está muy relacionada o se activa o por lo menos parece que tiene cierta función en el procesamiento emocional. Bueno, pues eso es lo que nos encontramos, con un montón de áreas involucradas. Hay una teoría específica que se llama teoría de la percepción-acción, que tiene mucho que ver con esa teoría sensoriomotora que hemos visto antes, aunque no es exactamente igual, y que postula que los conceptos se forman cuando percibimos los estímulos y realizamos las acciones que están relacionadas con esos estímulos. Es decir, nosotros percibimos los estímulos. Cada estímulo es un estímulo. Cada estímulo lleva relacionadas ciertas acciones, acciones de todo tipo, como por ejemplo realizar una acción sobre ese propio objeto o por ejemplo pronunciar su nombre o escuchar el canto de un canario, si estás imaginando que es un canario. Bueno, pues ese concepto o lo que sería un concepto sería el resultado de toda la activación de esa amígdala. ¿Os suena el concepto de embodiment? Lo he dicho antes. ¿Vale? Pues básicamente esto es a lo que nos referimos cuando hablamos de embodiment. Nos referimos a que los conceptos, el funcionamiento de nuestro cerebro está asociado a las acciones y a las características perceptivas de cada uno de los objetos. Cuando nosotros pensamos en un canario, pensamos en… Un canario habla del pájaro, ¿vale? El otro día ya salió de la broma del canario, que es un señor de canarias también, pero bueno, no es amarillo y no tiene alas, normalmente, ¿vale? Como os decía, pensamos en un martillo y pensamos en sus características perceptivas, pero también hacemos una simulación de esas características. Recuperamos y hacemos una simulación mental sensoriomotora de ese martillo, tanto de sus características como de las acciones. En el fondo, ¿qué estaría haciendo una simulación sensoriomotora de todo esto? De hecho, eso parece que ocurre porque cuando nosotros presentamos determinados conceptos o palabras relacionadas con partes del cuerpo o de acciones de partes del cuerpo, sabéis que nuestra corteza motora tiene una especie de homúnculo, es decir, el homúnculo sensorial y el homúnculo motor. Es decir, que cada área de la zona motora está relacionada con el movimiento de una parte del cuerpo. Se pueden diferenciar, ¿vale? Cuando movimos… Cuando mueves una mano, se activa una parte del área motora. Cuando mueves la otra mano, otra. Cuando mueves una pierna, otra. Bueno, pues cuando tú presentas conceptos que tienen que ver con acciones relacionadas con diferentes partes del cuerpo, las áreas que se activan, la red que se activa es diferente y coincide con el área motora relacionada con esa parte del cuerpo que implica ese movimiento. Por ejemplo, cuando tú le dices a alguien o presentas la palabra besar, la red que se activa incluye las áreas motoras relacionadas con eso. Porque es con la que se realiza la acción. Quizás sea demasiado general porque al final besar implica muchos más movimientos del cuerpo, pero por ejemplo, si pensáis en patear, agarrar, lamer, que son movimientos específicos, las áreas involucradas en ese concepto involucran todas esas zonas relacionadas con las acciones. Bueno, pues básicamente esto es el embodiment. Eso es lo que está tan de moda y que se llama embodiment o corporización. Y que tiene mucho sentido desde el punto de vista de que, claro, utilizamos lo que tenemos. ¿Qué sirve nuestro cerebro? Pues básicamente para actuar sobre el mundo. Cuando nosotros necesitamos recuperar conceptos o almacenar conceptos, ¿qué utilizamos? Pues las áreas que ya existen. Y utilizamos esas redes y generamos redes que se conectan entre ellas para generar esos conceptos. Esas conexiones también... involucrando las áreas perisilvanas donde se almacenan los nombres, donde estaría que correr nuestro léxico mental y todo esto, bueno, pues se juntan todas para crear el concepto. El concepto sería un resultado de todas esas activaciones relacionadas con todas las aplicaciones o con todas las características de esas palabras. Tanto su nombre, es decir, su ortografía, su fonología, la propia etiqueta verbal o etiqueta ortográfica, también sus acciones o sus características perceptivas y sus características motoras. Mira, vamos bien de tiempo, son las 6 y 4 todavía, pensaba que era más tarde. Bueno, arriba tenéis un ejemplo de cómo se instanciaría esto. Ves que es una red distribuida. En cada parte de esa red tenemos diferentes características asociadas a la otra. Tanto cuestiones motoras como perceptivas, ya sean relativas al sonido o relativas a la forma y al color, que tendrán más que ver con la zona occipital, cuestiones visuales, también relacionadas con las propias palabras y el acceso al léxico, más en la parte de los lóbulos temporales. Todo eso de manera conjunta da lugar a lo que sería un concepto. Pero veis que os estoy señalando la parte de arriba. Me falta la parte de abajo. Porque mientras que algunos... Mientras que algunos autores han propuesto una red completamente distribuida, otros autores proponen que debe haber alguna zona en la que se abstrae toda esta información, una zona donde toda esa información va y genera un concepto abstracto, donde se abstraen los conceptos. ¿Por qué? Pues porque muchas veces nuestros conceptos no tienen una modalidad particular, sino que son completamente amodales. Bueno, pues eso es lo que se llama la teoría del hub. Y lo que propone... Es una, ya sé, como una especie de concentrador de unión o de puerto de unión de todas las demás informaciones. Una especie de región, perdón, región semántica que no pertenece a ninguna modalidad, ni una modalidad sensorial, ni tampoco a ninguna cuestión motora, y que aglutinaría toda la información y es donde estaría almacenado ese concepto abstracto. Esa es la teoría del hub. Que vamos a ver ahora. La teoría del concentrador semántico o hub. Que básicamente propone... Que todas estas redes o todo este concepto de red, bien, perfecto, funciona, pero que necesitaríamos además para abstraer los conceptos una zona específica que reclutase o aglutinase toda la información de las diferentes áreas modales, de las diferentes informaciones perceptivas o también de las diferentes informaciones sobre acciones motoras, etc. Y ese área sería este área que tenéis aquí, el área anterior de los lóbulos temporales. Esta especie de protuberancia en los lóbulos temporales, cuando veis el cerebro de lado, como si los lóbulos temporales vienen aquí en corte, en el área perisilvana y luego se va hacia adelante y forma así como una especie de curva. Esa parte anterior sería la que se ha propuesto como una región semántica a modal, donde están almacenados conceptos pero sin ninguna modalidad concreta, donde se reúne toda la información de modalidad pero no hay modalidad. Por eso somos capaces de, por ejemplo, reconocer o acceder a significado si escuchamos una palabra o si vemos una palabra, porque da igual la modalidad de acceso. Es más importante o podemos acceder a ella a través de cualquiera de ellas. ¿Por qué? Porque tenemos esos conceptos almacenados de manera a modal. De hecho, hay pruebas de esto desde la neuropsicología y desde los trastornos. Hay un tipo de demencia, la demencia semántica, demencia semántica pura, ¿vale? En los que el tipo de modalidad por el que les presentas las palabras o los conceptos influyen que puedan recuperarlos o no. Si a un afásico con una lesión motora o con una lesión de otro tipo, tú le presentas, por ejemplo, temporo occipital, le presentas el concepto, un dibujo de una vaca, a lo mejor no es capaz de recuperar el concepto. Pero si se lo presentas auditivamente o le dejas tocar una vaca, a lo mejor sí. Pero hay otro tipo de pacientes con lesiones en esta parte concreta. En las que da igual la modalidad, no pueden acceder al concepto. De aquí viene todo eso que os iba a decir antes. El hecho de que, a pesar de que hay una gran cantidad de regiones asociadas al acceso al significado, hay una gran discusión respecto a qué áreas son específicas del significado y qué áreas están relacionadas con funciones ejecutivas para acceder al significado. Porque es probable que muchas de estas lesiones de demencias tengan que ver con incapacidades de las funciones ejecutivas. Que nos sirven para acceder en una tarea concreta, pero que no tengan que ver con el almacenamiento de conceptos, con el propio significado. Bueno, pues esto es lo que predice y lo que propone la teoría del SAP. El hecho de que realmente las áreas relacionadas con los propios conceptos no son pantas, sino que estas otras áreas que hemos indicado antes están relacionadas con cómo se realiza la tarea y con las dificultades de la tarea y con las funciones ejecutivas necesarias para activar o para acceder a los significados, a los conceptos concretos. Y que los conceptos concretos se almacenarían o estarían representados en esta zona específica, que sería inespecífica. de modalidad, ¿vale? Una región específica que es a la vez inespecífica para la modalidad. Y terminamos aquí. Vamos con el capítulo 8. Preguntas sobre esto, voy a aprovechar y voy a ver el chat, a ver si han dicho algo, que nos hemos quedado sin sonido aquí, las familias le dicen por tanto, sí, de momento no hay ninguna pregunta. Bueno, pues continuamos con el capítulo 8. Llevamos una cosa sobre la que preguntasteis hace unas, no recuerdo, creo que lo preguntaste tú sobre, no recuerdo, me tengo una memoria de a veces también, sobre algo que preguntasteis eso sí lo recuerdo, recuerdo, ves, algo que se ha transformado casi en semántico, recuerdo que pasó, pero ya estoy perdiendo detalles sobre el momento en el que pasó. Sé que pasó aquí, espero, a lo mejor pasó en otra pero estoy perdiendo detalles, ves como los detalles episodicos en la memoria se van perdiendo poco a poco y se van perdiendo con la edad también, se van perdiendo con la edad pero se van manteniendo ciertas, eso es lo que va ocurriendo eso ocurre en otra escala, por supuesto, entre la memoria episodica y semántica. Vamos perdiendo los episodios concretos y vamos manteniendo el conocimiento que vamos adquiriendo, pero sin los detalles específicos. Bueno, os recuerdo que sí preguntasteis sobre esto, que bueno, pero esto a nivel de palabras está muy bien, pero también influirán otras cosas, ¿no? Influirán oraciones o cómo influye la sintaxis o elementos más grandes que la propia palabra. Bueno, pues evidentemente sí, para nosotros comprender el lenguaje no comprendemos solo palabras sueltas, sino que necesitamos comprender predicados completos, porque al final el lenguaje no va de referentes descontextualizados de todo, sino de acciones, de predicados de hacer algo sobre algo o de alguien haciendo algo a alguien o de alguien haciendo algo sobre algo o de alguien moviéndose hacia algún lado y os habréis dado cuenta que la mayoría de las veces he dicho primero a alguien y después he dicho algo. Y eso también es importante, porque la mayoría de nuestras constricciones gramaticales no nacen del vacío, nacen adaptadas a los problemas de los seres humanos, porque ¿qué es lo que ocurre en la mayoría de las oraciones? ¿Quién es el sujeto? Normalmente es un ser vivo. ¿Y normalmente qué es? Otro humano. En la mayoría de nuestras oraciones los sujetos son humanos, son seres vivos humanos. ¿Y qué son los predicados? Pues son o otro ser humano o sobre los que actuamos. Al final todo nuestro lenguaje se construye sobre seres vivos nosotros, haciendo o actuando sobre el entorno que incluye tanto seres humanos como objetos como otros seres vivos, como otras cuestiones del entorno. Y por supuesto necesitamos Para comprender las oraciones necesitamos comprender esos predicados para generar simulaciones mentales, imágenes mentales que nos permitan comprender las situaciones y actuar sobre ellas. Cuando hablamos de oraciones, al final lo que hacemos es simular, hacer una imagen mental de esa situación que nos permite actuar sobre el entorno en respuesta a esa simulación o ese conocimiento de las situaciones. Para eso sirve el lenguaje. Por supuesto, no solo las oraciones, también todo el contexto, todo el discurso del que hablaremos un poquito más adelante. Bueno, esto que he hablado sobre las oraciones es lo que decimos son actos predicativos. Ya hemos hablado de ello, yo lo he comentado. Decimos algo sobre alguien, actuamos de alguna manera sobre algo, etcétera, etcétera. Todas las construcciones gramaticales, todas las oraciones veréis que son de este tipo. Por eso se dividen siempre en sujeto y predicado. Sea el sujeto elíptico, sea el predicado más complejo o menos complejo. Hay oraciones coordinadas o subordinadas o como queráis. Pero siempre al final nos remitimos a actos predicativos, a hacer algo sobre algo. No nos importa si hay un perro, sino qué significa, qué voy a hacer con ese perro o con ese coche. Pues tú le dices a alguien, coche. Muy bien, coche. ¿Quieres que vaya al coche? ¿Quieres que venga? ¿Ese coche tiene algo particular? ¿Vamos a actuar sobre el coche de alguna manera? Eso es lo importante de ello, ¿vale? Bueno, ¿cuál es la importancia en las oraciones de la sintaxis? Ya sabéis que la sintaxis tiene que ver con la organización y con las funciones que cada palabra tiene dentro de la oración. Es como una especie de reglas formales que nos permiten identificar las relaciones funcionales entre los diferentes elementos. Nos indican qué sirve para qué en cada frase y, de hecho, nos permite generar esas imágenes mentales. Porque no es lo mismo decir el niño sustó a la gata amarilla. La gata amarilla sustó al niño. Ese orden y esa función gramatical nos indican cosas diferentes, ¿vale? Nos indica qué hizo qué. Es muy importante para comprender esto. Pero además, lo que nos permite esas reglas sintácticas, que si yo os pido que me las digáis, seguramente ninguno seréis capaces de decírmelas. Yo tampoco sé cuáles son las reglas. Son las reglas que nos permiten generar todas las palabras o todas las oraciones. Que más o menos podríais... Podrías decir algo, ¿no? Bueno, el sujeto suele ir primero y después va el predicado. El predicado siempre tiene un verbo, que son acciones. Pero las reglas específicas que nos indican cómo generar todas las oraciones, pues yo no sabría expresarlas. Seguramente habrá que hacer un estudio muy formal. Chomsky ha hecho varios de ellos sobre cuáles son esas reglas. De hecho, Chomsky lo que proponía es que hay una serie de reglas muy básicas que permitan generar todas las oraciones. Es lo que él llamaba recursividad. también se da en una gramática generativa, bueno, todos aquellos temas de exploración de la propuesta chomskiana. Bueno, lo impresionante de nuestro lenguaje es que somos capaces de generar una infinita cantidad de oraciones utilizando solamente un pequeño número de reglas. Reglas que además no conocemos. Bueno, sí las conocemos, pero de manera implícita. Para conocerlas tienes que dedicarte a ello durante mucho tiempo y escribir un montón de libros y hacer un montón de experimentos para intentar llegar a algo parecido a lo que sería ese conjunto de reglas. Y no todo el mundo está de acuerdo en cuáles son, porque Chomsky proponía alguna, luego se han ido cambiando, es muy difícil saber cómo ocurre esto. Pero a la vez eso nos permite nuestro conocimiento implícito de ello, nos permite ir generando. Fijaros que a veces tengo en la clase la de frases, las de oraciones que genero y sin un esfuerzo demasiado grande soy capaz de generar oraciones que tienen cierto sentido al menos o que permiten comunicarme. Bueno, pues eso es la gran característica del lenguaje, su productividad y su recursividad. La capacidad de a través de unas pequeñas reglas generar un gran conjunto de oraciones prácticamente infinitas. Pensad en la última vez que repetisteis una oración exactamente igual que la anterior. Seguramente ni se os ocurra. Igual, igual. ¿Habéis tenido la sensación de que alguien siempre habla con las mismas frases? Algunas intervenciones que parece que siempre están diciendo lo mismo. Pero de manera general, no tenemos la sensación de que todo el mundo repita lo mismo. Cada conversación nos parece nueva y diferente, porque realmente es nueva y diferente. Siempre varían. Son las mismas palabras, pero combinadas de una manera completamente diversa y nueva en cada interacción. Lo que nos permite una gran capacidad incluso para expresar nuevas ideas que no habíamos expresado. ¿Qué tenemos que hacer para poder entender una frase? Lo primero que tenemos que hacer es como hacíamos con las palabras, segmentar. Hay que hacer una serie de segmentaciones en unidades sintácticas, básicamente escoger cada uno de los elementos y diferenciar qué partes o qué elementos sirven para una cosa, qué elementos sirven para otra cosa y qué elementos tienen relación con otra cosa. Y qué función tiene cada uno de esos elementos. Cuando tenemos eso, lo que tenemos es un manual para construir significados. anual para construir una simulación en nuestra mente de lo que estamos hablando. Cuando yo estoy hablando ahora, de nuevo, a través de mis palabras y de las funciones que tienen cada palabra dentro de la oración, estoy construyendo un modelo mental de lo que yo intento transmitiros, que al final no son las propias palabras, sino los significados y la estructura mental que hay detrás de esa palabra. Yo genero una imagen de lo que quiero decir, de lo que significan las cosas, la traslado a palabras y vosotros reconstruís La sintaxis, la gramática, son las instrucciones. Es el manual de instrucciones para reconstruir eso. Desde un punto de vista funcional sería esto. Aquí tenéis el ejemplo que os he puesto antes. Vamos a ver en este capítulo tres diferentes perspectivas respecto a la comprensión de oraciones, al estudio de la gramática y la sintaxis. La primera de ellas son lo que denominamos las teorías estructurales, las de inspiración chomskyana. Recordaréis que Chomsky, que no es psicólogo, es lingüista y muchos de los que han estudiado el lenguaje desde su punto de vista, lo estudian desde un punto de vista formal. ¿Cómo funciona el lenguaje o cómo funciona la sintaxis como un lenguaje, como serían las matemáticas o lenguajes de programación? ¿Qué funciones tiene cada uno de los elementos? ¿Y cómo podemos generar todo nuestro conjunto? ¿Cómo podemos generar todo nuestro conjunto de oraciones a través de unas reglas sencillas, específicas y formales? Pero eso no es lo que más nos interesa dentro de la psicología. Dentro de la psicolingüística no nos interesa tanto la competencia, recordáis, la diferencia entre competencia y actuación. Nos interesa mucho más la función, la competencia, perdón, la actuación de las personas, no la competencia. La competencia sería ese estudio formal de lo que somos capaces de hacer. Nos interesa más la actuación, lo que realmente hacemos. Y vamos a ver que en esa actuación la sintaxis... No es esa especie de módulo separado, formal, que a través de una serie de reglas combina palabras porque sí. Sino que la manera en que analizamos de manera sintáctica y comprendemos las oraciones tiene que ver también con los significados de cada una de esas palabras y con la conjunción de significados cuando vamos leyendo cada una de las oraciones. Los significados afectan a la sintaxis, por lo menos en la actuación. Sin embargo, las perspectivas estructurales, veréis, que intentan separar. Semántica y sintaxis, semántica y segmentación, como si eso fuese un módulo separado. De nuevo, eso nos remite a Fodor, nos remite a Chomsky, etcétera. También veremos otra perspectiva, la perspectiva semántica y pragmática, que todavía va más allá en la influencia de la semántica y del conocimiento previo sobre la sintaxis. Y veréis como nuestro conocimiento previo del lenguaje, nuestros conocimientos de las situaciones y también los procesos semánticos, cambian la manera en que interpretamos cada una de las oraciones. Así que desde el punto de vista del ser humano no podemos separar significado de sintaxis, porque muchas veces el significado también nos da pistas sobre qué hace cada palabra, cada elemento en la oración. Vamos a empezar con la perspectiva estructural de la gramática, quizás la que sea un poquito más rollo pero también la que dedican menos tiempo en el libro, porque ya sabéis que nos interesa mucho más. La actuación de los hablantes. Bueno, ya os he dicho antes que esta perspectiva tiene una inspiración puramente chomskiana. Es decir, surge cuando empieza a surgir, cuando empieza a aparecer Chomsky como gran investigador del lenguaje, que se revela contra... Se revela de manera... Bueno, en el caso de Chomsky no tan metafórica. A veces era un poco... El tío no ve así. Pero se revela contra las concepciones del lenguaje que había en su época. ¿Recordáis, no? El asociacionismo este típico de la psicología conductista y explicar el lenguaje como una serie de asociaciones entre elementos o de mecanismos de reforzamiento. Cadenas de reforzamiento dentro de... Bueno, o a través de las diferentes estructuras. ¿Qué es lo que propone Chomsky? Ya lo hemos visto. Un pequeño número de reglas que genera una gran cantidad de posibilidades. Se centra en la gramática, se centra en el análisis sintáctico, pero deja de lado la semántica. Cada una de las palabras. De hecho, también coincide con Fodor. ¿Recordáis a Fodor y a lo de los módulos de procesamiento? Bueno, pues lo que proponen desde este tipo de teorías es que el módulo sintáctico o el procesamiento sintáctico es un módulo específico de nuestro cerebro que realiza ese análisis sintáctico con independencia y sin que le afecte nada de los otros procesos. Así que lo separan de otro. La separación a pocos tiempos... ¿Os recordáis cuando vimos el capítulo 1? En el capítulo 1 se habla de que al poco tiempo empezaron a aparecer resultados contradictorios. En principio Chomsky estaba muy feliz porque cuando se empezó a estudiar todo esto, pues parecía que todo se adaptaba y parecía que coincidía con lo que decía él. Pero en cuanto empezó a meterse un poco la semántica de por medio y a analizar significados, pues aquello saltaba un poco por los aires. Cosa que tampoco pasa nada, es normal que ocurran estas cosas. Pero a Chomsky tampoco le gustaba demasiado esto. Es normal, cuando atacan a tu hijo, pues al final te rebelas un poco en contra de los que le han atacado. O sea, el que ya está con el martillo dando la cabeza al otro. Bueno, pues se centra sobre todo en esto que denominamos parsing o segmentación de la frase en sus unidades gramaticales y en las funciones que cumple cada uno de ellos. Vamos a ver dos tipos de teorías. Las teorías basadas en principios y las teorías paramétricas de la segmentación. En esencia es las mismas teorías, solo que cuando las teorías de principios empezaron a hacer aguas, pues hubo que empezar a meter algunas cositas del lenguaje y del significado para poder salvarlas de alguna manera, esas teorías estructurales. En las teorías basadas en principios, lo que tienen en común es esa concepción de la que hemos hablado antes de la sintaxis o de la comprensión gramatical como un módulo separado del resto de unidades de procesamiento. Separado de la semántica, separado del acceso al léxico, separado de cualquier otra cosa. Esas unidades o ese módulo están tan implementado, tan bien implementado en nuestro cerebro a través de procesos evolutivos que constituye una unidad aparte y nos permite segmentar de manera rápida y muy precisa todo lo que llega a nuestro cerebro, todas las unidades lingüísticas que llegan. Actuaría de manera separada y separando de manera automática cada uno de ellos. ¿Cómo el acceso sin acceder al significado de las palabras? Bueno, pues ahora veremos si... Fijaros, vamos a ver algunos ejemplos y de hecho vamos a ver una teoría específica que es la teoría de la vía muerta, que nació para explicar cómo los individuos asignan diferentes roles o diferentes... a diferentes palabras le asignan diferentes roles o juntan o relacionan diferentes palabras o diferentes nombres en este caso dentro de una frase. Imaginaros la siguiente oración. María vio a Juan cuando iba a la plaza. Y yo ahora os pregunto una cosa muy sencilla. ¿Quién iba a la playa? ¿Juan? ¿María? ¿Qué pensáis? ¿María vio a Juan cuando iba a la playa? Ambiguo. Es ambiguo. Evidentemente es ambiguo, pero es ambiguo a posta, porque cuando uno hace un experimento de estos lo que pregunta la gente es ¿quién iba a la playa? Y no vale decir es ambiguo, tenéis que decir quién iba a la playa, ¿vale? Porque seguramente en un primer momento habréis pensado, lo primero que os ha venido a la cabeza que ha sido ¿qué era María? ¿O qué era Juan? ¿Juan? ¿Todo es Juan? ¿Alguien ha pensado María? ¿María? Vale. María vio a Juan cuando iba a la playa. ¿Qué es lo primero que se os viene a la cabeza sobre quién iba a la playa? ¿Quién estaba yendo a la playa? Ya sé que es ambiguo, pero lo primero que habéis pensado. Yo siempre pienso María. Yo María. A mí lo primero que se me viene a la cabeza es María. María vio a Juan cuando iba a la playa. Pero el otro es perfectamente ilícito, de hecho, pero es perfecto en cuanto a su significado. Bueno, la cuestión es ¿qué hacen los hablantes de manera general? Bueno, ya os adelanto que más o menos como ha pasado aquí un poco de todo, ¿vale? Pero en general, la teoría de la vía muerta lo que propone son dos principios para cómo actúan las personas en estas situaciones. Y propone el principio de adjunción mínima y el principio de cierre tardío. El principio de adjunción mínima es utilizar aquella interpretación que hace más simple la frase. Que no tiene que implicar a un mayor número de cláusulas de relativo o mayor cantidad de sintagmas nominal, etcétera, etcétera. ¿Vale? Lo decimos María vio a Juan cuando iba a la playa. Si cogemos la frase María vio a Juan, María sería el sintagma nominal sujeto, ¿no? Y iba a la playa, cuando iba a la playa sería un complemento de ese propio sujeto, ¿no? Sin embargo, si lo adquirimos a Juan, entonces sería una frase más sencilla, ¿no? Porque iría dentro de todo esto. Bueno, dependiendo de la frase tendría mayor o menor complejidad. Lo que haríamos nosotros, o lo que se supone según esta teoría que harían los sujetos, es intentar hacer la frase lo más sencilla posible. Pero además se le añade otro principio, el principio de cierre tardío. ¿Qué hacemos normalmente? Pues adjuntar lo que es ambiguo e ir a la playa a lo último que hemos visto. Según esta teoría, los que habéis dicho Juan, estabais en lo correcto o por lo menos coincidíais con lo que propone la teoría. ¿Vale? Así de primeras, lo primero que uno se da cuenta es, joder, pues para proponer esto tampoco ha sido tan demasiado, porque la primera ya había gente que pensaba que era María. Bueno, lo cierto es que estos estudios se hicieron en inglés, ¿vale? Así que estas frases realmente se presentaron en inglés. Y cuando se presentaban en inglés, la mayoría de las personas adquirían. La mayoría de las personas adquirían la playa a Juan. Es decir, que el principio de cierre tardío funcionaba para los ingleses. Tampoco de una manera espectacular, no os creáis, ¿eh? El sesenta y tantos por ciento. Que luego hay recitados estos que son muy graciosos, porque proponen este principio de cierre tardío y de adjunción mínima, pero luego en los resultados dices, joder, ¿vale? El sesenta y tantos por ciento sí, pero y el otro treinta y tantos por ciento, ¿cómo lo explicas? Porque tienen otro lenguaje. Bueno, cuando esto lo pasas en español, de hecho es lo que hicieron otros investigadores, uno de los autores del libro. ¿Veis? Cuetos. Pues ocurría lo contrario. La mayoría de los hablantes de castellano lo adjuntamos a María. No por mucho, ¿eh? El cincuenta y tantos por ciento o el sesenta por ciento también. No os penséis que es una locura. De hecho, más o menos, pues como nos hemos repartido aquí. Y no lo hemos hecho muy bien, porque tened en cuenta que esto hay que hacerlo rápidamente. No vale pensarlo tantas veces, porque ya hasta se te olvida que es lo primero que pensaste. Y una vez que has seleccionado una interpretación o te han indicado una interpretación concreta, es muy fácil que ya te adhieras a ella y no puedas ver la otra, ¿vale? Pero bueno, cuando lo haces bien hecho, esto sale más o menos así. Hay división, pero en función del lenguaje va cambiando. Así que parece que no funcionaba demasiado bien. ¿Por qué? ¿Qué estaba pasando? Pues seguramente algo de lo que en una teoría posterior propusieron. Porque una vez que vieron que la teoría de la vida muerta no funcionaba, pues vamos a refinarlo un poco. Y la teoría de la interpretación, lo que se llama Construct Theory, proponía algo muy similar, pero restringiéndolo mucho. Bueno, es verdad que no funciona siempre, pero hay un conjunto limitado de sintagmas específicos muy comunes y de relaciones entre palabras en las que sí se cumple. Es decir, bueno, solo ocurre si pasa esto y esto. Es decir, limitaron la teoría a una serie de circunstancias específicas. Bueno, realmente en castellano sigue sin ocurrir, pero ves por dónde va la cosa. Intentan salvarla limitando un poco su espectro porque realmente no funcionaba demasiado bien. De ahí surgieron las teorías paramétricas de la segmentación. Bueno, hay diferencias entre lenguas. En función de las reglas gramaticales, perdón, de las diferentes lenguas, pues las reglas gramaticales incluyen esas características específicas de cada una de las lenguas. Por eso aparecen las diferentes interpretaciones. En función de la lengua y por eso hay diferencias entre lenguas. Pero ya empezamos a meter algo de significado, ¿no? Ya empezamos a meter algo de las lenguas. Ya empezamos a hablar de cómo están organizadas las lenguas, de qué ocurre o cómo están organizadas las palabras o el orden de las palabras en las lenguas. Por ejemplo, en español sabéis que los adjetivos suelen venir después de los nombres. Naranja, perdón, voy a hacer naranja, naranja, una manzana verde. La manzana es verde, pero no solemos decir verde manzana a no ser que estemos... haciendo un poema o estemos en una situación muy especial o en una película de la Galaxia si está hablando Yoda. Normalmente no suele ocurrir. Sin embargo, en inglés los adjetivos suelen venir antes del nombre. Bueno, pues a través de estas diferencias en cómo se organizan los diferentes lenguajes, las diferentes lenguas, podemos explicar algunas de esas diferencias. Como normalmente en nuestro idioma lo que viene después del nombre son complementos a ese nombre que no tienen mucha importancia, porque nos da igual si la manzana es verde o no, lo que nos importa es la manzana y qué va a pasar con ella. ¿Qué hacen los hablantes del castellano? Pues adjuntan esto de la playa a lo importante que es lo primero, ¿no? Porque el nombre suele ser lo primero. Así que por eso la mayoría de los hablantes de castellano pues adjuntan playa a María. ¿Vale? ¿Qué ocurre en inglés? Pues al revés. Como el nombre suele estar detrás, pues siguen el principio de cierre tardío. Suelen adjuntar playa al último porque el último suele ser lo importante. Aquí tenéis algunos ejemplos, ¿vale? Lo tenéis también en inglés. Alguien disparó sobre la criada del actor que estaba en el balcón con su amigo. Hay diferentes ejemplos, no los vamos a tener todos en el libro porque varios son ejemplos de esto. Pero básicamente lo que vienen a decir todas estas teorías paramétricas de la segmentación es que en función de los parámetros específicos que ese conjunto de reglas sintácticas... Tiene en cada una de las lenguas, pues los oyentes utilizan esas reglas concretas y cuestiones estadísticas sobre cómo se instauran las lenguas específicas, las reglas de las lenguas específicas, para realizar esta especie de adscripción o resolver estas ambigüedades en diferentes temas. Ya vamos resuavizando un poco la cosa, ¿vale? Bueno, y pasamos a la teoría funcional y con esto un minutillo termino, ¿vale? ¿Qué proponen las teorías funcionales? Pues aquí de nuevo vamos relajando todavía más la cosa. Lo que dicen las teorías funcionales es, bueno, no se puede separar de manera tan radical el procesamiento gramatical, la sintaxis, la división sintáctica de las oraciones, de los significados. De hecho, los límites son muy difusos y en muchas ocasiones lo que hay es una influencia muy grande de los procesos semánticos del significado sobre la manera en que se segmentan las oraciones y se establece la función de cada uno de los segmentos. Y aquí viene lo que os decía antes. La gramática para esta perspectiva funcional, perspectiva que tiene más que ver con la actuación y por tanto con la perspectiva psicolingüística, sería una especie de instrucciones de procesamiento. Tenemos una serie de marcadores, normalmente las palabras de función, no las de contenido, recordáis, ¿no? Preposiciones, etcétera, que nos indican... que relación van a tener cada uno de los elementos que están antes o después. Cómo se relaciona una parte de la oración con la otra parte de la oración, cuál es ese tipo de relación, si es de tipo causal, si es de tipo temporal... Luego veremos algunas más, como tipo adversativo. Pero nos dicen qué relaciones podemos esperar y por tanto cómo debemos construir esa imagen mental. Es una especie de señales de tráfico que nos indican por dónde ir y cómo hacer las cosas. Nos guían, ¿vale? Para realizar el proceso. Para poder realizar esa segmentación, a través de las palabras de función, también necesitamos las palabras de contenido. Porque las que en última instancia determinarán cómo va a ser esa segmentación, va a ser el significado concreto de la oración. Ya sabéis, esto de alguien contó algo a alguien, al final los contenidos nos permiten identificar también qué función están llevando a cabo, cada una de las palabras dentro de la oración. Y lo dejamos aquí y la semana que viene seguimos con estas características típicas de las arquitecturas o de las perspectivas funcionales. Y dos cosas muy concretas y bastante chulas sobre el funcionamiento de las anáforas, muy comunes en castellano, y de los conectores que nos permiten unir cláusulas y establecer relaciones de algún tipo entre ellas, que nos permitan formar esas imágenes. mentales de diferentes tipos y que crean diferentes imágenes mentales. Bueno, terminamos aquí y la semana que viene continuamos. Muchas gracias a todos chicos, los que estéis en clase y nos vemos, los que estéis en clase a ir a la aula virtual y nos vemos la semana que viene. ¿Habéis firmado todos?