Hola, buenas tardes a todos. Comenzamos esta tutoría en la cual voy a exponer los temas 3 y 4 del programa. Fundamentalmente me voy a centrar en el capítulo 3º. Capítulo 3º que trata de dar respuesta a la siguiente cuestión. ¿Cómo interviene el sector público cuando los mercados no son eficientes? Bien, ¿cuál es el papel? Que corregir esas ineficiencias en el funcionamiento del mercado. Bien, ¿cuándo se producen ineficiencias en el mercado? Pues cuando concurren alguna de estas cuatro circunstancias. En primer lugar, para que el mercado sea realmente competitivo, todos los agentes que intervengan en ese mercado tienen que ser precio aceptantes. ¿Esto qué significa? Significa que ninguno de ellos puede... determinar de forma unilateral el precio al cual se van a intercambiar los bienes y servicios en ese mercado. Tienen que aceptar el precio que se va a fijar por la libre concurrencia entre la demanda y la oferta. Está claro, se trata de mercados competitivos, en los cuales todos los que intervengan en el mismo tienen esa condición de ser precio aceptantes. Bien. Una exigencia sería que se pueda excluir del consumo a aquellos agentes que no paguen el precio. En definitiva, que se trate de un mercado en el cual los bienes que se intercambien tengan la consideración de bienes privados. Es decir, bienes en los cuales el consumo no es rival ni cabe establecer el... principio de exclusión o, perdón, en los que realmente se pueda excluir del consumo a aquellos que no pagan el precio. Está claro, un mercado competitivo requiere que los bienes intercambiados, en definitiva, tengan estas dos condiciones. Que el consumo de esos bienes sea rival y que se pueda excluir del consumo a aquellos que no paguen el precio correspondiente. En definitiva, que los bienes intercambiados tengan esa condición. El segundo requisito es que los agentes económicos tengan en cuenta todos los beneficios y todos los costes que se derivan de las decisiones que adopten. En definitiva, que no se produzcan lo que se denominan economías externas, externalidades. Después entraremos con más detalle. Bien. Y el... ¿Sí? Hola, aquí hay buenas tardes. Bien. El cuarto requisito sería que no se den situaciones de información asimétrica. Es decir, que todos los que intervienen en ese mercado, tanto consumidores como productores, tengan la suficiente información sobre las calidades, cantidades que se intercambian en ese mercado. Y que esa información sea exactamente la misma para todos los consumidores y para todos los productores. Bien. Esas son las cuatro condiciones que tiene que reunir un funcionamiento eficiente del mercado. Sin embargo, no siempre se dan esas cuatro condiciones. Y así, en primer lugar, se dan situaciones de poder de mercado, situaciones de monopolio, en los cuales una sola empresa, en caso de monopolio o un grupo reducido de empresas, puede determinar cuál es el precio. Bien. Pueden fijar de forma unilateral o acortada entre las empresas que forman ese oligopolio, pueden fijar el precio al cual se va a intercambiar y cuál es la cantidad que se va a producir. En definitiva, que no intervengan como precio aceptantes. Bien. Las condiciones que tienen que darse para que exista competencia perfecta en este sentido serían las siguientes. En primer lugar, que haya un número. Que haya un número elevado de compradores y vendedores, justamente para evitar esas situaciones de monopolio o oligopolio. En segundo lugar, que el producto que se ofrezca en ese mercado, por parte de los diferentes vendedores o productores, sea idéntico. Y en tercer lugar, que no existan barreras de entrada al mercado. Bien. Estas tres condiciones, por lo tanto, son necesarias. Para que el mercado sea competitivo. Para que no se den esas situaciones de monopolio. Sin embargo, la realidad es bien distinta. Y la realidad tenemos que hay distintas situaciones de mercados de competencia imperfecta. La primera, el monopolio. Que serán aquí los casos en los cuales los impedimentos para que los empresarios comiencen a operar en ese mercado son tan grandes que... Solamente existe una única empresa productora de ese bien o de ese servicio. Una situación de monopolio. De tal manera que esta empresa, en la medida que es la única productora de ese bien o de ese servicio, es la que puede fijar el precio y las unidades producidas. Indudablemente, esta empresa lo que tratará será de maximizar su propio beneficio. ¿Cuánto? ¿Cuánto se maximiza el beneficio del empresario? Pues produciendo hasta el nivel en el cual el ingreso marginal, es decir, el ingreso adicional que se obtenga por la última unidad producida, sea igual al coste marginal de producción. Indudablemente, este es un nivel de producción inferior al que resultaría de una situación de competencia. En una situación, por lo tanto, de monopolio. ¿Qué es lo que sucede? Lo que sucede es que los precios son superiores a los precios que se darían en una situación de libre competencia. Y, por otro lado, obviamente, las unidades producidas también son inferiores a las que se darían en el caso de que se diera una situación de competencia perfecta. Este es el primer tipo de mercado de competencia imperfecta. El segundo tipo sería el caso de los monopolios naturales. Es decir, esta situación de monopolio en algunos casos se puede dar de una forma natural. ¿Y cuándo se puede dar de una forma natural? Pues en aquellas actividades en las cuales existan unos costes fijos de puesta en marcha muy elevados y unos costes marginales muy reducidos. De tal manera que, al ser estos costes fijos tan importantes... ...en muchos casos incluso irrecuperables, la propia búsqueda de la eficiencia nos lleva a que exista solamente una empresa que la produzca. Esto con un ejemplo lo vais a entender mejor. Es el caso de la producción de energía eléctrica. Imaginaros que en la producción de la energía, producción y distribución de la energía eléctrica... ...podría existir una libertad para... ...la creación de empresas y que a una de las empresas tuviera que hacer frente a todos los costes, no solamente de producción, sino también de distribución. Tuviera que construir sus propias centrales de transformación. Tuviera que hacer toda la instalación del suministro de esa energía eléctrica para que llegue a todas las empresas y a todos los hogares, etc. Y si esto fuera libre de tal manera... ...que cada una, cada empresa, pudiera hacer lo suyo, obviamente nos enfrentaríamos ante una situación en la cual los costes serían tan elevados que realmente no tendría ningún sentido. Y este es el motivo por el cual en estas situaciones, en estas actividades en las cuales los costes fijos son muy elevados y los costes variables son muy reducidos, se dan esas situaciones de monopolio natural. De tal manera que exista solamente una empresa que sea la que se encargue de la producción de la energía eléctrica y de la distribución de la misma hacia las empresas y hasta hacia los distintos hogares. Otra cosa es después la comercialización, que es lo que sucede en este país. Si bien la producción... ...y la distribución de la energía eléctrica estaría configurada por un monopolio natural, sin embargo, lo que es la comercialización de esta energía, esa sí que está liberalizada. La tercera situación sería la de los oligopolios, en la cual existen barreras de entrada, pero estas no son muy graves. De tal manera que no hay solamente una empresa. No hay una empresa que se dedique a la producción o distribución de este bien o este servicio, sino que existen varias empresas, pero en un número muy reducido. Un número muy reducido, de tal manera que estas empresas pueden llegar a acuerdos y constituir un oligopolio para determinar cómo se distribuye la producción y a qué precio van a intercambiar en el mercado esos bienes y servicios que facilitan ellos. ¿Eh? Por lo tanto, se trata de no de un monopolio, porque no hay una única empresa que se dedica a la producción o distribución de ese bien o servicio, pero sí de un oligopolio. Un número reducido de empresas que tienen esa capacidad para influir en el precio y en las unidades producidas. Bien. Además de los monopolios y los oligopolios, también se dan a veces situaciones en las cuales hay mercados. En la cual, aunque hay una gran cantidad de productores y de consumidores, sin embargo, existen barreras de entrada. De tal manera que el producto que vende la empresa no es exactamente el mismo. De tal manera que, al darse esas peculiaridades en el producto producido, actúan. De hecho, como si se tratara de... De un monopolio. Esto se da mucho en el caso de la producción de productos innovadores. Aquel que ha innovado, aquel que ha creado y que además dispone de la patente para producir ese bien, obviamente, a corto plazo, será el único productor. Y en medida que sea el único productor, su comportamiento será el de un monopolio. Sin embargo, en la medida en que no existan restricciones... Para la entrada en ese mercado, en ese caso, algo que originalmente es un monopolio, se va a convertir a medio o a largo plazo, se convertirá en un mercado competitivo. Bien. Por ejemplo, los bolígrafos. El mercado de los bolígrafos. Un ejemplo típico. El BIC. El que inventó el bolígrafo. El momento en que lo inventó el bolígrafo y lo patentó. Se convirtió en un productor monopolístico. Pero, obviamente, esta circunstancia se dio a corto plazo. En la medida en que se daba ese carácter de producto único existente en el mercado. En la medida que entran nuevos productores que van a fabricar también bolígrafos, pues algo que originalmente es un monopolio, a corto plazo, a medio y a largo plazo, se convierte en un mercado competitivo. Se convierte en un mercado competitivo. Pues bien, ¿cómo interviene el Estado ante estas situaciones? Si partimos de que efectivamente el monopolio es un mercado ineficiente. Es un mercado ineficiente. ¿Por qué? Porque produce a un precio superior al que resultaría de una situación de competencia perfecta. Y además la producción es inferior a la que resultaría de un mercado competitivo. ¿Cuáles son las políticas? Las políticas de intervención que puede establecer el Estado para corregir esta ineficiencia y para que ese mercado monopolístico se convierta en un mercado competitivo. Bien, aquí se indican cinco tipos de políticas distintas. En la primera consistiría en lo que se denomina la estimulación de la competencia. Es decir, el sector público podría... O sea, reducir estos problemas que plantea la competencia imperfecta mediante la estimulación de la competencia. ¿Cómo? Pues fomentando la incorporación al mercado de nuevos competidores y eliminando las barreras de entrada. En este sentido se considera que, por ejemplo, la resistencia de las patentes, las patentes al titular del derecho de patente, obviamente le da... El derecho a poder producir en exclusiva ese producto. En la medida que el Estado lleva a cabo una regulación de las políticas restrictivas, las políticas de utilización de los derechos de patente restrictiva, limitando el periodo en el cual el titular de la patente pueda utilizar la misma con esa exclusividad, pues estaríamos en una política de sector público de estimulación de la competencia. En la medida que lo que esa legislación restrictiva de los derechos de patente, lo que supondría sería una supresión de los monopolios legales generados justamente por esa legislación de las patentes. Una segunda política que puede llevar a cabo el sector público... para combatir la competencia imperfecta, es el desarrollar una legislación anti-monopolio, con el objetivo de eliminar o reducir las prácticas restrictivas de la competencia. Es decir, que se legislen, se dicten normas legales que eviten, que traten de evitar la creación o constitución de situaciones monopólicas. O de oligopolios, en definitiva, que vaya en contra de que las empresas, sobre todo cuando son muy pocas, aunque no se vea una situación de monopolio, pues si es de monopolio un número reducido de empresas, puedan llegar a acuerdos entre ellas para llevar a cabo políticas restrictivas de la competencia. Bien. En lo que se refiere a España, tenemos que... en lo que se refiere a la ley que regula estas prácticas restrictivas, que prohíbe las prácticas restrictivas de la competencia, tenemos al Consejo Nacional de Mercados y Competencia, que justamente vela por el cumplimiento de esa legislación. Y así, por ejemplo, los acuerdos de fusión de entidades de crédito. Las entidades de crédito tienen un gran poder, son grandes. Y son en número muy reducido. Muy pocas entidades de crédito son las que controlan todo el mercado financiero. Pues bien, cualquier acuerdo de fusión entre entidades financieras requiere necesariamente la autorización por parte del Consejo Nacional de Mercados y Capitales en el sentido de que esa función de entidades que se pretende no constituya una práctica restrictiva de la competencia. Lo mismo sucede también en el sector de la distribución. Las grandes superficies. Una tercera política que puede llevar a cabo el sector público para combatir las situaciones de competencia imperfecta, es la de establecer unos precios máximos o la obligación a los productores de que produzcan como mínimo una distribución. En definitiva, si las prácticas monopolísticas, las prácticas restrictivas de la competencia lo que nos llevan es a la fijación de un precio superior al que resultaría de la libre competencia y a un nivel de producción inferior, el gobierno lo que puede hacer es fijar unos precios máximos. Impidiendo así de que estas empresas monopolísticas lleven a fijar esos precios. Que resultan de esa maximización de sus beneficios. O también que fuera el gobierno fijar unas cantidades mínimas de producción. Que les obligan a producir más allá de la producción que a ellos les supone los máximos beneficios. En cuarto lugar, el sector público. Pues en lugar de regular el monedero, el monopolio natural lo que puede hacer es convertirse en el único productor de esta industria. Es decir, en aquellas situaciones que se da un monopolio natural, como podría ser el de la distribución de la energía eléctrica, pues el sector público se podría convertir en el dueño, el propietario de ese sector. Podría en definitiva nacionalizar este servicio para convertirse en el titular del monopolio natural. Bien, y en quinto lugar, el sector público también lo que puede hacer es fomentar la producción eficiente ofreciendo al monopolista un subsidio vinculado a la cantidad producida. Es decir, si el monopolista con ese afán de maximizar su producción, su propio beneficio, lo que hace es reducir las unidades producidas para incrementar el precio, el sector público lo que puede hacer es establecer un subsidio, una subvención a esas empresas que suceden o que superen, perdón, ese nivel de producción que resultaría del comportamiento monopolístico para acercarlo a un nivel de producción equivalente al que resultaría de una situación de competencia perfecta. Y otra de las posibles políticas es la de establecer un impuesto sobre esos beneficios extraordinarios. Es decir, si la situación de monopolio supone para la empresa monopolista la obtención de unos beneficios extraordinarios, lo que podría hacer el sector público sería fijar un impuesto adicional sobre esos beneficios extraordinarios obtenidos por la empresa monopolística. Esto podría ser eficiente siempre y cuando el Estado utilizara los ingresos obtenidos de ese impuesto que grava los ingresos extraordinarios para compensar a los consumidores que, en definitiva, son los perjudicados. Los perjudicados por ese no funcionamiento de la competencia perfecta al tener que pagar unos precios superiores al monopolista de los que resultarían de la libre competencia. ¿Está claro? Bien, la segunda condición que decíamos que tiene que darse para que se dé una competencia perfecta es que los bienes producidos tengan la consideración de bienes privados. Es decir, que sea posible excluir del consumo a aquellos que no pagan el precio y, por otro lado, que el consumo no sea rival. ¿En qué consiste esto? La rivalidad en consumo supone que la utilización de un bien o un servicio por una persona disminuye las posibilidades de que otra pueda hacerlo. Por ejemplo, el pan. El consumo del pan. Igualmente, el hecho de que una persona consuma un bollo, un panecillo, está reduciendo las posibilidades de consumo de otras personas a medida que las demás personas no podrán consumir ese mismo bollo. Digamos que existe una rivalidad en el consumo del pan porque es un bien privado. Y, en segundo lugar, estaría la posibilidad de exclusión. Es decir, que se pueda excluir del consumo de ese bien, en este caso el pan, a aquellos que no pagan el precio. Es decir, aquel que no paga el precio establecido para el pan no puede consumirlo. Estas dos características se dan en los bienes privados que son los que facilitan el libre funcionamiento del mercado. Sin embargo, hay otros bienes en los cuales el consumo no es rival ni cabe establecer el principio de exclusión. El caso típico que se pone de un bien público es, por ejemplo, el de la defensa, el de la seguridad. El consumo que haga cualquier ciudadano de ese servicio prestado por el sector público no es rival. Y, por otro lado, tampoco cabe excluir de la protección dispensada por el ejército o por las fuerzas de seguridad a aquellos que no paguen un precio por el mismo. Por lo tanto, estaríamos ahí entre unos servicios típicos que tienen la consideración de bienes públicos y en los cuales estaría justificada la intervención del Estado. Es lógico que la seguridad o la defensa sean monopolio del sector público, que no puedan existir ejércitos privados o fuerzas de policía privadas. Lo cierto es que no hay un número elevado de bienes públicos que cumplan con estas condiciones. Sí se dan también otros bienes que se consideran que son bienes públicos impuros, que son aquellos en los cuales solamente se da uno de estos dos requisitos. Por ejemplo, una autopista. El uso que pueden hacer los ciudadanos en una autopista no es rival. A medida que la utilización de esa autopista que puede hacer cualquier conductor no supone una disminución del uso que puedan realizar otros conductores. Siempre entre otros límites, pero en principio no habría una rivalidad en el consumo. Sin embargo, sí que cabe establecer el principio de exclusión. ¿Por qué? Porque quien no pague el peaje no va a poder utilizar esa autopista. La autopista, por lo tanto, no se daría la rivalidad en el consumo, pero sí se daría la posibilidad de la exclusión. Un concierto de música, sería exactamente lo mismo. Otro ejemplo, una avenida congestionada. En una avenida congestionada obviamente sí que hay una rivalidad en el consumo. A medida que hacen muchos los vehículos que transitan por esa avenida hay una rivalidad en el consumo. El tránsito de esa avenida está congestionado. Sin embargo, no es posible establecer el principio de exclusión. No tendría ningún sentido si encima de estar congestionada establecemos un peaje para poder transitar por esa avenida. Técnicamente sería posible, pero económicamente indudablemente no sería posible establecer ese peaje. Por lo tanto, se daría esa condición de bien público impulsivo. ¿Por qué? Porque se da la rivalidad en el consumo, pero no cabe establecer la exclusión a quien no pague un precio. Técnicamente es posible, económicamente no lo sería. Otra clasificación dentro de los bienes públicos sería aquella que, en función del ámbito territorial, diferencia entre los bienes públicos globales y los bienes públicos locales. Bienes públicos locales, serían aquellos bienes y servicios de interés común cuyos beneficios trascienden el ámbito del Estado. Digamos que son de carácter transnacional. Por ejemplo, la lucha contra el cambio climático. Lucha contra el cambio climático. Efectivamente estamos ante un bien público. El consumo no es rival ni cabe establecer el principio de exclusión. No cabe proteger solamente a aquellos que pagan un precio. Pero, sin embargo, su ámbito excedería del Estado. Sería carácter transnacional. Y hay otros bienes públicos de carácter local que son aquellos cuyos beneficios quedarían limitados a un determinado territorio. Por ejemplo, un parque mundial. Bien. Visto esto, por lo tanto, la diferencia entre los bienes públicos y los bienes privados, vamos a ver las diferencias en la producción de los bienes privados y los bienes públicos. La demanda de mercado de los bienes privados se dice que se construye por la suma horizontal de las demandas individuales. Bien. Gráficamente se suelen representar las cantidades demandadas en el eje horizontal y el precio en el eje vertical. Imaginemos que, a un determinado precio, en un bien privado, el pan, por ejemplo, a un precio de dos euros, hay un consumidor que demanda, a ese precio, demandaría cuatro panecillos. Bien. A ese mismo precio tenemos otro consumidor que demandaría cinco panecillos. ¿Cuál sería la demanda total? Pues la demanda total sería nueve. ¿Por qué? Porque se trata de un bien privado en el cual el consumo es rival, es decir, los panecillos consumidos por uno de los ciudadanos no pueden ser consumidos simultáneamente por el otro y, por lo tanto, y por otra parte, cabría establecer el principio de exclusión, es decir, aquel que no pague el precio, esos dos euros, no podría consumir los panecillos. Por lo cual, esto representado gráficamente supondría que la demanda de ese colectivo formado por estos dos ciudadanos, estos dos consumidores, sería de nueve y sería la suma horizontal. Bien. No sucede lo mismo en el caso de los bienes públicos. ¿Por qué? Porque en este caso las personas no van a decidir qué cantidad consumir según el precio de mercado, ya que el consumo no es rival ni cabe establecer el principio de exclusión. Un ejemplo. El faro de un puerto. Se va a instalar o se ha instalado el faro de un puerto. Indudablemente no cabe establecer el principio de exclusión. Ese faro va a ser útil. Para todas las embarcaciones que vayan a ese puerto ni cabe establecer el principio de exclusión. Solamente puedan aprovecharse de la iluminación de ese faro aquellos que paguen un precio. Por lo tanto, en este caso la demanda total de los bienes públicos no se podría determinar por la suma horizontal de las demandas de cada uno de los ciudadanos porque la cantidad demandada es exactamente la misma. Transiten por ahí por ese puerto una embarcación 10 o 100 indudablemente eso no va a afectar no va a suponer un incremento de las unidades demandadas. El faro va a iluminar exactamente igual a todas esas demandas. En este caso la demanda total se calcularía mediante la suma vertical de las demandas individuales. Es decir, para cada cantidad fija ese servicio de iluminación que presta ese faro sería la suma de lo que cada uno de los ciudadanos que va a utilizar que va a atracar con su embarcación en ese puerto estaría dispuesto a pagar para que se instale ese precio ese faro. Y por lo tanto en este caso no hablaríamos de una suma horizontal de una suma de las cantidades demandadas por cada uno de los ciudadanos sino de una suma horizontal de los precios que cada uno de los ciudadanos que va a utilizar ese puerto que va a amarrar su embarcación a ese puerto estaría dispuesto a pagar para que se instale el faro en el mismo. ¿Está claro? Bien, ¿cómo se haría la provisión privada de los bienes públicos? La imposibilidad y seguimos con el ejemplo del faro la imposibilidad de exclusión de los bienes públicos supone que no puede evitarse el consumo de aquellos que no paguen el precio. En definitiva no puede impedirse a nadie que se beneficie de la iluminación que le facilita el faro cuando atraca en ese puerto en la medida que no pague ningún precio. Esto da lugar al problema de lo que se llaman los consumidores sin carga o los free reader los usuarios gratuitos o lo que comúnmente podríamos denominar los gorrones es decir aquellos que van a comprar a intentar disfrutar del bien o del servicio evitando el pago aquellos que van a tratar de beneficiarse de esa iluminación que proporciona el faro pero sí contribuir a su financiación. Cuando se produce este problema del free reader o el consumidor sin carga las personas van a tender a contribuir menos a la provisión del bien público de lo que resultaría socialmente eficiente. Por lo cual se daría lugar a una provisión daría lugar a que la provisión privada sería ineficiente es decir si se les preguntara a esos usuarios de ese puerto que van a amarrar sus embarcaciones allá ¿cuánto estarían dispuestos a pagar para financiar el mismo? Pues obviamente tratarían de infravalorar el beneficio que a ellos les supone que en ese puerto haya un faro. Algunos dirían es que yo si a mí a fin de cuentas tengo un GPS o sea que a mí no me reporta ni un beneficio. O sea todos tratarían de infravalorar sus preferencias ¿por qué? Porque saben que una vez instalado el faro nadie les va a poder prohibir utilizar o beneficiarse de la luz que facilita ese faro a la hora de atacar en el puerto. Bien por lo tanto tenemos que el gran problema para la prohibición privada de los bienes públicos ¿cuál es? Pues justamente la existencia de esos free leaders esa infravaloración de las preferencias de los ciudadanos a seviendas de que contribuyan o no nadie les va a poder impedir a ellos que utilicen ese bien o servicio público. Bien si se genera ese problema con la prohibición privada ¿qué es lo que puede hacer el sector público? Pues ahí es donde entra el sector público como agente económico que lo que trata es de regular esa situación. Bien el sector público aquí lo que puede hacer es suministrar la cantidad eficiente si cobra a cada persona el importe que estaría dispuesta a pagar por su consumo. Es decir el sector público dice vamos a instalar este paro y voy a cobrar a cada uno de las personas que vayan a utilizarlo en función del beneficio que les reportaría la instalación de ese paro. Es lo que se llaman los precios personalizados o precios linda. Pagar por el beneficio que le reporta la última unidad consumida. Sin embargo la aplicación de este sistema no es sencilla. No es sencilla ¿por qué? Porque requiere que el sector público conozca con exactitud cuáles son las preferencias de cada persona y eso realmente es muy difícil justamente además por lo que decíamos por la existencia de esos free readers pues la tendencia a infravalorar. ¿Por qué? En primer lugar porque si las personas saben que el sector público les va a cobrar de acuerdo con su disposición a pagar ¿qué van a hacer? Pues van a declarar un valor inferior al verdadero o incluso nulo. El del GPS va a crear y a mí no yo valoro cero porque yo tengo un GPS y a mí no me prestan un servicio ese fan. Y en segundo lugar incluso en el supuesto de que fueran honestos me dijeran pues sí yo considero que tengo un GPS que me beneficia me da más seguridad la existencia de ese fan y estoy dispuesto a contribuir. Es decir, aunque fueran honestos los ciudadanos no sabrían valorar adecuadamente el coste de ese bien público. En definitiva ¿qué es lo que se impone en estos casos? Pues como única forma posible de financiar los bienes públicos lo que se impone es la financiación activo. Está claro. Bien, la tercera condición que decíamos para que funcionara el mercado era que los agentes económicos tuvieran en cuenta todos los beneficios y todos los costes que implican las decisiones que adopten. Pues bien esto no siempre es así no siempre es así cuando se producen economías externas. ¿Qué son economías externas? ¿Qué son externalidades? Pues es el beneficio externo que puede ser tanto positivo como negativo beneficio o coste que una decisión individual impone sobre otros agentes y que estos costes o estos beneficios no se reflejan en el precio de los bienes o de los servicios intercambiados. Esto con los ejemplos lo vais a entender mejor. Las externalidades pueden ser negativas y positivas e increíblemente serían negativas en aquellos casos en los cuales la actuación de un agente económico provoca disminuciones de bienestar en otros agentes que no son recogidas en los precios. Por ejemplo una empresa contaminante una empresa pues que emite residuos de efecto invernadero. Lamentablemente en la medida que no recoja esos costes sociales en los precios o con un coste adicional más a los costes de producción nos encontramos con que está ocasionando unos costes a terceros que no se reflejan después en los precios intercambiados de los bienes que producen. Pero también las economías externas o efectos externos pueden ser positivos. Pueden suponer un aumento del bienestar por ejemplo en la vacunación. El hecho de vacunarse una persona no solamente le beneficia individualmente a la persona que se ha vacunado sino que beneficia a toda la sociedad en la medida en que se está limitando la posibilidad de la propagación de la enfermedad contra la cual se ha impuesto la vacuna. Está claro. Por lo tanto estos efectos a terceros pueden ser tanto negativos como positivos. Serían negativos en el caso de empresas que generan contaminación mediamente serían positivas en el caso de la vacunación. Y las externalidades también puede ser de consumo o de producción. Sería una externalidad de consumo que el de la vacunación. Una actividad de consumo es el consumo de una vacuna que produce efectos positivos para el resto de la sociedad. Sería una externalidad de consumo de carácter positivo. O puede ser de producción que sería el caso de la empresa que emite gases de efecto invernadero. Sería una externalidad negativa de producción. Bien, ¿cuáles son las consecuencias que tienen las externalidades sobre el funcionamiento de los mercados? Bien, pues nos encontramos con que se trata de decisiones económicas adoptadas bien por los productores o por los consumidores en las cuales una parte de los costes o los beneficios son asumidos por terceros o por si al decidir cuánto consumimos o producimos no tenemos en cuenta esos costes y estos beneficios ¿qué es lo que estamos haciendo? Pues estamos ignorando o bien una parte de los costes sociales en el caso de la contaminación o una parte de los beneficios sociales en el caso de la vacunación y por lo tanto la cantidad consumida o producida es ineficiente porque no tiene en cuenta estos costes y esos beneficios para terceros que se derivan de esas actuaciones por ejemplo la producción de energía eléctrica por una planta termoeléctrica generaría economías externas negativas como consecuencia de la contaminación esto significa que el equilibrio de mercado entre a un nivel de producción superior al que se consideraría socialmente bien ¿cuáles son los instrumentos que tiene el sector público para corregir estas ineficiencias producidas por las externalidades? pues son varias la primera la difusión de información acerca de las consecuencias que sobre el bienestar social tienen las economías externas esto se hace sobre todo en las políticas de salud pública el hecho de fumar el hecho de fumar no solamente perjudica al fumador sino también perjudica al resto de las personas que tienen la condición de fumadores pasivos luego esto también se podría corregir ¿cómo? mediante campañas o a los ciudadanos en general sobre los perjuicios que se derivan de ese de ese consumo de tabaco otra estrategia puede consistir en la regulación de tal manera que el sector público pueda obligar a consumir unos determinados bienes por ejemplo la educación se considera que es también un bien que ocasiona beneficios externos positivos en la medida que no solamente beneficia a quien recibe directamente esa formación sino que también a la sociedad en general esto podría llegar a una regulación estableciendo por ejemplo la educación obligatoria hasta determinados niveles educativos y en este caso se impondría el sector público lo que podría imponer es el pago de unos impuestos por aquellas actividades que generan esa por ejemplo la contaminación estas actividades contaminantes las denominadas ecotasas otro instrumento quizás el más novedoso y más curioso que es el de la emisión de los permisos de emisión en este caso esto será sobre todo para para reducir los efectos de la contaminación atmosférica en este caso qué es lo que hace el sector público pues el sector público emite unos determinados permisos de emisión determina cuál es el nivel de contaminación admisible de tal manera por ejemplo para las emisiones de gases el nivel máximo de emisiones de tal manera que aquellas empresas que desarrollan actividades productivas que generan este tipo de gases se les da en función de su nivel de producción se les otorga unos determinados permisos de emisión indudablemente habrá empresas que tengan depuradoras que llevan que empleen métodos limpios que les sobren permisos es decir que en función de la producción que tienen las emisiones sean inferiores a los permisos que se les ha dado por parte de la administración y habrá otras que no utilizan tecnologías limpias y que para poder mantener su nivel de producción tengan que adquirir esos permisos de emisión pues aquí lo que se hace es se genera un mercado en el cual aquellos que utilizan métodos de producción limpios y les sobran por lo tanto permisos de emisión podrían vender esos derechos a esas otras empresas que utilizan tecnologías más bien y finalmente estarían los problemas de información imperfecta decíamos que una de las condiciones también para que el mercado funcione eficientemente es que exista una información perfecta es decir que los consumidores y los productores tengan una información perfecta sobre las calidades y las cantidades de los bienes que se intercambian en el mercado normalmente esto en la práctica no es así fundamentalmente son los consumidores los que tienen una menor información sobre las calidad de los bienes que se intercambian en el mercado y esto da lugar como una primera forma de intervención a qué pues a que se desarrollen legislaciones de defensa a los consumidores justamente para romper con esa información asimétrica que se produce entre los productores y los consumidores bien aquí se analiza en el manual de información imperfecta que interviene el sector público que es el aseguramiento aseguramiento en las situaciones de desempleo bien el aseguramiento en las situaciones de desempleo en principio podría llevarse también a cabo por el sector privado no necesaria necesariamente a través del sector público sin embargo cuáles son los problemas que genera la prohibición de estos servicios que a la hora de fijar una compañía de seguros privada a la hora de fijar el precio de las primas pues tendría en cuenta la probabilidad individual de no conocería perdón la probabilidad individual de desempleo tendría una situación de información imperfecta y fijaría sus precios de acuerdo con el riesgo medio de desempleo ahora bien si se produce una situación de recesión económica y se incrementan los niveles de desempleo qué es lo que sucede sucede que esa compañía de seguros tendría que incrementar tendría que incrementar el precio de las compras de las primas perdón si incrementa el precio de las primas qué es lo que sucedería por parte de los asegurados que obviamente aquellos trabajadores que tienen menor riesgo de caer en situación de desempleo pues causarían baja en las compañías de seguro por lo cual las compañías de seguro se quedarían solamente asegurando a aquellos trabajadores que tienen un mayor riesgo de caer en una situación de desempleo lo cual elevaría todavía más el precio de las primas bien esto es lo que se denomina la selección adversa es decir solamente se asegurarían las personas con un riesgo más elevado otro fenómeno también que dificulta la sostenibilidad de los mercados de seguro es lo que denomina el riesgo moral el riesgo moral significa que la existencia del aseguramiento de un determinado riesgo que es lo que lleva pues lo que lo que lleva que las personas aseguradas a saber que no van a tener que asumir una parte importante de la totalidad de los costes derivados de las contingencias cubiertas lo que harán será probablemente descuidar esa situación de riesgo protegida por ejemplo esto no tiene que ver con el desempleo los fumadores en la medida en que tienen asegurada la asistencia sanitaria es posible que como consecuencia de ese riesgo moral pues no cuiden tanto su salud o sea que que tengan menos incentivos para dejar de fumar si contraen alguna enfermedad relacionada con el consumo del tabaco van a tener asegurada la asistencia sanitaria en caso de que esto no fuera así en caso de que los fumadores no tuvieran asegurada la asistencia sanitaria o tuvieran que correr con los gastos derivados de aquellas intervenciones médicas que precisaran por que seguramente podrían verse incentivados a dejar de consumir el tabaco bien pues esta sería la segunda consecuencia eh que sería la del riesgo moral bien estamos ya al límite del tiempo no voy a continuar más con la exposición y solamente eso sí en relación al capítulo cuatro es un tema tan bonito eh donde se da respuesta a cómo toma las decisiones del sector público os voy a indicar aquellos epígrafes que yo considero que son más importantes eh bien eh en relación al epígrafe segundo sobre las reglas de la elección colectiva prestar especial atención a los límites de la regla de la mayoría del mediano tiene importancia y en relación al último los epígrafes de este capítulo el relativo a los fuellos del sector público prestar especial atención a la teoría económica de la burocracia bien pues esto es todo con esto concluimos esta tutoría y quedáis emplazados para la siguiente que será dentro de quince días y en la cual expondré los aspectos más relevantes de los capítulos cinco y seis del programa un saludo y hasta entonces muchas gracias